Juan Manuel Castañeda Reyna - Facultad de Filosofía y Letras

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"La Privatización de Telmex y el neo liberalismo"
Juan Manuel Castañeda Reyna
Facultad de Filosofía y Letras, Colegio de Historia
Introducción
La privatización de la empresa paraestatal de Teléfonos de México fue un
suceso importante en la historia social, económica y política del país. Para la
década de los 70, el sistema Keynesiano ya no era eficiente ante la situación
económica mundial. El aumento de gasto público generaba inflaciones y altas
tasas de intereses, se había abandonado el patrón oro en el sistema monetario, a
demás la crisis petrolera afectaría a todo el sector industrial, lo que propició la
creación de bloques regionales como la Unión Europea. Esto obligo a los países
primermundistas optar por un nuevo sistema económico, el neoliberalismo, que
comparte los fundamentos filosóficos y doctrinarios del liberalismo, pero que se
aparta de las proposiciones del liberalismo clásico, buscando la privatización de
empresas públicas y reduciendo el gasto publico social, acepta que el Estado
puede tener un papel definido en la economía, pero busca su participación
mínima, permitiendo el libre desarrollo de la economía manejado y dirigido desde
el sector privado.
Para la década de los 80 México se había convertido en un país
dependiente del extranjero, la caída del petróleo y la inflación fueron las causas
principales. En este momento México necesitaba una reorientación de sus
políticas económicas además de un replanteamiento ideológico que lo pusiera en
altura internacional. Pero no se podía llevar a cabo esto simultáneamente. A partir
de 1983 a 1985 se dio la primera fase, se inicio el Programa Inmediato de
Reordenación Económica (PIRE) y el Plan Nacional de Desarrollo (PND). Esto
produjo otra reestructuración para disminuir la dependencia del petróleo a la
economía nacional, y se le dio importancia a otras exportaciones. La deuda
externa fue otro factor y México negocio un plan de pago con el banco
Tras esto el gobierno opto por una salida novedosa, en 1987 se había
celebrado el Pacto de Solidaridad Económica donde el gobierno se comprometió a
reducir el gasto público y el proceso de liquidación, quiebra, fusión y venta de
empresas para estatales. El momento cúspide de este cambio fue la venta de
Telmex, que traería con sigo la apertura al sistema neoliberal y la globalización.
La recuperación económica se confirmó elocuentemente en el gobierno de
Carlos Salinas de Gortari y los tecnócratas. Junto con un nuevo sindicalismo
empresarial y la llegada de nuevas tecnologías que revolucionarían las
telecomunicaciones como fibra óptica, teléfono celular y conexión a internet,
Posterior mente se seguiría el neoliberalismo y la globalización con el (TLC)
Tratado de Libre Comercio, entre México, EUA y Canadá. Y el Plan Puebla
Panamá (PPP).
Desde hace más de un siglo, el mundo se ha regido con una estructura
económica capitalista. A un hoy en día se conservan estos conceptos, El Estado y
el mercado son instituciones complementarias. “El Estado es el sistema constitucional y la
organización o aparato que lo garantiza, es la principal
sociedades modernas, el principal instrumento a
institución que coordina las
través del cual las sociedades
democráticas moldean el capitalismo para poder alcanzar sus objetivos políticos. El
mercado es una institución basada en la competencia que, bajo la regulación del Estado,
contribuye a
la coordinación de la economía”. (Bresser-Pereira, 2009). Desde la
década de los 80 el neoliberalismo tomo por asalto al estado y al mercado,
reestructurando el orden económico político y social a nivel mundial.
Neoliberalismo: es una corriente política de pensamiento que comparte los
fundamentos filosóficos y doctrinarios del liberalismo, pero que se aparta de las
proposiciones defendidas por el liberalismo clásico hasta comienzos del siglo XX,
buscando la privatización de empresas públicas y reduciendo el gasto publico
social. El neoliberalismo acepta que el Estado puede tener un papel definido en la
economía, especialmente en cuanto a la conservación de los equilibrios
macroeconómicos y el desarrollo de una limitada política social, pero de igual
forma, busca la participación mínima del estado, permitiendo el libre desarrollo de
la economía manejado y dirigido desde el sector privado.
