Resumen de Víctor Bulmer-Thomas, La historia económica de América Latina desde la independencia, caps. IX y X. Capítulo IX: El desarrollo hacia adentro en el período de posguerra. Puntos generales Se puede, esquemáticamente, separar el curso que eligieron seguir los países latinoamericanos en la década de 1950 y mediados de la del ‘60, en dos cursos excluyentes: - - Desarrollo hacia adentro: Se tratan de repúblicas en general grandes, con mucho mercado interno y que habían pasado por una época de ISI (industrialización por sustitución de importaciones) en los años ’30. Bulmer Thomas los llama LA6, porque son 6 países: Argentina, Brasil, Chile, Colombia, México, Uruguay. Los que eligieron este camino fueron estimulados por los economistas y “tecnócratas” de la CEPAL (Comisión económica para América Latina) que era muy influyente en el período. El principal motivo para seguir este camino era la experiencia de que si se dependía del mercado externo se era muy vulnerable a los shocks de éste. Desarrollo hacia fuera: Países más pequeños que por lo general no contaban con una base industrial medianamente grande. Se decidieron por intensificar o incluso diversificar las exportaciones existentes. Su modelo de desarrollo estaba fomentado por las instituciones del FMI y el Banco Mundial. Se los denomina LA14. Los argumentos que presentaba la CEPAL eran: 1) Los términos del intercambio estaban muy deteriorados y por lo tanto no se podía lograr desarrollo guiado por exportaciones. Esto quería decir que en el mercado internacional los países latinoamericanos estaban “condenados” a vender materias primas o productos primarios baratos – por ventajas comparativas – y recibir productos manufacturados mucho más caros. La solución eran políticas tipo ISI. 2) Los países que siguieron estas políticas eran países que ya habían pasado por cierto tipo de período de ISI en los años ’30, lo cual había mostrado efectos benignos sobre el producto y el empleo, lo cual en la conciencia colectiva coadyuvaba a que las políticas fueran tomadas. Sin embargo Bulmer-Thomas resalta que habían pasado por la “etapa fácil” de la ISI, período en el cual se sustituían los bienes de consumo no durables que antes eran importados. Sin embargo una vez que este período se consuma deben ser sustituidos los bienes de capital lo cual es mucho más complicado. Los problemas más agudos que presentaron cada uno de los modelos de desarrollo fueron: 1) para los que siguieron el modelo hacia adentro, crisis de balanza de pagaos, presiones inflacionarias y conflictos laborales y 2) los que siguieron el modelo exportador, crisis de balanza de pagos, vulnerabilidad a shocks externos. Tanto unos como otros tendieron, para solucionar estos problemas, a elaborar propuestas de integración regional. ¿Qué tenían en común ambos grupos como condiciones iniciales? Alta desigualdad en la distribución del ingreso No mejoró sustancialmente para fines de la década del ’60. El modelo de desarrollo hacia adentro ¿Cómo fue la “etapa fácil” de la ISI en la década del ’30? Se explica sobre todo porque después del crack del 29 y con un comercio internacional deprimido los países de la región sufrieron problemas de balanza de pagos y tuvieron que empezar a restringir las importaciones lo cual creó un ambiente propicio para la creación de una industria de bienes de consumo no durables. Sin embargo este proteccionismo que siguieron los países tenía su causa profunda en problema de balanza de pagos y no en un interés por desarrollar la industria, lo cual fue más una consecuencia indirecta. En esta ocasión era diferente. La diferencia se ve en que en los ’30 las medidas proteccionistas fueron mucho más “ad hoc”, es decir, tipos de cambio múltiples, prohibiciones, cuotas. En los ’50 se les busca dar más racionalidad económica, además de que el contexto era distinto: en los ’30 los países desarrollados estaban tomando medidas proteccionistas mientras que en los ’50, por las directivas del GATT, se estaba liberalizando el comercio. ¿Se logró dar racionalidad al proteccionismo? Bulmer-Thomas argumenta que no del todo, pues el fin era la industrialización y no se consiguió un plan coherente para permitir a los industriales importar insumos necesarios para la producción. ¿Cómo reaccionó el sector privado nacional a estas políticas? No sustituyó, lógicamente, todos los bienes que antes eran importados. Sus problemas principales eran: 1) no tuvo acceso al financiamiento, recordemos que en esta época el capital no estaba tan globalizado como habría de estarlo después y conseguir crédito era difícil. 