Inoculación de leguminosas forrajeras

Inoculación de
leguminosas
forrajeras
IMPORTANTE PROCESO PARA
APORTAR NITROGENO AL SUELO
Juan Enrique López M. Es tan importante lograr que las leIngeniero Agrónomo guminosas forrajeras realicen en for·
ma eficiente la "fijación simbiótica
del nitrógeno", que al agricultor le
conviene hacer todos los esfuerzos
que sean necesarios para conse·
guiri o.
Desde el punto de vista económico,
el aporte que hacen las leguminosas
tes que influye directamente en los
rendimientos de los cultivos.
FJJACION SIMBIOTICA DEL
NITROGENO
La fijación de nitrógeno que realizan las leguminosas es el resultado
forrajeras al suelo, puede ser supe·
de una simbiosis entre ellas y los
rior a 100 unidades por hectárea al
año, cantidad que dejan disponibles
para otras plantas. Traducido a pe-
rizobios nitrificantes. Este rlzobio o
sos puede significar un ahorro de
su alimento (hidratos de carbono)
de las ra(ces de las leguminosas y, a
$ 8.200 por hectárea/año considerando que el valor actual (septiembre/84) de la tonelada de salitre es
de $ 13.1 OO. En Nueva Zelandia se
han medido más de 600 kg por hec11
rizobia o rhizobium o bacilo radic(cola es un bacteria que obtiene
cambio, transforma e! nitrógeno
atmosférico y lo deja asimilable por
la planta huésped e incluso por
otras vecinas (gramineas). Esto no
fijado' 1 en un
ocurre si el rizobio vive libremente
en el suelo.
lQué significa 11 fijar nitrógeno"?
De los componentes del aire, alrededor del 80 por ciento corresponde a
nitrógeno (Nz), el cual no es asimilable por las plantas. Este nitrógeno
atmosférico puede ser transformado.
en nitratos y otros compuestos que
s( pueden ser utilizados por los vegetales. A este proceso se le deno-
El lugar físico donde ocurre la simbiosis son los nódulos radiculares
tárea de nitrógeno
año.
mina "fijar nitrógeno
11
•
iQué importancia tiene Ja fijación?
En primer lugar, el nitrógeno es uno
de los nutrientes esenciales para las
plantas, sin él no pueden completar
IPA La Platina Nº 24, 1984
para todos los seres vivos. Además,
el nitrógeno es uno de los nutrien-
-engrosamientos, semejantes a papas en miniatura, que se observa en
las raíces de las leguminosas. Son
de tamaño variable, comúnmente
de 2 a 4 mm en los tréboles y alfalfa. En la galega son mucho más
grandes, de 4 a 1O mm aproximadamente.
FORMACION DE LOS NODULOS:
NODULACION
su ciclo vital. Este elemento consti-
El proceso de la interacción del rizobio y de la planta es un fenóme-
tuye la base de la formación de pro-
no igual a una infección: el rizobio
te(nas, compuestos fundamentales
penetra por los pelos radiculares
15
de la planta, se multiplica en su
interior y forma un filamento o
ºhilo infeccioso"; este filamentb
avanza por el interior del pelo radicular y penetra en la corteza de
la ra(z. Por efecto de secreciones
del rizobio, tales como ácido indo!acético, se promueve la multipli-
cación masiva de células de la raíz
formando un nódulo radicular
típico de las leguminosas.
CALIDAD DE LOS NODULOS
Para el productor es importante
saber si !as leguminosas de sus praderas están fijando con eficacia e!
nitrógeno, es decir, si está obtenien-
do las ventajas de la fijación simbiótica.
Esto lo puede lograr con la cu idadosa observación de las plantas y
sus ra(ces. El aspecto vigoroso y
saludable de las plantas, su intenso
color verde típico, unido a nódulos
grandes más bien escasos y al corte,
su zona central presenta un color
rosado
intenso,
indican nódulos
eficaces. Por el contrario, las plantas amarillentas, débiles, con escaso
crecimiento y con nódulos pequeños, blancos al corte, muy numero·
sos y diseminados por !as raicillas,
alejados de las raíces centrales, indican nódulos ineficaces.
