. Nº EL MUNDO. DOMINGO 14 DE SEPTIEMBRE DE 2014 ´ N I C A C R O EL ÚLTIMO PENALTI FALLADO DE BOTÍN P.4 ESCOCIA/CATALUÑA: LA TENTACIÓN VIVE ARRIBA P.9 EL FUSILADO DEL IS QUE SE HIZO EL MUERTO P.16 ELLA TUVO UNA GRANJA EN ÁFRICA... AL CUMPLIRSE 100 AÑOS DE SU LLEGADA A KENYA, ENTRAMOS EN LA CASA-MUSEO DE KAREN BLIXEN P.22 PAPA´ MONEDERO ES FAN DE ‘ESPE’ Encuentro con el padre del alcaldable de Madrid por Podemos la semana en que el PP, partido en el que milita, se queda sin candidato en la capital RODOLFO ULLATE 2. C R O ´ N I C A “SI TENGO QUE ELEGIR ENTRE ESPERANZA Y MI HIJO... NO VOTO” Con su pantalón vaquero y una camisa de cuadros rojiblancos, Salvador nos atiende al otro lado del mostrador. No tiene inconveniente en hablar, aunque se muestra receloso con los periodistas: «A mi hijo le tergiversan todo lo que dice, así que imagínese lo que pienso de la prensa». Nunca pierde la sonrisa y nos muestra orgulloso la colección de botellas de brandy que atesora en su local: «Estos licores ya no se venden en Madrid: Soberano, Centenario, Espléndido, Veterano… Ahora se comercializan como bebidas espirituosas, pero ya no son lo mismo. Yo guardo estas botellas antiguas de mi anterior establecimiento y tengo muchos clientes que vienen sólo por ellas». Le decimos que venimos a hablar de su hijo Juan Carlos y él accede con una sola condición: «Soy un seguidor de Jiménez Losantos y quiero que publiquéis que si Federico conociera a mi hijo Juan Carlos, se harían íntimos amigos, porque tienen muchas cosas en común». «Lo bueno de Juan Carlos es que ama a España por encima de todas las cosas y quiere lo mejor para los españoles», prosigue. «En eso ha salido a mí. Desde pequeño aprendió en casa la importancia del compromiso social y la política. Mi hijo, al igual que yo, es una persona que vive para los demás. Nos diferenciamos en que yo soy de derechas y él es de izquierdas. Yo milito en el PP desde hace muchísimos años y él es uno de los dirigentes de ese nuevo partido del que ahora habla todo el mundo, Podemos se llama. En casa no discutimos de política. Claro que hay muchas cosas en las que discrepo de él, pero en otras tiene más razón que un santo. Y yo se la doy». el rumor del asalto al ring electoral por parte de Juan Carlos Monedero, encabezando la candidatura de Podemos al sillón de la plaza de Cibeles, Crónica ha hablado con papá Monedero «a calzón quitado» como dicen los mexicanos, sobre su hijo y la actualidad política: su devoción por Esperanza, su militancia en el PP y las posibilidades de que su hijo gane, desde la izquierda, las municipales de la próxima primavera. «Mi hijo lo haría muy bien si fuera alcalde, pero yo tengo un respeto y un cariño muy grande por Esperanza Aguirre a quien conozco personalmente», confiesa el patriarca de los Monedero. Salvador confirma que está al corriente del pago de sus cuotas en el distrito de Moncloa del PP, por lo que podría participar en unas eventuales primarias para elegir al candidato a la alcaldía: «Yo apuesto por Esperanza. Es la política con más pelotas que he conocido. Es la única que cuando era presidenta de Madrid se atrevió a cargarse a los liberados que no hacían ninguna labor a favor de los trabajadores y aumentaban el gasto público al obligar a contratar a interinos para realizar el trabajo que ellos abandonaban». Le preguntamos si en mayo de 2015 tuviera que elegir entre su lide- Militante del PP, defensor de la Iglesia y dueño de un bar castizo, Salvador Monedero sólo coincide en una idea con su hijo, cerebro de Podemos: su hartazgo por los desmanes de la casta política. Salva a Aguirre: «La política con más pelotas que he conocido» POR RODOLFO ULLATE EL