05 10 Andrés Calamaro es, para bien y para mal, desde hace más de una década uno de los nombres principales del rock argentino. El próximo 14 de mayo estará en Montevideo. la diaria | La lengua popular | [email protected] www.ladiaria.com.uy MONTEVIDEO URUGUAY 29 05 UN DISCO POR MES 05 05 10 Karina Buhr: Eu menti pra voçê S ensual y sutil, Karina Buhr es el nuevo nombre que suena entre los pasillos de los vecinos, entre los más ávidos escuchas de la vanguardia brasilera. Sorpresa y media de una vieja conocida por caminos inusitados, proveniente del valioso colectivo Comadre Fulosinha, grupo que rescata los regionalismos pernambucanos y desde donde también se desprendieran los nombres de Isaar França y Alessandra Leão, caracterizado por la interpretación de ritmos nordestinos en los que predominan la percusión y las voces femeninas. Hay músicos que deslumbran con su técnica y/o virtuosismo; hay también aquellos que tocan al servicio de la canción y cada impulso es tan necesario como preciso y también así deslumbran. Sin embargo, ambos precisan de la materia prima, de la canción con la que seducirán. Karina Buhr tiene un arma perfecta y se llama “Eu menti pra voçê”, canción que abre y da nombre a su debut solista. “Eu sou uma pessoa má/ Eu menti pra você/ Você não podia esperar ouvir uma mentira de mim/ Que pena, não sou o que você quer de mim”: con la sinceridad a flor de piel enamora con una canción magnética de ésas para escuchar en la radio, pop rock del mejor. Dejó el nordeste para vivir en la gran urbe, São Paulo la acogió y ella le devolvió el disco más urbano y sorprendente, dejando los regionalismos de lado para sacudir la efervescente escena paulista y “fazer sucesso” en Brasil. Con lo mejor de la escena paulista a su disposición: Guizado le imprime exotismo con su sonido cool de trompeta asordinada mientras que Edgar Scandurra (Ira) y Catatau (Cidadão Instigado) colocan las guitarras más increíbles para armar un disco independiente que está a la altura de los circuitos globales y no se queda en la localía. El cuadro se complementará con: Bruno Buarque (batería), Mau (bajo), Dustan Gallas (teclados), Otávio Ortega (teclados y bases) y Marcelo Jeneci (acordeón y piano) a los que eventualmente se sumarán la actriz alemana Juliane Elting y el percusionista cubano Pedro Bandera. Multifacética y experimental, nacida en Bahía, criada en Pernambuco, música, pintora y actriz de teatro, define su disco como una parte de lo que hace y donde sus artes confluyen en la experimentación. Música alternativa impregnada de sensibilidad femenina irónica y provocativa, no se queda en el hit y va hasta el mundo sonoro de Tom Zé y PJ Harvey. Con letras irónicas como “Ciranda do incentivo”, donde dice: “yo no sé negociar, sólo sé tocar mi tamborcito, pero necesito entrar en el gráfico del mercado fonográfico”, ironizando sobre la ley del incentivo a la cultura y exponiendo una ciranda como ritmo regional pero súper electro trastocado. O mejor: en “Nassira e Najaf” sobre el fatal escenario de Bagdad bien femenina y naif dice: “dormite antes de que pase el misil, dentro de un segundo puedo no tenerte más”, imprimiéndole ironía a la estupidez de la guerra vista desde los ojos de una madre, para luego cantar un estribillo fatal: “Dorme logo antes que você morra”. Debut magistral, crucemos los dedos y, atentos, quién dice no nos dé una visita. n Mauricio Bosch la diaria | | [email protected] www.ladiaria.com.uy MONTEVIDEO URUGUAY INVENTARIO 2 1 Dos caminos Las entradas para el recital de No Te Va Gustar en el Teatro de Verano se agotaron dos semanas antes, así que la banda realizará una segunda función el sábado 8. El show será el cierre de gira de los recitales basados en el álbum Una noche en la ópera Damon Albarn, líder de Blur y Gorillaz, está escribiendo una ópera junto al escritor de cómics Alan Moore (V for Vendetta, From Hell, Watchmen) y el dibujante Jamie Hewlett, cocreador artístico de los Gorillaz. Según dijo Albarn, la ópera tratará sobre John Dee, matemático, astrónomo, navegante y ocultista inglés del siglo XVII, que fue consultor de la reina Elizabeth I. Ésta no es la primera incursión en la ópera de Albarn. En 2007, también junto a Jamie Hewlett, escribió Monkey: A Journey to the West. n 4 22 El camino más largo. El grupo, que festejó el año pasado los 10 años de la edición de su primer álbum, Solo de noche, volverá a los estudios de grabación este año. Abrirá los espectáculos la banda La Saga, que está estrenando su nuevo disco, El vendaval). n 3 A la vieja usanza Dead Weather, uno de los muchos proyectos paralelos de Jim White (conocido, entre otras cosas, por ser la mitad de White Stripes), del que ya hemos hablado aquí, lanzará su segundo álbum, titulado Sea of Cowards, el 10 de mayo. Para presentarlo en sociedad la banda realizó una preaudición virtual para sus fans durante todo el viernes pasado, donde se pudo escuchar el disco completo. Lo particular es que los temas no estaban disponibles para escuchar en Las fiestas de mañana Desde sus inicios en 1999, el festival musical británico All Tomorrow Parties se ha destacado por su personalidad. Sin espónsors y con un carácter “íntimo” el ATP se distingue además por la presencia de distintos curadores que eligen a las bandas participantes. La edición de este año, que comienza este viernes, estará curada en su primera mitad (del 7 al 9 de mayo) por el dibujante Matt Groening, crea- dor de los Simpson, y por la reunida banda estadounidense Pavement en la segunda (del 14 al 19). Groening eligió, entre muchos otros artistas, a Iggy Pop con su banda The Stooges, Spiritualized, The xx, Panda Bear, Daniel Johnston, Deerhunter, Amadou & Mariam y Juana Molina. La edición estadounidense del festival, que se realiza desde 2002 y que tendrá lugar en diciembre, estará programada por el cineasta Jim Jarmush. n 5 algún reproductor digital, como es usual, sino que un video mostraba un tocadiscos con el nuevo álbum sonando. A la vez, el grupo tocará el disco en vivo en una presentación que podrá verse a través de su Myspace (myspace. com/thedeadweather). n Coordinador del suplemento: