Celos: ¿actitud normal o patología?

Anuncio
Celos: ¿actitud normal o patología?
{loadposition articulos_topchat}
No es raro encontrar en una pareja, momentos o situaciones que desencadenen los celos. En
un mundo donde la gratificación instantánea impera, donde se glorifica el sexo impersonal o
casual y donde las redes sociales permiten la socialización con personas, que de no existir
dichas redes, jamás se conocerían, elevan la ya alta probabilidad de aparición de los
celos
en la pareja. Pero, ¿que son los
celos
?¿su alta probabilidad de aparición denota que es normal?¿si no existen
celos
, entonces no nos importa la persona, como muchos predican?. En
Celos: ¿actitud normal o patología?
, hablaremos un poco de lo que son los
celos
, cuál es su origen y debatiremos acerca de su normalidad o anormalidad.
Todos tenemos una idea de lo que son los celos, porque absolutamente todos los hemos
sentido. A menos que vivas en una isla solitaria o algo ande terriblemente mal, todos tenemos
sentido de pertenencia a un lugar o grupo social. Este sentido de pertenencia va en doble
sentido; es decir, yo pertenezco a este grupo y este grupo me pertenece. Cuando algo o
alguien amenaza este sentido de pertenencia, aparece una serie de sensaciones y conductas
que la mayoría conocemos como
celos.
En un esfuerzo por realizar una conceptualización más estructurada, podríamos decir que los c
elos
son una respuesta emocional, que deriva en una serie de conductas, ante una amenaza que
gravita sobre una relación, a menudo, amorosa, cuya valía, calidad o capacidad para satisfacer
nuestra necesidades, nos lleva a quererla mantener a toda costa.
Algo que debemos entender es que los seres humanos pertenecemos al reino animal.
Específicamente pertenecemos a una familia que es altamente social, como lo es la familia de
los primates. El sentido de pertenencia del cual hablamos antes, es necesario para que la vida
en sociedad se dé. Recordando también que es gracias a esta socialización, por lo cual el ser
1/6
Celos: ¿actitud normal o patología?
humano ha logrado sobrevivir hasta nuestros días, este sentido de pertenencia cobra aún más
valor.
En el caso de las parejas, cuando este sentido de pertenencia se ve amenazado, es decir,
cuando un miembro de la pareja deja de poner atención al otro miembro, por ver a otro
individuo, se desencadenan las respuestas emocionales y conductuales que caracterizan a los
celos
. Esto tiene una función de supervivencia, especialmente desde el punto de vista evolutivo,
pues para nuestros antepasados, el mantener una o varias parejas estables le aseguraban el
paso de su material genético a la siguiente generación. Si algo amenazaba este status quo, se
debía actuar para eliminar ese peligro.
Por supuesto, los celos no son exclusivos de los humanos. Prácticamente todos en la familia
de los primates tienen alguna conducta que denota dicha emoción. Y en el resto del reino
animal, también existen conductas comparables a los
celos, aunque
son más vistas como despliegues de protección territorial.
A todo esto que hemos hablado, debemos sumarle que aun en los estadios más primitivos o
tempraneros de la experiencia humana, que cada uno de nosotros tenemos, desplegamos el
celo, reflejado en la búsqueda de atención por parte de nuestros padres. En psicología se le
denomina como celo infantil. Cualquier padre que ha tenido hijos con 5 o menos años de
separación, recordarán la conducta que desplegaba el hijo que ya estaba en este mundo, al
momento de saber que tendría un hermanito. Por supuesto no siempre era muy negativa, pero
si se presentaban conductas muy peculiares como cambios de humor injustificables,
negativismo, poca cooperación a la hora de comer o dormir, etc.
Así pues, con todo lo que hemos expuesto anteriormente, podemos llegar a una conclusión; los
celos son naturales en el ser humano. Podemos ir más allá y decir que, las actitudes que
crean la emoción denominada
celos, son normales en la vida de pareja.
Sin embargo, como en el resto de emociones presentes en la experiencia humana, la situación
no es tan simple.
Podemos entender los celos como un mecanismo de defensa que todos tenemos, y que en su
2/6
Celos: ¿actitud normal o patología?
forma más adaptada, nos ayuda a mantener la atención en la pareja, nos motiva a mantener
los detalles que protegen la llama del amor y en general ayuda a la unión en la pareja. Pero
como toda emoción o mecanismo de defensa, los
celos tienen un
lado desadaptado que se puede presentar en muchas personas.
Como ya hemos explicado en otros artículos, existe una fina línea entre un despliegue de
emociones como mecanismos de defensa adaptado, que nos ayuda a vivir mejor y un
despliegue de emociones destructivas y desadaptadas que convierten nuestra vida en un
infierno. Y esa fina línea es explicada en una sola palabra: Intensidad.
La diferencia entre los celos normales y los celos enfermizos, o celopatía, es la intensidad con
que se vive. Esta intensidad por supuesto es influenciada por una serie de factores complejos,
que van desde las propias experiencias personales (negativas), la percepción que tenemos de
nuestro mundo, la personalidad que poseemos, la forma en que pensamos y hasta, muchas
veces, el contexto social en el que nos desenvolvemos.
