INTRODUCCION Planteamiento: La literatura latinoamericana desde epocas muy tempranas se sensibilidad ha a caracterizado la situacion por una gran geo-hist6rica del continente; hecho Que se evidencia en las Cronicas ~ ~ ~ y Cartas de Co len , Bernal 01 az, Hernan Cortes y otros cronistas y luego en los textos romanticos y post-independentistas. America Latina generalmente se ha nutrido de la ideolog{a europea QUe hab1a concebido este continente como "el Nuevo Mundo" aun desde antes de su hallazgo verdadero; America Latina se desenvolv{a hacia una direccion para cump 1 i r con a Que l 1a imagen de 1 "Nuevo Mundo" ; d i cha imagen, consecuencia de un paradigma utopico, blbl ico, epico y caballeresco se iba formando a traves de los siglos. Pero mientras la representacion de America Latina se nutr{a de ideolog{a y lenguaje europeos, la esencia americana se iba perdiendo. La 4 rep resentac ion de 1 cont i nente como" Nuevo ( mundo deseado, sonado, "" , . mas arbitraria; ., la representaci6n y la esencia americana, tanto m~s I esta mas an he 1aba y de c;uanto se_ "carente" de paradfsiaco, Historia) se iba haciendo mas Mundo" la 1ntegrac1on ~ aquella se distanciaban. y Nuestra lectura del texto rulfiano se dirige hacia la observacion en la representacion del espacio y la apreciaci6n de tal representaci6n con todos sus dualismos opuestos/complementarios dentro del marco de la literatura de resistencia contra incorrectas representaciones las americana en los textos espacio , Sera una del anteriores. lectura del espacio rulfiano en contra del espacio , . , . utop1co, b{blico, ep1co y caballeresco de los textos de la romanticismo; conquista, la colonia el y sera un ; ntento de ver cOmo .. se reconcilia" tal arbitrareidad en la representacion del continente para aprovecharse ;' de ella como metafora de la real idad americana, en general, y mexicana,en particular. De este modo entramos, pues, en la euestic:S'n del lenguaje. Lo que se va a articular casi cuatro 5 siglos despu~s en cuanto a la arbitreidad del signo .. I lingu1stico (la diferencia saussureana y lo deferal de Derrida), americana. as unto ya era una vieja experiencia La atencion reciente de Europa en este . / qu1za es consecuencia de su repent ina conciencia,hacia el siglo XIX,de no ser yael gran centro de la potencia mundial. La gran torre de ; Babel con que hab1 a sonado e 1 europeo se hab1 a empezado a derrumbar desde que surgieron voces resistentes al colonialismo, voces que hablaban el mismo idioma que les impusieron desde hac1a tres siglos, voces de disidencia que se nutr1an de las ideologfas europeas para resistir la dominacion europea con un lenguaje europeo. , . Marco cr1t1co: Barbara Harlow en su libro Resistance Literature 1 cuenta la historia folklorica nigeriana de como 1a tortuga 11 ego a , tener e 1 caparazon agrietado. Se dice que una vez la tortuga, conocida por su astucia, convencio a los pajaros para que lo. Barbara Harlow, Resistance Literature (London: Methuen, 198 6 N llevaran donde estaban sus companeros para asistir a una fiesta en el cielo. ". Los paJaros, entonces, le ofrecieron unas plumas y se pusieron de acuerdo ~ en que deber1an aceptar cada uno de ellos un nuevo nombre para dicha ocasion. La tortuga se nombro "vosotros" y per esta manipulacion consiguio la mejor parte de la comida y del vine de las palmas servida en la pajaros,enojados, fiesta le del quitaron cielo. las Los plumas y la abandonaron muy lejos de la tierra, en el cielo. El lore entonces, le prometio llevar la noticia de su condicion a su mujer para que ella arreglara un lugarcillo blando donde la tortuga se cayera. El lore, al contrario, cambia el recado de tal manera que la tortuga, en fin, se cayo sabre objetos duros y puntiagudos. El medico del pueblo tuvo que pegar las piezas rotas de la cascara y as1 es como la tortuga tiene una caparazon tan rasgado. Harlow lee en esta historia folklorica una significacion pol {tica de dominaci6n per manipulacion del lenguaje y, luego, la resistencia per el mismo lenguaje.: Barbara Harlow, pp.xiv-xv. 7 