12/1/2015 El precio del rigor | ORBYT JOHN MÜLLER 12/01/2015 Pág. ECONOMÍA AJUSTE DE CUENTAS El precio del rigor La decisión del Banco Santander de realizar una ampliación de capital acelerada por 7.500 millones ha disgustado al accionista golondrina (normalmente minoritario), puesto a dieta forzosa al inversor a largo plazo y hecho felices a sus acreedores. No en vano, el viernes desaparecieron 12.000 millones de la capitalización bursátil. Un precio muy alto. La decisión, sin embargo, obedece a la más pura ortodoxia bancaria y va labrando el estilo propio de Ana Botín al frente de la entidad. La nueva presidenta ha cambiado el consejo, el equipo gestor y ahora la política de recursos propios y dividendos. En las tres fases ha demostrado que su paso por Santander UK la ha marcado profundamente. Con la sustitución de Javier Marín por José Luis Álvarez ya se vio que su apuesta era por una banca con riesgos bien gestionados, cuidadosa de su capital y su solvencia, más que por una entidad generadora de grandes flujos, lo que también la hacía más dependiente del entorno macroeconómico. La ampliación tiene dos aspectos significativos. Primero, disipa las sospechas de la City. En Londres disgustó que el Santander dejara de publicar su ratio de capital fully loaded el primer trimestre de 2014. (El ratio phase in es el que da cuenta de la solvencia de la entidad con las exigencias de capital existentes hoy. El fully loaded hace referencia al cumplimiento de la hoja de ruta de los requisitos de solvencia que pedirá Basilea III en 2019.) Su no publicación hizo sospechar a los analistas que la cifra estaba por debajo del 8% mínimo. Si era así, el reforzamiento de capital era imprescindible. El economista Javier Santacruz fue de los pocos que advirtió en España (ver EL MUNDO del 18 de agosto de 2014) de esta disfunción. El banco, sin embargo, insistió en que estaba bien capitalizado. Lo hizo varias veces durante 2014, como ha recordado el Financial Times. Hasta que en noviembre pasado, Marín tuvo que admitir que el capital fully loaded quedaría a finales del año en el 8,5%, por debajo del 9% previsto. Se culpó a varias operaciones corporativas –la desconsolidación de Santander Consumer USA y la desaparición de Banif, básicamente– del deterioro de 30 puntos básicos en dicha ratio. Con la ampliación se estima que el ratio de capital fully loaded subirá al 9,3%, por debajo aún del BBVA que en septiembre estaba en 10,1%. Esto nos lleva al segundo aspecto diferencial de la gestión de Ana Botín. Su padre nunca hubiese reconocido tan abiertamente que llevaba peores cartas que el BBVA en una jugada así. La ampliación acelerada, además, puede sugerir a algunos analistas que la gestión de riesgos no era tan virtuosa o al menos que el énfasis en la misma, que era parte de la leyenda que rodeaba a Don Emilio, se había diluido. Sin embargo, operar en el Reino Unido te enseña que los supervisores no se andan con tonterías y que cuidar la solvencia forma parte de los deberes diarios del buen banquero. Sobre todo en un entorno político donde la aversión al riesgo es superlativa. http://quiosco.elmundo.orbyt.es/ModoTexto/PaginaNoticiaImprimir.aspx?id=25381543&sec=El%20Mundo&fecha=12_01_2015&pla=pla_11014_Madrid&tip… 1/2 12/1/2015 El precio del rigor | ORBYT [email protected] http://quiosco.elmundo.orbyt.es/ModoTexto/PaginaNoticiaImprimir.aspx?id=25381543&sec=El%20Mundo&fecha=12_01_2015&pla=pla_11014_Madrid&tip… 2/2