Para hacer !a observación, es necesario arrancar varias plantas con
todo su sistema radicular o la
mayor parte, lo que se logra sacando cada planta con un buen cubo
de tierra cuidando que éste no se
quiebre. As( se evita que las ra(ces
puedan quedar sin nódulos ni
raicillas.
Lo mejor es cortar el cubo de tierra
con una pala y llevarlo con cuidado
a una acequia con agua. Esperar,
con paciencia, que el agua disuelva
y arrastre lentamente la tierra y
deje la planta con sus rarees completas en la pala.
Para observar el color de los nódulos, se corta diametralmente con
una hoja de afeitar sobre un trozo
de madera. El corte debe ser limpio.
16
Fonnación de nódulos en ra/ces de leguminosas por efecto de los ri¿obios que uti-
lil.an el nitrógeno del aire.
ESPECIES Y RAZAS DE
RIZOBIOS
Hay varias especies de rizobios y
cada una de ellas tiene !a caracterís·
tica de servir para una especie o grupo de leguminosas. Así por ejemplo,
Rhizobium me/iloti sirve para alfalfas y hualputras; R. trifolii para los
tréboles (blanco, ladino, rosado,
subterráneo) y R. /otii para las loteras (Lotus tenuis, L. cornicu/atus y
L. u/iginosus).
Sin embargo, una misma especie de
rizobio puede tener varias razas o
linajes de mayor o menor eficiencia,
dependiendo de su capacidad de
competencia con otras especies u
otras razas, de la acidez del suelo
(ph), etc. Por ejemplo, la mayoría
de las cepas de Rhizobium meliloti
actúan bien en suelos neutros (ph
entre 6,5 y 7,5) aunque en Cautln
se están probando cepas que actúan
hasta en pH 4,5 (suelos muy
ácidos).
Las Naciones Unidas están creando
"Centros Regionales de Investigación en Rhizobium" (M 1RCEN)
con e! fin de estudiar en forma permanente la producción de cepas
más eficientes para cada leguminosa. Esta acción se desarrolla porque la simbiosis de leguminosas
con Rhizobium significa: una mejor
alimentación para la humanidad,
mejores pastos para el ganado, más
nitrógeno en el suelo, reducción del
uso de abonos nitrogenados y disminución de la cantidad de nitrógeno soluble (nitratos) en las aguas
interiores (de riego, drenaje, subterráneas).
INOCULACION
Se llama inoculación a la técnica
de "infectar 11 el suelo en e! que se
desea establecer una leguminosa.
Es decir, el hombre incorpora al
suelo la especie y cepa de rizobio
que desea.
IPA La Platina NO 24, 1984
Aunque en el suelo exista la especie
y cepa adecuada, es conveniente
inocular para asegurar una eficiente
fijación simbiótica. Suele ocurrir
que el rizobio se presenta como
muy cscaso 1 débil o parasitado, especialmente con virus. En suelos
que no han tenido la especie leguminosa que interesa lo más seguro
es que no exista el rizobio adecuado. Por ejemplo 1 en suelos que
una nodulación rápida es indispensable inocular con una gran cantidad de rizobios, puesto que si la
formación de nódulos se atrasa 1 por
una inocuíación deficiente, se perjudica el establecimiento y vigor de
las plantas. Un inoculante comercia!
para forrajera debe proporcionar
sobre 1O mil rizobios de la raza
aunque en este suelo se haya cultivado trébol o porotos, no se va a
producir una buena nodulación en
los rizobios al suelo: algunas en que
apropiada por semilla.
produce nodulación, seguramente
va a ser del tipo ineficiente ya
descrito.
INFLUENCIA DE
DEL SUELO (pH)
LA ACIDEZ
Otro aspecto importante en la nodu lación y que va a influir en la
se aplican directamente al suelo
y otras a !a semilla que se va a
sembrar.