2) Carecía de tecnología necesaria. Esto llevó a que el Estado permitiera la entrada de las Empresas Multinacionales (EMN) que tenían aquello de que carecían los industriales nacionales: tecnología, habilidad gerencial y acceso al financiamiento. Otra respuesta del Estado ante la falta de reacción – entendible – de los industriales nacionales fue la creación de empresas creadas por el estado. Este tipo de compañías producían y distribuían servicios del tipo de: energía, transporte y comunicaciones los cuales muchas veces eran complementarios con respecto a muchas de las industrias nacionales incipientes. Resultados generales en los países que aplicaron el modelo desarrollo hacia adentro: - - - - - El sector industrial creció en todos ellos, como porcentaje del PBI. El sector industrial fue ineficiente, en el sentido de que tuvo que a) comprar insumos importados muy caros y b) vendía sobre todo en el mercado nacional en el que contaba con protecciones. El mercado era chico, lo que llevaba a que las empresas fueran de tamaño subóptimo. Esto último sumado a una sobrevaluación del tipo de cambio real hacía que era muy difícil que estas empresas terminaran exportando. Si bien no era el interés principal sí hubiera servido para mejorar la situación de balanza de pagos. Del hecho de que el tipo de cambio real estuviera sobrevaluado se seguía que tampoco se exportaban aquellos productos en los que la producción sí era eficiente, es decir, productos primarios. En estos países la política monetaria – a la cual los gobiernos latinoamericanos fueron muy proclives –incentivaba la demanda, que no se podía destinar a importaciones por las dificultades inherentes al modelo, lo que hacía que se demandaran productos internos lo cual era una fuente de fuertes presiones inflacionarias. Los problemas principales, entonces, en los años ’50 para este tipo de países fueron problemas en balanza de pagos más presiones inflacionarias (en sí las presiones inflacionarias hacían subir la apreciación real, lo cual empeoraba aún más la situación de balanza de pagos). Esto llevó a que los gobiernos tuvieran que negociar con el FMI por su problema de balanza de pagos, pero estos acuerdos tendieron a fracasar. El FMI les pedía que “exporten” para lo cual era necesario de alguna manera resignar el objetivo de la industrialización. El modelo de desarrollo hacia fuera Algunos de estos países habían intentado políticas del tipo ISI en los años ’30 pero, a diferencia de los del primer grupo, habían fracasado. Por ejemplo Perú, Paraguay o Bolivia. Esto para responder a la pregunta de por qué siguieron este modelo. Una distinción que hace Bulmer-Thomas hacia dentro de este grupo es entre aquellos que buscaron 1) intensificación de las exportaciones, referidas siempre a productos tradicionales y primarios. Por ejemplo Venezuela (petróleo), Cuba (azúcar) y Bolivia (estaño) y 2) intensificación más diversificación. Los países que intentaron esto, en parte por malas experiencias con respecto a la vulnerabilidad de depender de un solo mercado, fueron Paraguay, Ecuador y Perú. No hay que pensar que los países que siguieron este tipo de desarrollo olvidaron completamente el objetivo de la promoción industrial. Muchas veces el Estado subsidió a la industria con créditos, menos impuestos o bajos aranceles a la importación de inputs. Resultados general de los países que adoptaron el modelo de desarrollo por exportaciones: - - Las exportaciones subieron medidas en dólares Tuvieron tipos de cambio estables Inflación estable En estos países, que al igual que los primeros siguieron política monetaria no ortodoxa, al estar más liberalizado el comercio, la emisión no era tan propensa a generar inflación. Sí se reflejó en más importaciones y por lo tanto más problemas en la balanza de pagos. Esto hizo que muchas veces el FMI interviniera en estos países, con más éxito que en los del primer grupo. Tuvieron alguna ISI pero con los mismos tipos de problemas de ineficiencia que en el primer grupo. En este caso los mercados internos no estaban tan protegidos como en el primero y