Universidad Nacional Mayor de San Marcos From the SelectedWorks of Raúl Chanamé Orbe Summer September 5, 2015 "Fusiles e Ideas" por Raúl Chaname Raul Chaname Orbe, Universidad Nacional Mayor de San Marcos Available at: http://works.bepress.com/raul_chanameorbe/7/ FUSILES E IDEAS Por Raúl Chanamé Orbe El mito de la violencia revolucionaria fue una de las grandes mentiras del siglo XX. Georges Sorel creía que ella era sangre y voluntad para regenerar a la humanidad, fusionó las teorías de Proudhon y Nietzsche, para sostener que la atrocidad revolucionaria purificaba a la sociedad. Sorel revisaba al marxismo, pues para Marx “la violencia como partera de la historia”, era la consecuencia de la toma de conciencia y el desarrollo de las fuerzas productivas; distinguiendo entre una asonada y una revolución, para Sorel la intensidad del terror era ya una manifestación de la transformación social. Sorel de teórico del socialismo –Mariátegui lo admiraba-, terminó como ideólogo del fascismo por su culto a “la muerte heroica”. Los bolcheviques no llegaron al poder con las recomendaciones de Marx, sino con “Las técnicas del golpe de Estado” de Errico Malatesta, usada con la destreza táctica de León Trotski. No usaron de Sorel para hacerse del poder, sino para mantenerse en el, con técnicas más despiadadas y vesánicas. El maoísmo no fue marxista, fue soreliano con su máxima: “el poder nace del fusil”. Mao prescindió de la economía, predijo en lo más febril de la “Revolución Cultural” que después de una guerra nuclear y millones de muertos, los comunistas sobrevivirían para reconstruir la humanidad. Alumnos de esa ideología fueron Pol Pot y Abimael Guzmán, el primero para vergüenza del marxismo produjo uno de los regímenes más retrogrados de la historia y, el segundo, una de las insurrecciones más monstruosas contra los inocentes. La violencia no era el medio sino, a su vez, el fin: la dinamita y el anfo no solo diezmaban a la reacción, sino castigaban a la sociedad que se había degradado con el capitalismo. El senderismo como el MRTA fueron vencidos categóricamente en el terreno militar, recibieron sanciones penales, algunos discuten si la reclusión fue proporcional a la hecatombe que causaron; eso es debatible, lo principal es saber si derrotamos su mito, pues causa alarma cuando decenas de jóvenes con la mayor ingenuidad se adhieren al MOVADEF dejando el mensaje que ganamos con los fusiles, pero en el ámbito de las ideas capitulamos al no poder refutar a Sorel, Nietzsche o al inculto “pensamiento Gonzalo”.