el general goded, detenido ayer noche, embarca en cádiz con

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HERiiL
A £ o X L I I I . - - - N ú m . 14.748
Red. y Talleres, Marqués de Cubiaa, 7
L u n e s 8 d e m a y o de 1 9 3 3
Administración, Marqués de Cubas. 6
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EDICIÓN DE LA NOC HE
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LOS ENEfMIGOS DE LA REPÚBLICA, EN PLENA ACTIVIDAD
EL GENERAL GODED, DETENIDO AYER NOCHE,
EMBARCA EN CÁDIZ CON RUMBO A LAS PALMAS
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iiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiníiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiMiiiiiiiiiiiiiiMiitiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiniiiMiiiiilii>i>iilliliiiiiriiiiii
Se intentaba promover otra vez una revuelta
en toda España para justificar la neoesidacf
de un Gobierno de fuerza
Los tres primeros complicados en el movimiento son detenidos gracias a la perspicacia de un choter de Badajoz
Otro
sabíao t r o complot, y van... Ya sabiaMOS
U A los
n t e m n a tlefenrínfetl.
mos nOSO<tr0lS
noso<tro<s O
que
los eternos
sores del orden serían los encargados de perturbar el orden e.i cuanto fueran desplazados del Poder, y,
en efecto, nuestra previsión viene
teniendo confirmación plena. Porque no era el o<rden lo que ellos defendían, sino «su orden», que es
algo bien distinto y más concreto.
No era la paz del país lo que les
impo'rtaba, sino «su paz, su bienestar, su propiedad, su privilegio»,.. ; y en cuanto han sentido
«su» paz turbada, «su» bienestar
amenazado, «su» propiedad en peligro y «su» privilegio en derrota
se han dedicado con toda su a!. ,
y poniendo a contribución los resortes que la generosidad de la revolución dejó en sus maros, a pert u r b a r el orden del país, no desdeñando para ello el turbio contubernio> con esas torvas personalidades
larvadas que se arrastran por el
subsuelo, por las cloacas que hay
bajo las zonas en que está situado
el extremismo obrerista de buena
f«.
Otro complot y van... E| descubrimiento de esta nueva amenaza,
de esta otra maniobra que responde a l propósito de crear en la nación el falso ambiente de que la
República es incapaz de mantener
en las calles de |as ciudades, de las
villas y de las aldeas españolas el
orden y la paz, nos pone en la necesidad inexcusable de hacer dos
advertencias.
La primera va dirigida a l Gobierno, al que hemos de d e c i r ;
Tenéis la obligación «agrada e
ineludible díe defender, consolidar
y poner a salvo de todo ataque el
régimen que el pueblo se dio en
aquel magnífico gesto histórico del
14 de a b r i l . Tenéis la obligación de
realizarlo Naciendo preceder vuestras resoluciones de una meditación inteligente y llevándolas a la
práctica con implacable energía.
Ante esta obligación indecliniable
palidece, se esfuma y ocupa un lugar subalterno en un discrieto segundo término todo lo demás. Pensad que ante el peligro de la Repúblca seria pueril esforzarse en
conservar p u m la a c t i t u d de| intelectual demócrata saturado de j u r i d i c i d a d . Ved que la critica inmediata no cuenta y no os dejéis i m presionar por ella, que lo que i m portta en definitiva es el juicio mediato de la H i s t o r i a ; y el que ésta
d i g a : «Aquél Gobierno supo salvar
la República» es lo importante. Lo
triste sería que hubiera de escrib i r : «Aquél Gobierno procedió con
a u s t e r i d a d ; pero la República se
hundió en sus manos a los emba-
tes
tes facciosos que no supo evitar.»
evitar.»
I f% e a m i M / l o
*^r^^^a^'*r^'^^^:r% JÜC t
ií\e
La
segunda a
d v e r t c r c i a es a los
elementos obreristas, para cuyas
reivindicaciones morales y materiales tuvimos, tenemos y tendremos
siempre la máxima simpatía cord i a l . A éstos hemos de decirles:
vigilad y ved quiénes son los t r a i dores a vuestra causa; quiénes,
cobijándose bajo vosotros, son capaces de aceptar inconfesables t r a tos con los seculares enemigos de
la clase proletaria. Y meditad si
os conviene permanecer indiferentes o si es llegado el momento de
que llevéis a cabo una labor depuradora que aparte de vuestras filas a esos elementos que encubren
el alma sucia del delincuente con
el atuendo honrado y respetable
del obrero. Reflexionad si os conviene llevar a España a una nueva dictadura.
