PONTIFICIA UNIVERSIDAD JAVERIANA, CALI, COLOMBIA UN VISTAZO JURÍDICO A SIGLOS DE INDÍGENAS… INDÍGENAS DE SIGLOS. MARIA ALEJANDRA ARÉVALO M. MÓNICA LILIANA RIASCOS S. ESTUDIANTES DE LA CARRERA DE DERECHO 1 PONTIFICIA UNIVERSIDAD JAVERIANA, CALI, COLOMBIA FACULTAD DE CIENCIAS JURÍDICAS Y POLÍTICAS CARRERA DE DERECHO CALI ABRIL DE 2008 TABLA DE CONTENIDO INTRODUCCIÓN OBJETIVOS 1 BREVE SÍNTESIS SOBRE COMUNIDADES INDÍGENAS PRECOLOMBINAS 1.1 Familia Chibcha 1.2 Los Muiscas 1.3 Los Taironas 2. Familia Caribe 3. Familia Arawak 2 EVOLUCIÓN DE LOS DERECHOS DE LAS COMUNIDADES INDÍGENAS HASTA 1990. 2.1 Época colonial 2.2 Época republicana hasta 1990 2.3 Legislación penal indígena desde la colonia hasta 1980 3 LAS COMUNIDADES INDÍGENAS BAJO LA PERSPECTIVA DEL ESTADO SOCIAL DE DERECHO COLOMBIANO 3.1 Situación actual de las comunidades indígenas en Colombia 3.2 Los derechos de las comunidades indígenas en la Constitución Política Nacional. 2 PONTIFICIA UNIVERSIDAD JAVERIANA, CALI, COLOMBIA 3.3 Los derechos de las comunidades indígenas en la Legislación nacional. 3.4 Los derechos de las comunidades indígenas en Sentencias de la Corte Constitucional 4 VIOLACIÓN DE LOS DERECHOS HUMANOS DE LAS COMUNIDADES INDÍGENAS CONCLUSIONES ANEXOS BIBLIOGRAFÍA INTRODUCCIÓN “Mirar a una persona indígena es encontrar el rostro de la historia, una historia donde la madre tierra cobra vida… donde el sol y la luna se conjugan para formar al hombre… donde para ser anaconda o águila hay que preparar el alma por mucho tiempo… donde ir al otro y volver al otro no es un problema intelectual, es un problema del corazón… donde cada persona es valorada por su diferencia, como el fuego que mantiene su color encendido, aunque las llamas sean de diferentes colores”. Así piensan, sienten y actúan nuestros indígenas colombianos, sin embargo, son pocos los años desde que se reconoce, valora y conserva toda su riqueza cultural, pues por mucho tiempo fueron sometidos por “el hombre blanco” y tratados como “menores de edad” o peor aún simples “objetos” o “animales comerciables” aptos únicamente para laborar. En que preciso momento, nuestro pensamiento monocultural y discriminatorio evolucionó hacia un pensamiento pluricultural que reconoce, acepta y valora las diferencias, es imposible determinarlo, pero lo que si podemos establecer es que en todo este proceso evolucionista estuvo y esta presente el derecho, que fiel a su labor, como respuesta a cada momento 3 PONTIFICIA UNIVERSIDAD JAVERIANA, CALI, COLOMBIA histórico vivido ha emitido diversas disposiciones jurídicas que regulan el trato hacia las comunidades indígenas y sus miembros. En el presente trabajo se dará a conocer la evolución que ha tenido nuestro sistema jurídico en lo que respecta a las comunidades indígenas, desde la época precolombina hasta nuestros días y la violación de los derechos humanos de los indígenas en la actualidad. OBJETIVOS DE LA INVESTIGACION - Brindar una aproximación desde una perspectiva jurídica sobre la evolución de los derechos de las comunidades indígenas, desde la época precolombina hasta la actualidad. - Despertar en el lector respeto por las comunidades indígenas como portadoras de una gran riqueza cultural. 4 PONTIFICIA UNIVERSIDAD JAVERIANA, CALI, COLOMBIA “UN VISTAZO JURÍDICO A SIGLOS DE INDÍGENAS… INDÍGENAS DE SIGLOS” 1. BREVE SÍNTESIS SOBRE COMUNIDADES INDÍGENAS PRECOLOMBINAS …Antes de la llegada del “hombre blanco”, en América todo era distinto: la “Pacha mama1” adornaba sus fértiles valles y montañas con variados productos; los caciques eran los únicos soberanos gobernantes y los dioses eran los únicos seres capaces de fijar el destino de ese amante de la naturaleza, de ese hermano de sangre, de ese luchador incansable: el indígena… … Estas tierras estaban pobladas por una variedad de símbolos, de tradiciones, de costumbres, de artes, de conocimientos, de saberes y de familias indígenas… … Familias indígenas como la Chibcha, Caribe y Arawak… 1.1 LA FAMILIA CHIBCHA Su territorio El territorio chibcha se situó en la gran altiplanicie cundiboyacense, que facilitó el trabajo de agricultura y el desplazamiento a través de sus zonas de dominio comercial y militar. Sus leyes El pueblo Chibcha cumplía fielmente un código o conjunto de leyes cuya autoría se le atribuye a uno de los gobernantes indígenas antiguos llamado Nemequene. Las leyes eran cortantes: el robo, la infidelidad y la mentira eran sancionados ejemplarmente, incluso con pena de muerte. Así mismo, existía el derecho de propiedad privada y los bienes pasaban a los hijos y a las esposas, a excepción de los objetos de uso personal que eran enterrados con el cadáver del propietario. 1 Denominación indígena de tierra. 