El duro camino de vuelta a casa

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TIERNA MIRADA. El musmuki vive en la selva tropical de baja altitud. Se alimenta de flores, frutos e insectos. Este mono es una hembra amigable que fue rescatada del cautiverio por la autoridades.
CRÓNICA
El duro
camino de
vuelta
a casa
Especialistas del centro de rescate Urku,
en Tarapoto, luchan para que animales
silvestres recobren la libertad que perdieron.
TURISTAS. Urku, además de ser un centro de investigación de la fauna silvestre, es un atractivo turístico de Tarapoto.
ÓSCAR PAZCAMPUZANO
T
Texto y fotos
ienen la selva frente
a sus ojos, pero no la
libertad para recorrerla. Saliendo de
Tarapoto, a 15 minutos, se construyó lo que bien
podría parecer una pecera con
vista al mar. Fue el tráfico y el
cautiverio ilegal que impera en
San Martín y en toda la Amazonía lo que hizo urgente construir un refugio para animales
silvestres que perdieron su instinto salvaje y que necesitan recuperarlo para volver a casa.
Hace 12 años, un grupo de
profesionales fundó Urku con
la idea de abrir un centro de rescate, que se hizo posible años
después. Ahora se da albergue
a 62 animales rescatados de las
condiciones en que vivían. Algunos lograron recuperarse;
otros no.
Un mono maquisapa llegó
hace cuatro años. La policía
ecológica y la Autoridad Regional Ambiental lo rescataron del
cautiverio: vivía en una casa en
Tarapoto, lejos de los árboles
y de los suyos. A Urku no llegó
muy bien, a los pocos días murió. Esa es una historia que aquí
se ha repetido mucho.
El agrónomo Daniel Vecco
es el presidente fundador de esta organización que afronta varias dificultades. Una de ellas,
la falta de recursos. El aporte de
cooperantes y el cobro por el ingreso al centro les ayuda a sostenerse. Eso, lamentablemente, no alcanza. Con la falta de
dinero vienen otros problemas;
en algunas ocasiones, no tienen
forma de pagarle al veterinario.
No hace mucho hallaron dos
monos muertos cerca del centro. Ese es el otro problema. La
urbe crece cada vez más y la vida en la selva se ve amenazada
por el cemento y los cazadores.
“A veces los matan para comerlos; a veces, por deporte”, cuenta Vecco, a quien le preocupa
que las casas se estén acercando
a las 7,4 hectáreas que ocupan
en la zona de amortiguamiento
del cerro Escalera.
Aun con todo, en Urku siguen luchando para que los
animales recuperen su instinto
silvestre. César Guerra, un administrador especializado en
ecología, dice que para readaptar a los animales se necesita
enseñarles a cazar y a buscar
alimento sin depender del humano.
No hace mucho, una pareja de guacamayos pudo ser liberada luego de siete años de
refugio. Los soltaron en la Cordillera Azul. También se logró
readaptar a un grupo de monos. De vez en cuando, aparecen revoloteando entre los árboles de Urku. Aún no olvidan
del todo el lugar donde recuperaron la libertad e iniciaron el
duro camino de vuelta a casa.
MÁS INFORMACIÓN
INVESTIGACIÓN
Los especialistas de Urku desarrollan también investigaciones biológicas. Para el caso de los monos,
se han practicado estudios de parasitosis.
MÁS ESTUDIOS
En aves, se han hecho estudios de
poblaciones y se trabajó un inventario de especies. Otro trabajo importante se hizo con mariposas; se
estudiaron sus métodos de reproducción, sus hábitos y comportamientos.
ATENCIÓN PARA TURISTAS
A CASA. Después de siete años de refugio, una pareja de guacamayos pudo ser devuelta a la selva.
IMPONENTE. Esta águila está en proceso de readaptación.
Urku atiende de lunes a domingo
entre las 8:00 a.m. y las 5:30 p.m.
Informes al 042-787563.
ROEDOR AMAZÓNICO. Este majaz fue rescatado en Juanjuí.
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