Otro inocente en la cárcel: estuvo adentro tres años

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Trama URBANA
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Suplemento de Justicia, Seguridad y Policiales del Diario Hoy en la Noticia
La Plata, martes 14 de febrero de 2006
UNA SEGUIDILLA EN LA JUSTICIA BONAERENSE
Otro inocente en la cárcel: estuvo adentro
tres años acusado de robar un reloj y 15 pesos
Ahora le pasó a un joven de 23 años de La Matanza. Cuando llegó al juicio oral, no pudieron acusarlo por falta de pruebas. No había testigos del
robo y la víctima nunca declaró. Pero un juez y un fiscal convalidaron toda la investigación. Y el presunto ladrón estuvo preso hasta que fue absuelt
“No hay elementos objetivos de imputación delictiva”. Con este intrincado lenguaje judicial para el
ciudadano común, el fiscal de un juicio oral contra
el imputado de un robo de La Matanza expresó,
simplemente, que no había pruebas.
Así, Victor Silvano Ramos, de 23 años, limpió su
nombre. Y quedó en libertad. Lo malo es que pasó
tres años encerrado en comisarías y cárceles. Y un
condimento más para la polémica: según su abogado, la víctima del presunto robo nunca declaró.
Esta nueva historia de un inocente que pierde
parte de su vida tras las rejas empezó en Villa Madero, un barrio de La Matanza.
Víctor había llegado una semana antes de Jujuy,
para probar suerte en la región metropolitana. Y
consiguió un trabajo en un puesto de frutas.
AL CALABOZO SIN PRUEBAS
Casos que se
reiteran mucho
“Se creó un marco de indefensión
jurídica que legitima a priori una
privación ilegal de la libertad”,
dijo el abogado del acusado
A las 23.30 del 2 de febrero de 2003, Víctor esperaba un colectivo junto a su hermano, frente a la estación ferroviaria de Villa Madero. Iban al barrio
porteño de Barracas, porque era el cumpleaños de
su hermana.
Sin embargo, en ese lugar, fue encarado y amenazado por un hombre que lo acusó de haberle robado un reloj y una billetera que contenía 15 pesos.
Tras una breve discusión, un grupo de remiseros
que estaban a pocos metros, detuvieron la pelea y
denunciaron lo sucedido a la comisaría local.
Muy rápidos, los policías llegaron al lugar. Y la
presunta víctima les entregó su billetera, asegurando que instantes antes se la había dado Víctor.
El caso, ya parecía “esclarecido”. El único detalle
sLAS CLAVES
A los tiros en pleno
) centro porteño
El episodio causó un gran
revuelo porque ocurrió en
pleno mediodía porteño. La
gente que transitaba el
lugar se tiró al piso, asustada.
Ningún peatón
) terminó herido
El empresario efectuó 13
disparos. Algunos jefes
policiales consideraron
entonces “un milagro” que
ningún peatón resultara
herido.
“Víctima de una
) agresión ilegítima”
El juez entendió que
“existió una situación de
peligro tanto para el patrimonio como para la vida de
Mainardi. Fue víctima de una
agresión ilegítima”.
es que Víctor, como un presunto ladrón, no ofreció
resistencia ni intentó escapar. Igual, fue al calabozo.
Se la inició una causa por “robo calificado por el
uso de arma impropia”, ya que la presunta víctima
alegó que Víctor lo amenazó con un cuchillo.
El expediente siguió los intrincados caminos judiciales, mientras a Víctor le tocaron los oscuros pasillos de las cárceles y las comisarías. Lo llevaron a la
seccional de Villa Madero y a los pocos días fue procesado con prisión preventiva por la Justicia.
Así lo pidió el fiscal de La Matanza Gustavo Banco, y lo convalidó el juez de Garantías, Marcelo Dau.
Asistido por un defensor oficial, marginado luego
a la Unidad 9 de La Plata, lejos de su casa y de su Jujuy natal, Víctor esperó el juicio.