5 PONTIFICIA UNIVERSIDAD JAVERIANA, CALI, COLOMBIA El gobierno de la comunidad se desarrollaba mediante una especie de despiadada monarquía: de la voluntad despótica del “Zaque”2 dependían vidas, bienes y honor de sus subordinados; suyo era el territorio, la fecundidad de las tierras y el trabajo de los hombres. Su economía y comercio El producto de la agricultura, la minería, los tejidos, la cerámica, además de brindarles lo necesario para su subsistencia, les permitía contar con un excedente para sus intercambios. Semanalmente concurrían a mercados situados en distintos lugares: Ráquira para el comercio de cerámica, Zipaquirá para la sal, Muzo y Somondoco para las esmeraldas, etc. Usaron monedas circulares de oro y para calcular el peso y las medidas empleaban hebras de algodón o hacían montoncitos y les fijaban precio. Dentro de esta familia sobresalieron las tribus de los Muiscas y la de los Taironas por su organización económica, social, política y religiosa. 1.1.1 LOS MUISCAS Su territorio Los Muiscas habitaron entre los altiplanos y valles de la cordillera Oriental colombiana, principalmente entre el macizo de Sumapaz y el nevado del Cocuy, a lo largo de los ríos Bogotá, Suárez y Chicamocha. Su economía y comercio Los muiscas fueron muy laboriosos, sus principales actividades eran: la agricultura, la minería, la pesca, la caza, la industria textil, la cerámica, la orfebrería y el comercio. Su organización social y política La sociedad se dividía en varias clases: Nobles o usaques, sacerdotes o jeques, quechuas o guerreros, comerciantes y el pueblo, que comprendía agricultores, mineros y artesanos 2 Bajo esta denominación se conocía al gobernante o soberano de la región indígena de la Cundinamarca antigua. 6 PONTIFICIA UNIVERSIDAD JAVERIANA, CALI, COLOMBIA La base de la organización fue la familia. Los matrimonios se realizaban generalmente entre gentes de la misma tribu; los jefes tenían el privilegio de poseer varias esposas. Sus creencias Generalmente, los indígenas rendían culto a los muertos y debido a su creencia en la inmortalidad del alma los enterraban con alimentos, joyas, vestidos, etc. La muerte era concebida como “el comienzo de un viaje que los conduciría a un mundo parecido al de ellos y en donde la vida sería fácil y difícil, de acuerdo con el comportamiento que hubieran tenido en esta vida”. 1.1.2 LOS TAIRONAS Su territorio Los Taironas habitaron la Sierra Nevada de Santa Marta, y a lo largo de los ríos Ariguaní, Cesar y Ranchería, también en los valles de los ríos Palomino y Buritaca. Su organización social y política Los Taironas se consolidaron alrededor de dos confederaciones: la de Bonda, cercana a la actual ciudad de Santa Marta, y la de Pocigueica, por la rivera del Río Frío gobernadas por un cacique; existieron también unidades políticas mayores, acercándose a federaciones en cabeza de un jefe acompañado por una corte de nobles guerreros y por jefes religiosos, llamados noamas. Su economía Sus equivalentes de valor llegaron a ser el oro, la sal, el pescado, usados para el intercambio de productos o como ellos lo denominaban: “Trueque”. 1.2 LA FAMILIA CARIBE Su territorio Habitaron las costas y los valles de los ríos Magdalena, Cauca, Atrato y Sinú. Su organización social y política Esta familia fue muy numerosa, sin embargo, no se unificó en un estado sino que se formaron grupos menores, de diferente organización social, distinta religión y costumbres propias para cada una. Su economía y comercio Se dedicaron principalmente al cultivo del algodón, el ñame, la yuca, el maíz y las frutas, productos que eran transportados por el mar y los ríos en canoas y piraguas. Negociaban perlas, caracoles, esmeraldas, tabaco y algodón por mantas, plumas y alimentos. 7 PONTIFICIA UNIVERSIDAD JAVERIANA, CALI, COLOMBIA Sus creencias Adoraban al Sol y la Luna, las estrellas y las piedras; veneraban a los muertos. Los mohanes, brujos o médicos eran los encargados de hacer las ceremonias. La religión no les imponía frenos, de allí su gran libertinaje y despreocupación por la moral. 1.3 FAMILIA ARAWAK Su territorio Los Arawacos tomaron como asiento la Guajira; vivieron en principio en las llanuras costaneras de Colombia y Venezuela, con lo cual perdieron su unidad idiomática y adoptaron dialectos diversos. Algunas tribus de la familia Arawak existen actualmente. De estas, la más conocida es la de los guajiros que todavía conserva puro su tipo racial y sus costumbres. Su organización social y política En algunas tribus existió el patriarcado, mientras que en otras el matriarcado, gobernadas por el cacique quien era el soberano supremo. Sus creencias Rendían culto a los muertos a quienes colocaban en bóvedas de piedra cubiertas de lajas. 