esto, sumados a que los mercados eran inherentemente más chicos (esta es una cualidad bastante general de los LA14, hizo que fuera más difícil la ISI. La integración regional Como se vio al principio, fue una salida que eligieron tanto los países del LA6 como los del LA14. Surge como posible salida al problema de que muchas de las industrias nacionales, por más de contar con mano de obra barata, eran ineficientes por el tamaño del mercado y las posibilidades de exportación. Muchos países seguían dependiendo de la exportación de sus productos primarios para tener estabilidad en la balanza de pagos. El objetivo de integración fue promovido desde la CEPAL. Las ideas eran: a) abolir barreras arancelarias y no arancelarias para ampliar el mercado interno lo que llevaría a b) explotar mejor las economías de escala, es decir, solucionar el problema de empresas con tamaño sub-óptimo. La idea para lograr esto era proteger la industria regional contra la extra-regional. Resultados generales de los programas de integración regional: - Los países que logran reemplazar importaciones extra regionales por producción nacional y exportaciones intra regionales ganan de este “mercado interno artificial”. - - En cambio, los que terminan reemplazando importaciones extra regionales baratas por importaciones intra regionales caras pierden. La historia general de estos modelos institucionales de integración en los ‘50/60 es de fracaso. Por ejemplo el PA, MCCA y el ALALC. Sin embargo de la mano no-institucional, es decir privadas, el comercio intra regional de bienes industriales y primarios sí creció. Este aumento del mercado intra regional y de la producción siempre tuvo como límite que no se aumentó sustancialmente el tamaño de las instalaciones ni la forma de producir. Esto se explica por miedo de los empresarios a políticas impredecibles más el hecho de que el comercio intra regional era de por sí procíclico y mucho más volátil que el extra regional. Crecimiento, distribución del ingreso y pobreza En este sub-capítulo se analizan algunos rasgos sociológicos y de cambio de la región en esta época, muchas veces concomitantes al desarrollo económico. Algunos de estos rasgos son: a) Explosión demográfica, debida en parte a una leve mejora en la natalidad pero a un mucho mayor descenso en la mortalidad. b) Hubo crecimiento del PBI per cápita sostenido en las décadas del ’50 y ’60 en la región. c) Menos analfabetismo, más escolarización d) No mejoró la distribución del ingreso. Esto no quiere decir que los pobres se volvieron más pobres sino que el crecimiento del pbi per cápita que vimos no se distribuyó homogéneamente. Se explica por desigualdades básicas en la tenencia de la tierra y educación. Capítulo X: Nuevas estrategias comerciales y crecimiento basado en la deuda. Puntos generales El talón de Aquiles del desarrollo hacia adentro había sido la balanza de pagos, con lo cual en la segunda mitad de la década del 60 y la década del ’70 la tendencia entre los países latinoamericanos tiende a ser la liberalización del comercio. El contexto en el cual deciden abrirse tiene como ventaja que el comercio internacional está en auge, debido a las nacientes multinacionales y ambiente de liberalización fomentado por el GATT, sumado a que por el exceso de liquidez que había en el mundo los precios iban en alza. Como desventaja el hecho de que el período está atravesado por la crisis del petróleo del ’73. Un argumento muy convincente en la época para el desarrollo guiado por las exportaciones había sido la experiencia de los países del sur-este asiático como Taiwán o Sur-Corea. Sin embargo por más que la tendencia general de desarrollo por exportación es la misma, Bulmer-Thomas encara el análisis distinguiendo tres corrientes, las cuales tienden al mismo resultado desastroso, la crisis de deuda de 1982: a) la promoción de exportaciones, b) la sustitución de las exportaciones y c) el desarrollo de la exportación de productos primarios. “La promoción de las exportaciones trataba de injertar las exportaciones manufacturadas en el modelo que miraba hacia adentro; la sustitución de exportaciones tendía a desviar recursos de los sectores protegidos, y el modelo de desarrollo guiado por la exportación de productos primarios intentaba explotar el alza mundial de precio de los bienes. Pero ninguno de los