Empastillados Esteban: Varias consultas han llegado de nuestros oyentes de Tierra Firme y también hemos visto que este tema se esta tratando mucho en varios ambientes sociales, educativos, de la salud, de la familia, y hoy queremos encararlo con Salvador Dellutri, aquí en Tierra Firme. El término que se esta usando cada vez mas es el de estar “empastillados” Salvador. Salvador: Es haber tomado algún psicofármaco, porque siempre se esta hablando de psicofísicos, excesivamente, sin control medico, y se llega situaciones críticas, incluso criticas de salud. Esteban: Por ejemplo, en Internet encontramos la pregunta, muy preocupada, de un amigo sobre una persona muy cercan a él, que dice: “¿Qué consecuencias puede traer el abuso de pastillas? Mi mejor amigo tiene problemas con las pastillas. Cuando tiene algún problema toma Alprazolam o Diazepam, pero con más frecuencia Alprazolam. Se que cada una de sus pastillas es de 10 mg. y una vez le encontré un blister de 10 vacío. (De Diazepam). ¡Se las había tomado todas! Cuando hablamos de eso, me dijo que las había tomado con alcohol. Me dijo que lo tiene todo controlado, pero las pastillas también son drogas, y me da miedo que algo le pueda pasar. ¿Cuales son las consecuencias del abuso de estas pastillas? Gracias de antemano por su respuesta. Información Adicional: Las viene tomando desde hace un año y no he visto ninguna consecuencia, salvo que a veces se confunde y duerme mucho”. Bueno, y una respuesta que llego para esta pregunta de esta persona dice: “Hola. Pues tu amigo sí que tiene un problema psicológico grave además de su tendencia o diátesis a la fármacodependencia. 100mg de diazepam oral es demasiado de una sola vez (no existe alprazolam en presentaciones de 10 mg.) El ya es un adicto, por lo cual muestra tolerancia al efecto y por lo mismo el incremento en las dosis. El mezclar estos fármacos con alcohol, es sumamente peligroso, pues ya por si mismos los medicamentos disminuyen la capacidad de reacción, la capacidad cognitiva y disminución de los reflejos. Al combinarlo con alcohol, los efectos y por lo tanto las reacciones adversas de ambos se potencian al grado de poder causar un accidente, perder la consciencia, caer en shock, coma y hasta paro cardio-respiratorio. La verdad, tu amigo necesita ver a un psiquiatra o ir a un centro de rehabilitación, pues la verdad necesita ayuda y esta poniendo en riesgo su vida. Trata de ayudarlo, pero si no quiere salir de su problema el mismo, me temo que nadie va a poder ayudarlo. Quisiera poder darte un pronostico mas alentador, pero no puedo. Saludos y suerte a los dos.” Salvador: Creo que el medico que contesta es un medico muy cociente de lo que está pasando y que lo contesta con mucha sabiduría. ¿Por qué? Porque nosotros tenemos un refrán que dice “El dinero no hace la felicidad”, pero creemos que las pastillas si hacen la felicidad. Entonces, para todo queremos una pastilla que nos solucione el problema. Esteban: Se hablo durante otro tiempo de “las pastillas de la felicidad”, ¿no? Salvador: Si. Es interesante porque varias pastillas fueron calificadas como pastillas de la felicidad. Recién vos hablabas del Alprazolam, bueno eso fue también como una pastilla de la felicidad, pero hay otras pastillas de la felicidad. El Prozac también fue llamado como la pastilla de la felicidad. En algún momento la pastilla de la felicidad fue el Valium, y muchas otras pastillas. Es decir, que las drogas que se van descubriendo y se transforman en pastillas de la felicidad son peligrosas. Esteban: Ya en su momento Huxley en “Un mundo feliz” hablaba de una pastilla de la felicidad, mirando hacia una sociedad futurista. Salvador: Si, la pastilla se llamaba Soma y se la daban a todos, para que la sociedad fuera una sociedad feliz. Esteban: Una sociedad totalmente empastillada. Salvador: Totalmente empastillada y “feliz”. Habían descubierto, como también nosotros sabemos, de que muchas veces los problemas de angustia se deben a desequilibrios que se producen en la química. Pero en vez de quitar la angustia solucionando el problema que la producía, lo solucionaban cambiando la