Podríamos decir que no es lo mismo sentir celos a ser celoso, así como sentir incomodidad no
es lo mismo que ser amargado o sentir tristeza no es lo mismo que ser depresivo. Podemos
distinguir a una persona
celosa pues posee
unas características muy definidas, que en
Celos: ¿actitud normal o patología?
te mostraremos:
- Baja autoestima: Los celosos usualmente poseen un mal concepto de ellos mismos o
no se creen merecedores de tener la pareja que tienen. Debido a que sienten que son “poca
cosa” o nada atractivos, siempre tienen en la mente que todos los demás son mejores que ellos
y por ende la pareja puede fácilmente decantarse por los demás.
- Desconfianza: Usualmente son personas que creen que por defecto, todas las personas
les mienten. Y esto se hace más fuerte con la pareja. Por supuesto, todos somos capaces de
mentir, eso es lógico. Pero ellos llevan esta realidad a parajes irreales, donde creen que todo lo
que la pareja les dice es mentira.
- Controladores: Todas las parejas desean saber qué hace la persona dueña de su
afecto. Pero en las personas
celosas, debido a la desconfianza que
tienen, la pregunta ¿Qué has hecho hoy? abre las puertas a una sesión inquisitoria donde
itinerarios detallados de lo que se hace cada día, cuando no están con ellos, son requisitos
para mantener a la pareja tranquila. Si acaso se piensa salir a socializar sin la pareja, se da
una avalancha de llamadas para saber que se está haciendo, donde y con quien se está.
3/6
Celos: ¿actitud normal o patología?
- Poco respeto a la privacidad y posesividad: Las personas celosas, deforman el
sentido de pertenencia, al punto de creer que la relación de pareja implica fusionarse. En este
sentido, para la persona
celosa
, la vida en pareja carece de espacios privados. Esto también es potenciado por la falta de
confianza, ya que si la persona tiene “escondites” es más fácil que intente algún acto de
infidelidad o de dejarla.
- Distorsión de la realidad: Debido a la baja autoestima y la desconfianza extrema, las
personas
celosas perciben buena parte de las situaciones
sociales en que se desenvuelve la pareja como una amenaza constante. Lo que puede ser un
elogio al jefe en busca de un beneficio laboral, puede ser visto por el celoso, como un coqueteo
descarado. Las palabras de aliento a un amigo en problemas, pueden ser percibido como
declaraciones de amor, etc. La objetividad no existe para los
celosos
.
El celoso puede ir más allá y tomar situaciones sin conexión, tergiversarlas y utilizarlas como
supuesta evidencia de una infidelidad. Pueden llegar a crear una fantasía tan grande que raya
en la alucinación.
- Violencia: Esta característica se da más en los hombres. Aquí se hace uso de la
“superioridad” física para intimidar a la pareja y “obligarla” a hacer lo que se quiere, en este
caso, que no mire a potenciales nuevas parejas. Lo ocupa también como un medio de control
para que la pareja le diga todo lo que hace y la piense dos veces antes de hacer algo que lo
perjudique.
- Manipulación emocional: Método más común en las mujeres. Se busca mantener la
atención de la pareja por medio de la manipulación de sus emociones; casi siempre de culpa.
En este caso la persona
celosa, se enviste con la
caracterización de víctima, haciendo uso de viejos clichés alusivos a la infidelidad o al
abandono emocional por parte de la pareja.
- Problemas emocionales: Usualmente las personas celosas acarrean un historial de
problemas afectivos, como ansiedad, depresión, estrés excesivo, etc.
- Experiencias personales negativas: Buena parte de las personas celosas, han tenido
alguna experiencia real de infidelidad comprobada o abandono. Esta experiencia ha sido tan
traumática y tan mal manejada, que permeará todas sus relaciones a futuro a menos que
busque ayuda. Hay que aclarar que no todas las personas
4/6
Celos: ¿actitud normal o patología?
celosas
pasan por esta característica, puesto que en muchas ocasiones creen haber sido engañados,
pero nunca lo comprobaron, porque en la realidad, todas las supuestas pruebas, son en
realidad ideaciones y mal interpretaciones que el mismo individuo crea. Solo una parte, tiene
experiencias negativas reales.
En algunos casos puede ser que las experiencias negativas que sufrieron las personas celosa
s
, no
sean directas, es decir, que no las sufrieron ellos, pero fueron testigos de esas experiencias.
En este caso, hijos de padre divorciados donde uno de ellos fue infiel. Esta experiencia puede
marcar a la persona para desconfiar siempre de todo el mundo.
Conclusión:
En Celos: ¿actitud normal o patología? te hemos explicado lo que son los celos y de donde
viene, así como cuáles son las características de aquellas personas que sufren
celos
que son patológicos. Al final podemos decir que los
celos
pueden pasar de una actitud normal y hasta positiva a una patología, dependiendo de que
decidamos o que hemos aprendido a hacer con esta emoción. Si decidimos controlar la
emoción, ver las cosas de forma objetiva y utilizarla, no para reprocharnos o hacernos menos
que los demás, sino para mejorar y enamorar más a nuestra pareja, entonces nuestros
celos
serán adaptados. Si no es así, bueno, ya hemos explicado cómo se comportan los
celópatas
. ¿Te identificas? Recuerda que en micompanero.com estamos para escucharte y ayudarte a la
luz de la psicología.
{loadposition firma_rdiaz}
5/6
Celos: ¿actitud normal o patología?
6/6
Descargar