Tema 5: LOS REYES CATÓLICOS (RRCC). LA CONSTRUCCIÓN DEL ESTADO MODERNO. 5.1. LOS RRCC. LA UNIÓN DINÁSTICA. En 1469 se produce la unión matrimonial de la heredera de Castilla, Isabel y el heredero de Aragón, Fernando, que han pasado a la historia con el sobrenombre de RRCC por haber acabado con el poder del Islam en la Península Ibérica y por su obsesión por consolidar la fe cristiana entre sus súbditos. Ambos contrayentes pertenecían a la dinastía de los Trastámara y, en contra de lo que se pensó durante mucho tiempo, su casamiento no significó la creación de un Estado unido, sin fronteras, y con unas instituciones, unas leyes, una lengua y una moneda comunes. Sí contribuyó, no obstante, a la creación de la denominada Monarquía Hispánica. Cabe señalar que sendos monarcas contaron con diversas oposiciones para llevar a buen puerto su unión y que su matrimonio se produjo años antes de que ambos accedieran a los tronos de Castilla y Aragón. Isabel tuvo que superar tanto la oposición de su hermanastro Enrique IV, rey de Castilla, como la de Portugal, que querían que la corona castellana pasara a manos de la supuesta hija de Enrique, Juana, prometida a Alfonso V de Portugal. De hecho, aunque Isabel se autoproclamó reina en 1474, tuvo que librar una guerra civil entre 1474-79 frente a los partidarios de Juana para acceder efectivamente al trono tras la firma del Tratado de Alcaҫovas. Fernando por su parte se convertirá en rey tras la muerte de su padre Juan II en 1479. A partir de ese momento ambos reinos ponen las bases para la construcción de un Estado Moderno que se cimentará sobre todo en Castilla y que se consolidará cuando su nieto Carlos de Habsburgo herede todo el patrimonio familiar que le correspondía. 5.2. LOS RRCC. LA CONQUISTA DEL REINO NAZARÍ. El acontecimiento que analizamos a continuación está estrechamente relacionado con el sobrenombre de RRCC con el que hoy conocemos a Isabel y Fernando. Concretamente se acuñó dicho apelativo para referirse a ellos por haber acabado con el poder del Islam en la Península Ibérica y por su obsesión por consolidar la fe cristiana entre sus súbditos. Efectivamente, y tras 8 siglos de presencia musulmana en la Península, la Guerra de Granada (1481-1492) culmina la reconquista cristiana. El desarrollo de la misma, improvisado en ocasiones, puede dividirse en 3 grandes fases: -Conquista y defensa de Alhama (1481-84). La excusa para el comienzo de la guerra fueron los continuos enfrentamientos entre cristianos y musulmanes en la frontera del reino nazarí, que ocupaba básicamente las actuales Málaga, Granada y Almería. En 1482, Diego Ponce de León, marqués de Cádiz, se hace con el control por sorpresa de la Alhama, una fortaleza en pleno corazón estratégico del reino nazarí. -Toma de Málaga (1485-87). Etapa decisiva que culmina con la ocupación la ciudad andaluza y el sometimiento a la esclavitud de la población musulmana. -Rendición de Granada (1488-92). Salvo Baza, el resto de las plazas nazarís se entregaron sin apenas oponer resistencia. El 2 de enero de 1492, tras la firma de unas capitulaciones públicas en Santa Fe con el último rey nazarí, Boabdil, las tropas castellanas entran en la Alhambra y culminan la incorporación del antiguo reino nazarí a Castilla. A pesar de que durante el reinado de los RRCC se produjeron acontecimientos muy relevantes, la conquista del reino nazarí fue vista por los contemporáneos como su logro más importante. Asimismo, la victoria sobre el último reducto del Islam en la Península, fue un instrumento de propaganda para Isabel y Fernando a nivel internacional, mientras que a nivel interno contribuyó a consolidar la autoridad de los reyes frente a la nobleza rebelde. 