E
E LL C H O F E R
C O M U N I C A SS
cándole lo
lo que ocurría y
y expresanUU
SS candóle
^ r . r i xrr^r. i r.r./>< r. r1 A ^ l i o Irvc ^ ZT í% OA
do A^
la 1n
conveniencia
de que los que se
presentasen a recoger la joya fuesen
Una vez en Badajoz, el ^chofer se detenidos.
personó en el Gobierno civil, donde
solicitó una audiencia del goberna- EN L I S T A D E CORREOS SE P R E dor de la provincia. Al ser recibi- S E N T A P R I M E R O U N A N I Ñ A Y
do le dio cuenta dé todo lo ocurri- D E S P U É S T R E S
DESCONOCÍdo, y expresó su temor de que esos
DOS,
Q U E SON D E T E N I D O S
individuos tramasen alguna cosa.
Después de la anterior conferenDespués de oirle con todo detenimiento, el gobernadO'r le aconsejó cia telefónica el mininstro do la Goque cuando recibiera la carta de los bernación informó de lo ocurrido al
general de Seguridad y se
desconocidos, antes de contestarles director
dispuso que dos agentes establecienada, fuese nuevamente a l Gobier- sen un servicio de vigilancia en lista
no civil, y entonces se tomarían las de Correos para que procediesen a,
medidas necesarias. En efecto, días la detención de la persona o persodespués el chofer se personó nueva- nas que se presentasen a recoger la
mente con una carta de sus clien- joya. Dos días d^ >pués se personó una
tes, los cuales le comunicaban el en- ñifla pidiendo la entrojasen una cavío de un giro, que ya había recibi- jita que habría_ al numero... Como
El general Goded, que ayer f u é
do, y le ordenaban que la joya la los agentes le dijesen que esos envíos
detenido y ha sido embarcado con
enviase a lista de Correos, a un nii- sólo se podían entregar a personas
rumbo a Las Palmas
mayores la muchachita salió del PaiiiiiiiMiiiiaiMiiiiiiiMt}iiiiiiiiHiiniiiniiiniiHiiiiniiini[]iiiiiHiiinniiiiiiiiiHic]iiiiiiiiiiii[]HiiiiiiiiiiE>»iiiiiiiiiic]niiiiiiiiiiuiiiiiiiiiiii[]tiiiiiiiiii^
lacio de Comunicaciones. Sin duda
alguna los que la enviaban la estaH A C E UNOS D Í A S P U B L I C A M O S U N E N T R E F I L E T Q U E D I O L U G A R A Q U E A L G U N O S
ban esperando en un sitio próximo,
P E R I Ó D I C O S DE D E R E C H A S NOS D I J E S E N D E S A F I A N T E S : «¿A Q U E N O H A B L A N ? »
puesto que pocos momentos después
PUES B I E N : LOS H E C H O S H A N R E S P O N D I D O POR NOSOTROS A LOS C O L E G A S Q U E se personaron tres individuos reclaN E C E S I T A N , COMO S A N T O T O M A S , V E R P A R A C R E E R . PERO LOS H E C H O S NO H A N R E - mando la cajita en cuestión. El ofiV E L A D O T O D A V Í A S I N O U N A P A R T E D E L A V E R D A D , Y NOSOTROS E S T A M O S E N POSEcial de Correos les hizo entrega del
S I Ó N D E LA V E R D A D C O M P L E T A ; A H O R A Q U E , COMO T E N E M O S D E L P E R I O D I S M O U N
envío, después de llenar todos los reC O N C E P T O Q U E NO L E A S I G N A L A M I S I Ó N D E L D E L A T O R , E S P E R A M O S A Q U E , COMO
quisitos de rigor, y al disponerse a
YA D I J I M O S , E L I N T E R É S D E L A R E P Ú B L I C A NOS P E R M I T A H A B L A R , O E L P E L I G R O DE
salir a la calle, los agentes les deL A R E P Ú B L I C A NOS E X I J A Q U E H A B L E M O S .
