45008 SOC. ESP. PSIQ. Cuad. 29

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AMOR, ODIO: CREATIVIDAD. A PROPÓSITO
DE LA OBRA DE M. RODOREDA*
Joaquín Poch** y A. Donato**
En este artículo sólo se pretende ilustrar algunos conceptos metapsicológicos (como son las pulsiones de vida y muerte y su relación con la creatividad) ya descritos por Freud, Klein
y muchos otros autores. En su elaboración hemos pretendido
que el lector pueda planteárselos de una manera novedosa y
esperamos que estimulante
1. A MODO DE INTRODUCCIÓN
Ilustración 1: Esta composición nos muestra un grupo de personas creativas. Posiblemente aman, tienen una familia, hijos...
Ilustración 2: Este es el resultado de su creatividad en ese otro lado del
mundo.
Se puede argumentar que la defensa..., el ataque..., el salvar la propia vida son justificantes, eximentes, etc. Ciertamente
existe una agresividad, una violencia al servicio de la existencia.
La guerra puede contemplarse como una defensa ante la agresión de los otros. Explica Alberoni (1998) en su libro Abbiate coragio (Coratge) que en el poema del Mahabbarata el príncipe Arjuna, viendo los ejércitos enemigos alineados en el momento de
iniciarse una guerra casi fratricida, piensa en todos los que mo* Comunicación presentada en “VIII Jornadas de Psicoanálisis en la Universidad de Lleida, Facultad de Medicina”, celebradas en Lleida el 31 de marzo y 1 de abril de 2000.
** Psicoanaistas.
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rirán amigos y parientes. Lleno de horror deja caer su arco y decide no combatir. Entonces se le aparece el dios Krishna y lo
empuja a lanzarse a la lucha. La naturaleza es violenta. El odio
al enemigo, la envidia por sus posesiones, la rivalidad asesina
ha conducido a las creaciones bélicas más terriblemente hermosas. La violencia y la aniquilación de una cultura han dado
paso a ricas creaciones de la cultura vencedora.
2. LOS DOS PRINCIPIOS ANTAGÓNICOS
Ilustración 3: Pintura medieval
En las diferentes culturas y civilizaciones han coexistido
los dioses del amor y de la destrucción. El dios de la maldad
y del amor, el dios de la destrucción y el de la paz. Quizás el
mazdeismo expresa muy claramente esta dualidad. Fue una
religión propagada en la Persia antigua por Zaratustra, presentaba dos deidades Ormuz, el dios supremo, la sabiduría y
la bondad. De su pensamiento salió accidentalmente el principio del mal, Ahrimán, habitaba en las tinieblas y acaudillaba el
ejército de los monstruos y de los demonios formaba así el
dualismo característico de dicha religión. Ormuz, vencería al
final.
La creatividad generada por ambos principios siempre ha
sido espectacular, es innegable la genialidad de los que se
dedicaban a cultivar el “arte” de la guerra, de los estrategas de
las batallas, de las máquinas inventadas a este propósito:
catapultas, cañones, tanques. Podemos decir algo semejante
de los planes estratégicos de los asesinos en serie, como Aníbal Lechter guiados por el dios del odio y la locura.
Bion nos habla de los tipos de vínculos, L.H.K. Que estarían explicándonos en un nivel más profundo estos tipos de actividades mentales (Bion, 1963).
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3. EL PSICOANÁLISIS Y LOS DOS PRINCIPIOS
Ilustración 4: Portada de “Más allá del principio del Placer” (traducción
catalana de P. Folch).
Freud en “Más allá del principio del placer” (Freud, 1920)
propone una dualidad pulsional en el ser humano: Eros1 y Thanatos2 posiblemente estos son los nombres que él encuentra a
esos dioses a los que me venía refiriendo. Pero ahora ya no
son entes externos a la persona, constituyen la base de su ser
más íntimo, son las energías pulsionales de lo que en la
segunda tópica denomina como Ello. Son el fluido biopsicológico que alimenta nuestra mente como humanos. Veamos
como lo plantea Freud:
“La oposición entre pulsiones sexuales se transforma en
una oposición entre pulsiones del Yo y pulsiones objetales, las
unas y las otras de naturaleza libidinal. Pero en lugar de ésta ha
aparecido una nueva oposición entre pulsiones libidinales (yoi-
Eros o Amor: (Datos obtenidos de Grimal, 1951) Dios del amor, nacido
de la Tierra y del Caos primitivo. También se atribuye su nacimiento al huevo
original, engendrado por la Noche, cuyas dos mitades al separarse forman la
Tierra y su cobertura el Cielo. Se le considera como una fuerza fundamental
del mundo. Asegura la continuidad de las especies y la cohesión interna del
cosmos. Posteriormente la sacerdotesa Diotima (iniciadora de Sócrates) sitúa
a Eros como a un genio intermediario entre los dioses y los hombres. Nacido,
en esta leyenda, de Poros (el recurso) y de Penia (la pobreza), recibe de ellos
unas características muy significativas: siempre anda a la zaga de su objeto
como la pobreza; sabe siempre ingeniarse un medio para conseguirlo, como
recurso. Ya no es un dios omnipotente, sino una fuerza perpetuamente insatisfecha e inquieta.