Finalmente, el jueves pasado, el Tribunal Oral en
lo Criminal 1 de La Matanza, integrado por lo jueces
Joaquín Barrenechea, Néstor Bue Roca y Alfredo
Drochi, lo absolvió.
El abogado de la víctima en ese juicio, Daniel Alfredo Vera Méndez, realizó graves acusaciones contra los encargados de la instrucción.
El letrado se quejó porque dijo que pidió una rueda de reconocimiento que no fue permitida, que sólo existió en la causa un acta policial y que no hubo
declaración testimonial de la víctima en fiscalía, ni
durante el debate oral realizado la semana pasada, ya
que falleció en octubre del año pasado, mientras estaba detenida por otra causa.
Nada entonces se pudo aclarar, salvo la injusticia.
Los siguientes son algunos de los
casos que se conocieron públicamente en los últimos meses,
sobre personas inocentes que
purgan prisión.
zAriel Encina. Estuvo 10 meses
preso por una violación que no
había cometido, tal como surgió
de un estudio de ADN en el que
se comparó su sangre con el
semen del violador.
zPablo Benítez. Pasó tres años
detenido por un robo hasta que
fue absuelto por la Justicia en
junio de 2004, que ordenó investigar a los policías que lo
arrestaron por la presunta adulteración de pruebas.
z Carlos Eduardo y Miguel
Angel Belizán. Son un padre y
un hijo que estuvieron presos
tres años y medio por la violación y asesinato de una joven
en La Matanza, aunque eran
inocentes, tal como se determinó
en un juicio oral. Los pesquisas
confundieron una mancha de
remolacha con sangre.
zSabrina Castañares. Estuvo
presa durante un año acusada de
haber intentado secuestrar a las
hijas de la actriz Catherine Fulop
y Osvaldo Sabatini. Pero fue liberada en marzo último ya que
tampoco había algo en su contra.
Ocurrió en junio de 2004, en
Capital. Un empresario fue
víctima de una salidera bancaria.
Forcejeó con los ladrones y
cuando uno de ellos le apuntó,
la víctima tiró primero. El juez
dijo que hubo legítima defensa
Mató a dos ladrones que lo
asaltaron y terminó absuelto
Un empresario que hace un año y
medio mató a dos ladrones e hirió a
un tercero cuando lo asaltaron y golpearon a la salida de un banco en el
microcentro porteño, fue sobreseído
porque la justicia entendió que actuó
en “legítima defensa”.
Se trata de José Manuel Mainardi,
un experto en tiro de 42 años, que fue
abordado por los delincuentes cuando
salía de una sucursal del Banco Nación de la avenida Córdoba al 800, en
Capital Federal, el 4 de junio de 2004.
La resolución fue firmada por el
juez de instrucción Manuel Gorostiaga y, como el fallo no fue apelado por
los abogados de las víctimas ni por la
fiscalía, quedó firme.
“A mi juicio no hay dudas de que los
agresores se encontraban armados y de
ga en una moto, el que sube último lo
apunta con un arma”.
Momentos antes del episodio, el
empresario había sacado 22.700 pesos
del banco. Al llegar a la esquina de
Córdoba y Esmeralda, dos hombres lo
sorprendieron de atrás, y lo golpearon
exigiéndole la entrega del dinero.
Llegaron a quitarle 10 mil pesos
cuando apareció una moto de “apoyo” de los delincuentes. En el forcejeo, uno de ellos advirtió que el empresario estaba armado y le gritó al otro:
“Matalo, que tiene un fierro”.
Mainardi arguyó que el que iba detrás en la moto le apuntaba cuando él
descargó su arma contra los ladrones.
Uno cayó en el lugar, otro murió una
cuadra más lejos y el tercero fue capturado, con heridas.
Locura porteña. El empresario estuvo 12 días preso y lo excarcelaron
que (Mainardi) fue apuntado con el cañón de una de las armas de fuego” de
los atacantes, “luego de haber recibido
golpes en distintas partes de su cuerpo”,
falló el juez.
El magistrado rescató los dichos de
dos testigos, quienes declararon que
“cuando los delincuentes se dan a la fu-