química del organismo. Lo que quiere decir que el problema subsistía, pero la química del organismo cambiaba. Entonces, la persona se sentía feliz pero el motivo de angustia seguía estando allí. Y ese es uno de los problemas que tiene la pastilla. Nosotros siempre que tenemos un problema buscamos la pastilla salvadora. Y así como en un tiempo para todos los dolores del cuerpo buscábamos al medico para que nos de una pastilla que nos solucionara el problema, en este momento estamos buscando la pastilla salvadora para aquellos problemas que significan problemas psicológicos, problemas emocionales. Recuerdo que un medico decía, era un medico muy pero muy capaz en lo humano también… - hay médicos que son muy buenos en su profesión, pero que les falta a veces la dimensión humana, que la da el tiempo. Este era un medico que era muy humano y mostraba su humanidad. Recuerdo que una vez salió un articulo en una revista que hablaba de los partos en agua, entonces, decía que estos partos naturales en agua facilitaban que psicológicamente el niño fuera feliz, porque no entraba al mundo a través de algo traumático, porque el trauma del nacimiento podía después producirlo una sensación de que el mundo era agresivo y eso cambiaba su psicología. Y él mando una carta que era terrible diciendo, como medico, que lo que acababan de decir era una tontería, y que el problema de los seres humanos y de la infelicidad y de las características psicológicas, no se deben a la forma en que nace la persona, si nace de una forma o de otra, sino a todo el contexto social y todo el contexto familiar, que es la que va formando el carácter de la personalidad. Es decir, estaba desmitificando esos artículos de divulgación, que suelen aparecer en las revistas, que los escribe un periodista medianamente informado. Y no hay nada peor que alguien medianamente informado, que no esta informado del todo. Entonces, esos periodistas toman entrevistas a ciertos médicos y después sacan conclusiones y escriben, y la gente devora porque pasó el conocimiento científico a través de un periodista que sabe comunicar, entonces siente que ese artículo comunica, pero no siempre esta comunicando la verdad. Por eso es muy importante que uno cuando lee acerca de medicina y todo eso, y es, como en mi caso, un lego en el asunto, se fije muy bien quien es el que firma. Si el que firma es un profesional. Yo tengo estas dos, bueno, es defecto del periodismo (el periodismo te deja muchos defectos). En primer lugar no creer en nada sin chequearlo y en segundo lugar cuando alguien firma una nota, sobre todo una nota de medicina y todo eso, preguntarse y averiguar si no está comprometido con algún laboratorio, eso es muy importante, porque a veces hay profesionales que tienen un compromiso con algún laboratorio y para favorecer al laboratorio escriben notas. Es alarmante que eso que Huxley hablaba por la década del 30's, el siglo pasado, en su libro “Un mundo feliz”, donde la felicidad se alcanzaba a través de una pastilla. Y es una novela genial. Es una novela que hice leer a mis hijos, hay cuatro o cinco obras que les hice leer a mis hijos en su adolescencia y juventud, y les dije “es importante”. Esa fue una de las obras importantes, “Un mundo feliz”, junto con “1984” son las dos novelas de anticipación mas serias que se hicieron en el siglo 20. ¿Por qué? Porque no hacían ciencia ficción, es otra cosa. Ellos hacían una novela de anticipación analizando la sociedad en la que vivían. Los personajes que toman el Soma, cuando toman el Soma se sienten feliz, pero lo interesante es como termina la novela, cuando olvidan de tomar el Soma y entran a ver a los “salvajes” (es la sociedad tal cual vivimos nosotros, para ellos éramos los “salvajes”), sienten toda la angustia de la nueva sociedad y desean tener la pastilla Soma para no verla. Quiere decir que la pastilla, planteaba Huxley, es como una forma de evasión de la problemática. Lo que no quiere decir que no tengan un valor. Y esto es una de las cosas que quiero defender. Muchas veces hay personas que necesitan pastillas, porque hay gente que huye de los psiquiatras. Los