1
Tánato: (Datos obtenidos de Grimal, 1951) Genio masculino alado que
personifica la muerte. En la Ilíada aparece como hermano de Sueño (Hipno).
Ambos son hijos de Noche. No posee un mito propiamente dicho. Cabe aclarar que los genios eran seres inmanentes no sólo a cada individuo, si no también a cada lugar, a cada persona moral (sociedad, colegio, ciudad, etc.) y simbolizaban su ser espiritual. Nacen con la persona o cosa a la que van ligados
y tienen por misión especial conservar su existencia.
El genio, como personificación del individuo cobra una fuerza sobrenatural e inmortal. En las mujeres el genio es substituido por una Juno.
2
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cas y objetales) y otras que se establecen en el Yo y que quizás se puedan caracterizar como pulsiones destructivas. La
especulación transforma esta oposición en una oposición entre
pulsiones de vida, Eros y pulsiones de muerte” 3
4. AMOR, ODIO: CREACIÓN
Nuestra hipótesis de trabajo aquí, hoy, es que la destructividad, el odio, también son creativos, en el sentido de ser
capaces de engendrar obras de alta complejidad y riqueza
aunque puedan resultar espeluznantes. Sabemos que estamos
usando el término en un sentido muy amplio y que generalmente sólo se usa para referirse a obras inspiradas en las pulsiones amorosas, como forma de reparación en el sentido Kleiniano, o de sublimación en la visión freudiana.
Creemos que el odio puede detectarse como motor de
determinadas creaciones y en no pocas obras de arte. A
menudo aquello que ha impulsado al artista han sido sus sentimientos de odio y destructivos. Imposible no encontrar rasgos amorosos en la obra más funesta. Posiblemente el Dr.
Frankenstein, tenía sus impulsos amorosos al crear al monstruo. Supongo que la ambivalencia también debe de estar presente en todos los casos.
Ilustración 5: El Dr. Frankenstein junto a su criatura.
Sólo necesitamos de una premisa para seguir con el desarrollo de estas reflexiones: la existencia de la actividad simbólica para que no todo se resuma en una pura actividad enloquecida o tan inmediata a la actuación que evite la creación. Los
asesinatos pasionales impulsivos no entrarían para nuestro mo3
(Este texto ha sido traducido, por los autores de esta comunicación, del
texto Més enllà del principi de plaer (pág. 64). Traducido del alemán por P.
Folch Ed. Spax. Barcelona 1989. Para la traducción se ha consultado la obra
de Fernández Ballesteros 1984. 3.ª. Ed. Más allá del principio del placer Tomo
III OC pág. 2539, nota 1513).
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do de entender dentro de una actividad creativa. El asesinato de
un esquizofrénico ante la amenaza paranoica es una pura actuación donde la actividad simbólica parece inexistente.
Ilustración 6: Visión humorística de un arrebato psicótico asesino.
Quisiéramos mostrar algunas actividades creativas, devaluadas o no, que pueden tener que ver con una actividad artística. Es incuestionable que en ellas la creatividad ha jugado un
papel importante:
Ilustración 7: Fotografía del hambre y la desolación. Una foto estética de
la miseria y la desolación: Podía ser presentada a un concurso fotográfico, o
ganar el premio a las mejores fotos del año, o mejor aún, podría ser el motivo
publicitario de algunas de las compañías que utilizan este tipo de imágenes
para su propaganda.
Ilustración 8: Fotos de características pornográficas. La belleza mostrada
tiene como fin la excitación y la provocación. Se encuadraría dentro de una
pornografía light.
Ilustración 9: Pintura de la degollación de San Cugat. En esta pintura asistimos a un asesinato de gran crudeza y realismo. La matanza, el sufrimiento de
la víctima, la crueldad del verdugo, el aislamiento del santo, la mirada cómplice de jueces y testigos, se ha convertido en arte.