tuviercyi, conduciéndohís a la DirecA N T E S DE U N MES SE I R Á N C O N O C I E N D O N U E V A S F A C E T A S D E ESTA V E R D A D Q U E
CÍÓ71 de Seguridad. U n a vez en el
POR H O Y R E C A T A M O S , Y LOS E N E M I G O S DE L A R E P Ú B L I C A H A B R Á N J U G A D O
TODAS
centro policial se les ^ sometió a un
SUS B A Z A S . E S P E R A M O S Q U E L O S T R I U N F O S D E ESTA P A R T I D A E S T É N E N M A N O S D E L
minucioso interrogatorio, que dio ppr
RÉGIMEN.
resultado el declararse autores del
robo de alhajas cometido e i Badajoz. Los tres fueron conducidos a los
mero, ignoramos si de cédula o car- calabozos de la Dirección, mientras
la brigada encargada do hacer el
net.
servicio instruía el oportuno atestaEl gobernador ordenó al chofer do para poner a los detenidos a disque cumpliese lo que decía la car- posición do la autoridad judicial cota, y él se puso al habla con el miH a c e aproximadamente veinte o sionqs pensó para/r el vehículo y co- histro d e lá. Gobernación, comuni- rrespondiente.
veinticinco días se cometió un robo municar siís sospechas a los ocupanimportante de alhajas en u n a casa tes del coche; pero el temor, de u n a
de Badajoz.
equivocación le hizo desistir de sus
La Policía realizó investigjiciones propósitos. H a s t a que prosiguiendo
p a r a descubrir a los autores, sin que en esta lucha interior, y al llegar a
sus trabajos obtuvieran -éxito.
un pueblo distante vario* kilómetros
Una noche tres sujetos se acerca- de la_ capital extromefia, el conducron a un chofer de aquella población tor,_ simulando una avería, detuvo el
Mientras tanto, on la soledad de los bién es verdad, que este hecho ha.
RXtrnmofia y le preguntaron si se en- vehículo. Se apearon los tres descocontraba en disposición de conducir- nocidos para enterairse de lo ocurri- calabozos imo de los detenidos, pen- sido una cosa 'fortuita. Se puso a tiro
los a IVradrid, pues sn Ifs había he- do y mientras tanto el chofer les es- sando qne iba a jicnnaiiecor on l ay lo i'calizaunos. Pero el verdadciro
cho t,arde p a r a ha<'.er ol viaje en tren tuvo examinando y adquiTÍó la cer- cárcel bastante tieinfio y que el v&r- o'bjeto del Añaje ha sido entrevistar(líMlero asunto que le había llevado a nos en la frontera portuguesa con
y tenían necesidad de encontrarse en teza de que ciiTocían de dinero.
Badajoz no iba tener para él ninguna unas personas, con el íln de llevar a.
l-.i capital de l a República lo antes
MEDIANTE
L A E N T R E G A D E utilidad, so propuso evitai'lo, if alcabo un aeto político de impartancia.
liosible.
Después el detenido r(;lató ouíUiLa contestación ÍUL^ afirmativa, y U N A JOYA LOS D E S C O N O C I D O S efecto, llamó al guardia encargado
acto seguido, después de habri-se pro- P A G A N A L C H O F E R Y Q U E D A N de la custodia die los individuos en- to él sabía acerca del complot que se
visto de la gasolina necesaria, em- EN E N V I A R L E E L D I N E R O P A - cerrados en los sótanos y le dijo que preparaba, y dio él nombre de varias
comunicara al director do Seguridad personas «que él sabía estaban comprendieiron el camino.
Ya en la carretera, el chofer co- RA Q U E L E S D E V U E L V A L A que tenía que hacerle unas manifes- plicadas».
taciones de importancia.
