Revolución de los Claveles en Portugal es un referente histórico de libertad y dignidad Caracas, 25 Abr. AVN.- La Revolución de los Claveles del 25 de abril de 1974 significó el comienzo de un nuevo Portugal, el inicio de la democracia, la declaración del Estado de derecho y un referente histórico para los hombres y mujeres que deseen sentirse libres en un país libre. El nombre de esta revolución se toma por los claveles rojos y blancos que fueron colocados en los fusiles de los militares que estaban en contra del gobierno de facto de entonces y que protagonizaron esta acción. Fue un movimiento militar que, con el apoyo del pueblo, desembocó en la ruptura de la dictadura que mantenía António de Oliveira Salazar desde 1933. Fue la respuesta, principalmente, a la Guerra Colonial, que había generado que Portugal permaneciera como el país más pobre de Europa Occidental. Además, la Revolución de los Claveles fue el rechazo a un modelo económico que con un un débil desarrollo industrial, alto mercantilismo y el capitalismo como referente, generó la emigración de portugueses hacia Estados Unidos, Canadá, Francia, Venezuela y Alemania; así como una alta tasa de desocupación, despidos masivos, inflación y reducciones salariales promovidas por grandes monopolios capitalistas a los servicios del régimen salazarista. Este 25 de abril se cumplen 40 años de este levantamiento que puso fin al régimen denominado Estado Novo, la dictadura más antigua y larga de Europa (1926-1974), y que permitió la independencia de las últimas colonias y la no exigencia del servicio militar. También, fue el 25 de abril de 1974 cuando se rindió Marcelo Caetano -quien sustituyó a Salazar en 1968 tras su cese por cuestiones de salud (murió en 1970) y mantuvo su régimen-, y se disolvió la policía militar, que agobiaba a aquellos que le eran contrarios al salazarismo. Tras esta fecha, Antonio Spínola, máximo líder del Movimento das Forças Armadas (MFA), asume la Presidencia de la República Portuguesa, como expresión de la esperanza del pueblo que se había visto sumido en la represión y en el agobio. Destino sellado El régimen salazarista ya había sellado su destino en febrero de 1974, cuando Marcelo Caetano destituyera a varios miembros de la élite militar, por tener un deseo de libertad democrática y descontento al gobierno de facto en relación a la Guerra Colonial, que "mantenía a 200.000 jóvenes en África e hipotecaba el 40% del presupuesto del Estado", de acuerdo con Otelo Saraiva de Carvalho, estratega de la Revolución de los Claveles. La dictadura sería golpeada por el MFA, compuesto por militares que buscaban la retirada de las colonias de África, la liberación de los presos políticos, elecciones libres y el fin de la opresión del pueblo portugués. Fue en la madrugada del 25 de abril de 1974 cuando al unísono se escucharon E depois do Adeus (Y luego adiós), de Paulo de Carvalho, y "Grandola, Vila Morena", de José Afonso, dos canciones que los revolucionarios tomaron como símbolo de lucha. Eran las señales que esperaban para tomar los espacios más importantes de Lisboa, capital de Portugal, e iniciar el camino para un nuevo Estado, alejado de aquel que excluía a las mayorías. El objetivo de la Revolución de los Claveles fue alcanzado. Miles de portugueses amanecieron en las calles el 25 de abril de aquel año, apoyando a los militares y colocando claveles rojos y blancos en la punta de los fusiles como símbolo de paz y de resurgimiento de la democracia. Un año después del triunfo revolucionario, el 25 de abril de 1975, se realizaron elecciones para la Asamblea Constituyente que elaboró una nueva Constitución que entró en vigencia exactamente un año después. Se mantiene la esperanza Para Otelo Saraiva de Carvalho, 40 años después de la Revolución de los Claveles, hay cierta desilusión y disgusto por parte de los militares y la sociedad de Portugal, que han llegado "a la conclusión de que no fueron alcanzados (los objetivos) y están lejos de ser alcanzados". En una entrevista concedida recientemente al diario local La Voz, Saraiva explica que el programa presentado al día siguiente (26 de abril) por el MFA constaba que los gobiernos promoverían todas las decisiones para elevar rápidamente el nivel económico, social y cultural del pueblo. Sin embargo, hoy Portugal se ve sumido en una constante ola de protestas. Las clases sociales han salido a las calles para rechazar el nuevo rumbo que aquel Estado democrático tomó y que hoy se ha visto seducido por los grandes capitales, a propósito de las políticas de austeridad propiciadas por la troika, conformada por el Fondo Monetario Internacional (FMI), la Unión Europea (UE) y Banco Central Europeo (BCE). "Los grandes sueños que existían, como la reconquista de la libertad y la dignidad, se han conseguido", dijo Saraiva. Hoy la Revolución de los Claveles es un referente histórico para aquellos que vean su libertad acechada. Hoy, la Revolución de los Claveles se sigue dibujando como la esperanza de los pueblos revolucionarios, contestatarios, luchadores y llenos de dignidad. Powered by TCPDF (www.tcpdf.org)