los remolques como ayuda barata de transporte en la construcción y

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ARTÍCULOS
DE
OPINIÓN
LOS REMOLQUES COMO AYUDA
BARATA DE TRANSPORTE EN
LA CONSTRUCCIÓN Y PARA
MEJORAR LA CIRCULACIÓN
En este artículo analiza el autor en profundidad el complicado problema de tener un
remolque en España. Enumera diez sugerencias para mejorar la situación actual.
Por Manuel Mateos de Vicente, Ingeniero Técnico de Obras Públicas.
E
n España se usan muy
poco los remolques. Hay
que saber por qué, ya que
son extremadamente útiles en
nuestra
profesión.
Ahorran
mucho tiempo. Evitan viajes
extras, es decir a que haya
menos vehículos circulando. Se
aprovecha el motor del coche
para que, con poco gasto adicional de combustible, se pueda llevar una carga mayor en peso o
en volumen. Es muy útil en la
construcción, para los contratistas y encargados de obra. A
muchos agricultores o ganaderos
les evitaría de tener que comprar
un remolque pequeño para su
tractor, según he visto en zonas
agrícolas de Francia.
En España hay muy pocos remolques debido a las muchas e inútiles dificultades que opone la
Dirección General de Tráfico
(DGT) para obtener los permisos. Se está siguiendo una pauta
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de autorización que merece ser
reformada. En nuestro caso, que
he tenido ya unos 6 coches con
bola para remolque, trato de conservarlos el mayor tiempo posible para no estar envuelto en el
irritante papeleo administrativo
que exige la DGT, y que no comprendo. Siempre que he cambiado de coche he perdido parte de
tres mañanas en los absurdos
trámites exigidos. Nos podemos
preguntar ¿Qué pasa en otros
países? Y darlo a conocer.
El procedimiento seguido para
poder llevar un remolque con
nuestro coche es largo y a mi
modo de ver ilógico. Primero hay
que colocar la bola con su enganche. Generalmente lo hace un
taller ya previamente homologado; pero lo absurdo es que la
Administración (DGT o quién sea)
no tiene confianza en lo que
ellos han homologado y te obligan a pasar por la ITV para com-
probar lo ya homologado y verificar el sencillo procedimiento de
colocar un enganche para una
bola en un coche. Pero para la
Administración (DGT o quién sea)
no importa la pérdida de tiempo
que ello supone para el usuario.
Según parece no se tiene confianza por los organismos oficiales en la garantía que estos talleres deben tener para realizar una
operación tan sencilla. No es ninguna obra de diseño ingenieril
especial el colocar una bola a un
coche. Sin embargo hay que ir a
que hagan una revisión oficial en
la ITV, para saber si ese taller
que, probablemente, ha puesto
centenas de enganches con bola
lo hace bien, con la consiguiente
pérdida de tiempo para los usuarios.
Aprobado por la ITV, hay que ir a
la DGT, donde siempre que he
ido había largas colas, perdiendo
una o dos mañanas (repito, que
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Una vez obtenidos los permisos
de Tráfico y de la ITV había,
hasta hace pocos años, que
colocar en el coche una minúscula señal cuadrada con un
triángulo amarillo dentro. No me
voy a extender sobre la inutilidad de esto, pues se ha reconocido últimamente, de manera
oficial, que era inútil como tantos otros trámites, y ya no se
necesita llevarla.
El mismo conductor puede arrastrar lo equivalente a dos camiones (en Australia el conductor
puede arrastrar seis remolques, ¿y en España?
Los mismos trámites, que nos
parecen absurdos, ocurren en lo
que se refiere al remolque pues
hay que pasar también por la
ITV, de acuerdo con los requisitos de la DGT, a pesar de que
quién lo fabricó está autorizado
para fabricar remolques. Esto
nunca lo entendí, pues fabricar
un remolque estando autorizado
para ello significa que el remolque está bien hecho. Es como si
al comprar un coche nuevo tuviéramos que pasar la ITV.
Para tener idea de la posible
simplificación en los trámites,
que solemos llamar papeleo,
referiré lo que se hace en dos
países distantes: Francia y
Estados Unidos.
En Francia, en la región de
donde procede mi familia, prácticamente todos llevan remolque, pues es una región de
viñedos. He preguntado por los
trámites necesarios y me indican que no se necesita ninguno;
que no es necesario ir a la
Gendarmería u otro organismo
afín a nuestra Delegación de
Tráfico. Así, cualquiera puede
instalar un enganche y un
remolque sin necesidad de perder varios días yendo a la capital de la provincia, a hacer revi-
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para la Administración parece
que el tiempo de Vd. y el mío, no
cuentan).
Familia transportando su vivienda y su coche. También se puede llevar sin montarlo sobre
la plataforma. Es de un país con un índice de accidentes varias veces menos que en
España, no hace falta permiso especial. El ahorro al poderlo llevar así es tremendo.
Esperemos tome nota la D.G.T.
Poder llevar un gran remolque puede evitar gastos al empresario
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DE
siones en la ITV y trámites de
papeleo, como se hace en
España.
