OCT-DIG 75 RESEÑAS 257 D E LIBROS V Í C T O R V I L L A N U E V A , Ejército p e r u a n o : d e l c a u d i l l a j e anárquico al r i s m o r e f o r m i s t a . L i m a , E d i t o r i a l J u a n Mejía B a c a , 1973, 439 p p . milita¬ Víctor V i l l a n u e v a , periodista, sagaz observador d e l proceso de cambio que se d a e n l a formación, el comportamiento y l a mentalidad militar, nos ha p r o p o r c i o n a d o u n a perspectiva histórica del ascenso del ejército peruano al poder político y el papel definitorio que éste h a desempeñado e n l a v i d a política peruana hasta nuestros días. Esta o b r a constituye u n valioso estudio de los militares peruanos porque profundiza e n los antecedentes y formación de esta élite profesional. E l análisis de V i l l a n u e v a tiene considerable i m p o r t a n c i a y a que poco se ha escrito sobre el fenómeno militar e n u n a f o r m a densa y coherente que escape a criterios sociológicos simplistas. Y v a también más allá de u n s i m ple esbozo histórico. E l análisis se centra e n las instituciones castrenses, su estructura vertical, l a rígida subordinación, de tipo compulsivo, de sus miembros, el " c u l t o a l a fuerza que profesan", " s u mecánica r u t i n a a toque de c o r n e t a " , y los privilegios y prerrogativas personales e institucionales de que trozan. Más aún este trabajo se destaca por ser resultado v ampliación de anteriores obras* que estudian "desde a d e n t r o " l a compleja estructura m i l i t a r peruana a través de l a experiencia a d q u i r i d a por e l autor durante sus 27 años en e l ejército. T a l como lo advierte V i l l a n u e v a , e n el contexto político peruano no es posible estudiar l a política sin hablar de los militares. N o hay d u d a de que los militares siempre h a n tenido u n a fuerte influencia e n l a política peruana. D e 1821, cuando el Perú obtuvo su independencia política de España, hasta 1968, el poder político h a estado e n manos de 76 individuos, 50 de ellos militares, que gobernaron a l país p o r 86 años. Más de l a m i t a d d e l periodo 1900-1960 estuvo a cargo de tres dictadores, Leguía, Benavides y O d r i a ; 174 oficiales h a n sido ministros de Estado, y entre 1914 y 1962 h u bo n o menos de 32 insurrecciones militares. L a identificación de los caudillos militares estuvo, desde u n principio, l i gada a l poder político, encarnado e n u n sistema rígido, alejado de t o d a legitimación política que se identificaba y estaba a l servicio de las clases económicamente dominantes. L a r i v a l i d a d p o r e l poder político, generalmente se determinaba por el uso directo de l a fuerza y las manipulaciones del derecho constitucional y electoral. Posteriormente, el inicio de l a industrialización, l a urbanización progresiva, el crecimiento y m o v i l i d a d de las diversas capas sociales, perfilaban u n sistema político que cada vez más favorecía en f o r m a directa a l capital foráneo. L a acumulación de l a d e u d a externa obligaba a los gobernantes a i E l m i l i t a r i s m o e n e l Perú talidad cambios militar e n e l Perú? (1972), E l C A E M (1962), U n año b a j o (1969), 1 0 0 y la revolución e l sable años d e l ejército (1963), ¿Nueva peruano. men- Frustraciones y d e la f u e r z a a r m a d a (1972). 258 RESEÑAS DE LIBROS FI XVI—2 caer en el círculo vicioso de más financiamiento externo p a r a salvar l a s i tuación fiscal. Afectado por el déficit de l a balanza de pagos, el país acentuó su proceso de desarrollo dependiente. D u r a n t e l a segunda década del siglo x x surgen dos partidos políticos ideológicamente fuertes que d o m i n a r o n l a política p o p u l a r reformista y revolucionaria. José Carlos M a r e a t e g u i , fundador del P S P (Partido Socialista Peruano) que más tarde se convierte en el P a r t i d o C o m u n i s t a Peruano y Víctor Raúl H a y a de l a T o r r e , fundador del A P R A ( A l i a n z a Popular R e volucionaria A m e r i c a n a ) , propusieron cambios y trataron de articular drásticas transformaciones, no solamente p a r a el Perú sino p a r a toda "Indoamér i c a " . E l A P R A se oponía al imperialismo, demandaba l a u n i d a d política de América L a t i n a y pedía l a nacionalización de l a tierra y de l a industria. E l P S P proponía el derrocamiento del viejo orden político para reemplazarlo por u n Estado socialista basado en principios marxistas e indigenistas. Frente al conservadurismo y l a reacción m i l i t a r , el A P R A se vio i m p e d i do de tomar el poder. A partir de esta época las intervenciones militares surgían como reacción a l programa aprista y tenían como objetivo p r i n c i p a l contrarrestar el desarrollo político alcanzado por los sectores populares organizados. H a s t a comienzos de los años 60 se desató toda u n a campaña represiva en contra de apristas y activistas de izquierda. E l A P R A , buscando desalentar l a persecución del partido por parte del ejército, entró en u n periodo de coexistencia que trajo como resultado u n marcado cambio en su orientación ideológica. E l liderazgo