REGISTRO GENERAL DE AUDITORES DEL CONSEJO SUPERIOR DE TITULADOS MERCANTILES Y EMPRESARIALES DE ESPAÑA. Servicio de consultas Número consulta: 500 Fecha consulta: 20.03.03 Fecha respuesta: 14.04.03 Formulada por: XXX Materia: Contabilidad. Submateria: Juntas de compensación CONSULTA PLANTEADA: Normativa aplicable a las Juntas de Compensación en lo que se refiere a las obligaciones contables de las mismas. NORMATIVA EXAMINADA: 1º. Código de Comercio. 2º. Plan General de Contabilidad. 3º. Adaptaciones sectoriales del PGC a las empresas constructoras y a las empresas inmobiliarias. 4º. RD 1/1992 de 26 de junio. 5º. Consulta número 2 del BOICAC 42. RESPUESTA: Les es de aplicación el Real Decreto Legislativo 1/1992, de 26 de junio, por el que se aprueba el Texto Refundido de la Ley sobre el Régimen del Suelo y Ordenación Urbana, en la medida en que no haya sido derogada por la Ley 6/1998, de 13 de abril, sobre Régimen del Suelo y Valoraciones. A pesar de la importancia que el sistema de compensación posee dentro del ámbito urbanístico, éste no ha sido tratado por la normativa contable hasta la fecha por lo que con carácter general le serán de aplicación el Plan General de Contabilidad. La consulta número 2 del BOICAC número 42 hace referencia a que las juntas de compensación “...se constituyen por los propietarios del terreno comprendido en el perímetro de actuación, teniendo por objeto la gestión y ejecución de la urbanización de los terrenos sobre los que actúa, de acuerdo con las condiciones y en los términos que se determinen en un plan o programa de actuación urbanística”. La junta de compensación actúa como fiduciaria sobre los terrenos a urbanizar que se le transfieren actúa con pleno poder dispositivo sobre las fincas pertenecientes a los propietarios miembros de las mismas, con las limitaciones que establezcan sus estatutos y bases de actuación previamente aprobados por el órgano de la administración estatal o autonómica competente. La junta realiza sobre el terreno aportado toda una serie de operaciones de urbanización con objeto de enajenarlo o devolvérselo a los propietarios en términos de equivalencia, por lo que no existe una verdadera adquisición sino más bien una cesión temporal. CONCLUSIÓN. Las adaptaciones sectoriales del Plan General de Contabilidad al sector constructor e inmobiliario pueden ser de aplicación en múltiples aspectos a algunas de las operaciones de este tipo de entidades. A falta de norma específica le serán de aplicación las obligaciones de llevanza de libros establecidas por el Código de Comercio con carácter general (libro de inventarios y cuentas anuales y libro diario), y con carácter particular lo que a tal efecto dispongan los estatutos. Algunos estatutos consultados establecen que dentro de los seis primeros meses los administradores de la junta deben presentar a los partícipes relación exhaustiva de cuentas, sin que quede especificado el formato y contenido de las mismas, aunque por sentido común esa relación exhaustiva de cuentas debe presentar el formato de balance de situación, cuenta de pérdidas y ganancias y una memoria explicativa que permita interpretar adecuadamente la información económica, financiera, patrimonial y de resultados contenida por el mencionado balance de situación y cuenta de pérdidas y ganancias. Por la presente y salvo opinión mejor fundado, damos respuesta a su consulta planteada. Esta respuesta tiene carácter orientativo, no supone un convenio de consultoría formal y no es vinculante por lo que no se asume responsabilidad directa ni subsidiaria por parte del Re.G.A. REGISTRO GENERAL DE AUDITORES DEL CONSEJO SUPERIOR DE TITULADOS MERCANTILES Y EMPRESARIALES DE ESPAÑA. Servicio de consultas Número consulta: 501 Fecha consulta: 20.03.03 Fecha respuesta: 14.04.03 Formulada por: XXX Materia: Auditoría. Submateria: Nombramiento de Auditores CONSULTA PLANTEADA: Una Sociedad en 1.999, nombró auditores titular y suplente, por nueva años, dicho acuerdo aparece inscrito en el correspondiente Registro Mercantil. Anualmente, se hace contrato de prestación de servicios de auditoría; se han realizado en los ejercicios 1.999, 2.000 y 2.001; respecto al ejercicio 2.002, no se ha podido realizar, porque desde el 3 de enero de 2.003, en que por Burofax se solicitó día y fecha para realizar el correspondiente inventario, no hemos tenido ninguna contestación al respecto. Sabemos que el consejo de administración ha cambiado, también han modificado su domicilio fiscal. ¿Si hemos sido nombrados auditores por nueve años: tiene la obligación la empresa de llamarnos para realizar los servicios de auditoría? ¿Pueden nombrar a otros auditores y en este caso deberán comunicárnoslo? ¿Qué responsabilidad podemos tener como auditores en el supuesto de que las cuentas que presenten no estén auditadas? ¿Si no nos contestan, podemos enviar nuestro contrato de auditoría anual? NORMATIVA EXAMINADA: 1º. Ley de Auditoría de Cuentas. 2º. Ley de Sociedades Anónimas. 3º. NTA sobre contrato de auditoría o carta de encargo. 4º. NTA sobre informes. 5º. BOICAC número 4, consulta 8. 6º. BOICAC número 13, consulta 2. RESPUESTA: Por regla general, la junta general de socios es el órgano competente para nombrar auditor antes de que finalice el ejercicio a auditar (cuando sea auditoría obligatoria), debiendo, en el caso de designar personas físicas, nombrar tantos suplentes como auditores titulares. Los auditores de cuentas son contratados por un periodo inicial determinado que ha de ser superior a 3 años e inferior a 9, contados desde la fecha en que se inicie el primer ejercicio a auditar. Una vez finalizado este periodo inicial, el mismo auditor puede ser contratado año a año (por acuerdo de junta general). Es preceptiva la firma de un contrato de auditoría, que entre otros aspectos, regule el periodo de tiempo determinado de duración del mismo. El artículo 204 del TRLSA establece que no es posible la revocación de los auditores por la junta general antes de que finalice el período para el que fueron nombrados, a no ser que medie justa causa. En el caso de cambio de auditores, con la designación y posterior inscripción en el Registro Mercantil de los nuevos auditores se entiende tácitamente revocado su nombramiento, pero ello no impide que los antiguos auditores puedan entablar las reclamaciones que consideren que en derecho les correspondan en aplicación de las cláusulas contractuales firmadas entre las partes. Los auditores, en su calidad de expertos independientes, pueden ser recusados por las mismas causas que las establecidas por los peritos en la legislación procesal civil. El auditor está obligado a emitir un informe de auditoría pudiendo encontrarse con limitaciones al alcance de su trabajo que le impidan aplicar los procedimientos requeridos por las normas técnicas de auditoría. Las limitaciones al alcance pueden estar motivadas por imposición de la entidad o por circunstancias sobrevenidas en el trabajo (negativa de la entidad a circularizar, negativa a presenciar el inventario, destrucción accidental de documentos, etc. que pueden llevar al auditor a emitir una opinión con salvedades o a emitir una opinión denegada por limitación al alcance de su trabajo, que puede llegar a ser total y absoluta cuando no le hayan facilitado las cuentas anuales objeto de examen. CONCLUSIÓN. En primer lugar, salvo interpretación errónea, se está incurriendo en un incumplimiento de la NTA sobre contrato de auditoría o carta de encargo al firmar con la empresa auditada un contrato de prestación de servicios cada año, puesto que debería haberse firmado un contrato inicial por toda la duración del mandato; esto es: por nueve años. Una vez que el auditor de cuentas ha aceptado su cargo, está obligado a cumplir el mandato recibido emitiendo los informes de auditoría correspondientes a los ejercicios a auditar. Del texto de la consulta no se desprende que al auditor le haya revocado la entidad auditada, puesto que no ha habido comunicación formal de la misma, por lo que hasta el momento solo estamos ante una limitación al alcance de su trabajo (inventario de existencias a la fecha de cierre del ejercicio a auditar), que deberá evaluar a la hora de emitir su informe. Si persistiese la negativa de la sociedad auditada a colaborar con el auditor y a facilitarle la realización de los procedimientos de auditoría que estimase oportunos podría estar ante una limitación total y absoluta al alcance de su trabajo que le obligaría a emitir un informe de auditoría con una opinión denegada. Sin embargo, la sociedad auditada ha podido designar nuevos auditores e inscribir su nombramiento en el Registro Mercantil, con lo que sería efectiva la revocación, lo cual no impediría al auditor acudir a los tribunales reclamando los daños y perjuicios que le haya podido ocasionar el incumplimiento de mandato. Para mayor tranquilidad del consultante se le recomienda que solicite una nota simple al Registro Mercantil para averiguar si la sociedad auditada ha designado nuevos auditores. Caso de que se haya producido esta circunstancia la revocación sería efectiva. Por la presente y salvo opinión mejor fundado, damos respuesta a su consulta planteada. Esta respuesta tiene carácter orientativo, no supone un convenio de consultoría formal y no es vinculante por lo que no se asume responsabilidad directa ni subsidiaria por parte del Re.G.A. REGISTRO GENERAL DE AUDITORES DEL CONSEJO SUPERIOR DE TITULADOS MERCANTILES Y EMPRESARIALES DE ESPAÑA. Servicio de consultas Número consulta: 502 Fecha consulta: 12.03.03 Formulada por: XXX Submateria: Cooperativas con sección de crédito CONSULTA PLANTEADA: Fecha respuesta: 14.04.03 Materia: Auditoria. En cuanto a las entidades sujetas a este régimen de rotación, cabe plantearse si también se ha de incluir a las Cooperativas con Sección de Crédito, las cuales según las Comunidades Autónomas, rinden cuentas a los departamentos de finanzas correspondientes, puesto que presentan informe complementario. Lo mismo para la publicidad de honorarios de auditoria en las memorias. NORMATIVA EXAMINADA: 1º. Ley de Auditoría de Cuentas reformada por la Ley Financiera. RESPUESTA: El artículo 50 de la Ley Financiera se refiere a la introducción de nuevas incompatibilidades para los auditores de cuentas y medidas para su rotación y modifica los apartados 1, 2, 3, 4 y 5 del artículo 8 de la Ley 19/1988, de 12 de julio de Auditoría de Cuentas. El apartado 4 se refiere a que los auditores serán contratados por un periodo de tiempo determinado inicial que no podrá ser inferior a tres años ni superior a nueve a contar desde la fecha en que se inicie el primer ejercicio a auditar, pudiendo ser contratados anualmente una vez haya finalizado el período inicial. primer ejercicio a auditar. Una vez finalizado este periodo inicial, el mismo auditor puede ser contratado año a año (por acuerdo de junta general). Tratándose de entidades sometidas a supervisión pública, de sociedades cuyos valores estén admitidos a negociación en mercados secundarios oficiales de valores, o de sociedades cuyo importe neto de la cifra de negocios sea superior a 30.000.000 de euros, una vez transcurridos siete años desde el contrato inicial, será obligatoria la rotación del auditor de cuentas responsable del trabajo y de la totalidad de los miembros del equipo de auditoría, debiendo transcurrir en todo caso un plazo de tres años para que dichas personas puedan volver a auditar a la entidad correspondiente. CONCLUSIÓN. De la lectura de la nueva redacción dada por la Ley Financiera al artículo 8 de la Ley de Auditoría de Cuentas se desprende la obligación para los auditores que auditen entidades sometidas a supervisión pública, sociedades cuyos valores estén admitidos a negociación en mercados secundarios oficiales de valores o sociedades cuyo importe neto de la cifra de negocios sea superior a 30.000.000 de euros a rotar el auditor de cuentas responsable del trabajo y a la totalidad de los miembros del equipo de auditoría. Se trata de una obligación que claramente atañe al auditor de cuentas y no tanto, aunque se vea afectada, a la entidad auditada. Las Cooperativas con Sección de Crédito están sometidas a supervisión pública por parte de su Comunidad Autónoma, y además, pueden tener un importe neto de cifra de negocios superior a los 30.000.000 euros por lo que la sociedad de auditoría que audite este tipo de entidades debe rotar al auditor encargado y al equipo asignado al trabajo transcurridos 7 años. Se hace mención a la sociedad de auditoría ya que todavía no se ha producido el correspondiente desarrollo reglamentario ni el ICAC, a través del servicio de consultas, se ha manifestado acerca de cómo un auditor individual va a cumplir con la rotación. Con respecto a la inclusión en la memoria de los honorarios de auditoría, y sin entrar a valorar los posibles efectos que esta medida pueda tener sobre la concurrencia en el mercado de la auditoría, su no inclusión deberá ser tratada por el auditor como una falta de información en la memoria y considerar su inclusión en el informe de auditoría como una salvedad. Por la presente y salvo opinión mejor fundado, damos respuesta a su consulta planteada. Esta respuesta tiene carácter orientativo, no supone un convenio de consultoría formal y no es vinculante por lo que no se asume responsabilidad directa ni subsidiaria por parte del Re.G.A. REGISTRO GENERAL DE AUDITORES DEL CONSEJO SUPERIOR DE TITULADOS MERCANTILES Y EMPRESARIALES DE ESPAÑA. Servicio de consultas Número consulta: 503 Fecha consulta: 08.12.02 Fecha respuesta: 21.04.03 Formulada por: XXX Materia: Contabilidad. Submateia: Informe Pericial CONSULTA PLANTEADA: Que por mi condición de auditor, fui designado Liquidador de una sociedad sobre la que recae orden judicial de liquidación y disolución ante la imposibilidad de adoptar acuerdos por los socios cuyas participaciones están agrupadas en sendas partes representativas cada una de ellas del 50% del capital. La sociedad a liquidar es arrendataria de una gasolinera para suministro de combustibles líquidos en régimen de “comisión de venta o garantía”. La arrendataria viene obligada a afianzar los abastecimientos de combustible que realiza la empresa suministradora, para lo cual junto con cada pedido se efectúa un depósito a favor de la suministradora por importe aproximado al valor de la venta de los combustibles pedidos menos las comisiones que por la dispensa de tales combustibles se generarán. La cuenta de caja, únicamente registra la cantidad asignada para monedas de cambio constituida con un fondo de carácter permanente, y eventualmente el depósito de algún cheque integrado por clientes-consumidores. La recaudación diaria, integrada por las comisiones y garantías recuperadas, se ingresan directamente en bancos, para atender los gastos corrientes y posibilitar la consignación de nuevos depósitos en garantía de próximos pedidos. En el curso de la misma, se traba el siguiente embargo por otro Juzgado: “la liquidación diaria de la caja de la gasolinera, interesando que por parte del encargado de la misma se libre la oportuna, o los oportunos ingresos en la cuenta de consignación del Juzgado” ... “ por la Comisión Judicial y en atención a lo interesado por el Procurador Sr. X, no se accede al embargo de combustibles y demás lubricantes, por considerar que afectan a la actividad normal de la empresa, así como los accesorios y posibles existencias para vehículos”. Por lo expuesto se plantean las siguientes cuestiones en orden a la correcta ejecución de la orden judicial: 1º. La liquidación diaria de la caja, ¿está constituida por la recaudación diaria? 