MUNDO. DOMINGO 14 DE SEPTIEMBRE DE 2014 mero Robledo con Ferraz. Todos los vecinos del barrio, poblado de casas militares, le conocen. Llegó a Madrid en 1955. Hace ahora 59 años. «Todo ha cambiado mucho desde entonces», relata. «Yo empecé a trabajar a los 11 años en Gijón, en un negocio de alimentación. Desde entonces no he parado. He vivido en Salamanca, en Madrid y en esta ciudad he criado a mis seis hijos. Juan Carlos es el cuarto. El mayor es militar, especialista en informática e inteligencia. Estuvo trabajando muchos años aquí al lado, en el Cuartel General del Ejército del Aire en Moncloa donde montó todo el sistema informático. La pequeña terminó Derecho y trabaja para una empresa francesa. Tengo otro hijo que vive en Alicante y una hija psicóloga que trabaja en asuntos sociales». «Ninguno ha querido trabajar conmigo y lo entiendo», prosigue. «El negocio de la hostelería es muy esclavo. El único hijo que siguió mis pasos vive ahora en México, donde es cocinero. Estoy muy satisfecho de todos ellos. Me han dado cuatro nietos. Mi mujer falleció en 1992 y aunque mis hijos eran ya algo mayores, los saqué a todos adelante. Nunca han dado un escándalo en el barrio. Y eso que les tocó una juventud difícil, con todo eso de la Movida y el auge de las drogas. Otros hijos de amigos míos no tuvieron la misma suerte y se perdieron en el alcohol o las drogas». Juan Carlos, como sus hermanos, ayudaba a su padre en las labores del bar donde, en la trastienda, había un pequeño ultramarinos. Vecinos del barrio recuerdan a Juan Carlos ayudando en el negocio, particularmente los domingos. «Se adelantaron a a otro», comenta una vecina. Salvador confirma esta actitud diligente de su hijo: «A todos mis hijos les he criado igual. Me ayudaban pero yo no cedía a sus caprichos. Juan Carlos se dedicaba a repartir los pedidos y yo le decía: “Lleva este pedido a esta casa y con la propina te compras lo que quieras” o “vete a vender los cartones al trapero y te sacas unas pesetas”. Así he funcionado con todos. Me ha ido muy bien». Pero Salvador no esconde su predilección por Juan Carlos: «Sacaba unas notas estupendas. Todo sobresalientes. Y siempre ha estado becado. Estudió primaria en los Sagrados Corazones de Ferraz y el bachillerato en otro edificio». La imagen de angelito que profesa papá Monedero sobre su hijo no es compartida por todo el vecindario. Un compañero de colegio, el profesor de Filosofía Rafael Narbona, ha contado en su blog que Monedero y un compañero, en un momento de descuido de la directora, incendiaron la papelera. El fuego se propagó y las cortinas de clase ardieron. Por eso llama la atención que de un padre tan de derechas —votó a Vox en las últimas europeas— haya salido un hijo tan de izquierdas. Juan Carlos defiende el castrismo, el populismo venezolano, fue asesor de Hugo Chávez y de Gaspar Llamazares en IU... Él mismo ha relatado su pérdida de virginidad política y su giro a la izquierda en una entrevista: «Fue mi amigo Ignacio. Estudiamos juntos en el colegio. Cuando teníamos 11 años a su padre lo detuvieron. Él era de la Unión Militar Democrática. Era de esos militares que estaba preparado para que, en caso de morir Franco, llevar a cabo un contragolpe a “NO SOY FRANQUISTA, PERO RESPETO A FRANCO... CON ÉL PASAMOS DEL RACIONAMIENTO A SER POTENCIA INDUSTRIAL” MI HIJO “EL FAMOSO” Ya lo afirma el refrán: «Honra merece quien a los suyos se parece». En parte lo corrobora este padre que no se corta en elogiar a su hijo: «Juan Carlos se parece a mí», repite a lo largo de toda la entrevista. Se parecen, sí, pero no tanto, porque Salvador, asturiano de Gijón donde nació hace 82 años y de apellido Monedero, es un fan