ALHAJA
menzó a pensar que aquellos indiviLA P O L I C Í A
DETIENE A VAduos no debían de tener dinero, en
Momentos después el individiio en R I A S PERSONAS E N M A D R I D Y
Dirigiéndose
resueltamente
a
sus
cu.yo caso el negocio que hacía no
cuestión so encontraba frente al seBARCELONA
era nada lucrativo.'En diversas oca- clientes, el chofer les dio cuenta de ñor Andrés Casaais, al oual le hizo
sus temores, y entonces uno de olios •sobi'e poco más o menos las siguien- La Policía madrilefia se pusn inlo contestó que, en efecto, carecían
mediatamciitp en moví miento .y funiit]iiiiiiiiimniiMiiHiiiinmiiiiiiiiinMmiiiiiii[]iiiiniiiiii[]iiiiiiiiiiii[]iiiiiiiiiiiit]Miiiiiiiiii[]iimiiiiiiiE]iiHiiiiiiii[]niiiiiiiiiU]iim
de 'dinero; pero todo podía arreglar- tes manifestaciones:
ron practicadas on Madrid varias
—Nosotros somos los autores del detenciones.
se, puesto que tenían unas alhajas
que valían u n a importante cantidad robo cometido en Badajoz; pero tam(Continúa en la página siguiente.)
y podían llegar a un acuerdo.
—Nosotros—^le dijeron—te damos
esta joya y tú nos facilitas algún
dinero p a r a poder continuar nuestro viaje a Madrid en tren. U n a vez
allí te giramos lo que te debemos y
La Ejecutiva de la Unión General deberán tener en cuenta que este or«
do Trabajadores nos envía el siguien- ganismo, no solamente es ajeno a ese
tú nos envías la alhaja.
El chofer, en los pritneros momen- te escrito dirigido a todos sus afilia- movimiento, sino que le cree altamente perjudicial para los mismos
tos, se opuso a esta pretensión; ue- dos : •.
ro, porfin,consiguieron convencer- Compañero: La Confederación Na- intereses de los trabajadores.
Por consiguiente, encarecemos a
le y accedió a tomar la joya que se cional del Trabajo ha dado órdenes
le ofrecía. Con su coche regresó a para la declaración de una huelga todos los afiliados que tengan preBadajoz, y los tres desconocidos es- general por cuarenta y ocho horas a sente la necesidad de no obedecer
peraron en el pueblo el paso de un p a r t i r de mañana martes, día 9 del sino a la propia disciplina y de contren y continuaron su viaje a Ma- mes corriente. Todos los afiliados a tinuar el t r a b a j o , sean cualesquiedrid.
la Unión General de Trabajadores ra las presiones que se ejerzan so^^rn-^T^"^^ - ^
SOSPECHAS
A L GOBERNADOR
Tres desconocidos alquilan un taxi y ordenan al conductor
que les traiga a Madrid
Uno de los detenidos solicita audiencia del director de Seguridad para informarle de un asunto político de gran Importancia
C O M O E N L A S C O R T E S , por SAMA
La Unión General de Trabajadores a sus afíliaios
bre ellos para conseguir que lo
abandonen.
No creemos que hagan falta mayores advertencias, pues en esta ocasión como en todas, los organismo»
directivos seguirán atentamente los
posibles acontecimientos, y ellos soCÁDIZ a, (5 t.).--Procedente de el vapor correo do Canarias «Ciudad los habrán de t r a n s m i t i r las órdeMadrid llegó en el expreso el general dv. Cádiz», acompañado por los mis- nes, que esperamos serán respetan
Goded, al que acoinpañában un te-mos jefes de la Guardia' civil.
das escrupulosamente.
nientp coronel, ini comandante v un hwi periodistas le prpn;inita¡ .:,ii al
Con nuestro fraternal saludo, quet(Miii'rite de la Ginmíia. civil. Almor- gdlicriiiiHor si e| ;:i,i'iiiM'i:iI iiiiirclinlia damos cordialmente vuestros y de lá
zaron en el liotcl Atláiitiiu), donde cniífiíiado o cuál era el olijcto d(v su causa obrera.
fué \ásitado por algunos .'iinigos.'
viaje. L;i, |ii'¡ini<rii .-uitoridad de l:i Por la Unión General de TrabajaA las tres y media de, la larde, ff provincia so negó a hacer maniíesta- dores de España, el secretario, Tri-i
..,
general, vestido de paisano, salió en cioues..
fon Gómez.
El general Goded llegó a Cádiz acompañado de varios jefes
de la Guardia civil
—¿Que viene er toro? ¡Se quita osté! ¿Que no so quita osté? ¡ L e quita
er t o r o !
—¿Y si no quitarme yo ni quitarme toro?
— ¡ A h ! Entonse... Giieno, mistcr, entonse, ¡eso seiia una situasión parlamentaria como la actual.
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