2º. Si la práctica de una liquidación constituye el ejercicio de una acción, la de liquidar, ¿es correcto interpretar que la acción de liquidar consiste en una operación de ajuste, o sea en la práctica una operación previa en la que se acumularán las partidas que constituyen ingresos sobre las que habrá de sustraer los gastos que intervinieron para su obtención? 3º. Si la empresa no registra las operaciones de recaudación diaria en la cuenta de caja, sino que la caja está integrada por un fondo fijo, para moneda de cambio, ¿es correcto interpretar que no ha lugar a la liquidación diaria de la caja? 4º. La Comisión Judicial quiso salvar expresamente del embargo los bienes que “afectan a la actividad normal de la empresa”, ¿es correcto interpretar que en ningún caso alcanzó a los bienes o medios, incluso el efectivo utilizado para afianzar los pedidos, que se recuperan diariamente con la recaudación? 5º. ¿Es correcto interpretar que la pretensión de comisión judicial, es embargar la liquidación diaria de los resultados que se derivan de la explotación, concretamente los beneficios? NORMATIVA EXAMINADA: 1º. Ley de Sociedades Anónimas. 2º. Plan General de Contabilidad. RESPUESTA: Para determinar qué se entiende por liquidación, a efectos contables, puede ser de utilidad la definición de liquidación mercantil que se desprende del articulado que la Ley de Sociedades Anónimas dedica a esta materia. Así, por liquidación puede entenderse el conjunto de operaciones encaminadas a la realización del patrimonio social, la venta y cobro de los bienes y derechos y el pago de las obligaciones, y su reparto entre los socios en base a lo establecido en la escritura de constitución, y en su defecto, a los establecido por la junta general de accionistas. Por analogía, la liquidación de una cuenta contable implica la acumulación de todas las partidas de un mismo signo (cargos) para detraerle la acumulación de todas las partidas de signo contrario (abonos) que integren una misma cuenta, o un conjunto de ellas, y así llegar a determinar el saldo, si se trata de una cuenta de balance, o el importe acumulado si se trata de una cuenta de resultados. Parece claro que la intención de la Comisión Judicial cuando decide embargar la liquidación diaria de la caja, preservando de dicho embargo otros activos como puede ser el combustible y los lubricantes tiene por objeto no poner en peligro la continuidad de la sociedad embargada. En este sentido cabe preguntarse si el embargo de la liquidación diaria de la caja no se contrapone con esta actitud al poner en serias dificultades a la sociedad para continuar con su actividad al detraerla con el embargo los recursos necesarios para aprovisionarse y para atender sus obligaciones de pago, lo que llevaría a la misma a una situación de suspensión de pagos. Por ello, podría interpretarse que la liquidación diaria de caja está constituida por la recaudación diaria, pero entendida como el excedente de tesorería (entradas menos salidas de caja) y no como el beneficio que genere la explotación del negocio, ya que ambas magnitudes no tienen porqué ser homogéneas. El hecho de que la empresa no registre contablemente las operaciones de recaudación diaria en la cuenta de caja, no significa que esté siguiendo una práctica contable correcta. Las ventas de combustible que realiza la sociedad las puede cobrar al contado (efectivo en forma de billetes, monedas, talones, tickets gasolina, transferencias, etc) o a plazo (tarjetas de crédito, efectos, etc). El cobro en efectivo mediante billetes y monedas suponen una entrada de efectivo en caja, mientras que el traspaso de estos fondos a una cuenta bancaria supone una salida de caja. Por tanto, el movimiento real de caja, y por extensión el contable, parece muy superior al de mera tenencia de un fondo de reserva. Sin embargo, cuando el Juzgado se refiere a la caja debe entenderse que se está refiriendo a la tesorería, puesto que no tendría ningún sentido embargar la liquidación diaria de la caja dejando libre de embargo las liquidaciones diarias de las cuentas bancarias. CONCLUSIÓN. La consulta que se plantea excede las atribuciones y capacidad de este servicio de consultas puesto que lo que se solicita no es una opinión técnica sino una interpretación de un mandato judicial. No obstante se han realizado una serie de puntualizaciones con objeto de facilitar al consultante, en la medida de lo posible, la toma de decisiones. La interpretación debería ser el último recurso a emplear por parte del consultante en asunto de tanta responsabilidad para el mismo. Resulta a todas luces imprescindible que el consultante, que en este caso actúa como auditor de cuentas, pueda determinar el alcance de su trabajo de forma clara y precisa. Si ello no fuese posible por la inconcreción del mandato recibido se precisarían soluciones que le permitieran concretar el alcance de su cometido, y, a nuestro juicio, la interpretación del mandato recibido no contribuye a ello. Nuestra experiencia en temas judiciales nos lleva a recomendar que al cumplir el mandato encomendado el consultante trate de ceñirse al mismo escrupulosamente. Puesto que el mandato recibido puede dar lugar a distintas interpretaciones sería prudente que de una manera formal o informal se solicitase al Juez la aclaración precisa para cumplir con el mandato judicial. Por la presente y salvo opinión mejor fundado, damos respuesta a su consulta planteada. Esta respuesta tiene carácter orientativo, no supone un convenio de consultoría formal y no es vinculante por lo que no se asume responsabilidad directa ni subsidiaria por parte del Re.G.A. REGISTRO GENERAL DE AUDITORES DEL CONSEJO SUPERIOR DE TITULADOS MERCANTILES Y EMPRESARIALES DE ESPAÑA. Servicio de consultas Número consulta: 504 Fecha consulta: 15.04.03 Fecha respuesta: 22.04.03 Formulada por: XXX Materia: Contabilidad. Submateria: Concesión administrativa CONSULTA PLANTEADA: Empresa que tiene concedida la explotación de garajes ó plazas de aparcamiento a los 75 años revierte todo al Ayuntamiento de XXX. La principal actividad de es el alquiler de plazas de aparcamiento de rotación, pero al mismo tiempo está vendiendo unas plazas en la zona. Dichos importes los considera como ingresos a distribuir en 75 años. El auditor considera que los importes de la venta de las plazas los tiene que imp ... NORMATIVA EXAMINADA: RESPUESTA: Por la presente y salvo opinión mejor fundado, damos respuesta a su consulta planteada. Esta respuesta tiene carácter orientativo, no supone un convenio de consultoría formal y no es vinculante por lo que no se asume responsabilidad directa ni subsidiaria por parte del Re.G.A. REGISTRO GENERAL DE AUDITORES DEL CONSEJO SUPERIOR DE TITULADOS MERCANTILES Y EMPRESARIALES DE ESPAÑA. Servicio de consultas Número consulta: 505 Fecha consulta: 15.04.03 Fecha respuesta: 22.04.03 Formulada por: XXX Materia: Contabilidad. Submateria: Prudencia valorativa CONSULTA PLANTEADA: Una empresa con un litigio pendiente, en primera instancia le dan la razón y en apelación revocan la sentencia y le condenan al pago de 9.000,00 euros. La fecha de la sentencia es febrero de 2.003. La cuestión litigiosa consiste en el pago de unas cantidades con motivo de la compra de un solar por causa de unas obras preexistentes. La empresa la adquirió libre de cargas y en cambio la sentencia última le condena al pago de esas construcciones. La pregunta consiste en como contabilizar la nueva sentencia: ¿habría que dotar provisión en el año 2.002 teniendo en cuenta que a efectos de la auditoría podría existir una salvedad por no recoger cantidad alguna por este concepto y estar la promoción en cuestión finalizada? NORMATIVA EXAMINADA: 1º. Plan General de Contabilidad. 2º. NTA sobre hechos posteriores. RESPUESTA: El principio de prudencia valorativa establece que únicamente se contabilizarán los beneficios realizados a la fecha de cierre del ejercicio, mientras que los riesgos previsibles y las pérdidas eventuales con origen en el ejercicio o en otro anterior, deberán contabilizarse tan pronto sean conocidas distinguiendo entre las reversibles o potenciales de las realizadas o irreversibles. En consecuencia, al realizar dicho cierre se tendrán presentes todos los riesgos y pérdidas previsibles, cualquiera que sea su origen. Cuando tales riesgos y pérdidas fuesen conocidos entre la fecha de cierre del ejercicio y aquella en que se establecen las cuentas anuales, sin perjuicio de su reflejo en el balance y cuenta de ganancias, deberá facilitarse cumplida información de todos ellos en la memoria. Al final del ejercicio económico los administradores deben formular las cuentas anuales que reflejen la imagen fiel de la situación económica, financiera y los resultados habidos durante el mismo. Sin embargo, el acaecimiento de determinados hechos, ocurridos entre la fecha de cierre del ejercicio y el momento en el que se formulan las cuentas anuales, puede aconsejar, por la importancia de los mismos, modificar las cuentas anuales reflejando contablemente esos hechos o incluyendo información complementaria, de forma que la información presentada a los usuarios se ajuste lo más fielmente posible a la realidad. Hay que distintos tipos de hechos posteriores: a. Aquellos que proporcionan evidencia adicional con respecto a condiciones que ya existían a la fecha de cierre de las cuentas anuales y que, por suponer diferencias con las estimaciones efectuadas por los administradores, deben conllevar una modificación de las mismas. b. Aquellos que evidencian condiciones que no existían a la fecha de cierre del ejercicio, por lo que no deben conllevar una modificación de las cuentas, aun cuando por su importancia deben ser comunicadas al usuario. CONCLUSIÓN: Estamos por tanto ante una pérdida con origen en el ejercicio 2.003 de la que no se tenía constancia con anterioridad pero que proporciona evidencia adicional con respecto a condiciones que ya existían a la fecha de cierre del ejercicio 2.002 (un litigio que se creía ganado), por lo que siguiendo el principio de prudencia valorativa estimamos que a la fecha de cierre del ejercicio 2.002 procedería introducir una provisión en contabilidad por esos 9.000,00 euros. El tratamiento a dar por el auditor en su informe a la falta de inclusión de la mencionada provisión en la contabilidad del ejercicio 2.002 dependerá de las cifras de error tolerable y materialidad fijadas en la fase de planificación, conforme establece la NTA sobre importancia relativa y las Guías Re.G.A. 16 y 19 sobre importancia relativa y riesgo en auditoría, si bien, dada la escasa cuantía de la provisión no contabilizada, y, siempre y cuando no hubiese más errores o irregularidades detectados por el auditor en la auditoría de las cuentas anuales del ejercicio 2.002 y no corregidos por el cliente, parece que en principio no daría lugar a la inclusión de un salvedad por incumplimiento en el informe de auditoría. Por la presente y salvo opinión mejor fundado, damos respuesta a su consulta planteada. Esta respuesta tiene carácter orientativo, no supone un convenio de consultoría formal y no es vinculante por lo que no se asume responsabilidad directa ni subsidiaria por parte del Re.G.A. REGISTRO GENERAL DE AUDITORES DEL CONSEJO SUPERIOR DE TITULADOS MERCANTILES Y EMPRESARIALES DE ESPAÑA. Servicio de consultas Número consulta: 506 Fecha consulta: 31.03.03 Fecha respuesta: 22.04.03 Formulada por: XXX Materia: Auditoria. Submateria: Nombramientos de auditores CONSULTA PLANTEADA: Una sociedad anónima (club de socios para actividades lúdicas y deportivas) acuerda en junta general, entre otros puntos: 1º. Ampliación de capital social por compensación de créditos. 2º. Nombramiento de auditor para esa ampliación y sucesivos trabajos que se planteen (dicho nombramiento está inscrito en el Registro Mercantil pertinente). Cuestiones planteadas: 1º. Al no tener dos años de obligación por dos de los tres requisitos (activo, cifra de negocios y plantilla media), ¿no está obligada dicha sociedad a informe de auditoría de cuentas? 