UNIVERSIDAD METROPOLITANA PROGRAMA GRADUADO DE EDUCACIÓN MAESTRÍA EN EDUCACIÓN PREESCOLAR LA INFLUENCIA DE LOS PADRES Y DE LA COMUNIDAD EN EL APRENDIZAJE DE LA LECTURA Y ESCRITURA TESINA SOMETIDA COMO REQUISITO PARA LA OBTENCIÓN DEL GRADO DE MAESTRÍA EN EDUCACIÓN PREESCOLAR MARELIS ROMÁN MATÍAS 2009 NOTA ACLARATORIA Con el fin de evitar la repetición constante en la redacción de este documento, se optó por utilizar el género masculino en forma genérica al referirse a personas del género masculino o femenino. ii DEDICATORIA Dedico el esfuerzo de la creación de esta investigación a cuatro mujeres que han cambiado mi vida: mi madre y confidente María Del C. Matías Serrano, a mis profesoras, mentoras y ejemplo: Elizabeth García, María De Lourdes “Luly” López y Aúrea Rodríguez. A ellas que se han entregado por completo con amor, al arte de educar. AGRADECIMIENTOS Primeramente a Dios que me ha dado la fuerza, la voluntad y la sabiduría. Agradezco a mi familia que siempre me ha a poyado y me han brindado su ayuda en todo tiempo. Agradezco a todas aquellas personas que directa o indirectamente me han servido de inspiración y de apoyo en mi vida. ¡A todos ustedes GRACIAS! iii SUMARIO El propósito de este estudio fue investigar la importancia de la influencia de los padres y de la comunidad en el aprendizaje de la lectura y la escritura. La investigación se realizó a través de la revisión de literatura de artículos de periódicos, artículos de revistas profesionales, tesis, documentos de Internet y libros de textos. Los objetivos del estudio se basaron en investigar el rol de los padres y de la comunidad en el proceso de enseñanza y aprendizaje de la lectura y escritura en los niños. Entre los temas que se discuten se encuentran: el aprendizaje de la lectura y la escritura, los modelos y enfoques del aprendizaje de ambos procesos, las teorías que abarcan dichos temas, la familia y la comunidad como agentes activos en el aprendizaje de la lectura y la escritura y, la escuela como lugar de recuperación a los niños que llegan desmotivados hacia la lectura y escritura. Los estudios señalan que los padres son los primeros facilitadores de los niños para aprender; y necesitan ser un buen ejemplo a éstos para guiarlos en el proceso de leer y escribir de manera natural y placentera. Estudios señalan que los padres reconocen la importancia de aprender a leer y a escribir pero no toman parte activa de este proceso delegando toda la responsabilidad a los centros preescolares y escuelas. Como parte de la investigación, se brindan recomendaciones al gobierno, regiones educativas, escuelas, maestros y padres; con el propósito de que todos sean parte activa del proceso de enseñanza y aprendizaje y juntos colaboren en beneficio de la educación de los niños. iv TABLA DE CONTENIDO PÁGINA HOJA DE APROBACIÓN i NOTA ACLARATORIA ii DEDICATORIA iii AGRADECIMIENTOS iii SUMARIO iv TABLA DE CONTENIDO v CAPÍTULO I INTRODUCCIÓN 1 Antecedentes del problema 1 Objetivos del estudio 4 Preguntas de investigación 5 Justificación 5 Definición de términos 7 CAPÍTULO II REVISIÓN DE LITERATURA 12 Introducción 12 Historia de la educación 13 Marco conceptual 16 Desarrollo de la lectura 29 Enfoques de cómo se debe enseñar a leer 32 Desarrollo de la escritura 35 Familia y comunidad trabajando juntos 40 Factores sociales que influyen en el desarrollo de la lectura 44 y escritura v Estudios en Puerto Rico 47 CAPÍTULO III METODOLOGÍA 62 Introducción 62 Preguntas de investigación 62 Diseño de investigación 63 Descripción y selección de la población y muestra 64 Descripción del instrumento 64 Tabla para recopilar datos 66 Validación 68 Procedimiento 68 CAPÍTULO IV RESULTADOS 71 Introducción 71 Presentación de los hallazgos 71 Resumen 79 CAPÍTULO V CONCLUSIÓN Y RECOMENDACIONES 80 Introducción 80 Conclusión 80 Recomendaciones 81 Gobierno 81 Distrito escolar 82 Escuela y maestros 82 Padres 83 REFERENCIAS 85 vi APÉNDICE 89 A. Teoría ecológica del desarrollo de Bronfenbrenner 90 B. Modelo del determinismo recíproco del aprendizaje 92 de Bandura C. Tabla de resumen: Lectura, escritura y alfabetización 94 D. Niveles conceptuales de la escritura emergente 96 E. Condiciones que favorecen la lectoescritura 98 F. Retos de la enseñanza de la lectura 100 vii CAPÍTULO 1 INTRODUCCIÓN “Aprender es un placer natural” Aristóteles Antecedentes del problema Se han realizado varios estudios e investigaciones sobre el desarrollo de la lectura y escritura durante las últimas décadas (Durkin, 1966, 1972; Goodman y Altwerger, 1982; Harste, 1982 en Ruiz, 2001); con el propósito de mejorar las prácticas de enseñanza porque ha aumentado la preocupación de rezagos en estas destrezas en los niños. La mayoría de los estudiantes que presentan dificultades para realizar las tareas y ser exitosos escolarmente, presentan limitaciones en la lectura y escritura. Padres y maestros han mostrado preocupación respecto a este problema y esto ha dado pie a varias investigaciones. No obstante, a pesar de que estudios brindan recomendaciones para padres y estrategias para maestros, los niños continúan presentando dificultad al aprender a leer y desarrollar escritura alfabética (la que se espera se desarrolle en años preescolares). Entiéndase por escritura alfabética, cuando el niño demuestra conocer el principio de correspondencia entre grafemas y fonemas al incluir todas las letras necesarias en las palabras que escribe (Clay en Ruiz, 2001). Este estudio pretende investigar ¿cuál es el problema en el aprendizaje de la lectura y escritura? En México, se le preguntó a una niña de tercer grado- ¿“Cuáles son los libros para niños y cuáles son para adultos”? La contestación fue-“Los libros son sólo para niños porque sólo ellos necesitan aprender a leer y escribir, los adultos ya saben”. 2 (Corona, 2004). Esta niña sólo ve los libros como una herramienta para aprender como único propósito. ¿Cuáles son los factores que están influenciando el desarrollo de la lectura y escritura en los niños para que piensen así? ¿Será un pensamiento colectivo y actitud de poca importancia y pertinencia hacia estas destrezas que ha pasado de generación en generación? Es importante investigar el origen de los rezagos en los niños en el desarrollo de la lectura y escritura; y buscar alternativas para hacer más placentero, natural y espontáneo el proceso de aprendizaje de la lectura y escritura. Los niños recienten este proceso en muchas ocasiones por verse como impuesto, y tienden a frustrarse si sienten no tener éxito en comparación con otros. Los niños deben reconocer estas destrezas como parte de la vida diaria y no, como una necesidad escolar meramente. Las investigaciones realizadas (Clay, 1972, Durkin, 1966, 1972; Goodman y Altwerger, 1982; Harste, 1982 en Ruiz, 2001) han brindando múltiples estrategias para enseñar a leer y a escribir, han brindado recomendaciones a padres y cuidadores para que fomenten dicho aprendizaje, pero algo está faltando. A pesar de los esfuerzos, niños típicos (sin ninguna condición o discapacidad diagnosticada) continúan teniendo problemas en la lectura, no desean leer, no le dan importancia a los momentos de lectura y lo ven como algo aburrido. De igual modo, ¿por qué solamente escriben en la escuela cuando es impuesto? Los niños no muestran disfrutar de lectura y no desean escribir; ¿Por qué? 3 Si reconocemos que leer y escribir son procesos desarrollados socialmente y luego se interiorizan como procesos mentales y sicológicos (Vigotsky en Morrison, 2005), la sociedad debe cumplir un rol vital dentro de este desarrollo. La lectura y la escritura son procesos que le facilitan al individuo la posibilidad de expresarse, aprender, comunicarse con los demás, divertirse, satisfacer las necesidades, para así transformarse y transformar su contexto social y cultural. Por lo tanto, es importante que los niños estén involucrados en este proceso constantemente y desde edad temprana. Bruner (en Santrock, 2002) afirma que el lenguaje se adquiere en el contexto de una estructura comunicativa, que posibilitará el desarrollo de los actos dentro de las estructuras sociales y culturales. Se han estudiado estrategias y se han buscado alternativas, pero aún falta investigar el rol de la sociedad como comunidad influyente en el desarrollo del niño. El individuo es un ente activo que vive rodeado de otros individuos que afectan positivamente o negativamente su desarrollo. ¿Cuál es la función de la sociedad? ¿Serán los padres el mejor ejemplo para sus hijos respecto a la pertinencia de la lectura y escritura en la vida diaria? ¿Se estará fomentando en los niños el placer por leer y escribir? Los niños llegan a los salones de clases sin motivación ni deseos de disfrutar un momento de lectura o de escritura. Aunque se ha reforzado por años la importancia de momentos de lectura desde el nacimiento, la mayoría de los niños, al parecer, no han tenido esa experiencia en sus hogares. Con tantos materiales para garabatear, dibujar o escribir, los niños no le ven relación con la escritura y llegan a la escuela con la creencia de que escribir es demasiado difícil y aburrido. 4 Para encontrar contestación a las interrogantes, se utilizará documentación de literatura para la investigación y para elaborar posibles respuestas a estas interrogantes. Se utilizará comparaciones de estudios y documentos para encontrar factores sociales que están influenciando el desarrollo de la lectura y escritura de los niños de nivel preescolar y elemental. Se buscarán artículos que amplíen la información sobre el pensamiento de la sociedad en cuanto al uso cotidiano y a la necesidad diaria de la lectura y escritura. Se estudiará el desarrollo de la lectura y escritura desde el nacimiento y el uso que se le da a estas dos acciones en distintos ámbitos o contextos. Se analizará la importancia del rol activo de los padres durante el proceso de aprender. Se investigará finalmente, cómo la escuela puede ser un lugar de apoyo para desarrollar de forma efectiva el uso de la lectura y escritura; y cómo fomentar estos procesos como parte de la vida diaria. Objetivos del estudio El objetivo de esta investigación documentada es recopilar estudios, tesis, artículos e información que presenten factores sociales que afectan el desarrollo de la lectura y escritura en los niños de edad preescolar y elemental. Para efectos de este estudio se utilizará el término sociedad refiriéndose a la familia, comunidad y escuela donde el niño se desarrolla. Se pretende comparar cada investigación para llegar a acuerdos sobre cuáles son los factores sociales que influyen en el desarrollo del niño; y cómo se pueden trabajar para aminorar el efecto negativo en la enseñanza de la lectura y la escritura. Se utilizará información recopilada de artículos de periódicos y revistas, información de libros e Internet, libros y tesis los cuales trabajen el tema de la lectura y escritura y todo documento que pueda brindar alguna información pertinente al tema. El propósito será identificar factores y analizar la influencia que tienen en el aprendizaje del 5 niño, para así buscar alternativas viables para distintos componentes de la sociedad. El objetivo es fomentar el gusto por aprender a leer y escribir, y que estos procesos sean de disfrute para los niños, no impuestos y frustrantes para ellos a lo largo de la vida. Preguntas de investigación Teniendo en mente la preocupación sobre rezagos en el desarrollo de la lectura y escritura, se debe investigar este tema para buscar alternativas que ayuden a los niños. Al finalizar la investigación se espera que se puedan contestar las siguientes preguntas: ¿Cómo influye la familia y la comunidad en el desarrollo de la lectura y escritura? ¿Cuál debe ser el rol de los padres, familiares y cuidadores para fomentar el deseo de leer y escribir en niños de edad preescolar? ¿Cómo la escuela puede ser un lugar de recuperación para esos niños que llegan frustrados y sin deseos de leer y escribir en su vida diaria? Justificación Es importante estudiar este tema porque son muchos los niños que están siendo rezagados por sus dificultades en lectura y escritura. Se ha hablado mucho de la importancia de estos procesos para el éxito en la vida porque son acciones que utilizaremos para el resto de nuestros años, sin embargo, ¿por qué tantos niños con limitaciones en estas destrezas?, ¿por qué niños frustrados?, ¿por qué niños que no le dan importancia al acto de leer ni a los momentos de escritura? Los niños leen las señales de tránsito, los nombres de tiendas o de familiares, escribimos la lista de compra o una carta a algún familiar. Es importante identificar qué podemos hacer con estos niños, cómo los podemos ayudar a que sea natural este proceso, que entiendan que es importante leer y 6 escribir, pero para cada momento en la vida, no para los años escolares. Tenemos que reconocer qué es lo que pueden hacer los padres y los adultos para influenciar a sus hijos, qué pueden hacer los cuidadores o familiares para hacer más llevadero este proceso, cómo los educadores pueden trabajar con los que llegan a sus salones sin deseos de aprender. ¿Leen los padres? ¿Lee la sociedad? ¿Cómo la comunidad influencia el pensamiento colectivo; y cómo esto ha afectado el pensamiento de los niños en cuanto al proceso de aprender en la vida? Leemos desde que nos levantamos hasta que nos acostamos; las señales, etiquetas, manuales, títulos, palabras en la televisión, nombres que identificamos. Leemos sin saber que estamos leyendo, porque lo hacemos de forma natural. La adquisición y el aprendizaje de la lengua por parte de los seres humanos, es un hecho habitual. El lenguaje es un instrumento de comunicación que facilita la convivencia con los demás seres y el conocimiento de su entorno socio-histórico (Pujals, 2002). Ante la presencia de la tecnología y tantos adelantos, es necesaria la implementación de estrategias para fomentar la lectura y escritura. Ya no se le da tanta importancia a la lectura, antes se leían novelas, poemas, libros informativos. Ahora los libros se presencian como piezas de museo (Belinche, 2008). Según una encuesta nacional realizada en 2005 por la Secretaría de Medios de Comunicación de la Nación y supervisada por INDEC, en 2005 el 52% de los argentinos no leyó un libro durante 2004 y el 61% reconoció no recordar el nombre de ningún autor (Belinche, 2008). Aunque esto es en otro país, tenemos que analizar si es lo mismo que está pasando en Puerto Rico; un comportamiento como este influye en sus hijos. Los niños modelan lo que ven de los adultos (Bandura en Craig, 2001), es por esto importante estudiar el ejemplo brindado a los niños por medio de los adultos. 7 Este estudio servirá de base a la comunidad para influenciar positivamente a todos aquellos adultos porque somos ejemplo modelos a los niños. Si reconocemos que podemos cambiar esa visión de los niños sobre la pertinencia de aprender a leer y escribir, seremos agentes de cambio, fomentaremos el amor por leer y escribir como procesos que nos unen como sociedad y como herramienta para la comunicación dentro de la misma (Corona, 2004; Molina, 1999). Tenemos que entender primero qué está pasando con el proceso de aprender a leer y escribir; para luego buscar estrategias que ayuden a los niños a desarrollar estas acciones de forma natural y placentera. Definición de términos Para propósitos de esta investigación se utilizaron diversos términos que serán definidos a continuación para facilitar la interpretación del estudio al lector. Alfabetización Habilidades de lectura escritura, audición y lenguaje en un contexto de situaciones culturales y sociales (Morrison, 2005). Alfabetización temprana Desarrollo temprano de la habilidad para leer y escribir; proceso evolutivo, activo y natural mediante el cual, provistas unas experiencias lingüísticamente ricas, el niño conceptualiza el lenguaje escrito (Ruiz, 2001). Andamiaje Proceso de ofrecer diversos niveles de apoyo, guía o dirección durante el curso de una actividad (Morrison, 2001). 8 Aprendizaje Cambios cognitivos y de comportamiento que resultan de experiencias (Morrison, 2005). Aprendizaje activo Acción de que los niños construyen su conocimiento a través de la actividad física y mental (Morrison, 2005). Aprendizaje por observación Llamado también por imitación o modelamiento, es el aprendizaje que ocurre cuando una persona observa e imita el comportamiento de otra (Santrock, 2002). Contexto Ambiente o situación particulares en que se realiza el desarrollo; el trasfondo del desarrollo (Craig, 2001). Cotidiano Diario (Diccionario de la Lengua Española, 1978). Desarrollo Cambios que con el tiempo se producen en la estructura, el pensamiento, y la conducta de una persona como resultado de influencias biológicas y ambientales (Craig, 2001). Educación Crianza, enseñanza y doctrina que se da a los niños y a los jóvenes; desarrollar o perfeccionar las facultades intelectuales y morales del niño o joven por medio de preceptos, ejercicios y ejemplos (Diccionario de la Lengua Española, 1978). 9 Escritura Acción de escribir; representar palabras o ideas mediante letras y otros signos (Diccionario de la Lengua Española, 1978). Escritura alfabética Escritura que se espera se desarrolle en años preescolares; el niño demuestra conocer el principio de correspondencia entre grafema (letras) y fonemas (sonidos) al incluir todas las letras necesarias en las palabras que escribe (Ruiz, 2001). Familia Personas emparentadas entre sí que viven juntas bajo la autoridad de una de ellas (Diccionario de la Lengua Española, 1978). Fomentar Promover algo (Diccionario de la Lengua Española, 1978). Influencia Poder o autoridad de una persona sobre otra; producir unas cosas sobre otras unos efectos (Diccionario de la Lengua Española, 1978) Lectura Habilidad para entender el discurso escrito (Santrock, 2002). Modelo de sistema ecológico Paradigma de desarrollo del teórico Urie Bronfenbrenner en que el niño reestructura de manera activa los aspectos de los cuatro niveles de ambiente donde vive (Microsistema, Mesosistema, Exosistema, Macrosistema y Cronosistema), al mismo tiempo que recibe el influjo de los niveles y de sus interrelaciones (Craig, 2001). 