Andrés Torrón / Fotografía: Sandro Pereyra / Corrección: Cecilia Blezio / Armado: Florencia Lista Canciones compartidas En principio aparece como un recital bastante inusual: tres neocantautores de países distintos, Franny Glass, de Uruguay, Pablo Dacal, de Argentina y Xoel López, de España, compartiendo canciones y versionando a algunos de sus principales referentes. El argentino Pablo Dacal ya ha tocado más de una vez en Montevideo. Para Xoel López, español que estuvo viviendo un tiempo en Buenos Aires, será su primera presentación montevideana. El espectáculo llamadoCanciones compartidas será el 8 de mayo a las 21.00 en la Sala Zavala Muniz. El 12, el recital se repetirá en Buenos Aires. n VIENE CAT POWER Poder felino y mucho más T ras un abril bastante nutrido de buenos espectáculos (Jonathan Richman, el Cigala, Cuarteto de Nos, entre muchos otros), mayo se presenta como un mes más que atractivo en materia de recitales. De las dos actuaciones de No te Va Gustar en el Teatro de Verano y de la presentación de los cantautores Franny Glass, Pablo Dacal y Xoel López se da cuenta en la sección “Inventario”, y hay una amplísima nota sobre Calamaro en las páginas centrales. Pero hay muchas cosas más y de las más variadas. Por ejemplo, la segunda presentación en Montevideo el increíble trío Medeski, Martin & Word, el 16 en La Trastienda, el recital de los españoles Gatillazo, el 23 en el Teatro de Verano, y la presencia de los colombianos Bomba Estéreo el 7, y de Melingo el 8, también La Trastienda. Lo más destacable es, sin embargo, la presentación a fin de mes (el 28) de Cat Power en el Plaza. La artista estadounidense es uno de los nombres más importantes de la movida indie, movida que, pese a su mote de independiente, se está convirtiendo en el mainstream de la música popular anglosajona. Chan Marshall (tal es su nombre), nacida en Georgia y criada en Cat Power. / FOTO: DIFUSIÓN, STEFANNO GIOVANNI varios estados del sur estadounidense, comenzó su carrera artística en New York al lado del rock experimental independiente. Sus canciones rescataban algo de la tradición sureña entre el blues, el soul y el folk, con un espíritu más experimental y con vuelcos a la improvisación. Acompañándose a sí misma a veces con un piano a veces con una guitarra eléctrica, Cat Power fue construyendo un personaje artístico donde, además de las canciones, pesaban su fuerte personalidad en el escenario, sus imprevisibles shows que podían terminar abruptamente, sus particulares versiones de temas ajenos, además de su retiro y desaparición de la escena por más de un año. Pero el éxito masivo le llegó con The Greatest, editado en 2006, un álbum donde se juntó con un grupo de veteranos sesionistas de Memphis, en su mayor parte miembros de la banda de Al Green, y donde ahondó en sus raíces sureñas, sin hacer para nada un álbum de género. Su siguiente y hasta ahora último álbum es Jukebox (2008), su octavo álbum y el segundo casi íntegramente dedicado a las versiones de temas ajenos (el primero fue The Covers Record, de 2000). En el disco, Marshall se mete con clásicos de la música norteamericana, como “New York, New York” en una versión casi irreconocible o “Ramblin’ Man” (aquí “Ramblin’ Woman”), de Hank Williams, desarma temas de James Brown (“Lost Someone”) o Bob Dylan (“I Believe in You”) y cumple la proeza de reinventar “Blue”, de Joni Mitchell. Convertida en artista cool y con varios de sus temas musicalizando avisos publicitarios, el encanto de Marshall no ha disminuido. Algo que tendremos oportunidad e comprobar (o no) el próximo 28. n 05 05 10 MONTEVIDEO URUGUAY PREMIOS GRAFFITI Están los nominados • Como Tema del Año están nominados “El gran pez”, de Alejandro Balbis, “El hijo de Hernández”, de Cuarteto de Nos, “Los Antídotos”, de Snake, “Respira”, de La Vela Puerca, y “Sin darse cuenta”, de Emiliano y El Zurdo. • En la categoría Mejor Álbum de Rock Alternativo están • Como Mejor Álbum de Rock están nominados Bipolar, de Cuarteto de Nos, Doméstico, de Vieja Historia, El diario de la serpiente, de Snake, Macumba, de Hablan Por La Espalda, y Parte del destino, de La Galponera Soul. • En la categoría Mejor Álbum Pop están Bipolar, de Cuarteto de Nos, Fan pa’ los amigos, de Ruben Rada, Bajofondo presenta Santullo, de Santullo, Temporada de conejos, de Martín Buscaglia, y Volvé a jugar, de Martina Gadea. • Como Mejor Álbum de Pop Alternativo están nominados Cierro los ojos y todo respira, de www.ladiaria.com.uy • En la categoría Mejor Álbum del Año están nominados Bipolar, de Cuarteto de Nos, El gran pez, de Alejandro Balbis, Hermano te estoy hablando, de Jaime Roos, Bajofondo presenta Santullo, de Santullo, y Volvé a jugar, de Martina Gadea. Cierro los ojos y todo respira, de Buceo Invisible, Complicado, de Boomerang, Estar en el cielo, de Dante Inferno, Macumba, de Hablan Por La Espalda, y Bajofondo presenta Santullo, de Santullo. Santiago Tavella y Roberto Musso, durante la 5a edición de los Premios Graffiti. / FOTO: JAVIER CALVELO (ARCHIVO, MAYO DE 2007) Buceo Invisible, Estas cosas no son mías, de Martín Rivero, Hay un cuerpo tirado en la calle, de Franny Glass, Laurie, de Laurie y Trelew, de Trelew. Emiliano y El Zurdo, El gran pez, de Alejandro Balbis, Bajofondo presenta Santullo, de Santullo, y Volvé a jugar, de Martina Gadea. • En la categoría Mejor Artista Nuevo están nominados los álbumes Anfibio, de Nico Ibarburu, Cantor de esquina, de • Como Mejor Productor los elegidos son Gustavo Montemurro, Jaime Roos, La Vela Puerca, Nico Cota y Juan Campodónico. n | [email protected] La lista completa de nominados puede consultarse en la página de los premios (www.premiosgraffiti.com.uy). Éste es un resumen de las categorías “más importantes” (clasificación, por supuesto, discutible) dentro de lo que tiene que ver con el rock. la diaria | E l lunes pasado se dieron a conocer las nominaciones a los Premios Graffiti 2010. La ceremonia de la octava entrega de los Premios será el próximo 3 de junio a las 21.00, en el Cine Plaza y contará con shows en vivo de Mal Dormidos, Carmen Pi y Vendetta, Maia Castro, Larbanois-Carrero y Alejandro Balbis. Dentro de los nominados al premio, que comenzó siendo estrictamente roquero y fue ampliando su espectro hasta ser una entrega de premios a la música uruguaya, llama la atención la repetición de algunos artistas, nominados más de una vez en categorías muy distintas, lo que puede hablar tanto de un muy saludable eclecticismo artístico como de cierta indefinición entre los miembros del jurado, según el estado de ánimo con el que se mire la lista. También puede discutirse bastante el criterio de nominar como mejor artista nuevo a músicos de larguísima trayectoria pero que, es cierto, nunca habían editado en forma solista. 