5.4. LA ORGANIZACIÓN DEL ESTADO BAJO LOS RRCC: INSTITUCIONES DE GOBIERNO. En 1469 se produjo la unión matrimonial de los herederos de Castilla y Aragón, Isabel y Fernando, ambos pertenecientes a la dinastía de los Trastámara. Unos años después, ambos accedieron efectivamente a sus respectivos tronos (1474 Isabel, 1479 Fernando) y en contra de lo que se pensó durante mucho tiempo, su casamiento no significó la creación de un Estado unido, aunque pondrán las bases de la Monarquía Hispánica y del Estado Moderno en la Península. Sí compartieron su deseo por centralizar el poder del Estado encarnado en los monarcas, cuya autoridad reforzaron sobre todo en el caso de Castilla. Los RRCC potenciaron instituciones ya existentes, las modificaron o bien les dieron un nuevo contenido. Destacan especialmente las medidas adoptadas con respecto al gobierno central de los reinos, a las Cortes, a la administración de justicia y al orden interno de las Coronas, sobre todo en la castellana: a) Reformas en la Corona de Castilla. a.1. Reformas en el gobierno: el Consejo Real de Castilla, creado en el siglo XIV, adoptó su forma definitiva como órgano supremo de gobierno e instancia judicial superior. Asimismo se creó el Consejo de las Órdenes Militares para la administración de las tres órdenes castellanas (Santiago, Alcántara y Calatrava) y la antigua Cancillería fue sustituida por secretarios reales. a.2. Las Cortes: estas se convirtieron en asambleas dóciles reducidas a financiar empresas regias, como las campañas mediterráneas en Italia y África. a.3. Administración de justicia: se llevó a cabo en 3 ámbitos: a nivel local actuaban los corregidores, en segunda instancia figuraban las chancillerías o audiencias (ej: Valladolid) y por encima de estos tribunales el mismísimo Consejo Real. a.4. Orden interno: se procedió a la creación de la Santa Hermandad (1476) con el propósito de perseguir, juzgar y ejecutar a los delincuentes en todo el reino. b) Reformas en la Corona de Aragón. Se creó el Consejo de Aragón (1494) y se confirmaron los privilegios y fueros de Valencia, Aragón y Cataluña. Destacará también la solución al conflicto de los remensas a partir de la Sentencia Arbitral de Guadalupe (1486) y la imposición del sistema de sorteo en el Consejo barcelonés para elegir a los principales cargos públicos. 5.5. LA PROYECCIÓN EXTERIOR BAJO LOS RRCC. POLÍTICA ITALIANA Y NORTEAFRICANA. Desde finales del s. XV Isabel y Fernando continuaron los objetivos en política exterior marcados por los Trastámara en Castilla y Aragón. No obstante, no siempre fue posible compatibilizar los intereses de ambos reinos, como sucedió con la antigua alianza castellana con Francia, que fue sustituida por una política de cerco al reino galo impuesta desde Aragón. Los objetivos de la política exterior de Isabel y Fernando fueron los siguientes: 1. La recuperación de los territorios perdidos por los Trastámara aragoneses (Navarra, Rosellón, Cerdaña y Nápoles), reivindicados por Fernando por considerarlos parte del patrimonio familiar. 2. La consolidación de la expansión mediterránea de la Corona de Aragón. 3. El avance de la expansión atlántica del reino de Castilla. Para la feliz consecución de estos objetivos los RRCC emplearon 3 instrumentos claves: una diplomacia ágil; la creación de un ejército permanente y una hábil política matrimonial para lograr las alianzas necesarias, destacando especialmente el casamiento de su hija Juana con Felipe de Habsburgo, de cuya unión nacerá Carlos I. -Política italiana. En este ámbito chocarán los intereses de la Corona de Aragón con Francia. El país vecino entregó a los aragoneses Rosellón y la Cerdaña, pero como contrapartida invadió Nápoles. La actuación estelar de Gonzalo