Asociación Psicoanalítica de Buenos Aires X Jornada de Hospitales e Instituciones: “Sujeto y Sociedad: Clínica de las Fronteras” “La integración escolar como herramienta frente a los obstáculos del aprender” Título: Construir la subjetividad infantil en la integración escolar. Lic. Mariana Díaz Doublet MN. 51.798 Buenos Aires, 20 de Octubre 2012 Tema: “La integración escolar como herramienta frente a los obstáculos del aprender” Título: Construir la subjetividad infantil en la integración escolar. El motivo de la presentación de este trabajo es compartir la difícil tarea de interactuar en forma interdisciplinaria frente a un proceso de integración escolar,en el cual pueda desplegarse la singularidad del niño,sus dificultades, el devenir escolar yse posibilite el surgimiento del deseo y el aprendizaje, trazando su camino subjetivo. Datos relevantes: Catalina, tiene 5 años, ingresa a una institución escolar privada de jornada completa y cursa en la sala de 4 años. Los padres mencionan en la inscripción a la escuela cierta dificultad de la niña con el lenguaje. Luego de los primeros meses de clase, la institución escolar convoca a los padres con el objetivo de informarles el comportamiento de la niña en el jardín de infantes: no presta atención, suele escaparse de la sala, deambula por los pasillos, entra en otras clases,utiliza algún material que le llame la atención por un tiempo acotado, sale al patio sin respetar horarios. Luego de unos meses tiene cierta afinidad con la sala de 3 años y elige pasar allí gran parte del horario escolar. Las maestras aceptan la visita de la alumna y permiten que deambule en la clase. Debido a estas conductas la escuela pide a los padres que realicen una consulta médica. En septiembre entregan a la institución el informe del neurólogo quiendescarta patología orgánica. Antes de comenzar el próximo año, la institución escolar plantea la necesidad de la presencia de una maestra integradora dado al desfasaje observado en la niña con respecto a su edad cronológica y a su madurez. Catalina cursará nuevamente sala de 4 años. Debido a la demanda escolar con respecto a la integración de Catalina, soy convocada por sus padres, quienes me informanla situación en la que se encuentran. Participé en una reunión realizada por el equipo educativo formado por la psicóloga de la institución, quien evaluó a Catalina el año anterior, la maestra de sala de 4 y la psicopedagoga particular, quién la atiende desde hace año y medio. Se establecieron los objetivos a trabajar durante la primera mitad de año, los cuales tenían que ver con establecer vínculos adecuadosque posibiliten la convocación de Catalina a las normas escolares. En tanto sujeto en crecimiento, en constitución, ningún niño tiene la historia cerrada, lo que los profesionales podemos hacer es abrir el juego, permitir que se vayan armando nuevos caminos y que ese niño y su familia vayan tejiendo una nueva historia escolar. Cuando se toma la singularidad del sujeto, un semejante diferente, se puede comenzar a pensar acerca de las vivencias, de las causas, y de qué es lo que hace que ese niño se presente de ese modo teniendo en cuenta que son muchos los participantes en el proceso de aprender: el niño, los maestros,los padres y el contexto social. Aprender implica siempre un acto que tiene que ver con internarse en zonas oscuras, desconocidas, supone un trabajo psíquico. Hay algo de la apropiación y algo del riesgo, pero el querer saber puede haber quedado obturado, ya sea por represión o porque el deseo mismo no pudo constituirse. El ser convocada por los padres para realizar un proceso de integración educativa, me brindó la posibilidad de volver a un ámbito escolar, el cual había dejado años atrás en mi rol de maestra, pero en esta oportunidad, para trabajar con aquellos niños que necesitan una atención más específica y personalizada Empezaría a trabajar desde otro lugar, con una mirada más amplia, sumando mi experiencia en el campo de la psicología y situada en la incertidumbre que provoca todo proceso de integración educativo. Consideré de suma importancia establecer un buen vínculo con la maestra de la sala, donde quedó claro mi reconocimiento de su rol y expreséla necesidad de trabajar juntas, lejos de una mirada valorativa con respecto a su desempeño y con ánimo de colaboración. La institución escolar es representante de terceridad, es portadora de una legalidad a la que todos sus integrantes, maestros, alumnos y padres, deben someterse. Suele ocurrir en procesos de integración escolar, que la institución no encuentra un espacio propicio para ofrecer al niño, en general las escuelas tienen sus normas de trabajo y era necesario planificar una estrategia para la inserción escolar de Catalina. Abordé el trabajo considerando la singularidad de Catalina, al comienzo admití un no saber previo y tuve la vocación de la paciencia por preguntar, observar, dejar fluir la historia de la niña, la palabra de los padres, la posición de los diferentes profesionales que intervienen en el proceso e intenté leer su comportamiento como guía para las futuras intervenciones. Me encuentro con una niña que parece no registrar mi presencia, observo una gran indiferencia como defensa a lo que se torna presencia amenazante, no le gusta que me siente cerca de ella, tira los marcadores, intenta salir de la sala cuando quiere, y comienza a deambular por los pasillos como el año anterior. Frente a esta situación decidí ocupar un lugar de alumna, realizar la consigna dada por la maestra y trabajar a una distancia óptima de Catalina, sentada en una de las mesitas, donde pueda observar mi trabajo e interacción con sus compañeros sin interferir con su actividad. Hasta que un día,Catalina me ofreció su marcador rojo para dibujar, lo acepté y le di el mío azul, lo aceptó y realizó un dibujo con mi marcador y yo con el suyo. Confirmando de esta manera mi presencia, su registro y aceptación. A la semana siguiente me senté en la mesa al lado de Catalina y cada una realizaba su trabajo, ella comenzó a observar y copiar mi actividad, realizándola luego en su hoja. Como segunda estrategia de abordaje, acordamos con la maestra que ocuparía un lugar al lado de la niña durante las actividades en ronda, donde Catalina no podía quedarse quieta y prestar atención. La contención corporal ejercida durante estos momentos del día, lograron disminuir su movimiento constante. Catalina, al verme quieta, ahora podía parar de moverse y recostarse cada tanto sobre mis rodillas, lo que dio espacio para que pueda prestar atención durante las narraciones y observar las imágenes presentadas por la maestra. Así comenzamos un recorrido de intercambio e interacción que nospermitió construir una rutina escolar, que supone la introducción de cortes y diferencias, a lo que de otra manera era vivido por Catalina como una pura continuidad. Se instala de esta manera una legalidad brindada por la institución educativa. Bibliografía Janin, Beatriz. Niños desatentos e hiperactivos. Reflexiones críticas acerca del Trastorno por Déficit de Atención con o sin Hiperactividad. Ed. Novedades Educativas. Buenos Aires. 2010 SelviniPalazzoli Mara y Otros. Al frente de la organización. Estrategias y tácticas. Ed. Paidós. Buenos Aires. 1986. Untoiglich, Gisela. Diagnósticos en la infancia. En busca de la subjetividad perdida. Ed. Novedades Educativas. Buenos Aires. 2005