8 PONTIFICIA UNIVERSIDAD JAVERIANA, CALI, COLOMBIA 2. EVOLUCIÓN DE LOS DERECHOS DE LAS COMUNIDADES INDÍGENAS HASTA 1990 …Con la llegada de Cristóbal Colón, los hijos del sol y la luna: los indígenas, fueron menospreciados, sus costumbres ignoradas, sus dioses aniquilados y sus vidas oprimidas… … Sentimientos de superioridad anunciaron que nueva épocas de sufrimiento y dolor sobrevendrían y actos de dominación del “hombre blanco” acabaron con toda ilusión indígena de retornar hacia un pasado donde ellos, los árboles y el agua se respetaban por igual… …Tras crueles años de conquista, viene la colonia…el alma indígena esta destrozada, añora su antigua vida, pues lo ha perdido todo… hasta su libertad… sin embargo sus sueños siguen latentes esperando un nuevo amanecer… 2.1 ÉPOCA COLONIAL El mundo indígena sufrió profundas transformaciones y la trastocada sociedad indígena comenzó a girar en función de la estructura impuesta por los conquistadores españoles: La población indígena disminuyó notablemente debido a los trabajos forzados a los que eran sometidos, a las enfermedades desconocidas que los aniquilaron y por el afán de “civilizarlos” de incorporarlos o asimilarlos a la cultura del opresor. La nueva legislación En la colonia, las leyes que rigieron a la Nueva Granada fueron las españolas, pero éstas debían acomodarse a las necesidades propias del “nuevo continente”; por esta razón, se instauraron nuevas instituciones como los resguardos, las encomiendas, los repartimientos y la mita, las cuales aseguraron la sujeción de las comunidades indígenas al pago de tributos y a los trabajos forzados en minas, haciendas y ejidos. La nueva organización social y política 9 PONTIFICIA UNIVERSIDAD JAVERIANA, CALI, COLOMBIA Debido al la estructuración de la sociedad colonial en diversos grupos ordenados jerárquicamente, la masa indígena constituyó la base de la pirámide social por ser la principal fuerza de trabajo en la minería, agricultura, obras públicas y en las industrias rurales o urbanas. La nueva economía Los indígenas debido a su dificultad de reunir tributo en especies, se institucionalizaron diversas formas de trabajo personal, como fueron los resguardos, la mita y la encomienda. Su protección legal La Corona buscando evitar la extinción del indígena, adoptó medidas proteccionistas que obligaron a los encomenderos, a proteger a los indígenas y a evangelizarlos. A partir del año 1600, los asentamientos indígenas fueron reorganizados en "reducciones" o "pueblos de indios", pero a pesar de existir una prohibición legal, algunos colonizadores se establecieron entre los nativos y cultivaron parte de sus tierras. Frente a esta crisis poblacional, la Corona declaró a los indígenas como vasallos libres permitiendo la esclavización sólo mediante la declaración de la guerra justa, un recurso legal que lejos de proteger a los indígenas, garantizó su sujeción a La Corona y al Cristianismo. 2.2 ÉPOCA REPUBLICANA HASTA 1990 Una nueva época se avecina… con la independencia se abre una luz renovadora para el indígena quien cuenta solo con su esperanza, que día a día le recuerda, que llegará el día donde podrá en paz junto con los suyos, ver de nuevo el esplendor de las aguas y sentir el calor de la tierra, su tierra… esa que lo vio nacer, lo ve crecer y lo verá morir… Independizada de España, la naciente República busco proteger, fortalecer y conservar a las comunidades indígenas cuya situación política, social y legal fue reparada, así: A las comunidades indígenas de ese entonces les eran aplicables las leyes generales de la República; se regían por cabildos conformados por ellos mismos, de acuerdo con sus costumbres, debido a la Ley de 11 de octubre de 1821 que señala con respecto a las 10 PONTIFICIA UNIVERSIDAD JAVERIANA, CALI, COLOMBIA comunidades indígenas: “Ellos...quedan en todo iguales a los demás ciudadanos y se regirán las mismas leyes” Simón Bolívar dictó el decreto del 20 de mayo de 1820, por el cual se devolvieron a los naturales los resguardos deseando corregir los abusos cometidos contra sus personas y sus resguardos, considerando que esa parte de la población de la república merece la más paternal atención del gobierno por haber sido la más vejada, oprimida y degradada durante el despotismo español. La Ley 89 de 1890, presenta un régimen protector de los resguardos permitiendo que los indígenas tuvieran una seguridad territorial por lo menos parcialmente y también protección, como afirma Benítez: “en cierta forma de sus tradiciones culturales al permitir la constitución de los cabildos conforme a sus costumbres”. Más adelante, se presenta la ley 72 de 1892 con la cual las comunidades indígenas quedan a la disposición ya no del congreso, sino del gobierno quien le da un poder especial a la iglesia y a las misiones para decidir sobre las regulaciones jurídicas de los indígenas. La Ley 135 de 1961 reconoció la propiedad sobre los predios ocupados por los indígenas, como pertenecientes a las comunidades indígenas respectivas, con la prohibición de enajenarlos o cederlos a cualquier título a favor de terceros que no pertenezcan a la parcialidad indígena. La ley 7 de 1979, mediante la cual se establece el sistema nacional de bienestar familiar y se organiza el instituto del mismo nombre, en su artículo 18 estipula que el indígena participará tanto del sistema como el instituto. Por ultimo, La Ley 52 de 1990, confiere como principal función a la Dirección General de Asuntos Indígenas la de definir, someter a aprobación del Ministerio de Gobierno, para su adopción por parte del gobierno nacional, la política en materia indigenista. 