10 Niñez temprana Llamada años preescolares, periodo de la infancia que abarca aproximadamente los primeros cinco o seis años de vida (Santrock, 2002). Participación activa Término utilizado refiriéndose a que los niños recuerdan más y aprenden mejor cuando participan, en vez de observar solamente (Papalia, 2001). Problemas de aprendizaje También llamado dificultad de aprendizaje, dificultades extremas para aprender asignaturas como la lectura, la escritura o las matemáticas, pese a poseer una inteligencia normal y no tener defectos sensoriales ni motores (Craig, 2001). Rezago Atraso; dejar atrás una cosa (Diccionario de la Lengua Española, 1978). Socialización Proceso general por el cual el individuo se convierte en miembro de un grupo social: familia o comunidad. Abarca el aprendizaje de actitudes, creencias, normas, leyes, costumbres y valores, expectativas y roles del grupo social. (Craig, 2001). Sociedad Reunión de personas, familias, pueblos o naciones; agrupación de individuos, con el fin de cumplir, mediante la mutua cooperación, todos o algunos de los fines de la vida (Diccionario de la Lengua Española, 1978). Teoría Conjunto de explicaciones de cómo aprenden y se desarrollan los niños (Morrison, 2005). 11 Teoría del Aprendizaje Social Teoría de que los comportamientos se aprenden observando e imitando modelos, propuesta por Bandura; también se conoce como la teoría socio-cognoscitiva. (Papalia, 2001). Zona de desarrollo próximo Concepto de Vigotsky de que, con la ayuda de los adultos o de compañeros mayores, los niños se desarrollan al participar en actividades que rebasen un poco su competencia (Craig, 2001). 12 CAPÍTULO II REVISIÓN DE LITERATURA Introducción La presión de los padres por el interés de que sus hijos aprendan a leer y a escribir a edad temprana es cada vez mayor. Los niños son participantes activos en su educación y desarrollo. Esto significa que deben estar totalmente involucrados en su aprendizaje, en lo que necesitan saber y hacer (Morrison, 2005; Rodríguez, 2005; Colón, 2006). Distintos investigadores han estudiado la importancia que tienen los padres en el desarrollo de sus hijos. Existen diversas teorías que explican cómo debe ser el desarrollo de la lectura y escritura. Es importante conocer estas teorías porque son basadas en estudios que nos ayudarán a entender estos procesos que son de dificultad para algunos niños, pero a su vez, de vital importancia como individuos que vivimos en una sociedad alfabetizada. Para entender la influencia que tienen los padres y la comunidad en el desarrollo de la lectura y escritura, debemos saber cómo se desarrollan ambos procesos. Se debe investigar también qué están haciendo los familiares y cuidadores para fomentar la lectura y la escritura en los niños. Cómo la comunidad y sociedad ayuda a que la lectura y escritura sea una actividad diaria en la vida de los niños. Teniendo en mente estas interrogantes, se han buscado en distintas fuentes y recursos información que trabaje el tema de la lectura y escritura. Las primeras interacciones que tienen los niños son con sus padres al nacer. Los siguientes años son los padres, y en ocasiones los cuidadores, los que fomentan el desarrollo de los niños hasta el momento de llegar a un centro de cuido o a la escuela. La educación es un proceso que comienza desde los hogares (Papalia, 2005; Espinosa 2005 13 en Colón, 2006). En años anteriores, eran las madres las encargadas de enseñar a sus hijos todas las destrezas necesarias para la vida. Sólo pocos niños tenían la oportunidad de ir a la escuela o de ser enseñados por un tutor o maestro. Al revisar el trasfondo histórico de la educación, vemos como personas como Martín Lutero, han luchado para que todos los niños reciban instrucción formal (Morrison, 2005). La Constitución de Puerto Rico exige educación gratuita para todos los niños sin importar raza, color, impedimento, nivel social, etc. Los niños comienzan a aprender desde que nacen, en sus hogares y llegan a la escuela con muchas destrezas desarrolladas y otras en proceso. Sin embargo, las destrezas de lectura y escritura son las que en la mayoría necesitan más refuerzo (Mercado, 2007), y es en estas destrezas que se observa menor interés en aprenderlas o desarrollarlas por parte de los niños. Es importante entonces estudiar, cómo la escuela puede ayudar a los niños que llegan sin interés o con dificultad al leer y escribir. Toda la información expuesta en esta investigación, ayudará a los padres, familiares, cuidadores y maestros a entender el proceso de la lectura y escritura, a conocer el rol que tienen estos componentes de la sociedad en dichos procesos y brindará recomendaciones que ayuden a tener parte activa en el proceso de enseñanza y aprendizaje de los niños. Historia de la educación El siglo XVI fue una época de grandes disturbios sociales, religiosos y económicos los historiadores la llaman la época del Renacimiento. Uno de los impactos más importantes de esta época fue la Reforma Protestante impulsada por Martín Lutero. 14 Fue en ese entonces, que se dió gran énfasis a la escolarización formal para enseñar a los niños a leer (1483-1546). Lutero enfatizó la necesidad de crear escuelas para enseñar a los niños a leer. Lutero creía que los individuos debían ser libres para planificar su salvación, y para esto debían saber la Biblia en su propia lengua (Morrison, 2005); y para esto tenían que saber leer. Antes de la Reforma, sólo los ricos y los que se preparaban para dedicar su vida a la iglesia aprendían a leer y a escribir. Lutero también creía que la familia era una institución importante en la educación de los niños. Creyendo esto, Lutero animó a los padres a ofrecer instrucción religiosa y vocacional desde sus hogares. Desde estos años vemos que ya existen personas que reconocen la importancia de los padres en el proceso de enseñanza a sus hijos (Grifftth en Rodríguez, 2005; Morrison, 2005; Roldán, 2008). Son los padres los que le pueden y deben ofrecer las primeras experiencias a sus hijos, estas servirán de base para todo lo que los niños continuarán aprendiendo por el resto de sus vidas. Luego de Martín Lutero, han existido varias personas que han aportado a la educación con sus ideas y esfuerzos. En la investigación se brindarán personas importantes que han influenciado a la educación con sus creencias e ideales. John Locke (1632-1704), un filósofo inglés, afirmaba que las experiencias determinaban el aprendizaje. Si las primeras experiencias son en los hogares, son los familiares los responsables de brindarle al niño actividades ricas en conocimiento, juegos donde el niño de forma natural se relacione con la lectura y escritura. Jean-Jacques Rousseau (1712-1778), decía que se debía enseñar a leer en contextos naturales para la vida diaria (Morrison, 2005). Rousseau creía que aunque los padres y familiares tengan el control de la educación que viene de las experiencias sociales, no tienen control sobre el 15 crecimiento natural; por ende, deben brindar una atmósfera y experiencias enriquecedoras y significativas para el niño. Rousseau pensaba que es responsabilidad de los padres aplicar estrategias educativas efectivas, en el momento correcto, para que todos los niños consigan su potencial. Aunque en algún tiempo, algunos teóricos afirmaron que el niño debía aprender solo y a su ritmo, Pestalozzi (1774 en Morrison, 2005) afirma que no se debe esperar a que el niño muestre iniciativa por aprender. Se requiere preparar un clima de enseñanza por medio de los padres y educadores; se debe motivar y dar seguimiento a su propia educación (Rodríguez, 2005). Robert Owen (1771-1858), dijo que para lograr un aprendizaje adecuado, se debía enseñar a los padres para que estos pudieran enseñar a sus hijos correctamente (Morrison, 2005). Los padres son el ejemplo a seguir, es por esto que se les debe enseñar a ser ese modelo a observar y emular en todas las áreas de la vida, incluyendo el área educativa. Friederich Wilhelm Frobel (1782-1852), mejor conocido como el padre del “Kindergarden” o Jardín de Infancia, abogó por un sistema de enseñanza. Frobel reforzó la idea de que el maestro es un diseñador de experiencias y actividades. El maestro es responsable de guiar y brindar dirección al niño, de este modo éste será creativo y contribuyente a la sociedad. Frobel construyó manipulativos y actividades para desarrollar al niño, y defendió el juego como la actividad más pura y vital para el niño aprender. Fue el primero en animar a mujeres jóvenes y solteras a convertirse en maestras. John Dewey (en Papalia, 2005) basaba sus ideas en que los niños están implicados en actividades donde interactúan con la sociedad; y que con ésta interacción el niño aprendía cómo vivir democráticamente con otros. Los niños desde edad temprana se 16 relacionan con sus padres y hermanos, luego con sus vecinos, otros familiares, compañeros de equipos, clubes o iglesias, entre otros sistemas sociales; en todos estos ambientes el niño observa comportamientos de otras personas y tiende a imitar los que cree son correctos. El niño repite en la mayoría de los casos lo que observa de otros, esto no es una excepción cuando el ejemplo que ve se relaciona con el acto de leer y escribir (Bandura en Papalia, 2005). La educación ha ido evolucionando. Desde hace años atrás muchas personas se han dado a la tarea de estudiar a los niños y su aprendizaje. Se han estudiado lo que los niños deben aprender, cuándo y cómo es el mejor método; todo con el fin de que todo los niños reciban una educación de calidad, desarrollen las destrezas efectivamente y sean personas capaces de vivir exitosamente en esta sociedad tan competitiva. Marco Conceptual Investigadores han dedicado su vida a realizar estudios y a observar el desarrollo de los niños. La educación nutre sus ideas y prácticas de los resultados de estas investigaciones. Muchos investigadores han desarrollado teorías para explicar cómo aprenden los niños. Otros, han estudiado las etapas por las que pasan los niños y lo que deben aprender en cada una de éstas. Es importante conocer las teorías para fomentar adecuadamente el desarrollo del niño; de modo que se les facilite el aprendizaje, y su desarrollo se dé en actividades diarias y de forma natural. Con motivo de la investigación sobre la influencia de la familia y la comunidad en el desarrollo de la lectura y escritura, se explicarán varias teorías. Las teorías de aprendizaje y desarrollo que se presentarán a continuación son: teoría ecológica de Urie Bronfenbrenner, teoría socio-cultural de Lev Vigotsky, teoría cognitivo-social de Albert Bandura, teoría cognoscitiva de Jean Piaget, y 17 la teoría psico-social de Erik Erikson. De igual manera, la educación se recibe influencia de distintas filosofías. Como parte de esta investigación se investigará además el Idealismo, Realismo, Pragmatismo y Reconstruccionismo como parte de las filosofías que influencian la educación actual. Una forma clara y útil de clasificar las influencias del ambientes es por la inmediatez del impacto (Papalia, 2005). El individuo no es una entidad separada que interactúa con el ambiente sino una parte inseparable del mismo. Urie Bronfenbrenner, un psicólogo estadounidense, identifica cinco niveles interconectados de influencia externa, desde lo más cercano hasta lo más lejano en el ambiente del niño y las personas que influyen en su desarrollo. Para entender el desarrollo del niño se debe estudiar los contextos sociales que lo rodean. La teoría ecológica, propuesta por Urie Bronfenbrenner (1917), relaciona al individuo con su entorno, desde el hogar hasta los patrones sociohistóricos y culturales de la sociedad donde se desarrolla el niño. Todos estos sistemas se relacionan (fluyen de forma recíproca en ocasiones) como elementos que influyen en el desarrollo de cada niño. Estos cinco sistemas son: microsistema, mesosistema, exosistema, macrosistema y cronosistema. El microsistema es el entorno inmediato del niño. Como parte del microsistema se encuentra el hogar, la iglesia, la escuela, el vecindario, el grupo de compañeros, clubes y equipos de juego, entre otros. Incluye las relaciones interpersonales que tenga el niño de forma directa (Santrock, 2002), ya sea con sus padres, familiares, cuidadores, compañeros o maestros. El niño actúa y se relaciona con otros de forma directa como un receptor activo de las experiencias que le brinden estos escenarios. Estudiar este ambiente es vital porque es la atmósfera donde el niño recibe las primeras influencias de vida. Las primeras palabras que escucha, los primeros 18 lugares que visita, sus primeras experiencias dependen de este grupo de personas que lo rodean en sus primeros años de vida. El mesosistema es la interacción de varios microsistemas, que contienen al niño en desarrollo (Papalia, 2005); estas relaciones pueden ser uniones entre padres y maestros, familia y comunidad, por ejemplo. El exosistema, se refiere a enlaces entre dos o más ambientes (Papalia, 2005). Uno de esos ambientes tal vez no contiene al niño o éste no tiene un papel activo, pero sí lo afecta indirectamente. Como ejemplo de exosistema se pude mencionar: amigos de la familia, medios de comunicación masiva, servicios legales y servicios de asistencia social (Santrock, 2002). El que la madre del niño esté frustrada y molesta con su trabajo, puede causar un cambio en su actitud frente al niño; esto lo afectará. De igual manera, si el comité de la escuela del niño se reúne para cambiar estructuras, el niño tendrá que asumir estos cambios. No como parte activa en la decisión, pero sí recibirá las influencias de decisiones y cambios tomados por otros. El macrosistema está formado por patrones culturales, creencias, ideologías, sistemas económicos y políticos, incluyendo los valores y costumbres de la sociedad. El niño al igual que su familia recibe influencias de todos estos ambientes, por eso son parte del desarrollo del niño. El último sistema que propone Urie Bronfenbrenner es el cronosistema, que agrega la condición del tiempo patrones socio-históricos. Este sistema incluye los cambios que pueden afectar al niño a través del tiempo, tales pueden ser: una separación de padres, una mudanza, como cambios culturas que sufren todos los países (ver apéndice 1). Un ejemplo que se vive actualmente que es parte del cronosistema, es la era tecnológica donde los niños actualmente se están desarrollando. Hace años atrás nuestros abuelos no tenían acceso a la tecnología, no era parte de sus retos ni de sus vidas. Actualmente los niños manipulan artículos electrónicos 19 desde muy corta. El enfoque ecológico nos ayuda a ver al niño como el centro de su desarrollo, pero a su vez, recibiendo influencia de muchas partes. Esto es importante porque muchas veces decimos, el niño es reflejo de lo que ve o de lo que vive (Craig, 2001), y al observar los padres del niño, su entorno o sus experiencias previas reafirmamos este pensamiento. Son muchas las influencias en el desarrollo de los niños. Actualmente, existe un interés en estudiar cómo estas influencias moldean la vida de los niños para fomentar influencias positivas y minimizar las influencias contextuales e interrelaciones negativas. La teoría socio-cultural del ruso Lev Vigotsky, tiene implicaciones directas para esta investigación. La teoría socio-cultural hace énfasis en las interacciones sociales, especialmente dentro del hogar, como un factor clave en el aprendizaje de los niños (Papalia, 2005). Esta teoría plasma la importancia de los adultos en el desarrollo de los niños como los facilitadores de experiencias para dirigirlos y organizarlos, antes de que éstos tengan la capacidad de hacerlo por sí solos o de interiorizarlo. Uno de los términos más importantes de Vigotsky es zona de desarrollo próximo ó ZDP; este término es utilizado para referirse a las tareas que resultan difíciles para que el niño las realice solo, pero que con un adulto o un par más competente es capaz de lograr (Santrock, 2002). Este término hace énfasis en la importancia de la interacción con otra persona que colabore en el aprendizaje del niño, o lo dirija por un tiempo de ser necesario. Los padres, en la mayoría de los casos de la niñez de edad temprana, son estos guías que brindan ayuda a sus hijos a realizar distintas tareas. Por ejemplo, cuando un niño comienza a correr bicicleta, necesita la ayuda de un adulto para mantener el balance y sentirse confiado de que lo logrará. Esa ayuda y confianza es la misma que necesitará en el 20 proceso de aprendizaje y desarrollo de la lectura y escritura. Necesitará un adulto o un par más competente que le brinda experiencias significativas con la lectura y escritura, que le enseñe a manipular materiales de escritura y libros, que saque tiempo para la lectura y comparta la escritura con él en distintos escenarios. El término andamiaje, también acuñando por el teórico Vigotsky, está ligado a la zona de desarrollo próximo. El andamiaje es una técnica para cambiar el nivel de apoyo (Santrock, 2002). Durante la realización de actividades, el adulto va modificando el nivel de ayuda que le ofrece al niño, hasta que su colaboración no es necesaria. Cuando involucramos a los niños con experiencias de lecturas, le mostramos libros, le leemos y lo motivamos para que manipule materiales escritos; conforme el niño se va desarrollando ya no necesita que el adulto le busque libros, pues él los busca y no pide que se los lean porque él los narra de acuerdo a lo que ha escuchado y a lo que observa. El niño va desarrollando amor por la lectura y poco a poco aprende a leer imágenes hasta comprender el texto escrito. Vigotsky consideraba que los niños tenían conceptos ricos pero desorganizados, espontáneos y carentes de sistemacidad (Santrock, 2002); es por esto que necesitan de otra persona para que los dirija. Vigotsky decía que le lenguaje, hasta en las formas más tempranas, tiene fundamentos sociales. Este teórico relacionaba todo el desarrollo del niño a relaciones con otras personas (Craig, 2001, Papalia, 2005; Santrock, 2002), ya que somos entes sociales que vivimos en comunidad y el fin de la educación es formar ciudadanos responsables y capaces de vivir en sociedad. En esas interacciones los padres y otras personas transmiten reglas, conocimiento y expectativa de la sociedad (Bruner y Haste en Craig, 2001). Por lo tanto, la comprensión que el niño tiene del mundo forma parte del conocimiento social y cultural. 