acérrimo de Esperanza Aguirre. Y su hijo, al que él llama «el famoso», no es otro que Juan Carlos Monedero, dirigente que junto a Pablo Iglesias comanda la exitosa organización Podemos, que ha roto el mapa de partidos del régimen del 78. En la semana en la que el PP se ha quedado sin candidata a la alcaldía de Madrid, tras el abandono de Ana Botella, y cuando cobra más fuerza ¿FUTURO ALCALDE? Juan Carlos Monedero (izquierda) junto a Pablo Iglesias. El hijo de Salvador, profesor de Políticas en la Universidad Complutense, sopesa presentarse a la alcaldía de Madrid. «Le pediría menos impuestos», dice su padre. resa Esperanza y su hijo Juan Carlos, ¿por quién votaría? «En ese caso, por ninguno de los dos. Optaría por la abstención para no hacer el feo ni a Esperanza ni a mi hijo Juan Carlos». Papá Monedero nos recibe detrás del mostrador del pequeño bar Casa Gala donde, a pesar de sus muchos años, todavía atiende a sus clientes. Este establecimiento es heredero del primer local que rigieron los Monedero en Madrid, en la esquina de Ro- los chinos. Abrían los festivos y como en casa siempre faltaba algo (vino, jamón, cerveza…) bajabas a la tienda de los Monedero y allí estaba Juan Carlos, un chico muy espabilado que corría como una lagartija de un lado imagen y semejanza de la Revolución de los Claveles de Portugal. Nunca olvidaré aquel día en el que Ignacio se me acercó y me dijo: “Juan Carloz (él ceceaba), tengo que contarte una coza, pero me tienez que EL MUNDO. DOMINGO 14 DE SEPTIEMBRE DE 2014 jurar por Dioz que no se lo vaz a contar a nadie. Y recuerdo que le contesté: “Yo no te puedo jurar por Dios porque no creo en él”. Pero se lo prometí. “Han detenido a mi padre”. “¿Quién?”, le pregunté. “Franco”. “¿Por qué?” E Ignacio, que hoy es profesor de economía en la Complutense, me respondió: “Porque Franco ez un hijo de puta». ¿UN FRANQUISTA EN CASA? Salvador da una versión distinta respecto a las ideas de su hijo: «No existen tantas diferencias. Lo que sucede es que a mi hijo le tergiversan todo. Por ejemplo, su estancia en Venezuela: Juan Carlos fue ahí para intentar conseguir para aquel país el sistema de bienestar que Franco conquistó para España». Al sacar él el nombre de Franco, le preguntamos directamente: «¿Se considera usted franquista?» Su hijo critica el actual régimen español por «estar infectado de franquismo por todas partes» ¿No tendría Monedero el franquismo en casa? «Yo no soy franquista», contesta. «Pero sí entiendo a Franco y le respeto. Yo he vivido cómo, durante el franquismo, se transformó radicalmente este país y pasamos de los 100 gramos de lentejas de racionamiento a ser la novena potencia industrial del mundo. Ya no sé en qué lugar estamos ahora. Pero sí sé que los políticos nos han hecho polvo. Especialmente la izquierda y el PSOE, que han sido una lacra». —Pero su hijo es muy de izquierdas y comunista... —Yo no creo que sea comunista. Todo el mundo lo dice, pero es de izquierdas, no comunista. —Pero él critica el sistema liberal, a la Iglesia católica, el capitalismo... —Ahí no estamos de acuerdo, ve. Yo le digo: «Juan Carlos, ¿a cuanta gente necesitada ha dado de comer CCOO y UGT? A nadie». Sin embargo Cáritas da de comer todos los días a decenas de miles de personas. Y respecto a las dictaduras, que todas son malas, hay que diferenciar entre las de izquierdas que arruinan a un país y las de derechas que son mejores porque permiten la iniciativa privada. Yo durante el franquismo trabajaba 20 horas todos los días de la semana. Por eso no perdono a los políticos que se hayan cargado este país por la corrupción y la destrucción de la clase media. En este sentido, hace seis meses le