Proyecto de Vida Matrimonial - Prevención de Riesgos Matrimoniales

Unidad 0. Metodología. Instrucciones.
Proyecto de Vida Matrimonial
Unidad número 0-1
Metodología de trabajo y recomendaciones
INTRODUCCIÓN Y PRESENTACIÓN
Como pareja, en este taller váis a elaborar un proyecto de
vida en pareja, VUESTRO PROYECTO.
El papel del instructor, formador, orientador, monitor
(…etc) será el de ayudaros a este trabajo
. Puesto que este es vuestro proyecto lo diseñaréis de
acuerdo con vuestras necesidades, sentimientos, valores,
creencias…
Una brújula para
vuestro matrimonio
Entre las dimensiones de la vida de la pareja que pueden tratarse en este taller, son
recomendables las siguientes:
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La presencia de Dios en el proyecto de vida matrimonial
Yo, tú, nosotros. La relación de los esposos. La comunicación.
Los hijos
Las familias respectivas
La economía
Diversiones y vacaciones. Las amistades
La proyección externa de la pareja: compromisos extrafamiliares, fecundidad.
Buscar ayuda fuera de la pareja (prevención y superación de crisis familiares).
La sexualidad
El trabajo profesional
Envejecer juntos
Otros (que vosotros podéis estimar como oportunos para el taller)
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Todas estas áreas podrán ser distribuidas y secuenciadas para su
estudio y tratamiento en el taller entre los monitores y los
participantes.
E STRUCTURA
Veamos seguidamente cómo está estructurada el taller.
La carpeta, al igual que el proyecto, tiene un carácter dinámico.
Se pretende que este proyecto sea VUESTRO PROYECTO.
Como es vuestro proyecto, este es único. De aquí que cada
pareja aporte su propia carpeta. La carpeta será de dos anillas
para facilitar el archivo del material. Esta carpeta se irá
completando con las fichas (con dos taladros, como esta que
tienes en tu poder) que se irán entregando conforme con
vuestra participación en el taller.
Al terminar el taller, con cierta periodicidad, recibirás más
fichas con contenidos de actualidad, revisiones, ampliación del
material… etc.
El objetivo es que la carpeta sirva como manual de consulta y de
seguimiento de
VUESTRO PROYECTO DE VIDA EN PAREJA.
LAS COLUMNAS
Todo edificio está afirmado sobre unas columnas o pilares
que sostienen toda la estructura. De la misma manera, cada
tema está basado en uno o varios principios generales de
enseñanza y aplicación que juntos buscaremos, primero como
individuos, después como parejas y finalmente como grupo.
Las "columnas" de cada tema marcan el objetivo de la sesión
y hacen que el coloquio o el buen ambiente en el grupo no se
deriven en otras cuestiones secundarias o paralelas.
Siempre que "alguien se pierda" en la discusión puedes acudir
a las "columnas" para retomar el hilo y seguir participando
plenamente en la sesión.
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INVESTIGANDO
Es la parte introductoria del tema que nos ayudará a
concentrarnos. Seguramente la pareja acudirá a la reunión con
muchas otras ideas en la mente, preocupaciones y, quizá,
después de discutir con su cónyuge sobre detalles domésticos.
Los primeros minutos de la INVESTIGACIÓN nos ayudarán
a reconducir nuestros pensamientos hacia una propuesta
común de diálogo y a crear un ambiente relajado.
¿En qué consiste la INVESTIGACIÓN? Muy sencillo. Unas
veces requerirá un pequeño diálogo entre la pareja. Otras veces
será una manera creativa de iniciar la charla: una breve historia,
una definición... Ten una actitud abierta para investigar, aunque
creas dominar el tema perfectamente. En cualquier caso piensa
en tu cónyuge y en los otros matrimonios del grupo
EL DIALOGO
A lo largo de cada sesión iremos viendo conceptos,
cuestiones, principios e ideas que nos ayudarán a desarrollar el
tema propuesto.
El coloquio no es el campo de batalla donde se aprovecha para
atacar en público lo que se debe de hablar en privado con tu
cónyuge. Sé sensible a la hora de compartir en el grupo tus
experiencias personales asegurando que no va a dañar su
intimidad.