Tortoise, in such an a 11 egory, represents colonial power. He is articulate and succeeds through his abi 1 i ty to manipulate 1anguage in controlling and subjugating the birds ..... The birds are at his mercy and remain his victims until they in turn learn to use the very weapons which tortoise has wielded against them ... this happens because the parrot, legendary for his proclivity to repeat just what he has heard, has overcome this stereotypical image and learned to use language to his and the birds' own ends. He has altered 1he tortoise's message to his wife. Para Europa ya era hera de verse a s1 misma y mtar la "diferencia" con que no hab1a contado antes en su ansia de percatar el Nuevo Continente por las estrechas mirillas renacentistas. Toda la epistemolog{a renacentista se basaba en fiarse de las analog{as y similitudes; s6lo en la alta epoca renacentista barrocas de se comenz6 diferencias, a de resaltar cuestiones arbitrareidad y de representacion incorrecta. En una elaboraci6n de dicha problematica en su libro The Order of Things, Michel Foucault observa Barbara Harlow, p.xv. que crisis tal manifestado . todos en / representac1on de niveles los hab1a se de la epistemolog{a renacentista-barroca. 4 Foucault observe, por ejemplo, que la econom{a europea del siglo XVI solo se basaba en el valor de la sustancia monetaria; problema que se hizo mas por acuciante los sucesivas y el influjo del ; eran comodidades devaluaciones oro americana en Los meta 1es econom 1 a europe a. monedas de efectos as{ usados para como la 1 as signos de riqueza. Las dos funciones del dinero, la de medir 1as cant i dades i ntercambi o, y la de sustituir para e1 se basaban en su rea 1 i dad materia 1. Sin embargo, con la vuelta del clasicismo cambio la situaci6n. Se empez6 a usar monedas de papel valor est a de representative y moneda de papel " solo y el era no esencial. 5 4Michel Foucault, The Order of Things: An Archeology of the Human Sciences (London: Tavistock, 1970), p.60. 5Foucault, p.180. 9 Al leerse esta experiencia del divorcio entre el signo y su significacion dentro del marco mitico europeo de la palabra, el ,. lenguaje en su forma original sol1a ser perfectamente transparente: las pa 1abras y 1as cos as que representaban eran 1as mismas porque Dies las ere& simu1t~neamente. , Sin embargo, despues de Babe 1 , e 1 1enguaj e divino se dividio y se convirtio en muchas lenguas humanas y la similitud original de las palabras y las cosas que representaban se perdio. En el siglo XVII el signo ya se hab{a alejado tanto de su representacion que hubo una confusion enorme entre , aquel y· , este de tal manera que ambos se perdian busc~ndose o se buscaban, perdiendose. El mejor ejemplo literario de esta perdida/b~squeda se nota en el Don Quijote. Don Quixote is not a man given to extravagance, but rather a diligent pi 1 igrim breaking his journey before all the marks of similitude. He is the hero of the same ...• His who 1e beeing is nothing but language, text, printed pages, stories that have already been written down. He is made up of interwoven words; he is writing himself, wandering through the world, among the resemblances of things .•.. Don Quixote reads the world in order to 10 proove his books ... His whole journey is a quest for similitude .... Flocks, serving girls and inns become more the 1anguage of books to the i mpe rcept i b 1e degree to which they resemble castles, ladies and armies a perpetually untenable resemb 1ance that transforms the sought for proof into derision and 1eaves the words of the books for ever hollow 6. • I Perc Don Quijote es tambien una negac1on de esta misma postura de escritura realizada por Quijote. Writing has ceased to be the prose of the world; resemblances and signs have dissolved their former alliance; similitudes have become deceptive and verge upon the visionary or madness; things still remain stubbornly within their ironic identity: they are no longer anything but what they are, words wander off on their own, without content without resemblance to fill the i r emptiness .... , 1edged in the yellow pages of books, the signs of 1 anguage no 1onger have any va 1 ue apart from the slender fiction that they represent. The written word and things no 1onge r resemb 1e one another, and between them, Don Quixote wanders off on his own. 7 6Foucault, The Order of Things, p-46. 