32 LATERCERA Domingo 28 de abril de 2013 Mundo RR Maduro conversa con una dueña de casa durante la entrega de viviendas. FOTO: EFE COLUMNA Novedades con aroma a naftalina L Maduro intenta imponer su propio estilo en primeros días de gobierno en Venezuela R El presidente estableció un “gobierno de calle” y elevó su tono beligerante hacia la oposición. Fernando Fuentes Con una multitudinaria ceremonia, en el teatro Teresa Carreño de Caracas, el flamante Presidente venezolano, Nicolás Maduro, tomó juramento el lunes pasado a los ministros de su llamado “gobierno de calle”. Varios de los cuales lo acompañaron el jueves al estado de Zulia, donde dio inicio a esta nueva modalidad de gestión, que -según él- busca una “rectificación a fondo” de la Revolución Bolivariana lanzada por Hugo Chávez. Este ha sido, según los analistas, uno de los cambios de estilo que el “primer presidente chavista” ha dejado en evidencia en sus primeros días en el poder. Un breve período en el que también ha elevado su tono beligerante hacia la oposición, ha tendido puentes hacia EE.UU. y ha hecho enroques en la cúpula económica del chavismo. Para el analista político venezolano del Amherst College en Massachusetts, Javier Corrales, a pesar de reconocer que “las personas claves de Chávez se quedaron” en el gobierno de Maduro, “percibe dos grandes cambios en su gabinete”. El más importante es la salida del Ministerio de Fi- nanzas de Jorge Giordani, considerado uno de los ideólogos de los complejos controles de cambio y de precios que acumulan una década de aplicación en el país y que fue reemplazado por Nelson Merentes, que conducía el Banco Central. “Giordani pierde importancia en favor de Merentes. A Merentes se le considera como una persona más pragmática, menos ideológica que Giordani, que resultó ser un marxista demasiado enamorado de la idea de expropiar como respuesta a todo problema”, dice Corrales a La Tercera. Aunque el nuevo mandatario designó un equipo para iniciar un “diálogo exploratorio” con sectores “que quieran la paz”, Corrales considera que en esta etapa “hemos visto un Maduro más radical, más beligerante con la oposición, menos dispuesto a proponer ideas o programas nuevos de lo que fue Chávez”. Un análisis en el que coincide el director de la encuestadora Datanálisis, Luis Vicente León, quien recuerda que “si bien Chávez fue un líder fuerte y retador con la oposición, no estaba retado interna y externamente como le ha tocado a Maduro en el inicio de su go- R También ha tendido puentes hacia EE.UU. y ha hecho enroques en la cúpula económica. BREVES Mandatario realiza “primer” viaje a Cuba Con el fin de “ratificar la alianza estratégica” con Cuba, Maduro viajó a la isla, donde ayer suscribió con Raúl Castro 51 proyectos de colaboración por casi US$ 1.000 millones. Sobrino de Maduro es designado en Economía Maduro designó como comisionado presidencial para asuntos económicos y financieros a un sobrino de su pareja, Cilia Flores, según el diario caraqueño El Nacional. Detienen a opositor El ex general Antonio Rivero, del partido Voluntad Popular, fue detenido ayer, luego de que el gobierno difundiera un video en el que presuntamente sale organizando una protesta tras los comicios de abril. bierno”. “Los peligros de un triunfo tan cerrado (frente al opositor Henrique Capriles) lo obligan a asumir posiciones más radicales frente a sus adversarios, en lo que él podría considerar una situación de supervivencia”, sostiene. Pero en paralelo, explica León a La Tercera, “Maduro está tratando de abrir negociaciones empresariales y con otros sectores de la sociedad, lo que le resta protagonismo en el tiempo al sector opositor tradicional y le puede ayudar en términos de percepciones económicas”. Al mismo tiempo, la designación de Calixto Ortega como encargado de negocios de Venezuela ante EE.UU. marca “otro cambio” respecto de Chávez, afirma Corrales. Desde finales de 2010, ambos países dejaron de tener embajadores. En este nuevo escenario, Maduro ha dicho que “aspira algún día a tener relaciones de respeto, de diálogo entre iguales” con EE.UU. En esa dirección, Ortega apunta que su misión no se limitará a lo comercial, sino que intentará establecer lazos con distintos sectores de la sociedad estadounidense. Para el Departamento de Estado, su nombramiento podría ser un “paso” hacia el establecimiento de “canales efectivos de comunicación”. “A Ortega se le considera uno de los hombres más moderados del chavismo”, concluye el analista del Amherst College.b Por Boris Muñoz os anuncios de Nicolás Maduro tuvieron muy poca sustancia. El cambio más notable -y quizás el que tenga un impacto más inmediato- fue el nombramiento de Nelson Merentes al frente de la cartera de Finanzas. Merentes ya ejerció ese cargo en tiempos de prosperidad y promovió ciertas políticas interesantes a favor de la democratización del capital, aunque muy tímidas e incompletas, puesto que se instrumentaban a través del mercado alternativo de divisas que terminó siendo un anatema para el gobierno. En realidad, el cierre del mercado alternativo de divisas fue una maniobra de distracción para cubrir enormes casos de corrupción y el fracaso del sistema eléctrico. Precisamente, en relación con este punto, se nombró a Jesse Chacón, uno de los ministros favoritos de Chávez que había caído en desgracia por uno de esos casos de corrupción bancaria que involucraba a su multimillonario hermano, Arné. Chacón tiene un perfil de ejecutivo eficiente y de político de sangre fría. De modo que estos dos nombramientos, que implican un giro hacia el prag- Maduro se ve forzado a demostrar una legitimidad contestada en la calle, donde perdió casi 700 mil votos del chavismo. matismo, son realmente lo único destacable del nuevo tren ministerial. El resto es una sucesión de enroques que habla de la imposibilidad de integrar nuevos talentos con perfil de eficiencia gerencial, que es de lo que más adolece el chavismo. Otra novedad, si se quiere, es el paso de Jorge Giordani a una segunda fila, como ministro de Planificación. Los chistes maliciosos dicen que Maduro no podría acabar de un solo plumazo con el Parque Jurásico del socialismo. El anuncio de un gobierno de calle tiene aroma a naftalina. Se ha escuchado muchas veces. Es sólo una variación del tema. Y la prueba es que Maduro anunció que se ejecutaría a través de las famosas tres erres: revisión, rectificación y reimpulso. Finalmente, hay que decir que en realidad lo que está desarrollándose es una carrera loca contra el tiempo: Maduro se ve forzado a demostrar una legitimidad contestada en la calle donde perdió casi 700 mil votos del chavismo. Necesita atraerlos de nuevo, pero con un liderazgo muy endeble y en entredicho. Sabe que si le hubiesen dado una semana más a Capriles, pierde las elecciones sin ninguna discusión. Escritor y analista político venezolano de la revista norteamericana The New Yorker.