2º. Sin embargo, al tener nombrado auditor, ¿entiendo tendrá que realizar la auditoría en voluntaria y presentarla en el Registro Mercantil junto a las cuentas anuales mientras dure su inscripción? NORMATIVA EXAMINADA: 1º. Texto Refundido de la Ley de Sociedades Anónimas. RESPUESTA: El apartado b del artículo 156 de la LSA dedicado a aumento de capital por compensación de créditos establece como requisito para llevar a cabo el mismo “que al tiempo de la convocatoria de la junta se ponga a disposición de los accionistas, en la forma establecida en la letra c) del artículo primero del artículo 144, una certificación del auditor de cuentas de la sociedad que acredite que, una vez certificada la contabilidad social, resultan exactos los datos ofrecidos por los administradores sobre los créditos en cuestión. Si la sociedad no tuviere auditor de cuentas, la certificación deberá ser expedida por un auditor a petición de los administradores”. El artículo 181 de la LSA se refiere al balance abreviado y establece que “podrán formular balance abreviado las sociedades que durante dos ejercicios consecutivos reúnan a la fecha de cierre de cada uno de ellos, al menos dos de las circunstancias siguientes: a. Que el total de las partidas del activo no supere los 2.373.997,81 euros. b Que el importe neto de la cifra de negocios no supere los 4.747.995,62 euros. c. Que el número medio de trabajadores empleados durante el ejercicio no sea superior a cincuenta. Las sociedades no perderán la facultad de formular balance abreviado si no dejan de reunir, durante dos ejercicios consecutivos, dos de las circunstancias a que se refiere el apartado anterior”. El artículo 203 de la LSA se refiere a los auditores de cuentas y establece en su apartado b que “se exceptúa de esta obligación a las sociedades que puedan presentar balance abreviado”. CONCLUSIÓN: Si la sociedad en cuestión reúne los requisitos para formular balance abreviado no está obligada a someter a auditoría sus cuentas anuales, lo cual no la impide hacerlo de manera voluntaria en cuyo caso no rigen las obligaciones formales en cuanto a designación de auditores, duración del cargo y posiblemente revocación del nombramiento. Nada impide a una sociedad la inscripción de la designación de auditores en el Registro Mercantil cuando no esté obligada a auditar sus cuentas anuales, si bien para proceder a la inscripción es posible que el registrador exija que se hayan cumplido los requisitos formales de designación y duración del cargo que rigen para auditorías obligatorias. Al tener la auditoría carácter voluntario la sociedad no tendría más obligaciones legales que las que se pudieran derivar del preceptivo contrato de auditoría suscrito con el auditor de cuentas. Al margen de estas obligaciones entre auditor y auditado derivadas de la firma del mencionado contrato estimamos que para la sociedad no existe obligación adicional alguna de someter a auditoría las cuentas anuales, si no lo desea, ni de inscribir el informe en el Registro Mercantil. En el caso, poco probable, que el Registrador exigiese a la sociedad auditada el depósito del informe de auditoría ésta podría en todo caso alegar que no está obligada a ello. Por la presente y salvo opinión mejor fundado, damos respuesta a su consulta planteada. Esta respuesta tiene carácter orientativo, no supone un convenio de consultoría formal y no es vinculante por lo que no se asume responsabilidad directa ni subsidiaria por parte del Re.G.A. REGISTRO GENERAL DE AUDITORES DEL CONSEJO SUPERIOR DE TITULADOS MERCANTILES Y EMPRESARIALES DE ESPAÑA. Servicio de consultas Número consulta: 507 Fecha consulta: 21.02.03 Fecha respuesta: 22.04.03 Formulada por: XXX Materia: Contabilidad. Submateria: Valor venal CONSULTA PLANTEADA: Sobre el valor venal del derecho de uso de bienes públicos a empresas públicas. El ayuntamiento ha valorado el dominio de los activos, no así el valor del derecho de uso. La unión de uso es gratuita y sin límite temporal. ¿Cómo se determina el valor del derecho de uso? NORMATIVA EXAMINADA: 1º. Consulta número 5 del BOICAC número 9, sobre el tratamiento contable de la adscripción de bienes de dominio público a empresas públicas que suponga exclusivamente el derecho de uso sobre tales bienes, sin exigencia de contraprestación. 2º. Resolución del ICAC de 30 de julio de 1.991. RESPUESTA: La contestación a la consulta 5 incluida en el BOICAC número 5 establece que “en el caso de que a las empresas públicas con forma jurídica de sociedad mercantil les sean adscritos bienes de dominio público, confiriéndoles derecho de uso sobre tales bienes y sin que se exija contraprestación alguna, dichas sociedades deberán hacer lucir en el activo del balance, dentro de las inmovilizaciones inmateriales, el valor atribuible a tales derechos, creándose al efecto una partida precedida de número árabe con denominación adecuada. El importe a registrar como activo se determinará de acuerdo con el valor venal del derecho de uso. El derecho de uso deberá amortizarse atendiendo a la depreciación durante el plazo de adscripción. Si dicho plazo de adscripción fuera superior a la vida útil del bien sobre el que se ostentan los derechos, éstos deberán amortizarse durante el plazo de vida útil. En el pasivo del balance se incluirá dentro del epígrafe “ingresos a distribuir en varios ejercicios” el ingreso derivado de la adscripción, que se imputará a resultados, como ingreso extraordinario, en proporción a la amortización de los derechos de uso que figuran en el activo. Por último, dado que los bienes adscritos no son propiedad de la empresa, las mejoras que puedan introducirse en los mismos, siempre que supongan un aumento de su capacidad, productividad o alargamiento de su vida útil, deberán ser contabilizadas como mayor valor del derecho de uso que luzca en cuentas, procediéndose a practicar su amortización de acuerdo con los criterios antes señalados”. Para determinar cómo se debe calcular el valor venal al que hace referencia la consulta 5 del BOICAC número 9 puede ser ilustrativa la resolución del ICAC de 30 de julio de 1.991 por la que se desarrolla la norma de valoración 2ª del PGC relativa al inmovilizado material, pero aplicable a la adquisición gratuita de otros activos (bienes y derechos), establece que, cuando se trate de bienes adquiridos a título gratuito, se considerará como valor de adquisición el valor venal de los mismos en el momento de la donación, siendo éste el precio que se presume estaría dispuesto a pagar un adquiriente eventual, teniendo en cuenta las condiciones del activo. CONCLUSIÓN: El valor venal del derecho de uso equivale al valor de mercado del bien para cuya determinación se disponen de múltiples alternativas: petición de presupuestos a empresas suministradoras de bienes de iguales o similares características, petición de una valoración a un experto tasador, valor catastral, etc. Por la presente y salvo opinión mejor fundado, damos respuesta a su consulta planteada. Esta respuesta tiene carácter orientativo, no supone un convenio de consultoría formal y no es vinculante por lo que no se asume responsabilidad directa ni subsidiaria por parte del Re.G.A. REGISTRO GENERAL DE AUDITORES DEL CONSEJO SUPERIOR DE TITULADOS MERCANTILES Y EMPRESARIALES DE ESPAÑA. Servicio de consultas Número consulta: 508 Fecha consulta: 25.04.03 Fecha respuesta: 25.04.03 Formulada por: XXX Materia: Contabilidad. Submateria: Valoración de acciones CONSULTA PLANTEADA: En una sociedad en la que su capital social estaba repartido a partes iguales entre tres socios, fallece uno de ellos y se le solicita en el ejercicio 2.003 al auditor de la sociedad que efectúe una valoración de las acciones. NORMATIVA EXAMINADA: 1º. Ley Sociedades Anónimas. RESPUESTA: El apartado 1 del artículo 65 del Real Decreto Legislativo 1564/1989, de 22 de diciembre, por el que se aprueba el texto refundido de la Ley de Sociedades Anónimas, es modificado por la Ley Financiera pasando a tener la siguiente redacción: “1. Las restricciones estatutarias a la transmisibilidad de las acciones por causa de muerte cuando así lo establezcan expresamente los propios estatutos. En este supuesto, para rechazar la inscripción de la transmisión en el libro registro de acciones nominativas, la sociedad deberá presentar al heredero un adquiriente de las acciones u ofrecerse a adquirirlas ella misma por su valor razonable, en el momento en que se solicitó la inscripción, de acuerdo con lo previsto en el artículo 75. Se entenderá como valor razonable el que determine un auditor de cuentas, distinto al auditor de la sociedad, que, a solicitud de cualquier interesado, nombren a tal efecto los administradores de la sociedad. CONCLUSIÓN: Con la nueva redacción dada por la Ley Financiera al artículo 64 del TRLSA se le impide al auditor de la sociedad efectuar la valoración de las acciones a efectos de su transmisión mortis causa, debiendo efectuar la misma un auditor de cuentas distinto del de la sociedad. Como la Ley Financiera entré en vigor el 23 de noviembre de 2.002 y el encargo se le ha efectuado al auditor de la sociedad en el ejercicio 2.003, le es de aplicación la mencionada nueva redacción dada al artículo 64 y no puede efectuar la citada valoración. Por la presente y salvo opinión mejor fundado, damos respuesta a su consulta planteada. Esta respuesta tiene carácter orientativo, no supone un convenio de consultoría formal y no es vinculante por lo que no se asume responsabilidad directa ni subsidiaria por parte del Re.G.A. REGISTRO GENERAL DE AUDITORES DEL CONSEJO SUPERIOR DE TITULADOS MERCANTILES Y EMPRESARIALES DE ESPAÑA. Servicio de consultas Número consulta: 509 Fecha consulta: 22.05.03 Fecha respuesta: 29.05.03 Formulada por: XXX Materia: Contabilidad. Submateria: Informe Pericial CONSULTA PLANTEADA: Que por mi condición de auditor, fui designado Liquidador de una sociedad sobre la recae orden judicial de liquidación y disolución ante la posibilidad de adoptar acuerdos por los socios cuyas participaciones están agrupadas en sendas partes representativas cada una de ellas del 50% de capital. La sociedad a liquidar es arrendataria de una gasolinera para suministro de combustibles líquidos en régimen de “comisión de venta en garantía” de acuerdo con la cláusula sexta del contrato de arrendamiento de industria y exclusiva suscrito al efecto. La arrendataria viene obligada a afianzar los abastecimientos de combustible que realiza la empresa suministradora, para lo cual junto con cada pedido se efectúa un depósito a favor de la suministradora por importe aproximado al valor en venta de os combustibles pedidos menos las comisiones que por la dispensa de tales combustibles se generarán. Dicho depósito más las comisiones se recuperan con la recaudación de cada día por los suministros al consumidor-cliente. En el curso de la misma, se traba el siguiente embargo por otro juzgado: “la liquidación diaria de la caja de la gasolinera, interesando que por parte del encargado de la misma se libre la oportuna, o los oportunos ingresos en la cuenta de consignación del juzgado ... por la comisión judicial y en atención a lo interesado por el Procurador Sr. X, no se accede al embargo de combustibles y demás lubricantes, por considerar que afectan a la actividad normal de la empresa, así como los accesorios y posibles existencias para vehículos”. De lo expuesto, se ha planteado la controversia sobre si son o no, sinónimos los conceptos liquidación y recaudación, y el alcance de la resolución judicial. NORMATIVA EXAMINADA: 1º. Ley de Sociedades Anónimas. 2º. Plan General de Contabilidad. RESPUESTA: 1º. Desde la perspectiva jurídico-contable el término “liquidar una cuenta” constituye un tecnicismo alusivo a las operaciones que se realizan en la misma, y que consiste en registrar las operaciones pendientes, tales como: intereses, comisiones, descuentos, gastos, etc, con el objeto de concluir sobre su saldo. Constituye pues, el ejercicio de una acción de ajuste formal, con el objetivo de determinar el saldo de la cuenta que se pretende liquidar. 2º. Cuestión distinta es la “recaudación”, concepto que constituye la acción de recaudar; es decir: cobrar rentas o caudales. El registro contable de dicha acción se realiza en las cuentas del grupo 5 correspondiente a cuentas financieras de acuerdo con las definiciones y relaciones contables que se expresan en la segunda parte del Plan General de Contabilidad. En ningún caso cabe identificar iguales o semejantes las acciones de liquidación y recaudación en relación con las operaciones sobre las cuentas, pues como se ha dicho responden a acciones conceptualmente distintas. 3º. La última de las cuestiones planteadas excede las atribuciones y capacidad de este servicio de consultas puesto que lo que se solicita no es una opinión técnica sino una interpretación de un mandato judicial. CONCLUSIÓN: La interpretación debería ser el último recurso a emplear por parte del consultante en asunto de tanta responsabilidad para el mismo. Resulta a todas luces imprescindible que el consultante pueda determinar el alcance de su trabajo de forma clara y precisa. Si ello no fuese posible por la inconcreción del mandato recibido se precisarían soluciones que le permitieran concretar el alcance de su cometido, y, a nuestro juicio, la interpretación del mandato recibido no contribuye a ello. Nuestra experiencia en temas judiciales nos lleva a recomendar que al cumplir el mandato encomendado el consultante trate de ceñirse al mismo escrupulosamente. Puesto que el mandato recibido puede dar lugar a distintas interpretaciones sería prudente que de una manera formal o informal se solicitase al Juez la aclaración precisa para cumplir con el mandato judicial. Por la presente y salvo opinión mejor fundado, damos respuesta a su consulta planteada. Esta respuesta tiene carácter orientativo, no supone un convenio de consultoría formal y no es vinculante por lo que no se asume responsabilidad directa ni subsidiaria por parte del Re.G.A. REGISTRO GENERAL DE AUDITORES DEL CONSEJO SUPERIOR DE TITULADOS MERCANTILES Y EMPRESARIALES DE ESPAÑA. Servicio de consultas Número consulta: 510 Fecha consulta: 14.05.03 Fecha respuesta: 29.05.03 Formulada por: XXX Materia: Contabilidad. Submateria: Asociación sin ánimo de lucro. CONSULTA PLANTEADA: Una asociación sin ánimo de lucro (asociación de autoescuelas de XXX) nos solicita que evaluemos la posibilidad de realizar la siguiente operación por parte de la asociación. La asociación adquirió y posteriormente vendió un local donde realizaba su actividad. De dicha operación obtuvo una plusvalía, de la cual se informó a la asociación de su tratamiento o tributación fiscal. La asociación en vista de este remanente ocioso en cuenta quiere repartirse entre los socios dicho importe. La cuestión o cuestiones son: 1º. ¿Se puede realizar el reparto? 2º. ¿Qué tributación tendría tanto para la asociación como para los socios? 3º. De no poderse realizar dicho reparto ¿y si se disuelve la asociación, quién se queda con el remanente? Los estatutos de la asociación contemplan que caso de disolución el remanente se distribuirá solo entre los socios fundadores. NORMATIVA EXAMINADA: 1º. Ley 49/2002. 2º. Código Civil. RESPUESTA: La Ley 49/2002 establece en su artículo 3 apartado 2º que las entidades sin fines lucrativos deberán destinar el resto de las rentas e ingresos a incrementar la dotación patrimonial o las reservas. Para los casos de disolución de este tipo de entidades el artículo 39 del Código Civil establece que se debería aplicar a fines análogos a los de la asociación. CONCLUSIÓN: 1º. Entendemos que el reparto de plusvalía derivada de la venta del local no es susceptible de ser repartida entre los miembros de la asociación. 