¿Piensas escalar el cielo? Las cosas buenas las obtenemos

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¿Piensas escalar el cielo? Las cosas buenas las obtenemos haciendo cosas buenas y correctas, en coherencia
con nuestra fe. Cada uno construye el cielo o el infierno que quiera vivir eternamente.
Lectura del libro de Isaías (7,1-9):
Reinaba en Judá Acaz, hijo de Yotán, hijo de Ozías. Rasín, rey de Damasco, y Pecaj, hijo de Romelía, rey de Israel,
subieron a Jerusalén para atacarla; pero no lograron conquistarla. Llegó la noticia al heredero de David: «Los
sirios acampan en Efraín.» Y se agitó su corazón y el del pueblo, como se agitan los árboles del bosque con el
viento. Entonces el Señor dijo a Isaías: «Sal al encuentro de Acaz, con tu hijo Sear Yasub, hacia el extremo del
canal de la Alberca de Arriba, junto a la Calzada del Batanero, y le dirás: "¡Vigilancia y calma! No temas, no te
acobardes ante esos dos cabos de tizones humeantes, la ira ardiente de Rasín y los sirios y del hijo de Romelía.
Aunque tramen tu ruina diciendo: "Subamos contra Judá, sitiémosla, apoderémonos de ella, y nombraremos en
ella rey al hijo de Tabeel." Así dice el Señor: No se cumplirá ni sucederá: Damasco es capital de Siria, y Rasín,
capitán de Damasco; Samaria es capital de Efraín, y el hijo de Romelía, capitán de Samaria. Dentro de cinco o seis
años, Efraín, destruido, dejará de ser pueblo. Si no creéis, no subsistiréis."» Palabra de Dios
Sal 47
R/. Dios ha fundado su ciudad para siempre
Grande es el Señor y muy digno de alabanza
en la ciudad de nuestro Dios,
su monte santo, altura hermosa,
alegría de toda la tierra. R/.
El monte Sión, vértice del cielo,
ciudad del gran rey;
entre sus palacios,
Dios descuella como un alcázar. R/.
Mirad: los reyes se aliaron
para atacarla juntos;
pero, al verla, quedaron aterrados
y huyeron despavoridos. R/.
Allí los agarró un temblor
y dolores como de parto;
como un viento del desierto,
que destroza las naves de Tarsis. R/.
Lectura del santo evangelio según san Mateo (11,20-24):
En aquel tiempo, se puso Jesús a recriminar a las ciudades donde había hecho casi todos sus milagros, porque
no se habían convertido: «¡Ay de ti, Corozaín, ay de ti, Betsaida! Si en Tiro y en Sidón se hubieran hecho los
milagros que en vosotras, hace tiempo que se habrían convertido, cubiertas de sayal y ceniza. Os digo que el día
del juicio les será más llevadero a Tiro y a Sidón que a vosotras. Y tú, Cafarnaún, ¿piensas escalar el cielo? Bajarás
al infierno. Porque si en Sodoma se hubieran hecho los milagros que en ti, habría durado hasta hoy. Os digo que
el día del juicio le será más llevadero a Sodoma que a ti.»
Palabra del Señor
Oración y petición
Padre Celestial perdona a tu pueblo desobediente y soberbio, ayúdanos a ser dóciles a tus llamados para no
seguirte ofendiendo más, te pedimos por todos los niños y jóvenes del mundo, que andan vacíos espiritualmente
y derrama tus gracias y virtudes sobres sus padres para que los conduzcan por el camino de la salvación.
Santísima Virgen María, Madre del perdón guía nuestros pasos hacia tu amado hijo Jesucristo para ganarnos la
gloria eterna. Amen
Reflexión y meditación
Nuestro Señor Jesucristo nos confirma una vez más, la existencia del cielo y el infierno. No hay duda que con
nuestro comportamiento podemos ganar la gloria o la condenación eterna. Muchos que dicen creer en Cristo,
no creen en las palabras de Jesucristo y tratan de hacer caso omiso a ellas, o lo que es peor, tratan de maquillarlas
de tal manera que justifiquen su mal comportamiento, dando a entender que todos iremos al cielo, así hayamos
cometido toda clase de barbaries humanas; pero quienes le creemos y creemos en Jesucristo, siempre
tendremos muy claro, que si nos portamos mal y desobedecemos los Mandatos de Dios, no podemos esperar
gozar de la gloria eterna. Recordemos que Dios es un Padre misericordioso, pero también es un Padre justo, y
no podemos hacer el mal y pretender que Él nos aceptará nuestro mal comportamiento, ese no sería un buen
Padre y se convertiría en alcahuete de nuestros malos actos.
Sodoma fue destruida por la ira de Dios por el pecado que azotaba a este pueblo, la desobediencia a los
Mandatos de Dios la llevó a confundir el libre albedrío en libertinaje al punto que la bajeza humana llegó al
límite, que lo mejor que pudo hacer Dios fue exterminarla para no sufrir con tanta abominación. Si nuestros
pueblos y ciudades siguen en este plan de desconocimiento total a Dios, de desobediencia y soberbia a sus
Mandamientos, talvez nuestro futuro no será mejor que el de Corozaín, Betsaida, Sodoma, Gomorra y
Cafarnaum, porque aunque nos cueste trabajo aceptarlo, también estos llamados de nuestro Señor Jesucristo
son para nosotros. Él nos invita a la conversión, nos invita a dejar de lado tanta indiferencia a sus llamados y a
empezar una vida de cambio, una vida más humana y espiritual, a dejar de lado tanto materialismo y modernismo
que está acabando con la fe y destruyendo el alma de todos sus hijos.
Si todos queremos ir al cielo debemos trabajar para ganarlo, y la mejor forma es escuchando a Dios, conociéndolo
a través de sus Palabra y viviendo plenamente sus Sacramentos y Mandamientos, no podemos llevar una vida
relativa, no podemos decir que somos Católicos Cristianos cuando apoyamos todas esas leyes que se han
inventado los hombres para degradar la Leyes de Dios. El infierno está lleno de personas que han contrariado a
Dios y se han dejado llevar por el demonio por la soberbia y el orgullo y que no aceptan que procedemos de un
Ser supremo, a quien le debemos nuestra existencia y algún día volveremos ante Él a dar cuenta de nuestros
actos. Oremos mucho para que todos los pueblos más alejados de Dios conviertan su soberbia en humildad y
empiecen un camino de conversión, por el bien de todas las familias, jóvenes y niños que están creciendo en una
esterilidad espiritual increíble, que no les permite siquiera ser solidarios con sus propios hermanos. Recordemos
que todos acudiremos al juicio personal ante Dios, así nos lo confirma nuestro Señor Jesucristo cuando nos dice:”
Os digo que el día del juicio le será más llevadero a Sodoma que a ti.”. Él solo quiere nuestra salvación y compartir
con nosotros la gloria eterna, pero depende de cada uno de nosotros si lo queremos seguir o por el contrario,
hacemos caso omiso a sus llamados.
Propósito
Preocuparme por enriquecer más mi alma que mi cuerpo, dejar de lado todo aquello que me aleja de la gloria
eterna en el cielo.
Frase del día: "Nadie niega a Dios, sino aquel a quien le conviene que Dios no exista".
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