Tampoco el coloquio es la oportunidad para demostrar todo lo
que sabes del tema. El coloquio o la discusión están basados
en la investigación propuesta anteriormente.
La discusión es una llave que ayuda a abrir puertas, en especial
la de nuestra propia mente.
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LOS DEBERES
Es un término escolar muy familiar. A los estudiantes les
recuerda los trabajos de sus estudios que tienen que hacer en
casa. De la misma manera que nuestros hijos tienen que hacer
esas tareas, nosotros también tenemos las nuestras. De hecho,
cada sesión aporta unas ideas para aplicar en la elaboración
del proyecto de vida del matrimonio.
Nadie va a corregir esos "deberes". Es un asunto entre
vosotros dos. Os ayudarán a pensar en lo tratado en el grupo,
a comentar nuevos pensamientos y a renovar vuestra
perspectiva de la idea que Dios tiene acerca del matrimonio.
Estas tareas son sugerencias e ideas creativas, o meramente
cuestiones para buscar respuestas individualmente y en
pareja.
A veces algunas de estas cuestiones entrarán en el apartado
de
MUY PERSONAL
A veces trataremos alguna cuestión con un carácter íntimo y
muy personal de la pareja y los esposos. Estos son vuestros
“secretos”.
LAS FICHAS PARA CONFECCIONAR
EL PROYECTO
Se entregarán fichas para que en el transcurso del taller escribáis
vuestro proyecto.
Esta parte es esencial.
Proyecto de Vida Matrimonial
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Proyecto de Vida Matrimonial
Ú LT I M A S C O N S I D E R AC I O N E S
Tenerlo escrito. Conforme se desarrolla el taller, como pareja
habéis ido elaborando vuestro proyecto. De aquí el valor de las
fichas. El proyecto de la pareja es algo vivo y siempre actual que
recopila lo que quiere que sea su vida. Por esto es importante
tenerlo escrito en un papel, y a mano. Especialmente cada vez
que surjan dudas y no se sepa dónde tirar, o cuando estáis
metidos en una discusión y necesitáis un punto de apoyo para
salir de ella.
Por otra parte, vuestro proyecto de pareja es vuestra CARTA
MAGNA, vuestra CONSTITUCION como pareja: en ella vais
a recoger las directrices de lo que queréis que sea vuestra vida.
Revisarlo. Es otro de los motivos que hacen conveniente el
tener el proyecto por escrito. El proyecto no es un oráculo, sino
una guía de por dónde queréis que vaya vuestra vida en cada
momento, apoyándose siempre en lo que tenéis claro. Por eso
es bueno adquirir la costumbre de revisarlo de vez en cuando y
que mirar vuestra vida en referencia a él:
-¿Es esto lo que realmente estamos viviendo?
-¿Qué dificultades encontramos para llevar el proyecto a
la práctica?
-¿Qué cosas nos ayudan a hacerlo?
-¿En qué hemos avanzado?
-¿Cómo podemos acercar nuestra vida y el proyecto, lo
que estamos viviendo y lo que queremos vivir?
-¿Qué habría que modificar en el proyecto –añadir algo, o
cambiarlo, o buscar nuevas propuestas?
-….
En el fondo el proyecto de la pareja debe ser algo
eminentemente práctico y cotidiano. Tenedlo presente en
vuestra vida y trabajar con él, aunque sólo sea una vez al año
pues os ayudará a que no os despistéis mucho; a tomar la vida
en vuestras manos y a hacer de ella lo que realmente queréis.
Como pareja no podéis descubrir de repente un día que no os
reconocéis, que os habéis dejado llevar y sin saber cómo habéis
renunciado a aquello que os parecía fundamental. Para eso os
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tenéis el uno al otro y habéis hecho vuestro proyecto.
Además, al revisarlo, tendréis la oportunidad de encontrarse
en una dimensión diferente, de hablar de aquello para lo que
nunca tenéis tiempo en el día a día. Y el encuentro, de
verdad, con lo mejor del otro, es un privilegio al que en
ningún momento la pareja puede renunciar.
Celebrarlo. Tener un proyecto es un motivo de alegría, y
vivirlo día a día también. A veces estamos demasiado
inmersos en la rutina, y se nos pasan por alto las
innumerables ocasiones de celebración que nos salen al paso.
