Majorero3 - Gobierno de Canarias
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Capítulo III: BUSCANDO AL PERRO PRESA Cuando nuestros amigos llegaron a Gran Canaria, en lo primero que se fijó Majorero, es en que allí había muchos más árboles que en Fuerteventura, de donde él venía. - ¿Alguna vez habías visto tantos árboles? - preguntó Majorero a su amigo Alisio. - Sí - contestó Alisio – Yo viajo mucho por las Islas Canarias. Todas son muy bonitas y diferentes, y cada una tiene su encanto. Vamos, busquemos a Presa, el perro canario. - Si vamos - contestó Majorero. Cuando Majorero y Alisio buscaban a Presa, vieron a un pajarito amarillo posado en la rama de un árbol cantando de alegría. Majorero le preguntó: - Hola Pájaro Canario, soy Majorero el perenquén. Mi amigo Alisio y yo estamos buscando al perro Presa canario, ¿sabrías decirnos dónde está? - Sí, con mucho gusto - dijo el pájaro canario – pero… ustedes no son de por aquí, ¿verdad? adivinó el Pájaro Canario. - No, yo soy de Fuerteventura y mi amigo Alisio es de todas partes - respondió Majorero. - Pues miren, el perro Presa canario está en un lugar llamado Roque Nublo, no tiene perdida ya que es el lugar más alto de la isla de Gran Canaria. - Gracias, has sido muy amable. - De nada, que tengan mucha suerte. Majorero y Alisio tomaron rumbo al Roque Nublo en busca del perro Presa canario. Al llegar, Majorero el perenquén se quedó asombrado de la belleza de aquel paraje: - ¡Qué bonito lugar! –exclamó boquiabierto Majorero. - ¿A que es bonito? - añadió Alisio. Majorero estaba maravillado, impresionado, fascinado. De repente, una voz ronca y grave se acercó diciendo: - Observa Majorero, esa gran roca de ahí es el Roque Nublo y si te fijas bien, a lo lejos verás una gran montaña llamada El Teide - dijo el perro Presa canario. - ¡Hola, tú tienes que ser el perro Presa canario! - Pues sí, soy yo, encantado de conocerte. El Pájaro Canario me ha dicho que tú y tu amigo me estaban buscando. ¿En qué puedo ayudarles? - Pues mire señor Presa, es que he perdido mi cola y quizá usted pueda decirme dónde encontrarla. – Explicó Majorero. - Pues la verdad es que no tengo ni idea, pero una vez oí un caso parecido y fue Chicharro, el pescado, quien ayudó a aquel otro perenquén. Él se encuentra allí, donde está esa gran montaña que casi llega al cielo, en una isla llamada Tenerife. - Muchas gracias señor Presa canario, me ha sido de gran ayuda. - No hay de qué amiguitos. Vuelvan pronto por aquí y denle muchos recuerdos a Chicharro el pescado. Entonces, Alisio remontó de nuevo el vuelo con el pequeño Majorero, aunque esta vez en dirección a Tenerife, en busca de Chicharro. Cruzaron de otra vez el océano Atlántico y ¡TROCOPAFF!, otro aterrizaje forzoso, pero allí estaban, en la isla más grande del archipiélago canario. Chapitre III A LA RECHERCHE DE PRESA LE CHIEN Lorsque nos amis arrivèrent à la Grande Canarie, ce que Majorero remarqua tout de suite, c’est qu’ici il y avait beaucoup plus d’arbres qu’à Fuerteventura. - As-tu déjà vu autant d’arbres ? - demanda Majorero à son ami Alisio. - Oui - répondit Alisio – je me promène beaucoup dans toutes les îles des Canaries. Elles sont toutes très jolies et différentes et chacune à son charme. Allons, il faut retrouver le chien Presa ! - D’accord - répondit Majorero. Alors que Majorero y Alisio recherchaient Presa, ils virent jaune posé sur la branche d’un arbre un petit oiseau chantante joyeusement. Majorero lui demanda : - Bonjour Petit Canari, je m’appelle Majorero le gecko. Mon ami Alisio et moi sommes à la recherche du chien Presa. - Pourrais-tu me dire où le trouver ¿ - Oui, avec plaisir - déclara le petit oiseau – Mais… vous n’êtes pas d’ici n’est-ce pas ¿ - devina Petit Canari. - Non, je viens de Fuerteventura y mon ami Alisio es de partout répondit Majorero. - Et bien voyez-vous, le chien Presa vit dans un endroit appelé Roque Nublo, c’est le lieu le plus élevé de l’île de la Grande Canarie. - Merci, de ton amabilité. - De rien, je vous souhaite bonne chance. Majorero et Alisio s’envolèrent à destination de Roque Nublo à la recherche de Presa le chien des Canaries. En arrivant, Majorero le gecko fut abasourdi par la beauté du paysage: - Quel endroit magnifique ! s’exclama-t-il bouche bée. - C’est vraiment joli n’est-ce pas ? - ajouta Alisio. Majorero était émerveillé, impressionné, fasciné. Soudain, ils entendirent une voix nasale et grave qui leur dit : - Regardez , ce grand rocher là-bas c’est le Roque Nublo et si tu l’observes bien, au loin, tu verras une grande montagne qui s’appelle El Teide – leur déclara Presa le chien des Canaries. - Bonjour, tu dois être Presa le chien des Canaries ! - Oui en effet, c’est moi, enchanté de faire votre connaissance. Le Petit Canari m’a annoncé que toi et ton ami étiez en train de me chercher. ¿ En quoi puis-je vous aider ? - Et bien voyez-vous Monsieur Presa, j’ai perdu ma queue et peut-être pourriez-vous me dire où la retrouver. – lui expliqua Majorero. - En vérité, je n’en ai aucune idée, mais j’ai déjà entendu parler d’un cas semblable. C’est Chicharro, le poisson, qui vint en aide à un autre gecko. Il vit , où il y a une montagne qui monte presque jusqu’au ciel dans une île nommée Tenerife. - Merci beaucoup Monsieur Presa , vous m’avez été d’un grand secours. - Pas de quoi, petits amis. Revenez vite ici et donnez toutes mes amitiés à Chicharro le poisson. Alisio et le petit Majorero s’envolèrent à nouveau : Direction Tenerife, à la recherche de Chicharro. Ils passèrent à nouveau au-dessus de l’océan Atlantique et BADABOUM ! Un autre atterissage forcé, mais cette fois-ci sur la plus grande île des Canaries, l’île de Tenerife.