“Para el neoliberalismo, el estado debía ser un estado mínimo, lo que significaba
al menos cuatro cosas. Primero, que dejara de encargarse de la producción de
determinados bienes básicos relacionados con la infraestructura económica. Segundo,
que desmontara el Estado social, es decir, el sistema de protección a través del cual las
sociedades modernas buscan corregir la ceguera del mercado en relación con la justicia
social. Tercero, que dejara de inducir la inversión productiva y el desarrollo tecnológico y
científico (que dejara de liderar una estrategia nacional de desarrollo); y cuarto, que dejara
de regular los mercados y, sobre todo, los mercados financieros, para que se auto
regularan” (Bresser-Pereira, 2009). Comparte con los liberales de los siglos XVIII y
XIX su misma convicción sobre las virtudes de una economía de libre mercado y
las ventajas de un ordenamiento que estimule el desarrollo libre de la persona
humana en todos los campos de actividad.
A principios del siglo XX, durante el periodo entre guerras y la crisis del 29
en los Estados Unidos. La economía europea había colapsado, los costos de la
guerra habían dejado sin capital a los países implicados. A demás durante la
guerra se habían detenido el comercio entre las potencias y países de economía
dependiente que surtían de materias primas a los primeros, por los que estos
adoptaron medidas de proteccionismo y desarrollaron una pequeña industria de
auto subsistencia para así satisfacer la necesidad de artículos provistos por los
países imperialistas, por lo cual empezaron su propio desarrollo y redujeron el
porcentaje de dependencia, un factor que favoreció a este desarrollo fue la gran
demanda de alimentos por parte de Europa, lo que les permitió enriquecerse y
expandirse.
Dada estas circunstancias, el liberalismo y el imperialismo como tal ya no
podían persistir, Estados Unidos y Japón lograron ocupar los lugares de las
potencias europeas en la economía mundial. Los países europeos ya no tenían
las ventajas y privilegios que poseían antes de la guerra. Además la crisis del 29
en estados unidos surgió debido a la sobre producción, repercutió en la economía
europea, los países preferían retirar sus capitales invertidos en otras naciones
para así mantener en estabilidad la economía de la propia. Añadamos también el
brote de movimientos anticolonialistas e independistas que desfavoreció a las
potencias y se desarrollo la idea de una revolución social como nueva alternativa
en la población.
Los países europeos solo vieron dos opciones para salvaguardar la
estabilidad de cada país. Una era aumentar los impuestos a las clases más altas,
que eran las que dominaban la economía y así satisfacer las demandas de la
clase popular, o la segunda que consistía en qué estado y elite trabajaran en
conjunto y así procurar en satisfacer y controlar las demandas de la población.
Obvio fue que se eligiera la segunda, y de aquí se creó la noción de bienestar
social. Con la reestructuración estatal y las relaciones internacionales, tras la
Segunda Guerra Mundial, se adopto la vía Keynesiana por los países
industrializados, para así evitar el colapso del sistema capitalista ante la tendencia
estalinista y el socialismo, “Toda esta nueva reestructuración del orden mundial tenía
como base, la aceptación de que el Estado debía concentrar su atención en el pleno
empleo, en el crecimiento económico y en el bienestar de los ciudadanos, y que el poder
estatal debía desplegarse libremente junto a los procesos del mercado o, si fuera
necesario, interviniendo en él o incluso sustituyéndole, para alcanzar esos objetivos”
(Arriola)
Esta política que a primera vista parecía hostil a los intereses de las elites,
trajo el llamado periodo de oro en la economía mundial y el comercio internacional,
donde se evitó el derrumbe de los sistemas capitalistas de occidente y donde a
pesar que hubo proteccionismo, se permitió desarrollar miles de inversiones
productivas en cada país en el ámbito global. Lo que permitió un aumento del
capital productivo de carácter mundial y con ello un impulso al crecimiento
económico igualmente generalizado. Todo esto aplacó el carácter hostil que
pudieron presentar las elites dominantes al Keynesianismo, aunque grandes
cantidades de capital que podrían ir a sus bolsillos, fueron a parar a las arcas del
Estado de Bienestar, sus ganancias eran fabulosas, además de que veían como
se perpetuaba su orden social. Bajo este contexto, los países intentarían reactivar
la economía y protegerse de los efectos externos de la crisis de los otros países.
