Del Objeto perdido al Objeto Transicional

Anuncio
Escuela Inglesa
Universidad Argentina J.F.K – Departamento de Psicoanálisis
Del Objeto perdido al Objeto Transicional
Silvia Maioli
Freud supone un estado primitivo del aparato psíquico que se constituye a
partir del desear y finaliza en un alucinar. Se trata de la vivencia de satisfacción
mediante la cual”...se cancela un estímulo interno, por medio de una
percepción, como por ejemplo la nutrición, y queda una imagen mnémica que
de ahí en adelante será la huella que dejó en la memoria la excitación
producida por la necesidad”... Ante el mismo estimulo.... “una moción psíquica
que querrá investir de nuevo la imagen mnémica de aquella percepción y
producir otra vez la percepción misma, vale decir, en verdad, restablecer la
situación de la satisfacción primera. Una moción de esa índole es lo que
llamamos deseo, la reaparición de la percepción es el cumplimiento de
deseo”...1
¿Cómo describe Freud el pasaje de la experiencia de satisfacción a la
experiencia alucinatoria de satisfacción?
Este pasaje ubica el objeto perdido del paradójico deseo humano, tal como
Freud lo indica, sexual e infantil.
De entrada este planteo representa una ruptura entre el sujeto y el objeto en la
satisfacción humana: que es la experiencia alucinatoria.
Entonces podemos decir que ese objeto no es un complemento del sujeto.
Porque se trata del nivel inconsciente donde a ese objeto perdido no se lo
puede diferenciar de ese Wunsch (anhelo) ficticio-que tiene una estructura de
ficción-que soporta un encuentro que falla por estructura y que rompe con la
homeostasis del organismo. Emerge así el principio del placer de desear una
“satisfacción” pulsional.
Como mediante el análisis de un trabajo de sueño, se pone en juego la
experiencia alucinatoria de satisfacción, anhelo del objeto perdido, vía
cumplimiento de deseo, expone un goce pulsional que intenta inscribirse en el
1
Freud, S – “La Interpretación de los sueños” (Segunda Parte) Sobre el Sueño (1900-1901) Parte VII –
Punto “C” en Obras Completas – Editorial Amorrortu –- Pág. 557 y 558 – Traducción Etcheverry – 4ta.
Reimpresión – Buenos Aires – 1993.
1
Escuela Inglesa
Universidad Argentina J.F.K – Departamento de Psicoanálisis
aparato psíquico, o sea es parte del trauma que intenta ligarse y así esa fuerza
pulsionante se satisface ligándose.2
Veamos lo que nos dice Lacan en este seminario, porque su interés es
cuestionar la centralidad que tiene la relación de objeto para los analistas y
supone que esa relación se produce por la dialéctica del principio del placer y
del principio de realidad. Y nos transmite que...”El progreso analítico se basa
en una rectificación de la relación del sujeto con el objeto considerada como
una relación dual”...”3
Esta relación dual la sitúa en el eje a......a’4
Entonces, lo que Lacan va a demostrar es:
•
Que esta relación (Sujeto-Objeto) no tiene una posición central en la
teoría analítica
•
Y que si seguimos a Freud como guía, tenemos una limitación técnica.
En Freud, básicamente se trata de un objeto que hay que volverlo a encontrar,
porque es la continuación de una tendencia en la que se trata de un objeto
perdido. Este objeto no es ni satisfactorio ni típico, ni tampoco es armónico. El
objeto se alcanza por medio de una búsqueda. Así nos encontramos con una
nostalgia que marca el reencuentro con el signo de una repetición imposible,
precisamente porque no es el mismo objeto.
Aquí ya vemos la tensión en la relación Sujeto—Objeto porque lo que se busca
no será lo mismo que se encontrará.5
Además podemos preguntarnos ¿Cual es la diferencia entre el principio del
placer y el principio de realidad?
El principio del Placer tiende a realizarse en formaciones antirrealistas,
mientras que el principio de realidad implica la existencia de una organización
diferente y autónoma, la cual supone que lo que se aprehende puede ser
precisamente distinto de lo que se desea.