2º. Los estatutos de la asociación no pueden ser contrarios a derecho por lo que serán nulos aquellos aspectos de su articulado que entren en conflicto con otras normas de rango superior. 3º. Caso de disolverse la asociación y conforme establece el artículo 39 del Código Civil se dará a sus bienes la aplicación que las cláusulas fundacionales les hubiesen en esta previsión asignado, y, si nada se hubiese establecido se aplicarán a fines análogos en interés de la región, provincia o municipio que principalmente debieran recoger los beneficios de las instituciones extinguidas. Por la presente y salvo opinión mejor fundado, damos respuesta a su consulta planteada. Esta respuesta tiene carácter orientativo, no supone un convenio de consultoría formal y no es vinculante por lo que no se asume responsabilidad directa ni subsidiaria por parte del Re.G.A. REGISTRO GENERAL DE AUDITORES DEL CONSEJO SUPERIOR DE TITULADOS MERCANTILES Y EMPRESARIALES DE ESPAÑA. Servicio de consultas Número consulta: 511 Fecha consulta: 16.05.03 Fecha respuesta: 29.05.03 Formulada por: XXX Materia: Auditoría. Submateria: Bibliografía. CONSULTA PLANTEADA: Ruego me recomiendan sobre la mejor obra que contenga un desarrollo práctico y actual de la elaboración completa de una auditoría, con el fin de que me sea útil y bueno para el trabajo de auditoría. NORMATIVA EXAMINADA: RESPUESTA: CONCLUSIÓN: La obra Auditoría Práctica Master de XXX editada por XXX, S.L. en 1.995 constituyó y todavía constituye una referencia bibliográfica obligada para los auditores de nuestro Registro. Más actual, y en línea con la obra anteriormente mencionada se encuentra Seminario Superior de Auditoría Práctica de XXX y editado por XXX, S.L. Por la presente y salvo opinión mejor fundado, damos respuesta a su consulta planteada. Esta respuesta tiene carácter orientativo, no supone un convenio de consultoría formal y no es vinculante por lo que no se asume responsabilidad directa ni subsidiaria por parte del Re.G.A. REGISTRO GENERAL DE AUDITORES DEL CONSEJO SUPERIOR DE TITULADOS MERCANTILES Y EMPRESARIALES DE ESPAÑA. Servicio de consultas Número consulta: 512 Fecha consulta: 08.05.03 Fecha respuesta: 29.05.03 Formulada por: XXX Materia: Auditoría. Submateria: Crédito fiscal por compensación de pérdidas. CONSULTA PLANTEADA: La cuestión se plantea ante las pérdidas sufridas por la sociedad en las que sí se contabilízale crédito fiscal derivado de las mismas, contablemente la sociedad no se ve incursa en causa de disolución, ya que el patrimonio estaría por encima del 50% del capital social de la sociedad. Sin embargo, si no se contabiliza el crédito fiscal, los fondos propios de la sociedad absorberían la totalidad del capital social y consiguientemente en situación de quiebra. A 31 de diciembre de 2.001 la sociedad presentaba unos fondos propios de 625.299,64 euros constituidos por un capital de 180.423,83 euros y unas reservas de 444.875,81 euros, mientras que a 31 de diciembre de 2.002 los fondos propios ascienden a 93.519,54 euros con un capital social de 180.423,83 euros, unas reservas de 444.875,81 euros y un resultado de 531.780,10 euros. En el ejercicio 2.002 se registran en la cuenta 4745 correspondiente a crédito para pérdidas a compensar ejercicio 2.002 la cantidad de 291.851,40 euros; es decir: las pérdidas del ejercicio ascendieron a 818.123,23 euros antes del Impuesto sobre Sociedades, con lo que 818.123,23>625.299,64. Las causas origen de las pérdidas hay que imputarlas a la lamentable situación del sector de las telecomunicaciones, tanto en nuestro país como en el exterior y que en estos momentos parece que inicia un leve repunte al cambio de tendencia, si bien las perspectivas de mejora pudieran prolongarse hasta mediados del año 2.004. ¿Es razonable contabilizar el crédito fiscal con lo que el balance mostraría unos recursos propios superiores al 50% del capital social? Y tanto en caso afirmativo como no, qué debemos indicar en la memoria. NORMATIVA EXAMINADA: 1º. Normas de valoración PGC. 2º. TRLSA. RESPUESTA: Efectivamente, el ICAC establece una serie de requisitos que deben concurrir para que una empresa pueda compensar pérdidas contabilizando un crédito fiscal. En este sentido, y entre otros requisitos se establece que los créditos derivados de la compensación de bases imponibles negativas sólo serán objeto de registro contable cuando la base imponible negativa se haya producido como consecuencia de un hecho no habitual en la gestión de la empresa, siempre que razonablemente se considere que las causas que la originaron han desaparecido en la actualidad y que se van a obtener beneficios fiscales que permitan su compensación en un plazo no superior al previsto en la legislación fiscal para la compensación de las bases imponibles negativas, es decir, siete años con carácter general, y con el límite máximo de diez años contados desde la fecha de cierre del ejercicio en aquellos casos en los que la legislación tributaria permita compensar en plazos superiores. CONCLUSIÓN: A la vista de lo anterior podemos concluir que concurre el requisito fundamental para que pueda ser contabilizado el crédito fiscal, cual es que razonablemente se considere que han desaparecido en el momento de su activación las causas que habían originado las pérdidas, ya que el consultante tan solo nos dice que parece que se inicia un leve repunte al cambio de tendencia hasta mediados del año 2.004. Por otra parte, la sociedad se encuentra incursa en causa legal de disolución por que las pérdidas han disminuido su haber por debajo de la mitad de su capital social. Este es el motivo, y no otro, por el que se contempla la contabilización de un crédito fiscal que mejore la imagen patrimonial y saque a la sociedad de la mencionada causa legal de disolución. Esta circunstancia impediría por si sola la contabilización del mencionado crédito puesto que no está en absoluto garantizado que la sociedad vaya a generar beneficios fiscales futuros con los que compensar el crédito fiscal. Incluso con la activación del crédito fiscal la sociedad tendría un fuerte desequilibrio patrimonial con unas pérdidas que habrían reducido su haber por debajo de las dos terceras partes de la cifra de capital por lo que dispondría de un ejercicio para restablecer el desequilibrio patrimonial, transcurrido el cual sin que se hubiese producido ese reequilibrio se tendría que proceder a reducir el capital. Por la presente y salvo opinión mejor fundado, damos respuesta a su consulta planteada. Esta respuesta tiene carácter orientativo, no supone un convenio de consultoría formal y no es vinculante por lo que no se asume responsabilidad directa ni subsidiaria por parte del Re.G.A. REGISTRO GENERAL DE AUDITORES DEL CONSEJO SUPERIOR DE TITULADOS MERCANTILES Y EMPRESARIALES DE ESPAÑA. Servicio de consultas Número consulta: 513 Fecha consulta: 23.05.03 Formulada por: XXX. Submateria: Tasas de auditoría. Fecha respuesta: 29.05.03 Materia: Auditoría. CONSULTA PLANTEADA: ¿Es obligado pagar las tasas cuando la auditoria tiene carácter voluntario al no estar obligada a ello la empresa auditada? NORMATIVA EXAMINADA: 1º. Artículo 23 de la Ley Financiera (BOE 281 de23 de noviembre de 2.002). RESPUESTA: El artículo 23 se refiere a la tasa del Instituto de Contabilidad y Auditoría de Cuentas por emisión de informes de auditoría de cuentas. En su apartado 2 establece que constituye el hecho imponible de la tasa de emisión de informes el ejercicio de las competencias del Instituto de Contabilidad y Auditoría de Cuentas a que se refiere el artículo 22.1 de la mencionada Ley, en relación con la emisión de informes de auditoría de cuentas. El apartado 3 establece que serán sujetos pasivos de esta tasa los auditores de cuentas y sociedades de auditoría inscritos en la situación de ejercientes en el Registro Oficial de Auditores de Cuentas que emitan informes de auditoría de cuentas. CONCLUSIÓN: El artículo 23 no distingue entre informes de auditoría de cuentas obligatorios o voluntarios por lo que claramente cuando la auditoría tenga carácter voluntario el auditor que emita el informe será sujeto pasivo de la tasa y deberá liquidarla en tiempo y forma. Por la presente y salvo opinión mejor fundado, damos respuesta a su consulta planteada. Esta respuesta tiene carácter orientativo, no supone un convenio de consultoría formal y no es vinculante por lo que no se asume responsabilidad directa ni subsidiaria por parte del Re.G.A. REGISTRO GENERAL DE AUDITORES DEL CONSEJO SUPERIOR DE TITULADOS MERCANTILES Y EMPRESARIALES DE ESPAÑA. Servicio de consultas Número consulta: 514 Fecha consulta: 27.05.03 Fecha respuesta: 29.05.03 Formulada por: XXX Materia: Auditoría. Submateria: Nombramiento de auditores. CONSULTA PLANTEADA: Auditor socio de la sociedad XXX, dedicada a la actividad de la auditoría de cuentas detenta el 33% de participación en su capital social, no teniendo el carácter de administrador ni de apoderado de la firma. Nunca ha intervenido de forma directa o indirecta en las auditorías que ha realizado la sociedad. La sociedad de auditoría finaliza sus contratos de auditoría con diversas empresas y dos de ellas solicitan los servicios como auditor del socio que no ha intervenido nunca en las citadas auditorías. ¿El nuevo contrato de auditoría se puede suscribir entre las partes por un periodo de 3 a 9 años, o debe ser por 1 año, renovándose este año tras año. NORMATIVA EXAMINADA: 1º. Artículo 204.1. y 2 de la Ley de Sociedades Anónimas. 2º. Artículo 8.4 de la Ley 19/1988 de Auditoría de Cuentas. RESPUESTA: Las personas que deben ejercer la auditoría de cuentas serán nombradas por la junta general antes de que finalice el ejercicio a auditar por un periodo de tiempo determinado inicial, que no podrá ser inferior a tres años ni superior a nueve a contar desde la fecha en que se inicie el primer ejercicio a auditar, pudiendo ser reelegidas por la junta general una vez haya finalizado el periodo inicial. El apartado 4 del artículo 8 de la Ley de Auditoría de Cuentas establece que los auditores serán contratados por un periodo de tiempo determinado inicial, que no podrá ser inferior a tres años ni superior a nueve a contar desde la fecha en que se inicie el primer ejercicio a auditar, pudiendo ser contratados anualmente una vez haya finalizado el periodo inicial. No obstante, cuando las auditorías de cuentas no fueran obligatorias, no serán de aplicación las limitaciones establecidas en el párrafo anterior. Esta limitación se extiende en su caso a los auditores de cuentas con los que tuvieran cualquier vinculación directa o indirecta. CONCLUSIÓN: Una vez finalizado el periodo inicial por el que fue designado un auditor o una sociedad de auditoría, que para el caso de auditorías obligatorias no podrá ser inferior a tres años ni superior a nueve, la renovación solo se puede producir anualmente y cumpliendo con los mismos requisitos que para el mandato inicial (nombramiento por parte de junta de accionistas antes de la fecha de cierre del ejercicio a auditar, aceptación de la designación por parte del auditor o sociedad de auditoría e inscripción del nombramiento en el Registro Mercantil). La rotación en el socio de auditoría firmante de los trabajos es una medida que para la cuestión planteada solo surte efectos internos, puesto que el nuevo socio firmante lo sería de la misma sociedad de auditoría por lo que la decisión adoptada por el Registrador Mercantil de no aceptar una designación a la misma sociedad de auditoría pero con un socio auditor firmante distinto nos parece ajustada a derecho, y por tanto, correcta. En este caso el nombramiento solo podría tener una duración de una año, debiendo proceder la sociedad auditada a designar auditores transcurrido el mismo (por una duración de un año si se tratase de la misma sociedad de auditoría o por una duración mínima de tres años y máxima de nueve si se produjese un cambio de auditores). Por la presente y salvo opinión mejor fundado, damos respuesta a su consulta planteada. Esta respuesta tiene carácter orientativo, no supone un convenio de consultoría formal y no es vinculante por lo que no se asume responsabilidad directa ni subsidiaria por parte del Re.G.A. REGISTRO GENERAL DE AUDITORES DEL CONSEJO SUPERIOR DE TITULADOS MERCANTILES Y EMPRESARIALES DE ESPAÑA. Servicio de consultas Número consulta: 515 Fecha consulta: 07.05.03 Fecha respuesta: 29.05.03 Formulada por: XXX. Materia: Auditoría. Submateria: Reducción capital. CONSULTA PLANTEADA: Tenemos que realizar un informe de auditoría sobre reducción de capital según lo establecido en el artículo 168 del TRLSA. No he encontrado norma técnica que se refiera a este informe tal como existe de las aplicaciones de los artículos 156 ó 157. ¿Existe norma técnica sobre este informe? De no existir, ¿podría decirme en qué modelo se debe basar el informe?. NORMATIVA EXAMINADA: 1º. Artículo 168 del TRLSA. 