Reforma laboral: ¿Quiénes ganan y quiénes pierden?

NEGOCIOS
LATERCERA Domingo 21 de junio de 2015
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COLUMNA
Por Bernardo
Fontaine
Reforma laboral:
¿Quiénes ganan y quiénes pierden?
Una reforma laboral es necesaria, pero la recién
aprobada en la Cámara de Diputados contiene
desbalances que generan importantes grupos
de ganadores y perdedores. Ahora, los
senadores junto a los ministros de Hacienda y
Trabajo tienen que equilibrarla. Lograr que la
reforma fomente los legítimos derechos de los
trabajadores sindicalizados, armonizándolos
Los que ganan…
¿QUIENES?
LOS
TRABAJADORES
SINDICALIZADOS
Uno de cada 8
trabajadores. ¿Por
qué ganan? Porque
tendrán más fuerza
al negociar con sus
empleadores.
con los derechos de quienes no trabajan, los de
los trabajadores no sindicalizados, los de los
consumidores y ciudadanos y el desarrollo del
país, especialmente las pymes.
Los que pierden...
¿QUE GANARIAN?
¿QUIENES?
¿QUE GANARIAN?
La huelga sin reemplazo y el hecho de que el sindicato tendrá todos los privilegios a la hora de negociar entregarán mayor poder de negociación al sindicato. Los trabajadores sindicalizados serán de primera, los no sindicalizados, de segunda.
LOS TRABAJADORES
SINDICALIZADOS
La libertad para retirarse de una huelga a partir de los 15 días (se llama “descuelgue
de la huelga”).
Hoy, los trabajadores en huelga pueden ser reemplazados por trabajadores internos que no estén en
huelga, los cuales dejan de hacer su pega. O externos. En este último caso, el empleador contrata personal específicamente para reemplazar los que están en huelga. Para ello debe pagar al sindicato del
orden de 100.000 pesos por cada trabajador externo y cumplir con otras condiciones que fija la ley.
Hoy, la empresa sufre la huelga porque detiene parcialmente sus operaciones, pero no la paraliza. La
empresa es responsable de seguir funcionando y
asumir los costos para hacerlo. Así , empleadores y
empleados en huelga asumen los costos de la huelga y tienen los incentivos para negociar y alcanzar
un acuerdo.
Las negociaciones colectivas partirán asegurando
como piso las remuneraciones y beneficios que el
trabajador sindicalizado ya tiene. La negociación colectiva será de ahí para arriba.
Cuando el sindicato tenga más del 30% de los trabajadores de la empresa afiliados, podrá acordar
con ella horarios de trabajo flexibles (en la reforma
se llama adaptabilidad laboral). Por ejemplo, en el
caso de una tienda, trabajar más horas las semanas
previas a Navidad y menos en enero.
Uno de cada 8 trabajadores
LOS TRABAJADORES
NO SINDICALIZADOS
La posibilidad de, sin pertenecer a un sindicato, negociar colectivamente con el empleador a través de grupos negociadores. Cuando haya un sindicato sólo éste podrá
negociar (Titularidad Sindical).
Dos de cada 8 trabajadores
Quienes pudiendo no
integran un sindicato
No recibirán los beneficios de la negociación colectiva a menos que el sindicato lo permita. Hoy, a muchos el empleador les da las mismas condiciones negociadas con el
sindicato, pero ellos tienen que pagar el 75% de la cuota sindical.
No podrán negociar horarios de trabajo (adaptabilidad laboral) a menos que trabajen
en una empresa donde el sindicato tenga al menos el 30% de los trabajadores y sólo a
través del sindicato. Por tanto. dependerá de la voluntad del sindicato.
Si los trabajadores sindicalizados obtienen salarios por sobre el equilibrio, por su capacidad de negociación, moverán a las empresas a contratar menos trabajadores. Menos empleo significa menos aumento de salarios y peor desigualdad.
LOS TRABAJADORES
INDEPENDIENTES Y
QUIENES NO VAN A ESTAR
EN SINDICATOS
Cinco de cada 8trabajadores
La reforma no ofrece nada a estos trabajadores, porque están fuera de los derechos
sindicales.
Las oportunidades de empleo y los salarios de estos cinco de cada ocho crecerán menos si los salarios de los sindicalizados suben artificialmente. Entonces, tendrán menores remuneraciones que los sindicalizados y más desigualdad .
Incluye trabajadores por
cuenta propia, de pequeñas
empresas, del Estado
EMPRESAS, PYMES,
EMPRENDEDORES
Las pymes no tendrán adaptabilidad laboral, porque a menudo no tienen sindicatos. Serán
nuevamente empresas de segunda categoría .
El piso en la negociación debilitará a las pymes, porque no siempre su situación puede
mantener los beneficios a sus trabajadores.
La falta de reemplazo en la huelga, porque no tiene espalda financiera para remitir una paralización.
La pyme puede terminar como David contra Goliat. Esto es que los trabajadores de una
pyme integren un sindicato interempresa y la pyme termine negociando con una directiva
sindical mucho más grande que la propia pyme, con condiciones que no tienen relación
con su situación .
CIUDADANOS
Las huelgas sin reemplazo van a significar la paralización de servicios y empresas. Por
ejemplo del Metro, los sistemas de pago como las tarjetas de crédito, buses del Transantiago, el servicio de colaciones y almuerzos en una escuela pública.
La reforma habla de “servicios mínimos” que el sindicato acordará con la empresa mantener operativos durante la huelga. Pero es difícil que haya acuerdo. Eso terminará en múltiples juicios. Es imposible que el Metro funcione parcialmente. ¿Y una lechería puede ordeñar un cuarto de las vacas? ¿Es posible alimentar sólo algunos pollos en un criadero?
QUIENES NO TRABAJAN
Seis de cada 14 chilenos
capaces de trabajar:
500.000 desempleados
3.500.000 mujeres
1.000.000 jóvenes
700.000 adultos mayores
La reforma no propone el trabajo por hora, vital para incorporar al trabajo a adultos mayores, mujeres y estudiantes. ¡Cómo mejoraría la desigualdad, su dignidad y autonomía si
trabajaran por hora!
Es más, la reforma los perjudica. Porque si los trabajadores sindicalizados se vuelven artificialmente más caros y la ley laboral más rígida, las empresas, en todo cuanto puedan, automatizarán procesos comprando máquinas que sustituyan mano de obra. Será más difícil
que ellos encuentren trabajo.