2.2.1 LEGISLACIÓN PENAL INDÍGENA DESDE LA COLONIA HASTA 1980 Desde la colonia, los castigos por faltas a la moral (poligamia, bigamia, atentados a los principios católicos) estaban a cargo de la jurisdicción eclesiástica; adicional a ella, se encuentra el cacique indígena quien representaba el puente entre las autoridades españolas y las costumbres y tradiciones indígenas para poder condenar o liberar al indígena. 11 PONTIFICIA UNIVERSIDAD JAVERIANA, CALI, COLOMBIA El código penal de 1837 no tuvo cláusulas especiales para los indígenas, debido a la ley del 11 de octubre de 1821. Con la vigencia de la Constitución de 1886, se expidió la Ley 153 de 1887, estatuto en el que en punto de tratamiento penal para indígenas plasmó en su artículo 320 que: “Los bárbaros que hayan sido condenados a pena corporal y que durante la condena hayan sido catequizados y bautizados podrán pedir rebaja de pena y el gobierno está autorizado para concederla tan amplia como lo juzgue conveniente en cada caso particular sin otra regla que su prudente arbitrio. En esta ley hay dos consideraciones importantes. En el código penal de 1890 no se consagró ninguna normativa con especialidad para los indígenas. De otra parte conforme a la Ley 89 de 1890, en el tratamiento penal y correccional para los indígenas se consagró la abrupta diferenciación entre indígenas salvajes, semisalvajes y reducidos a la vida civil y conforme al artículo 1º: “respecto a las dos primeras categorías, la legislación general de la república no regían y los efectos sancionatorios se dejaban a la autoridad eclesiástica…” La ley 89 de 1890 da al cabildo la facultad de castigar a quienes falten a la moral y estipula tres tipos de indígenas: los salvajes, los semisalvajes y los civilizados; Tanto para los salvajes como para los semisalvajes la ley no les aplica. En 1912 se presenta el Proyecto Concha del código penal en donde se les otorgó a los indígenas la calificación de personas con ausencia de libre albedrío por tanto no podían hacer parte de un código penal nacional. En este caso la pena “más que finalidad retributiva exhibe un carácter represor” En 1924 se instaura que los indígenas responden por los delitos comunes ante los jueces ordinarios mientras que los alcaldes, gobernadores y cabildos castigan las faltas contra la moral. En 1927 ante un intento de castigar justamente al indígena, con la Recopilación de las Leyes de Indias se le confiere el estado de menor de edad (para que fueran juzgados paternalmente por carecer de condiciones comunes a los demás nacionales). Estas condiciones de las cuales 12 PONTIFICIA UNIVERSIDAD JAVERIANA, CALI, COLOMBIA carecía el indígena eran la conciencia o libertad moral por lo cual no podían comprender la criminalidad de sus actos. Por su parte, el artículo 10° establece que los indígenas están en su derecho de acudir a una defensa que cuide de sus derechos fundamentales En el proyecto del Código Penal de 1927, por primera vez, se pensó en asimilar a los indígenas no reducidos a la vida civil como menores de edad y El código penal de 1936 considera también que la imputabilidad del indígena ya no está basada en el criterio de carencia de libre albedrío sino en el de la actividad psicofísico que presente: “se adoptó la actividad psicofísica como fundamento de la imputabilidad penal y la peligrosidad como medida de la pena…”. 3. LAS COMUNIDADES INDÍGENAS BAJO LA PERSPECTIVA DEL ESTADO SOCIAL DE DERECHO COLOMBIANO Con la Constitución Política de 1991 se dio una evolución hacia un estado social de derecho en el cual se garantizaron las mismas libertades consagradas en el Estado Liberal, pero ahora construyendo las condiciones necesarias para que la igualdad fuera real y no supuesta. El Estado Social de Derecho, se estructura sobre dos pilares fundamentales: Estado interventor dirigista y Estado prestacional, asistencial, de bienestar. “Las comunidades étnicas son consideradas por el ordenamiento actual como comunidades culturales diferentes y las personas que las constituyen, en consecuencia, tratadas como portadoras de otros valores, con otras metas y otras ilusiones que las tradicionalmente sacralizadas con el sello de occidente”3 3.1 SITUACIÓN ACTUAL DE LAS COMUNIDADES INDÍGENAS EN COLOMBIA4 En la actualidad, las comunidades indígenas cuentan, con una población total, según el Departamento Nacional de Planeación, de 701.866 habitantes en cinco macroregiones identificadas como: La Región de la Amazonía: Con 83 entidades territoriales (resguardos y reservas), 44 grupos étnicos y una población de 48.622, equivalente al 6.9%. 3 4 Corte Constitucional, Sentencia C – 139, abril 9 de 1996. Referencia estadística: Departamento Nacional de Planeación, 2007. 