21 Durante la vida, los niños experimentan los hechos en compañía de adultos, quienes los traducen e interpretan por ellos. Adquirimos conocimientos y experiencias especialmente, gracias al aprendizaje de personas más conocedoras (Craig, 2001). Nos unimos a otros para que nos ayuden a guiar nuestro aprendizaje y participación, permitiéndonos así conocer más nuestro mundo y adquirir habilidades. En fin, Vigotsky creía que el desarrollo mental, lingüístico y social de los niños está apoyado y mejorado por la interacción social con otros niños. Para Vigotsky, la interacción social, fomenta el desarrollo (Craig, 2002, Morrison, 2005 & Papalia, 2005). Pensemos pues, cómo los padres, familiares, vecinos y compañeros pueden ayudar a los niños a dominar ciertas tareas. Vigotsky da énfasis en el juego como medio que facilita el desarrollo social y el lenguaje, por ende, el aprendizaje. El juego social es un medio importante para que alcancen niveles más avanzados de habilidades sociales y cognoscitivas (Nicolopoulou en Craig, 2001).Decimos constantemente que el trabajo del niño es jugar, es pues entonces importante que el adulto le brinde al niño experiencias significativas con el lenguaje escrito usando el juego como medio de enseñanza natural y espontánea. Los teóricos del aprendizaje social ampliaron la teoría de aprendizaje para explicar conductas sociales de gran complejidad. El teórico estadounidense Albert Bandura, señala que en la vida diaria observamos las consecuencias de los actos y las conductas de otras personas para guiar la de sí mismos, llamando su teoría sociocognoscitiva. Los factores cognitivos involucran las expectativas de éxito de los estudiantes; los factores sociales incluyen el hecho de que los alumnos observe el comportamiento de logro de sus pares (Santrock, 2002). La teoría de aprendizaje de Albert Bandura expone que los niños aprenden del contexto social, observando e 22 imitando modelos; la persona es un contribuyente activo del aprendizaje (Papalia, 2005). El aprendizaje por observación y la imitación de lo que vemos en el contexto social influyen de manera decisiva en el aprendizaje y en el desarrollo. De la misma manera en que aprendemos de forma directa de la experiencia personal como individuos activos en el aprendizaje, también aprendemos al observar la conducta ajena y sus efectos (Bandura yWalters en Craig, 2001). Los niños adquieren nuevas habilidades través del aprendizaje por observación y lo demuestran al imitar el modelo. Esto es importante porque lo niños aprenden de lo que observan de sus padres o cuidadores. Realizan las mismas acciones, repiten las palabras escuchadas y dan como correcto lo que ven de las personas que están a su alrededor. Los niños son buenos observadores y emulan lo que ven, es decir, si los padres o adultos a sus alrededor leen diariamente (libros, periódicos, cartas), el niño presentará interés en leer e imitar así al adulto. El comportamiento que los niños imiten depende de lo que perciban como valioso o importante en su cultura (Papalia, 2005). Bandura desarrolló un modelo de determinismo recíproco que consiste en factores básicos: comportamiento, persona (cognitivos) y ambiente (ver apéndice 2). Estos factores interactúan para influir en el aprendizaje: factores ambientales influyen en el comportamiento, el comportamiento afecta el ambiente, los factores de la persona (cognitivos) influyen en el comportamiento, etcétera (Santrock, 2002). Este modelo también explica cómo el ambiente afecta en el aprendizaje y desarrollo de la persona de manera directa. Durante el crecimiento del niño, éste recibe muchos estímulos e influencias del ambiente y de otras personas; todo esto tendrá repercusiones en su desarrollo. El ambiente donde el niño crece, la atmósfera, la calidad de vida y el ejemplo 23 que observa, serán elementos vitales durante el aprendizaje de destrezas y adquisición de experiencias significativas. El aprendizaje por observación (o vicario) también llamado por imitación o modelamiento, es el aprendizaje que ocurre cuando una persona observa e imita el comportamiento de otra (Santrock, 2002). La capacidad de aprender patrones de conductas y acciones por observación, elimina en algunos casos el tanteo, o el aprendizaje de ensayo y error. El aprendizaje por observación conlleva menos tiempo porque simplemente el niño imita lo que observa y lo lleva cabo. Albert Bandura llevó a cabo un estudio llamado: estudio clásico del muñeco bobo en el 1965. En este estudio se exponía a niños a observar un modelo atacando a un muñeco bobo, algunos modelos eran castigados después del acto otros no. Los resultados del estudio fueron: los niños que vieron la película donde el agresor no recibía castigo o se salía con la suya atacaron al muñeco bobo con más agresividad que los niños que habían observado que se recibía un castigo por la acción. Otro punto importante destacado en el estudio de Bandura fue, que sólo porque los alumnos no ejecuten la respuesta, no quiere decir que no la hayan aprendido. En nuestra vida diaria actuamos, olvidando a veces que son muchas las personas que nos observan. Para otras personas, ya sea en nuestro hogar, trabajo, escuela, iglesia, centro social, somos modelos de alguien que nos observa porque nos admira o porque busca un ejemplo a seguir. Los niños son observadores críticos que absorben todo lo que escuchan y lo que ven para luego imitarlo. Aún cuando no vemos que lo imitan ellos ya lo observaron y es parte de ellos y de sus experiencias. Lord Chesterfield (en Santrock, 2002), dice que somos en verdad más de la mitad de lo que somos por imitación. 24 Uno de los exponentes más conocidos en la educación es Jean Piaget y su teoría cognoscitiva. A través de la interacción con el contexto, los niños organizan las experiencias y los sentidos. Por lo tanto, la calidad del contexto y la naturaleza de las experiencias del niño juegan un papel fundamental (Morrison, 2005). Se deberían ofrecer contextos para el aprendizaje activo permitiendo a los niños explorar e interactuar con otras personas y objetos. El proceso de aprender, sea cual sea la destreza involucra procesos mentales. Piaget pensaba que la mente no se limita a responder a los estímulos sino que crece, cambia y se adata al mundo de acuerdo a las experiencias (Craig, 2001). Piaget, utilizó dos términos para explicar la adaptación de construcciones mentales. Asimilación, es el proceso de encajar información nueva en esquemas ya existentes. A través de la asimilación, los niños utilizan viejos métodos o experiencias para entender y darle sentido a la nueva información. Acomodación, es cambiar o alterar los esquemas existentes o crear unos nuevos en respuesta a información nueva. El proceso de asimilación y acomodación constituye la adaptación que pasa el niño al aprender destrezas nuevas diariamente. Equilibrio es la estabilidad que siente el niño entre el proceso de asimilación y acomodación. Si lo datos nuevos que recibe el niño o el aprendizaje de destrezas se da de forma inmediata, se dará el equilibrio. Cuando el niño tarda o es incapaz de asimilar lo nuevo, intenta acomodarlo dentro de los esquemas existentes. O sea, cuando se encuentran con algo conocido, lo asimilan; cuando se encuentran frente a algo desconocido, adecuan su conocimiento para incorporarlo. El interés de Piaget en los esquemas se enfoca en cómo el niño organiza y encuentra sentido a sus experiencias diarias (Santrock, 2002). 25 Piaget resume el desarrollo de los niños en cuatro etapas. La secuencia de crecimiento de las etapas en cada niño no varía; las edades en las que progresa sí. La primera etapa llamada sensorio-motora, desde el nacimiento hasta los 18 a 24 meses de nacido. En esta etapa el niño utiliza los sentidos para aprender del mundo; el niño chupa, agarra y construye esquemas de acuerdo a actividades presentadas. En esta etapa, el niño comienza a comprender que los objetos siguen existiendo aunque su vista no la pueda ver, tocar u oír; llamado a esto permanencia de objetos. La segunda etapa cubre de dos a siete años aproximadamente y se le llama la etapa pre-operacional. En esta etapa el niño depende de representaciones concretas, utiliza el aquí y el ahora como marco de referencia, es egocéntrico (incapacidad para distinguir la perspectiva propia de alguien más), cree que todo tiene un motivo, está ligado a los sentidos y hace juicios basados en la apariencia (Morrison, 2005). La etapa de operaciones concretas es de siete a doce años aproximadamente. En esta etapa el niño es capaz de llevar a cabo cambio de opinión, aún depende de la apariencia de las cosas, estructura el tiempo y espacio, es menos egocéntrico, entiende los números y comienza a pensar en forma lógica. La última etapa que desarrolla Piaget se llama etapa de operaciones formales y cubre de los doce a los quince años. Aquí el niño ya debe ser capaz de manejar problemas verbales e hipotéticos, puede razonar científica y lógicamente, ya no depende de lo concreto y puede pensar con símbolos. De las cuatro etapas de Piaget resaltaremos las primeras dos porque son las que conciernen a niños preescolares y elementales que estarían aprendiendo las destrezas de lectura y escritura. En la etapa sensorio-motora, los niños utilizan los sentidos y reflejos motrices para construir el conocimiento del mundo (Morrison, 2005). Por lo tanto es en 26 esta etapa que se les debe brindar a los niños material escrito para que manipule, es por esta razón que existen los libros de “foam” y goma. No porque los niños sean pequeños se les debe privar de la oportunidad de manipular libros o de escuchar historias. El niño depende de representaciones concretas en vez de símbolos por lo tanto el niño va aprendiendo lo que es la lectura y escritura, observando letras y materiales escritos. En la etapa pre-operacional el desarrollo de lenguaje empieza a desarrollarse rápidamente; entiéndase lenguaje cuando el niño lee, escribe, escucha y/o habla (Craig, 2001). En esta etapa los niños tienen una creciente habilidad para interiorizar símbolos representativos como las palabras (Morrison, 2005). En estas edades los niños ya le ven sentido a las letras que observan en escritos, saben que las letras se pueden leer y que lo que hablan se puede escribir. Los niños pequeños comienzan a hacer garabatos para representar personas, carros, cosas y muchos otros aspectos del mundo. Cuando conocemos, sabemos lo que se debe hacer, el conocer las etapas por la cuales pasan los niños y conocer cómo se van desarrollando nos da un marco de referencia y sienta las bases para que lo adultos sepamos cómo guiar a los niños en su aprendizaje. Erik Erickson, creó su teoría del desarrollo psico-social basándose en la premisa de que los desarrollos cognitivo y social ocurren mano a mano y no pueden ser separados. De acuerdo con Erickson, las personalidades de los niños y las habilidades sociales crecen y se desarrollan en el contexto de la sociedad y como respuesta a las demandas, expectativas, valores e institutos sociales (como la familia, escuela y programa de cuidados infantiles) en la sociedad (Morrison, 2005). Los adultos (en especial padres y maestros), son partes claves de estos contextos por lo tanto juegan un papel importante a la hora de ayudar o limitar el aprendizaje de los niños. Como complemento del análisis 27 de Bronfenbrenner de los contextos sociales en los que los niños se desarrolla y la gente que es importante en sus vidas, Erik Erickson presenta ciclos de vida de las personas en etapas. Erickson divide su teoría en ocho etapas, cada etapa consiste en una tarea de desarrollo que confronta al individuo con una crisis. Cada crisis no es catastrófica sino un viraje decisivo entre a actual vulnerabilidad y su potencial. A continuación se mencionan las ocho etapas que las personas tienen que pasar según Erickson para formar y fortalecer su personalidad y desarrollo: en la infancia (primer año), confianza versus desconfianza; infancia (segundo año), autonomía versus vergüenza y duda; infancia temprana (tres a cinco años), iniciativa versus culpa; niñez media y tardía (seis años hasta la pubertad), productividad versus inferioridad; adolescencia (diez a veinte años), identidad versus confusión de rol; adultez temprana (veinte a treinta años), intimidad versus aislamiento; adultez media (cuarenta a cincuenta años) productividad versus estancamiento; adultez tardía (sesenta años en adelante), integridad versus desesperanza. Se explicarán las primera tres por ser las concernientes a este estudio. La primera etapa, confianza versus desconfianza, los niños aprenden a confiar o desconfiar de sus contextos y profesionales. Se desarrolla la confianza cuando las necesidades de los niños se satisfacen constantes, predecible y amablemente. Para este tiempo los adultos deben satisfacer las necesidades de los niños para que creen confianza en éstos. La segunda etapa, autonomía contra vergüenza y duda es la etapa de independencia. Es cuando los niños quieren hacer cosas por sí mismos; la falta de oportunidades para hacerse autónomos e independientes, la sobre protección dan como resultado una baja seguridad en uno mismo y bajo rendimiento. Para este tiempo se debe animar a los niños a realizar lo que son capacees de hacer y evitar el que sean 28 avergonzados de alguna manera. Aquí los adultos pueden ayudarlos a extender su potencial brindándole el andamiaje necesario para realizar lo que todavía independientemente no pueden. La tercera etapa es iniciativa versus culpa, los niños necesitan oportunidades para responder con iniciativa a actividades y tareas, lo cual les da un sentido de la finalidad y la realización. Erickson piensa que los niños se pueden sentir culpables si se les desalienta o se les restringe su capacidad de maniobrar al comienzo de una actividad poniéndole demasiados límites. Como adultos o educadores sabemos que el aprender a leer y a escribir es un reto, por lo tanto el adulto debe brindar actividades pertinentes y mantener un ambiente adecuado para que este aprendizaje se dé, sin frustrar o limitar a los niños. Una crisis que no se supere adecuadamente puede marcar al niño al punto de que sus efectos tengan secuela por el resto de sus vidas. En la educación existen distintas escuelas filosóficas. Cada una de ellas tiene una visión de la educación, un método de enseñar, un modo en que los niños aprenden mejor y cómo deben ser los maestros o educadores. Para motivos de esta investigación se resaltarán los puntos importantes de algunas de ellas. La filosofía es importante en la educación porque motiva a reflexionar sobre las situaciones educativas y los procesos que enriquecen la vida. El realismo percibe la enseñanza a través de los sentidos, personas que nos rodean y las experiencias diarias. Se debe educar al niño a partir de sus intereses y de lo que conoce. La educación debe manipular el ambiente para que el niño esté presto a aprender. Aquí los adultos somos facilitadores de las experiencias, debemos cultivar el amor por aprender y brindar orden al mundo del niño. El pragmatismo alimenta la idea del niño como centro de aprendizaje, donde se le debe enseñar al niño lo necesario para vivir en sociedad y colaborar en ésta. Se le debe proveer al niño oportunidades de 29 enriquecer su conocimiento a través de las experiencias y cultivar la capacidad de participar socialmente. Basado en el pragmatismo surge el progresivismo, que busca promover una vida social y democrática donde el conocimiento conduce al crecimiento y desarrollo. El progresivismo ve el aprendizaje como uno contínuo, activo y relevante. La función del adulto es ser guía para ayudar a resolver problemas y brindar la experimentación necesaria para el aprendizaje; dando especial énfasis en los vínculos entre hogar y escuela. El proceso educativo es uno social que debe preparar al individuo ara la vida. La educación es un proceso integral, permanente y contínuo Por lo tanto, la educación debe ser considerada parte de la sociedad, de la cultura y de los diversos modos de vida. Todos debemos poner un granito de arena en pos de la educación de los niños que crecen a nuestro alrededor. Es responsabilidad de toda la sociedad trabajar por el beneficio de los niños y su educación. Desarrollo de la lectura Actualmente, en el siglo veinte y uno, la alfabetización (habilidad para leer y escribir) juegan un papel importante. Al pasar de los años se han desarrollado trabajos y una vida competitiva donde las habilidades de lectura, escritura y comunicación son vitales. Los adultos asumen la gran responsabilidad de ayudar a los niños a desarrollar estas destrezas. Los niños están expuestos a las palabras desde antes de su nacimiento. Sin embargo, para aprender a leer y escribir tiene que ocurrir un desarrollo cognoscitivo para que la mente esté preparada luego de haber recibido muchos estímulos positivos. Ylisto (1967 en Ruiz, 2001), comprobó que los niños comienzan el proceso de leer 30 naturalmente en un ambiente impreso, al comprender que las palabras escritas sustituyen símbolos auditivos que se usan para identificar objetos, acciones y situaciones. Goodman (1980, en Ruiz, 2001), explica que, los niños desarrollan una conciencia de las palabras escritas en su entorno social. El niño comienza a leer cuando transforma los símbolos escritos en mensajes significativos. El niño comienza a comprender que el lenguaje tiene la función de comunicar; este conocimiento se obtiene al manipular libros y escuchar el lenguaje escrito que se lee oralmente (Ruiz, 2001). Varias investigaciones (Clay, 1972; K. Goodman, 1969; Mattingly, 1972, en Ruiz, 2001) sobre el desarrollo de la alfabetización sugieren que la habilidad de leer emerge desde