40 O.J.D.: E.G.M.: Tarifa: Área: 137791 543000 32193 € 1274 cm2 - 140% Fecha: 07/03/2014 VIERNES, 7 DE MARZO DE 2014 abc.es/sociedad Sección: SOCIEDAD Páginas: 40,41 SOCIEDAD Una menor da una paliza a otra, lo graban y lo difunden en internet ∑La agresora, de Sabadell, tiene 13 años y no puede ser imputada penalmente por las heridas producidas a su víctima JANOT GUIL BARCELONA E n esta triste historia de final leve –aunque solo por las heridas–, el vídeo que la documenta retrata a todos. A la agresora, una chica de 13 años que golpea y patea la cabeza de otra menor de edad en plena calle, y a las compañeras suyas, que en lugar de auxiliar a la agredida graban la paliza con su móvil y la acaban colgando en la red. Los hechos se remontan al pasado 26 de febrero. En una plaza céntrica de Sabadell (Barcelona), cercana al colegio donde iba, los Escolapios, María G. –una alumna de 13 años que cursa primero de la ESO– agredió a Tatiana, una chica de otro instituto. La agarró, la golpeó y le dio patadas en la cabeza, mientras le tiraba de los pelos y la arrastraba por el suelo. La víctima, que finalmente ha saldado la agresión con heridas leves, sollozaba y gritaba a la vez que intentaba sin suerte protegerse la cabeza. Mientras, al menos una de las dos chicas que presenciaban la paliza, compañeras de la agresora filmaba la agresión con su móvil. No intercedieron para detener a la agresora. A lo más que llegó una de ellas es a decirle: «María, para, por favor, que hay gente!». «Para»... solo porque hay gente. El vídeo de la agresión fue colgado en internet y allí estuvo circulando varios días de enlace en enlace, por las redes sociales. La familia de la víctima denunció el hecho a los Mossos d’Esquadra y estos remitieron el caso a la Fiscalía de Menores. Pero la Fiscalía no podrá hacerse cargo y ha delegado en la Dirección General de Atención a la Infancia y la Adolescencia (Dgaia) de la Generalitat. Por razones legales. La agresora tiene 13 años y, aunque por poco tiempo, no ha alcanzado todavía los 14 años que la legislación establece como edad mínima para ser considerado responsable de sus actos. Es lo que técnicamente se llama inimputable desde el punto de vista penal. Así las cosas, la Dgaia hará un seguimiento individualizado de la agresora, que incluirá entrevistas con psicólogos y educadores sociales, pero no la ingresará en un centro de menores. La dirección del colegio Escolapios de Sabadell evitó ayer hacer declaraciones. Sí trascendió que a raíz del incidente la agresora ha sido expulsada. Precisamente, algunas fuentes señalaron que María G. recaló hace pocos meses en los Escolapios, tras ser derivada allí desde otro instituto debido su mal comportamiento. Una conducta indisciplinada y agresiva. Lejos de arrepentirse, María G. colgó en su Facebook –que ayer fue clausurado– un mensaje en el que justificaba, en un breve escrito plagado de faltas de ortografía, su paliza. Afirmó que si pegó a la otra chica fue porque «tenía motivos para hacerlo», ya que supuestamente la víctima le hizo antes una cosa «que no tiene perdón». Y que hay personas que la apoyan. «Estoy arta (sic) de la gente que se mete en mi puta vida (...), si le pegué fue porque tenía motivos y que se ponga de rodillas», aseguraba en su cuenta de Facebook. Los Mossos d’Esquadra, apelando a la confidencialidad que exige todo tema que implique a menores de edad, no quisieron detallar sus pesquisas sobre los posibles motivos que llevaron a María G. a cometer su agresión. No obstante, sí lo hizo ayer la madre de la chica, Josefa Navarrete, en declaraciones al canal de televisión 8TV. «Problemas psicológicos» De entrada, Josefa afirmó que su hija no está bien. «Es agresiva y tiene problemas psicológicos», confesó entre lágrimas, y señaló que está siendo tratada por una asistente social. Sobre el supuesto móvil de la paliza, Navarrete dijo que se enteró del vídeo por la gente y que al comentarlo con su hija María, esta le habló de un día en el que vino a casa con la cara toda hinchada y luego le habló de Tatiana (la agredida), refiriéndose a que va con una banda de Latin Kings –extremo que los Mossos d’Esquadra no confirmaron– y que se metieron con ella. «Yo no lo denuncié en su día porque soy gitana, pero el acoso hacia mí y mis hijos es una cosa muy diferente. ¿Queréis que se arme la guerra?», afirmó al canal de televisión la madre de la agresora, que denunció además que ha comenzado a recibir amenazas de muerte. A ello habrá contri- Una nueva pelea La madre de la agresora afirma que la víctima es de la banda de los Latin Kings, que pegaron antes a su hija Antecedentes La agresora ya había sido expulsada de