Con esta práctica el estado tomo mayor fuerza tanto política como
económica y social, empleando lo que se conoció como economía mixta, se
desarrollo empresas públicas y creo el salario social incluyendo bienes y servicios
para el ciudadano, con esto pudo crear leyes normas y políticas que lo favorecían
en el control de gobierno, y así dedicarse a acumular más capital y a buscar la
reactivación económica.
Para principios de la década de 1970, el sistema de bienestar social se
había debilitado, por los efectos consecuentes de las medidas políticas
económicas impuestas por el estado. Al incrementar el gasto público, el estado ya
no pudo controlar el crecimiento de la inflación y la tasa de interés, así entro en
crisis disminuyendo la producción y el empleo. A esto se le añade, la crisis del
sistema monetario internacional, al concluir la Segunda Guerra Mundial se realizo
una conferencia monetaria y financiera bretton Woods, en (teoria neoliberal y la
globalizacion), este acontecimiento formaría las bases de la política monetaria. Se
propuso un sistema de control monetario y financiero (1 onza de oro = 35 dólares).
Posteriormente se crearía el Banco Mundial y el Fondo Monetario Internacional,
con el objetivo de impulsar el libre comercio y evitar crisis financieras para lograr
una estabilidad económica. Pero este organismo fue diseñado para los intereses
de economías avanzadas, dejando fuera a los países sub desarrollados.
El abandono del patrón oro dólar fue otro factor importante, en 1971 el
presidente Nixon desmantelo los acuerdos Bretton Woods e impuso una sobretasa
del 10% a las importaciones. Esto significo el fin de la convertibilidad de dólar en
oro (teoria neoliberal y la globalizacion).
La crisis petrolera fue también importante en la caída del estado de
bienestar social y la implantación del neoliberalismo. Se había convertido en un
monopolio de EUA y el precio del petróleo era de dos dólares con un crecimiento
anual del 2%. Tras la ocupación de Israel en los países árabes con petróleo, se
disparo el precio del crudo por diez veces su valor desatando la crisis petrolera y
con ello, todas las empresas que dependían del combustible.
Esto causo la formación de bloques regionales como la Unión Europea que
sería el primer intento de implementar el libre comercio. Con la caída del muro de
Berlín se logro consolidar la UE y se puso al Euro como moneda oficial de dicha
unión. Al inicio de la década de los 80, los países comenzaron a poner en práctica
la teoría neoliberal, de manera que Margaret Thatcher en Inglaterra comenzó con
estas políticas en 1979, en estados unidos con Ronald Reaganen 1980 y Helmut
Khol en Alemania a partir de 1982 (teoria neoliberal y la globalizacion). Y así se
dio la adopción del neoliberalismo al sistema político y económico de la mayoría
de los países con sistema capitalista, se abrió paso al libre comercio y a la
globalización.
Para la década de los 80 México se había convertido en un país
dependiente del extranjero, en especial de Estados Unidos, la caída del petróleo y
la inflación fueron las causas principales. A pesar de la medidas tomadas en el
sexenio de López portillo, que solo fueron efectivas por cuatro años, ya que
tuvieron que lidiar con los vaivenes de la economía internacional y el desequilibrio
de las finanzas publicas nacionales. Durante los 70 y 80 el proyecto estatista se
vio obsoleto ante la realidad política y económica internacional fue la época del
despliegue de lo que se conocería como globalización o mundialización (Medina
Peña, 2000). Para esta época las medidas políticas económicas desgastaban al
país, México necesitaba una reorientación de sus políticas económicas además de
un replanteamiento ideológico que lo pusiera en altura internacional. Pero no se
podía llevar a cabo esto simultáneamente.
