4.- Embocaduras - Frenos y embocaduras freno-filete Frenos y embocaduras freno-filete Cualquier embocadura que incluya en su acción palanca, se denomina freno (“curve bit” en inglés). Mientras que el filete actúa solamente sobre las barras y la lengua del caballo, el freno, debido a la palanca, aplica una presión múltiple: Sobre la lengua, las barras, la nuca (por la acción de palanca de las patas con el apoyo en la barbada) y sobre el cuello del mentón. El freno puede ser una herramienta delicada, o un instrumento de tortura. Ha habido casos donde su uso severo le ha roto la mandíbula al caballo. Generalmente el freno se utiliza para conseguir una obediencia adicional en el control de la velocidad, y, en un caballo avanzado, para permitir un contacto de rienda más liviano en la reunión. No se debe utilizar un freno para forzar al caballo a la reunión, lo que desafortunadamente se ve con frecuencia. Hay muchos tipos de frenos, desde los más suaves hasta los extremadamente severos. Los frenos Uxeter o Kimberwickes deben ser incluidos en esta categoría, porque a pesar de ser bastante blandos, permiten una suave acción de palanca, cuando las riendas se colocan en las llamadas más bajas de las patas. Los kimberwickes también están disponibles con un puente de doble articulación (aunque en este caso ya se trata de un filete), lo que los hace excelentes para el caballo que necesita una acción de la embocadura un poco más severa. Pagina 1 de 5 Kimberwick de puente curvo Kimberwick de doble articulación. En un freno. ¿Debería haber una barra de metal (pontezuela) uniendo las dos patas por fuera de la boca o no? Esto depende realmente del temperamento y situación individual de cada caballo. Generalmente si Ud. está manejando una yunta, las embocaduras deben tener pontezuela para prevenir que se enganchen las riendas cruceras, en las patas de la embocadura. Sin embargo, con la pontezuela, hay una chance de que el caballo se quede enganchado en la punta de la lanza o en el extremo del yuguillo, asustándose y trastornándose. Cada conductor debe decidir que arreglo es el más adecuado. Frenos quebrados, de puente recto y puente curvado El freno que más se usa comúnmente en manejo de coches en U.S.A., es el Liverpool quebrado. Esta embocadura puede, en su ajuste más liviano, actuar como un filete de articulación simple. Cuando las riendas se prenden a alguna de las llamadas de las patas, se desempeña de manera muy parecida a un freno. Sin embargo la ventaja real de la embocadura quebrada es que cuando solamente una rienda aplica presión, no se afecta el otro lado de la embocadura (la verdadera Pagina 2 de 5 acción del freno es cuando se aplica presión con las dos riendas al mismo tiempo). Esta característica de acción unilateral, significa que es una embocadura muy buena para los caballos que necesitan un control un poco más severo que el filete (donde la rienda se prende al anillo y por lo tanto no hay palanca), en su trabajo de pista o en el recorrido de obstáculos, es decir donde se trabaja en giros o vueltas. Freno-filete Liverpool de articulación simple. De nuevo, la desventaja, es que es una embocadura de una sola articulación y puede presionar en contra del paladar superior y en las barras el efecto pinza, igual que cualquier filete de una sola articulación. También, cuando las riendas están prendidas de las llamadas, los extremos de las patas de la embocadura pueden presionar en contra de los labios inferiores, invitando a algunos caballos a tratar de morder los extremos de las patas de la embocadura (el puente de un Liverpool quebrado debe ser por esta razón, de un cuarto a media pulgada más ancho que otras embocaduras). Algunos caballos se pueden molestar o confundir y alterar cunado las patas de la embocadura presionan hacia adentro. Esto se elimina usando una embocadura de estilo Elbow, con uniones en forma de codo. O se pueden cortar las patas por debajo de la primer llamada, en el caso de que no sea necesario prender las riendas en las llamadas de más abajo. Con las patas acortadas, hemos tenido algunos buenos resultados en caballos que no respetaban lo suficiente a los filetes. Freno-filete bayoneta o de codo (Elbow snaffle). Pagina 3 de 5 Encontramos al Liverpool de puente recto demasiado severo y tampoco nos gusta tener las patas tan largas debajo de sus bocas. El Liverpool quebrado no se debe usar constantemente (o todavía mejor, nunca) con las riendas en la segunda o tercera llamada. La severa palanca que se aplica en ese caso, pone una gran cantidad de presión sobre el paladar y barras mientras tiran de las patas desde abajo, produciendo al mismo tiempo el efecto pinza y el de palanca. Si siente que necesita más control aún, (tal vez mientras maneja por caminos de tierra o compitiendo en un recorrido cross-country), pruebe el Liverpool de puente recto o el de puente curvado. Freno Liverpool de puente recto Freno Liverpool de puente curvado Bibliografía A Logical Approach Through Dressage Training – Heike Bean & Sarah Blanchard. Frenos, Filetes y otras cosas – Alberto Martín Labiano. Pagina 4 de 5 Pagina 5 de 5 Powered by TCPDF (www.tcpdf.org)