Tener un proyecto nos ofrece un montón de ocasiones para
la celebración: cada vez que nos encontramos para revisarlo,
para modificar algo y adaptarlo a lo que vamos descubriendo,
cada vez que avanzamos un paso y constatamos que nuestro
proyecto va haciéndose realidad. No dejemos pasar las
ocasiones, y recompensemos también a ese amor al que, al
final, tanto se habrá hecho trabajar.
Q U É E S U N P R OY E C T O D E V I D A
M AT R I M O N I A L
Proyecto es la intención de hacer algo o el plan que se idea para
poderlo realizar.
Tener un proyecto supone reconocer que para tener una idea
clara de lo que se quiere hacer, es necesario detenerse a pensarlo,
saber identificar lo que se quiere, los fines que se persiguen,
detectar capacidades y limitaciones y tener una visión clara de la
realidad y de las posibilidades con que contamos. Todo esto que
es fundamental para iniciar un proyecto, es algo poco habitual
que necesita de nuestra reflexión. Así que, antes de lanzarnos
atropelladamente a hacer mil cosas, detengámonos, sentémonos
y pensemos.
Hay que tener en cuenta que no todos los proyectos son iguales,
podríamos decir que hay proyectos a corto, medio y largo plazo.
Entre estos últimos es donde se sitúa un proyecto personal de
vida o un proyecto de pareja. Son para toda la vida, no podrán
Proyecto de Vida Matrimonial
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Proyecto de Vida Matrimonial
ser cosas muy concretas porque la vida es insólita y muy larga,
nos sorprende con lo inesperado en cualquier momento, en
cualquier lugar.
Cuando decidimos formar una pareja, se abre una dimensión
más al proyecto personal; ya no solo tengo “mi vida”, nos
comprometemos a vivirla juntos. Ahora construimos “nuestra
vida”, y comenzamos a buscar entre los dos las respuestas a
algunas preguntas: ¿Qué queremos conseguir juntos? ¿Qué
sentimientos y acciones nos son comunes? ¿Cuáles no?
No es una norma impuesta: nos vamos a sentar, vamos a
reflexionar, lo discutiremos, trataremos las preguntas esenciales,
buscaremos nuestras respuestas, lo llevaremos a la oración,
haremos NUESTRO PROYECTO, porque al hacerlo nos
estaremos dando lo mejor que tenemos: nuestra ilusión y
nuestra decisión de hacerlo realidad. Es la vocación de nuestras
vidas.
No sabemos qué nos sucederá a lo largo de la vida, pero en
nuestro proyecto, siempre encontraremos una guía, un punto
firme que nos ayudará a orientarnos en cada situación.
Nuestro amor necesita entrega, tiempo, dedicación y cuidados.
Todo lo que merece la pena requiere un cierto esfuerzo.
Construir un proyecto no es un trabajo de un solo día, hay que
vivirlo, enriquecerlo, actualizarlo continuamente. Entonces es
cuando sabemos cómo hacer que la ilusión se haga realidad.
Nosotros somos el proyecto, lo hemos decidido.
¿CÓMO TIENE QUE SER EL PROYECTO DE
PAREJA?
Debe ser de los dos, común a ti y a mí y, como tú y yo,
distinto de los demás.

Si reconocemos que la vida sólo se vive en plenitud desde la
verdad, nuestro proyecto de pareja estará construido desde
nuestra verdad, la de cada uno, la de los dos. Algo para toda la
vida solo vale la pena si es de verdad.
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Unidad 0. Metodología. Instrucciones.
 Es una brújula, no un oráculo. No podemos olvidar que el
proyecto no puede prever todas y cada una de las cosas que nos
pueden suceder en un futuro.
 Es una herramienta de vida, para dar vida a nuestra pareja,
no para atarla y llenarla de “obligaciones”. Que sea flexible y
abierto a la vida, a los cambios.
 Nos tiene que dar libertad. El proyecto se basa en la libertad
de lo establecido desde el encuentro en la verdad, desde lo
esencial y profundo, desde la ilusión más fuerte, desde el amor.
 Recoge todo aquello que nos hace vivir, lo que nos da
seguridad. Se convierte en algo activo y presente, recoge las
apuestas que hemos hecho para toda la vida.