3 ANDRÉS CALAMARO Un loco que se dio cuenta 05 05 10 Tocó con todos. Su compulsivo y ecléctico repertorio musical le deparó éxitos y fracasos. Probó de todo. A los 48 años sigue siendo un varón tierno que quiere seguir de pie. Se alejó y regresó. Ahora tiene multitudes que lo esperan afuera. El próximo 14 de mayo, Andrés Calamaro presentará en vivo su disco Obras incompletas, en el Velódromo Municipal de Montevideo. la diaria | | [email protected] www.ladiaria.com.uy MONTEVIDEO URUGUAY C 4 uando lo conocimos tocaba el teclado y cantaba “Sin gamulán”, “Mil horas” y “Costumbres argentinas” con Los Abuelos de la Nada, uno de los grupos más importantes del rock argentino de los 80. Aunque Andrés Calamaro ya no estaba en la banda cuando murió Miguel Abuelo –de sida, el 26 de marzo de 1988, a los 42 años–, nunca dejó de evocarlo con tristeza en sus canciones, como si buscara su aprobación desde el más allá. Ojalá Miguel Abuelo haya podido seguir su carrera en tiempo real desde donde se encuentre su alma, pues además de los cuatro trabajos que grabó con Los Abuelos de la Nada, Andrés Calamaro editó más de 25 discos –varios de ellos múltiples– a lo largo de su carrera, sin contar sus innumerables colaboraciones como músico y productor artístico de otros colegas. No es sencillo ingresar al hiperproductivo planeta Calamaro, razón por la cual resultan muy útiles recopilaciones como su último disco, Obras incompletas (2009), que pronto será viejo pues el 1º de junio saldrá a la venta su nuevo material, On the rock. Uno más para atender. Tocó con todos Pocos músicos han sido tan sociables y abiertos artísticamente como Andrés Calamaro. Igual que “Los Orozco” –la canción de León Gieco– Calamaro “tocó con todos”. Su debut musical fue en 1978, como tecladista del grupo Raíces –del uruguayo Beto Satragni, fusión de candombe, jazz, rock, funk y música brasilera– con quienes grabó el disco B.O.V. Dombe. Luego pasó por las bandas Elmer’s Band –estilo The Platters– y Trigémino –rock progresivo. Curiosamente, Calamaro también fue parte del germen de Soda Stereo, cuando armó Proyecto Erekto con Zeta Bossio, al que luego se sumó Gustavo Cerati. Soda Stereo nació cuando Calamaro se fue a Los Abuelos de la Nada, recomendado por Alejandro Lerner –el grupo de Miguel Abuelo se completaba con Daniel Melingo, Cachorro López y Gustavo Bazterrica, bajo la producción de Charly García. En apenas cuatro años Calamaro ya tenía todos estos amigos y su carrera recién comenzaba. Estando en Los Abuelos de la Nada, Calamaro también fue parte de la banda soporte que acompañaba en vivo a Charly García, quien luego le produjo su primer disco solista, Hotel Calamaro (1984). Por esos días también tocó como tecladista invitado en el primer disco de Los Twist, La dicha en movimiento, y en el disco Privé, de Luis Alberto Spinetta. En 1985 editó su segundo disco solista, Vida cruel, cuya escasa repercusión lo llevó a probar suerte como productor de los primeros discos de Los Fabulosos Cadillacs, Los Enanitos Verdes, Don Cornelio y la Zona, y la banda chilena UPA. Como si hicieran falta pruebas del carácter sociable de Calamaro, en 1987 tuvo un programa en Radio Rivadavia llamado Bienvenidos al Hotel, donde seleccionaba y comentaba canciones. Allí conoció al músico Ariel Rot, quien le produjo sus siguientes discos, Por mirarte (1988) y Nadie sale vivo de aquí (1989), iniciando una amistad que cambiaría tanto el rumbo artístico como la vida personal de Andrés Calamaro. Para entender esta agotadora interacción entre los músicos argentinos, que incluso resulta asombrosa por lo improbable que sería hoy en día, es necesario contemplar el contexto social y político de esa época. El rock argentino vivió su mayor apogeo durante los 80 debido a la guerra de Malvinas. El régimen militar prohibió la difusión de toda la música en inglés, fomentando el nacionalismo cultural justo cuando las nuevas generaciones descubrían el punk y la new wave. Cualquier banda nueva alcanzaba el éxito en cuestión de semanas y así nació una industria en torno al rock. La misma dictadura, que reprimía a los que usaban raros peinados nuevos, organizaba festivales masivos de rock para alentar a los soldados que mandaba a la guerra con un tenedor. Los artistas que venían tocando desde antes –como García, Spinetta, Abuelo, Pappo, etcétera–, llegaban a la cima y los que recién comenzaban eran rápidamente reclutados por los mayores, pues faltaba gente para abarcar un circuito en crecimiento –era el auge de locales como el Parakultural, Einstein, Cemento y Obras Sanitarias, entre otros–, grabar un disco tras otro y salir de gira por el país. Todos los músicos se conocían, se intercambiaban de banda y se recomendaban entre sí de un modo tan frenético como inevitable. En ese contexto, Calamaro estaba en su tinta. All you need is pop Que los amigos de sus amigos fueran sus amigos podía ser divertido y artísticamente muy productivo pero no le garantizaba un retorno económico a Andrés Calamaro. Con sus discos en solitario había logrado buenas críticas pero escasas ventas. A fines de los 80 Argentina devaluó la moneda y comenzó una recesión que golpeó también a la cultura, coincidiendo con la desaparición del vinilo. Buscando cambiar su suerte, en 1990 se fue a vivir a España junto a su nuevo amigo Ariel Rot, donde formaron Los Rodríguez, grupo pop-rock que editó cuatro discos: Buena suerte (1991), Disco Pirata (1992), Sin documentos (1993) y Palabras más, palabras menos (1995). El éxito de Los