Signos empleados en la corrección de originales Se utilizan para marcar y abreviar las indicaciones. Muchos de ellos se emplean tanto para corregir originales como para galeras o pruebas tipográficas. Se ofrecen algunos ejemplos en donde es necesario para su comprensión. Signo Indicación . : Poner punto, dos puntos. , Ejemplos Eso fue todo . Sin embargo,nada pasó Poner coma. , ^ Sin embargo,nada pasó ^ a Subir, cambiar mayúsculas. alicia es bonita El Niño lo dijo N N Bajar, cambiar minúsculas. El Niño lo dijo a o a a a ^ texto Poner en minúsculas o bajas. CIEN AÑOS DE SOLEDAD Sustituir por la letra que se indica. El gata Eliminar lo tachado, o cambiar por la palabra que se indica. El gato ladra o maúlla El gáto Suprimir acento. El gáto El gáto perro Insertar texto. El ladra perro El ladra El ladra perro vale Los perros ladra Desatar, no abreviar. etc. Desatar, escribir con letra. 5 veces Sobre una letra o número; indica convertirlo en subíndice. H2O Bajo una letra o número; indica voladito, hacerlo exponente. Marx.2 Marx.2 Marx.2 Desplazar letras a la izquierda Él m elo dijo Desplazar letras a la derecha Él mel o dijo Puntos que indican que lo tachado vale, es decir, que se deje como en el original. El perro ladra H2O H2O Invertir el orden de letras, números, signos, palabras, Ella dioj u oraciones. Invertir el orden de dos palabras u oraciones contiguas. Eso todo fue Cambiar el orden de tres letras, números, signos, pala- ladra perro el bras, u oraciones. Es más útil para cambiar el orden de 3 2 1 n Insertar letra(s). frases u oraciones, ya que cuando se trata de signos y 3 ladra perro el 2 letras es preferible tacharlos y escribirlos correctamente. Eliminar la letra o el signo tachado y cerrar espacios. símbbolo símbbolo símbbolo Dejar blanco entre líneas, abrir espacios. Dejar blanco entre líneas, indicando el tamaño del blanco. Eliminar espacios (cerrar) entre letras. Perro 1 Dejar espacio entre letras, palabras o signos ortográficos elperro divididos por este signo. elperro Eliminar blancos (cerrar) entre líneas o párrafos. Punto y seguido (para unir líneas cortas). Eso fue todo. Ella llegó Punto y seguido (para unir líneas largas). Eso fue todo lo que dijo. Ella llegó... Punto y aparte. Eso fue todo. Ella llegó Poner sangría. Ella llegó tarde. Eliminar sangría. Ella llegó tarde máquína de escribir Alinear el texto al margen derecho o izquierdo. máquína de escribir reds. Alinear con el resto del párrafo. máquina de escribir máquina de escribir máquina de escribir Deleatur. Eliminar, quitar, sacar. camisaa Componer en redondas. reds. máquina de escribir Componer en cursivas. máquina de escribir Componer en negritas. máquina de escribir Componer en VERSALES. máquina de escribir Componer en VERSALITAS MÁQUINA DE ESCRIBIR máquina de escribir Componer en Versales y Versalitas A b Componer en Altas y Bajas A b máquina de escribir LO QUE DEBE CUIDARSE Corrección de galeras Hasta aquí, hemos vistos aspectos gramaticales y de estilo que deben revisarse y corregirse en el original; todos los cambios sustanciales en el manuscrito, tanto de fondo como de forma – y con el debido respecto al autor-, se hicieron ya. Empieza ahora otra etapa del proceso: la tipografía, es decir, la composición del texto en lo que conocemos como letras impresas. Las galeras –también llamadas galeradas o pruebas de galera- son, en rigor, las primeras pruebas de impresión; aquí ya no se revisa ni se corrige el texto, pero pueden enmendarse errores que se le fueron al corrector de estilo; en ellas se limpia el trabajo, se detectan las llamadas erratas o gazapos, que suelen colarse por donde la mirada minuciosa del corrector ya pasó varias veces. La errata es un error tipográfico en donde se omiten, cambian o invierten signos, letras, palabras, frases y hasta párrafos completos. De más está decir que la errata es el vicio más temido y combatido por los escritores y