13 PONTIFICIA UNIVERSIDAD JAVERIANA, CALI, COLOMBIA La Región de la Orinoquía: Con 124 entes territoriales, 56 grupos étnicos y 69.866 habitantes que representan el 9.9% de la población indígena nacional, en la que se destacan los sicuani, con el 29.4%, los curripacos, con el 10.1% y los tukano, con el 9.7% de la región. La Región Centro Oriente: Con 28 resguardos, entre los que se desatacan los pijao, con el 9%, los uva, con el 19% de una población de 36.017 habitantes de la región, equivalente al 5.1 % de la población indígena nacional. La Región de Occidente: Con 222 resguardos, 27 pueblos indígenas y 337.636 habitantes, lo que representa la mayor población del país (48.1%), destacándose el pueblo nasa o Páez, con el 35.1% de la población indígena de la región, los embera, con 1.1% de la región, los pastos, con el 16.4% y los guambianos, con el 6.1%. La Región Atlántica Cuenta con 22 entes territoriales, 17 grupos étnicos y 209.719 habitantes que representan el 29.4% de la población de la región. El grupo mayoritario de la región es el wayú, con el 68.6% de la región, le siguen los zenú, con el 16.1% y los arhuacos, con el 6.8%. 3.2. LOS DERECHOS DE LAS COMUNIDADES INDÍGENAS EN LA CONSTITUCIÓN POLÍTICA NACIONAL. “No hay más grave discriminación que tratar de aplicar las mismas normas, a todos sin tener en consideración cual es su propia condición”5 Si el Art. 7º de la Constitución Política Nacional establece: “El Estado reconoce y protege la diversidad étnica y cultural de la Nación colombiana”, entonces: “Todo colombiano puede pensarse como igual en la diferencia”6. 5 6 Angelo Papacchin, Filosofía y Derechos Humanos, Ed. Universidad del Valle, 1997. José Fernando Castro Caycedo, Su Defensor Año 3 - No. 39, Defensoría del Pueblo, 1996. 14 PONTIFICIA UNIVERSIDAD JAVERIANA, CALI, COLOMBIA Es así como, la Carta Política busca superar todo acto discriminatorio que menoscabe la igualdad. El trato justo que merece todo miembro de la especie humana, parte por reconocer y respetar la diversidad étnica y cultural. Particularidades de los pueblos indígenas como la propiedad colectiva, el conocimiento y veneración al a naturaleza, las costumbres, las tradiciones y rituales entre otros, son elementos de una cultura que nos enriquecen por su variedad. Así lo plasmó la Constitución cuando reconoció a los pueblos indígenas como sujetos de derechos y les otorgó herramientas jurídicas para su participación dentro de las políticas estatales. Los artículos constitucionales 7,8,10,13,63,68,72,171,176,246,329 y 330 expresan la intensión del legislador de proteger la diversidad étnica y cultural de los pueblos indígenas: El artículo 1º y 7º proclaman y protegen la diversidad étnica y cultural. El artículo 10º consagra las lenguas de los grupos étnicos como oficiales en sus territorios. Y el artículo 96 reconoce a los indígenas como nacionales colombianos.7 El artículo 68 establece que ninguna persona podrá ser obligada a recibir educación religiosa y en lo que respecta a las comunidades indígenas señala que estas tendrán derecho a una formación que respete y desarrolle su identidad cultural. En lo referente a la propiedad de las tierras de los grupos indígenas, la Carta Política en el artículo 63 les otorga el calificativo de: inalienables (prohibición de transferencia de su dominio) imprescriptibles (prohibición de propiedad sobre ellas mediante la figura jurídica de la prescripción) e inembargables (no susceptibles de embargos). Esto confiere a las tierras indígenas mayor seguridad y garantías jurídicas y cualquier daño que sufran deberá ser reparado. En cuanto a la participación política de los indígenas el artículo 171 crea la circunscripción especial de comunidades indígenas para la elección de dos senadores. 7 : “Son nacionales colombianos: 1. Por nacimiento: a. Los naturales de Colombia (...) 15 PONTIFICIA UNIVERSIDAD JAVERIANA, CALI, COLOMBIA El artículo 286 consagra alas zonas indígenas como entidades territoriales de la Nación, que les permite tener autonomía en cuanto a su gobierno, administración de recursos y a participar en las rentas nacionales. Sin embargo, el avance más significativo en materia de comunidades indígenas lo encontramos en el artículo 246 que establece la creación de la Jurisdicción especial indígena, permitiendo a las autoridades de los pueblos indígenas reglar y juzgar a su comunidad conforme a sus propias leyes, tradiciones y procedimientos, siempre que no sean contrarios a la Constitución y leyes de la República. “El análisis de este artículo muestra los cuatro elementos centrales de la jurisdicción indígena en nuestro ordenamiento constitucional: la posibilidad de que existan autoridades judiciales propias de los pueblos indígenas, la potestad de éstos de establecer normas y procedimientos propios, la sujeción de dichas jurisdicción y normas a la Constitución y la ley, y la competencia del legislador para señalar la forma de coordinación de la jurisdicción indígena con el sistema judicial nacional”8 La Carta Política supone entonces, que cualquier juicio que se adelantará será acorde a la realidad social y cultural en la que se encuentran los individuos involucrados en el caso, es decir, se pretende juzgar la conducta indígena con base en la identidad