El tren de la mina sigue pasando por Utrillas

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TERUEL TIERRA DE ESTRELLAS
Diario T eruel
de
SUPLEMENTO ESPECIAL TURISMO 2015
•EN INTERNET•
Un coleccionista que cedió
los objetos recopilados
durante toda una vida
minasdeutrillas.com
José Manuel Sanchís se dedica profesionalmente a la fotografía
pero es un apasionado de todo lo que tiene que ver con las minas.
Comenzó su colección de objetos vinculados a trabajo de la extracción del carbón en la década de los 80 y desde entonces ha llegado a atesorar más de un millar procedentes de todos los continentes y de diferentes épocas. El coleccionista ha donado de manera gratuita todos los objetos
al Ayuntamiento de Utrillas
con la única condición de que
sean expuestos dignamente.
Sanchís nunca ha tenido un
interés económico con respecto a su colección, aunque
el valor conjunto de las piezas
está por encima de los
300.000 euros.
La vieja Hulla llegó a Utrillas en 1904 y sigue funcionando a vapor
El tren de la mina sigue
pasando por Utrillas
Los maquinistas en el interior de la Hulla
Uno de los grandes atractivos de la localidad minera es la locomotora de vapor
M. C. A.
Teruel
El pasado minero de Utrillas sigue
muy presente en el día a día de los vecinos. El castillete de Santa Bárbara
continua siendo un símbolo de un municipio donde casi toda la población
trabajó en una de las minas que se explotaron o ha sido familiar de un minero. En los últimos años han apostado
por sacar partido a esos vestigios y
ahora cuentan con un Museo de la
Ciencia y Arqueología Minera de Utrillas en el que es posible conocer la riqueza mineral de la zona y la importancia económica que tuvo la actividad
en el municipio. Ese espacio, situado en
lo que antaño fue el antiguo hospital reúne un buen
número de maquetas sobre explotaciones mineras y
diversos materiales originales empleados durante
décadas para la extracción del carbón. La muestra
se completa con sendas exposiciones de geología y
de los minerales hablados en las minas y además
hay un audiovisual que ayuda al turista a conocer
las claves de la minería.
Este museo, abierto desde hace años, se complementa desde hace unos meses con un centro de interpretación de la minería que alberga una de las colecciones más relevantes a nivel internacional de
materiales vinculados a la minería. En ella hay piezas procedentes de todos los continentes y todas las
épocas, pero todas tienen como común denominador que están vinculadas de una u otra manera a la
minería. Entre esos utensilios hay teléfonos de los
que usaban los peones para comunicar con el exte-
Entre los objetos hay numerosas señales que se usaban en las minas
rior o chapas con el número de identificación que
permitía saber si un trabajador estaba dentro de la
mina. Una de las piezas más relevantes de todas las
que se conservan es un convertidor de corriente alterna en corriente continua. Estas lámparas de cristal y con mercurio en su interior, fueron habituales
durante décadas en la zona, pero ahora son piezas
únicas. La que ahora se expone está en su embalaje
original.
El centro de interpretación se ubica en las antiguas escuelas que se construyeron en Utrillas en las
primeras décadas del siglo XX para que los hijos de
los mineros recibieran clase. Durante la Guerra Civil
el inmueble se convirtió en cuartel del ejército y, décadas después, fue un taller para las minas y también aula de formación para los trabajadores de Minas y Ferrocarriles de Utrillas. Desde Semana Santa
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del año pasado es un centro expositivo
en el que la minería tiene un lugar destacado. Pero el Ayuntamiento de Utrillas
también ha querido recordar el primer
uso del edificio y por eso hay una sala
que recrea un aula de los años 40 y que
transporta a los visitantes a los momentos en los que llevaban mochila.
En el pozo de Santa Bárbara se conserva también el castillete, la sala de
máquinas para mover el elevador que
transportaba a los mineros hasta el
fondo de la mina y las dependencias
donde se cambiaban y duchaban los
trabajadores. Estas salas muestran de
forma muy visual las diferencias de
clases que hubo durante todo el siglo
XX entre los peones y los jefes, que
cuentan con espacios mucho más amplios y cuidados en los que es posible mantener la intimidad, algo difícil de lograr en las duchas comunes que usaban los mineros.
Uno de los grandes atractivos de Utrillas es sin
duda la locomotora Hulla que se pone en marcha
varias veces al año gracias a la colaboración de la
Asociación Zaragozana de Amigos del Ferrocarril y
el Tranvía (Azaft). El tren se usó desde 1904 hasta
1966 para llevar carbón desde las minas hasta el lavadero, donde se triaba, y de allí a los vagones del
tren que lo trasladaban a Zaragoza. Ahora, igual que
entonces, es el propio carbón el que la hace funcionar mediante vapor. Cada vez que se pone en marcha genera una gran expectación en Utrillas y entre
sus pasajeros hay tanto personas que la vieron funcionar en los años 60 como turistas y niños que no
quieren perderse la experiencia.