2
Ibid Pág. 162 a 168
Lacan, J – La relación de Objeto – Libro 4 –1956-1957 - Teoría de la falta de objeto– Pág. 12 Editorial Paidós - 1994 – Buenos Aires –
4
Ibíd. Ver en el Esquema de la Pág. 12
5
Ibíd. Pág. 15-16
3
2
Escuela Inglesa
Universidad Argentina J.F.K – Departamento de Psicoanálisis
Es por esta cuestión que Lacan supone que entre el Sujeto y el Objeto hay otro
término que no fue tomado en cuenta, y es que el Sujeto está consagrado a un
retorno imposible.
Además, para Freud lo que es importante es la identificación del Sujeto con el
partenaire, aunque Lacan sitúa que la primera identificación es a la propia
imagen, en el eje a----a’
Refiriéndose a Freud, Lacan sostiene que el Sujeto no es autónomo, porque
siempre está en la búsqueda de ese objeto perdido.
Y la identificación, está en el lugar de “en relación a”. El Sujeto identificado a un
objeto imaginario.
En esta lógica, lo que surge es el carácter profundamente oral de la relación de
objeto imaginario y nos conduce al fantasma de incorporación fálico. Entonces,
entre Sujeto y Objeto....”ahora tenemos en primer plano ese objeto imaginario
llamado falo como uno de sus elementos”....6
En “La significación del falo”, de 1958, define los efectos de significación como
un punto de encrucijada entre los tres registros y como un producto efecto de la
metáfora y de la metonimia, de la condensación y el desplazamiento, es decir,
de la legalidad propia del proceso primario en el inconsciente.7
Este nudo, encrucijada es la articulación del falo y el complejo de castración en
el cual se verán reflejados los efectos de significación ya que el falo es un
elemento que posee función significante, opera como regulador, implica que es
una razón en el sentido matemático y permitirá al sujeto la identificación sexual
con el tipo ideal de su sexo, acceder a una sexualidad en términos de relación
genital y asumir paternidad o maternidad. Considerando que un sujeto puede
asumir algún aspecto y otros no, ya que son diferentes, pero todos dependen
de la incidencia fálica.8
Vuelvo a Lacan, a los Escritos:.....”El falo aquí se esclarece por su función. El
falo en la doctrina freudiana no es una fantasía, si hay que entender por ello un
efecto imaginario. No es tampoco como tal un objeto (parcial, interno, bueno,
malo, etc.) en la medida en que ese término tiende a apreciar la realidad
interesa en una relación. Menos aún es el órgano, pene o clítoris, que
6
Ibíd. Pág. 28-29-30
Rabinovich, D - “Lectura de La significación del Falo” - Editorial Manantieal - 1995 - Buenos Aires –
Pág. 13 y 14
8
Ibíd. Pág. 15-16
7
3
Escuela Inglesa
Universidad Argentina J.F.K – Departamento de Psicoanálisis
simboliza”.....”El Falo es un significante...que designa en su conjunto los
efectos de significado y los condiciona por su presencia significante”...9
Queda claro que para Lacan esta articulación es compleja, porque no se trata
solamente de una cuestión imaginaria, sino de los efectos producidos, vía la
represión y que le permiten a un sujeto el pasaje por la castración.
Ahora el planteo que sigue tendrá como eje el deseo materno, y que será el
centro para Lacan, de la dialéctica entre un sujeto/objeto.
¿Porque Lacan supone que el centro es el deseo materno?
Porque es la primera forma en que el deseo del Otro se presenta, y es diferente
del deseo de reconocimiento. Y porque la Madre, es la que permite y otorga
que el deseo se constituya en el lugar de causa. A partir de esta lógica, la
causa puede entenderse como nacimiento del deseo, y será uno de los efectos
del significante fálico.10
Esto quiere decir que parte de la dialéctica será observar las marcas del
significante fálico en el hijo y éste, atravesado por el deseo, determinará su
estructura clínica: No se trata de cuestiones de ideales, sino de incidencias
sobre el destino que puede ser: la represión, la renegación o la forclusión.11
En este artículo Lacan pondrá en primer plano el deseo de la Madre, por esta
cuestión, la relación que le interesa no es cualquiera, sino que es Madre-HijoFalo y de la dialéctica de estos tres elementos y su incidencia en los tres
registros: Imaginario, Simbólico y Real. En especial de éste último registro de lo
real que define así:....”Lo real se encuentra en el límite de nuestra
experiencia”.....12
Lacan Inicia su comentario sobre el Sr. Winnicott y dice que:
.....”llama la atención simplemente sobre el hecho de que cada vez nos
interesamos más en la función de la madre y la tenemos por absolutamente
decisiva en la captación de la realidad por parte del niño. Es decir, la oposición
dialéctica e impersonal de los dos principios, el de realidad y el principio de
placer, la hemos sustituido por actores. Sin duda estos sujetos son
9
Lacan, J. - Escritos II Punto V – La Significación del Falo – Editorial Siglo XXI – Traducción de T.