dio su apoyo a los partidos civiles-oligárquicos que prometían u n mejor tratamiento del A P R A , a cambio de que el partido p u d i e r a p a r t i c i p a r en las elecciones parlamentarias. D e esta manera el A P R A se despojó de sus vestiduras reformistas y optó por colocarse en u n prudente centro-derecha, zigzagueando con u n a política populista de acomodo y con u n p r o g r a m a bastante recortado. E n f o r m a similar, el P C i n fluido por las políticas stalinistas adoptó u n a actitud conciliadora y refor¬ mista. Consciente de los problemas críticos del subdesarrollo, de las pugnas políticas que c u l m i n a b a n en l a escisión de todos los partidos políticos —excepto del A P R A , que esperaba listo p a r a intervenir en las próximas elecciones—, de l a corrupción entre los círculos gobernantes y de los esporádicos levantamientos campesinos y guerrilleros, u n sector de l a élite m i l i t a r , en su mayor parte de oficiales del ejército, reaccionó a l hecho de que l a arcaica estructura peruana requería algunos cambios p a r a restaurar el deteriorado orden social y a l i v i a r el descontento. Los militares pusieron en m a r c h a u n a serie de reformas que h a n alterado l a estructura del poder tradicional en el Perú. T a l como lo dice V i l l a n u e v a , el golpe de 1968 fue llevado a cabo por u n equipo m i l i t a r m u y bien informado, que debía su considerable sofisticación y formación académica a u n creciente profesionalismo, superior en muchos aspectos a l de otras instituciones castrenses latinoamericanas. E l autor deja OGT-DIC 75 RESEÑAS DE LIBROS 259 constancia de que fue en el C A E M (Centro de Altos Estudios M i l i t a r e s ) , donde por más de dos décadas las fuerzas armadas desarrollaron u n a m e n t a l i d a d que más tarde "justificaría" su intervención directa en l a conducción política del país. Bajo l a presente coyuntura histórica, es obvio que l a posición del ejército peruano h a variado drásticamente respecto a l a de otros regímenes militares. A esta diferencia se atribuye el hecho de que hasta hoy es uno de los intentos más serios de modernización y de transformación d e l proceso político. L a s reformas que los militares h a n llevado a cabo h a n alterado l a estructura t r a d i c i o n a l del poder. E l proceso de transición a u n a nueva m o d a l i d a d de acumulación y l a ejecución de u n a a m p l i a serie de reformas estructurales h a n transformado el ordenamiento institucional de l a economía peruana. A pesar de todo esto, V i l l a n u e v a sostiene que parece improbable que las reformas afecten en f o r m a importante l a redistribución del ingreso y l a distribución d e l poder en favor de las grandes mayorías. L o s mecanismos de dominación interna persisten v a l a larga es m u v probable que se agudicen debido a que las reformas que se h a n i m p l a n t a d o son cambios limitados que están dentro de parámetros clasistas. E n esencia, dice V i l l a n u e v a se pretende u n a "incorporación segmentaria", ya que u n proceso de reajuste, como es el caso peruano, desemboca en l a exclusión de u n amplio sector de l a población, particularmente el sector indígena. E l intento reformista seguido hasta l a fecha por los militares incluye l a adopción de u n a política que multilateriza l a dependencia externa, a través de l a renegocíación de los términos de dependencia, en vez de romper con e l l a ; el reemplazo de l a asamblea legislativa y l a reestructuración del sistema de gobierno con administradores más eficientes; l a ejecución de u n p l a n de desarrollo económico p a r a modernizar e intentar industrializar el país dentro de u n marco de u n a sociedad capitalista que requiere del fortalecimiento del Estado p a r a ocupar l a posición dominante en l a regulación del curso que h a de tomar l a economía, en l a que se prevé l a participación del capital privado extranjero; y, l a introducción de nuevos métodos de control corporatista sobre los sectores populares p a r a socavar sus organizaciones políticas y desintoxicarlas ideológicamente. A pesar de l a determinación anunciada p o r el régimen de alejarse firmemente de los principios capitalistas, creando u n nuevo sector económico de " p r o p i e d a d s o c i a l " . V i l l a n u e v a sostiene que el reformismo peruano, en su deseo por asumir eí control y modernizar el capitalismo, h a procurado suprim i r los aspectos negativos del capitalismo sin destruirlo como t a l (p. 393). Por último, a pesar de su carácter nacionalista, el gobieno peruano no h a tenido problemas con las agencias de préstamo internacionales n i con inversionistas extranjeros, que más bien h a n contemplado favorablemente el proceso peruano. Queremos dejar en claro que el mérito f u n d a m e n t a l de esta obra reside 260 RESEÑAS DE LIBROS FI XVI—2 en l a enorme cantidad de material descriptivo que el autor h a podido recopilar. Asimismo, el estudio merece a m p l i a divulgación porque se trata sin lugar a dudas de u n a investigación seria y completa del fenómeno m i l i t a r peruano. RUBÉN BERRIOS