7Foucault, The Order of Things, p.47. Don 11 Veremos cdmo lo mismo oeurre en las Cronicas del "descubrimiento', la conquista y la co1onizaci6n, la Independencia y 1a post-Independencia; todos los eventos c 1aves de 1a expe r i enc i a 1at i noame r i can a constituyen la bJsqueda de ~similitudes" de lo que se percib{a como el "Nuevo Mundo". La naturaleza americana esta (des)articulada conforme a motives europeos de utop{a epica, blbl ica, arcadfaca e ideolog{as positivistas y rominticas._ . "' Argumen t ac1on: .En America Latina, como quiza en ninguna otra parte del mundo, la expresion art1stica se ha entregado obsesivamente a la articulaci6n de su condicion geof{sica. de 1 Gont i nente, La concepcion m1tica europea e 1 "Nuevo Mundo·; s i empre va a evadir su construccion inicial vinculada con el " Para1so, Tierra prometida u Otro mundo. El buscador de este "parai'so"/"otro mundo", el viajero epico clasico, siempre estara lejos de su destine y se hallar~ a s{ mismo perdido en un "laberinto" / del cual no le sera posible salir. /' analoga a la "realidad" de De esta manera, la experiencia del aventurero europeo con la Naturaleza americana, e1 12 paisaje en el texto rulfiano ahnela poner en crisis las certidumbres del motive clasico del buscador del viajero "otro mundo" para romper las falsas Consigue construcciones europeas. desarticular este "otro mundo" mostrando su "i ncons i stenc i a", t' ~ "inesencialidad" y su "desorden". As1 se vera que . , e 1 pa i saje de 1 texto ru 1 f i ana no es autonomo, n 1 tampoco el viajero, buscador del "otro mundo". Muy al contrario son construcciones textuales o quiza contra -textuales paradigmas para que funcionan "culturales" resistir, (o (re)crear con todos sus "contra-culturales") y (des)articular otra historia, otro discurso y otra lectura. Quiero dejar clara que no ha side tal lectura con forme la a deconstrucci6n derrideana 0 foucaulteana, aunque los he citado frecuentemente, puesto que consistir{a en que el texto que encaja la . ~ representac1on dicho texto al cuestiones de del mismo autor(a. paisaje mexicano tiempo que se Mi postura anulara anular(an no es tan nihilista; al contrario, es una lectura que percibe la representacion del consciente y autorial paisaje como un esfuerzo de resistencia a la representacion euro-centrica y euro-ideologica del 13 continente en las Cronicas y otros textos de la 1 iteratura latinoamericana... tras haber referencial, liberado han el dado Los deconstructores, lenguaje plena de su autoridad poder a las palabras. Sostienen que el sujeto humano no expresa ni comunica y es solo el lenguaje el que lo hace. , /, 1 E1 ' yo ' h umano no es un ente autonomo et1co-mora ni espiritual, lingu{stica. complicidad / sino solo una construccion Tal postura, claramente, se nutre de nazista, y solo un europeo ex- ~ colonialista podr1a mantenerla ,ya que se salva de la responsabilidad de la consecuencia posiciones ideologicas fascistas por otra, sus por una parte, y disidencia estan convenientemente descartadas por ser vanas. Si el las voces de de sujeto es una construccion lingu{stica, por una relacion entonces dialectica/complementaria, que tanto apoyan los mismos deconstructores, debe ser verdad tambien el caso contrario, que el lenguaje tambien tiende a ser una construccion del sujeto. As{ la autor{a, segun mi modo de ver, es algo con lo que hay que con-tar seriamente . .._.... As 1"' , por una parte mi trabajo trata de 1 as representaciones textuales que no concuerdan con lo 14 que representan, y por tambi~n otra, de las cuestiones de autor1a que quiz~ nos resuelvan las relacionadas dud as las con incorrectas E1 mundo occ i denta 1 representaciones textuales. muy frecuentemente ha apreciado la literatura como pol{tica e historicamente