Rodríguez consagró a Calamaro como músico referente de habla hispana y, con millones de discos vendidos tanto en España como en toda Latinoamérica, comprobó que nadie es profeta en su tierra. Incluso comenzaban a llamarlo poeta. Durante sus años en España, el sociable Calamaro hizo nuevos amigos y mantuvo sus costumbres argentinas de interactuar con varios músicos. Grabó discos, shows en vivo, canciones y colaboraciones junto a músicos como Loquillo, Enrique Bunbury, Joaquín Sabina, Extremoduro, Raimundo Amador, Gabinete Caligari, Jaime Urrutia y muchos más, vínculos que mantiene hasta el presente. En los últimos años participó del DVD En Joy, de Jaime Urrutia (2006), grabó un disco en vivo junto a Fito & Fitipaldis (2008), cantó junto a Loquillo la nueva versión de “Hombre de negro”, de Johnny Cash (2009), entre muchas otras sociedades musicales. Ya en su disco El Salmón había grabado la canción “All you need is pop” junto a Bunbury, experiencia que repitió para su próximo disco, On the rocks, pues el español participó en el tema “Te solté la rienda”. Quizás una de las grabaciones que mejor resume esta comunión con sus colegas hispanos es la canción “¿Dónde estás?”, cantada por Calamaro, Loquillo, Bunbury y Urrutia, incluida en el disco Patente de corso, de este último, que fue un hit en la madre patria. Si te dicen que duermo de día Disueltos Los Rodríguez a fines de los 90, Calamaro volvió a su país y retomó su carrera solista, editando uno de los discos más vendidos en la historia del rock argentino, Alta suciedad (1997). A partir de allí, el insaciable Calamaro comenzó una etapa de superproducción de canciones, emanadas del manantial de sus excesos, que fueron la catarsis de sus noches maldormidas. Compuso de un tirón 100 canciones, de las que sólo se editaron 37 en el disco doble Honestidad brutal (1999), considerado hasta hoy uno de sus mejores trabajos. No conforme por haber dejado afuera tanto material, acumuló otras 500 canciones, de las que preseleccionó 300 y grabó 103, editadas bajo el nombre de El Salmón (2000), un álbum que quedará en la historia por contener cinco CD con temas inéditos. Siguiendo la dirección del salmón, Calamaro bajó su perfil público y no se supo casi nada de él durante más de cuatro años, excepto que no dormía, que seguía componiendo temas compulsivamente y que había transformado su casa en un estudio de grabación al que llamó DeepCamboya. Con ese nombre armó un sitio en internet, donde proclamó que “la música es de quienes la quieren escuchar y de nadie más”, subió sus nuevas canciones al sitio iniciando una campaña a favor de la libre circulación del arte y en su web oficial montó un ciberestudio virtual de grabación, al que llamó Radio Salmón Vaticano. Quizás para acallar la ola de rumores que lo daban casi por perdido a nivel artístico a causa de su adictiva ingesta de sustancias, en 2004 lanzó El cantante, un disco de boleros y versiones del cancionero latinoamericano. Su negativa a tocar en vivo hizo correr el rumor de que había olvidado las letras y la música de sus propias canciones, y algo de cierto había. Cuando finalmente Calamaro volvió a tocar –animado por los músicos de Bersuit, que oficiaron de banda soporte– cantó varias canciones leyendo las letras, pese a que el repertorio estaba repleto de hits. De ese show resultó un disco en vivo, El regreso (2005), cuya buena repercusión lo ayudó a regresar también al mundo real. Curiosamente, antes de su regreso, casi como temiendo lo peor, se había gestado un disco tributo, Calamaro querido! Cantando al Salmón (2006), con versiones de artistas como León Gieco, Fabiana Cantilo, Los Auténticos Decadentes, Árbol, Fito Páez, Julieta Venegas, entre otros; incluso Los Fabulosos Cadillacs volvieron a reunirse para homenajear a Calamaro, en –su nueva– vida. Sus siguientes discos, El palacio de las flores (2006) y La lengua popular (2007) fueron exquisitas muestras de buen gusto y madurez, confirmando que Andrés Calamaro sigue vivo y nunca se olvidó de recordar. n Lorena Bello 05 05 10 Lengua popular. Durante la última década, Calamaro fue tomado de referente por otros músicos; algunos adoptaron su estilo compositivo y otros, más alevosamente, imitaron su manera de cantar. Nació así una camada de artis- tas “calamarescos”, entre los que figuran Pity Álvarez (confeso admirador de Calamaro); Coti Sorokin (el que canta “Nada fue un error”, quien casualmente fue guitarrista de la banda de Calamaro durante algunos años); Estelares (algunas melodías de sus primeros trabajos tienen un aire similar y no es casualidad que Calamaro cante como invitado en uno de sus temas más populares, “Moneda corriente”). A caminar solito. Las drogas estuvieron siempre presentes en la vida y en la obra de Calamaro, incluso fue llevado a juicio por decir durante un concierto: “Qué linda noche para fumarse un porrito”. Durante sus días en España conoció el éxito en forma proporcional a los excesos. En una entrevista publicada en la revista argentina THC (Nº 13, enero de 2008) confesó: “En Madrid fui un heavy hash smoker […] siempre tenía un tupper lleno de cogollos”; “Grabé discos bajo los efectos de casi todo lo que conozco: dosis homeopáticas de San Pedro con hash, speedball por la nariz, MDMA con agua tónica, tiza amarillenta, escama peruana, alita de mosca, porro, vino tinto, papel metálico, éxtasis”. n www.ladiaria.com.uy No me excita cagar en el mar. El exceso de rima en los versos de Calamaro es agobiante. Abusa de la rima consonante llegando a pegar conceptos absurdos para combinar forzadamente las sílabas. Ejemplos al vuelo: “Te quiero/ pero te llevaste la flor/ y me dejaste el florero”; “Vieja, me quedo en casa/ tomando mate y bizcochos de grasa”; “Hoy no me comí la empanada/ tenía todo y me quedé sin nada”. El colmo: a su hija la bautizó como Charo Calamaro. ¿No será mucho? | [email protected] El tango como ninguno. Curiosamente, nadie se animó a decirle a Andrés Calamaro que no debería cantar tangos. Los desafina demasiado, pero como los gustos hay que dárselos en vida editó un disco de tangos, Tinta roja (2006), del que únicamente se rescata la