Segovia – 2002 – Buenos Aires – Pág. 669 y 670
10
Rabinovich, D – “Lectura de la Significación del Falo” - Editorial Manantial - 1995 – Buenos Aires –
Pág. 48 y 49.
11
Ibíd. Pág. 50 y 51.
12
Lacan, J. - La relación de Objeto – Libro 4 –1956-1957 - Teoría de la falta de objeto-Introducción –
Editorial Paidos – Buenos Aires – 1994 – Pág. 33.
4
Escuela Inglesa
Universidad Argentina J.F.K – Departamento de Psicoanálisis
completamente ideales, sin duda se trata mas bien de una especie de
figuración imaginaria...” El principio del placer lo hemos identificado con una
determinada relación de objeto, es decir, la relación con el seno materno,
mientras que el principio de realidad lo hemos identificado con el hecho de que
el niño debe aprender a prescindir de él”...13
...”Lo que observa Winnicott es que la madre debe operar estando presente
siempre que es necesario, es decir, precisamente introduciendo, en el
momento de la alucinación delirante del niño, el objeto real que lo colma”...
...”Al principio, en la relación madre-hijo, no hay ninguna distinción entre la
alucinación del seno materno y el encuentro con el objeto real en cuestión”...
Quiere decir que el niño no tiene forma de distinguir una satisfacción basada en
la alucinación (sistema primario- a priori) y la aprehensión de lo real que lo
colma.
En la lógica que sigue Lacan se trata de otra cosa: ...”de que la madre, enseñe
progresivamente al niño a experimentar las frustraciones, y a percibir, cierta
tensión inaugural, la diferencia que hay entre la realidad y la ilusión. Esta
diferencia solo puede instalarse por la vía de una desilusión cuando la realidad
no coincide con la alucinación surgida del deseo.”...
Es por esta vía que Lacan introduce en la experiencia analítica un mecanismo
esencial, y es la noción de la falta de objeto,14 pérdida que remite al Complejo
de Castración.
Discrimina distintas formas de pérdida:
-La noción de frustración: es un daño o lesión, es algo que se desea y no se
tiene, moviliza la reivindicación como una exigencia desenfrenada y sin ley.
Aquí la falta produce un daño imaginario.
-La noción de privación: El sujeto se priva de algo que no tiene, por eso la
ausencia de algo en lo real, es puramente simbólica. El ejemplo del libro que
falta en la biblioteca, es la ausencia de un objeto simbólico.
-La noción de castración: alude a la deuda simbólica que más adelante Lacan
nos remite a la introducción de la ley primordial del Inconsciente, de destronar
13
14
Ibíd. Pág. 36
Ibíd. Pág. 37
5
Escuela Inglesa
Universidad Argentina J.F.K – Departamento de Psicoanálisis
a la madre omnipotente en tanto su deseo es barrado por los efectos de la ley.
Así articula C. De Castración y C. De Edipo15.
Lo que vemos, es que en cada uno de estos momentos, lo que se pierde será
diferente y si lo articulamos a la cuestión del falo se tratará de sus implicancias
en los tres registros.
¿Que nos demuestra con esto Lacan?
Que la ausencia de algo en lo real, es puramente simbólica. Cuando hablamos
de privación, se trata de un objeto simbólico y de ninguna otra cosa.
Los post freudianos, dice Lacan, se quedaron con la noción de falicismo
imaginario, en particular Klein y Winnicott.