psiquiatras son médicos, en primer lugar, no estoy hablando de los psicólogos, la gente a veces confunde. Un psiquiatra es un medico y como medico se especializa justamente en estos problemas que tienen que ver con la psicología de la persona. Cuando un psiquiatra recomienda un fármaco lo esta haciendo porque ha comprobado, a través de los estudios que ha hecho en la persona, que son necesarios. Pero marca ciertos límites. Y es muy importante mantener esos límites. Esteban: No sobrepasares. Salvador: Claro. Por eso hay países donde la compra de un psicofármaco se tiene que hacer con una receta especial que queda archivada, para que se sepa quien ha tomado ese psicofármaco y cuanto tomo de ese psicofármaco. Y cuando un médico dice “esta pastilla la tiene que tomar durante dos semanas y nada más”, ese “nada más” es muy importante. Porque ¿qué pasa? Como la gente se siente bien tomando la pastilla porque le baja su nivel de ansiedad, cuando termina las dos semanas trata de seguir y todos sabemos que en Latinoamericana es muy fácil eludir la ley, y que la gente consigue pastillas por todas partes, yo no se como hacen, pero consiguen ansiolíticos por todas partes. Mucha gente que viene a conversar, a consultarme y hablarme de sus problemas, le pregunto si toma pastillas. Me dicen que si, “¿Recetadas?”, “bueno me las receto el medico hace dos años”, “¿Y que le receto?”, “me las receto por quince días”, pero él hace dos años que las viene tomando. Ahora, ¿como la consiguió? Esteban: Claro, ¿cómo siguió renovando…? Salvador: Bueno, hay diferentes métodos, no voy a hablar de estas formas, pero todos encuentran la forma de poder conseguir el ansiolítico que necesitan. Entonces, siguen tomándolo y no se dan cuenta que se transforman lentamente en adictos, que también el empastillamiento es un camino que nos lleva a la adicción. Porque somos adictos a la pastillas, ¿qué diferencia hay entre ser adicto a la pastilla, a la cocaína, a la marihuana o cualquier otra cosa? Las pastillas son un camino abierto a la drogadicción. Escuchaba un medico especialista en esto que decía “en el botiquín de las casas tienen los jóvenes el elemento como para introducirse en la drogadicción” ¿Por qué? Porque a veces los padres guardan los psicofármacos que tiene allí, recetados o sin recetar, y los jóvenes están estudiando, sienten un día que necesitan algún tipo de estimulante y recurren a eso y a lo mejor encuentran la pastilla que le dijo un compañero que hay que tomar en este momento, y la toman. O se sienten muy angustiados frente a un examen y encuentran la pastilla que toma el papá cuando tiene angustia, y la toman. Y después se acostumbran a la pastilla y de la pastilla saltar a cualquier otra droga es un paso. Y este medico decía que ese salto se daba justamente pasando por el botiquín de la casa de la familia. Esteban: Hacemos una pausa en la charla con Salvador Dellutri. Estamos hablando de lo que está pasando con este tipo de procesos que nos marcan un gran problema social. ¿Cómo lo vive usted? ¿Cómo maneja este tipo de cosas para que no se conviertan en un problema en su familia? Ya volvemos. PAUSA Esteban: Empastillados, un término que se ha acuñado para describir lo que esta ocurriendo con muchas personas que toman en forma indiscriminada, podríamos decir, sin control medico, sin un profesional que lo lleve adelante, medicamentos que deberían ser controlados de una manera muy cercana por un profesional de la salud. Y así estamos, con serios problemas al respecto. Salvador: Si, por supuesto. En primer lugar no le tengamos miedo a ir a un psiquiatra, pero después respetemos las normas que el psiquiatra nos manda. Recuerdo que en una época de mi vida estaba abrumado por el trabajo y llegue a un país Latinoamericano, tenía que cumplir con un compromiso en ese país, era ineludible, venia de un grave problema anterior y entonces, se juntaron todas esas cosas, y cuando llegue siento que en un momento me estoy mareando, me mareo. Y me empezaron a girar todas las cosas al rededor mío. Siento que todas las cosas giran, le digo a la persona que me acompañaba en ese momento: “No me