edad temprana y se desarrolla naturalmente a través de niveles conceptuales. El nivel I (2 a 4 años aproximadamente), se llama concientización del lenguaje impreso en el entorno social. El niño se percata de que el lenguaje escrito en el medio ambiente comunica mensajes. Comienza la lectura de palabras en contextos (rótulos, etiquetas, nombres de establecimientos y otros). Nivel II (3 a 5 años aproximadamente), se llama concientización del lenguaje escrito en libros. El niño observa que el lenguaje escrito en los libros suena diferente al lenguaje oral. El niño observa que el cuento tiene un principio, desarrollo y final. Desarrolla relaciones espaciales en los libros (arriba, abajo, izquierda, derecha, al frente, atrás) al igual que otras habilidades para manejarlos correctamente. Imita el comportamiento adulto al leer, pasando las páginas correctamente. Nivel III (3 a 6 años), se llama inicio de la lectura de libros. El niño lee el cuento usando láminas como clave. Lee el cuento parafraseándolo. El niño se percata de que las palabras escritas en el libro y no láminas “dicen” el cuento. Señala el texto del libro al leer, pasando el dedo de izquierda a derecha, imitando el comportamiento del 31 adulto al leerle oralmente. Parafrasea integrando palabras y frases del texto. Memoriza el cuento y lo lee palabra por palabra. Parea algunas palabras del texto con lo que dice al leer el cuento. Abstrae las normas del lenguaje escrito al utilizar claves semánticas, sintácticas y fonéticas para confirmar predicciones. Lee eficazmente al integrar su conocimiento sobre el lenguaje oral con el lenguaje escrito. Según el punto de vista de Chall (1979 en Santrock, 2002), las destrezas de lectura se desarrollan en cinco etapas. Los límites de edad son aproximados, no obstante las etapas brindan un sentido general a los cambios ocurridos durante este proceso. Etapa 0; desde el nacimiento hasta el primer grado. Los niños van tomando sentido de que se lee de izquierda a derecha, de arriba hacia abajo, cómo identificar las letras del abecedario y cómo escribir sus nombres. Por programas educativos de televisión como “Plaza Sésamo” y por experiencias con adultos y otros pares, los niños pueden aprender a leer antes que generaciones pasadas, por estar expuestos a ambientes letrados y enriquecidos con ambiente escrito. Etapa 1; durante el primero y segundo grado. Los niños aprender a leer fluido y adquieren la habilidad de poner sonidos a las palabras. Etapa 2; segundo y tercer grado. Los niños tienen un lenguaje más fluido y avanzan su destreza de lectura. Durante esta etapa en la escuela, la demanda de leer es casi un acto mecánico que no brinda espacio para procesar el contenido. Etapa 3; cuarto a sexto grado. Los niños incrementan su capacidad para obtener nueva información del material impreso, leen para aprender. Los niños que todavía no han aprendido a leer bien, tienen dificultades académicas que les brindan frustraciones y pueden causarle fracaso académico. Etapa 4; escuela intermedia. Muchos estudiantes se convierten en lectores competentes. Desarrollan la habilidad para entender la información encontrada en 32 diferentes perspectivas, pueden participar de discusiones más profundas de literatura (ver apéndice 3). La primera etapa es la que compete con motivo de esta investigación. Los niños deben recibir refuerzos positivos, experiencias significativas con material escrito para estar predispuestos a aprender la destreza de leer. Para decir que un niño aprendió a leer, no basta con que pueda identificar símbolos y dibujos sino es capaz de entender su significado (Santrock, 2002). Esto no significa que el que los niños reconozcan señales, dibujos y símbolos no vayan en buen camino de desarrollo de lectura. El leer fluido no lo es todo, el identificar letras y reconocer conceptos de lectura también es parte del aprendizaje. Tenemos que modelar la lectura diariamente para que el niño se vaya familiarizando y desarrolle las destrezas de lectura poco a poco, a su ritmo. Enfoques sobre cómo se debe enseñar a leer Hay varios enfoques sobre cómo se debe enseñar a leer. El enfoque de método global refuerza la idea de que la instrucción de la lectura debe ser paralela al aprendizaje natural del lenguaje del niño. Los materiales de lectura deben ser complejos y significativos. Esto es que a los niños se les debe presentar el lenguaje completo como lecturas y poemas no fragmentos. En este enfoque se parte de lo general a lo particular para que el niño vea la lectura como un todo. En el enfoque global las destrezas de lecturas están ligadas a otras destrezas y materias. La lectura debe estar conectada a las habilidades de escuchar y escribir. La lectura debe enfocarse en el mundo real y materiales relevantes. Así se puede leer y discutir temas importantes y no leer por leer. Es por esta razón que la mayoría de los centros preescolares tienen todos los artículos y las partes del salón identificados para enseñar el nombre completo de las cosas y no por sonidos y sílabas. En contraste, el enfoque de destrezas básicas y fonéticas (sonidos) 33 enfatiza que la instrucción de la lectura debe enseñar fonética y las reglas básicas para traducir símbolos escritos en sonidos. La instrucción temprana de la lectura debe incluir materiales simples. Sólo después de que los niños hayan aprendido las reglas fonológicas, tendrán acceso a materiales de lectura complejos como libros y poemas. A veces se utiliza el término de instrucción balanceada para referirse a las combinaciones de enfoques sobre el aprendizaje de la lectura; la realidad es que aunque se utilicen los dos enfoques siempre se le dará más énfasis a uno. Es importante recalcar que el método global da un aprendizaje para ver la lectura como una destreza para la vida que se combina en cada actividad sin importar la materia. Pero también es importante que los niños conozcan sonidos y las reglas del uso correcto de las palabras para luego dominar el lenguaje escrito. Otro enfoque sobre el aprendizaje de la lectura y escritura es la alfabetización emergente (ver apéndice 4). Este enfoque plantea que la lectura y la escritura incluyen habilidades cognitivas sociales que los niños usan en los procesos de desarrollo y alfabetización, ganando este significado de la lectura, escritura, diálogo y audición (Morrison, 2005). El aprendizaje se da de forma natural y espontánea, pues los niños aprender a leer y escribir antes de llegar a la escuela. La alfabetización es un proceso social que se desarrolla en un contexto en el que los niños se relacionan con otros y le encuentran significado a la lectura y escritura. La lectura emergente incluye actividades y conductas relacionadas con el proceso de leer, antes de hacerlo con fluidez y de forma convencional. A pesar de los años, todavía continua la controversia de cómo se debe enseñar la lectura. Se pueden mencionar algunas características de los que los niños necesitan saber para saber leer bien que distintos métodos apoyan; el conocer el nombre 34 de las letras, la velocidad con la que los niños puedan poner nombres a las letras individuales y la conciencia sobre las letras y los sonidos. El enfoque completo u holístico, es una filosofía de aprendizaje más que un método (Morrison, 2005). Este enfoque fomenta el uso de todos los aspectos del lenguaje: lectura, escritura, diálogo y audición como la base para el desarrollo de la alfabetización. El enfoque holístico está centrado en las interacciones del niño con otras personas, por lo tanto las experiencias y los intereses de los niños son el contexto para la temática y la base para su motivación en la lectura y escritura; de esta manera la alfabetización hace significativo y es funcional para los niños. Partiendo de este enfoque la interacción es importante pues proporcionan un mayor desarrollo de aprendizaje y un conocimiento construido socialmente. Es más importante estar inmersos en materiales de lectura y escritura que estar intentando aprender cómo se debe leer y cómo se debe escribir. Se aprenden estos procesos mientras se practican. Se enseñan las destrezas de leer, escribir, hablar y escuchar como procesos unidos y dependientes, no fragmentados. Los documentos escritos de los niños (así sean dibujos) se utilizan como material valioso de lecturas. Un enfoque equilibrado es probablemente el mejor, con esta razón los educadores de la primera infancia animan a los enfoques de la alfabetización a que se proporcione un equilibrio entre todos los métodos de enseñanza, para poder satisfacer las necesidades individuales y específicas de los niños. 35 Desarrollo de la escritura Los niños quieren dar sentido a lo que leen y escriben. La parte del significado de la lectura y escritura ocurre cuando los niños hablan con los demás, escriben cartas, leen buenos libros, hacen listas y utilizan el lenguaje escrito para lograr sus objetivos. Hay investigaciones (Clay, 1979; Harste, Burke & Woodward, 1981; Ferreiro y Teberosky, 1982 en Molina, 2001) que evidencian la capacidad de los niños preescolares para construir conceptos generales del lenguaje escrito sin que sea necesaria la instrucción formal. Se da este aprendizaje con oportunidades para interactuar con el lenguaje escrito y acceso a conversaciones con adultos interesados en enseñarle cómo funciona el lenguaje. Los preescolares están familiarizados con el lenguaje impreso en el entorno social (Ruiz, 2001). Los letreros con palabras, etiquetas conocidas para ellos, constituyen su primera lista de palabras que reconocen a primera vista y que activan el aprendizaje de la lectura y la escritura. Los niños exploran con el lenguaje cuando le es funcional, y les motiva su desarrollo. Hiebert (1981, en Ruiz, 2001) diseñó un estudio para observar el desarrollo del conocimiento sobre el lenguaje impreso antes de la instrucción formal. Hiebert concluyó que todas las destrezas y conceptos relacionados al lenguaje escrito aumentaban significativamente en los años preescolares en experiencias en sus hogares y entorno social. Los resultados obtenidos de este estudio demuestran que el lenguaje se aprende mediante el encuentro natural y espontáneo del niño con el lenguaje escrito usando el lenguaje. La enseñanza tradicional considera la escritura como un proceso secundario que se adquiere como resultado del aprendizaje de la lectura porque depende de la habilidad de reconocer letras y palabras. Sin embargo, un estudio que realiza Ruiz (1995 en Ruiz 36 2001), refleja que los niños de edad preescolar demuestran conceptualizar la escritura como un proceso más sencillo al compararlo con la lectura. Según el estudio, al pedirles a niños preescolares que leyeran, la mayoría dijo que no sabían o no podían. Al pedirle que escribieran los niños mostraron tener un autoconcepto positivo de tal destreza. Tomaron lápiz y papel y comenzaron a realizar trazos según su nivel desarrollo. El proceso del desarrollo de la escritura temprana ha sido estudiado por diversos investigadores, como por ejemplo Bissex, 1980; Clay, 1972; Ferreiro y Teberosky, 1979; Milz, 1980; Schickedanz, 1990; Wells, 1981 (en Ruiz, 2001). Este proceso ha sido de gran controversia durante años por responder a variables diversas, particularmente al entorno social. No obstante los investigadores coinciden en varias etapas para el desarrollo de la escritura (ver apéndice 4). La primera etapa comienza con el garabato, que representa el primer intento del escritor para comunicarse mediante la escritura. Estos garabatos expresan significado, pero ese significado puede ser comprendido solamente por el niño. El garabato organizado toma rasgos verticales, circulares y ensortijados, de representaciones gráficas horizontales onduladas o en “zig-zag” (Molina, 1992 en Ruiz, 2001). Este garabateo se asemeja a la escritura cursiva del adulto que es la imitación del niño de lo que observa. Luego del garabateo, comienza la escritura telegráfica la cual describe la modalidad de escritura inmadura; ya que el niño comunica mensajes mediante una o varias letras o numerales esporádicos que escribe al azar en sus garabatos y dibujo. En esta etapa el niño dibuja cuando se le pide que escriba y explica sus letras como oraciones o frases con sentido completo. . Gradualmente, se observan letras e hileras horizontales, siguiendo el patrón direccional de la escritura en su contexto cultural. El pareo de letras 37 con sonidos es casi inexistente; no existe una intención al escribir sino que el niño intenta escribir letras y decir un cuento. El contenido se deja a la memoria. En la escritura prealfabética temprana hay un nivel inmaduro de la conceptualización incipiente de la escritura. El niño percibe diferencias entre las palabras que “inventa” y los rasgos, cantidad y orden de las letras en las palabras que observa en su medio ambiente. En ocasiones, el niño solicita que se le lea lo que escribió y al percibir que otra persona no lo comprende se crea un conflicto. Al igual que cuando se le pide que lea lo que escribió contesta “no sé leer”. Esto que aparenta ser un atraso, es realmente un progreso de que el niño ha comenzado ha percatarse de que existen unas reglas particulares para comunicarse mediante el lenguaje escrito. El aprendizaje requiere que el niño construya, revise y reconstruya las normas del lenguaje mediante un proceso de prueba y error. Al niño intentar y aprender haciendo, inventa, prueba y comprueba sus conocimientos sobre el lenguaje impreso (Forester, 1980 en Ruiz, 2001). En esta etapa el niño hace muchas preguntas y es importante que el adulto responda porque esto muestra progreso. Al niño manipular y contestar sus interrogantes se enriquece su práctica y refina sus conocimientos sobre letras y sobre la escritura. Las primeras representaciones gráficas de los niños (garabatos, escritura telegráfica y prealfabética temprana) demuestran la presencia de esquemas conceptuales incipientes sobre el lenguaje escrito. El niño representa estos esquemas al “inventase” la escritura convencional. Por eso se le llama estos procesos escritura inventada. Cuando el niño comprende la correspondencia entre letras y sonidos responde a las reglas ortográficas para comunicarse mediante el lenguaje escrito. El niño comienza a utilizar las letras de forma intencional y selectiva. Comienza el niño a explorar las letras mediante el deletreo 38 inventado que significa que el niño omite letras al escribir palabas. El niño escribe sin dejar espacio entre palabras. Es importante en esta etapa que el adulto le pida al niño que lea lo que escribe para que vaya tomado conciencia y comparando sus escritos. La escritura prealfabética es la etapa del niño donde éste se guía por los sonidos que escucha al pronunciar antes de demostrar correspondencia alfabética entre letras y sonidos. En ocasiones el niño experimenta desequilibrio entre lo que sabe y lo que observa en el ambiente. Es importante la influencia del medio ambiente para activar ese estado de desequilibrio o conflicto para acomodar nuevos esquemas y hacer posible la transición hacia las representaciones escritas más sofisticadas (Ruiz, 2001). Es entonces cuando aparecen más letras, selectivamente organizadas, en las palabras escritas. Este es el proceso para guiar al niño a la escritura alfabética. La escritura alfabética es cuando el niño demuestra conocer el principio de correspondencia entre grafemas (letras) y fonemas (sonidos) al incluir todas las letras necesarias en las palaras que escribe. Aun cuando el niño no separe las palabras es más sencillo entender lo que escribe. Durante esta etapa el niño no muestra dominio de particularidades de la escritura convencional como: uso de los signos de puntuación, espacios, letras mayúsculas y minúsculas por ejemplo. Todo este desarrollo se va dando gradualmente y no existen líneas divisorias entre cada cual. Lo importante es apoyar al niño en su escritura y ser buenos modelos de escritores diariamente. Mostrar los usos prácticos de la escritura es vital durante todo el desarrollo. Este desarrollo no ocurre en etapas organizadas, sino que evoluciona mediante la construcción de esquemas conceptuales en torno la función y naturaleza del lenguaje escrito (Ruiz, 2001). 39 Para que se desarrolle la habilidad de leer y escribir, el niño debe estar inmerso en lenguaje escrito desde su entorno social, así como el bebé lo está en un ambiente natural de lenguaje oral para aprender a hablar. De acuerdo a las investigaciones de Doake y Holdaway (ambas en 1979; en Ruiz, 2001) se demostró que el ambiente ejerce una influencia muy importante en el desarrollo de la escritura. Uno de los factores esenciales es la presencia de material impreso en el ambiente del hogar. En adicción a interpretación de material impreso por parte de los padres y lectura oral por parte de los adultos; esto si los adultos o un par más capacitado amplían el tema del libro, conversan sobre el contenido, trasmiten ideas y responden a preguntas. Estos estudios también mostraron que los padres eran lectores que mediante su comportamiento reflejaban el valor y la función de la lectura. Birnbaum (1980, en Ruiz, 2001) encontró características importantes en escritores eficaces. Cuando hay personas que demuestran con su comportamiento el valor de escribir, modelan un buen ejemplo a los niños. Cuando lo niños son escuchados prestan importancia a sus trabajos porque los adultos los hacen ver como valiosos. El lenguaje surge de una necesidad de comunicarse y se desarrolla a medida que el niño intercambia experiencias lingüísticas con las personas que le rodean, si estas personas responden a su curiosidad natural por el lenguaje. 