EJECUCIÓN CONTRA ENPRESAS INDUSTRIALES Y COMERCIALES DEL ESTADO/I.S.S. – Prerrogativas. DISTRITO JUDICIAL DE NEIVA TRIBUNAL SUPERIOR SALA TERCERA DE DECISIÓN CIVIL FAMILIA LABORAL Magistrado Ponente: ALBERTO MEDINA TOVAR Neiva, febrero veintitrés (23) de dos mil cuatro (2004) Radicación: Demandante: Demandado: Proceso: 41001-31-05-001-2002-00028-01 Lina Marcela Espitia Garrido Instituto de Seguros Sociales Ejecutivo a continuación de ordinario laboral ASUNTO Nos compete hoy dilucidar lo que en derecho corresponda respecto del recurso de apelación interpuesto por el apoderado de la parte demandada en contra del mandamiento de pago de fecha 20 de octubre de 2003, proferido por el Juzgado Primero Laboral del Circuito de Neiva dentro del proceso referenciado. I. ANTECEDENTES RELEVANTES El 16 de octubre de 2003, la señora Lina Marcela Espitia Garrido, mediante apoderado judicial elevó petición de ejecución de la sentencia proferida el diecisiete (17) de junio de 2003 por esta Corporación, dictada en el grado jurisdiccional de consulta que se surtiera respecto de la sentencia de primera instancia proferida por el Juzgado Primero Laboral del Circuito de Neiva, dentro del proceso ordinario laboral que ella misma promoviera en contra del ISS. En la sentencia de segunda instancia proferida por esta Colegiatura, dentro del proceso ordinario laboral adelantado con anterioridad por la actora, cuyo recaudo se persigue ahora por la vía ejecutiva, se declaró la existencia de una relación laboral entre el ISS y la demandante, condenando a la primera al pago de las acreencias laborales derivadas de la relación de trabajo suscitada entre las partes. El 20 de octubre de 2003 el Juzgado Primero Laboral del Circuito de Neiva dictó mandamiento de pago en contra del ISS conforme a lo ordenado en la parte resolutiva de la sentencia proferida por el Tribunal Superior de Neiva. Noticiada la entidad demandada, propuso varias excepciones de fondo, y además impetró recurso de reposición y subsidiario de apelación en contra de la orden de pago que librara el Juzgado. El primero de ellos le fue denegado con base en la tesis que ha sido trazada por esta Corporación para casos análogos al ahora estudiado, precedente que ha sido sentado por esta colegiatura al resolver las apelaciones de órdenes de pago libradas en contra de la entidad que hoy, una vez más resulta demandada. II. EL RECURSO La inconformidad del recurrente está soportada en argumentos que ya han sido estudiados por el Tribunal, y que apuntan a que el ISS es una entidad pública, y que de conformidad con las reglas generales (artículo 177 del C. C. A.), las condenas proferidas en su contra solamente pueden ser ejecutadas después de 18 meses, señalando también que la entidad presenta unas características especialisimas por lo que no puede librarse orden de pago en su contra antes de los 18 meses que establece la disposición citada. Por lo tanto entiende que el mandamiento de pago dictado por el Juzgado contraviene el mandato de dicha norma. Adicionalmente, señala que es la demandante quien debe realizar las diligencias administrativas tendientes a obtener el pago de su acreencia, y que inclusive, el ISS dirigió oficio al apoderado de la actora para que aportara los documentos necesarios para tramitar y obtener el pago de su acreencia, pero se ha hecho caso omiso del mismo. Finalmente asevera el apelante que la entidad estatal debe acogerse al principio de legalidad y solamente puede actuar conforme a sus competencias sin excederlas, y en relación con el pago de obligaciones impuestas en sentencias judiciales, deben hacerse las previsiones presupuestales del caso. III. CONSIDERACIONES DEL TRIBUNAL Para resolver el presente negocio, en que se cuestiona el mandamiento de pago librado en contra del ISS antes de haber transcurrido los 18 meses de que habla el artículo 177 del C.C.A., la Sala tendrá muy en cuenta el supuesto fáctico expuesto por la ejecutante, que nos permitirá arribar a dos conclusiones: por un lado confirmar o reiterar la tesis jurisprudencial esbozada por esta Corporación en relación con la ejecución de las condenas impuestas al ISS por la justicia laboral ordinaria, pero por el otro, revocar la decisión