DE HISTORIA 2fi9 NATURAL del Gato casero. P. Chita, P e g e mui perseguido de los Lobos de la Costa del Sur por el gusto y delicadeza de su carne. A. Vaca marina 6 Pege comestible: las hay h . t a Buey, es a n ñ v i o de carne gustosa ó a de 10 q q . salen á comer Y e r v a s á las r i s veras del R i o Marañón, y otros que distan del mar más de 600 leg. _ contra la opinión de Bufón y otros Naturalistas que afirman existir lexos de su desembocadura al m a r . = B . Sungaro, no de 1 */j v." de largo, y m u y gustoso, aunque poco s a l u d a b l e . = C . Gfamitana, es m u y apetesido este pez de los Y n d i o s Gentiles porque es el más suave y delicado de aquellos R í o s . = D . Bocachico m u y espinoso, y poco grato al p a l a d a r . = B . Charnbira ó e es el q . sala y de que hacen abundantes p r o v i s i o n e s . = F . guana, tiene un sabor amargo y d e s a g r a d a b l e . = G . es Challua, Ara- Charnbira chico, no tiene más espina que la del espinazo y es m u y resva- ladiso. (Debajo de los cuadritos de peces, hay á cada lado del Cerro mineral de Gualgayoc dos cuadritos que dicen:) — Iguana, especie de Camaleón y Lagarto, abunda en los R í o s de la parte austral, y en Panamá, sirve de alimento c o m ú n , siendo su carne de gusto delicado, y sana, sus huevos son m u y apetesidos de los Y n d i o s de Mayuas y los Salbages de la Montaña que los prefieren á los de la Tortuga. — Lobo Marino, abunda en todas las costas del mar del S u r , sobre su República y m o d o de subsistir han tratado m u c h o los N a " turalistas antiguos y modernos. Desde que los Y u g l e s e s han pasado á la pezca de la Ballena, se ha conosido la utilidad de su piel, y Graza, y sólo los cazaban los Naturales y los dueños de las H a a ziendas de Trapiches p . con el azeite hazer el a l u m b . d u de los Trapiches. — Lobo de Río, h a y abundancia en el de las Amazonas y otros, sus colaterales, es amfivio y palmípedo c o m o todos los de su e s pecie, es m u y dócil, y fácil de ser aprisionado, no se saca de su piel utilidad alguna, no obstante que quitándole el pelo serdoso que tiene en la superficie, le queda una pelusa de agradable color, y m u c h a suavidad. — Lagartos, s los hay hasta de 11 v . de largo, son comunes T. XII.—Mayo, 1912. 18