40 Familia y comunidad trabajando juntos La interacción social, especialmente en la casa, es un factor clave para preparar a los niños para el aprendizaje de la lectura y escritura. Mucho se dice sobre la influencia del hogar en el aprendizaje de los niños. Existen investigaciones (Ruiz, 2001, McKenna, 1994, en Papalia, 2005) que demuestran que los padres juegan un papel importante porque son los primeros en brindarle experiencias y ser ejemplo para los niños. El ambiente del hogar es un agente generador significativo del desarrollo del lenguaje. Los elementos que caracterizan ambientes adecuados son: interacción verbal y frecuente con el niño, el uso funcional del material impreso, el uso extenso de materiales para escribir, la lectura del material impreso, la presencia de lectores y la audiencia que responda a las curiosidades del niño sobre el lenguaje escrito y su esfuerzo para interpretarlo (Ruiz, 2001; Morrison, 2005 y Papalia, 2005). Los niños aprenden activamente cuando exploran, preguntan, formulan y comprueban hipótesis como intento de comunicarse. En culturas alfabetizadas como la nuestra, los niños aprenden a leer y escribir de manera natural, sin escolaridad formal (Molina, 1998 en Ruiz, 2001). El niño se va apropiando de la lectura y escritura conforme se le brindan experiencias enriquecedoras que promueven el aprendizaje de las mismas tanto en el hogar como en la escuela. Los niños aprenden mediante situaciones sociales cotidianas y de juego que tienen sentido para él (Ruiz, 2001). Es por esto, que las actividades donde se intente el desarrollo de la lectura y escritura deben ser pertinentes a los niños para que cobren sentido y de este modo sean de interés en el niño. Sin embargo, cuando se habla de que el niño se desarrolla en una sociedad letrada, quiere decir que todo su entorno o contexto cultural influye en el desarrollo de la lectura y 41 escritura. Tenemos que preguntarnos, qué estamos haciendo cultural y socialmente para que esto sea así. Para que el aprendizaje de la lectura y escritura sea un proceso natural que el niño desarrolle día a día en actividades cotidianas. Cuando los niños entran a la escuela poseen ya algunos conocimientos sobre la lengua escrita pues ésta se desarrolla mientras el niño se desenvuelve en actividades sociales. Los niños van conociendo la lengua escrita a través de empaques de comida, anuncios escritos, letreros, periódicos, revistas, libros, entre otros. Es así como el aprendizaje de la lectura y escritura interviene en gran medida el contexto sociocultural y la función social que tiene la lengua escrita para comunicar significados ya que por medio de ésta se transmite lo que la persona piensa, cree, conoce y siente (Chaves, 2001). Gracias a investigaciones (Chomsky, 1971; Clay, 1975 y Cohn, 1981; citados en Ruiz 2001) en las últimas décadas se ha dado énfasis a cómo los niños se apropian de la lectura y escritura de manera natural. Entiéndase aprendices naturales son aquellos niños que aprenden a leer en sus hogares sin instrucción formal. El lenguaje emerge de una necesidad de comunicarse ya que el ambiente sociocultural ejerce gran influencia en esta habilidad (Ruiz, 2001). Ambientes letrados con interacción verbal con adultos, materiales escritos, recursos para leer son importantes para fomentar la lectura y escritura. Se necesitan espacios donde la lectura sea una actividad cotidiana y practicada con regularidad por medio de los miembros de la familia y un lugar donde los adultos muestren interés por el valor del lenguaje para este ambiente alfabetizado. Los adultos deben responder a la curiosidad del niño y promover el desarrollo de la lectura y escritura como aprendizaje natural. 42 Teorías como la sociocultural de Vigotsky (Craig, 2001), y cognitiva de Piaget (Craig, 2001) han realizado aportes a estas investigaciones. Halliday (1986, en Chaves 2001) menciona seis categorías de funciones lingüísticas que se desarrollan en el contexto social. Estas son: instrumental, es el lenguaje que se utiliza para satisfacer las necesidades; regulatoria, el que se usa para controlar la conducta de otros; interaccional, lenguaje para mantener y establecer relaciones sociales; personal, el que permite expresar opiniones; imaginativa, el que permite expresar lo que imaginamos y creamos; lenguaje heurístico, permite crear información y respuestas acerca de diferentes cosas que se desean conocer y el lenguaje informativo, que es el que permite comunicar la información. Estas seis categorías dejan claro que el lenguaje es un elemento social, necesario para el diario vivir y esencial para cada ser humano. Es por esto que la interacción de los adultos con los niños es vital para que promuevan en ellos la capacidad para comunicarse, lo que permitirá a su vez la socialización de sus actos y la integración cultural. Todos esos aportes teóricos e investigativos coinciden en que el conocimiento del lenguaje se construye mediante la participación activa de la persona en el contexto natural y cotidiano. La investigadora se pregunta ¿por qué entonces los adultos nos empeñamos en hacer de la lectura un acto difícil y meramente escolar? ¿Por qué no fomentamos en los hogares la introducción a estos procesos y el ejemplo de utilizar la lectura y escritura en todo momento para distintas actividades diarias? Es necesario entonces preguntarnos como adultos: ¿leemos y escribimos diariamente? , ¿Por qué y para qué leemos y escribimos? Como educadores e investigadores es necesario preguntar: ¿Lee la familia del niño? ¿Qué participación tiene la familia en el proceso de 43 lectura y escritura del niño? ¿Cuántas oportunidades le ofrecemos los niños para que hablen, lean, escriban y conversen con otros? ¿Promovemos el uso del lenguaje en las actividades cotidianas? Las repuestas a estas preguntas nos permitirán analizar el rol de la sociedad y los adultos en el desarrollo y refuerzos de los procesos de leer y escribir. Se podría analizar el ejemplo que los adultos le están brindando a los niños diariamente. Debemos pensar si somos los adultos los mejores modelos para que los niños lean y escriban como actividad natural. Todos sabemos que el proceso de aprender a leer y escribir, es uno importante para cada niño. Muchos padres muestran preocupación si creen que este proceso no se está dando de manera adecuada o en el tiempo “requerido”. No obstante, sabemos que la comunicación entre docentes y familias no siempre es el más adecuado. Se conoce que el efecto de las experiencias que tenga el niño en su edad temprana, repercutirán por el resto de sus vidas. Los primeros contactos que tiene el niño son su familia y las interacciones en el hogar. Es por esto, que se considera importante el investigar cómo son los contextos familiares y sociales en los cuales se involucra el niño antes de llegar a la escuela. Lo que el niño observa de sus padres o encargados esto hará. Los sistemas (escuela, iglesia, vecindario, familia) con los cuales el niño se involucre en edad temprana influirán en su crecimiento y desarrollo (Bronfenbrenner en Craig, 2001). Pero de todos los sistemas de socialización la familia es el que ejerce la mayor influencia, la más importante y la que perdura por toda la vida del individuo. Los factores sociales que influencian al niño aparecen por medio de los padres desde el momento de su nacimiento. Moreno (2001) menciona que la relación que se establezca entre padres e hijos va a 44 condicionar sus reacciones y aprendizajes. Lo que el niño aprende, lo que da por cierto, lo que hace, todo dependerá de esas experiencias con sus familiares y relaciones con los sistemas de socialización. Creemos que el crecimiento, las acciones y actitudes en los niños son espontáneos, sin embargo, todo lo que rodea al niño influenciará en su vida haciéndolo parte de sus hábitos. Inconscientemente la familia procura que se mantengan comportamientos y hábitos en el niño por ser los utilizados en dicha institución. Como los niños actúan por modelaje, imitan lo que realizan sus padres y actúan como estos brindan el ejemplo, sin perder de perspectiva que no siempre este ejemplo es el mejor a emular. Debemos reconocer que lo que se le muestra al niño como bueno, lo aprenderá como bueno y lo que el niño observe de sus padres lo verá como bueno y ejemplo a seguir. De igual manera, si el adulto enseña mostrando deleite por lo que enseña, el niño lo aprenderá con deleite también. Factores sociales que influyen en el desarrollo de la lectura y escritura Se pueden mencionar aparentes factores sociales que influencian en el desarrollo de la lectura y escritura en los niños, como por ejemplo: nivel de escolarización de los padres, mientras más académicamente preparados se sientan, más promueven el aprendizaje en sus hijos. Un ambiente emocional estable y vasto en escritura y lectura brinda un ejemplo excelente a los hijos. Moreno (2001), afirma que el medio social debe estimular el aprendizaje. Es entonces, que debemos investigar cómo la familia está promoviendo el que el ambiente sea uno adecuado para que sus hijos aprendan a leer y a escribir como procesos naturales, de disfrute y necesarios para la vida. La familia es entonces quien ejerce una mayor influencia en los hijos mediante a la motivación que estos expresen en cuanto a la acción de leer y escribir respectivamente. Los padres deben 45 reconocer que sus hijos son influenciados directamente por los lugares que visitan, las personas con quienes comparten, su modo de expresarse, etc. Los padres y el contexto social son la base para el aprendizaje de los niños (Moreno, 2001). Se debe enfatizar en que si el apoyo de los padres para desarrollar la lectura y escritura es adecuado, se pueden evitar posteriormente problemas específicos de aprendizaje y resistencia por aprender y desarrolla estos dos procesos. Otro de los factores sociales que influye en el desarrollo de los niños es la calidad y el tiempo que pasa con sus padres. Las actividades que realicen juntos y la atmósfera de confianza y respeto. Es importante añadir que la motivación y el placer que demuestren los padres por el acto de leer y escribir serán de vital importancia. Sin embargo, debemos tomar en consideración que no podemos culpar a factores que nos rodean como los únicos causantes de que los niños no deseen leer ni escribir. Los niños están de 3 a 5 años rodeados de personas que impactan su vida y son ellos también responsables de lo que los niños ven y hacen. La lectura y escritura no debe estar alejadas de la vida, son los padres el puente en este proceso para llegar a la escuela con unos conocimientos básicos y con el interés necesario para aprender. Moreno (2001) presenta es su artículo una investigación denominada etnografía descriptiva. Las familias participantes son de barriadas modernas. Los habitantes de dicha barriada son jóvenes de 3 a 4 hijos por familia. En general los hijos no se encuentran motivados por el ambiente, desinterés hacia el estudio y tensiones familiares. La muestra son grupos homogéneos de edad para un total de 212 niños de Málaga. Las técnicas empleadas fueron las entrevistas y observación. Y el trabajo fue realizado en contacto con los alumnos. La información se analizó descriptivamente y se utilizaron frecuencias para plasmar los resultados. 46 Los resultados del estudio de Moreno (2001) fueron: las familias compuestas de matrimonios jóvenes tenían poco tiempo hasta para compartir con sus hijos. La mayoría de las madres eran amas de casa y los padres eran obreros. El nivel socioeconómico era bajo y su vivienda era de poco espacio. Las familias tenían de 10 a 30 libros y decían carecer de información para comprar los libros adecuados o no saber comprarlos. La mayoría de los padres dijeron utilizar los libros para cuando era estrictamente necesario. Como leer no era cotidiano, tampoco existía un lugar cómodo para la lectura ni un espacio determinado. Reconocen la importancia de la lectura y escritura para la vida, pero su conocimiento es limitado, basándose en sus experiencias escolares. Los padres dijeron no tener mucha comunicación con los maestros, por lo tanto no sabían qué debían reforzar en casa y no fomentaban los hábitos de lectura y escritura en el hogar. En general, los padres creen que sus hijos no tienen interés en la lectura y escritura y no han hecho nada al respecto (no leen a sus hijos, ni le dan ejemplo de lecturas diarias). Los hallazgos y recomendaciones del estudio de Moreno que brinda la investigación son: que los padres no están aportando al aprendizaje de sus hijos, están faltos de conocimiento pero no han buscado las herramientas para ayudarlos. Se debe desarrollar actividades de animación para padres e hijos. Fomentar el placer de leer no meramente académico y crear hábitos positivos de lecturas y escrituras. Se deben diseñar programas de intervención y apoyo a las familias; y crear conciencia de la importancia de sus hábitos que son de influencia a sus hijos. 47 Estudios en Puerto Rico Desde el año 2007, Puerto Rico está luchando por mejorar en las Pruebas de Aprovechamiento Académico, donde en los últimos años los niños han mostrado unas limitaciones preocupantes en el área de español y matemáticas (Roldán, 2007). En el área de español, específicamente en la lectura que aparentan no entender. Es entonces que el Departamento de Educación influenciado por la ley federal “Que ningún niño se quede rezagado” (ley 107-110 / año 2001) ha estado buscando alternativas para mejorar los resultados de las pruebas y sacar las escuelas del plan de mejoramiento. En esta iniciativa todos los docentes, administración y padres deben cooperar para lograr en fin la mejoría significativa en el aprendizaje de los niños. Colón (2006), realizó un estudio para explorar e identificar factores que interfieren para que los padres se involucren de manera activa y positiva en el proceso de enseñanza y aprendizaje. Colón encuestó a 119 padres de estudiantes de kindergarten, primer y segundo grado de una escuela en Guayabo. Los hallazgos de dicha investigación fueron que la mayoría de las familias vivían en áreas urbanas con servicios que benefician a la educación y con bajo nivel de pobreza, pero aún así los niños mostaron rezagos en la destreza de español con énfasis en la lectura. La mayoría de los padres eran adultos maduros, la investigadora piensa que este factor puede determinar la inseguridad que muestran los padres para ser de ayuda competente a sus hijos, a pesar de que todos los padres cumplieron con un grado de escolaridad necesario para ser de guías en el aprendizaje de sus hijos. Todos los padres leían y escribían y comentaron ayudar a sus hijos en las tareas. La mayoría de los padres mencionaron que necesitaban que se le ofrecieran sugerencias para apoyar efectivamente a sus hijos en el proceso de enseñanza 48 y aprendizaje. Colón concluye exponiendo que la encuesta revela que los padres no están consientes de cuál debe ser su rol en el proceso de enseñanza y aprendizaje de sus hijos y que no entienden la importancia de ser partícipes activos durante este proceso. Los padres no estaban familiarizados en cómo ser facilitadores a sus hijos. Los adultos no tenían experiencias ni recursos eficaces para ayudar a los niños en sus tareas. Colón brinda en su investigación (2006) varias recomendaciones que serían útiles llevar a cabo para mejorar el proceso de integrar a los padres en la enseñanza de sus hijos. Recomienda a las agencias gubernamentales a investigar para conocer a profundidad las necesidades de los ciudadanos y crear programas de ayuda y orientación a padres para aclarar dudas. Recomienda a las escuelas fomentar una atmósfera positiva para los padres y mantenerlos al tanto de las actividades realizadas en la escuela; también recomienda que los padres sean voluntarios en las escuelas. Le recomienda a los maestros a traer a los padres al salón de clases, involucrarlos en las actividades, orientar a los padres sobres las expectativas y demostrar interés en que los padres sean pate del proceso de enseñanza y aprendizaje de sus hijos. A los padres Colón (2006), les recomienda reconocer sus propias necesidades académicas, estar dispuestos a recibir orientación y sugerencias que beneficien a su hijo, responsabilizar a sus hijos por las tareas y por el proceso de aprender y seleccionar en el hogar un lugar adecuado para estudiar, mientras se fomenta en el niño el hábitos de estudio. Rodríguez (2005) realizó una investigación estudiando la relación entre padres como apoyo de la educación de sus hijos. El propósito de esta investigación fue estudiar el grado de participación de los padres en el contexto de la sala de clase al nivel preescolar para determinar, luego de exponerlos a talleres relacionados, si aumentó el 49 conocimiento y disposición de participar activamente en el proceso de alfabetización de sus hijos. La justificación expuesta por Rodríguez (2005) fue verificar si el Proyecto Padres Apoyando la Alfabetización daba resultado. Consiste en talleres estructurados a padres con hijos de nivel preescolar referentes a distintos temas de interés (nutrición, higiene, alfabetización…). El proyecto surgió de la preocupación e inquietud sobre la alarmante cifra de deserción escolar, analfabetas, bajo nivel de aprovechamiento escolar y deterioro de salud mental. La ley “No child left behind” expone que la escuela debe animar la participación de padres en la gestión educativa, énfasis a programas que promuevan la lectura y enseñen a leer e inclusión de padres en toda la gestión educativa. El estudio pretender aportar a la toma de conciencia de los padres y de la comunidad en general. Las preguntas de investigación sobre el Proyecto Padres Apoyando la Alfabetización fueron: ¿Cuánto conocen los padres sobre el enfoque de participación e integración de estos en la sala de clases? ¿Cuán preparados se sienten para integrarse en la sala de cases? ¿Cuán dispuestos están a integrase en la sala de clases? ¿Cuánto conocen sobre el proceso de lectura, escritura y alfabetización? ¿Cuánto conocen sobre temas relacionados a enseñanza? ¿Cómo se compara el conocimiento de los padres antes de los talleres y después de tomarlos? ¿Cómo se compara la disposición antes de los talleres y después de estos? La revisión de literatura de la investigación sobre el Proyecto Padres Apoyando la Alfabetización se divide en los siguientes subtemas: introducción, aspectos históricos y legales, fundamentos teóricos, alfabetización temprana, participación de padres e 50 investigaciones relacionadas. Aspectos importantes expuestos en la revisión de literatura