tres logró gran éxito; no cesó la pérdida de la participación en el comercio mundial, y la región se volvió cada vez más dependiente de los préstamos extranjeros para impulsar su crecimiento económico. La combinación de un pequeño sector de exportaciones y crecientes obligaciones del servicio de la deuda resultaría desastrosa cuando, finalmente, se produjo en 1982 la crisis de la deuda” (pág. 378). Promoción de exportaciones Los países que elijen este rumbo son: Argentina (hasta 1976), Brasil, Colombia, México, Haití y la República Dominicana. Como se ve hay una semejanza casi total entre los países que habían seguido el modelo de desarrollo hacia adentro y luego se definen por la promoción de exportaciones. El más exitoso según Bulmer-Thomas es Brasil que incluso llega de desarrollar una eficiente industria automotriz. Bulmer-Thomas señala que muchos de estos países, que fueron los que menos resignaron el objetivo industrial, tuvieron problemas cambiarios. Por un lado por la inflación tradicional, de origen monetario, y por otro problemas de enfermedad holandesa - Bulmer-Thomas no usa el mismo término pero da ejemplos en que un bien nacional percibe un shock y esto lleva a la apreciación cambiaria – todos los cual tuvieron como resultado monedas sobrevaluadas lo cual era malo para el objetivo que se proponían. ¿Se cambió el esquema básico de la ISI? No tanto, la estrategia no tendía tanto a reducir la protección ofrecida a las empresas que vendían en el mercado protegido cuando a aumentar los incentivos para las que exportaran sus productos. ¿Qué ganaron con respecto al esquema de integración regional? Se estabilizaron las ganancias por exportaciones, lo cual estabilizó la balanza de pagos. ¿Quién ganó del tipo de industrialización seguido en esta época? Sobre todo los deciles superiores pues, salvo en Colombia, las industrias eran capital-intensivas más que mano de obra-intensivas con lo cual lo que subió fue la renta al capital. ¿Por qué fracasa este tipo de estrategia comercial para Bulmer-Thomas? Aunque se reconocían las ventajas de la devaluación el tipo de cambio muchas veces estuvo por debajo de lo que debería haber estado si se querían tener exportaciones competitivas. Una segunda razón fue que muchas veces las políticas a largo plazo que exigía este tipo de estrategia algunas veces entró en conflicto con las medidas de estabilización que exigían los problemas internos: por ejemplo la inflación. Sustitución de exportaciones (de hecho un programa de ajuste) “Se basaba en la idea de que el desarrollo económico de América Latina había sido gravemente distorsionado por la ISI, la intervención del Estado y el corporativismo. Se consideró que la solución estaría en el giro hacia un medio más orientado al mercado y menos protegido, que llevaría a eliminar la tendencia anti exportadora. Entonces, las economías serían más abiertas y quedarían mejor integradas al mercado mundial; los precios internos estarían en mayor armonía con los internacionales. La reducción del proteccionismo y la eliminación de la tendencia anti exportadora favorecerían los productos exportables e inhibirían los importables.” (pág. 388). Fueron medidas tomadas en los países del Cono Sur, Argentina post-1976, Chile y Uruguay. Estas políticas atravesaron un primer momento de éxito en el cual las exportaciones aumentaron rápidamente, más que lo que lo hicieron las importaciones. La lucha contra la inflación fue una prioridad para este tipo de políticas. Las medidas fueron: a) Se atacó el déficit fiscal mediante un recorte en el gasto y se bajó la tasa de emisión. Sin embargo este programa estabilización no tuvo éxito. Esto llevó a b) liberalización de la balanza de pagos, para equilibrar la oferta y demanda de dinero “automáticamente” y para que los precios nacionales armonizaran con los internacionales. La idea detrás de este último tipo de razonamiento es que el tipo de cambio desempeña un papel crucial en el sistema de precios y como determinante principal de las expectativas inflacionarias Programa tipo TABLITA. Este último plan tampoco fue exitoso El tipo de cambio se valuaba constantemente La situación de balanza de pagos iba empeorando a la par Los déficit fiscales se financiaban con préstamos comerciales del exterior. (ver texto de Eichengreen, Globalizing capital para entender cómo