siento bien, necesito ver un medico”. Y voy a ver un medico, y el medico me dijo: “Lo que usted pasa es que está estresado por el ritmo de trabajo que ha llevado y justamente el hecho de tener que viajar en avión, instalarse en este lugar y todo eso, acrecienta el estrés que le ha producido esto. Usted tiene que tomar estas pastilla dos semanas, quince días y a los quince días se olvida de la pastilla”. Bueno, yo tome esa pastilla dos semanas y a los quince días cuando quise dejarla sentía que el organismo reaccionaba queriendo la pastilla. Esteban: Reclamaba. Salvador: Entonces, dije “¡No! porque si yo doy un paso mas me hago adicto”. Y ahí pare. Lo que quiere decir que uno tiene que controlarse. Yo tengo mucho temor a todo lo que sea psicofármaco, incluso cuando alguna persona esta tomando psicofármaco, que esa es otra cosa que aprendí de los médicos, y me dice “vengo tomando hace dos años”, le digo “usted tiene que cortar esto, pero no lo corte usted solo, vaya al medico para cortarlo”. Esteban: Para pedirle guía. Salvador: Si, porque esto no corta porque uno quiere cortarlo. Creo que acá necesitamos que los profesionales hablen en serio sobre esto. Profesionales independientes que hablen sobre esto, porque este es un problema muy grave, la automedicación. Y porque siempre se habla de la automedicación, “el consejo que me dio mi amigo es que tome esta pastilla” y a veces siento que le estoy aconsejando a otro que tome la pastilla. Tenemos la tentación de hacerlo porque nos hizo bien tal cosa y uno le dice “mira, estoy tomando esto que me hace bien, a lo mejor a vos te puede hacer bien”. Hay que tener cuidado con eso, eso es ejercicio ilegal de la medicina. Ahora me estoy tomando conciencia de eso. Si yo voy a recomendar un fármaco es ejercicio ilegal de la medicina, a menos que le diga, como le dije hace poco a un amigo, “mira, yo tomo esto. ¿Porque no consultas a tu medico si no podes tomar esto?”. Es un complejo vitamínico simplemente. Creo que con todos los medicamentos hay que tener cuidado, pero con las pastillas mas. Era muy común y es muy común, que los estudiantes cuando llega la época de examen, porque necesitan más tiempo para estudiar, tomen alguna pastilla para mantenerse despiertos. Es muy común eso. Entonces, llega la temporada de exámenes y esta el alumno empastillado. Hay profesores que ya cuando van a tomar el examen, sobre todo cuando son exámenes cara a cara, el profesor ya se da cuenta cuando el alumno esta empastillado y entonces, directamente los viejos profesores que los conocen, le preguntan “¿usted ha tomado esto, esto y esto?”, “Sí”. “Entonces, vuelva dentro de tres meses a dar este examen”. ¿Porque? Porque notan que ese joven no esta en un estado normal, no esta bien. Y seria un error aprobarlo o desaprobarlo en el estado en que esta. Resulta que después de tener esa sobrexcitaron empiezan a tomar pastillas para dormir, porque no pueden dormir. Entonces, tenemos una pastilla para dormir, una pastilla para despertarnos, una pastilla para ser felices y hay que tener cuidado con esto porque esa medicación no soluciona los problemas. Creo que ese es uno de los temas fundamentales en esto. Hay chicos hoy que van empastillados al colegio. Dicen que cuando el niño está disperso, muy hiperactivo… Esteban: Le diagnostican el déficit atencional. Salvador: Si, bueno, ese déficit atencional no siempre es una enfermedad del chico. Hay chicos que son demasiado inteligentes y se aburren en el colegio, no pueden ir al ritmo de los otros, y entonces, como se aburren, buscan hacer alguna otra cosa y se transforman en niños molestos. Esteban: Hablan, conversan, se paran. Salvador: Porque ya el tema ese lo tienen sabido. Entonces, molestan a los demás. Bueno, allí, yo digo ¿necesita el niño una pastilla o necesita el maestro una herramienta pedagógica que atienda la necesidad del niño? ¿Por qué apuntamos a darle una pastilla al chico cuando puede ser que el maestro no tenga los recursos que tiene que tener y la capacidad que tiene que tener? Yo creo en la educación personalizada, creo que cada alumno es una persona diferente y debe ser tratado