intención en la elección de las canciones por alguien que venía malherido. la diaria | Todo lo demás también MONTEVIDEO URUGUAY Andrés Calamaro. / FOTO: DIFUSIÓN, S/D DE AUTOR 5 EL RECORD CLUB DE BECK Una que sepamos todos 05 05 10 Juntarse con amigos a cantar canciones queridas. Suena a reunión veraniega con asado de por medio pero se trata de un proyecto que Beck viene llevando a cabo a través de su renovada página web. la diaria | | [email protected] www.ladiaria.com.uy MONTEVIDEO URUGUAY C uando las posibilidades del hipertexto eran aún una novedad en internet y en los hoy casi desaparecidos cd roms, algunos artistas que siempre se habían destacado por el uso creativo de las nuevas tecnologías, como David Bowie o Peter Gabriel, sorprendían con las novedades que una página web podía ofrecer. En tiempos de Youtube y Facebook, donde prácticamente cualquiera puede subir videos, mostrar fotografías o comunicar su estado de ánimo al instante, es difícil que una página de internet sorprenda más allá de buenas ideas de diseño. Es extraño que la renovación de la página web de un músico sea noticia. En el caso de Beck lo fue y no precisamente por su diseño o su interactividad sino por su contenido. Como los ejemplos citados más arriba Beck ha sido también un músico que siempre se ha destacado por su carácter innovador y asociado a los cambios tecnológicos. Su disco Odelay, de 1996, por ejemplo, radicalizaba las técnicas del recorte y pegue del hip hop, llevando al límite lo que se había hecho con las nuevas prácticas de edición musical no lineal, creadas gracias al uso de las computadoras. Todo esto en un contexto de canciones pop, que, pese al exceso de información que contenían, podían ser escuchadas y disfrutadas como tales. Con el paso del tiempo a Beck se le fue haciendo difícil mantener ese carácter de artista siempre innovador y renegó bastante de su estatus de músico vanguardista. Su nueva página web (beck. com), sin embargo, pese a su gran simplicidad, puede ser vista como la concreción de una nueva tendencia. En su página no se usan más recursos técnicos y de diseño que los disponibles para cualquier internauta: un formato de blog no muy diferente al que ofrecen varios sitios gratuitos sirve de alojamiento a videos y audio, subidos a sitios de almacenamiento gratuito como Vimeo y Soundcloud. Las novedades pueden leerse a través de Twitter, Facebook y Myspace. Es un uso muy inteligente de las cada vez más omnipresentes redes sociales de internet pero nada que no hayan hecho otras personas, mucho menos famosas. Beck junto a Devendra Banhart. / FOTO: DIFUSIÓN, S/D AUTOR Beck parece adelantarse un poco más, al inclinarse por usar la plataforma de Vimeo –que fue pionera en los videos de buena calidad a través de internet– en lugar de Youtube y se convierte en uno de los primeros músicos de alto perfil en utilizar el excelente servicio de Soundcloud, que permite a cualquier artista o aficionado subir su música al sitio, relacionarse con otros usuarios e incrustarla a la manera de los videos de Youtube en cualquier blog o red social. Pero más allá de eso, lo que más llama la atención es para qué usa Beck estas herramientas. La mayor novedad son tres nuevas secciones de la página. La llamada “Planned Obsolescense” muestra “enganchados” muy peculiares de música extremadamente variada, hecha por Beck y otros djs invitados. La sección “Irrelevant Topics” acerca conversaciones de Beck con otros artistas (hay una muy recomendable con Tom Waits). Y en la sección “Videotèque”, además de apreciar selecciones muy bizarras de fragmentos de programas de televisión japoneses y clips de Beck, puede verse el resultado del proyecto más ambicioso del sitio, el llamado “Record Club”. El club del disco Beck ha sido desde siempre un artista muy interesado en las colaboraciones con músicos muy diversos. El músico ha tocado con infinidad de artistas tanto en vivo como en discos y muchas veces en proyectos personales que no vieron la luz del día. Entre las muchas y variadas colaboraciones que ha tenido a lo largo del tiempo pueden destacarse sus interacciones con Sonic Youth, Caetano Veloso, Flaming Lips, White Stripes, Daniel Johnston, Cat Power o Devendra Banhart, por ejemplo. La idea de Record Club (club del disco) es bastante sencilla: juntar a un grupo de músicos en un estudio de grabación para versionar en un solo día y sin casi ensayo previo un álbum entero de un músico elegido. Así, hasta ahora Beck y los suyos han versionado los discos The Velvet Underground & Nico, de Velvet Underground, con la participación Nigel Godrich, Thorunn Magnusdottir de Fields, el actor Giovanni Ribisi y Joey Waronker; el primer disco de Leonard Cohen, Songs of Leonard Cohen, con Devendra Banhart, los integrantes de MGMT, Binki Shapiro, de Little Joy, y Andrew Stockdale, de Wolfmother; Oar, de Skip Spence, con Jeff Tweedy, de Wilco, Feist y Jamie Lidell; y Kick, de Inxs, con St. Vincent, Sergio Dias, de Os Mutantes, y los miembros de Liars. Como se ve, una colección –de discos y colaboradores– muy ecléctica. Lo más interesante del proyecto es que está hecho sin más afán que el artístico. Los músicos se reúnen en el estudio, escuchan los temas, los graban –generalmente en versiones muy alejadas de los originales y muy arriesgadas– y comparten todas esas horas juntos. El resultado del experimento se muestra en videos que semanalmente Beck sube a su sitio web. El proceso de Record Club es lo opuesto al hecho en álbumes del propio artista, como Odelay, que llevó meses de trabajo. “Viviendo en la era del Pro Tools y las nuevas técnicas de grabación el proceso de vuelve eterno”, dijo Beck en una entrevista con Pitchfork. “Hay infinitas posibilidades y desvíos que te distraen del hecho de simplemente tocar una canción y transmitir la emoción que esa canción tenía en su origen. Es algo de lo que los músicos rutinariamente se quejan. Así que pensé que podía ser divertido hacer algo extremadamente rápido y tener esa energía”. Tratar de hacer algo completamente distinto con clásicos como “Suzanne” o “So Long Marianne”, de Leonard Cohen, “Sunday Morning” o “Heroin”, de