2º. NTA de elaboración de Informe Especial sobre aumento de capital con cargo a reservas, en el supuesto establecido en el artículo 157 del TRLSA. RESPUESTA: El artículo 168 del TRLSA establece con respecto a la reducción de capital para compensación de pérdidas y para dotar la reserva legal que no se podrá reducir el capital con los fines mencionados cuando la sociedad cuente con cualquier clase de reservas voluntarias o cuando la reserva legal, una vez efectuada la reducción, exceda del 10% del capital. También establece que el balance que sirva de base a la operación deberá ser aprobado por la Junta General, previa su verificación por los auditores de cuentas de la sociedad o por el auditor nombrado al efecto por los administradores cuando la sociedad no estuviera obligada a verificar sus cuentas anuales. CONCLUSIÓN: No se ha desarrollado Norma Técnica de Auditoría alguna para el supuesto de reducción de capital contemplado en el artículo 168 del TRLSA. Es práctica habitual emplear para estos casos, y en ausencia de norma específica, la NTA sobre elaboración del informe especial sobre aumento de capital con cargo a reservas en lo referente al contenido del informe, pero lógicamente adaptándolo al supuesto de la reducción del capital. Por la presente y salvo opinión mejor fundado, damos respuesta a su consulta planteada. Esta respuesta tiene carácter orientativo, no supone un convenio de consultoría formal y no es vinculante por lo que no se asume responsabilidad directa ni subsidiaria por parte del Re.G.A. REGISTRO GENERAL DE AUDITORES DEL CONSEJO SUPERIOR DE TITULADOS MERCANTILES Y EMPRESARIALES DE ESPAÑA. Servicio de consultas Número consulta: 516 Fecha consulta: 20.05.03 Fecha respuesta: 29.05.03 Formulada por: XXX. Materia: Auditoría. Submateria: Asociación sin ánimos de lucro CONSULTA PLANTEADA: Estoy auditando una Asociación sin fines de lucro que se constituyó en el año 1.987 bajo la Ley de Asociaciones de 24 de diciembre de 1.964, quedando inscrita en el Registro Provincial de la Delegación de Gobierno en XXX. Desde su constitución no ha llevado ningún tipo de registro contable hasta el año 1.998 y nuca ha formulado, aprobado, ni depositado cuentas anuales, disponiendo en su domicilio social únicamente de libro mayor y diario desde el año 1.998. Esta Asociación, además de otros ingresos, tiene aprobado un contrato de servicios con el Ayuntamiento de XXX desde el año 1.998. Adicionalmente tampoco ha presentado Impuesto sobre Sociedades en ningún ejercicio. Para el ejercicio 2.002 ha decidido hacer una auditoría voluntaria y he sido contratada para su realización. Cuestiones: 1º. Quisiera saber si se trata realmente de una auditoria voluntaria, ya que según la disposición adicional primera de la Ley 19/88 de Auditoría de Cuentas de 12 de julio, están obligadas a someterse a auditoría aquellas entidades que reciban subvenciones, ayudas o realicen obras, prestaciones de servicios o suministren bienes al Estado y demás Organismo Públicos dentro de los límites que reglamentariamente fije el Gobierno por Real decreto. En el RD 180/2003 de 14 de febrero este límite lo fija en un importe acumulado de 600.000 euros, sin embargo, desconozco cuál es el límite para ejercicios anteriores. 2º. En caso de ser auditoría voluntaria no sé si es necesario que nos nombren auditores expresamente en algún acta de la junta, ya que hasta la fecha tan sólo han acordado someter las cuentas del ejercicio 2.002 a una auditoría. 3º. El que no dispongamos de cuentas anuales de ejercicios anteriores y no estén depositadas, así como el que no haya ningún registro contable hasta el año 1.998 me causa una gran inquietud debido al posible efecto en los saldos iniciales del ejercicio 2.002. No obstante, hemos podido realizar pruebas sustantivas sobre los saldos finales de todos los saldos del balance, aunque en el caso de los fondos propios no sé como validar reservas y resultados de ejercicios anteriores. Me preocupa que pudiera derivarse algún pasivo así como que faltara recoger algún ingreso por subvenciones concedidas en ejercicios anteriores, puesto que por lo que hemos podido comprobar en este ejercicio siguen un criterio de caja en la contabilización de gastos e ingresos. Entiendo por tanto que se trataría de una limitación al alcance así como que debería haber alguna mención en cuanto al párrafo de uniformidad. Sin embargo, la limitación debo referirla a áreas concretas y no sé como enfocarlo (sólo me afecta a reservas o a más áreas). Las típicas de primera auditoría son existencias iniciales, que aquí no hay, pero con los fondos propios no sé lo que ocurre. Por otra parte no sé si hay que poner en un párrafo de énfasis o cómo qué el puro hecho de que no haya cuentas depositadas. Por último, al no poder comprobar los principios contables utilizados en ejercicios anteriores no puedo opinar sobre la uniformidad con respecto al año anterior, así como no puedo opinar si los saldos comparativos que aparecen en las cuentas anuales de 2.002 con 2.001 son correctos con cuentas anuales de 2.001. 4º. El que no haya presentado Impuesto de Sociedades ningún ejercicio para mí es una contingencia fiscal desconocida por tanto entiendo que una incertidumbre. Ahora bien, nuestra materialidad es de 600 ¿? Aproximadamente y la contingencia máxima que se derivaría de los resultados supuestos de ejercicios anteriores ascendería a 11.600 ¿?. Esta contingencia máxima, es suponiendo que los resultados de los ejercicios anteriores fueran correctos y que ninguna de sus rentas fuera exenta. Sabiendo que estamos hablando de una entidad sin fines de lucro no sé si esta contingencia máxima es desmesurada. Pero, si no fuera así, ¿sería una opinión desfavorable por el impacto de dicha contingencia frente a nuestra materialidad, o no se puede calificar el informe por el impacto de una incertidumbre? 5º. La compañía no ha activado ningún inmovilizado desde su constitución, llevando a gastos todo el inmovilizado que compró en ejercicios anteriores. En este ejercicio la Asociación quiere activar todas las compras que hizo de inmovilizado de ejercicios anteriores y que llevó a gastos. ¿Esto se puede hacer?, si es así, ¿cómo puedo validar si realmente existieron esos gastos puesto que no hay cuentas anuales? ¿Sería un cambio en políticas contables del que habría que informar en la memoria y en el informe de auditoría? 6º. Por último, si he de calificar mi informe con todas las cuestiones anteriores, me gustaría saber dónde está el límite para saber si tengo que denegar la opinión por la limitación al alcance que tengo por no disponer de estados financieros anteriores, o en el caso de incertidumbre por la contingencia fiscal, y puesto que es una incertidumbre y no sé el impacto de las mismas en las cuentas anuales cómo saber si los estados financieros representan la imagen fiel? NORMATIVA EXAMINADA: RESPUESTA: 1º. Entendemos que se trata de una auditoría de carácter voluntario. 2º. Dado su carácter de auditoría voluntaria no es preciso que el nombramiento se produzca mediante acuerdo adoptado por la asamblea u órgano de gobierno similar. Bastaría con un acuerdo de la junta de gobierno o del gerente de la asociación, pero en todo caso se requeriría la firma del preceptivo contrato de auditoría, todo ello salvo que los estatutos dispongan algo en contrario. 3º. En la consulta constantemente se refiere a la ausencia de cuentas anuales de ejercicios anteriores como una limitación al alcance de su trabajo. Pues bien, es cierto que no cuenta con un balance de situación ni una cuenta de pérdidas y ganancias pero si cuenta con un libro mayor y un libro diario a través de los cuales se puede llegar a determinar el saldo de apertura de todas las cuentas que integren el balance de situación y la cuenta de pérdidas y ganancias del ejercicio a auditar. La NTA 3.9.3 estable que el auditor deberá indicar en el párrafo intermedio que dado que las cifras del ejercicio anterior no constituyen cuentas anuales completas, su opinión se refiere únicamente al último ejercicio. Se puede plantear la opción de que el balance de situación y la cuenta de pérdidas y ganancias se refieran exclusivamente al ejercicio a auditar y no contengan cifras comparativas con el ejercicio anterior, lo cual tendría que ser tratado adecuadamente en el párrafo de comparabilidad de la información dándole la redacción contemplada por la mencionada NTA. La forma en que se puede obtener la evidencia adecuada y suficiente sobre el saldo de fondo social es acudir a las actas de asamblea en las que se aprobara el resultado del ejercicio económico, así como su aplicación, que en principio debería haber sido a la cuenta fondo social. Caso de no disponer de los mencionados acuerdos se estaría ante una limitación al alcance por la parte de los fondos propios generados con anterioridad al ejercicio 1.998 (primero del que se dispone de información financiera), la cual se mantendría en todos los informes de auditoría de todos los ejercicios que en el futuro se auditasen hasta que desapareciera la mencionada limitación. No obstante es preciso que cuantificar el impacto que la misma tiene sobre las mencionadas cuentas anuales para lo cual se debe proceder de acuerdo con lo que a tal efecto establecen las NTA sobre elaboración de informes y las nuevas Guías Re.G.A. números 16 y 19. La explicación de cómo se debe determinar la materialidad de un error, irregularidad, incertidumbre o limitación al alcance entendemos que excede del ámbito de un consulta. 4º. La Asociaciones tienen la consideración de entidades parcialmente exentas lo cual significa que están exentas por las actividades propias de la asociación pero que están sujetas por las actividades que supongan explotación económica. En todo caso están obligadas a presentar declaración de Impuesto sobre Sociedades incluyendo en la misma todas las rentas, tanto las exentas como las sujetas, pero solo tributando por las rentas sujetas. Especial atención debe merecer el contrato de prestación de servicios que la Asociación tienen suscrito con el Ayuntamiento de XXX y que con toda seguridad, y dependiendo de la naturaleza del bien que se entregue o el servicio que se preste, estará sujeta a IVA, constituirá explotación económica y estará sujeta a tributación en el Impuesto sobre Sociedades. En principio solo podemos hablar de contingencia fiscal cuando el auditor es capaz de cuantificar la misma y determinar el pasivo fiscal que la misma origina y que da lugar a una falta de ajuste contable que afecta al resultado del ejercicio. Si el auditor no es capaz de cuantificar ese mencionado pasivo contando con los medios (información) y de los recursos (conocimientos) para ello significa que puede que no exista tal contingencia. En todo caso el auditor debe obtener la evidencia suficiente y adecuada y no entendemos que sea coherente con ello la suposición de que ninguna de sus rentas fuera exenta. La determinación del tipo de opinión y el efecto que la supuesta limitación al alcance tendría en la misma han de ser tratadas observando las NTA sobre elaboración de informes y las nuevas Guías Re.G.A. números 16 y 19. Insistimos en que la explicación de cómo se debe determinar la materialidad de un error, irregularidad, incertidumbre o limitación al alcance entendemos que excede del ámbito de un consulta. 5º. La decisión de activar el inmovilizado adquirido en ejercicios anteriores y que en su momento fue contabilizado como gasto corriente del ejercicio no nos parece muy ortodoxa. Caso de producirse la misma los procedimientos de auditoría serían los correspondientes a la naturaleza de estos bienes (inventario físico, propiedad de la empresa (soporte documental), recálculo de la amortización, etc. Ver Guía Re.G.A. número 1 sobre Inmovilizado Material. Supondría un cambio en la aplicación uniforme de los principios contables y normas de valoración que debería ser explicado en la memoria. En ausencia de dicha información el auditor debería incluir una salvedad por falta de información en la memoria. 6º. Nos reiteramos en que para determinar el tipo de opinión el auditor ha de observar las NTA sobre elaboración de informes y en nuestro caso las nuevas guías Re.G.A. números 16 y 19. CONCLUSIÓN: No obstante quisiéramos hacer la siguiente reflexión: el riesgo de auditoría puede ser definido como la probabilidad de que el auditor emita un informe incorrecto con una opinión favorable cuando la misma debería ser con salvedades, desfavorable o denegada ó que emita un informe con opinión con salvedades, desfavorable o denegada cuando la misma debería ser favorable. Para el primer año de auditoría se establece que el riesgo de auditoría máximo no puede superar el 10% mientras que el nivel de confianza en ese trabajo no podrá ser inferior al 90%. ¿Cuál es riesgo real de auditoría de este trabajo? Dado la complejidad de este encargo y las dudas que se plasman en las cuestiones consultadas aconsejamos extremar las precauciones y recabar el apoyo, la colaboración y el asesoramiento de algún compañero que haya experimentado situaciones similares a las que se han planteado. Por la presente y salvo opinión mejor fundado, damos respuesta a su consulta planteada. Esta respuesta tiene carácter orientativo, no supone un convenio de consultoría formal y no es vinculante por lo que no se asume responsabilidad directa ni subsidiaria por parte del Re.G.A. REGISTRO GENERAL DE AUDITORES DEL CONSEJO SUPERIOR DE TITULADOS MERCANTILES Y EMPRESARIALES DE ESPAÑA. Servicio de consultas Número consulta: 517 Fecha consulta: 22.04.03 Fecha respuesta: 29.05.03 Formulada por: XXX. Materia: Fiscalidad. Submateria: IVA CONSULTA PLANTEADA: Descripción de los hechos: 1º. Una empresa española compra una mercancía en Portugal, esta mercancía no sale de Portugal. 2º. La empresa española vende la citada mercancía a otra empresa portuguesa. 3º. La mercancía es enviada por la primera empresa portuguesa a la segunda (en ningún momento la mencionada mercancía entra en territorio español). Cuestiones: 1º. ¿Debe soportar IVA la empresa española, y si es así tiene derecho a deducírselo? 2º. ¿Debe repercutir IVA la empresa española? 3º. Tratamiento fiscal de la operación. NORMATIVA EXAMINADA: 1º. Ley del IVA. 2º. Ley 37/1992 de 28 de diciembre. RESPUESTA: 1º. La compra en Portugal de mercancías y la reventa en el propio territorio portugués no es una operación intracomunitaria sino una entrega interior de bienes situada en Portugal. 2º. Los tipos aplicables en Portugal son el 5%, 12% y 17%, dependiendo de la naturaleza de los bienes transmitidos o servicios prestados. 3º. Si la empresa española no opera a través de establecimiento permanente en Portugal deberá nombrar un representante en aquel país, que cumpla con los trámites de la declaración-liquidación. 