como una persona diferente. Y que los maestros tienen que pensar que en un grupo humano como el que tienen adelante van a tener algunos que son dispersos, van a tener algunos que son revoltosos, van a tener algunos que son mal educados, van a tener estudiosos, respetuosos, pero va a tener que utilizar para cada uno un método diferente, justamente para orientar la educación. Porque es muy fácil, hoy tenemos clases de chicos de cuatro años donde la mitad esta empastillado, eso yo lo he visto, donde a la mitad le han dado pastillas. ¿Por qué? Porque la maestra, como el chico es muy inquieto, ha llamado a los padres y les ha dicho “miren yo creo que ustedes tienen que consultar con el medico, con el psicólogo de la escuela”. Y el medico de la escuela dice “Tiene esto, que tome esta pastilla” y el padre le da una pastilla todos los días, y la maestra está tranquila porque tiene todo el sector revoltoso controlado por la pastilla, pero cuidado, porque muchos casos de estas pastillas no se ha estudiado el efecto en el tiempo. Hay que tener cuidado. Se han evaluado algunas pastillas 136 semanas, es decir, se evaluó cual es el efecto en esas semanas. Pero, esas pastillas, hay que ver cual es el efecto en diez años. Esteban: Exactamente. Salvador: No al corto plazo, sino a largo plazo, porque se la están dando diariamente, lo que quiere decir que están modificando el organismo diariamente. Por otro lado, tenemos que pensar que los problemas que tenemos en la vida, tenemos que afrontarlos. Hay algunos que son muy estresantes. Yo no digo que no haya momento en que tenemos que recurrir, no a la pastilla, sino a un médico. Pero, cuidado, no podemos querer solucionar los problemas únicamente con pastillas. A la gente se le da paliativos, los paliativos no solucionan los problemas. Hay momentos que los paliativos se necesitan, por eso digo “vaya a un medico”, pero, muchas veces no necesitamos paliativos, necesito enfrentar el problema y solucionarlo. Yo escuche de una persona que fue al medico porque teníaa grandes complicaciones y el medico le dijo “¿Usted que quiere?”, “Yo quisiera que usted me diera una pastilla”, “No, usted tiene que cambiar de vida, si usted no cambia de vida… usted quiere seguir haciendo la misma vida que lo enfermo pero con una pastilla. El camino no es eso, el camino es que usted cambie su estilo de vida”. Le estaba dando una solución, una solución que la tenia allí. Y bueno yo creo que la solución muchas veces es esa. Cuando Jesús estaba sufriendo en la cruz le acercaron vinagre con hiel, era un paliativo para que no sintiera el sufrimiento, y Jesús lo rechazo. Creo que los seres humanos muchas veces cuando sufrimos estamos buscando el vinagre con hiel para que nos solucione los problemas, y el asunto es que lo que tenemos que buscar es una respuesta espiritual para nuestra vida que nos sostenga en medio de esto. Porque problemas tenemos todos, todos pasamos por momentos de tensión, todos pasamos por momentos de angustia, y cuando hemos pasado por graves problemas en nuestra vida, y lo hablo por experiencia, y hemos tendió el sostén espiritual, se atraviesa la tormenta y el problema con calma. Esto no solamente se lo digo, se lo firmo, se lo firmo por la experiencia. Porque he tenido que pasar problemas muy graves, gravísimos, y he vivido momentos de muchísima tensión, pero hay algo que es la paz que da Dios, que no es la paz que dan los hombres, que puede sostenernos en medio de esta problemática. Y yo le digo, mire, busque en el equilibrio espiritual de la presencia de Dios en nuestra vida pueda realmente usted seguir adelante a través de los problemas y no mediante la pastilla. En la antigüedad, los hombres antiguos no tenían pastillas y pasaban por muchos problemas, pero ellos manejaban, no solamente su mundo emocional, sino su mundo espiritual. No solamente la relación con el prójimo, sino la relación con Dios en tal forma que seguían manteniendo su equilibrio en medio de los problemas. Y eso es lo que nos falta, nos falta relacionar nuestro mundo espiritual con Dios para que en medio de los problemas podamos tener la calma que necesitamos.