Velvet Underground, o echar nueva luz sobre el único y poco conocido álbum solista de Skip Spence, miembro de Jefferson Airplane y Moby Grape, es, por supuesto, algo sumamente riesgoso. El resultado artístico final de los temas de Record Club, como es lógico, es muy desparejo. No podía esperarse otra cosa de algo basado en la inspiración momentánea. Pero una buena muestra de cuán emocionante puede ser dar una nueva lectura sobre algo que está en la cabeza de casi todo el mundo es la reciente versión de “New Sensation”, de Inxs, con la voz de Annie Clark, de St. Vincent, y la guitarra de Sergio Dias, de Os Mutantes, entre otros. La canción, sin perder su esencia, se transforma en otra cosa y da una mirada completamente diferente sobre un tema más que trillado. Con este proyecto, Beck ha vuelto a mostrar que sigue siendo uno de los músicos más inquietos de su generación, más allá de sus altibajos, un artista en perpetua búsqueda, que puede haber tenido varios tropiezos pero con algunos –muchos– hallazgos que vale la pena tener en cuenta. n Andrés Torrón EN EL ESTUDIO CON BRUCE SWEDIEN Detrás del vidrio de Thriller Más que un nombre Obviamente, lo primero que motivó a Lamschtein a hacer el exclusivo curso fue el prestigio casi mítico de Swedien. “No tanto por con quién había trabajado sino por los productos finales que logró. Generalmente la gente mide quién es alguien de acuerdo a con quién trabajó. Pero el producto no es el artista. Él no hizo a Michael Jackson, él hizo Thriller. Y ese disco es un álbum perfecto de la primera nota a la última, mientras que Jackson no es un artista perfecto, es alguien muy discutible. Además, estamos hablando de una persona que tiene 75 años y 60 de experiencia profesional, algo muy difícil de encontrar en cualquier disciplina. Él empezó muy joven, en una época incluso anterior al uso de la cinta magnética, y sigue trabajando todavía. O sea que acompañó toda la evolución tecnológica de la historia de la grabación. Toda esa experiencia, más el hecho de haber grabado algunos de los discos más grandes –en varios sentidos– de la historia de la música pop, le da un carácter casi de gurú. Y se expresa en términos absolutos de un nivel de seguridad y absolutismo que puede llegar a asustar. No porque sea autoritario o distante; al contrario, es la persona más cálida del mundo, y tuvo un trato más que afectuoso conmigo y con todos, pero es algo casi místico. Y uno tiene que transformarse en un creyente para seguirlo”. De los muchos juicios categóricos de Swedien que causaron cierto resquemor en su actitud de “creyente”, Lamschtein destaca la frase: “No aprendes a grabar discos escuchando discos”. “Es una frase extremadamente dura, porque si yo alguna vez aprendí a grabar discos, honestamente, fue escuchando discos. Yo escuché mucha más música gra- Cinta original del master de Thriller. / FOTO: CÉSAR LAMSCHTEIN bada que música acústica y fue más importante en mi formación. Yo estimo que una de las cosas por las que él sostiene eso es por el tiempo en el que le tocó nacer y crecer”. Una de las cosas que le pregunto a Lamschtein es qué tanto se puede trasladar la experiencia de Swedien, trabajando al mayor nivel en la industria musical más poderosa del mundo, a nuestra realidad. “Hay un montón de cosas que tienen que ver con la excelencia, que no tienen que ver con el dinero”, dice. “Tienen que ver con la postura, con lo que perseguís. Lo que tiene que ver con el dinero son las herramientas y las herramientas ayudan, claro. Trabajamos con herramientas increíbles, pero el curso no se trataba tanto de eso sino de técnicas y, sobre todo, casi diría, de filosofía de la grabación. Tener un tremendo micrófono y la mejor guitarra ayuda, claro, pero lo que más importa es tener una personalidad sonora y eso es lo que más me influyó de su filosofía. Los discos grabados por Swedien, más allá de que él emplee todos los medios tecnológicos que quiera y que pueda hacer lo que le plazca a nivel de producción, tienen una gran personalidad sonora, que es intransferible. Es tan así que él y Quincy Jones inventaron un nombre “Acusonics Recording Process”, que puede leerse en todos los discos grabados por Swedien, que parece referir a una tecnología pero es un chiste, es sólo el sonido y el método de Swedien al grabar”. Por supuesto la figura de Michael Jackson no estuvo ausente en la experiencia. “El espíritu de Michael Jackson estuvo rondando siempre. Jackson puede no ser mi top one, pero 10 MONTEVIDEO URUGUAY se ha disipado la energía. Es como estar bajo un hechizo. Soy una persona hiperracional y vine mucho menos racional. Él dice en su curso que te va a cambiar la vida y tengo que darle la razón”, cuenta. 05 www.ladiaria.com.uy Bruce Swedien y César Lamschtein. / FOTO: CÉSAR LAMSCHTEIN Pasar la antorcha Puede llamar la atención que una persona que sigue recibiendo grandes sumas de dinero por su trabajo con Michael Jackson y que podría estar muy felizmente retirado, no sólo siga trabajando sino que dedique su tiempo a dar unos cursos, que por más costosos que sean, por su acotadísimo número de alumnos y su gran presupuesto a todas luces no dan ganancias. “El objetivo de Bruce es su amor por la música y cierta intención de transmitir sus cocimientos y pasar la antorcha”, opina Lamschtein. “Obviamente, no necesita el dinero que obtiene de estos cursos. Él sigue cobrando un porcentaje de la venta de los discos de Michael Jackson, fue el primer ingeniero en obtener un porcentaje en la venta de los discos que grabó. Tiene, además, coautorías con Jackson, como el tema ‘Jam’ Y yo no vi el cheque, pero me contaron que sólo por This is It recibió una liquidación semestral de millones de dólares. O sea que no tiene problemas económicos. Una dimensión, diría entonces, que es ésa: transmitir el legado. La otra que flotaba en el aire es que todas las otras personas que apoyaban el curso dando clases de acústica o microfonía, como Arhtur Noxon –fundador de Acoustic Sciences Corporation–, Martin Kantola –de Finlandia, famoso diseñador de micrófonos y encargado del mantenimiento de las cosas de Swedien–, John Jennings –presidente