son, en el 1990 se aprobó la Ley Orgánica # 68 del Departamento de Educación que promueve la capacitación y participación activa de los padres en el proceso de enseñanza de sus hijos. Luego se crea la Ley para el desarrollo de las Escuelas de la Comunidad donde padres, administradores y maestros deben ser parte del Consejo Escolar para unirse y fortalecer los procesos de aprendizaje y respaldar los compromisos y responsabilidades. En julio de 1999 se derogan ambas leyes y se crea la nueva Ley Orgánica # 149 donde se unen todos estos esfuerzos y compromisos. Otras leyes que menciona la investigadora y que están muy bien relacionadas a la política de participación de los padres como parte del aprendizaje de sus hijos son la Ley IDEA 10517 y la Ley Federal 103-382. Dándo énfasis a la ley 107-110 (2001) “No Child Left Behind Act”. En el subtema de edad temprana Rodríguez (2005) plasma la importancia de integrar a los padres en el proceso de aprendizaje por ser el ejemplo principal que los niños observan e imitan. Se debe por ende, enseñar a los padres a transmitir su conocimiento eficazmente. La investigadora menciona que algunos padres no reconocen el valor de su influencia sobre sus hijos en el hogar como parte de una extensión de la labor educativa que se desarrolla en el salón de clases. La lectura y escritura son herramientas para el desarrollo del pensamiento, aprendizaje y comunicación; es por esto que se le brinda tanta importancia a un desarrollo óptimo de estas destrezas. Rodríguez (2005) separa un subtema para escribir sobre la participación de los padres. En la investigación sobre la integración de padres al proceso de alfabetización en el nivel preescolar, Rodríguez fundamenta que cuando los maestros entienden la 51 importancia de involucrar a los padres en el proceso de aprendizaje, empiezan a trabajar directamente con ellos. El cambio de la educación es dinámico, por lo tanto se tiene que educar a los padres. Los padres deben colaborar y tener una buena comunicación con los maestros porque la educación de sus hijos es prioridad. Como investigaciones relacionadas menciona los estudios de Handerson (1987 en Rodríguez, 2005), el cual demuestra la relación directa de la participación de los padres con mejores resultados escolares de sus hijos. Cochran (1987 en Rodríguez, 2005), establece relaciones de participación de padres con sentido de bienestar y comodidad de los estudiantes. Hamilton (1989 en Rodríguez, 2005), establece que la participación de padres en el proceso educativo de sus hijos dio mayor asistencia a la escuela y mejores percepciones de padres hacia la escuela. Epstein (1996 en Rodríguez, 2005), menciona que las maestras que involucran a los padres obtienen de los niños mejores resultados en términos de actitudes, conductas y alianzas positivas. Los resultados luego de los talleres de integración a padres fueron positivos, hubo aumento en todos los elementos estudiados. Aumentó considerablemente la integración de los padres a la escuela. Los padres mostraron sentirse más preparados para fungir como tutores. Los padres se involucraron más en el proceso de lectura en los hogares. Todos los resultados fortalecieron la idea de que brindar talleres informativos a los padres les da la seguridad y las herramientas para trabajar con sus hijos eficazmente de modo que éstos se beneficien. Las recomendaciones que brinda la investigadora luego del estudio sobre la integración de padres al proceso de alfabetización en el nivel preescolar son: brindar 52 talleres, programas, estrategias, intervenciones y tratamientos para integrar a padres al proceso educativo de sus hijos. Realizar dicha investigación con muestras significativa para que los resultados sean a nivel Isla. Capacitar maestros y padres para facilitar la adquisición de nuevas estrategias que favorezcan la integración y el desarrollo de destrezas. Establecer programas, estrategias y centros de ayuda y apoyo a padres. Crear proyectos especiales para fomentar la paternidad responsable y fortalecer el aspecto socioemocional y académico. Coordinar con otras agencias y escuelas adiestramientos sobre patrones de crianza, desarrollo del niño, alfabetización temprana, integración de padres y padres como tutores. Cada niño es diferente y puede aprender a leer a distinta edad. Sin embargo, mucho se ha hablado sobre factores que pueden influenciar negativamente este desarrollo. Los niños aprenden a leer a distintas edades, todo dependiendo del estímulo que hayan recibido en el ambiente y las experiencias significativas. Mucho se dice del estatus socioeconómico, el nivel de pobreza, cantidad de miembros en la familia, estudios de los padres, etcétera, como factores sociales que influencian negativamente en el aprendizaje de la lectura en los niños. Se han realizado investigaciones que han ido descartando poco a poco estas ideas. Al examinar los padres de los niños que tienen éxito en la escuela, se hallan conductas que cualquier persona puede practicar sin importar la situación económica (Sameroff, 1993 en Craig, 2001). Sin embargo, los niños con padres de escasos recursos económicos tienden a vivir en ambientes con menos entidades educativas en la comunidad (Felner, 1995 en Papalia, 2005). Los padres pueden cumplir una función importante en la creación de un ambiente propicio y alentar el desarrollo de determinadas habilidades que favorecen el éxito sin 53 importar el nivel económico, lo importante es dar énfasis a lo que creen importante como el desarrollo de la lectura y escritura (ver apéndice 5). Las investigaciones (Brenner, 1984 en Craig, 2001), señalan que las familias adaptables, con patrones de comunicación abierta y con buenas técnicas para la solución de problemas, están mejor preparadas para sobrellevar esta clase de situaciones y retos sociales. Aunque la pobreza y la condición de minoría en ocasiones son factores que merman el desempeño intelectual, no sólo los niños de bajo nivel económico tienen dificultades con el aprendizaje de la lectura (Craig, 2001). La situación suele estar en la importancia que le den los adultos al acto de leer porque de qué vale que el niño tenga muchos libros sino sus padres no le han modelado el ejemplo de leer diariamente y de manipular estos materiales. El niño puede tener muchos libros y materiales escritos, y si sus padres no son agentes de motivación el niño no hará nada con ellos. Las revisiones de la investigación (Hess y Holloway, 1984 en Craig, 2001), señalan tres factores importantes relacionados con el éxito de los niños; los progenitores tienen ideas realistas sobre las capacidades actuales de sus hijos, pero también expectativas magníficas para el futuro. Los padres les ayudan a lograr seguridad en sí mismos pues los ayudan a realizar actividades pertinentes para su edad, pero desarrollando a su vez su potencial (andamiaje). Las relaciones entre padres e hijos son afectuosas, los límites de disciplina no hacen sentir menos a los hijos. Padres e hijos hablan, los padres les leen, los escuchan y sostienen conversaciones regularmente. Los padres apoyan y enriquecen la exploración y las preguntas de sus hijos, al hacerlo, actúan como modelos. 54 En términos generales, el niño suele lograr el éxito académico cuando sus padres le ofrecen apoyo y orientación (Morrison, 2005, Rodríguez, 2005; Craig, 2001). Los padres que aprecian mucho el aprendizaje, le modelan esta actitud a sus hijos y los motivan a trabajar y a aprender porque los creen capaces (Kaplan, 1992 en Craig, 2001). Es importante que los padres se relacionen en el aprendizaje de sus hijos (Rodríguez, 2005; Morrison, 2005), tomando parte activa. La familia es una institución importante en la educación y desarrollo de los niños. La familia establece el fundamento para toda la educación y aprendizaje futuro. Los padres son los educadores infantiles primarios, sin embargo, necesitan ayuda y apoyo de la comunidad (otros familiares e instituciones como iglesia y escuela) para guiar y dirigir el aprendizaje de los niños. Los padres necesitan estar involucrados en el sistema educativo y en las actividades de sus hijos para brindar un apoyo a la escuela y continuar el desarrollo de destrezas en el hogar. Los padres necesitan estímulo para convertir los programas de educación de sus hijos en parte de sus vidas, de forma que no estén separados de lo que pasa con sus hijos. Los educadores deben demostrar a los padres la importancia de su relación con el salón y maestras y enseñarles sobre el aprendizaje de los niños. Chomsky (1971, en Ruiz, 2001), señala que el niño aprende a leer mediante el deletreo al utilizar letras para inventar palabras al escribir luego trata de reconocer y leer las palabras que escribe. Birnbaum (1980 en Ruiz, 2001), concluye que los niños que desarrollan habilidad para leer mediante la actividad autodirigida del deletreo inventado, proceden de hogares cuyos padres responden a preguntas de los niños sobre el lenguaje impreso, apoyan sus esfuerzos al escribir y utilizan la escritura en situaciones de la vida 55 cotidiana. El lenguaje del niño se desarrolla a partir de interacciones diarias con los adultos con quienes intentan comunicarse. Los adultos le enseñan las categorías y símbolos para traducir las complejidades del mundo y sus ideas (Craig, 2001). Los adultos brindan el andamiaje y las herramientas necesarias que le servirán al niño a entender su alrededor y expresarse. Se debe fomentar en todo momento la lectura y la escritura como destrezas útiles para la vida diaria (Ruiz, 2001; Molina, 2001; Morrison, 2005; Papalia, 2001 y 2005). Los niños utilizan la lectura y escritura para los mismos propósitos que los adultos. Ellos leen para distraerse, para aprender, descubrir ideas y estimular su pensamiento. Escriben para expresar ideas, pensamientos y sentimientos. La lectura comprende el aprendizaje de la fonética, la forma de decodificar letras e interpretar lo que se lee; la escritura incluye la habilidad de trasmitir significados mediante un texto impreso. Ambas modalidades de la comunicación simbólica se utilizan socialmente en interacciones con otros para conocer sobre el mundo que les rodea. Los padres deberían tomarse el tiempo de leerles a los niños una amplia variedad de textos deberían ser modelos a seguir para que los niños emulen el uso apropiado del lenguaje. Para los niños que participan de manera contínua en interacciones con material impreso es sus casas y comunidades, la alfabetización suele ser un proceso acelerado en los años preescolares (Santrock, 2002). Sin embargo, los niños que no han tenido la oportunidad de participar de la lectura temprana y experiencia de alfabetización similares se llevaran más tiempo en aprender a leer y a escribir (Hiebert y Raphael, 1996, en Santrock, 2002). Por otros lado, aunque niños con bajos recursos no son los únicos que presentan dificultades en aprender a leer y escribir, sí se ha notado que lo niños en 56 hogares con niveles bajos económicos obtienen menos experiencias significativas, que se traduce en pobre y lento aprendizaje de destrezas (Hart y Risley en Santrock, 2002). Los niños reciben los primeros estímulos y experiencias en sus hogares. Son los padres, los primeros ejemplos a seguir. Conforme el niño va creciendo, va siendo rodeado de más personas (vecindario y comunidad) que también influyen en su desarrollo. Si el niño vive en una comunidad alfabetizada, con personas diestras en las habilidades de lectura y escritura, las personas de la comunidad darán énfasis al aprendizaje de la lectura y escritura. Posiblemente la comunidad cuente con servicios educativos de excelencia y de apoyo a la educación; como lo es la biblioteca. Durante un paseo por la comunidad, un niño puede observar múltiples letreros con texto impreso, muchísimos logos, personas leyendo el periódico, buscando cartas, escribiendo una postal y hasta escribiendo a computadora (si van a una oficina). Se lee y se escribe en la mayoría de los lugares que los niños visitan. Un ambiente lingüísticamente enriquecido (ver apéndice 5), provee adultos que demuestren escritura en actividades reales y significativas para los niños. Al observar a sus padres, familiares, vecinos, amigos y maestro, el niño sentirá curiosidad por explorar esta actividad (Ruiz, 2001). No obstante, si el niño en sus años de infancia no tiene las experiencias que lo lleven a reconocer la importancia de la lectura y escritura, y el uso práctico de estas destrezas para la vida, el niño no presentará interés en aprenderlas y mucho menos en practicarlas. Luego, el niño llega a un centro preescolar o una escuela sin haber tenido experiencias significativas con la lectura y escritura y, sin haberse relacionado positivamente con dichas destrezas. El niño llega a la instrucción formal, ya con desventaja frente a otros estudiantes, porque en muchas ocasiones llega con la idea 57 de que aprender a leer y escribir son destrezas difíciles, aburridas y que sólo se van a utilizar en la escuela. Cuando los niños llegan desmotivados y con pensamientos negativos relacionados al aprendizaje, es cuando se necesitan maestros que decidan hacer la diferencia y donde comienza el ambiente de la escuela a transformar vidas; y ser un agente motivador de recuperación para los niños (ver apéndice 6). La escuela debe brindar experiencias que permitan a los niños aprender haciendo. La escuela debe estimular el aprendizaje, animar a los niños, y establecer una atmósfera en el salón que invite a aprender (Papalia, 2005; Molina 2001). Si los adultos alrededor del niño reciben con alegría y aceptación los intentos del niño por utilizar el lenguaje escrito, el niño se atreve a asumir riesgo posteriormente al utilizar el lenguaje (Ruiz, 2001). El niño debe respirar una atmósfera emocional positiva que premie sus esfuerzos al tratar de vencer retos y alimente su satisfacción al lograr nuevas habilidades (Ruiz, 2001, Santrock, 2002). Los niños deben sentir que la escuela es un lugar divertido, que aprender es satisfactorio y que ellos son competentes (Papalia, 2005). Las escuelas que han logrado que sus estudiantes sean exitosos han realizado actividades para involucrar a los padres en el proceso de enseñanza y aprendizaje. Todos debemos trabajar en beneficio de la educación como un mismo pueblo, unidos por el mismo fin. Los resultados de una actitud positiva sobre la enseñanza cambiará las mentes de los niños que son los que un futuro manejarán el país, tendrán familias y sus propios negocios entre otros éxitos. Las escuelas que han ofrecido educación a los padres, apoyo social, trabajo y entrenamiento laboral, han tenido un efecto favorable en el aprendizaje del niño (Papalia, 2005). 58 Ruiz (2001) ofrece postulados e implicaciones educativas para un ambiente lingüísticamente integrado (ver apéndice 5). Sin importar el grado que se esté ofreciendo o las edades de los niños, los salones y las atmósferas educativas deben estar enriquecidas con material impreso y tiempo para explorar y manipular los materiales y recursos. Ruiz (2001) comienza exponiendo que el desarrollo del lenguaje se activa en contextos que estimulen la exploración del lenguaje a través de experiencias significativas y pertinentes a la realidad del niño. Por lo tanto, las actividades deben girar en torno a temas significativos para el niño, donde éste pueda utilizar el lenguaje como medio de comunicación. El conocimiento sobre el lenguaje se construye a través de experiencias que activan la necesidad de comunicarse (Ruiz, 2001). Un ambiente enriquecido facilita la exploración y construcción del lenguaje mediante actividades de escritura espontánea. Los niños deben tener la oportunidad de escribir libros, cartas, rótulos, tarjetas y compartir sus trabajos con otros. En cada salón debe existir un centro de lectura y otro de escritura donde haya suficiente material para que los niños utilicen el lenguaje diariamente. El niño debe tener amplia oportunidad para experimentar con la lectura frecuente y diaria de textos apropiados. El niño construye su conocimiento sobre el lenguaje escrito, sus propósitos y rasgos particulares, de la misma manera que construye el conocimiento sobre el lenguaje oral, al estar inmerso en el ambiente lingüístico-natural que le rodea (Ruiz, 2001;Molina 2001). El aprendizaje del lenguaje escrito es una actividad de hallar sentido en el mensaje. El contenido del material no se debe aislar de la realidad del niño porque sino, no es pertinente. La experimentación con las letras y palabras mediante actividades reales de lectura y 59 escritura espontánea tiene una función importante en la construcción de conocimiento del lenguaje escrito y en el desarrollo del concepto lectura y escritora. En el salón de clases, el maestro modela los usos del lenguaje mientras escribe en la pizarra, lee una cartulina, escribe en sus libretas, provee acceso a material impreso y lo comparte con los niños. Mayormente en preescolares y kindergarden se realizan varias actividades para motivar al niño a desarrollar la lectura y escritura; se rotula el salón, los equipos y materiales, se leen cuentos diariamente, se escribe y se dibujo sobre lo estudiado o aprendido y se lleva a los estudiantes a la biblioteca. Se realizan diversas actividades para fomentar el uso de la lectura y escritura como “La mochila viajera” donde el niño se debe llevar un libro a la semana para compartirlo con sus padres y familiares, y “La silla del autor” donde el niño presenta a sus compañeros lo que escribió o dibujó. Santrock (2002) anima a los maestros a involucrar a la comunidad en actividades de escritura en el salón de clases. Menciona que se debe buscar en la comunidad apoyo para talleres en el salón de clases. Cada comunidad cuenta con algún escritor, periodista o autor que puede ser de ejemplo a los niños y debe ser utilizado como recurso en la escuela. La escuela debe motivar a los adultos ya sean padres o familiares a participar de actividades sobre alfabetización con los niños para que estos entonces motiven a los niños. Bronfenbrenner (en Papalia, 2005; Morrison, 2005) sostuvo que debe existir una interrelación entre niños, familias y comunidad para un aprendizaje total. Una asociación positiva entre familia y escuela brinda excelentes oportunidades para involucrar a los padres en la tarea de mejora las habilidades de lectura y escritura 60 (Santrock, 2002). Alianza entre familias, escuelas y comunidad beneficia a la familia completa, a la escuela y a la comunidad (Davies, 1997 en Rodríguez, 2005). Todos debemos ser partícipes en la educación y estar involucrados para tomar decisiones que beneficien a todos como sociedad y trabajar efectivamente por el bien común de los niños. Los maestros y padres deben motivar la escritura temprana de los niños sin estar preocupados por la formación apropiada de las letras o la escritura convencional correcta de las misma (Santrock, 2002). La excelencia se consigue con la práctica, pero el deseo de comenzar fluye mejor con adultos que sean buenos ejemplos y apoyo de parte de los padres. Greenwood y Hickman (1991 en Rodríguez, 2005) establecen que si el hogar influye tanto como la escuela en los logros de los estudiantes, es imperativo que actúen como socios en el proceso. La comunidad y el gobierno de Puerto Rico están comprometidos con ayudar a los niños en su aprendizaje de la lectura. Cuando un niño nace y sus padres lo inscriben se le entrega un paquete de libros para que le lea al niño. Constantemente en la televisión hay anuncios que auspicia el Proyecto “Lee y sueña” (proyecto de Luisa Gándara desde el año 2007), donde se fomenta la lectura diaria a los niños desde que están en la barriga de sus madres. Este mismo Proyecto, tiene centros de lectura en distintos pueblos con muchos libros de cuento para que los padres y familiares dediquen un tiempo de lectura a los niños. Por varios años se ha estado regalando libros de literatura infantil en las fiestas de Reyes de Puerto Rico realizado por el gobierno para los ciudadanos con el fin de que todos los niños sin importar su nivel económico, estado académico de sus padres, tengan acceso a libros. 