El comentario de Lacan hacia Winnicott podemos resumirlo así:
-No se trata si la madre está o no presente. Si no que el énfasis Lacan lo pone
en las relaciones del Sujeto con el Otro, debido a que el inconsciente está
estructurado como un lenguaje, su discurso significante puede quedar preso
del deseo materno porque allí está el falo, si el sujeto queda alienado a los
significantes de ese Otro primordial, obtura su propio deseo y cómo se separa
de las incidencias que le ocasionan estos significantes es lo que surge en el
análisis. La dialéctica de la alineación-separación de un Sujeto y sus
significantes nos mantiene en el plano de la realidad psíquica, y en esto
coincide con Freud, porque se trata de las implicancias del objeto psíquico, no
de un objeto material. La particularidad de este objeto psíquico es que es algo
vivo, que habita al Sujeto en el cual éste queda capturado una y otra vez... Es
“eso” que se juega en el plano de la transferencia y que es la realidad sexual
del Inconsciente16.
La experiencia analítica tratará los efectos de la significación fálica, que por
medio de la represión, se inscriben la frustración (imaginaria), la privación
(simbólica) y la castración (real) en el C. de Edipo y el C. de Castración
-Al quedarse Winnicott en el plano imaginario aunque intenta la simbolización
no hay inscripción de pérdida. Su objeto transicional reitera la ilusión de que la
Madre está allí a pesar de todo y actúa como un elemento de sugestión.
15
Ibíd. Pág. 38-39
Freud, S – “Construcciones en el Análisis“- Tomo XXIII (1937-1939) en Obras Completas, Editorial
Amorrortu - 4ta. Reimpresión – 1996 – Buenos Aires.
16
6
Escuela Inglesa
Universidad Argentina J.F.K – Departamento de Psicoanálisis
Veamos ahora en la obra de D. Winnicott cual es el valor que tiene para él los
objetos transicionales o estados transicionales y la ilusión.
A partir de la primera lactación, Winnicott supone que...“en la medida en que
continua con ellas, el bebé va a disponer de material para crear. Puede decirse
que gradualmente va estando listo para alucinar el pezón en el momento en
que la madre está lista para dárselo. Los recuerdos se construyen a partir de
innumerables impresiones sensoriales asociadas a la actividad de la lactancia y
al encuentro del objeto. Luego sobreviene un estado en que el bebé se siente
confiado en que habrá de encontrar el objeto de su deseo, lo cual significa que
va tolerando gradualmente la ausencia del objeto. Así se inicia su concepto de
la realidad externa, lugar desde el cual aparecen los objetos y en el cual
desaparecen. El niño es omnipotente y la madre se adapta a este momento.
Entre el mundo interno y el mundo externo, el bebé construye un tercer mundo
ilusorio posibilitado por la madre. Este es un estado temporario de la temprana
infancia en el cual al bebé se le posibilita pretender un control mágico de la
realidad externa, control que, según sabemos, se vuelve real gracias a la
adaptación de la madre-pero él bebe todavía no lo sabe-. El objeto transicional
o primera posesión es un objeto que éste ha creado, aunque al mismo tiempo
que decimos esto sabemos que es, en efecto un pedazo de frazada o un fleco
de una manta o un pañuelo. Su importancia se refleja en su persistencia,
incluso burda, a lo largo de los años”... 17
En este desarrollo Winnicott dice que la Madre que posibilita esa ilusión o ese
mundo ilusorio será suficientemente buena, porque posibilita la capacidad de
crear del niño y que será el punto de partida de otras creaciones como la
religión y el arte.
De acuerdo a estas explicaciones vemos que en esta teoría, el lugar central
está ocupado por la Madre, ya que dependerá de su posición subjetiva, que
ésta sea suficientemente buena o no para el bebé. Ahora si crea un tercer
mundo ilusorio, estamos en el plano imaginario en Lacan, y en el orden del
deseo humano en Freud, que se pierde en ambos por las vicisitudes del
principio de realidad y de placer.
17
Winnicott, D – “La Naturaleza Humana” – Parte IV - De la teoría de los instintos a la teoría del yo.
Punto1 Establecimiento de la relación con la realidad externa - Pag. 152 a 154 - Editorial Paidos – 1ra.
Reimpresión – 1996 – Buenos Aires
7
Escuela Inglesa
Universidad Argentina J.F.K – Departamento de Psicoanálisis
Winnicott parte de un objeto psíquico y en esto coincide con Freud y con
Lacan, porque especifica que no se trata de que la madre satisface sólo
necesidades vitales del bebé, sino que satisface lo pulsional que se juega en
esa relación dialéctica que para este autor es de suma importancia, ya que si
esos momentos fracasan, éste será el origen de enfermedades futuras. El
problema viene en lo que sigue, porque ese objeto psíquico pasa a una
construcción que es el objeto transicional (ni adentro -ni afuera) intenta pasar
del plano imaginario al plano simbólico, pero no lo logra ya que no explica que
sucede con la Madre con relación a su propio deseo. Lo que sí sabemos es
que está siempre presente.