En los Estados Unidos tuve la
necesidad, al terminar mis estudios, de traer conmigo una gran
cantidad de libros y otros enseres. Pesaban más de media tonelada. Decidí alquilar un remolque
hasta el puerto de embarque.
Consciente del papeleo que existe en España, me fui a la empresa que alquilaba remolques unas
semanas antes de partir. Me dijeron que en 10 minutos tendría
todo arreglado y ultimado: el
enganche con la bola instalados
y la conexión eléctrica funcionando, más el permiso y el seguro del remolque, y todo para un
remolque con doble eje y freno
dinámico; esto último necesario
por el gran peso que tenía que
arrastrar.
Efectivamente en quince minutos
tuve todo. Para colocar la bola
tenían un artilugio de cadenas
que se tensaban. Para saber
como funciona la Adminis-tración en aquel país debo de mencionar que el remolque lo devolví al final de mi viaje de tres días
y unos 2.000 km hasta el puerto
de Nueva York, llevándolo a una
dirección que me dieron, donde
había otra delegación de la
empresa que me alquiló el
remolque.
He visto en otros países remolques de todo tipo, hasta motos
con remolque; camiones con
varios remolques (en Australia
los llaman trenes de carretera y
pueden tener hasta 100 metros
de longitud); coches con remolques de tres ejes; coches remolcando a coches. Esas son las
razones de que en otros países
se vean muchos coches con
remolques, pues son prácticos a
la hora de ayudar a quien traba-
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Remolque que hice para transportar dos máquinas para hacer sondeos.
Manera eficaz de informar que es un camión largo con remolque
Familia francesa a su paso por un pueblo de (Ávila). Esta combinación no estaría
autorizada en España.
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Resumiendo, es necesario agilizar los trámites para poder llevar
remolques en los coches.
Primero: hay que dar confianza
a los talleres que colocan los
enganches con bola (homologados).
Segundo: también hay que darla
a los fabricantes de remolques
homologados y no requerir que
se pase por la ITV.
Tercero: que no se necesite permiso especial para llevar el
remolque, pues con la garantía
del que coloca la bola y la garantía del que vende el remolque
debe ser suficiente.
Cuarto: eliminar la necesidad
actual de que cada coche lleve
un permiso para cada remolque
que pueda llevar. Actualmente
nadie puede, en una emergencia,
enganchar en una bola ya homologada cualquier remolque ya
homologado, lo que es así aunque parezca absurdo.
Quinto: que en ciertas carreteras tipo autopista o autovía se
permitan velocidades más altas
que en carreteras normales, con
limitaciones estrictas de velocidad y responsabilidad prima
facie en un accidente.
Sexto: que en pueblos apartados de industria agrícola o ganadera, se establezcan normas
menos restrictivas para los
remolques que circula por carreteras, o caminos, de tipo agrícola y con pocos vehículos de
paso. O sea que se establezcan
carreteras de prioridad agrícola o
ganadera, como ocurría hace
algunos años, y donde el vehícu-
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lo que atropellaba unas ovejas o
una vaca tenía el conductor toda
la responsabilidad, y no el propietario del ganado como parece
ocurre ahora. Hay que tener en
cuenta que los animales no pueden estar vigilados 24 horas.
dimensiones de las bacas voluminosas. Estos coches son un
peligro para el resto de la circulación. Al llevar en un remolque
lo que se lleva en bacas voluminosas disminuiría el consumo de
combustible.
Séptimo: que los remolques llevados por tractores lleven una
palo largo, o vara muy alta con
una banderola, de color amarillo
o naranja, para que se vean en
las bajadas de las lomas por
aquellos vehículos veloces que
están subiendo la loma por el
mismo carril (lo que mal se llama
“cambio de rasante” en el Código
de la Circulación).
La alta siniestralidad de España
en las carreteras y calles nos
obliga a analizar los factores que
influyen en ella. Esta es una de
nuestros centenares de propuestas, como consecuencia de la
investigación que llevamos a
cabo, desde hace 40 años, para
una reducción de la mortalidad
en nuestras carreteras y calles.
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ja, con una Administración cuyo
lema es ayudar y no de entorpecer.
DE
Octavo: que se autorice de
nuevo a los remolques a que lleven objetos que sobresalgan del
remolque, estableciendo un límite, que puede ser de un metro,
con tal que la parte que sobresalga vaya señalizada con un
trapo de color amarillo, rojo o
naranja, colores que se distinguen bien.
Noveno: que se exija a los fabricantes de enganches que la bola
se pueda extraer fácilmente
cuando no se lleva el remolque,
para que no sobresalga del
coche. El autor tiene colocada
una bola en el coche que usa,
que se puede extraer en un par
de segundos. Las bolas que
sobresalen son peligrosas para
los peatones que se hieren con
ellas al pasar entre coches, y
peor aún para los coches aparcados, donde las bolas hienden los
parachoques de otros coches.
Décimo: al llevar remolque disminuiría el número de coches
que van con una baca muy abultada, excesivamente cargada
y generalmente descontrolada,
pues nunca hemos visto a la
Policía comprobar el peso y
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