Ilustración 10: Judith. Pintura de Allori. El pie de página de la reproducción
de la pintura obvia cualquier comentario.
Ilustración 11: Pintura de Ernst. Virgen pegando al niño Jesús. El propio
título nos ahorra cualquier comentario. Sólo queremos resaltar la frialdad de
los testigos como en el cuadro del degollamiento, una colusión pasiva pero
activamente complacida.
5. RODOREDA Y SUS HEROÍNAS.
Dicho todo esto nos adentraremos en el aspecto más concreto de la obra de M. Rodoreda.
Ilustración 12: Foto de M. Rodoreda.
Citaremos solo unos párrafos de sus obras, para mostrar
como el odio y la destructividad animaban algunas de sus
creaciones. Nos apoyaremos en la correspondencia íntima
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mantenida durante años con Anna Murià y en la biografía
publicada por M. Casals, donde se ponen de manifiesto
muchos de los sentimientos de odio y destrucción que M.
Rodoreda guardaba para con alguno de los suyos y con su
amante A. Obiols.
A través de los fragmentos de sus novelas más famosas
explicaremos la concordancia con aspectos de su vida íntima.
Es evidente que la obra de un autor es fruto de su mente, pero
lógicamente esto no quiere decir en absoluto que lo represente totalmente. Así mismo nos lo dice Rodoreda: “en todos mis
personajes hay características mías, pero ninguno de los personajes no es yo...” (Rodoreda 1982). Ahora cuando desgraciadamente Rodoreda se ha ido al mundo de las representaciones dejando el de la realidad, cuando Rodoreda convive
con Natàlia, Aloma, Teresa Goday... podemos hacer un intento
de aproximación a ella misma, sirviéndonos de tres fuentes: las
novelas, las cartas a Anna Murià y la biografía publicada pos
M. Casals. Quizás ahora nos es permitido ver las relaciones
íntimas entre ella misma y sus protagonistas y como los conflictos de estas también fueron de alguna manera los de ella.
El “espejo roto” que eran sus protagonistas a nuestros ojos
vuelve a tomar una imagen unificada gracias a sus cartas. Sentimos una cierta serenidad al poder tener una visión más globalizadora de la producción rodorediana. Por ello estamos profundamente agradecidos a ella y a Anna Murià porque han
posibilitado continuar una investigación iniciada ya hace bastantes años. (Poch y Planas 1987). La admiración y el respeto
por la autora habrán de guiarnos en este trabajo.
Estudiaremos tres aspectos:
• A Rodoreda vive y narra el odio como vínculo: su relación con A.Obiols
• B Rodoreda vive y narra la maternidad.
• C Rodoreda vive y narra el sado-masoquismo y la muerte de los sentimientos
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A Rodoreda vive y narra el odio como vínculo:
su relación con A.Obiols
Obiols era el amante de M. Rodoreda durante el exilio a
raíz de la guerra civil española.
Ilustración 13: Foto de M. Rodoreda y A. Obiols en el exilio.
Durante la agonía de A. Obiols, Montserrat Casals i Couturier (1991) nos explica (pág. 304):
“El comportamiento de Merçé era extraño, se alojaba en
uno de los mejores hoteles de Viena y se vestía como si en
lugar de ir a un hospital a visitar a un moribundo fuera a una
fiesta, con ropa extremada y siempre muy bien peinada. A
Obiols le molestaba aquella bien intencionada comedia. Incluso se lo reprochaba con insultos. Tenía excusa: ”desvaría”
decía ella”
Los hechos narrados por la autora transcurren durante el
verano de 1971, entre junio y agosto. Aparecen registrados en
un dietario de M. Rodoreda donde describe el progresivo deterioro de A. Obiols. Acaba el día del entierro. M. Rodoreda robó
algunos de los documentos del moribundo, que se dieron por
perdidos hasta que se encontraron en el domicilio de Rodoreda al fallecer ésta.
Por esas épocas durante la enfermedad de Obiols aparecen en el dietario mencionado las últimas revisiones de Mirall
Trencat (Rodoreda, 1982)
Veamos algunos fragmentos de la actitud de Sofía Valldaura frente a la muerte de su “odiado” esposo.
“...derecha, al pie de la puerta Sofía lo miraba. Toda de
negro, serena, alta, delgada. Con los cabellos peinados hacia
atrás y recogidos hacia arriba, tal como los había tenido siempre. Sin permitir que le cortasen ni uno....