étnica. De ahí se deriva la importancia de definir la competencia de la jurisdicción indígena, que se establece consultado dos variables: La variable personal que permite establecer si quien comete la falta pertenece o no a una comunidad indígena, de así serlo, su juzgamiento corresponderá a la jurisdicción indígena; de lo contrario, su juzgamiento le corresponderá a la jurisdicción ordinaria. Por su parte, la variable geográfica permite establecer donde se presentaron los hechos, dentro o fuera de un territorio indígena. Si el acto se cometió por fuera del territorio, se debe establecer si el o los sujetos conocían o no la ilicitud de su acción. Si no la conocían en virtud de su cosmovisión, deben ser reintegrados a su cultura; pero si eran conscientes, la sanción correrá por cuenta de la jurisdicción ordinaria. 8 Corte Constitucional, Sentencia C – 139, abril 9 de 1996. 16 PONTIFICIA UNIVERSIDAD JAVERIANA, CALI, COLOMBIA Si la conducta sólo es sancionada por el sistema nacional, los jueces de la República serán los encargados de conocer el caso, pero si la conducta es sancionada por la comunidad indígena y por el sistema nacional, se debe tener en cuenta el grado de conciencia étnica y el grado de aislamiento a su cultura. 3.3. LOS DERECHOS DE LAS COMUNIDADES INDÍGENAS EN LA LEGISLACIÓN NACIONAL. La legislación nacional acorde con el espíritu constitucional ha contribuido con la protección y reconocimiento de la diversidad étnica, a través de importantes desarrollos legislativos: Ley 21 de 1991: ratifica el convenio 169 de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) sobre pueblos indígenas y tribales en países independientes. A las vez, leyes como la ley 60 de 19939, la ley 100 de 199310, la ley 152 de 199411, la ley 388 de 199712, la ley 397 de 199713 desarrollan artículos que vinculan a las comunidades indígenas. 3.4. LOS DERECHOS DE LAS COMUNIDADES INDÍGENAS EN SENTENCIAS DE LA CORTE CONSTITUCIONAL En los últimos años se ha producido relevante cambio de concepción en la doctrina jurídica y en la ciencia política, sobre derechos de comunidades indígenas: Decisiones emitidas por la Corte Constitucional han puesto de presente que la comunidad indígena es también sujeto de derechos fundamentales y “en su caso los intereses dignos de tutela, protegidos bajo la forma de derechos fundamentales no se reducen a los predicables de sus miembros individualmente considerados, sino que también integran a la comunidad misma, dotada así de singularidad”14. La Corte, se ha pronunciado también sobre el significado del derecho de propiedad para las comunidades indígenas, expresando que ellas forman parte de una 9 “Por la cual se dictan normas sobre la distribución de competencias y se distribuyen los ingresos corrientes de la nación”, los resguardos indígenas reciben un porcentaje de los ingresos del país. 10 “Sobre la seguridad social”, establece que las comunidades indígenas son beneficiarias del Régimen subsidiado, 11 “Por la cual se establece la ley orgánica del Plan de Desarrollo” 12 “Por la cual se establece normas sobre el ordenamiento territorial” 13 “Por la cual se expide la Ley General de Cultura” 14 Corte Constitucional, Sala tercera de Revisión, Sentencia T- 380 de 13 de septiembre de 1993 17 PONTIFICIA UNIVERSIDAD JAVERIANA, CALI, COLOMBIA circunscripción especial para la elección de senadores y representantes, ejercen funciones jurisdiccionales dentro de su ámbito territorial de acuerdo con su propias normas y que sus resguardos son de propiedad colectiva, al ser la propiedad colectiva de gran importancia para las culturas y valore espirituales de los pueblos aborígenes.15 4. VIOLACIÓN DE LOS DERECHOS HUMANOS DE LAS COMUNIDADES INDÍGENAS El concepto de derechos humanos tiene especiales connotaciones para los pueblos indígenas; para ellos su violación involucra la existencia del grupo, sus posibilidades de mantener su integridad cultural, social, económica, política y espiritual hacia el futuro. 16 A pesar del mandato constitucional, el indicador más evidente en la violación de los derechos humanos indígenas es el asesinato y desconocimiento de los derechos fundamentales, sin contar con que sus territorios están expuestos al narcotráfico y el conflicto armado interno: “La expansión del conflicto armado por los territorios indígenas tiene que ver, fundamentalmente, con factores como: las ventajas estratégicas de los territorios indígenas para los grupos ilegales como zonas de refugio, como corredores para el tráfico de armas, drogas, contrabando y movilización de sus efectivos, y para ejercer desde allí el control de zonas económica y militarmente estratégicas”17. El Foro «La Agonía del Jaguar» sobre pueblos indígenas amazónicos y derechos humanos en el contexto del conflicto colombiano, indica que las violaciones a los derechos humanos de los indígenas es grave: Hasta septiembre de 2003, 1.311 indígenas de Caquetá, Guaviare, Putumayo y Vaupés, el equivalente al 2,7% de la población indígena de los cuatro departamentos, se vio forzada a dejar sus territorios por causas relacionadas con la violencia. Entonces, si el Estado no demuestra una real y efectiva voluntad de contrarrestar la impunidad ante la violación de los derechos de la población indígena, los propósitos constitucionales y legales seguirán como una especie de ficción jurídica.18 15 Corte Constitucional, Sala tercera de Revisión, Sentencia T- 188 de 12 de mayo de 1993 Pronunciamiento de la Organización Nacional Indígena de Colombia (ONIC), 1996 17 Esther Sánchez Botero, Los pueblos indígenas en Colombia, Derechos, políticas y desafíos. 