MARTIN WIEBEL Durruti es una leyenda Tras el estreno en la pequeña pantalla de la obra „El interrogatorio de La Habana“ , en junio de 1970, Hans Magnus Enzensberger, en una charla nocturna, se refirió al dirigente anarquista español Buenaventura D urruti, cuya biogra­ fía, relatada con gran número de contradicciones, y apenas investigada, le interesaba por tres m otivos: por el fenó­ meno, en moda, del accionism o anarquista pequeño-burgués, por el sistema de sím bolos en la peculiar transform a­ ción de una biografía en una leyenda, y por la problem ática epistem ológica*) que encierra el intento de convertir en imagen las huellas de un hom bre de pura acción. M Buenaventura Durruti, pocas horas antes de su asesinato según testim onio de llya Ehrenburg. En otoño del mismo año, Enzensberger inició la búsqueda de docum en­ tos y testigos para su „n o ve la -film “ sobre D urruti en el Instituto de Estu­ dios sobre el Anarquism o de Am ster­ dam, recurriendo asim ismo al investi­ gador de D urruti Abel Paz en Paris, en España y en el sur de Francia. En la prim avera de 1971 comenzó el ro­ daje. Enzensberger visitó y preguntó a com pañeros y amigos de D urruti, a su condiscípulo Monroy, a los com pa­ ñeros de lucha Sanz, Ferrer, Valdenebro, Hernández y Rionda. Habló con la viuda de Durruti, Em ilienne Marín y con la dirigente del sindicato anar­ quista CNT, Federica Montseny. Sus declaraciones describen la situa­ ción política concreta del anarquismo español; un entorno sin el cual la persona de Durruti no sería ni expli­ cable ni imaginable, porque ella se define por la lucha. Al reconstruir la existencia de un hombre, muerto desde hace 35 años, la película inten­ ta conseguir más que localizar las huellas de este hombre. La novela „D u rru ti“ des Enzensberger no es una biografía que colecciona 36 hechos ni tam poco una disertación científica. Es más bien una invención fabricada con los m ateriales sum inis­ trados por la realidad. „Pero no es una invención cualquie­ ra.“ El interés que despierta se basa en los intereses de los que la narran, per­ m itiendo a los que la escuchan, reco­ nocer sus propios intereses, definirlos más precisam ente, así como los de sus enemigos. A la investigación cien­ tífica de datos, que se cree ajena a los intereses, tenemos que agrade­ cerle mucho. Sin embargo, sigue sien­ do como Schlehmihl, aquel hombre que vendió su sombra. Es una figura artificial. Solam ente el sujeto real de la historia arroja su sombra, que le precede como ficción colectiva. Agenda de datos para una Biografía 14. 7. 1896 Nace D urruti, hijo de un ferroviario, en León. 1910-1914 Aprende el oficio de mecánico. 1914-1917 M ecánico en la Compañía de Ferro­ carriles del Norte. 1917 Participación activa en la huelga ge­ neral. Es despedido. 1918 En Gijón ingresa en la CNT. Deserta del ejército y em igra a Francia. 1918-1920 Trabaja como ajustador en Paris y estudia a los clásicos anarquistas. 1920-1922 Regresa a San Sebastián. Funda con otros com pañeros uno de los prim e­ ros grupos ilegales de trabajo (Los Justicieros). 1922-1924 Vive en Barcelona, donde trabajo en una fábrica. Organiza con Francisco Ascaso, García O liver y otros, el grupo ilegal Los Solidarios. Acciones guerrilleras contra los pelotones de m ercenarios de los empresarios. Los choques adquieren carácter de guerra civil. 1923 Atentado contra el cardenal-arzobispo de Zaragoza, Soldevilla, imputado a Durruti. Huida a Francia. 1924-1926 D urruti y Ascaso en Sudam érica. Tra­ bajo de agitación y conspiración en Cuba, M éjico, Argentina, Perú, Chile y Uruguay. A tracos a bancos. 1926 Regreso a París. Poco antes de una visita oficial del Rey español, Durruti y su amigo Ascaso son detenidos, acusados de haber proyectado un atentado contra el monarca. Varios gobiernos piden su extradición, que es im pedida por una campaña en la opinión pública francesa. D urruti es expulsado de Francia como „extra n ­ jero indeseable“ . 1926-1931 Vida casi legal en Bruselas, Lyon, Berlin. 1931 Se proclam a la R epública española. Regreso de D urruti a España. Parti­ cipación en la agitación anarquista de masas y en el levantam iento deFigols. *) re la tiv o a la d o c trin a y m étodes del c o n o c i­ m ien to c ie n tífic o . n. Red. EXPRES ESPAÑ O L/O CTUBR E 1972