También esta Madre está afectada por su matrimonio, Winnicott destaca la
importancia que tiene la relación de la pareja parental, ya que a partir de sus
efectos, de lo que el Padre provee a la Madre, será que podrá generar la ilusión
de omnipotencia en el bebé y continuarla. Es una madre castrada, porque hay
un padre que tiene la función de asegurar que este momento se manifieste18.
Pero si esto fracasa, agrega Winnicott, le genera la ilusión al niño de una
Madre ideal que no existe. Porque el objeto transicional es eso: una Madre
ideal que el niño sostiene hasta que decide su abandono.
Como conclusión puedo decir que los tres autores mencionados parten de un
mismo objeto de estudio, que es el objeto psíquico.
Es indudable que el aporte freudiano marca la ruptura entre el sujeto y el
objeto, así ambos conceptos no son complementarios Esta posición Lacan la
mantiene, pero en su desarrollo, lo que está en el centro es la noción de la falta
de objeto a partir de la incidencia del significante fálico cuyos efectos permitirán
el pasaje por el C. de Edipo y C. de Castración.
Mientras que Winnicott transforma el objeto psíquico en un objeto transicional
sostén materno que no es ni interno ni externo, sino puramente ilusorio.
A pesar de las diferencias teóricas que Winnicott tuvo con Freud y con Lacan,
introduce la novedad del objeto transicional en el psicoanálisis y cuyos efectos
podemos observar en la clínica que nos presenta en sus obras.
18
Ibíd. Pág. 159 y 160
8
Escuela Inglesa
Universidad Argentina J.F.K – Departamento de Psicoanálisis
Para finalizar, una cita de Winnicott del libro que tomé como referencia para
este trabajo, donde expresó que:
... “La tarea consiste en estudiar la naturaleza humana, que es casi todo lo que
tenemos. A pesar de que lo sé, es mi propósito atenerme al título y formular
una enunciación de este tema, en el que se reúnen los diversos tipos de
experiencias que he tenido: lo que aprendí de mis maestros y de mis
experiencias clínicas. Tal vez de este modo logre hacer una descripción
personal, y por ende comprensiblemente limitada, de un tema que no tiene
límites”...
Expresiones extraídas de la Introducción del libro ”La Naturaleza Humana”,
poco antes de 1971, fecha en que falleció este autor.
9
Escuela Inglesa
Universidad Argentina J.F.K – Departamento de Psicoanálisis
Bibliografía
Freud, S – “La Interpretación de los sueños” (Segunda Parte) Sobre el Sueño
(1900-1901) en Obras Completas – Editorial Amorrortu –-Traducción
Etcheverry – 4ta. Reimpresión – Buenos Aires – 1993.
Winnicott, D – “La Naturaleza Humana” –- Editorial Paidós – 1ra. Reimpresión –
1996 – Buenos Aires
Cosentino, J. C. – “Construcciones de los Conceptos Freudianos I” - Editorial
Manantial Buenos Aires – 1999
Lacan, J – “La relación de Objeto” – Libro 4 – 1956-1957 - Editorial Paidós –
1994 - Buenos Aires
Lacan, J. - Escritos II – La
Significación del Falo – Editorial Siglo XXI –
Traducción de T. Segovia – 2002 – Buenos Aires
Rabinovich, D - “Lectura de La significación del Falo” - Editorial Manantial –
1995 - Buenos Aires
Freud, S – “Construcciones en el Análisis“Tomo XXIII (1937-1939) en Obras
Completas - Editorial Amorrortu – Traducción Etcheverry - 4ta. Reimpresión –
1996 – Buenos Aires.
Sumario
Este trabajo desarrolla que el objeto en psicoanálisis a partir de Freud se trata
de una pérdida, que Lacan continúa con la noción de la falta de objeto, en el
Seminario IV. Y Winnicott, que le otorga un lugar central a la Madre, cuya
presencia se reitera en el Objeto Transicional.
10
Descargar