18 José Fernando Castro Caycedo, Su Defensor Año 3 - No. 39, Defensoría del Pueblo, 1996. 16 18 PONTIFICIA UNIVERSIDAD JAVERIANA, CALI, COLOMBIA Queremos finalizar el presente trabajo citando una frase de Esther Sánchez Botero de su libro “Los pueblos indígenas en Colombia, Derechos, políticas y desafíos” dirigida hacia los pueblos indígenas: Finalmente, el pájaro no vuela porque tiene alas, sino porque quiere. Tenemos todo en nuestro país para que un pequeño puñado de colombianos, indígenas, ancianos, hombres y mujeres, jóvenes y niños tengan una oportunidad de vida buena. 19 PONTIFICIA UNIVERSIDAD JAVERIANA, CALI, COLOMBIA CONCLUSIONES - La evolución social, cultural y legislativa de nuestro país ha exigido una redefinición de “Igualdad” para incluir en ella, las diferencias que particularizan a las comunidades indígenas. - Colombia con la Constitución Política de 1991 al consagrarse como un Estado Social de Derecho, reconoce que es un Estado multicultural y plurietnico y desarrolla mecanismos encaminados a materializar tal espíritu constitucional. - Es evidente el trato jurídico especial que gozan las comunidades indígenas, que incluye una amplia protección estatal y múltiples garantías que les permite conservar sus características culturales propias permitiendo que sean los pueblos indígenas mismos artífices de su desarrollo político, territorial, cultural, educativo y jurídico. - Aunque la diversidad sea reconocida y protegida, no significa que ésta automáticamente se realice. El racismo, los prejuicios, los intereses privados, el conflicto armado interno y la violencia generan daños innegables y a la vez establecen graves discriminaciones para los grupos étnicos. 20 PONTIFICIA UNIVERSIDAD JAVERIANA, CALI, COLOMBIA BIBLIOGRAFÍA - Esther Sánchez Botero, Los pueblos indígenas en Colombia, Derechos, políticas y desafíos, Ed. Gente Nueva, Bogotá, 2003. - Esther Sánchez Botero, Justicia y Pueblos Indígenas de Colombia, Universidad Nacional de Colombia, Facultad de Derecho, Ciencias Políticas y Sociales, Unijus, Bogotá, Colombia. - Angelo Papacchin, Filosofía y Derechos Humanos, Ed. Universidad del Valle, 1997. - José Fernando Castro Caycedo, Su Defensor Año 3 - No. 39, Defensoría del Pueblo, 1996. - José Fernando Castro Caycedo, Su Defensor Año 5 - No. 49, Defensoría del Pueblo, 1998. - Pronunciamientos de la Organización Nacional Indígena de Colombia (ONIC), 1996 - “Del olvido surgimos para traer nuevas esperanzas”, Primer Seminario Nacional sobre Jurisdicción Especial Indígena y Autonomía territorial, marzo de 1997. - Constitución Política de Colombia de 1991 - Corte Constitucional, Sentencia C – 139, abril 9 de 1996. - Corte Constitucional, Sala tercera de Revisión, Sentencia T- 380 de 13 de septiembre de 1993 - Corte Constitucional, Sala tercera de Revisión, Sentencia T- 188 de 12 de mayo de 1993 - Ley 60 de 1993 - Ley 100 de 1993 - Ley 152 de 1994 - Ley 388 de 1997 - Ley 397 de 1997 21 PONTIFICIA UNIVERSIDAD JAVERIANA, CALI, COLOMBIA ANEXO No. 1 NORMATIVIDAD DIRIGIDA HACIA LAS COMUNIDADES INDÍGENAS19 NORMA Decreto 1142 AÑO 1978 ASPECTOS PRINCIPALES Reconoce que la educación dirigida a los pueblos indígenas debe respetar su cultura y permite el nombramiento de docentes indígenas sin los requisitos Que se exigen a los no indígenas. Los artículos 26 al 30 hablan de educación para los Ley 21 1991 indígenas. (Convenio 169 de El artículo 27 establece que el gobierno debe garantizar La O.I.T.) el traslado de los programas educativos para que se desarrollen en territorios indígenas a los representantes de los pueblos indígenas Constitución Política 1991 Artículo 7: El Estado reconoce y protege la diversidad de la nación colombiana. Artículo 10: Se reconoce la oficialidad de las lenguas indígenas en los territorios donde se hablan. Artículo 68: Establece que la educación para los grupos étnicos debe responder a las aspiraciones de dichos grupos. Ley 115 1994 (Ley General de En el Título 3, Capítulo 3, establece las características que debe tener la educación para los grupos étnicos. Educación) Decreto 804 1995 Desarrolla la ley 115. Establece claramente que el nombramiento de 19 ONIC - CRIC. Informe sobre el derecho a la educación en los pueblos indígenas de Colombia ante la relatoría especial sobre el derecho a la educación de las Naciones Unidas. Bogotá, octubre 8 de 2003. 