correctores y, a pesar de ello, vuelven a aparecer; seguiremos luchando contra ella. De igual modo, los lapsus calami pueden hacer acto de presencia desde el manuscrito y, a veces, se cuelan hasta las galeras, y lo que es peor, hasta el libro impreso; son, en principio, errores que se pasaron por alto en el original; frases discordantes, equívocas, fechas de nacimiento o muerte que no corresponden, con lo que se otorga a una persona una longevidad envidiable: Fulanito de Tal (1814-1965), o incongruentes como “El duque apareció seguido de su séquito, que iba delante”. Leídas en algún periódico son las frases siguientes: “Merecido reconocimiento a Menganito de Tal, esposo y padre de cuatro niños”, y “La autoridad, al desconocer la identidad de los sobrevivientes, dispuso que fueran enterrados en la fosa común”. Las galeras precisan de una lectura cuidadosa y, de preferencia, cotejada entre dos personas: un atendedor, que es quien lee el original en voz alta, incluyendo en su lectura los signos de puntuación o las indicaciones tipográficas que se hayan hecho; y el corrector de pruebas que leerá en silencio la galera para cerciorarse de que está correcta, advertir erratas, saltos de párrafos(mochuelos o comidos), cuidar la uniformidad en nombres, vocablos con grafía especial, cursivas, disposición de títulos, blancos, colocación de cuadros y demás. Se señalarán los errores con una llamada con tinta de color (roja o azul), y con los signos correspondientes se anotarán las correcciones en los márgenes de la galera, así como cualquier otra indicación, procurando hacerlo con claridad y limpieza puesto que el tipógrafo sólo repetirá la línea (renglón) donde se encuentra la errata. Los siguientes pasos Tras las galeras –tras el uno viene el dos, como debe ser- vienen las primeras y segundas pruebas, las terceras y hasta las cuartas o pruebas finas, antes de tírese o del imprímase, que es el orden definitiva para la impresión. Lo que no se corrigió en estas etapas del proceso aparecerá, sin duda alguna, en el libro impreso; por eso es tan importante el cuidado de la edición. Son muchos los aspectos que deben atenderse para lograr una edición limpia y sin errores, si ello fuera posible; veremos algunos: • Las líneas que se corrigieron en galeras y planas deben volver a revisarse ya que al corregir un error pudiera cometerse otro. • Que se hayan cumplido todas las indicaciones del original: medidas, sangrías, colgados, blancos; familias, cuerpos y series de letras; interlínea, interletra y demás. • Verificar que se respeten las indicaciones para las cabezas, su jerarquía, tipo, cuerpo y serie. • Cuidar que los folios estén correctos. • Revisar que tanto el nombre del autor como el título de la obra estén bien escritos en cubierta, portada, portadilla y cornisas (pudiera parecer obvio, pero más de un libro lleva este error). • Los índices compuestos de acuerdo con la foliación definitiva. • Cuando una obra se cita a sí misma, las referencias deberán corresponder al número definitivo de página. • No insertar a final de capítulo ilustraciones que formen parte del texto, excepto las ornamentaciones. • No dejar subtítulos al final de una página; deberán llevar, cuando menos, dos líneas de texto debajo, o pasar a la siguiente página (sin colgar). • No dejar menos de cinco líneas en la última página de un capítulo, excepto en versos, donde pueden ser tres. • Para ajustar una plana, es preferible ir haciendo recorridos que envitelar o regletear, es decir, aumentar la interlínea. • En los textos a dos columnas, cuando el número de líneas es impar, la de la izquierda será, en todos los casos, la mayor; no tratar de ajustar el tamaño aumentando la interlínea porque ya no coincidirían los renglones. Callejones, ríos o corredores Cuando los blancos de dos o más líneas coinciden, es decir, cuando la separación entre palabras queda una encima de la otra, se forman blancos