61 La educación es responsabilidad de todos como individuos sociales. Es nuestro deber como ciudadanos aprender destrezas para la vida que nos ayuden a ser mejores personas. Tener las herramientas que nos abrirán puertas en el presente y en el futuro. Debemos fomentar en los niños el amor por aprender. Como adultos ser los ejemplos para que los niños imiten nuestras conductas y aprendan de nosotros. La lectura y escritura son dos procesos que se deben aprender natural y espontáneamente, en ambientes lingüísticamente enriquecidos. Como adultos preparamos este ambiente y procuramos brindarle a los niños las experiencias necesarias para un aprendizaje efectivo. 62 CAPÍTULO III METODOLOGÍA Introducción Este capítulo muestra los pasos que se utilizaron durante la investigación para recopilar, leer y evaluar revistas, artículos de Internet, artículos de periódico, tesis, libros de textos, diccionarios y documentos con el fin de estudiar la influencia de los padres y la comunidad en el aprendizaje de la lectura y escritura. Este capítulo se diseñó para describir el proceso de investigación a ser utilizados para llevar a cabo esta tesina documentada. El estudio incluye el problema a estudiarse, las preguntas y el diseño de investigación a seguir. Presenta en qué consiste la población y la muestra, descripción de la técnica de revisión documental, tabla que sirve como instrumento para organizar los datos, validar la información requerida y los análisis cualitativos y descriptivos para responder a las preguntas de investigación del estudio. Esta investigación consiste en estudiar la influencia de los padres y la comunidad en el desarrollo de la lectura y escritura en niños de nivel preescolar mediante el análisis de literatura. Preguntas de investigación Luego de revisar la literatura se pretende contestar las siguientes preguntas: 1. ¿Cómo influye la familia y la comunidad en el desarrollo de la lectura y escritura? 2. ¿Cuál debe ser el rol de los padres, familiares y cuidadores para fomentar el deseo de leer y escribir en niños de edad preescolar? 3. ¿Cómo la escuela puede ser un lugar de recuperación para esos niños que llegan frustrados y sin deseos de leer y escribir en su vida diaria? 63 Diseño de investigación Según Ponce (2006), existen diversos tipos de investigaciones de enfoques sociales y pedagógicos que responden a la necesidad de los profesionales de la educación en su búsqueda de entender la problemática y los fenómenos que afectan el desarrollo cognoscitivo y la conducta del ser humano. El objetivo de dichas investigaciones es identificar los problemas particulares que afectan el desarrollo y dominio de los conocimientos, para luego proponer soluciones efectivas y aportar nuevos conocimientos al campo de la educación. En este estudio se utiliza el metanálisis como diseño de investigación. Glass (1979) menciona que este diseño se refiere a realizar un análisis comprensivo de los análisis o resultados de estudios individuales, con el propósito de integrar hallazgos obtenidos. El metanálisis es una gran compilación de literatura y resultados producto de investigaciones llevadas a cabo sobre temas en específico. Este diseño como estrategia investigativa, representa una nueva perspectiva para la acumulación de conocimiento caracterizado por su reproductividad. El objetivo principal es realizar un análisis sistemático e integral de la información, con el fin de hallar resultados eficaces, conocimiento pertinente, conclusiones y recomendaciones que puedan ser utilizadas para mejorar, fortalecer y colaborar en el proceso cognoscitivo, investigativo y a la toma de decisiones. Con dicha investigación se pretende explorar y describir la influencia de los padres en el desarrollo de la lectura y escritura, para luego brindar recomendaciones adecuadas que minimicen los efectos del problema. Este diseño fundamentado en la recopilación de datos a través de estudios realizados aporta información pertinente para analizar el tema. 64 La tesina documentada requiere estudiar distintos escritos que representan datos cualitativos. Los datos cualitativos consisten en palabras e ideas que recoge el investigador a través de el análisis de distintas lecturas y documentos (Ponce, 2006). Por consistir en palabras e ideas, tienden a ser una fuente de información rica en descripciones y explicaciones sobre el fenómeno de estudio. Descripción y selección de la población y la muestra La tesina documentada consiste en recopilación de datos sobre el tema de análisis. En el caso del estudio sobre la influencia de los padres y familiares en el aprendizaje de la lectura y escritura, la población y la muestra considerada son todas aquellas investigaciones y fuentes primarias y secundarias realizadas sobre el tema en niños de edad preescolar y elemental. En dicha investigación no se requiere contacto con sujetos directamente, sino que se analizan documentos y estudios ya realizados. Descripción de instrumento El instrumento a ser utilizado en la recopilación de datos consiste en una bitácora para anotar la información relevante y detalles de los estudios y literatura leída. Se utilizará la técnica de revisión de documentos con el fin de obtener la información requerida. Con tal propósito se deben elegir los documentos que proporcionen información útil, que provean respuestas a las preguntas de investigación. La técnica de revisión de documento consiste en visitar bibliotecas, estudiar investigaciones, leer tesis y documentos que se relacionen con el tema de investigación. Este proceso requiere leer, comprender, sintetizar y analizar críticamente la investigación 65 ya realizada. Luego de esto se resume y se anotan los puntos importantes del escrito en la bitácora para registrar la información. Los documentos no se limitan a revelar o a describir, sino también constituyen la realidad social y las variaciones de factores. Los documentos analizados necesitan ser evaluados críticamente para beneficio de la investigación. De este análisis surge la significación de los datos en función de su relación unos con otros (Blaxter, Hughes & Tight, 2000). En cada documento a analizarse se debe buscar su autor, la fecha de escrito, dónde se hizo, con qué propósito y qué relación guarda con el tema. El análisis documental conduce a lograr de cada documento aquellos elementos que son importantes y pertinentes mediante la agrupación, categorización de esos hallazgos y relación entre los mismos. La interpretación de los documentos resulta ser el producto de su punto de vista, disciplina o interés (Blaxter, Hughes & Tight, 2000). La investigadora diseñó una tabla con el propósito de recopilar y organizar la mayoría de las fuentes de información leídas y su relación con el tema. Se eligieron documentos que proporcionaran mayor evidencia de elementos importantes a esta investigación. Es importante recalcar que esta tabla no incluye todos los documentos revisados porque sería muy extensa, se seleccionó los de mayor pertinencia. 66 67 68 Validación En la validación de la información a ser recopilada y analizada es viable utilizar la técnica de triangulación de datos. Esta técnica utiliza variadas estrategias que incluye la exploración amplia de diferentes fuentes de información de datos para corroborar su existencia (Ponce, 2006). La triangulación de datos en el campo de la educación consiste en una estrategia de investigación mediante la cual un mismo objeto de estudio pedagógico es abordado desde diferentes perspectivas de contraste en momentos temporales donde se comparan datos, se contraponen las perspectivas de diferentes investigadores o se comparan teorías, contextos, instrumentos, agentes o métodos . La triangulación de datos precisa menos tiempo, recursos, materiales humanos y financieros. Procedimiento El análisis de los datos será cualitativo, el cual consiste en descripciones. El análisis cualitativo incluye la interpretación e integración crítica y comprensiva del conjunto de información leída y analizada. En este caso, la información puede estar escrita de forma expositiva, agrupada y categorizada por temas relacionados. Esta combinación de elementos de análisis y profundidad dependen de las circunstancias que rodean la investigación. A través del análisis cualitativo se contestan las preguntas de investigación, que son el problema planteado. Los procedimientos a mencionarse a continuación representan las acciones de la investigadora desde el comienzo de la investigación. Son actividades que organizan el proceso y facilitan el estudio. 69 1. La investigadora seleccionó un tema a investigar basándose la preocupación de dificultades de aprendizaje de lectura y escritura observado en varios niños. 2. Los primeros días, mientras la investigadora comenzaba su búsqueda, la mentora de tesis, ofreció a los estudiantes orientación sobre la información que cada capítulo de tesina documentada debía tener. 3. Se continuó el proceso de búsqueda de información en bibliotecas. Para dicha investigación se utilizó la Biblioteca de la Universidad Metropolitana, Sistema Ana G. Méndez, para buscar revistas relacionadas a lectura y escritura. En la sala de Revistas de dicha universidad, se buscaron las tesis y tesinas relacionadas al tema de investigación que iban a ser utilizadas de referencia. A su vez la investigadora buscó libros de textos que trabajaran de algún modo el tema y artículos del periódico el Nuevo Día y revistas educativas. Cabe mencionar que para leer las tesis, tesinas y estudios que se encuentran en dicha Biblioteca no se requiere una autorización especial. 4. Conforme se leían los documentos la investigadora iba haciendo resúmenes y destacando los puntos importantes de cada lectura. En el análisis de los documentos, en todo momento se cumplió con el compromiso ético respecto al manejo de información, derecho de autor y leyes de plagio mediante el proceso de citar la fuente principal y documentar con los autores. Todo esto con la rigurosidad que se requiere de acuerdo a las especificaciones establecidas por la Asociación de Psicólogos Americana conocida como APA. 70 5. Se procedió a realizar un análisis de contenido crítico y comprensivo de cada documento revisado. Esto, en un transcurso de un semestre, entregando a la mentora los capítulos para su revisión. 6. Finalizada la investigación con todos los requerimientos del Programa de Educación Graduado de la Universidad Metropolitana, Sistema Ana G. Méndez, se presentó el documento de estudio para aprobación de la Decana. Finalmente, siendo aprobado el documento, se procedió a presentar la investigación en el formato PDF a la Biblioteca de la Universidad Metropolitana, Sistema Ana G. Méndez. Siendo esto el producto final del proceso investigativo como requisito para obtener el grado en Maestría en Enseñanza Preescolar de la Universidad Metropolitana, Sistema Ana G. Méndez, Recinto de Cupey (UMET). 71 CAPÍTULO IV RESULTADOS Introducción Este estudio se diseñó con el propósito de investigar la influencia de los padres y de la comunidad en el desarrollo de la lectura y la escritura. El aprendizaje de ambas destrezas es de vital importancia para cada individuo, pues leemos y escribimos diariamente. Actualmente se ha investigado sobre cómo se desarrolla el aprendizaje de la lectura en los niños y cómo se desarrolla el aprendizaje de la escritura en los niños para fomentar el que los adultos provean un ambiente apropiado al niño. Los adultos servimos de ejemplo a los niños, éstos imitan lo que ven (Bandura en Craig, 2001). Es por esto, que se debe investigar qué deben hacer los adultos para promover un desarrollo de la lectura y escritura de forma natural y placentera. La lectura y la escritura no son herramientas escolares solamente, son destrezas que utilizamos en todas las áreas de la vida, dentro y fuera del salón (Sáez, 2008). Por medio de la lectura descubrimos, aprendemos, entendemos y viajamos; por medio de la escritura nos comunicamos, reflexionamos, nos expresamos y hacemos volar nuestra imaginación. Presentación de los hallazgos En este capítulo se presentan los hallazgos obtenidos luego de la revisión de literatura. Teniendo en mente la preocupación sobre rezagos en el desarrollo de la lectura y escritura, se debe investigar este tema para buscar alternativas que ayuden a los niños. Como parte de la investigación se formularon preguntas que por medio de la revisión de 72 literatura se lograrían contestar. Esta será la manera de presentar los hallazgos de esta investigación, contestando cada pregunta formulada. La primera pregunta de investigación es: ¿Cómo influye la familia y la comunidad en el desarrollo de la lectura y escritura? Los padres son las primeras personas con quienes los niños tienen contacto. Son los primeros modelos que los niños imitan durante su crecimiento. Las acciones que la familia modele serán los actos que los niños imiten y reproduzcan. Los padres deben reconocen la influencia directa que ejercen sobre sus hijos. Cuando se trata del aprendizaje de destrezas como la lectura y la escritura los padres deben reconocer que su responsabilidad va más allá de comprar libros o presentarle material impreso. Compartir tiempo de calidad con los niños, leerles por la noche, conversar con ellos para contestar sus interrogantes es parte vital del proceso de aprendizaje. Los padres deben reconocer que no hacen falta grados universitarios para ser un buen ejemplo a sus hijos. Los padres son una extensión de la escuela; en la escuela los niños aprenden destrezas que deben ser practicadas en los hogares para que los niños le vean pertinencia y no las asimilen como necesario para la escuela meramente. Los niños desarrollan en la escuela las destrezas formales de lectura, esto no significan que no lean dibujos, carteles, ilustraciones y palabras antes de llegar a la escuela o al centro preescolar. Es necesario que los padres en sus hogares muestren que ellos también leen, y no libros de textos tal vez, pero sí el periódico, cartas, listas de compras, etc. Cuando los padres se integran a la escuela y al aprendizaje de sus hijos, aprenden cómo crear un ambiente adecuado para el aprendizaje del niño. Aprenden técnicas para 73 desarrollar y reforzar destrezas en el niño (Soto, 2008). Los padres no deben tener miedo al desconocimiento, los maestros tienen las herramientas y éstas deben ser compartidas para el beneficio del niño. La familia y el lugar donde el niño pasa tiempo durante su edad temprana (antes de ir a la escuela) es de vital importancia. Los elementos que caracterizan ambientes adecuados son: interacción verbal y frecuente con el niño, el uso funcional del material impreso, el uso extenso de materiales para escribir, la lectura del material impreso, la presencia de lectores y la audiencia que responda a las curiosidades del niño sobre el lenguaje escrito y su esfuerzo para interpretarlo (Ruiz, 2001; Morrison, 2005 y Papalia, 2005). Se necesitan espacios donde la lectura sea una actividad cotidiana y practicada con regularidad por medio de los miembros de la familia y un lugar donde los adultos muestren interés por el valor del lenguaje para este ambiente alfabetizado. Los adultos deben responder a la curiosidad del niño y promover el desarrollo de la lectura y escritura como aprendizaje natural. La segunda pregunta de investigación es: ¿Cuál debe ser el rol de los padres, familiares y cuidadores para fomentar el deseo de leer y escribir en niños de edad preescolar? Primeramente los padres deben reconocer que ellos son modelos a los niños. Los padres deben leer y escribir diariamente para que los niños emulen esta acción. Los padres deben ejemplificar el uso de la lectura y escritura a sus hijos en distintos contextos y en distintos momentos del día. De igual manera, los familiares y cuidadores deben utilizar la lectura y escritura en ambientes reales y con propósito pertinentes a la vida 74 diaria. Los padres deben leerle a sus hijos, escribir con ellos y hacer del acto de leer uno divertido. Los padres comúnmente le compran libros de cuentos a los niños, pero luego del primer día de lectura los dejan olvidados. Los niños deben leer diariamente, así se motivarán al niño a participar de lecturas siempre. No basta con tener una mini biblioteca en el cuarto, hay que leer con los niños en el hogar, en el centro de cuido y en todo lugar. Toda la familia debe ser parte de este proceso, deben colaborar y ser buenos ejemplos. Los padres deben tomar parte activa en el proceso de enseñanza y aprendizaje. Grifftith (en Rodríguez, 2001) evidencia que los hijos se benefician académicamente cuando los padre son parte del proceso. El reto de los adultos es facilitar un ambiente adecuado, enriquecido y óptimo que invite al aprendizaje (Ruiz, 2001). Cuando los padres participan del proceso de enseñanza de sus hijos y se involucran en actividades conocen lo que está sucediendo en la escuela, pueden dar continuación en el aprendizaje y apoyan lo que hacen las maestras. Todo está en que las maestras puedan explicar a los padres la forma correcta de involucrarse y que los padres comprendan la importancia y al ayuda que ellos pueden brindar. Cuando los padres participan en el proceso crece su expectativas y aspiraciones para sus hijos y desean ayudarlos durante su aprendizaje (Geenwood y Hickman en Rodríguez, 2005). Conforme el niño va creciendo va compartiendo con más personas y va teniendo contacto con su vecindad y comunidad. Si el niño vive en una comunidad alfabetizada, con personas diestras en las habilidades de lectura y escritura, las personas de la comunidad darán énfasis al aprendizaje de la lectura y escritura. Posiblemente la comunidad cuente con servicios educativos de excelencia y de apoyo a la educación, todo este ambiente que rodea al niño influirá en su aprendizaje y desarrollo de destrezas. 