objeto de alzada, conforme a los argumentos que se expondrán. Partamos primero de la tesis elaborada por esta Corporación, plasmada en varios pronunciamientos emitidos por sus salas de decisión, en el sentido de que es posible ejecutar algunas de las condenas impuestas al ISS por la justicia ordinaria laboral, sin atender a la regla general establecida en el artículo 177 del C.C.A., sobre ese aspecto, ha señalado esta Colegiatura: “Por mandato del artículo 1 del Decreto 2148 de 1992 el Instituto de Seguros Sociales se transformó en Empresa Industrial y Comercial del Estado del orden Nacional, carácter que se reiteró en el artículo 235 de la Ley 100 de 1993, mediante el cual se creó el Sistema de Seguridad Social Integral Por su parte, el artículo 68 de la Ley 489 de 1998, dispone: “Son entidades descentralizadas establecimientos públicos, las del orden empresas comerciales del Estado, las sociedades nacional, industriales públicas los y y las Sociedades de Economía Mixta, las Superintendencias y las Unidades administrativas especiales con personería jurídica, las Empresas Sociales del Estado, las Empresas Oficiales de Servicios Públicos y las demás entidades creadas por la Ley o con su autorización, cuyo objeto principal sea el ejercicio de funciones administrativas, la prestación de servicios públicos o la realización de actividades industriales personería jurídica, autonomía propio. o comerciales, con administrativa y patrimonio Cómo órganos del Estado, aun cuando gozan de autonomía administrativa, están sujetas al control político y a la suprema dirección del órgano de administración al cual están adscritas…” A su vez el articulo 87 ib, señala: Privilegios y Prerrogativas: Las empresas integrantes Industriales y Comerciales del Estado como de la rama ejecutiva del poder público, salvo disposición en contrario, gozan de los privilegios y prerrogativas que la Constitución Política y las leyes confieren a la Nación y a las entidades territoriales, según el caso. Acorde con las normas reseñadas el Instituto de Seguros Sociales es una Empresa Industrial y Comercial del Estado, calidad que lo ubica en la categoría de entidad descentralizada del orden nacional y por consiguiente gozaría de los privilegios y prerrogativas que la Carta Política y las leyes confieren a la nación, empero el inciso segundo de la norma indicada establece que: "No obstante, las empresas industriales y comerciales del Estado, que por razón de su objeto compitan con empresas privadas, no podrán ejercer aquellas prerrogativas y privilegios que impliquen menoscabo de los principios de igualdad empresas privadas". y de libre competencia frente a las Como el ISS en el presente asunto se ha comportado como empresa privada, compitiendo con las demás EPS, no resulta legal conceder la prerrogativa a que hace referencia el articulo 87 I1 de la Ley 489 de 1998. La demandada apuntala la oposición al mandamiento de pago en el Decreto 1071 de 1995 por el cual se reglamenta el artículo 138 de la Ley 100 de 1993; en efecto en la mencionada normativa se le impone al ISS el deber de presentar al Ministerio de Hacienda y Crédito Público con la suficiente antelación para ser incluido en el presupuesto, el estudio certificado por la Revisoría Fiscal los ingresos por aportes como las reservas que conforman el fondo de naturaleza pública para pensiones cuando los fondos del ISS sean insuficientes, pero dichas obligaciones surgen solo cuando los fondos son insuficientes, situación que debe ser objetivamente comprobada y sometida a las exigencias legales, y no es ese le caso que hoy nos ocupa.”1 Por tanto, con base en lo anteriormente expuesto, resulta sencillo concluir que es posible iniciar procesos ejecutivos en contra del ISS haciendo caso omiso a lo dispuesto en el artículo 177 del C.C.A., con base en sentencias proferidas en procesos ordinarios laborales. Pero la regla anterior no es absoluta. En efecto, al revisar con detenimiento el precedente trazado, encontramos que no en todos los casos de sentencias proferidas en procesos ordinarios laborales es posible adelantar su ejecución antes del término señalado en el C.C.A. El soporte normativo que apoya la tesis del Tribunal, está dado por el