Fernández de Córdoba, el Gran Capitán, al mando del ejército de los RRCC, permitió finalmente al los Trastámara derrotar al los franceses. -Política norteafricana. Como consecuencia de la conquista de Granada, entre 1497 y 1510 la Corona de Castilla realizó diversas expediciones por la costa norteafricana. Su objetivo no era otro que garantizar la seguridad política y comercial del Mediterráneo occidental frete a la piratería berberisca y la expansión otomana. Asimismo estas expediciones se plantearon en términos de cruzada contra el infiel y fueron diseñadas para la ocupación de plazas estratégicas como Melilla, Orán, Bugía y Trípoli. Cabe resaltar finalmente en materia de política exterior la incorporación a la Corona de Castilla de parte de Navarra en 1515 y de Canarias a raíz del Tratado de AlcaÇovas (1479) y después de superar la resistencia indígena. 5.6. EL DESCUBRIMIENTO DE AMÉRICA. A lo largo del siglo XV, Castilla y Portugal se postularon como los dos reinos pioneros en las exploraciones atlánticas. Ambas coronas disponían de una marina cualificada, de enclaves insulares estratégicos para utilizar como bases, habían perfeccionado la cartografía, empleaban instrumentos como la brújula y el astrolabio y navegaban en carabelas. Los marinos portugueses estaban, no obstante, más adelantados y en el último tercio del siglo habían bordeado ya costa africana occidental en busca de la ruta hacia las Indias y las especias. Castilla, por su parte, solo disponía en la ruta atlántica de las islas Canarias. En este contexto surgió la figura de Cristóbal Colón, quien en 1486 expuso ante la corte castellana su proyecto de llegar a las Indias por la ruta oeste. Pese a no convencer su proyecto a los asesores de los RRCC, Colón consiguió la en las postrimerías de la Guerra de Granada firmar las Capitulaciones de Sta. Fe, una merced regia por la que Colón era nombrado almirante, virrey y gobernador general de las tierras que descubriera, recompensándole además con una décima parte de las riquezas que encontrara. Entre 1492 y 1504, Colón organizó hasta 4 viajes: 1. El primer viaje (1492): Partiendo del puerto de Palos (Huelva), con la compañía de los hermanos Pinzón, una tripulación que rondaba los a cien marinos y a bordo de las naves Pinta, Niña y Santa María, el 12 de octubre Colón llega a Guanahaní (rebautizada entonces como San Salvador y en la actualidad Isla Watling de Bahamas). Continuaron hasta Juana (Cuba) y la Española (Santo Domingo y Haití, donde fundan el fuerte Navidad), para regresar finalmente a la Península en marzo de 1493. 2. El segundo viaje (1493-1496): Con más de mil hombres en esta ocasión, Colón exploró otras islas como las Antillas menores, San Juan Bautista (Puerto Rico) y Santiago (Jamaica). En este viaje comenzaron las hostilidades con los indígenas, a los que se sometió por la fuerza e incluso se enviaron a la península como esclavos. Las tensiones con Portugal por el control del Atlántico se incrementan notablemente por estas fechas, siendo necesario un acuerdo como el Tratado de Tordesillas (1494) a fin de repartirse las zonas de influencia de cada Corona. 3. El tercer viaje (1498-1500): Colón siguió entonces una ruta más hacia el sur, descubriendo la isla de Trinidad y llegando a la desembocadura del río Orinoco. 4. El cuarto viaje (1502-1504): Su objetivo era encontrar algún paso que condujese a las deseadas islas de las especias, explorando así la costa de América Central. Colón morirá en 1506 convencido de haber llegado a Asia. Finalmente en 1513, Vasco Núñez de Balboa, tras atravesar el istmo de Panamá, descubrió el mar del Sur (océano Pacífico), confirmando así que un continente entero se interponía entre Europa y las especias.