escribí una carta a Esperanza quejándome de lo que sucedía en el PP. No sé si llegó a sus manos, porque no me ha contestado. Por eso entiendo el éxito de Podemos y mi hijo. Yo digo que si Dios no existiera habría que inventarlo. Pues lo mismo sucede con Podemos: que si no existiera habría que inventarlo porque es necesario rebelarse. Eso sí, yo creo en Dios, pero no creo en Podemos. Le preguntamos sobre la opinión que tiene su hijo sobre ETA y Salvador salta como un resorte: «Eso ha sido otra manipulación de la prensa. Mi hijo está en contra, totalmente, del terrorismo de ETA. Yo fui testigo del asesinato del teniente general Quintana Lacaci el 29 de enero de 1984 delante de mi bar. Yo lo vi todo. Los cinco tiros en la cara, como hi- 3. C R O ´ N I C A PARA MI PADRE... “A PESAR DE TODO” El padre de Juan Carlos Monedero no pertenece a la casta ni a la oligarquía, sí a la clase trabajadora (él se considera clase media). Lleva trabajando desde que cumplió los 11 años. Ha sacado adelante a sus seis hijos sin ayudas ni privilegios. Gracias únicamente a su trabajo. Ha currado 20 horas al día, siete días a la semana durante los últimos 59 años. Sigue hablando a las mil maravillas de todos sus hijos, especialmente de Juan Carlos. Pero tiene... ¿un problema?: es de derechas y milita en el Partido Popular. Quizá por eso, siempre existe un «pero» o un «a pesar de todo» por parte de aquellos que no coinciden con él o le reprochan algo. En esa clave se podría leer la dedicatoria, “A mi padre, a pesar de todo”, que Juan Carlos Monedero le escribió a su progenitor, en bolígrafo negro y de su puño y letra, en su último libro, Curso urgente de política para gente decente, del año 2013. Un libro, el de su hijo, que Salvador Monedero conserva como oro en paño en su bar de toda la vida, entre botellas de brandy, vino, cerveza y whisky. Cuando alguien le pregunta por su hijo, el buen hombre siempre le enseña orgulloso el texto de su hijo dedicado. Salvador sí es una persona decente, así lo atestigua, por lo menos, todo aquel que le conoce. Su hijo, por su parte, se dedica a dar lecciones y repartir carnés respecto a quien es o no honesto, íntegro u honrado en nuestro país. Tiene un ejemplo en su padre. Y él lo sabe, «a pesar de todo» y «a pesar que sea de derechas”. En otro de sus libros, La Transición contada a nuestros padres. Nocturno de la democracia española, editado en 2011, el líder madrileño de Podemos realiza una tesis revisionista de toda la Transición española. Como si necesitara rebatir a su padre algo con lo que no está conforme. Como si no le hubieran gustado los cuentos que le contaron cuando era joven. / R. ULLATE ORGULLO DE PADRE. Don Salvador muestra un ejemplar del último libro de Juan Carlos Monedero, «Curso urgente de política para gente decente» (2013), que le dedicó con una curiosa apostilla: «A mi padre, a pesar de todo». RODOLFO ULLATE rieron a su mujer. Salí corriendo del bar y perseguí a los asesinos que escaparon en un coche. La escena fue horrible. Juan Carlos no puede entender, ni mucho menos justificar, a ETA. Él sabe que el terrorismo es consecuencia de la Transición y es eso lo que él intenta explicar». Para terminar, preguntamos a don Salvador qué le pediría a su hijo si terminara siendo alcalde de Madrid. «Pues que haga todo lo contrario de lo que dice el programa de Podemos respecto a la subida de impuestos. Tendríamos que volver a los tiempos de Franco cuando apenas se pagaban impuestos. Aquí en Madrid el PP nos ha subido todos: basuras, IBI, multas, aparcamiento, circulación. Sólo faltaría ahora que llegara mi hijo y nos los subiera todavía más». Todo es posible, don Salvador. Todo es posible. Ó