4º. El IVA portugués soportado en la adquisición de las mercancías es deducible del repercutido en la reventa de las mismas. La diferencia entre ambas cantidades podrá ser devuelta en Portugal a petición del empresario. CONCLUSIÓN: Aunque la operación objeto de la consulta le es íntegramente de aplicación la normativa portuguesa sobre el IVA y no somos, ni podemos serlo, expertos en la toda la normativa tributaria comparada, creemos que es muy parecida a la española. Por la presente y salvo opinión mejor fundado, damos respuesta a su consulta planteada. Esta respuesta tiene carácter orientativo, no supone un convenio de consultoría formal y no es vinculante por lo que no se asume responsabilidad directa ni subsidiaria por parte del Re.G.A. REGISTRO GENERAL DE AUDITORES DEL CONSEJO SUPERIOR DE TITULADOS MERCANTILES Y EMPRESARIALES DE ESPAÑA. Servicio de consultas Número consulta: 518 Fecha consulta: 30.04.03 Fecha respuesta: 29.05.03 Formulada por: XXX. Materia: Auditoría. Submateria: Trabajos de revisión y verificación de otros estados o documentos contables. CONSULTA PLANTEADA: En relación con lo establecido sobre los trabajos regulados por la Ley 19/1988 de auditoría de cuentas: artículos 1.3. y 2.5., y el reglamento que desarrolla la mencionada Ley: artículos 2º b, 7, y 8, rogamos nos faciliten información sobre si la redacción del informe acerca de trabajos de revisión y verificación de otros estados o documentos contables que están comprendidos dentro de la auditoría de cuentas, se ha de ajustar estrictamente el formato establecido en las NTA sobre Informes de Auditoría, tal y como se establece en la NTA 3.9.1. Este planteamiento surge, porque en determinados trabajos de otros estados o documentos contables, tanto su contenido, como la opinión o conclusiones que de los mismos pueda derivarse resulta en la mayoría de los casos imposible de adaptar al modelo normalizado de informe independiente de cuentas anuales y, por ello es por lo que se solicita aclaración sobre si existe alguna excepción que permita en estos casos que el informe correspondiente pudiera ser de libre configuración y extensión. NORMATIVA EXAMINADA: 1º. Ley 19/1988 de Auditoría de Cuentas. 2º. Reglamento de Auditoría de Cuentas. RESPUESTA: La NTA 3.9.1. establece que en los distintos apartados de esta sección (se refiere a la sección de NTA sobre informes) se presentan los modelos normalizados de informes de auditoría de cuentas anuales, debiendo los auditores seguir estrictamente el formato y terminología de estos modelos. También deberá seguir estos modelos cuando el informe se refiera al balance, cuenta de pérdidas y ganancias y memoria en su conjunto, pero referidos a un periodo inferior al del ejercicio, o a uno de esos documentos aisladamente se podrá denominar de auditoría, elaborándose el mismo con el modelo normalizado. El informe de revisión y verificación de otros estados o documentos contables, que no se denominará de auditoría, sino de revisión y verificación del correspondiente documento contable contendrá al menos los siguientes datos: a. Identificación de la empresa o entidad a que se refiere el documento contable objeto de la revisión. b. Personas físicas o jurídicas que encargaron el trabajo y, en su caso, a quienes vaya destinado. c. Identificación de los documentos objeto de revisión y verificación que se incorporan al informe. d. Referencia a las normas técnicas aplicadas en el trabajo realizado, y en su caso, a los procedimientos previstos en ellas que no haya sido posible aplicar como consecuencia de cualquier limitación impuesta a la actividad auditora, así como a las incidencias que se pongan de manifiesto en el desarrollo de los trabajos realizados. e. Incorporación, en su caso, de aquellos comentarios que complementen el contenido del mencionado documento. f. Opinión técnica, con el contenido y alcance que se establecen en el artículo siguiente. g. Firma de quien o quienes lo hubieran realizado, con expresión de la fecha de emisión del informe. CONCLUSIÓN: No hemos encontrado excepción a esa obligación, en el sentido de que el informe pudiera ser de libre configuración y extensión. En concreto se ha de atener a lo que dice la NTA 3.9.1. tanto en lo referente al formato como a la terminología. Este modelo es válido sin necesidad de adaptación tanto cuando se trata de auditorías de cuentas anuales como cuando se refiere al balance, cuenta de pérdidas y ganancias y memoria, en su conjunto, pero referidos a un periodo inferior al del ejercicio, o a uno de estos documentos aisladamente, lo cual afectará lógicamente a la redacción del párrafo de alcance, de comparabilidad de la información y de opinión. En suma, de lo que se trata es de adaptar el modelo normalizado a los estados o documentos contables objeto de revisión y verificación observando que contenga los extremos contemplados en el artículo 7 del Reglamento. Por la presente y salvo opinión mejor fundado, damos respuesta a su consulta planteada. Esta respuesta tiene carácter orientativo, no supone un convenio de consultoría formal y no es vinculante por lo que no se asume responsabilidad directa ni subsidiaria por parte del Re.G.A. REGISTRO GENERAL DE AUDITORES DEL CONSEJO SUPERIOR DE TITULADOS MERCANTILES Y EMPRESARIALES DE ESPAÑA. Servicio de consultas Número consulta: 519 Fecha consulta: 29.05.03 Fecha respuesta: 29.05.03 Formulada por: XXX Materia: Auditoría. Submateria: Confirmación de terceros CONSULTA PLANTEADA: Clientes; he recibido la oportuna contestación de un cliente confirmándome OK el saldo con la empresa auditada. Este no me confirma el volumen de operaciones, de habérmelo confirmado hubiera obtenido una clara ventaja para cubrir la revisión de ventas. ¿Se puede considerar OK el volumen? Lo mismo en cuanto a proveedores y compras. NORMATIVA EXAMINADA: 1º. NTA sobre ejecución del trabajo. RESPUESTA: La NTA 2.5.1. establece que el auditor debe obtener evidencia suficiente y adecuada, mediante la realización y evaluación de las pruebas de auditoría que se consideren necesarias, al objeto de obtener una base de juicio razonable sobre los datos contenidos en las cuentas anuales que se examinan y poder expresar una opinión respecto de las mismas. La NTA 2.5.2 establece que la evidencia del auditor es la convicción razonable de que todos aquellos datos expresados en las cuentas anuales han sido y están debidamente soportados en tiempo y contenido por los hechos económicos y circunstanciales que realmente han ocurrido. La NTA 2.5.4 establece que la evidencia se obtiene por el auditor a través del resultado de las pruebas de auditoría aplicadas según las circunstancias que concurran en cada caso, y de acuerdo con el juicio profesional del auditor. La NTA 2.5.12 se refiere al concepto de adecuación de la evidencia como característica cualitativa, en tanto que el concepto suficiencia tiene carácter cuantitativo. ... La evidencia es adecuada cuando es pertinente para que el auditor emita su juicio profesional. CONCLUSIÓN: Lo que se plantea es si el auditor, empleando su juicio profesional, puede considerar que a través de la obtención de la evidencia suficiente y adecuada sobre la razonabilidad de un saldo de un cliente puede inferir que las ventas que se hayan efectuado a dicho cliente durante el periodo objeto de examen coinciden con las consignadas en dicho periodo en la cuenta de ventas o prestación de servicios correspondiente. No se va encontrar norma alguna que apoye o refute tal planteamiento puesto que nos encontramos estrictamente en el ámbito del juicio profesional del auditor, el cual puede decidir cuales son los procedimientos de auditoría adecuados para obtener la evidencia suficiente y adecuada. Parece en principio razonable que si un tercero ha confirmado al auditor que el saldo sobre el que se le requería confirmación es correcto solo se puede llegar a esa situación si la cuenta correspondiente a dicho saldo contiene los cargos y abonos precisos, luego recoge todos los cargos por ventas y los abonos por cobros. No obstante, y por precaución, se le recomienda al consultante que no soporte su opinión sobre la razonabilidad de las transacciones (ventas) habidas en el periodo únicamente en la evidencia obtenida a través de la confirmación de saldos (de clientes), sino que con la técnica de selección adecuada (se recomienda el muestreo estadístico) se realicen pruebas de carácter sustantivo sobre las mencionadas transacciones. No obstante, y dado que este extremo no se encuentra regulado en sentido positivo y negativo se recomienda que el auditor adopte las máximas precauciones y que documente adecuadamente su decisión en los papeles de trabajo. Por la presente y salvo opinión mejor fundado, damos respuesta a su consulta planteada. Esta respuesta tiene carácter orientativo, no supone un convenio de consultoría formal y no es vinculante por lo que no se asume responsabilidad directa ni subsidiaria por parte del Re.G.A. REGISTRO GENERAL DE AUDITORES DEL CONSEJO SUPERIOR DE TITULADOS MERCANTILES Y EMPRESARIALES DE ESPAÑA. Servicio de consultas Número consulta: 520 Fecha consulta: 22.04.03 Fecha respuesta: 29.05.03 Formulada por: XXX Materia: Auditoría. Submateria: Trabajos de revisión y verificación de otros estados o documentos contables. CONSULTA PLANTEADA: Revisiones limitadas al empleo de fondos recibidos por academias privadas como centros colaboradores de acciones formativas. La pregunta es sobre el punto 3.1 de la resolución de alcance de trabajo que dice: verificar que la naturaleza, cuantía y características de los gastos corresponden a los fines para los que se concedió la subvención, y que los costes necesarios para la realización de la actividad subvencionada corresponden a gastos elegibles y subvencionables de acuerdo con las normas reguladoras de la convocatoria de la subvención y las propias de concesión de la misma. Ni en las normas reguladoras de la convocatoria ni en la resolución de concesión se hace ninguna referencia a lo que se considera gastos elegibles, solo se regula lo de la auditoría o revisión limitada. En esta resolución no se especifica nada sobre los requerimientos que han de aplicarse al trabajo de revisión, como por ejemplo, procedimientos a aplicar, cantidad de elementos de muestra a verificar, o ¿verificar todo?, motivos por los que se ha de expresar la salvedad; es decir: no se especifica nada. En otros tipos de trabajo de revisión de subvenciones he visto que estos puntos están más especificados y claros. Cuando es la misma sociedad o asociación o fundación la que incurre en los gastos de profesorado y personal de dirección, gestión, administrativo, etc. necesarios para la impartición de los cursos no hay problema, pero esto no es lo habitual. Lo frecuente es que todos, o gran parte de estos servicios docentes y de seguimiento y gestión sean subcontratados a otras entidades mercantiles controladas por los mismos socios que son las que cuentan con el personal cualificado para ello, bien mediante personal con contrato laboral o bien mediante contratos mercantiles. Es normal que los componentes de una determinada asociación empresarial adjudicataria de un contrato programa sean sociedades controladas por un mismo propietario. Se supone que estas entidades colaboradoras del XXXX no deben tener beneficio por la impartición de estos cursos, ya que la subvención debe solamente, cubrir sus costes, por lo que se buscan a través de subcontrataciones de servicios, a veces hasta dos o tres veces traspasar los beneficios a otras sociedades. Lo mismo se aplica a otros servicios necesarios para los cursos, como alquiler de ordenadores, material didáctico, material fungible, etc, son subcontratados. El problema es que estas empresas subcontratistas también pueden tener asignaciones directas del mismo XXX o de otros organismos, o imparten cursos privados, con lo cual se mezclan los recursos entre diferentes clientes o cursos propios. La pregunta es referente a los procedimientos que debe seguir el auditor de cara a realizar su revisión limitada de la entidad principal, la que ha recibido la asignación de cursos individuales o por contrato programa del XXX (y con la que se ha firmado el contrato de auditoría) cuando se encuentra con subcontrataciones que desvían los factores (humanos y materiales) hacia otras empresas. Esto implica, en teoría, y en casi todos los casos, que se necesite auditar otras empresas con un mayor alcance que la entidad con la que hemos contratado el trabajo, para comprobar que lo facturado por los terceros corresponde a bienes y servicios reales, razonables, adecuados y no ficticios. NORMATIVA EXAMINADA: 1º. NTA sobre ejecución del trabajo. 2º. Resolución ICFEM. RESPUESTA: La NTA 2.5.1. establece que el auditor debe obtener evidencia suficiente y adecuada, mediante la realización y evaluación de las pruebas de auditoría que se consideren necesarias, al objeto de obtener una base de juicio razonable sobre los datos contenidos en las cuentas anuales que se examinan y poder expresar una opinión respecto de las mismas. La NTA 2.5.2 establece que la evidencia del auditor es la convicción razonable de que todos aquellos datos expresados en las cuentas anuales han sido y están debidamente soportados en tiempo y contenido por los hechos económicos y circunstanciales que realmente han ocurrido. La NTA 2.5.4 establece que la evidencia se obtiene por el auditor a través del resultado de las pruebas de auditoría aplicadas según las circunstancias que concurran en cada caso, y de acuerdo con el juicio profesional del auditor. La NTA 2.5.12 se refiere al concepto de adecuación de la evidencia como característica cualitativa, en tanto que el concepto suficiencia tiene carácter cuantitativo. ... La evidencia es adecuada cuando es pertinente para que el auditor emita su juicio profesional. CONCLUSIÓN: El alcance del trabajo queda a nuestro juicio perfectamente regulado en el punto 3.1. de la Resolución, incluso la expresión de gastos elegibles que podrían equipararse a gastos necesarios para la consecución de los fines por los que fue concedida la subvención. Con respecto a los procedimientos de auditoría a aplicar es necesario recordar que el enfoque de la auditoría que se desprende de las NTA es a nuestro juicio positivo, lo cual implica que el auditor cuando planifica su trabajo no lo hace pensando que los estados financieros objeto de examen contienen errores o irregularidades por lo que su detección no es el único objetivo que se persigue con la auditoría. El auditor, haciendo uso de juicio profesional, del conocimiento del sector y del propio negocio diseña los procedimientos de auditoría que le permitan obtener la evidencia adecuada y suficiente con la que soportar su opinión acerca de la razonabilidad de los estados financieros objeto de examen. Por tanto, los procedimientos de auditoría a aplicar no deberían diferir sensiblemente de los que se aplicarían a la auditoría de unas cuentas anuales, por ejemplo. La duda que le surge al consultante acerca de la veracidad de las facturaciones efectuadas por los subcontratistas estimamos se puede resolver partiendo de la base que de no hacerlo así, el contratista y el subcontratista estarían incurriendo en falsedad documental por lo que no es probable que se dé esta circunstancia, aunque desgraciadamente es