 Necesita ser
duradero, capaz de ir envejeciendo con
nosotros, de ir madurando poco a poco, de ayudar a que el paso
del tiempo signifique que lo que tuvimos claro entonces sea hoy
una realidad que ofrecer.
 Y, por supuesto, tenemos que conseguir que nuestro
proyecto sea ilusionante, atractivo, irresistible, que nos
“enganche”, que nos divierta,
que ponga en juego toda
nuestra imaginación y toda la
creatividad que seamos
capaces de producir.
 El proyecto es nuestro
amor puesto a trabajar. Es una
herramienta para poder vivir
nuestro amor de verdad. Tiene
que ser nuestra ilusión, igual
que tú eres mi ilusión y yo soy
la tuya: al fin y al cabo el
proyecto somos nosotros.
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Unidad 0. Metodología. Instrucciones.
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N E C E S I D A D D E T E N E R U N P R OY E C T O D E
V I D A M AT R I M O N I A L
Tal vez nos preguntemos la necesidad tener un proyecto, ¿para
qué “someter” nuestro amor a normas y reglamentos? ¿Acaso
no es suficiente querernos? ¿Por qué no dejamos que nuestro
amor se desarrolle espontáneamente?
En primer lugar, tenemos que partir reconociendo que el amor
es un trabajo.
El amor también es una decisión. Tras el enamoramiento nos
encontramos en situaciones ante las que tenemos que decidir, y
¿qué debemos
entender por
proyecto?
●
debemos entender
“proyecto” como
el proceso que se
pretende seguir, o
que ya está en
marcha, en orden a
algo que se desea
alcanzar.
decidimos que este amor que tenemos merece la pena.
El amor pide eternidad. Siempre puede mejorar y parece que
nunca culmina. El amor necesita tiempo, es una criatura que
crece despacio. Seamos pacientes, tenemos toda la vida para
nosotros y eso es una gran suerte.
El amor sólo crece en la verdad, no resiste la mentira ni el
engaño. El proyecto lo construiremos desde esa verdad profunda
que nos hace ser pareja.
El amor necesita confiar, saberse seguro. En el proyecto nuestro
amor se fortalece en la confianza.
El amor necesita ofrenda, si no, no es amor.
En el proyecto podemos y debemos acoger el amor de Dios. En
la acogida del don de Dios nuestro proyecto se abre al proyecto
de Dios sobre nosotros, sobre nuestra pareja. Nuestro proyecto
se convierte en una búsqueda y seguimiento de la voluntad de
Dios, que, al igual que el amor, también necesita tiempo y
trabajo.
Después de ver las razones que vienen dadas por la propia
esencia del amor, veamos los motivos que encontramos en la
sociedad, en el mundo que nos rodea y en el momento que nos
toca vivir.
La imagen que nos muestra la sociedad sobre el amor, la pareja o
el matrimonio, es la de que el amor dura lo que dure, pero es
algo que se acaba tal y como llega. En él no caben “normas”, ni
planificaciones; debe ser espontáneo, libre y natural. Que una
pareja funcione es cuestión de suerte...y además, cuando te casas
¡se acabó lo bueno!
El proyecto es nuestra realidad y nuestra referencia. Elaborarlo
nos hará ser conscientes de nuestra situación, de lo que nos
rodea.
Unidad 0. Metodología. Instrucciones.
En fin que nadie ha dicho que esta tarea sea fácil, pero nadie
podrá decir que no vale la pena. ¿Qué os parece? ¿Lo
intentamos?
¿POR QUÉ UN PROYECTO DE PAREJA?
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Porque es posible vivir felices en pareja y durante
mucho tiempo, pero una vida de matrimonio es algo
que se construye poco a poco, que se edifica.
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Porque los primeros años son decisivos para el éxito o
el fracaso de la pareja.
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Porque el amor es un proceso: se aprende, cambia y
crece.
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Porque en el matrimonio, la pareja tiene que convivir a
niveles muy profundos y para ello se requiere madurez.
La maduración personal es un proceso que requiere
tiempo, esfuerzo y relación con los demás y en el caso
de la pareja exige una progresión y un aprendizaje.
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