Entre los que se aplican directamente al suelo 1 están los granulados y
los li'qui<jos. El uso de una u otra
forma depende de los equipos que
disponga el agricultor, tanto de
de acidez de suelo bien determinada
y que es distinta al de otras espe-
da sino que lo hace por medio de
cies. Una segunda caracter(stica es
que la especie o cepa tolera un gra-
de la semilla, evitando así el efecto
nocivo del fungicida. Los métodos
más usados en Chile son los de apli-
sus pelos radiculares que emergen
cación del inoculante a la semilla.
Entre éstos, podríamos distinguir
los de inoculación simple y los que
peletizan o pildorizan la semilla
(peleteado).
Inoculación simple: uno de los métodos más antiguos 1 es la mezcla del
inoculante con la semilla en la proporción indicada por el fabricante.
Un mejoramiento de este método es
humedecer la semilla o disolver el
inocu lante. Si se usa agua con azúcar es mejor 1 porque mejora !a
adherencia y supervivencia del
inóculo.
En general; el inoculante se comercializa en turba, envasado para 25
kilos de semilla de leguminosa fo-
Si se va a establecer una leguminosa
rrajera. A veces el producto comercial viene con un adherente. Es
importante realizar las operaciones
en condiciones diHciles, para lograr
en la forma que indica el fabricante.
lPA La Platina Nº 24, 1984
2. Luego se disuelve el inoculante
en el agua azucarada revolviendo
enérgicamente hasta lograr una
disolución homogénea.
3. Para mezclar la solución con la
semilla se puede usar:
tes granulados es permitir la siem-
cepa de rizobio tiene requerimiento
por infectar y nodular rápidamente
a la planta huésped y con·un alto
nivel de eficacia.
rosado o a!ejandrino 1
alfalfa o lotera.
o
bra de semilla tratada con fungici-
Por lo explicado, una buena cepa
de rizobío o una mezcla de ellas
en un inoculante comercial, deber(a
ser capaz de competir con las cepas
de rizobios existentes en el suelo
agua por cada 25 kilos de trébol
duetos. Una ventaja de los inoculan-
das. En esta forma el inoculante no
toma contacto con la semilla trata-
aún.
mos de azúcar por litro de agua
blanda, o sea sin sales. Por lo
general, se usa 1,5 a 2 litros de
siembra como de aplicación de pro·
acidez del suelo. Cada especie o
CALIDAD Y NUMERO DE
RIZOBIOS POR SEMILl:.A
carada agregando unos 100 gra-
"' El tambor de eje excéntrico
para desinfectar trigo u otras
semillas1 o una betonera.
forma o método de inocular, es Ja
do de acidez semejante a su planta
huésped.
Así, por ejemplo, el Rhizobium meli/oti, de la alfalfa, requiere suelos
neutros (pH 6,5 a 7,5) y no tolera
suelos ácidos (pH inferior a 6). En
cambio el R. trifo/ii de los tréboles
tolera suelos más ácidos y el R. /otii
de las loteras tolera mayor acidez
1. Primero se hace la solución azu-
blanco,
no han tenido alfalfa lo más seguro METODOS DE INOCULACION
es que no haya Rizobium meliloti y Existen varias formas de incorporar
la alfalfa. En este ejemplo, si se
Lo corriente es que el procedimiento de inoculación tenga las siguientes etapas:
•
Un tacho o tiesto de cualquier material que permita
revolver y mezclar bien la semilla con el inoculante.
Por último 1 puede amonto-
narse la semilla sobre un suelo
firme (cemento, plástico o
lona) y revolver con la mano
y con pala.
4. Una vez inoculada la semilla se
extiende a la sombra sobre concreto, una lona o un plástico,
hasta que se seque bien.
5. La semilla debe sembrarse el
mismo d(a.
Peloteado: también se le llama pelletizado o pildorización. El producto de este método es un pelle!
o píldora formado por: la semilla,
el inoculante y una capa de carbo-
nato de calcio (Figura 1}.
El objetivo de este método es dar
las mejores condiciones al inocu-
lante para lograr la nodulación
óptima en condiciones difíciles de
suelo. La capa de carbonato de calcio cumple, entre otras, las siguientes funciones:
17
Figura 1. Esquema de/ corte de un pe/let
de semilla de leguminosa.