de la compañía de micrófonos Royer–, Trond Braaten –un noruego que es editor de sus libros–, todos ellos están abocados al estudio de Swedien y tratan de teorizar y entender por qué suena como suena y entender sus intuiciones. Hay un séquito de personas que lo siguen, tratando de entender qué es lo que hace. Él fomenta eso, más allá de que él mismo no quiera racionalizar qué es lo que hace, fiel a su creencia casi religiosa en la intuición y el poder de la música”. n AT 05 | [email protected] si está en mi top five, así que no me caía mal un poco de relatos al estilo revista Hola sobre Michael. No faltaron las anécdotas de cómo bailaba mientras grababa, como se estudiaba las letras y nunca leyó una letra en el estudio, o cómo doblaba sus vibratos a la perfección. Tampoco faltaron momentos emotivos. Él dice sufrir mucho la ausencia de su amigo, porque siguieron en contacto casi diariamente. Escuchamos también masters de las grabaciones con Michael Jackson, que Swedien guarda en cintas de media pulgada. También tiene los masters de grabaciones de Duke Ellington o Dizzy Gillespie, cosas grabadas hace más de 50 años, que suenan como si hubieran sido grabadas hoy. la diaria | A l igual que en el cine, donde el trabajo de fotógrafos, montajistas y sonidistas pasa desapercibido o es opacado por el del director, son pocos los técnicos de grabación cuyo nombre es reconocido por el gran público; pero su trabajo es, por supuesto, fundamental en el resultado final de un álbum. Una de las excepciones a la hora de repartir los créditos es la de Bruce Swedien, famoso especialmente por haber sido el hombre detrás de la consola en el álbum más vendido de todos los tiempos: Thriller, de Michael Jackson. Si bien su mayor prestigio deriva de ese álbum y de sus colaboraciones con el productor Quincy Jones, el trabajo de Swedien abarca casi toda la historia de la música popular estadounidense. Su nombre está en grabaciones de figuras míticas del jazz como Count Basie, Dizzy Gillespie y Duke Ellington, y del blues como John Lee Hooker y Muddy Waters, entre muchos otros nombres. Swedien, cuyos créditos también incluyen la grabación y mezcla de todos los álbumes adultos de Michael Jackson, desde Off The Wall (1979) a Invincible (2001), pasando por el retorno de los Jackson Five en la década del 80, innovó en varios aspectos de su trabajo en materia sonora, filosófica y hasta económica. A los 75 años, con cinco Grammys a cuestas, doctorados honoris causa, varios libros escritos y sin dejar de trabajar como técnico y productor, Swedien se ha dedicado también a dictar unos cursos muy especiales y personalizados, dedicados a sus colegas. César Lamschtein, técnico uruguayo de amplia trayectoria (entre muchísimas otras cosas grabó los discos de Claudio Taddei y el debut solista de Mateo Moreno), asistió muy recientemente a uno de esos cursos, dictados en la casa-estudio de Swedien, junto a otros seis colegas de Holanda, Colombia y Estados Unidos. La experiencia fue, según Lamschtein, totalmente removedora. “Es muy difícil cuando uno está en cierta etapa de su carrera llegar a vivir instancias removedoras, fundamentales. La experiencia o el conocimiento que uno va adquiriendo con el tiempo hacen que cada vez te sorprendas menos. Hay una tendencia, tal vez errada, a desconfiar de este tipo de cosas, a plantearse si valdrá la pena el dinero y el esfuerzo que implicaba este curso. Pero nunca tuve una experiencia educativa tan fuerte, tan concentrada. He hecho una cantidad de seminarios que me han motivado mucho, pero son entusiasmos que se disipan. Es como un viaje, que a los tantos días te parece que nunca te fuiste. Pero ya pasaron dos meses y no 7 TREINTA AÑOS DE LA EDICIÓN DE CLOSER, DE JOY DIVISION, Y DE LA MUERTE DE IAN CURTIS 05 05 la diaria | | [email protected] www.ladiaria.com.uy MONTEVIDEO URUGUAY 10 El amor nos destrozará L a movida musical surgida en Manchester en los 70 supuso una nueva generación de artistas que serían decisivos en su influencia en las décadas posteriores. Mucho de lo sucedido musicalmente en esta década explica lo ocurrido en la posterior. Joy Division surgió en 1976, en Salford, suburbios de la ciudad de Manchester, en pleno auge del punk, siendo posteriormente ícono del llamado pospunk, género que albergó una variedad de estilos y bandas tan disímiles en su sonido como unidas por un tronco en común. Bernard Sumner, guitarrista y tecladista, se unió a Peter Hook, quien se encarga del bajo, a la vez que otro amigo en común, Terry Mason, se ocupaba de la batería. La inspiración de formar una banda devino de un recital de los Sex Pistols al cual habían asistido. En ese evento estuvo también quien sería luego la figura emblemática de Joy Division, Ian Curtis. Éste conocía a Sumner, Hook y Mason, y se encargaría de aportar la voz y, ocasionalmente, otra guitarra. Tony Wilson, un periodista y conductor de un canal de Manchester, decidió crear un medio y un lugar para difundir nuevas bandas. El medio fue el sello discográfico independiente The Factory, fundado en 1978, de vital importancia para esas bandas emergentes que daban sus primeros pasos. El lugar, el legendario club The Haçienda, inaugurado en mayo de 1982, cuyo propósito era brindarles un espacio físico a esas bandas para que pudieran tocar en vivo. Entre las que grabaron para The Factory se encuentran Joy Division, Orchestral Manouvres In The Dark, Happy Mondays y New Order. Tanto el sello como el club fueron imprescindibles para la difusión del llamado pospunk, la new wave y varias movidas más a lo largo de los 80, época en la cual desfilaron por The Haçienda bandas como The Clash, Siouxsie & the Banshees, Happy Mondays, The Smiths, Echo & The Bunnymen, Stone Roses, entre otros. A fines de los 80 nació el término “Madchester” (mad, en inglés, "loco"), un juego de palabras que denominaba toda la locura musical de esa ciudad y desde ese entonces se habla de un “sonido Manchester”, que, a su vez influiría en grupos como Joy División. / FOTO: DIFUSIÓN, S/D DE AUTOR Blur y Oasis, y que no se remitía a sólo un lugar geográfico. En 2002, salió la película 24 Hour Party