Sofía se sentó a mirar al muerto. También comió y además
tomó dos tazas de café caliente. Comía despacio, hablando
con Masdeu, con el busto erguido, con el meñique separado
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de la taza cuando bebía como si estuviera en lo alto de un
escenario y todo un público la estuviera mirando. ¿El muerto?
En aquella casa lo había estado desde el primer día, desde la
primera noche. ¿Una guerra su matrimonio?. Más bien una
indiferencia. Y ahora ella estaba allí sentada y el que estaba
echado era él y había muerto como todos. Telón” 4.
Respecto al robo aparece otro fragmento en el personaje
de Teresa Valldaura de la misma novela.
“Era ella. Teresa Valldaura, esposa de Salvador Valldaura,
quien había quitado la perla de la corbata del muerto. Se la
había clavado en el corpiño antes de salir de la biblioteca y no
la encontraría nunca nadie. La regaló a Amadeu y en sus
encuentros apasionados la arrancaba de la corbata de su
amante con los dientes” 5.
B. Rodoreda vive y narra la maternidad
Rodoreda tuvo un hijo, fruto de las relaciones con su tío
(hermano de su madre). Al exilarse lo abandonó, el niño tendría
4 ó 5 años. Murià nos explica: “Ella tenía muy pocos sentimientos maternales... No la ilusionó el nacimiento de su hijo,
más bien la estorbaba. Lo tuvo sobre los 19 años, no estaba
angustiada por haberlo dejado. Con Obiols tampoco se planteaba tener un hijo” 6.
Todo ello se reflejó en su obra. Así el ambiente recluido e
incestuoso de las relaciones de uno de sus personajes, Aloma,
con el hermano de su cuñada, nos recuerda las relaciones de
Rodoreda con su tío. La maternidad empobrecedora aunque
aceptada con sometimiento nos transporta al conflicto de la
propia maternidad de Rodoreda. Conflicto que queda eflejado
en casi todos los personajes femeninos de sus novelas (abortos repetidos de Cecilia en el Carrer de las camèlies, el aban4
5
6
Rodoreda, 1982. págs. 345 y 347 traducción de J. Poch.
Rodoreda, 1982. Pag.. 384, Trad. J.Poch.
Rodoreda, 1985 pág. 29. Trad. J.Poch
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dono de su hijo por parte de Teresa Goday en Mirall Trencat,
las ideas asesinas y suicidas de Natàlia en la Plaça del Diamant, etc.).
Para Rodoreda la maternidad es un trauma, una deformación que la envejece y la anula. Queda poco lugar para los sentimientos de estar dando vida.
En La Plaça del Diamant (Rodoreda, 1976. pág. 394) Natàlia dice durante su embarazo: “...y sólo faltaba que me ataran
un hilo en la pierna y me enviasen a volar.”
Veamos un momento estremecedor de la Plaça del Diamant: Es el momento en que Natàlia, Colometa, durante la
pobreza de la guerra civil decide matar a sus hijos: “Sólo me
hacía falta comprar el salfumant. Cuando durmiesen, primero el
uno y luego el otro, les metería el embudo en la boca y les
echaría el salfumant dentro y luego me echaría a mi misma, y
así habríamos acabado y todo el mundo estaría contento...” 7.
C Rodoreda vive y narra el sado-masoquismo y la muerte
de los sentimientos
Para acabar, queremos ilustrar con unas viñetas como
Rodoreda, llevada por el odio hacia su amante, crea situaciones novelísticas donde el sadomasoquismo y la muerte quedan representados con toda contundencia.