Durante el sexenio de miguel de la Madrid se dio prioridad al orden
económico con una solución que consistía en un cambio radical. Esto significo una
ruptura del pasado y adaptación a lo internacional. A partir de 1983 a 1985 se dio
la primera fase, se inicio el Programa Inmediato de Reordenación Económica
(PIRE) y el Plan Nacional de Desarrollo (PND). El PIRE se centraba en una
realidad económica y sus objetivos eran combatir la inflación, proteger el empleo y
recuperar el ritmo elevado de crecimiento. Redujo el gasto público pero la inflación
lo paralizó, aun así permitió las mínimas condiciones para el aparato productivo. El
PND buscaba la recuperación de la economía y un cambio de estructura a largo
plazo. Curiosamente se apoyaron del estado para imponer el neoliberalismo, que
posteriormente lo eliminarían casi en su totalidad en la participación sobre el
mercado.
Gracias a los recortes, la inflación se redujo con algunas consecuencias
aceptables, pero en la segunda mitad del 85 la inflación subió debido al
ablandamiento de las medidas tomadas en el 83 y la crisis petrolera. Esto produjo
otra reestructuración para disminuir la dependencia del petróleo a la economía
nacional, y se le dio importancia a otras exportaciones. La deuda externa fue otro
factor y México negocio un plan de pago con el banco internacional.
El proteccionismo estancaba la producción a un mercado cerrado y seguro,
sin competencia internacional, por lo tanto no se podía combatir la inflación. Ni el
consumidor ni el país salía ganando al preservar privilegios y protecciones
arancelarias que habían perdido su justificación (Medina Peña, 2000). Para el 86
México entabló negociaciones para unirse al GATT (General Agreement on Tariffs
and Trade (Acuerdo General sobre Aranceles Aduaneros y Comercio) en español,
tras algunas acuerdos se dio la unión, pero esto fue en un contexto crítico con la
idea de esperanza y el evidente temor. Para finales del 88 la apertura comercial
funciono eficientemente contra la inflación, las exportaciones no petroleras y la
manufactura habían crecido y se pudo importar alimentos para el abasto nacional,
pero la inflación persistió.
Lo que hiso más vulnerable al país, fue la caída de las principales bolsas de
valores industriales. Tras este círculo de inflación-recesión-inflación, el gobierno
opto por una salida novedosa, en 1987 se había celebrado el Pacto de Solidaridad
Económica donde los obreros aceptaron disminuir sus exigencias de aumento de
salario y prestaciones, los campesinos mantendrían fijos los precios de los
alimento y los empresarios moderaría sus precios y utilidades. El gobierno se
comprometió a reducir aún más el gasto público y continuar con la racionalización
de la administración y el proceso de liquidación, quiebra, fusión y venta de
empresas para estatales (Medina Peña, 2000). La más importante de estas ventas
de empresas estatales fue la de Telmex
Uno de los hitos de aquélla política fue la privatización de Telmex (segunda
empresa más importante del país por el valor de sus ventas y contribuciones al
erario, y la tercera de telecomunicaciones en el mundo) (Anaya Díaz).Si bien se ha
mencionado el caso de la privatización e Telmex desde el punto de vista político,
económico y social. Pero al ser una empresa de estructura muy cerrada, han sido
muy escasos los estudios realizados sobre Telmex, la mayoría de ellos limitado al
punto de vista crítico externo y algunas veces desde lo interno pero de manera
parcial, ya que solo se ha permitido estudiar el interior de la empresa desde el
departamento de planta exterior y algunas empresas afiliadas.
Para la privatización existían diversas opciones que en su momento fueron
consideradas: 1) vender la empresa con el alto grado de integración horizontal que
tenía (y esto con o sin las empresas que formaban parte de su cadena productiva),
2) dividirla en monopolios regionales, y 3) separarla en diferentes servicios
(telefonía local, larga distancia, telefonía inalámbrica, servicios de valor agregado
y red nacional de microondas). Pero, como sabemos, la opción decidida fue la
primera, incluyendo en el paquete a veinte empresas integradas vertical y
horizontalmente con Telmex (como Teléfonos del Noroeste, proveedor regional y
puente internacional con Estados Unidos y la recién creada Radio Móvil Dipsa en
el nicho de los celulares) (Anaya Díaz).
El proceso de privatización de Telmex está lleno de intrigas y opiniones
diferentes, una es el caso del libro publicado del reportero Rafael Rodríguez
Castañeda “operación Telmex: contacto con el poder” que está lleno de criticas
amarillistas, sensacionalistas y confabulaciones del gobierno y la nueva elite que
gobernaría Telmex con Carlos Slim al frente (Rodríguez Castañeda, 1995).