verticales que afean la mancha tipográfica, distraen al lector y pueden hacer que se salte una línea al leer. Se le conoce por callejones, ríos o corredores. Algunas recomendaciones son: • Evitar que más de dos líneas consecutivas empiecen o terminen con la misma sílaba o palabra. • Evitar monosílabos de dos letras al principio o final de cada línea. • Evitar que haya más de dos líneas con palabras, guiones o signos de puntuación iguales que queden unos sobre los otros en cualquier lugar del renglón. • Evitar dejar abreviaturas a principio o fin de línea. Los callejones se señalan con una línea vertical que abarque su recorrido. Líneas viudas y huérfanas, colas y otros Debe procurarse no empezar una página con una línea viuda, es decir, una solo línea corta, o un renglón que corresponde al final del párrafo que viene de la página anterior. Deben evitarse, también, las líneas huérfanas, que son la primera línea de un párrafo que queda suelta al final de una página. Las llamadas ladronas son líneas de tres letras, sólo aceptables en columnas angostas (periódicos y revistas). El último renglón de un párrafo no debe quedar demasiado pequeño (colas), con un número de letras menor que la sangría de la línea siguiente. Separación de palabras En el idioma español, cuando es necesario dividir las palabras al final del renglón porque no caben completas, la separación se hace por sílabas, esto es, por sonidos que se pronuncian en una sola emisión de voz. Por razones de tipo estético, en tipografía rigen –además de las gramaticales- otras normas para separar las palabras al final de una línea, lo que puede ayudar a evitar los callejones, a mejorar el aspecto de la página impresa, y a no cometer faltas de respeto y dar lugar a malas interpretaciones: • Evitar dejar una vocal sola en cualquiera de las partes divididas: a/guacero; rí/o. • No separar palabras de cuatro letras o menos: co/me, sa/la, as/í; con excepción de aquéllas que llevan letra doble: lla/ve, co/che. • Al separar una palabra larga, no dejar dos letras al principio o final de la línea: ca/ballero, dermatólo/go. • La letra h forma sílaba con la vocal que le sigue: almo/hada. • En algunos aztequismos, cuando la h va seguida de una consonante, se une a la sílaba anterior: Cuauh/témoc. • Aunque pueden dividirse palabras de cinco letras, es preferible no hacerlo: pre/so, ca/mas. • No separar la primera sílaba cuando es una vocal sola o un diptongo: i/lustre, au/tista, á/lamo, ai/roso. • Al final de una línea, no dividir dos vocales juntas a mitad de una palabra, aunque no formen sílaba: correcto: tea/tro, poe/ta; incorrecto: te/atro, po/eta. Las palabras compuestas come/algas, norte/americano son excepción a esta regla. • Las letras dobles como la ch, rr y ll no deben separarse pues constituyen una sola letra: correcto: cami/lla, carca/cha; incorrecto: camil/la, carcac/ha. • Evitar que al separar una palabra quede una r o una rr al principio de la línea: hila/rante, Ma/riano, co/rreo, bo/rrego. • Evitar la separación en palabras que llevan x intermedia para que esa letra no quede al principio de la línea y, así, no pierda su pronunciación: correcto: Méxi/co, proxe/neta; incorrecto: Mé/xico, pro/xeneta. • En las palabras compuestas con prefijos o sufijos (ab, ad, aero, archi, auto, bi, centi, circun, contra, deca, deci, des, dis, en, entre, epi, ex, extra, fago, filia, fobia, geo, hemi, hidro, hiper, hipo, im, in, infra, inter, intra, macro, micro, mono, multi, neo, nos, octa, pan, penta, peri, poli, post, pos, pre, pro, proto, re, semi,sobre, sub, super, supra, termo, tetra, trans, tras, tri, vice, zoo), se recomienda separarlas por estas partículas: aero/plano, archi/duque, entre/vista, extra/limitado, hemi/ciclo, infra/humano, macro/económico, peri/férico, semi/círculo, termo/dinámica, vice/presidente. • Cuando el prefijo esté seguido de una s, la separación será silábica: res/tablecer.