Sindicato Mexicano de Electricistas En honor a la Heroica Resistencia Ser un integrante del Sindicato Mexicano de Electricistas, es un orgullo y conlleva una gran responsabilidad que es inherente a una tradición histórica generacional de trabajadores que conformaron una gran empresa, que por más de un siglo, mantuvo iluminada la ciudad de México y zonas conurbadas desde los albores del desarrollo industrial de éste País, sin duda la capacitación y la experiencia de haber “tejido” la Red Eléctrica desde su comienzo, fue puliendo la mano de obra calificada de cada uno de los obreros que laboraron en esta Compañía, pero además de eso se fue generando una vinculación de aprecio, valoración, disposición, compromiso, lealtad y conciencia de clase para con una Institución creada por ellos mismos y solidificada y robustecida, a través de los años, en cada batalla por conquistar sus derechos para tener una mejor calidad de vida, porque sabían, tal como hoy, que un trabajador organizado tiene una mayor posibilidad de lograr sus objetivos. Reconocerse dentro del SME no es ser sólo un número de afiliado en una credencial, ni tampoco el grito de una consigna, ni ponerse una playera con un logotipo, mucho menos una moda que se exhibe, en realidad es una forma de vida que ha aprendido a ir a contracorriente de los ataques de muchos agentes externos que han querido ver extinta a esta Gran Organización, ser un miembro activo del Sindicato Mexicano de Electricistas es entregar incondicionalmente nuestro conocimiento, solidaridad, talento, ímpetu, rebeldía, argumentos, respeto, lealtad y combatividad, en cada una de sus facetas en las que está involucrado, tanto en el terreno político cómo laboral, en el ámbito social así como intelectual, deportivo y artístico incluso, simplemente es entregar cada fibra de nuestro ser por la Causa. Hemos resistido ataques terribles a lo largo de esta Histórica andanza por el mundo del Trabajo, pero el embate de la extinción de LYFC fue algo ambicioso, ruin, deleznable, atípico, ventajoso y despiadado, pero lo que no te mata te hace más fuerte, y ante ese atentado, de entre sus filas surge la Digna y Heroica Resistencia del SME, conformada por la gente bien nacida agremiada a sus filas y respaldada por su familia y amigos, que de manera estoica, se crecen ante la adversidad y con una increíble capacidad de resiliencia, mantiene con vida, como en otras etapas de su trayectoria sindical, a este longevo y honorable Sindicato en medio de una feroz campaña de desprestigio y vilipendio. Apegados a sus principios y estatutos, la Resistencia de trabajadores y sus familias han probado que una democracia cabal puede llevarse a cabo en el marco de lo que consénse y determine El Organismo Supremo del Sindicato constituido por la Asamblea General, en cuyo seno serán discutidos y acordados los asuntos que interesen a toda la Agrupación. Lo cual implica que aun cuando no este tipificado alguna cuestión, las Asambleas dentro de sus facultades y sin contravenir los objetivos del Sindicato, podrán resolver según su criterio, los problemas o casos no previstos en estos Estatutos. Señalando también que en congruencia con sus argumentos deciden con voto secreto y directo a sus líderes sindicales los cuales habrán de velar por sus intereses de clase trabajadora en función de sus derechos y obligaciones. Junto a esta clase de camaradas defensores de su ideología política y prerrogativas laborales a su favor, se unen de manera natural con una trayectoria probada y vivencial por haber sido trabajadores activos agremiados al SME y después de cumplir sus años de servicio contractual para LYFC gozan de una jubilación digna y optan por defender a su Sindicato y apoyar de muchas maneras a la digna Resistencia de Compañeros de clase y que fueron arbitrariamente despojados de sus derechos laborales y proyectos de vida por un decreto infame que pretendía no sólo extinguir a una empresa que estaba cumpliendo con los índices de productividad acordados con el Gobierno y funcionarios de la Compañía de Luz sino que decididamente apostaban por la desaparición del SME utilizando todos el aparato del Estado y torciendo y manipulando la Ley a su antojo, argumentando en la Sentencia del Máximo Tribunal que los trabajadores en resistencia buscaban que el Presidente de la República fuera su “patrón sustituto”, revocando así el triunfo que les había otorgado un Tribunal Colegiado en materia laboral por medio de un amparo que les concedía recuperar su empleo por medio de una sustitución patronal. Como resultado de esa unión fraternal por el derecho y la justicia del trabajador entre la Digna Resistencia compuesta por trabajadores despedidos injustificadamente, sus familias y amigos, el grupo de Jubilados convertidos en columnas inquebrantables y la Dirección del Comité Central el Sindicato Mexicano de Electricistas sigue con vida y fuertemente atrincherado con argumentos razonados, un cuerpo Jurídico capaz, un plan de acción sin improvisaciones y una suma de experiencias que lo dignifican y lo hacen bastión del movimiento obrero en México y el mundo. Por todo ello, he aquí un humilde reconocimiento a esa digna resistencia de camaradas junto con sus familias, amigos y jubilados que se identifica con un puño encrespado y firme sostenido en todo lo alto por la convicción y honorabilidad de los que siguen caminando con la frente en alto hasta alcanzar la victoria y con ello escribir una página más de la gloriosa historia del Sindicato Mexicano de Electricistas. Tu eres la Resistencia, tu eres parte de la Historia, larga vida a nuestra Organización Sindical. La radio del SME La escultura fue un trabajo realizado por el C. ÁLVARO ROSSELL GARCÍA Compañero jubilado del Departamento de Taller Eléctrico 14 de julio de 2015 EN HONOR A NUESTRA DIGNA LUCHA DE RESISTENCIA 8