Dice a su amiga: “¿el amor? no lo quiero ni con minúscula,
ni con mayúscula. Es un juego que a mí me decepciona. Nunca sé si gano o si pierdo... lo que realmente tengo es un enemigo... es el hombre al que quiero” 8 De ahí inicia un proyecto
de novela: Vino negro. Explica el argumento en una carta a su
amiga Anna: “En una fiesta una mujer derrama unas gotas de
vino sobre el brazo de un hombre. Estas manchas sobre su piel
no le dejan vivir. Acabarán siendo amantes, pero esta pasión le
apartará de la esposa y sus hijos, por ello acaba matándola”
7
8
Rodoreda, 1976 pág. 474 Trad. J Poch
Rodoreda, 1985. pág. 34, Trad. J Poch
120
Un año después escribe a su amiga...”Quizás acabaremos
con un duelo a la americana persiguiéndonos por un bosque
con un revolver en la mano”.9
En El Carrer de las Camélias Cecilia Ce, la protagonista se
sitúa progresivamente en situaciones denigrantes de prostitución y sado-masoquismo. La heroína dice: “Me cogió del cuello con las dos manos y me dio un beso en la boca y yo le
mordí con rabia y el me dio una bofetada. Para que no lo vuelvas a hacer...Bonita”. Su partner le dice “Cambiaremos a Cecilia, la vestiremos, la haremos reír y la haremos llorar”10. A partir de ahí Cecilia queda recluida en el piso que Marc (su
amante) ha alquilado para ella. Se inicia una tortura psicológica y física digna del mejor “thriller” americano que la va anulando y enloqueciendo. La obligan a alcoholizarse y abusan
sexualmente de ella en varias ocasiones varios amigos de
Marc. Ella va degradándose viviendo en un mundo de alcohol
donde los límites entre lo onírico y la realidad van desdibujándose vertiginosamente. Queda embarazada. Su amante le
pega una paliza descomunal y de un rodillazo en el vientre le
provoca el aborto. Seguidamente la abandona en una calle
estrecha y miserable con una cruz de brillantes clavada en el
cogote. Cuando Cecilia C se recupera después de su ingreso
en el hospital e intervención quirúrgica, decide continuar su
profesión; esta vez será una prostituta de lujo y se dice a sí
misma: “El vientre no cuenta, el pecho no tiene precio, el
corazón a guardar”11.
Esta es la solución que se propone en las relaciones más
perversas. Excitación, locura por unos minutos y ningún compromiso. Son relaciones donde se enseñorea la frialdad, el
triunfo y el desprecio hacia el objeto.
Rodoreda, 1985. pág. 90, Trad. J Poch
Rodoreda, 1978. pág. 90. Trad. J. Poch
11
Rodoreda, 1978. Pág. 152. Trad. J.Poch
9
10
121
6. Quiron12 el sanador herido.
Después de todo lo presentado hasta aquí creo que vale la
pena presentarles una imagen que reúne la destrucción y el
amor. Quizás la creatividad de muchos de nosotros como
seres humanos y como profesionales tiene que ver con esta
imagen
Ilustración 14: Soldado de la Cruz Roja y herido.
Este soldado abrazando a su compañero herido quizás
representa algún aspecto de nuestra intimidad mental, heridos
y amados a la vez.
En palabras del poeta citado por Freud: “Si no se puede
avanzar volando bueno es progresar cojeando, pues está escrito que no es pecado cojear” 13.
12
Quirón: el sanador herido. Es un Centauro diferente a los demás. No es
salvaje sino hospitalario, benévolo, amigo de los humanos y no recurre a la violencia. Educó a Aquiles, Jasón, Asclépio y a Apolo entre otros. Sus enseñanzas incluían la medicina (curó el tobillo de Aquiles), la música, el arte de la caza
y la guerra, y la moral. Herido accidentalmente por una flecha de Heracles
intentó curarse, pero las heridas producidas por ellas eran incurables. Se retiró a su cueva queriendo morir, pero era inmortal. Prometeo, ser mortal, se avino a asumir la inmortalidad de Quirón cediéndole su derecho a morir. Fue así
como Quirón encontró el descanso.
13
Rücket en “Die Mekamen des al Hariri, citado por Freud, en Mas allá del
principio de placer, 1920
122
LISTADO DE ILUSTRACIONES
Fig. 1: Feininger y otros estudiando la Radioactividad. (Fuente:
Steichen E., Sanburg C., The Family of Man, The Museum of Modern
Art, New York, 1955)
Fig. 2: Muerte y dolor. Foto de prensa de R. Capa, Namdinh,
1954. (Fuente: Robert Capa, Retrospectiva: 1932-1954, Fundación
Caja de Pensiones 1989)
Fig. 3: Tríptico de los doctores de la Iglesia. Pintura de Michael
Pacher (1482). (Fuente: Programa de mano de Norma de Bellini. Gran
Teatre del Liceu Barcelona, temporada 1988-1999).
Fig. 4: Portada de Més enllà del principi de plaer, traducción
catalana de Pere Folch. (Editorial Spax 1989)
Fig. 5: El Dr Frankenstein junto a su criatura. (Fuente: El nuevo
Frankenstein, Ediciones Zinco, Barcelona, 1985)
Fig. 6: Visión Humorística de un arrebato psicótico asesino.