otro instituto por problemas de conducta violenta Violencia juvenil Mientras la joven pateaba y daba puñetazos a la otra chica, dos compañeras de la agresora filmaban, sin inmutarse, con su móvil la brutal escena, que luego una de ellas colgó en internet ABC ABC O.J.D.: 137791 E.G.M.: 543000 VIERNES, 7 DE MARZO DE 2014 abc.es/sociedad Tarifa: 32193 € Área: 1274 cm2 - 140% Fecha: 07/03/2014 Sección: SOCIEDAD Páginas: SOCIEDAD 40,41 41 Exhibicionismo en la red Conducción temeraria Proyecto Pilla-Pilla NekNomination Su temeridad podría costarle entre seis meses y cinco años de prisión. Esa es la pena que podría caerle a un joven que subió a internet un vídeo en el que adelantaba a un camión desde el asiento del copiloto mientras bostezaba y pedía a alguien que bajara la música. El joven se entregó ayer en la comisaría de la Policía Nacional de La Verneda (Barcelona), después de que esta pidiera la colaboración ciudadana para detener al conductor. El autodenominado Proyecto PillaPilla estaba formado por un grupo de jóvenes de entre 17 y 22 años de Granollers. Los jóvenes tendían trampas a los gays a los que contactaban en foros y chats haciéndose pasar por adolescentes que quieren tener sexo para quedar con ellos, propinarles una paliza y colgarlo en la web. Cuatro jóvenes murieron en Reino Unido tras participar en una competición de consumo de alcohol a través de las redes sociales. El concurso denominado NekNomination –una contracción de neck and nominate, algo así como, «traga y nomina»– consiste en que el usuario se graba mientras bebe en vídeo, lo sube a internet y a través de Facebook nomina a algún amigo que deberá superar la «gran acción» de su predecesor. buido sin duda el hecho de que algunos tuiteros delataron en la red el nombre de la agresora e incluso adjuntaban enlaces a su cuenta de Facebook, que incluye fotos de la menor y que ya ayer tarde ya no se podía consultar. Ya más conciliadora, y aún entre sollozos, Josefa afirmó que «pido perdón por mi hija, y si la tienen que encerrar que la encierren». La difusión en los medios de la agresión obligó a terciar a la consejera de Enseñanza de la Generalitat, Irene Rigau, quien hizo hincapié en censurar la pasividad de las compañeras de la agresora, que la filmaron en lugar de intentar pararla. «Aunque no ha pasado en una escuela, pido a los jóvenes que reflexionen y que en lugar de gastar energía en grabar la gasten en separar a las personas enfrentadas», dijo la consejera, que ayer contactó con el alcalde de Sabadell, Joan Carles Sánchez, para conocer los detalles del caso. Silencio ante la violencia escolar ANÁLISIS ARACELI OÑATE L as brutales peleas, grabadas y subidas a la red en las últimas semanas en institutos y colegios catalanes, son una ventana abierta a la realidad violenta de nuestras aulas. Ya en 2006 el defensor del pueblo catalán habló de un código no escrito de silencio y del rondo o bullida, considerado «un juego» en el que varios rodean a un compañero para darle patadas y golpes en el suelo a la salida del colegio ó en el patio. Tras la brutal agresión a la niña de 13 años –conocida ayer por su rápida difusión en internet– la consejera de educación de la Generalitat se ha apresurado a afirmar que «no es violencia escolar», como tampoco lo fue «supuestamente» la muerte del joven asesinado en Cuenca «por envidia por su buen rendimiento académico en el módulo de mecánica», ni la de la joven ecuatoriana que, con 16 años, se suicidó en Ciudad Real, o la de Cristina en Elda… El silencio decretado lleva años «instalado» en nuestro sistema educativo al servicio de una mal entendida institución que invierte sus recursos en protegerse a sí misma y ocultar la alta rentabilidad de una violencia que debiera cortarse de raíz y cuyas víctimas son menores de 16 años. Queda por analizar una interesante aportación del informe PISA: los padres desean una escuela segura como un «muy importante» criterio de elección de centro, por encima del nivel académico, de la distancia de la escuela a casa, de un clima activo y agradable, de la buena reputación del centro, de la disponibilidad de ayuda financiera e incluso de los gastos en libros. Con la educación nos jugamos el futuro y la libertad. Incorporar pruebas externas estandarizadas significa dar un gran paso adelante, pero una política de educación sólida necesita identificar las causas últimas del abandono temprano, el absentismo y el fracaso escolar e incorporar una ley integral de prevención de la violencia que garantice una escuela libre de violencia física, social y psicológica. ARACELI OÑATE ES AUTORA DEL INFORME «CISNEROS X» SOBRE ACOSO Y VIOLENCIA ESCOLAR EN ESPAÑA