75 Bronfenbrenner (en Papalia, 2005; Morrison, 2005) sostuvo que debe existir una interrelación entre niños, familias y comunidad para un aprendizaje total. Una asociación positiva entre familia y escuela brinda excelentes oportunidades para involucrar a los padres en la tarea de mejora las habilidades de lectura y escritura (Santrock, 2002). Alianza entre familias, escuelas y comunidad beneficia a la familia completa, a la escuela y a la comunidad (Davies, 1997 en Rodríguez, 2005). La próxima pregunta de investigación es: ¿Cómo la escuela puede ser un lugar de recuperación para esos niños que llegan frustrados y sin deseos de leer y escribir en su vida diaria? La escuela debe motivar a la comunidad a ser parte del proceso de enseñanza y aprendizaje porque juntos colaborando por el beneficio de los niños pueden tomar decisiones correctas defendiendo los derechos de todos y siendo partícipes activos en el proceso (Roopnaire y Johnson en Rodríguez, 2005). La escuela debe ser un lugar abierto a recibir colaboración de personas de la comunidad y no sólo de padres. Toda la comunidad (el repostero, carnicero, policía, cartero, doctor) tienen algo que aportar a la educación. Cuando las decisiones se toman en conjunto la variedad de opiniones y de puntos de vista deben enriquecer y no ser punto de discordia. Los niños están la mitad del día en la escuela y la otra mitad con sus padres, por lo tanto la responsabilidad de educar debe ser compartida. De nada vale que se enseñe algo en el hogar si en la escuela no es promovido o fomentado y viceversa. La escuela y los padres deben ser socios y mantener buenas relaciones para ayudar a los niños (Greenwood y Hickman en Rodríguez, 2005). 76 Cuando los maestros comprenden que los padres son facilitadores y no estorbos los dos comienzan a hacer parte del proceso y esto ayuda directamente a la educación de los niños. El maestro tiene la responsabilidad de ser el facilitar del niño y de padres porque educamos al niño en nuestro salón de clases pero tenemos que enseñarle al padre a integrarse al proceso. Muchos padres no tienen las herramientas y los recursos necesarios, y el maestro debe ser un facilitador. El maestro debe crea confianza al padre para evitar que éste se frustre por no saber qué hacer con su hijo (Soto, 2008). El maestro debe enriquecer el ambiente del salón con material impreso donde el niño lea diariamente. En el salón de clases, el maestro modela los usos del lenguaje mientras escribe en la pizarra, lee una cartulina, escribe en sus libretas, provee acceso a material impreso y lo comparte con los niños. En el día debe haber varias actividades de lectura para que el niño se acostumbre a leer, pero estas actividades deben crear conexiones al niño, deben ser pertinentes a su vida y relacionarse con temas de interés. La maestra debe llamar la atención del niño ejemplificando su deleite al escribir, dibujar y leer. Una maestra que con amor, haga sentir a niño en confianza y le binde el andamiaje necesario para que el niño trabaje, logra sus objetivos en el niño. La escuela no está para enseñar destrezas fragmentadas la una de la otra, ni para frustrar al niño que no asimile las destrezas igual de rápido que los demás. La escuela está para forjar hombres de bien con herramientas que le ayuden a vivir en sociedad y ser competente en ésta. La escuela y los maestros son los responsable de incluir a los padres y a la comunidad a las actividades dentro y fuera del salón de clases. 77 Todas las personas que ofrecen servicios a la comunidad son recursos que se deben utilizar en el salón. Los resultados luego de los talleres de integración a padres (Moreno, 2001) fueron positivos. Aumentó considerablemente la integración de los padres a la escuela. Los padres mostraron sentirse más preparados para fungir como tutores. Los padres se involucraron más en el proceso de lectura en los hogares. Todos los resultados fortalecieron la idea de que brindar talleres informativos a los padres les da la seguridad y las herramientas para trabajar con sus hijos eficazmente de modo que éstos se beneficien. Por lo tanto la escuela debe brindar talleres a padres para que estos se sientan más preparados al ayudar a sus hijos. Cuando los niños llegan desmotivados y con pensamientos negativos relacionados al aprendizaje, es cuando se necesitan maestros que decidan hacer la diferencia y donde comienza el ambiente de la escuela a transformar vidas; y ser un agente motivador de recuperación para los niños. La escuela debe brindar experiencias que permitan a los niños aprender haciendo. La escuela debe estimular el aprendizaje, animar a los niños, y establecer una atmósfera en el salón que invite a aprender (Papalia, 2005; Molina 2001). Los estudios de Handerson (1987 en Rodríguez, 2005), el cual demuestra la relación directa de la participación de los padres con mejores resultados escolares de sus hijos. Cochran (1987 en Rodríguez, 2005), establece relaciones de participación de padres con sentido de bienestar y comodidad de los estudiantes. Hamilton (1989 en Rodríguez, 2005), establece que la participación de padres en el proceso educativo de sus hijos dio mayor asistencia a la escuela y mejores percepciones de padres hacia la escuela. Epstein (1996 en Rodríguez, 2005), menciona que las maestras que involucran a los padres 78 obtienen de los niños mejores resultados en términos de actitudes, conductas y alianzas positivas. Sin importar el grado que se esté ofreciendo o las edades de los niños, los salones y las atmósferas educativas deben estar enriquecidas con material impreso y tiempo para explorar y manipular los materiales y recursos. Ruiz (2001) comienza exponiendo que el desarrollo del lenguaje se activa en contextos que estimulen la exploración del lenguaje a través de experiencias significativas y pertinentes a la realidad del niño. Por lo tanto, las actividades deben girar en torno a temas significativos para el niño, donde éste pueda utilizar el lenguaje como medio de comunicación. El conocimiento sobre el lenguaje se construye a través de experiencias que activan la necesidad de comunicarse (Ruiz, 2001). Un ambiente enriquecido facilita la exploración y construcción del lenguaje mediante actividades de escritura espontánea. Los niños deben tener la oportunidad de escribir libros, cartas, rótulos, tarjetas y compartir sus trabajos con otros. En cada salón debe existir un centro de lectura y otro de escritura donde haya suficiente material para que los niños utilicen el lenguaje diariamente. El niño debe tener amplia oportunidad para experimentar con la lectura frecuente y diaria de textos apropiados. El niño construye su conocimiento sobre el lenguaje escrito, sus propósitos y rasgos particulares, de la misma manera que construye el conocimiento sobre el lenguaje oral, al estar inmerso en el ambiente lingüístico-natural que le rodea (Ruiz, 2001; Molina, 2001). 79 Resumen Todos leemos y escribimos diariamente. Como profesionales utilizamos estas destrezas, pero como seres sociales las utilizamos en la vida diaria. Todos los usos que le damos a la lectura y escritura nos ayudan a comunicarnos con los demás y expresarnos. Se debe fomentar en todo momento la lectura la escritura como destrezas útiles para la vida diaria (Ruiz, 2001; Molina, 2001; Morrison, 2005; Papalia, 2001). Toda la comunidad está involucrada en el proceso de enseñanza y aprendizaje de los niños porque los niños leen diariamente en su comunidad. Y está en nosotros los adultos el modelar buenos hábitos de lectura y escritura para que el niño reconozca la importancia y la pertinencia en el diario de vivir de leer y escribir. La familia y los maestros deben trabajar como un solo equipo para dar continuidad a las destrezas trabajadas en el salón de clases. Como escuela debemos utilizar los recursos que la comunidad nos provee como parte de las actividades para los niños. Debemos ser facilitadores a los niños pero también a los padres para ayudarlos a desarrollar herramientas para ayudar a sus hijos y crear la confianza con el maestro como recurso. Todos somos importantes en el proceso de enseñanza y aprendizaje de los niños porque nos relacionamos con ellos y éstos nos imitan. No queremos niños rezagados, ni con frustraciones, queremos niños motivados y con deseos de aprender. Niños que reconozcan la importancia de leer y escribir como medio para el disfrute, comunicación y expresión. Debemos sentir la responsabilidad que tenemos ante los niños, las familias y la comunidad; y ser un solo equipo trabajando en beneficio de los niños de nuestro país. 80 CAPÍTULO V CONCLUSIÓN Y RECOMENDACIONES Introducción En este capítulo se presentará las conclusiones luego de la revisión de literatura sobre la influencia de los padres y de la comunidad en el aprendizaje de la lectura y escritura. Se plasmarán también las recomendaciones realizadas por la investigadora a distintos elementos de la sociedad y comunidad como el Gobierno, Departamento de educación, escuelas, maestros y padres. Esta investigación tiene como propósito concientizar a toda la comunidad de la responsabilidad compartida y conjunta que tenemos como individuos ante la educación de niños de esta generación que están aprendiendo y se está desarrollando actualmente. Conclusión Por medio de la revisión de literatura de artículos de periódico, documentos de la internet, libros de texto y tesinas se ha mostrado que lo padres y la comunidad juegan un papel importante en el aprendizaje de la lectura y la escritura en los niños. Todos somos parte del proceso, y como tales, debemos fomentar el uso diario de la lectura y de la escritura en distintos contextos diariamente. El ejemplo que le brindemos a los niños marcará sus acciones y será el ejemplo que imiten. Debemos como padres saber que los niños comienzan a leer y escribir antes de que lleguen a la escuela, por lo tanto debemos hacer a los niños partícipes de conversaciones, saciar su curiosidad, modelarle la lectura y la escritura como acciones útiles en la vida diaria y brindarles el tiempo, espacio y materiales requeridos para experimentar con el material impreso. La comunidad debe 81 reconocer que se debe unir a la escuela para apoyar las actividades y fomentar la unidad con un mismo fin. Los maesos deben integrar a los padres y brindarles las herramientas necesarias para que sean colaboradores la enseñanza de sus hijos porque en la mayoría de los casos, éstos no se sienten preparados. Los niños aprenden aquellas cosas que se les presentan en forma de juego, divertido y pertinente a sus vidas. La lectura y la escritura deben ser aprendidas de forma natural y desarrolladas en deleite y diversión. Recomendaciones Se presentarán a continuación las recomendaciones brindadas por la investigadora a distintos componentes de la comunidad con el fin de crear conciencia en todos sobre la necesidad de integrase en la educación de los niños. Dando especial énfasis al aprendizaje de la lectura y la escritura. Se presentarán de forma enumerada sin dar prioridad a ninguna específicamente. Gobierno 1. Ampliar las investigaciones sobre las necesidades de los padres sobre el desarrollo y crecimiento de sus hijos. Esto con el fin de buscar alternativas para los padres para suplir sus necesidades. 2. Crear centros de ayuda a padres donde éstos se puedan orientar sobre temas educativos, con el fin de que los padres se sientan preparados y participen activamente del proceso de enseñanza y aprendizaje de sus hijos. 3. Crear programas para fomentar la paternidad responsable y fortalecer el aspecto socioemocional y académico de cada padre. 82 Región o distrito escolar 1. Brindar talleres a padres y crear programas de ayuda para que los padres aprendan sobre sus temas de interés a su ritmo y en horarios flexible para éstos. 2. Capacitar a maestros sobre nuevas estrategias para integrar a padres y para fortalecer destrezas en los niños. Escuela y maestros 1. Tomar en consideración las fortalezas y limitaciones de cada niño al momento de planificar actividades y proporcionar andamiaje. El niño debe sentirse cómodo y en confianza, no frustrado ni obligado a realizar algo que no entiende o cree no poder hacer. 2. Hablarle a los padres sobre las destrezas trabajadas en el salón para que éstos le den continuidad en sus hogares. 3. Invitar a los padres a participar de actividades de la escuela y salón; 4. Crear espacio para que los padres puedan hablar con los maestros y compartir preocupaciones y experiencias. 5. Permitirle a los padres ser voluntarios en el salón, biblioteca, comedor escolar, excursiones, etc. 6. Compartir estrategias e ideas para que los padres ayuden a sus hijos. 7. Orientar a los padres sobre lo que se espera de ellos como participantes del proceso de enseñanza y aprendizaje de sus hijos y las expectativas que como maestro se tiene de sus hijos. 83 8. Mostrar interés por desarrollar sus habilidades como facilitador de su hijo. Padres 1. Dedicar tiempo a sus hijos y conversar con ellos, de ese modo se crea una alianza en entre padres e hijos. Los hijos deben sentir confianza y apoyo de parte de sus padres en todo momento. 2. Proporcionarle material impreso y materiales de escritura; siempre modelándole su uso y funcionalidad. 3. Estar orientados sobre lo que se trabaja en el salón y reforzar ese aprendizaje en el hogar. 4. Reconocer sus propias limitaciones y buscar ayuda. 5. Participar de las actividades que se realicen en la escuela ser voluntarios en el salón y en el plantel escolar. 6. Aceptar sugerencias de maestros. 7. Reconocer los esfuerzos de su hijo al realizar tareas. Es importante que los padres se relacionen en el aprendizaje de sus hijos (Rodríguez, 2005; Morrison, 2005), tomando parte activa. La familia es una institución importante en la educación y desarrollo de los niños. La familia establece el fundamento para toda la educación y aprendizaje futuro. Los padres son los educadores infantiles primarios, sin embargo, necesitan ayuda y apoyo de la comunidad (otros familiares e instituciones como iglesia y escuela) para guiar y dirigir el aprendizaje de los niños. Los padres necesitan estar involucrados en el sistema educativo y en las actividades de sus hijos para brindar un apoyo a la escuela y continuar el desarrollo de destrezas en el hogar. Los padres necesitan estímulo para convertir los programas de educación de sus hijos en 84 parte de sus vidas, de forma que no estén separados de lo que pasa con sus hijos. Los educadores deben demostrar a los padres la importancia de su relación con el salón y maestras y enseñarles sobre el aprendizaje de los niños. La educación es responsabilidad de todos como individuos sociales. Es nuestro deber como ciudadanos aprender destrezas para la vida que nos ayuden a ser mejores personas. Tener las herramientas que nos abrirán puertas en el presente y en el futuro. Debemos fomentar en los niños el amor por aprender. Como adultos ser los ejemplos para que los niños imiten nuestras conductas y aprendan de nosotros. La lectura y escritura son dos procesos que se deben aprender natural y espontáneamente, en ambientes lingüísticamente enriquecidos. Como adultos preparamos este ambiente y procuramos brindarle a los niños las experiencias necesarias para un aprendizaje efectivo. 85 REFERENCIAS Belinche, M. (2005). Un punto de encuentro para la lectura y escritura. 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Méndez. 89 APÉNDICE 90 APÉNDICE A TEORÍA ECOLÓGICA DEL DESARROLLO DE BRONFENBRENNER 91 Santrock, J. (2002). Psicología de la Educación. México: MC Graw Hill. 92 APÉNDICE B MODELO DEL DETERMINISMO RECÍPROCO DEL APRENDIZAJE DE BANDURA 93 Santrock, J. (2002). Psicología de la Educación. México: MC Graw Hill. 94 APÉNDICE C TABLA DE RESUMEN LECTURA, ESCRITURA Y ALFABETIZACIÓN 95 Santrock, J. (2002). Psicología de la Educación. México: MC Graw Hill. 96 APÉNDICE D NIVELES CONCEPTUALES DE LA ESCRITURA EMERGENTE 97 Ruiz, D. (2001). La alfabetización temprana en el ambiente preescolar (3ra ed.). San Juan, Puerto Rico: Facultad de Educación, Universidad de Puerto Rico. Recinto de Río Piedras. 98 APÉNDICE E CONDICIONES QUE FAVORECEN A LA LECTOESCRITURA 99 CONDICIONES QUE FAVORECEN LA LECTOESCRITURA Craig, G. (2001). Desarrollo Psicológico. (8 ed.) México; Pearson Education. 100 APÉNDICE F RETOS DE LA ENSEÑANZA DE LA LECTURA 101 Santrock, J. (2002). Psicología de la Educación. México: MC Graw Hill.