Instrucciones Sobre la Postura Sentada Existen seis pasos básicos en el proceso meditativo, los primeros tres son de preparación propiamente: La actitud, postura, la respiración y el relajamiento consciente. Los tres pasos restantes corresponden a la práctica misma de esta disciplina milenaria: La concentración, la meditación y la contemplación. Si estás empezando puedes hacerlo sentado en una silla o sillón donde el asiento y el respaldo no estén muy blandos, para que nos ayuden a sostener la postura, la espalda tiene que estar recta, los brazos a los lados apoyados encima de las piernas y los pies descansan en el suelo Después colocar las manos sobre los muslos y balancearse de derecha a izquierda de 6 a 8 veces, procurando disminuir el ángulo cada vez más hasta alcanzar la verticalidad. • Las manos se apoyan cómodamente sobre las piernas, pueden estar con las palmas hacia arriba o hacia abajo, o bien tocándose los dedos o entrelazados, depende de cada persona, como se sienta mejor en su postura. • El tronco de nuestro cuerpo debe estar lo suficientemente recto, pero no muy tieso ni muy rígido, lo suficiente para mantener nuestra columna recta, • La cintura empujará un poco nuestro abdomen hacia adelante y nuestros glúteos irán un poco hacia atrás por este empuje; • Nuestros hombros permanecerán caídos y relajados, así como nuestro pecho;. • La cabeza estará recta y la nariz formará una línea recta con el ombligo, las orejas estarán paralelas a los hombros. • la barbilla no estará levantada sino retrocederá un poco, la boca permanecerá cerrada y nuestra lengua tocará la parte trasera de los dientes para que la saliva que se acumule baje naturalmente hacia la garganta. • Los ojos cerrados o semicerrados para eliminar distracciones visuales. • Las axilas permanecerán un poco ahuecadas para permitir que el tronco se expanda libremente en su movimiento respiratorio, se recomienda no moverse para no perder la concentración, si por el dolor o calambres en nuestro cuerpo tenemos que corregir la postura o deshacerla esto debeer de una forma conciente y en alerta, manteniendo la plena conciencia y la atención en cada uno de nuestros movimientos, que serán muy despacio para no perturbar a nuestros compañeros de practicas No es muy recomendable meditar acostado porque es más difícil mantenerse autoconsciente, la posición acostado boca arriba se utiliza para llegar a un relajamiento más profundo, sin llegar al nivel de meditación. El hecho de conservar la espalda recta, pero no tensionada o rígida, ayuda al proceso de meditación, permitiendo una mayor capacidad de concentración, lo mismo al mantener la cabeza más o menos recta. 1-Savasana Para realizar esta postura, túmbate boca arriba sobre una esterilla o una alfombra, y junta tus piernas y brazos. Luego traza una línea imaginaria desde tu frente hasta los dedos de tus pies. Después, separa tus brazos y piernas de ese centro imaginario, unos 35 grados por cada lado aproximadamente. Tus brazos y piernas deben quedar bien estirados, como en la foto, y las palmas de las manos quedan hacia fuera. A esta postura se la llama también "postura del cadáver", porque cuando la realizamos nuestro cuerpo se libera de la tensión y rigidez, y se vuelve mucho más ligero. Puedes colocar un cojín pequeño bajo tu nuca o tus rodillas para estar más cómodo si lo deseas. POSTURAS SENTADAS: están recomendadas para cuando no queremos quedarnos dormidos. Por ejemplo, al despertarnos por la mañana, en el descanso del trabajo, antes de estudiar, etc. De esta forma, la meditación continuada nos va a permitir una renovación y descanso de nuestro cuerpo sin necesidad de dormir, y a la vez obtendremos mayor claridad mental, mejor concentración, y en definitiva, paz interior y una mejor relación con nosotros mismos y con el mundo. 2-Postura de la amistad Esta postura es muy sencilla y la pueden realizar prácticamente todas las personas de cualquier edad y salud física. Consiste simplemente en sentarse en el borde de una silla firme, separando ligeramente las piernas. Después, dobla tus rodillas de manera que la planta de tus pies toque directamente el suelo, esto es muy importante. Echa tus hombros hacia atrás y alinea tu cuerpo, coloca tus manos en los muslos, mira al frente y cierra los ojos. 3- Cruzadas sencilla Esta postura también es muy sencilla y resulta muy cómoda para los principiantes. Como ves, he cruzado mis piernas de manera que la pierna derecha descansa sobre el pie izquierdo, y viceversa. Mi cabeza, cuello y tronco están bien alineados. Mis manos las coloco sobre las rodillas, y mis ojos están cerrados. También puedes utilizar un cojín o manta doblada para colocarlo bajo tus posaderas. De esta forma, nuestra espalda tomará su forma natural de S y estaremos más cómodos. 4- Auspiciosa Esta postura implica un poco más de flexibilidad, pero muchas personas la encuentran muy cómoda para meditar. Como ves, la planta de mi pie izquierdo está colocado contra mi muslo derecho. Luego, por debajo de mi pie izquierdo, coloco mi pie derecho y la planta del pie la posiciono contra mi muslo izquierdo. Si te fijas, los pies quedan visiblemente ocultos con excepción de los dedos gordos de cada pie, ¿los ves? Al igual que antes, puedes colocar un cojín o una manta doblada para aumentar la comodidad. Alinea tu cabeza, cuello y tronco, coloca las manos en tus rodillas, mira al frente y cierra los ojos. 5- Loto Esta postura es contraria a la postura número tres. Si te fijas, tengo mis piernas cruzadas, pero en lugar de descansar las piernas sobre los pies, lo hacen los pies sobre las piernas. Es decir, el pie derecho descansa sobre el muslo izquierdo, y viceversa. Hay personas que encuentran esta postura muy incómoda, así que si es tu caso, elimínala de tu práctica. Recuerda que la meditación es bienestar y disfrute :) Al igual que en los otros casos, mi cuerpo está alineado, mis manos las coloco sobre las rodillas, y la mirada al frente. También puedes colocar un cojín o manta doblada sobre tus posaderas si lo deseas. 6- De rodillas con cojín En esta postura, me pongo de rodillas, y coloco un cojín sobre mis pantorrillas. Luego, me siento sobre el cojín y ajusto mi postura para alinear mi cuerpo. Las manos sobre los muslos y la mirada al frente. Esta postura junto con la tres son muy utilizadas en principiantes. 7- De rodillas con banqueta Esta postura es igual que la anterior, pero en lugar de utilizar un cojín, utilizo una banqueta de este tipo: Para realizar esta postura, siéntate sobre la banqueta de manera que la parte alta de la banqueta quede por el lado de la espalda, y la parta baja de la banqueta quede por la zona de las piernas. Luego, coloca tus pantorillas por debajo de la banqueta. Las rodillas quedan apoyadas en el suelo. El cuerpo bien alineado, la mirada al frente, y tus manos sobre tus muslos.