People, dirigida por Michael Winterbottom, que refleja el espíritu de 20 años de música, locura y excesos de la movida Manchester; nacimiento, auge y caída de esta movida son retratados aquí con una exquisita banda sonora que la complementa. El film gira en torno al sello The Factory y, claro, al club The Haçienda, desde su inauguración hasta su cierre, en 1997. El edificio del club fue demolido para construir un complejo de apartamentos, conservando el nombre para el núcleo habitacional. Closer y el poeta maldito El primer recital de Joy Division fue en enero de 1978. Las presentaciones del grupo se limitaban a recintos pequeños, la mayoría de veces ante escaso público (llegando a tocar como teloneros de The Cure). En abril de 1979 graban su disco debut, Unknown Pleasures, con Martin Hannett como productor, para el sello The Factory. El disco obtuvo un interesante éxito tanto de crítica como de ventas, con algunos clásicos de la banda como “Disorder”, “Shadowplay” o “She’s Lost Control”. Con un buen disco debut y unas cuantas presentaciones en vivo, llegando a hacer una pequeña gira europea a fines de 1979, el año 1980 sería el definitivo para Joy Division. Fue en su siguiente disco, Closer, que profundizaron en un sonido más oscuro, siniestro y depresivo, sentando las bases del llamado rock gótico y de las cuales abrevan las bandas de ese género (y de otros) hasta hoy, estableciéndose como uno de los grupos más importantes de la escena surgida en Manchester y de aquello que luego sería recordado como pospunk. Pero para hablar de la salida de Closer se debe primero transitar por la terrible muerte de Curtis, ocurrida dos meses antes de la salida oficial de este disco. Ian Curtis sufría de epilepsia. Famosos eran sus ataques en los recitales, logrando un efecto “artístico” sin saber el público cuándo Curtis era presa de uno verdadero o simplemente simulaba. Estas inesperadas performances a veces terminaban mal, con Ian desmayado. Era habitual que perdiera el control y terminara inconsciente sobre el escenario. Las convulsiones de Curtis en vivo se habían vuelto parte de los shows y su salud empeoraba a la vez que los compromisos de la banda eran más importantes. Cabe decir que la audiencia máxima que registraron de espectadores en un recital en vivo fue de apenas unas 1.200 personas. La oscuridad, la densidad y la clara aproximación a terrenos poéticos de las letras los hacían una banda nada fácil de digerir. Se requería un esfuerzo intelectual para comprenderlos, un ir más allá de simplemente escuchar rock. Ian Curtis era un poeta maldito, digno de la escuela de Jim Morrison, a quien él tanto admiraba. Curtis se había casado en 1975 con Deborah Woodruffe, con quien tuvo una hija cuatro años después. Deborah fue la primera persona que lo encontró ahorcado en su cocina el 18 de mayo de 1980, poco antes de comenzar la primera gira por Estados Unidos y de la salida de Closer. La atmósfera opresiva que envolvía a Curtis debió ser tal vez el aviso para sus allegados acerca del trágico fin. Sus composiciones reflejaban el dolor, la depresión, la angustia existencial que lo sumergía y ahogaba día a día. Poco tiempo antes, había intentado suicidarse con pastillas. El 2 de mayo de 1980, Curtis actuó con Joy Division por última vez. Días después ocurrió la tragedia; Curtis tenía apenas 23 años. Ya sin Ian, Closer se editó dos meses más tarde. El arte de tapa a cargo de Peter Saville (importante difusor junto con Wilson y Hannett de la movida Manchester) es tan siniestro y cautivante como el contenido del álbum, compuesto por nueve canciones, de tono sombrío y exasperante cadencia. Closer se yergue como una piedra angular del rock gótico, un tótem de adoración de toda la vanguardia. El álbum alcanzó el puesto 6 en el Reino Unido. En 2007, la compañía Warner reeditó Closer en un pack en dos cds, el mismo disco con sonido mejorado, más una colección de canciones en vivo, grabadas en febrero de 1980, que incluye material previo a Closer. Legado e influencia Curtis pensaba que Kraftwerk era el futuro, sentía una gran admiración por la banda alemana y decía que Joy Division debía aproximarse a esos sonidos. Luego de la disolución de Joy Division, tras la muerte de Curtis, los demás miembros fundaron New Order, casi como en homenaje a Ian, dando un giro hacia esos sonidos a los que éste hacía referencia, con una clara tendencia a las máquinas y al uso de sintetizadores. New Order obtuvo un gran éxito durante los 80, con la new wave a pleno, imponiéndose como una de las bandas más importantes de música electrónica, inventada en gran medida por Kraftwerk una década antes. La influencia de Joy Division es inmensa en los más diversos estilos y en músicos de muy distinto pelo. Lo fue para colegas de generación como Bauhaus o The Cure y para mucho de lo que ocurrió en los 80, sonora, estética y hasta espiritualmente. U2, The Smashing Pumpkins, Radiohead y Moby también declaran admiración por los autores de Closer. La influencia llegó al Río de la Plata de la mano de otra leyenda, Luca Prodan, y puede escucharse en el primer rock uruguayo de la década de 1980. En 1988, The Factory editó la compilación Substance (un año antes se había editado una antología de New Order con el mismo nombre), llevando a Joy Division por primera vez a los charts estadounidenses, de la mano el tema “Love Will Tear Us Apart”. En 2005, fueron incluidos en el UK Music Hall of Fame, inclusión que abarcó también a New Order. En 2007 se estrenó la película Control, dirigida y producida por el prestigioso fotógrafo Anton Corbijn. El film se basa en el libro escrito por Deborah Woodruffe, Touching From a Distance, y muestra la historia de la banda y de Curtis desde 1973 hasta 1980. Realizada en blanco y negro, es una verdadera joya testimonial. Bandas del estilo indie más recientes, como Interpol, Bloc Party, Editors y Franz Ferdinand, recogen mucho de lo sembrado por Joy Division. Treinta años después, la música y la poesía de Joy Division aún suenan frescas, oscuras y cadenciosas, como una melancólica brisa nocturna, como un susurro doliente y bello. n Paulo Roddel