(Fuente: Colección Individus de Urgell Poch)
Fig. 7: Hambre y desolación. (Fuente: Sebastiao Salgado, SahelEl fin del camino, Comunidad de Madrid para Médicos sin Fronteras,
Madrid 1988)
Fig. 8: Fotos de características pornográficas. Cindy Sherman,
1985. (Fuente: Klaus Honef, Arte Contemporáneo, Benedikt Taschen,
Köln 1993)
Fig. 9: Degollación de San Cugat, Pintura de Ainé Bru (15041507), (Fuente: Prefiguració del Museu Nacional D’Art de Catalunya.
Lunwerg editores, 1992)
Fig. 10: Judith, óleo de Cristofano Allori. (Fuente: Obras Completas de S. Freud, Biblioteca Nueva, 1984)
Fig. 11: Virgen pegando al niño Jesús, pintura de Max Ernst
(1926), (The Virgin beating the child in frnt of three witness: André Bretón, Paul Elouard and the painter), (Fuente: Siegfried Gohr, Museum
Ludwig Cologne, Prestel-Verlag, Munich 1986)
Fig.12: Foto de M. Rodoreda. (Fuente: Obras completes de
Mercè Rodoreda Ed. 62, 1980)
Fig. 13: Foto de M. Rodoreda y A. Obiols en el exilio. (Fuente: M.
Rodoreda, contra la vida la literatura. De M. Casals, Ed. 62, Barcelona, 1991)
Fig. 14: Soldado de la Cruz Roja ayudando a un herido. Foto de
prensa de R. Capa, Wesel,1945. (Fuente: Robert Capa, Retrospectiva:
1932-1954, Fundación Caja de Pensiones 1989)
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Ilustración 1: Esta composición nos muestra un grupo de personas creativas.
Posiblemente aman, tienen una familia, hijos...
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Ilustración 2: Este es el resultado de su creatividad en ese otro lado del mundo.
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Ilustración 3: Pintura medieval.
126
Ilustración 4: Portada de “Más allá del principio del Placer” (traducción catalana de P. Folch).
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Ilustración 5: El Dr. Frankenstein junto a su criatura.
Ilustración 8: Fotos de características pornográficas. La belleza mostrada tiene
como fin la excitación y la provocación. Se encuadraría dentro de una pornografía light.
128
Ilustración 6: Visión humorística de un arrebato psicótico asesino.
129
Ilustración 7: Fotografía del hambre y la desolación. Una foto estética de la
miseria y la desolación: Podía ser presentada a un concurso fotográfico, o
ganar el premio a las mejores fotos del año, o mejor aún, podría ser el motivo
publicitario de algunas de las compañías que utilizan este tipo de imágenes
para su propaganda.
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Ilustración 9: Pintura de la degollación de San Cugat. En esta pintura asistimos
a un asesinato de gran crudeza y realismo. La matanza, el sufrimiento de la
víctima, la crueldad del verdugo, el aislamiento del santo, la mirada cómplice
de jueces y testigos, se ha convertido en arte.
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Judith, óleo por Cristofano Allori, que se autorretrató en la cabeza decapitada de Holofernes, que sostiene las esposa del artista, asistida por la madre de la misma, retratadas
como protesta del pintor –según su propio testimonio–, frente al mal trato familiar recibido en sus relaciones con ambas.
Ilustración 10: Judith. Pintura de Allori. El pie de página de la reproducción de
la pintura obvia cualquier comentario.
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Ilustración 11: Pintura de Ernst. Virgen pegando al niño Jesús. El propio título
nos ahorra cualquier comentario. Sólo queremos resaltar la frialdad de los testigos como en el cuadro del degollamiento, una colusión pasiva pero activamente complacida.
133
Ilustración 12: Foto de M. Rodoreda.
134
Ilustración 13: Foto de M Rodoreda y A. Obiols en el exilio.
135
Ilustración 14: Soldado de la Cruz Roja y herido.
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BIBLIOGRAFÍA
ALBERONI, F. (1998):.Coratge. Gedisa: Barcelona.
BION, W.R. (1963): Learning from experience. Buenos aires: Paidos
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RODOREDA, M. (1976): La plaça del diamant. En Obras Completas. Barcelona: Edicions 62.
RODOREDA, M. (1978): El carrer de les camèlies. En Obras completas.
Barcelona: Edicions 62
RODOREDA, M. (1982): “Prólogo” a Mirall Trencat.. Barcelona: Club Editor.
RODOREDA, M. (1985): Cartes a l’Anna Murià. Barcelona: La Sal, edicions de les dones.
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