22 PONTIFICIA UNIVERSIDAD JAVERIANA, CALI, COLOMBIA docentes, directivos docentes y personal administrativo en territorios indígenas debe ser concertado con las autoridades indígenas. Los docentes y directivos docentes indígenas están exentos de títulos de bachiller o normalista y del concurso para su nombramiento. Los currículos y calendarios académicos deben responder a las características particulares de los grupos étnicos. Cuando el Estado tenga que contratar la prestación del servicio educativo, tendrán prelación las organizaciones indígenas con experiencia en educación Decreto 982 1999 Establece compromisos del Gobierno Nacional para el desarrollo integral de la política indígena en el Departamento del Cauca y considera que es necesario fortalecer el sistema educativo de los pueblos indígenas y sus autoridades, de acuerdo con sus características culturales, sociales y administrativas. Directiva Ministerial 8 2003 Dirigida a alcaldes, gobernadores y secretarios de educación. Reafirma la vigencia de toda la legislación etnoeducativa. La reorganización de la educación en territorios indígenas debe atender a los parámetros establecidos en dicha legislación. Es posible la creación de instituciones educativas en territorios indígenas mediante la fusión de centros, aunque al momento de la fusión no se ofrezca la secundaria, siempre y cuando se presente un cronograma para ofrecer la básica secundaria en el mediano plazo. 23 PONTIFICIA UNIVERSIDAD JAVERIANA, CALI, COLOMBIA Decreto 2582 2003 Establece como requisito para aplicar la evaluación de desempeño de los docentes en los territorios indígenas la concertación del sistema de evaluación con las organizaciones indígenas. 24 PONTIFICIA UNIVERSIDAD JAVERIANA, CALI, COLOMBIA ANEXO No. 2 EDITORIAL PERIÓDICO “EL TIEMPO”20 OCTUBRE 21 DE 2003 “Es imperioso establecer un plan nacional de emergencia para proteger a los indígenas. Si hay un sector contra el cual esta guerra se ha ensañado de modo particularmente feroz ése es el de los indígenas. Asesinados, desplazados o sitiados en sus pueblos por paramilitares y guerrilleros, emberas, kankuamos, arhuacos, paeces y muchas otras tribus están pagando un macabro precio por el conflicto armado. La Sierra Nevada de Santa Marta viene siendo el centro de una guerra cuyas principales víctimas son las cuatro etnias que la habitan: arhuacos, kankuamos, koguis ywiwas. Nada más urgente que atender con firmeza sus reclamos de protección. Homicidios, reclutamiento forzoso, retenes, ‘vacunas’, chantajes para desviar dineros de transferencias y desplazamiento son el pan de cada día para los indígenas de la Sierra Nevada. Ellos se quejan, también, de bombardeos del Ejército contra sus territorios sagrados y de los severos controles para el ingreso de alimentos. La más tremenda cuota la han puesto los kankuamos, de la zona de Atánquez, en disputa entre ‘paras’ y guerrilleros. Hay denuncias de 53 asesinatos y más de 150 familias desplazadas. En otra parte del país, en el bajo Atrato, una oleada de suicidios entre los indígenas embera, varios de ellos de niños, puso de presente la terrible situación que se vive a lo largo del principal río del Chocó, región en la que se disputan a muerte los grupos irregulares. Ésta es otra guerra ajena en la que chamíes, tules, waunanas, katíos, emberas y comunidades negras están poniendo los muertos y el sufrimiento, a extremos tales de perturbación de su mundo que los llevan al suicidio. 20 [email protected] 25 PONTIFICIA UNIVERSIDAD JAVERIANA, CALI, COLOMBIA Un informe de la Defensoría sobre el norte del Cauca, habitado por 120.000 paeces, habla de 54 asesinatos, 5 masacres y 2 desplazamientos masivos en esa zona, entre septiembre del 2000 y enero del 2002. Todo el país recuerda la atroz masacre del Alto Naya, que cobró un centenar de víctimas y desplazó a 4.000 personas, muchas nativas. O el asesinato de cuatro líderes indígenas en dos poblados del Darién panameño. Y las muertes a bala de Augusto Lana Domicó, gobernador de Porremia (Córdoba), en abril, y de Gabriel Cartagena, candidato a la alcaldía de Riosucio (Caldas), en junio. Y el desplazamiento de casi 400 guahíbos de los alrededores de Betoyes (Arauca) por combates entre la guerrilla y los paramilitares, en julio. Lista interminable a la que deben añadirse el drástico racionamiento de vituallas y combustible por parte de los actores armados, los abusos de las fuerzas oficiales, la miseria y el abandono ancestrales. La presión de las fumigaciones está empujando la coca hacia los departamentos de Amazonas, Vaupés, a lo largo del río Apaporis, Caquetá y Guaviare, donde frágiles comunidades, que han tenido escaso contacto con el blanco, padecen la brutal llegada de la colonización cocalera. Los indígenas resisten. Medidas como la Guardia Indígena del Cauca, que protege los territorios de todos los actores armados; el Proyecto Nasa, ganador del Premio Nacional de Paz en el 2000; la idea de crear una policía indígena en la Sierra Nevada, entre otros, son una muestra de ello. Estas iniciativas no deben estar solas”. 26