Pero analicemos mejor las otras fuentes, mas neutrales y científicas. Si bien
es cierto resulta un poco extraño la idea de privatizar Telmex. La empresa
telefónica, tenía grandes ganancias las cuales habían solventado muchos de los
gastos públicos desde los 70, tenía la dominación monopólica sobre uno de los
mercados más rentables en el país, tanto en teléfonos, como los derechos sobre
la distribución de los futuros teléfonos celulares (Clifton, 1999), además de haber
implementado un plan para la instalación de una línea de fibra óptica en las
principales 56 ciudades de México, y contar con uno de los sindicatos más
poderosos de México (Clifton, 1999).
Podríamos creer en un acuerdo entre elite y gobierno, pero ante la situación
en que México se encontraba no era tan descabellada la idea de vender la
empresa. Telmex había sido fuerte mente criticada desde hace años por su
ineficiencia y corrupción por parte de su sindicato que se había separado de la
CTM desde 1976, además Telmex no se incluía con los artículos 25° o 28° de la
constitución mexicana, que defendía los sectores estratégicos de la economía
controlada por el gobierno ( petróleo, electricidad, ferrocarriles, satélites etc.).
Hubiera sido infame haber intentado privatizar Pemex en aquella época, el
gobierno se hubiera enfrentado a una protesta en masa que lo habría impedido.
Pero la idea de vender Telmex parecía prometedora, era la segunda empresa más
productiva en México y la opinión pública no vería con malos ojos su venta, con
esto se daría un anuncio a empresarios mexicanos y extranjeros que la reforma
económica era real y seria, y con esto se podría dar inicio a la venta de las demás
paraestatales que serian puestas a la venta (Clifton, 1999).
Para esto era necesario que tanto gobierne, administración de Telmex,
empresarios, opinión pública y sindicato estuvieran de acuerdo con la venta. Los
únicos dos posibles opositores seria la opinión pública y el STRM (Sindicato de
Telefonistas de la Republica Mexicana). El sector social fue el menor en protestar,
salinas solo tuvo que decir que era necesario desasearse de empresas
ineficientes y generadora de pérdidas para hacerlas de nuevo eficientes y
efectivas (Clifton, 1999).
El STRM seria quien daría más pelea para lograr la venta de la empresa,
Francisco Hernández Juárez presidente del STRM, se aliaria con salinas para
poder convencer al sindicato de la venta, este mantendría un silencio absoluto
sobre las noticias relacionadas con la privatización y la instalación del RDSI (Red
Digital de Servicios Integrados) dejando en nostalgia a los telefonistas, ya que
temían perder sus empleos (Clifton, 1999). En ese periodo solo alrededor de 200
empleados fueron despedidos al desobedecer las reglas impuestas por Hernández
Juárez, de no reunirse ni manifestarse. Durante las nuevas elecciones a
presidente sindical, surgieron varias planillas para enfrentare, pero al estar unidas
no impidieron su reelección (Clifton, 1999).
En septiembre de 1989 Salinas y Hernández Juárez
anunciaron en la
convención anual del STRM que la venta no implicaría despidos, se respetarían a
los trabajadores, se daría prioridad al desarrollo tecnológico y eficiente, el gobierno
seguirá siendo el rector de la empresa, la empresa estaría en manos mexicanas y
se le vendería al sindicato 12% de las acciones de la empresa. Ante esto la
tención se desvaneció y los miembros del STRM elogiaron de pie las aclaraciones
del presidente, incluidos los disidentes en contra de la venta (Clifton, 1999).
Con esto se dio la primera etapa del nuevo sindicalismo en México. Para
junio de 1990 se dieron las modificaciones necesarias al capital de la empresa
para poder ser lo suficiente mente baja para ser comprada por empresarios
mexicanos y atraer más ofertas. En agosto de ese mismo año, se pusieron a la
venta el 20.4 % de las acciones mas valiosas de la compañía “AA”, el resto serian
aun propiedad del gobierno o serian repartidas entre la administración de Telmex y
el STRM. En noviembre se presentarían las ofertas de compra en sobre serrado,
los tres grupos interesados en la compra fueron: Gentor, Acciones y Valores y
Grupo Carso.