posible. Por todo lo anterior le recomendamos al consultante que se ciña en la medida de los posible al alcance que le fija la resolución y que aplique procedimientos habituales de auditoría, tratando de obtener confirmación escrita de los subcontratistas de los importes y conceptos facturados, comprobando los conceptos de las facturas para verificar que su naturaleza se corresponden con la de la subvención, además de comprobar su propio aspecto formal, comprobar los medios de pago empleados para liquidar la deuda contraída con los subcontratistas, que el servicio se ha facturado dentro del periodo subvencionable y a precios de mercado y solicitando de la dirección del centro, organismo o institución receptor de la subvención la firma de una carta de manifestaciones donde, además de los extremos habituales en este tipo de documentos, se solicite de la dirección manifestación explícita de los aspectos que acabamos de tratar. Por la presente y salvo opinión mejor fundado, damos respuesta a su consulta planteada. Esta respuesta tiene carácter orientativo, no supone un convenio de consultoría formal y no es vinculante por lo que no se asume responsabilidad directa ni subsidiaria por parte del Re.G.A. REGISTRO GENERAL DE AUDITORES DEL CONSEJO SUPERIOR DE TITULADOS MERCANTILES Y EMPRESARIALES DE ESPAÑA. Servicio de consultas Número consulta: 521 Fecha consulta: 15.04.03 Fecha respuesta: 29.05.03 Formulada por: XXX Materia: Auditoría. Submateria: Existencias. CONSULTA PLANTEADA: Antecedentes: Sociedad dedicada a la distribución de vehículos de turismo e industriales (concesionario de automóviles), y de recambios y accesorios de dichos vehículos (epígrafes 615.1 y 691.2 del IAE y epígrafes 50.10, 50.20 y 50.30 de la CNAE). La sociedad destina exclusivamente a fines de demostración, cortesía a clientes, y promoción de ventas determinados vehículos, vendiéndolos posteriormente (generalmente en un plazo inferior a un año), aunque por exigencias de la empresa concesionaria deben figurar a nombre de la entidad consultante un plazo mínimo. Los vehículos de demostración y promoción son matriculados por la entidad consultante a su nombre y afectados exclusivamente a la actividad empresarial de la entidad. Cuestión: ¿Cabe entender que estos vehículos de demostración y promoción son existencias de la entidad, debiendo contabilizarse en el grupo 3 de existencias?, o, por el contrario, ¿cabe entender que estos vehículos se afectan a inmovilizaciones? NORMATIVA EXAMINADA: 1º. RD 1643/1990, de 20 de diciembre por el que se aprueba el Plan General de Contabilidad. RESPUESTA: Los bienes se afectan a inmovilizaciones o se clasifican como existencias en función de si se trata de elementos que están destinados a servir de forma duradera a la actividad empresarial (inmovilizado) o bien si se trata de elementos destinados a entrar en el ciclo de producción o comercialización y que al constituir el objeto económico de la empresa no son amortizables (existencias). El PGC considera elementos de inmovilizado aquellos destinados a servir de forma duradera en la actividad de la empresa y como existencias, aquellos elementos del activo destinados a la venta con o sin transformación. La distinción entre inmovilizado y existencias viene determinada por la función que cumplan los elementos en relación con su participación en el respectivo proceso productivo y de comercialización de la empresa, de manera que un bien pertenecerá al grupo de existencias si está destinado a transformarse en disponibilidad financiera a través de la venta como actividad ordinaria de la empresa. CONCLUSIÓN: Pueden ser válidas ambas acepciones, como existencias o como inmovilizado, si bien nuestra experiencia nos dice que la práctica habitual es considerarlos como elementos integrantes del inmovilizado ya que en principio se desconoce cual va a ser la duración de la permanencia de los mismos en el seno de la empresa, si bien la misma suele ser muy breve con objeto de evitar la depreciación que experimentan este tipo de bienes tan pronto son matriculados. Si la permanencia en el seno de la empresa va a ser breve (inferior al año), su activación como inmovilizado lleva aparejado su amortización contable y su provisión a la fecha de cierre del ejercicio por la diferencia que se producirá entre su precio de adquisición y su valor venal de mercado. Por el contrario su tratamiento como existencias evitaría los problemas de la amortización no así de la provisión por depreciación. El consultante menciona una sentencia del TSJ de la Comunidad Valenciana de fecha 4 de noviembre de 2.002 en la que se determina que los vehículos de demostración deben ser considerados como inmovilizado material. Este hecho unido a los argumentos anteriormente expuestos nos llevan a recomendar la calificación de los vehículos de demostración, cortesía, etc como elementos de transporte dentro del inmovilizado material. Por la presente y salvo opinión mejor fundado, damos respuesta a su consulta planteada. Esta respuesta tiene carácter orientativo, no supone un convenio de consultoría formal y no es vinculante por lo que no se asume responsabilidad directa ni subsidiaria por parte del Re.G.A. REGISTRO GENERAL DE AUDITORES DEL CONSEJO SUPERIOR DE TITULADOS MERCANTILES Y EMPRESARIALES DE ESPAÑA. Servicio de consultas Número consulta: 522 Fecha consulta: 04.06.03 Fecha respuesta: 20.06.03 Formulada por: XXX Materia: Auditoría. Submateria: Importancia y riesgo en auditoría. CONSULTA PLANTEADA: Revisión de plan global de auditoría efectuado por el consultante siguiendo las nuevas guías Re.G.A. 16 y 19 y la hoja de cálculo para su aplicación puesto se obtiene un intervalo de selección de la muestra muy elevado. NORMATIVA EXAMINADA: Guías Re.G.A. 16 y 19. RESPUESTA: El importe base seleccionado es el total de ingresos del ejercicio que asciende a 31.357.350; el año de auditoría es el 3º y siguientes por lo que RA=4% y NCA=96% (1-RA); RI=0,3; RCI=0,45 y RRA=0,30; tipo empresa: pyme. CONCLUSIÓN: Con los datos facilitados el NPmin=940.720,5; NPmax=1.567.867,5 y no los que se desprenden de la consulta; RMS=0,99; R=0,01; RA*=(0,3+0,45+0,3+0,99)/4=0,44 luego se pude seleccionar NPmax; R=-LnRMS=0,01; J=NPmax/R=156.001.503 siendo J>importe base. En primer lugar se han seleccionado unos riesgos muy bajos por lo que resulta un RMS muy alto que da lugar a un factor de confiabilidad combinada R muy pequeño. Como este factor R es el cociente en la fórmula que se emplea para obtener la J (NP/R) resulta que se obtiene una J muy grande que da lugar a que muy pocos saldos de balance e importes acumulados de pérdidas y ganancias resulten materiales y se les pueda aplicar muestreo estadístico (saldo> ó igual a V/J). En estos casos, y con independencia de los valores obtenidos al evaluar el RI, RCI y RAS se debe proceder a aumentar los valores asignados a estos riesgos de tal manera que se obtenga un RMS menor, que de lugar a un factor R mayor y por tanto a una J menor. También se puede incidir en la selección del NPmin en detrimento del NPmax. Así por ejemplo y para el caso que propones: RI=0,6; RCI=0,6; RAS=0,6; RMS=0,19; NP seleccionado=NPmin=940.720,5; R=1,66; J=566.449,58. Si en lugar de haber seleccionado NPmin hubieras seleccionado NPmax hubieras obtenido J=944.498,49. Por la presente y salvo opinión mejor fundado, damos respuesta a su consulta planteada. Esta respuesta tiene carácter orientativo, no supone un convenio de consultoría formal y no es vinculante por lo que no se asume responsabilidad directa ni subsidiaria por parte del Re.G.A. REGISTRO GENERAL DE AUDITORES DEL CONSEJO SUPERIOR DE TITULADOS MERCANTILES Y EMPRESARIALES DE ESPAÑA. Servicio de consultas Número consulta: 523 Formulada por: XXX. Submateria: Existencias Fecha consulta: 05.06.03 Fecha respuesta: 20.06.03 Materia: Contabilidad. CONSULTA PLANTEADA: Las sociedades cooperativas que realizan su actividad en el marco de una producción de carácter cíclico y estacional, han adoptado el sistema de valorar las existencias finales a su precio de venta. Se sostiene, como forma tradicional de presentación de estados financieros, que este método sirve para una presentación más comprensible de la actividad ya que, así, las cuentas del ejercicio reflejan el resultado de un ciclo de cultivo. Resultado que posteriormente ha de liquidarse al socio en sus retornos cooperativos. La cuestión radica en que si esta práctica que es considerada en el sector aceptable y justificable, por lo que debe constar en los estados financieros, debe aparecer en el informe de auditoría como párrafo de énfasis. NORMATIVA EXAMINADA: 1º. PGC. 2º. Documento 8 de AECA. 3º. Norma número 2 del IASC. RESPUESTA: El PGC establece que los bienes comprendidos en las existencias deben valorarse al precio de adquisición o coste de producción. Añade que cuando se trate de bienes cuyo precio de adquisición o coste de producción no sea identificable de modo individualizado, se adoptará con carácter general el método del precio medio o coste ponderado, siendo aceptables y pudiendo adoptarse los métodos FIFO, LIFO u otro análogo si la empresa los considera más convenientes para su gestión. Los anteriores criterios son compartidos por la AECA en su documento 8º sobre principios contables de las existencias, el cual añade expresamente que por no pertenecer al sistema general del coste histórico, no son aceptables las modalidades de valoración de precio medio simple, o de último precio de compra o coste de reposición. El International Accounting Standard Comité (IASC) en la Norma Internacional de Contabilidad número 2 sobre valoración y presentación de las cuentas de existencias ha adoptado el sistema de coste histórico, por ser “el más ampliamente utilizado para la elaboración de los estados financieros”, definiendo el coste histórico de las existencias como la suma de los costes de compra, transformación y cualesquiera otros necesarios para dar a las mismas su estado y condición actual. CONCLUSIÓN: Parece claro que el sistema seguido por la cooperativa en cuestión para valorar las existencias, aún siendo un método generalmente empleado por las empresas del sector, es contrario a la normativa establecida por el PGC y por los organismos internacionales de contabilidad, por lo que, salvo que exista alguna norma contable específica que permita a este tipo de entidades valorar las existencias a su precio de venta. Por lo tanto, en el informe de auditoría ha de ser tratada esta circunstancia como una salvedad por incumplimiento de principio de contabilidad generalmente aceptado, cuantificando el efecto que sobre las cuentas anuales tendría la aplicación de la norma vulnerada, todo ello siempre y cuando dicha cuantificación sea material, para lo cual se recomienda consultar NTA sobre elaboración de informes y sobre importancia relativa así como Guías Re.G.A. 16 y 19. Por la presente y salvo opinión mejor fundado, damos respuesta a su consulta planteada. Esta respuesta tiene carácter orientativo, no supone un convenio de consultoría formal y no es vinculante por lo que no se asume responsabilidad directa ni subsidiaria por parte del Re.G.A. REGISTRO GENERAL DE AUDITORES DEL CONSEJO SUPERIOR DE TITULADOS MERCANTILES Y EMPRESARIALES DE ESPAÑA. Servicio de consultas Número consulta: 524 Fecha consulta: 09.06.03 Fecha respuesta: 20.06.03 Formulada por: XXX Materia: Auditoría. Submateria: Retribución auditoras CONSULTA PLANTEADA: Os rogamos aclaración respecto ala Disposición Adicional Decimocuarta de la Ley 44/2002, que se incluye también en la Ley de Auditoría en la Disposición Adicional Quinta, en la que se indica que las entidades auditadas deben informar específicamente en la memoria de las cuentas anuales de las cantidades abonadas a los auditores ... Entendemos que ésta información se incluiría en el punto otra información de la memoria, y nuestra duda es si hay que indicar los honorarios a percibir por el auditor por la revisión de cuentas del año 2.002, cuyo importe generalmente se conoce al año siguiente, o las cantidades que la entidad ha abonado al auditor en el ejercicio 2.002 que generalmente se refiere a la auditoría del ejercicio 2.001. En resumen, nuestra duda es si en la memoria del ejercicio 2.002 la entidad auditada debe informar de las cantidades que la entidad ha abonado al auditor en el ejercicio 2.002, que generalmente se refiere a la auditoría del ejercicio 2.001. En resumen, nuestra duda es si en la memoria del ejercicio 2.002 la entidad auditada debe informar de las cantidades efectivamente abonadas al auditor durante el año 2.002, o bien se debe dejar constancia en la memoria de la previsión de honorarios a percibir por el auditor, con motivo de la auditoría de cuentas del ejercicio 2.002. NORMATIVA EXAMINADA: 1º. Ley Financiera (BOE 281 de 23 de noviembre de 2.002). RESPUESTA: La disposición adicional decimocuarta de la Ley Financiera está dedicada a la transparencia en la remuneración de auditores y establece que “los auditores de cuentas deben comunicar al ICAC anualmente las horas y honorarios facturados a cada cliente, distinguiendo las que correspondan a auditoría de cuentas y otros servicios prestados, así como cualquier otra información que precise el Instituto para el ejercicio de sus funciones. El importe de estos honorarios anteriormente mencionados será público, y se informará específicamente en la memoria de las cuentas anuales, desglosando las abonadas a cualquier sociedad del mismo grupo de sociedades a que perteneciese el auditor de cuentas, o cualquier otra sociedad con la que el auditor esté vinculado por propiedad común, gestión o control”. CONCLUSIÓN: Puesto que al ICAC en el mes de enero de cada año se le tiene que informar de los trabajos de auditoría efectuados en el ejercicio inmediatamente anterior y que se refieren a cuentas anuales del ejercicio anterior a éste (en enero de 2.004 se informará sobre trabajos de auditoría efectuados en el ejercicio 2.003 sobre cuentas anuales del ejercicio 2.002) la información a incluir en la memoria del ejercicio 2.002 será la de los honorarios que se devenguen por la realización de la auditoría de dichas cuentas anuales (que deberían figurar provisionados en la contabilidad del ejercicio 2.002), con independencia de cuando se produzca el cobro de los mismos. Por la presente y salvo opinión mejor fundado, damos respuesta a su consulta planteada. Esta respuesta tiene carácter orientativo, no supone un convenio de consultoría formal y no es vinculante por lo que no se asume responsabilidad directa ni subsidiaria por parte del Re.G.A. REGISTRO GENERAL DE AUDITORES DEL CONSEJO SUPERIOR DE TITULADOS MERCANTILES Y EMPRESARIALES DE ESPAÑA. Servicio de consultas Número consulta: 525 Fecha consulta: 12.06.03 Fecha respuesta: 20.06.03 Formulada por: XXX Materia: Auditoría. Submateria: Causas legales de disolución. CONSULTA PLANTEADA: Empresa que incurre en causa de disolución según el artículo 260 del TRLSA como consecuencia de pérdidas acumuladas. No obstante se han realizado modificaciones en la sociedad para subsanar esta situación: se ha modificado la actividad de la empresa obteniendo ingresos fijos anuales, se han cancelado numerosas deudas (aunque siguen manteniendo otras de importancia), y pese a que se han obtenido pérdidas en este ejercicio han sido significativamente inferiores a las de años anteriores. ¿Habría que incluir una salvedad en el informe? NORMATIVA EXAMINADA: 1º. Artículo 260 del TRLSA. 