inciso segundo del artículo 87 de la Ley 489 de 1998 transcrito, disposición que nos permite determinar los casos 1 Tribunal Superior del Distrito Judicial de Neiva, Sala Quinta de Decisión Civil Familia Laboral, auto del diecinueve (19) de diciembre de dos mil tres (2003), Radicación 200100381-01 M. P. María Deissy Rojas Hoyos. Caso de Beatriz Tovar Sánchez contra el ISS, citado en el auto del diecisiete (17) de febrero de dos mil cuatro (2004) proferido por la Sala Tercera de Decisión Civil Familia Laboral, dentro del proceso ejecutivo laboral adelantado por Rosa Solano Perdomo contra el ISS, M. P. Alberto Medina Tovar, Radicación 41001-3105-002-2002-00072-02. En ese mismo sentido pueden consultarse el auto del veintiséis (26) de enero de dos mil cuatro (2004), proferido por la Sala Cuarta de Decisión Civil Familia Laboral, dentro del proceso ejecutivo laboral promovido por María Eugenia Dussan Penagos en contra del ISS, M. P. Enasheilla Polanía Gómez, radicación 2001-0078; y el auto del dieciocho (18) de febrero de dos mil cuatro (2004), proferido por la Sala Tercera de Decisión Civil Familia Laboral, dentro del proceso ejecutivo laboral promovido por José Horacio Malagón Carvajal en contra del ISS, M. P. Alberto Medina Tovar, radicación 41001-31-05002-2003-00733-02 en los cuales es procedente la ejecución sin tener que esperar los 18 meses. En ese sentido es clara la norma, y ha sido también clara esta Corporación al interpretarla en situaciones anteriores, en consonancia con conceptos de nuestro H. Consejo de Estado, al establecer que las prerrogativas conferidas por la ley a las empresas industriales y comerciales del estado -entre ellas el ISSno tienen cabida cuando tales entidades compitan con empresas privadas en la realización de determinada actividad. En vista de ello es que la jurisprudencia tiene dicho para el caso concreto, que cuando el ISS es condenado en razón de la actividad desempeñada como cualquier otra entidad privada del SGSS que presta sus servicios al público, debe responder en igualdad de condiciones como debería hacerlo cualquiera de estas entidades. Es por ello que, por ejemplo, en casos anteriores en que se ha demandado el reconocimiento de pensiones como obligación en cabeza del ISS, bien como EPS ora como administradora de pensiones, y se ha obtenido sentencia favorable por la vía ordinaria laboral, esta Corporación, aplicando la disposición anotada, no ha encontrado ningún inconveniente en que se libre orden de pago por tales conceptos sin tener que adelantar el trámite que sería del caso ante una autoridad pública en virtud de una sentencia de condena proferida en su contra. La razón es sencilla, pues en el primer evento, el ISS ha actuado ejerciendo una actividad que también desarrollan los particulares y por tanto, no puede ni podría alegar sus prerrogativas propias de una entidad pública. Pero el caso que ahora se estudia es diferente, y su solución debe ser diferente. Si bien es cierto que la demandante promovió proceso ordinario laboral, el mismo buscaba que se declarase la existencia de una relación laboral entre ella y el ISS, como en efecto lo consiguió, resultando condenada la entidad. Sin embargo, podemos apreciar que en esa situación específica, es posible dar aplicación a la prerrogativa establecida en el artículo 177 del C.C.A. porque con ello no se causa menoscabo alguno de los principios de igualdad y libre competencia, porque en la condena impuesta no hay relación entre el hecho de que la empresa del estado (ISS) esté desarrollando determinada actividad en ejercicio de su objeto y compitiendo con empresas privadas, que haga viable la excepción a la regla general establecida por el C.C.A., esa situación es irrelevante y no guarda relación con la condena impuesta. Por lo tanto, se trata de una situación que no puede convertirse en excepción a la regla general de exigibilidad de estas condenas, porque no ostenta tal calidad. Al respecto, es pertinente señalar que la Honorable Corte Constitucional, en sentencia de agosto 4 de 1997, citando el fallo C-546 de 1992, que declaró exequible el artículo 16 de la Ley 38 de 1989, sostuvo que “el derecho al trabajo, por su especial protección en la Carta y por su