Literatura estadounidense de entreguerras El período de entreguerras (1918-1939) es uno de los períodos más turbulentos de la historia del mundo occidental, debido al auge de los fascismos y el comunismo, el crac de Wall Street que dio lugar a la Gran Depresión, y la guerra civil española, que tuvo importantes resonancias internacionales. Pero es también una de las épocas más ricas del arte occidental, gracias al surgimiento de los movimientos de vanguardias y el Modernism anglosajón, que se proponen romper con todas las convenciones del arte anterior. La literatura estadounidense no constituye una excepción a esta ebullición cultural. En este período confluyen la Generación Perdida, cuyo nombre refleja la confusión y desorientación imperante entre los jóvenes tras la Primera Guerra Mundial; el Harlem Renaissance, que representa el primer movimiento cultural reivindicativo de la población afro-americana; el Modernism, que se solapa en algunos casos con los dos anteriores; y los inicios de la novela negra hard-boiled. En este ciclo leeremos diez novelas pertenecientes a estas corrientes. Títulos H.D. [Hilda Doolittle], Píntalo hoy: Escenas de la vida de la artista (1921), 144 págs. John Steinbeck, A un Dios desconocido (1933), 272 págs. F. Scott Fitzgerald, Suave es la noche (1934), 472 págs. Gertrude Stein, Ida (1941), 168 págs. John Dos Passos, Manhattan Transfer (1925), 576 págs. Langston Hughes, Escritos sobre España (colección de crónicas y poemas sobre la guerra civil española; edición de Pierre Ionoff, 2011), 272 págs. Zora Neale Hurston, Sus ojos miraban a Dios (1937), 216 págs. William Faulkner, El sonido y la furia (1929), 392 págs. Ernest Hemingway, Fiesta (1926), 288 págs. Raymond Chandler, El sueño eterno (1939), 240 págs. Títulos adicionales (por si alguno de los anteriores no estuviera disponible): Dashiell Hammett, El hombre delgado (1934), 240 págs. Djuna Barnes, Ryder (1928), 250 págs. Nella Larsen, Claroscuro (1929), 200 págs. Henry Miller, Trópico de Cáncer (1934), 384 págs.