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INOCVl1'N
3'eHrt.LA
Figura 2. Inoculación de la semif!a:
1. preparación de la solución adherente;
2. disolución del inoculante,· 3. mezcla
de la semilla con la solución inoculante;
4. adición de carbonato de calcio que se
usa en el proceso de pel/etización; 5. la
semifla inoculada se extiende a Ja sombra; 6, Ja siembra debe rea/;zarse el mismo d!a.
• Mejora la supervivencia de !os
rizobios en la cercanía de !a semilla cuando se siembra en suelos ácidos. Además de facilitar
una buena nodulación, reduce
las necesidades de cal como correctora de acidez del suelo.
Esta función es más importante
cuanto mayor sea la acidez en
relación a la requerida por la
planta.
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. ..
•
Mejora la supervivencia del
inóculo si el pelle! queda en seco, pues reduce su desecación.
También puede mejorar las rela·
ciones con la humedad del suelo,
actuando como conductor de
ésta hacia la semilla, es decir,
como humectante, mejorando la
germinación y nodulación.
•
Reduce los efectos nocivos de
!os fertilizantes ácidos sobre el
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IPA la Platina Nº 24, 1984
inoculante. Es el caso del superfosfato triple que tiene un pH
2 a 2,5 que es muy ácido y destruye al inoculante si entra en
contacto directo. Hay que recordar que las leguminosas requieren de fósforo, por lo que lo
más frecuente es fertilizar con
este elemento durante la siembra.
Hay varios procedimientos para el
peletizado y cada uno de ellos tiene
variantes propias. Pero en general,
consta más o menos de las etapas
siguientes:
1. Preparación de Ja solución adhe·
rente: los adherentes más usados
son: tylose, goma arábiga, celofaz, CMC, gelatina, etc. Cada
adherente tiene una forma de
preparar la solución. Algunos demoran bastante tiempo, por lo
que es necesario prepararlas con
la debida anticipación (un día
antes). Lo importante es que
quede homogénea, sin grumos.
Las cantidades de agua que se
usan generalmente son las siguientes:
Estas cantidades ilustran la relación que hay entre el tamaño de
la semilla y Ja cantidad de solución adtlerente necesaria.
2. 1noculación propiamente tal: se
mezcla el inoculante con la solución adherente revolviendo energéticamente para obtener una
disolución total y homogénea
del inoculante en la solución y
luego se mezcla esta con la
semilla.
3. Recubrimiento o peleteado: en
forma rápida, sin esperar que la
semilla pierda humedad, se mezcla con el carbonato de calcio.
Es m.uy importante que este
polvo sea de molienda muy fina
(malla Nº 400 ó 300).
•
para 25 kilos de trébol blanco,
2 litros de agua,
• para 25 kilos de trébol rosado
y alejandrino, alfalfa y lote·
ras, 1,5 1itros de agua y,
• para 25 kilos de trébol subterráneo, 1 litro de agua.
Para hacer esta mezcla se pueden
usar los mismos procedimientos
anteriores, pero lo más probable
es que también haya que usar !as
manos para deshacer grumos y lograr que todas las semillas queden
separadas.
Si se usa tambor excéntrico o betonera, debe tenerse cuidado con la
velocidad de rotación. Primero debe
revolverse unos 5 minutos a razón
de 60 vueltas por minuto. A esta velocidad la semilla golpea al caer y
tienden a separarse. Si no se cuenta
con los elementos anteriores, se
puede hacer con pala. Se debe revolver con energía y después de
unos 1O minutos, hay que deshacer
los pelotones con la pala y con las
manos. Luego, seguir con estas operaciones hasta conseguir pellets lo
más uniformes posible.
RECOMENDACIONES
• El inoculante debe guardarse en lugar fresco.
• Fijarse en la fecha de vencimiento del producto.
• Abrir la bolsa sólo inmediatamente antes de usar.
• Evitar inocular semillas recién desinfectadas.
•
Debe evitarse el exceso de humedad o sequedad
del suelo.
• Seguir las instrucciones del fabricante del inóculo.
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