carácter de valor fundante en el Estado Social de Derecho, merece una especial protección respecto de la inembargabilidad del presupuesto”, expresando más adelante, que “los actos administrativos que contengan obligaciones laborales a favor de los servidores públicos deben poseer las mismas garantías de las sentencias judiciales, esto es, que pueden prestar mérito ejecutivo –y embargo- a los 18 meses después de haber sido ejecutoriados de conformidad con el artículo 177 del Código Contencioso administrativo …” (Negrillas subrayadas son de la Sala) La sentencia C-546 de 1992 refiere el tema de la embargabilidad de las obligaciones dinerarias a cargo del Estado surgidas de la relación laboral en los siguientes términos: “En consecuencia, esta Corporación estima que los actos administrativos que contengan obligaciones laborales en favor de los servidores públicos deben poseer la misma garantía que las sentencias judiciales, esto es, que puedan prestar mérito ejecutivo -y embargo- a los dieciocho (18) meses después de haber sido ejecutoriados, de conformidad con el artículo 177 del código contencioso administrativo, que dice en sus incisos primero y cuarto: "Artículo 177.- Cuando se condene a la Nación, a una entidad territorial o descentralizada al pago o devolución de una cantidad líquida de dinero, se enviará inmediatamente copia de la sentencia a quien sea competente para ejercer las funciones del ministerio público frente a la entidad condenada... Será causal de mala conducta de los funcionarios encargados de ejecutar los presupuestos públicos, pagar las apropiaciones para cumplimiento de condenas más lentamente que el resto. Tales condenas, además, serán ejecutables ante la justicia ordinaria dieciocho (18) meses después de su ejecutoria..." En consecuencia, esta Corte considera que en aquellos casos en los cuales la efectividad del pago de las obligaciones dinerarias a cargo del Estado surgidas de las obligaciones laborales, solo se logre mediante el embargo de bienes y rentas incorporados al presupuesto de la nación, este será embargable en los términos del artículo 177 del Código Contencioso Administrativo”. En consecuencia, verificado que el auto de obedecimiento se notificó por estado el 4 de septiembre de 2003, y la solicitud de ejecución se elevó el 16 de octubre de ese mismo año, el término de los 18 meses empezó a correr a partir del 5 de septiembre de 2003, lo que significa que sólo a partir del 5 de marzo de 2005 puede ejecutarse al Instituto de Seguros Sociales. Por lo tanto, en el caso concreto, la condena impuesta al ISS, si bien existe, es perfectamente clara, no se discute, y la providencia que la contiene se encuentra debidamente ejecutoriada, no es exigible todavía en virtud de lo dispuesto en el artículo 177 del C.C.A., y para obtener el pago, la demandante podrá, si a bien lo tiene, adelantar el trámite que se le sugirió por parte del ISS mediante el oficio 1055 del 25 de agosto de 2003 visible a folio 9 del cuaderno correspondiente a la ejecución de la sentencia, o esperar e iniciar el proceso ejecutivo correspondiente con sujeción a los dispuesto en el C.C.A. Así las cosas, resulta improcedente librar mandamiento de pago, por cuanto el título aportado no cumple el requisito de exigibilidad previsto en el artículo 488 del Código de Procedimiento Civil. En mérito de lo expuesto, el Tribunal Superior del Distrito Judicial de Neiva, Sala Tercera de Decisión, Civil Familia Laboral, DISPONE PRIMERO.- Revocar el auto proferido por el Juzgado Primero Laboral del Circuito de Neiva el veinte (20) de octubre de 2003, dentro del proceso ejecutivo laboral iniciado por Lina Marcela Espitia Garrido en contra del Instituto de Seguros Sociales. SEGUNDO.- En su lugar, abstenerse de librar mandamiento de pago, por las razones expuestas en la parte motiva. TERCERO.- Condenar en costas y perjuicios a la parte demandante en primera instancia, las cuales será fijadas y liquidadas por el a-quo. CUARTO.- Sin costas en esta instancia por su no causación. NOTIFÍQUESE ALBERTO MEDINA TOVAR ENASHEILA POLANIA GÓMEZ MARÍA DEISSY ROJAS HOYOS APROBADO MEDIANTE ACTA N°_______ DE ESTA FECHA_______________ COP. FOLIO______ TOMO______ AUTO INTERLOCUTORIO LABORAL