PERSONAJES: NARRADOR VENTERO MUCHACHA 1 MUCHACHA 2 LABRADOR CHICO OTROS PERSONAJES QUE LE ACAMPAÑAN: LABRADORES Y LABRADORAS, CHICOS… SANCHO PANZA NARRADOR: Don Quijote va a ser armado caballero andante. Quiere vivir fantásticas aventuras, proteger al débil y demostrar su valor a su amada Dulcinea del Toboso. Se encuentra en el corral de una venta, con los labriegos y labriegas… VENTERO: Traedme el libro donde apunto la paja y la cebada que voy a nombrar caballero a este loco antes de que suceda una desgracia. (Dos muchachas de la venta van a buscar el libro) MUCHACHA 1: No sé para qué querrá el amo este libro… MUCHACHA 2: Déjale, que él sabe lo que se trae entre manos. (el chico se ríe) VENTERO: Poneos de rodillas señor. (todos se ríen mientras Don Quijote se pone de rodillas) VENTERO: Un celemín de cebada a Juan Gutiérrez, seis cuartillos de paja a Doroteo Pérez (se rasca la cabeza) VENTERO: RÁMILA, RÓMULO, REMO, RICTUS, RATO, REMOLINO y ahora… la pescozada (y le da un pescozón) (el chico se ríe) VENTERO: Pórtate bien… y trae la espada. (el chico le trae la espada) VENTERO: PATATÍN, PATATÁN, RATAPLÁN, PIN Y PAN el espaldarazo… (le da con la espada en el hombro, como arman a los caballeros) (todos se ríen a carcajadas) LABRADOR: ¡Callaos que vais a estropear la función! DON QUIJOTE: Os agradezco señor alcalde de este castillo por haberme armado caballero. (y se dan un abrazo) (Don Quijote monta en su caballo y se marcha) CHICO: Ahí va en busca de aventuras. (Todos se ríen a carcajadas mientras sale con el Sancho Panza y le acompaña) POEMA DE DON QUIJOTE Y SANCHO PANZA (CADA NIÑO LEE UNA ESTROFA) Montado en flaco rocino, con lanza y con armadura, cabalga por la llanura, más allá del quinto pino. Va paseando errabundo, decidido y muy sonriente; quiere salvar a la gente y arreglar un poco el mundo. Todos llaman don Quijote a un héroe tan atrevido, que por flaco y escurrido, más parece un monigote. No hay duda de su nobleza, pero con tanta lectura y sus ganas de aventura, ha perdido la cabeza. Y a lomos de Rocinante -según chismea un vecinoha confundido un molino con un terrible gigante. Suspira por Dulcinea, una porquera forzuda, berreona y bigotuda, que tiene fama de fea. Pero él la ve tan bonita... Y a todos hace jurar que es la labriega vulgar una princesa exquisita. Aunque el hidalgo cenceño pase por ser un lunático, a mí me cae simpático porque cabalga en un sueño. Se llamaba Sancho Panza y trabajó de escudero de un famoso caballero: don Quijote de la Mancha. Quería el hombre sencillo, ayudando a su señor, llegar a gobernador y vivir en un castillo. Así que dejó su huerto para salir al camino, y, montado en un pollino, deshacer más de un entuerto. Pero el pobre desgraciado no hacía nada derecho: salía siempre maltrecho y con un ojo morado. Incluso en una ocasión en un bosque silencioso lo invadió un miedo horroroso y se cagó en el calzón. Sancho iba de lío en lío; en la cabeza montones de muy buenas intenciones y el estómago vacío. Mas, pese a tanto accidente, llegó a una gran conclusión: no es tan mala ocupación la de ayudar a la gente.