El 9 de diciembre se anunciaría la oferta ganadora, Grupo Carso y sus
afiliados (Southwestern bell y France Telecom) compro las acciones de la
compañía por 1, 757.6 millones de dólares, las acciones serian repartidas de la
siguiente manera 14.4 % para Carso y 5% para las otras dos (Clifton, 1999). De
aquí se dio inicio a la venta de muchas otras compañías, de estas el 98% serian
compradas por empresarios mexicanos. Telmex prosiguió con su proyecto del
RDSI y el plan de mejoramiento de los 43 días (que tardo 6 meses), el proceso de
compra de las demás acciones concluiría hasta después de 1995, para 1994 se
habían instalado 8.4 millones de líneas, se había completado el RIDS y
Southwestern bell sirvió como conexión entre México y Texas y así empezar la red
internacional. El impacto social o revolucionario que causaría el teléfono celular
seria más de lo esperado a nivel mundial, lo que trajo fuertes ganancias tanto a
Telcel como Telmex, las características de monopolio de Telmex facilitaron la
entrada de México al mundo global, tanto líneas telefónicas, celular e internet
llegaría a zonas rurales y urbanas del país, Telmex lograría ser llamada la
empresa el año.
El STRM se convertiría en el sindicato privado mejor pagado de México,
iniciaría un nuevo sindicalismo donde quedaría disuelta la relación obrero-estado y
renacería una nueva relación, posteriormente se fundaría FESEBES (Federación
de Sindicatos de Empresas de Bienes y Servicios) que uniría a varios sindicatos
entre ellos STRM y propondría una nueva cultura laboral ante los retos del mundo
globalizado, este sindicato tenia orientación empresarial y lograría la unión entre
STROM y SME (Sindicato Mexicano de Electricista) unión considerada muy
peligrosa para el gobierno años atrás, pero este nuevo sindicato conservó mucha
de la estructura del STRM, de hecho los miembros de este sindicato lograron
acomodarse en puestos estratégicos y así controlar FESEBES.
Por parte del gobierno los resultados fueron positivos en tres aspectos: la
contención de la inflación, el crecimiento de la producción y la renegociación de la
deuda externa. Ante el sombrío panorama de la década de los ochenta, la
renegociación de la deuda constituyó un éxito rotundo para el gobierno de Salinas.
Posterior mente se seguiría el neoliberalismo y la globalización con el (TLC)
Tratado de Libre Comercio, entre México, EUA y Canadá. Y el Plan Puebla
Panamá (PPP).
Pero también trajo consecuencias para el gobierno, tras la privatización de
Telmex los tres objetivos del gobierno eran: 1) vender la empresa al mejor postor,
2) que hubiera extranjeros entre los compradores con experiencia y conocimiento
en las comunicaciones, 3) preservar un control. Este último no consiguió, el
neoliberalismo causo que estado y obreros cedieran ante la economía, el
corporativismo presente desde la época de Cárdenas desapareció, el gobierno
perdió el control al permitir el libre comercio, lo que trajo el colapso del PRI y dio
paso a mas autonomía y democracia.
En conclusión, la venta de Telmex fue un punto de partida para un cambio
social político y económico en México. La infracción cedió y mejoro la situación del
país, la implementación del neoliberalismo traería un libre mercado y con ello
nuevas tecnologías, expresiones artísticas y productos de más calidad. Telmex
iniciaría una restructuración de las comunicaciones en México con el celular e
internet, haciendo entrar a la sociedad mexicana a la aldea global, si bien sigue
siendo un monopolio hoy en día, pero eso es debido a su constante renovación de
tecnología, estructura definida y orientación a expandirse, dejado a la
competencia en franca desventaja. En lo político, el neoliberalismo quito el control
del gobierno sobre el mercado, el PRI preservo su poder en la presidencia un
sexenio mas, pero al llegar el nuevo milenio cambiaria de administración con el
triunfo del PAN, de aquí, se impulsaría mas la libre competencia y uno de los
principales afectados seria Telmex. Que actualmente esta siendo atacado por la
ley televisa (Álvarez).
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