lectura de inocente. ., representac1on la Nuestra paisajista en los textos rulfianos intenta desafiar tal postura. En este trabajo me he fijado en los dos textos narratives de Rulfo El llano en llamas~ en 1953, y PAramo 9 Pedro publicado publicado en 1955. Hist6ricamente estan situadas en el per1odo de la post-revolucion, 1930. ~ Eran anos es deci r, en industrialmente. exaltaron la historia Revoluci~n de 1910. ~ que Los ,..J entre los a nos . Mex1co pol1ticos del gran se y 1920- desarollaba la ex; to" prensa de Pero esto marginb la Reforma Agraria por lo que casi llego a estancarse. consecuencia vemos 1a una multitud de gente Como que 8Juan Rulfo El Llano en llamas, ed. Carlos Blanco Aguinaga Madrid: catedra, 1985). 9Juan Rulfo, Pedro Paramo, ed. Gonzalez Boixo (Madrid: catedra 986). 15 abandono provincias rurales a favor de zonas urbanas. ' '/ N Est a s 1tuac 1on de quedaron desolados y 1os pequenos campos que abandonados constituye el espacio por donde se articula el texto rulfiano. Oicho texto encaja, principalmente, temas rurales como caciquismo, el campesinos, el como la ' 1 la explotacion de los terrorismo, la calamidad natural, , ' "' la sequ1a, Crl S1 S socio- ~ nundac 1' on o econ6mi ca etc. espacio La representac ion pa i saj i sta de 1 ' , siempre se mantiene evocativa y Jamas aparece como algo solido que tenga fronteras: solo se nota una ambientacion, suj etos vi ven; en fin, una atmosfera que los no es que sea tanto un espacio "donde" como un espacio por" o "con". Aunque ya se ha hablado mucho sobre e1 aspecto espacio-temporal de los textos rulfianos, todav1a no se ha estudiado nuestra lectura de este aspecto. Quisiera que se apuntara que he preferido el titulo "paisaje" y no espacio" puesto que me ocupo deta 11 adamente de l a cuest ion de rep resentac; on. Oonde uso "espacio" me refiero a la condici&n esencial geo-f1sica del continente mientras que el 16 "paisaje" consiste en la articulacion lingu{stica o representacion textual Aqu{ de dicho espacio. tambien cabe aclarar que me he limitado solo a los dos textos narratives de Rulfo tambien por la misma causa; "El gallo de oro" era un texto para la representaci6n cinematografica y evidentemente se aprovechaba de otros motives. Manuel Duran, C.B. Aguinaga, Joseph Sommers, A. Dorfman, Jean Franco Mariana Frenk han escrito y varies art1culos sobre el problema de tiempo y espacio en las obras rulfianas. Carlos Fuentes ha senalado que el paisaje en la novela Pedro Paramo dispone de dos caras que corresponden a las dos caras de Mexico infernal Gal indo ha y paradfsiaco. luis Ortego e 1aborado este dua 1 i smo de 1 pa i saje rulfiano en que se habi'a fijado Fuentes. 10 La tes is consta de ~ cuatro cap1tulos. El primer capi'tulo expone las motivaciones europeas de la construccion del Nuevo construcciones miticas, historicas Mundo y y las literarias de un mundo deseado, utopico que nutri'a la mentalidad r biblioaraf{a. 17 El renacent i sta en cuanto a 1 espac i o. segundo cap{tulo se fija en la construcci6n romantica del continente en general y de Mexico en particular con un enfoque especial en la concepcion de otro Mexico por los ideologistas de la Revoluci6n mexicana. Luego trata de como la lectura de las cronicas por Rulfo fueron constituye un y motivadas / angulo I como tal lectura intertextual de representac ion pa i saj i sta de su texto. , c~p1tulos presentan a la vez los la Ambos fallos, las carencias y ·las mentiras que la representaci6n del continente encubr{a. , El tercer cap1tulo explora como la representacion espacial del texto El llano en llamas corresponde a las carencias y las mentiras de la deseada e idealizada tierra de "' . y as1, llega a constituir el propio lenguaje; Mex1co es un lenguaje creado por una esencia geo-ffsica que empuja, se burla de o simplemente se rinde a la palabra. El cuarto sera una relectura del espacio representado por Comala en Pedro Paramo. ver "' como los motives b{bl icos, Intentare chtsicos y renacentistas quedaron derrumbados boca abajo para articular la otra historia de America Latina.