era el contexto). Como comentario final cabe decir que además del progresivo endeudamiento las políticas de sustitución de exportaciones tuvieron como resultado la desindustrialización del país pues las importaciones reemplazaron la producción interna de bienes manufacturados. El desarrollo de exportaciones primarias Esta estrategia, la que más dependía de las exportaciones y más se alejaba de un esquema tipo ISI, se basó en que los países presentaban un sector industrial que no se pensaba que fuera a resistir una liberalización del comercio y del hecho de que los precios de muchos de los productos tradicionales para América latina estaban en alza. Fue común en estos países el error de pensar que estos sería los precios relativos a largo plazo, lo cual les llevaba a financiar déficits de balanza de pagos con créditos que pensaban iban a poder repagar. El Estado, la empresa pública, y la acumulación de capitales La relación entre Estado y sector privado durante el período del capítulo (60’s y 70’s) fue la de un sector público que consideraba que tenía que apoyar a las empresas privadas. Estas últimas buscaban en el primero “privilegios, protección e inversiones complementarias, y el rango de intervención del Estado fue haciéndose más vasto y más complejo con cada cambio del modelo de desarrollo prevaleciente” (pág. 407). Entonces las empresas privadas tendieron a producir bienes de consumo mientras que el Estado se basó en producir bienes intermedios o de capital para los cuales el sector privado no había presentado interés. El efecto que esta oleada de inversiones públicas tuvieron en América latina durante la década de los ’70 llegó a tal punto de que el porcentaje de inversiones sobre PBI fue mayor al 20%, una tasa muy alta comparada incluso con los países desarrollados. ¿Era sostenible? Bulmer-Thomas argumenta que no: “La base, fincada en las arenas movedizas de los préstamos bancarios internacionales, habría de resultar sumamente frágil hasta que se desplomó durante los ochenta. Además, la disminución de los préstamos bancarios no sólo redujo el alcance de la inversión pública, sino que también socavó todo el modelo de acumulación de capital en que se había fundamentado el desarrollo latinoamericano”. (pág. 415). El crecimiento basado en la deuda Fracaso de las multinacionales como fuente de acumulación de capital No solían re-invertir en el país. ¿Quién les presta a los gobiernos latinoamericanos? Tradicionalmente se había tratado de préstamos oficiales que podían ser o bien de gobiernos individuales o de orígenes multilaterales – FMI o Banco Mundial. Sin embargo a fines de la década del ’70 el sistema financiero internacional había cambiado. En esta época “a los bancos extranjeros les resultaron atractivos los préstamos a América Latina. El origen de este cabio puede encontrarse en la formación del mercado de eurodólares, el cual generó un inmenso fondo de liquidez internacional bajo control de bancos internacionales, y para el cual había que encontrar prestatarios. Financiado al principio por déficits comerciales de Estados Unidos y engrosado después por los inmensos déficits presupuestales de ese país, relacionados con la Guerra de Vietnam, los depósitos de eurodólares brincaron de 12 mil millones de dólares a finales de 1964, a 57 mil millones a finales de 1970.” Pág. 417. Un shock posterior fue el aumento de liquidez producido por los “petrodólares” que había en el sistema financiero internacional después de la crisis del petróleo de 1973. Parte aguas. La segunda crisis del petróleo hizo que los países desarrollados cayeran en recesión, arrastrando a la baja el precio de los bienes y provocando un arcado deterioro para los términos de intercambio de los países latinoamericanos importadores de petróleo. Esto tuvo como consecuencia que las ganancias por exportaciones de los países latinoamericanos eran cada vez menos mientras la deuda seguía acumulándose. Aquí hay un grado de irresponsabilidad en los bancos privados que siguieron pagando aún ante esta negra perspectiva del futuro de la balanza de pagos latinoamericana. Las importaciones siguieron creciendo, sostenidas por la deuda, mientras los capitales nacionales salían aceleradamente por temor a una devaluación inminente. El resultado de esto es la crisis de deuda de 1982 con la que cierra el capítulo.