2º. NTA 3.6.11. 3º. NTA 3.7.9. RESPUESTA: El artículo 260 del TRLSA se refiere a las causas de disolución de la SA y en su apartado 4º establece que la SA se disolverá “... por consecuencia de pérdidas que dejen reducido el patrimonio a una cantidad inferior a la mitad del capital social, a no ser que éste se aumente o se reduzca en la medida suficiente”. La NTA 3.6.11 establece que la necesidad de denegar la opinión puede originarse exclusivamente por: limitaciones al alcance; incertidumbre, de importancia y magnitud muy significativas que impidan al auditor formarse una opinión. La NTA 3.7.9 define la incertidumbre como un asunto o situación de cuyo desenlace final no se tiene certeza a la fecha de balance, por depender de que ocurra o no algún otro hecho futuro, ni la entidad puede estimar razonablemente ni por lo tanto, puede determinar si las cuentas anuales han de ser ajustadas, ni por qué importes. CONCLUSIÓN: A nuestro juicio, las actuaciones llevadas a cabo por los administradores de la sociedad para sacar a la misma de la causa legal de disolución en que se halla no son válidas puesto que no han implicado un aumento o reducción del capital social en la medida suficiente, tal y como plantea el TRLSA. Además, tal y como se indica en la consulta la Sociedad ha cerrado el ejercicio inmediatamente posterior a aquel en el que se puso de manifiesto la causa legal de disolución con nuevas pérdidas que agravan todavía más si cabe la situación legal en que se encuentra la misma. La jurisprudencia establece para los administradores un plazo de dos meses para adoptar la decisión de disolver o para restablecer el equilibrio patrimonial, a partir de la fecha en que son conocedores de la situación de disolución. De no cumplir con ese plazo o con lo preceptuado en el apartado 4º del artículo 260 del TRLSA los administradores estarían incurriendo en responsabilidad civil. En el ejercicio n el auditor se encontraba ante incertidumbre de cuyo desenlace final no se tenía certeza a la fecha de emisión del informe ya que desconocía la decisión que iban a adoptar los accionistas acerca de la continuidad (que implicaba necesariamente una ampliación o reducción de capital) o por la disolución de la misma. Por este motivo estimamos que la opinión del mencionado informe debería haber sido denegada. En el ejercicio n+1 el auditor, además de volver a encontrarse con la incertidumbre del ejercicio n, se encuentra con un incumplimiento legal que debería ser incluido como salvedad en un párrafo intermedio que no variaría el sentido de la opinión, que a nuestro juicio debería ser denegada. Por la presente y salvo opinión mejor fundado, damos respuesta a su consulta planteada. Esta respuesta tiene carácter orientativo, no supone un convenio de consultoría formal y no es vinculante por lo que no se asume responsabilidad directa ni subsidiaria por parte del Re.G.A. REGISTRO GENERAL DE AUDITORES DEL CONSEJO SUPERIOR DE TITULADOS MERCANTILES Y EMPRESARIALES DE ESPAÑA. Servicio de consultas Número consulta: 526 Fecha consulta: 12.06.03 Fecha respuesta: 20.06.03 Formulada por: XXX Materia: Auditoría. Submateria: Evidencia en auditoría. CONSULTA PLANTEADA: Empresa cuyo inmovilizado es la partida más significativa del activo. Se han realizado numerosas reformas que pueden haber modificado significativamente las partidas que figuran en el activo. Nos han facilitado las facturas de las mencionadas reformas y las han contabilizado como inmovilizado en curso, debido a que hasta la fecha de cierre no habían finalizado las obras. No obstante no han causado baja ninguna partida incluida en el activo en años anteriores, y tenemos conocimiento, ya que así nos lo manifestó la empresa a través de una carta recibida antes del cierre del ejercicio, de que estaba modificando la mayor parte del mobiliario, carpintería, baños, etc. En la memoria han incluido un apartado en el que informan que esta situación así como de que las altas/bajas correspondientes al inmovilizado las realizarán cuando se terminen las reformas. Por todo lo anterior no se ha podido realizar un inventario del inmovilizado ni a la fecha de cierre ni con posterioridad, y puede que no refleje la imagen fiel de la empresa. ¿Deberíamos incluir una limitación al alcance en nuestro informe? NORMATIVA EXAMINADA: 1º. NTA sobre ejecución del trabajo y elaboración de informes. 2º. Guía Re.G.A. números 1, 16 y 19. RESPUESTA: Entre los procedimientos de auditoría que con carácter general se aplican sobre los elementos integrantes del inmovilizado inmaterial se encuentran los siguientes: verificar que sean propiedad de la empresa, que se encuentren en buenas condiciones de uso, que estén debidamente protegidos y asegurados, que se encuentren libres de cargas y gravámenes, etc. CONCLUSIÓN: Tal y como se desprende de la consulta planteada el auditor ha podido verificar que la razonabilidad del saldo que presenta a la fecha de cierre del ejercicio la cuenta inmovilizado en curso dado que le han sido entregadas las facturas de las empresas a las que se le han adjudicado las obras. Esas facturas constituyen a nuestro juicio evidencia adecuada acerca de la razonabilidad del saldo que se podría ver reforzada y ampliada con una inspección física que no ha sido realizada (en la consulta no se especifica porqué no se efectuó el inventario físico). Si el auditor, empleando su juicio profesional, estima oportuno la realización de un procedimiento de auditoría consistente en efectuar un inventario físico y no ha podido llevarlo a cabo, habría que distinguir dos situaciones. 1º. Que el cliente impidiese o dificultase la realización de ese procedimiento de auditoría, en cuyo caso estaríamos ante una limitación al alcance que de ser material debería incluirse en el informe afectando al párrafo de alcance, incluyendo un párrafo intermedio de salvedad y afectando a la opinión. 2º. Que el cliente no haya impedido la realización de ese procedimiento de auditoría pero que por técnicos, económicos, o de cualquier otra índole hayan dificultado, impedido o desestimado ese procedimiento, en cuyo caso el auditor deberá efectuar procedimientos de auditoría alternativos a la inspección física con los que obtener la evidencia suficiente y adecuada, como por ejemplo certificaciones de obra de las empresas contratistas, inventario extemporáneo, etc. Por la presente y salvo opinión mejor fundado, damos respuesta a su consulta planteada. Esta respuesta tiene carácter orientativo, no supone un convenio de consultoría formal y no es vinculante por lo que no se asume responsabilidad directa ni subsidiaria por parte del Re.G.A. REGISTRO GENERAL DE AUDITORES DEL CONSEJO SUPERIOR DE TITULADOS MERCANTILES Y EMPRESARIALES DE ESPAÑA. Servicio de consultas Número consulta: 527 Fecha consulta: 12.06.03 Fecha respuesta: 20.06.03 Formulada por: XXX Materia: Auditoría. Submateria: Aumento de capital por compensación de crédito CONSULTA PLANTEADA: Una sociedad anónima toma un acuerdo en consejo de ampliar capital en el año 99 concediendo un plazo de 2 años para suscribir las acciones. En julio de 2.002 se eleva a público el acuerdo de aumento de capital social mediante la emisión de nuevas acciones que están suscritas y desembolsadas. La citada escritura no se inscribe por parte del registrador alegando la falta del preceptivo informe especial de auditor al excluir el derecho de suscripción preferente. Durante el año 03 la sociedad toma el acuerdo de ampliación de capital nuevamente, esta vez cumpliendo con el requisito legal de solicitar al Registrador Mercantil el nombramiento de auditor para la emisión del citado informe especial. La sociedad contabilizó la citada ampliación de capital en el año 02. ¿Esto es correcto? o estamos en el caso de un aumento de capital con desembolso diferido, dado que en el acuerdo de consejo se dice que el desembolso consistirá en la compensación de los créditos derivados de los desembolsos realizados por los accionistas. NORMATIVA EXAMINADA: 1º. TRLSA. RESPUESTA: El apartado b del artículo 156 de la LSA dedicado a aumento de capital por compensación de créditos establece como requisito para llevar a cabo el mismo “que al tiempo de la convocatoria de la junta se ponga a disposición de los accionistas, en la forma establecida en la letra c) del artículo primero del artículo 144, una certificación del auditor de cuentas de la sociedad que acredite que, una vez certificada la contabilidad social, resultan exactos los datos ofrecidos por los administradores sobre los créditos en cuestión. Si la sociedad no tuviere auditor de cuentas, la certificación deberá ser expedida por un auditor a petición de los administradores”. La disposición adicional novena del la Ley Financiera modifica el artículo 159 de la LSA y establece en su apartado b “que al tiempo de la convocatoria de la Junta de Accionistas se ponga a disposición de los accionistas ... y un informe elaborado, bajo su responsabilidad, por un auditor de cuentas distinto del auditor de las cuentas de la sociedad, nombrado a estos efectos por el Registro Mercantil ...” CONCLUSIÓN: A nuestro juicio la ampliación de capital tuvo lugar en el mes de julio de 2.002 puesto que en dicha fecha se produjo la elevación a público del acuerdo correspondiente de junta de accionistas. Dicha ampliación adolecía de un defecto formal cual era la falta de preceptivo informe especial de auditor de ampliación de capital con exclusión del derecho de suscripción preferente. Una vez el auditor haya emitido su informe y el mismo se haya depositado en el Registro Mercantil quedará completamente perfeccionada la operación llevada a cabo en el mes de julio de 2.002. Por la presente y salvo opinión mejor fundado, damos respuesta a su consulta planteada. Esta respuesta tiene carácter orientativo, no supone un convenio de consultoría formal y no es vinculante por lo que no se asume responsabilidad directa ni subsidiaria por parte del Re.G.A. REGISTRO GENERAL DE AUDITORES DEL CONSEJO SUPERIOR DE TITULADOS MERCANTILES Y EMPRESARIALES DE ESPAÑA. Servicio de consultas Número consulta: 528 Fecha consulta: 16.06.03 Fecha respuesta: 20.06.03 Formulada por: XXX Materia: Auditoría. Submateria: Trabajos de revisión y verificación de otros estados o documentos contables. CONSULTA PLANTEADA: La presente es para solicitar información en lo referente a una auditoría de balance de una empresa cooperativa que se va a transformar en sociedad limitada (Ley 18/2002, de 5 de julio, de Cooperativas. artículo 84 apartado 4 y 5). 1º. ¿Debemos entender que debe realizar una auditoría completa, pero debemos dar más importancia al balance? 2º. ¿Existe algún informe para estos casos? 3º. ¿Mi nombramiento debe inscribirse en algún registro? NORMATIVA EXAMINADA: Ley 18/2002 de Cooperativas de Cataluña, Artículos 13 y 84. Ley 2/1995 de Sociedades de Responsabilidad Limitada, Artículo 93 Art. 142.3 LIS L 43/1995 de 27.12 Art. 57 Ley de Fundaciones y de Incentivos Fiscales a la Participación Privada en Fines de Interés General (Ley de Mecenazgo) L 30/1994 de 24.11 Art. 135.2 RESPUESTA: 1º Entendemos que, de acuerdo con la propia Ley 18/2002, se debe de realizar una auditoría no completa si entendemos por auditoria completa la auditoria de cuentas anuales, pero sí una auditoria de balance, en los términos previstos en los artículos 6 a 8 y, concretamente, el 8.2 En este caso nos encontramos ante un “informe de auditoria independiente de balance de situación de acuerdo con lo preceptuado en el artículo 84 de la LCC”. Por tanto y para ello, de acuerdo con lo dispuesto en la Resolución del ICAC de 01-09-92, BOICAC 10, la auditoria deberá poner de manifiesto la adecuación contable de activos, pasivos exigibles y, por diferencia, el neto patrimonial de la sociedad cooperativa, con lo cual se deberán de revisar, aplicando obviamente las técnicas de auditoria, tanto las magnitudes del balance como aquellos puntos de la memoria que hagan referencia al mismo. 2º Modelo de informe, si bien no existe ninguno de específico y concreto para este tipo de actuaciones, entendemos que son válidos, como para actuaciones similares, los propios modelos de informes de auditoria de las cuentas anuales previstos en la Resolución del ICAC de 19-01-91, BOICAC número 4, de acuerdo con la redacción dada por la de 01-12-94, BOICAC número 19, es decir, los modelos generales de informes de auditoría de cuentas anuales pero, eso sí, cada vez que se haga referencia a las cuentas anuales o a sus componentes, deberá de sustituirse por “balance”. “Hemos auditado el balance de situación... “ y, por tanto, no hablar de resultados ni de cuadro de financiación, ni de informe de gestión, etc. 3º El nombramiento debe de inscribirse necesariamente, de acuerdo con el artículo 13 de la LCC, en el Registro de Sociedades Cooperativas” CONCLUSIÓN: Por el tipo de consulta ya vierten las conclusiones en el propio cuerpo de la respuesta. Por la presente y salvo opinión mejor fundado, damos respuesta a su consulta planteada. Esta respuesta tiene carácter orientativo, no supone un convenio de consultoría formal y no es vinculante por lo que no se asume responsabilidad directa ni subsidiaria por parte del Re.G.A. REGISTRO GENERAL DE AUDITORES DEL CONSEJO SUPERIOR DE TITULADOS MERCANTILES Y EMPRESARIALES DE ESPAÑA. Servicio de consultas Número consulta: 529 Fecha consulta: 18.06.03 Fecha respuesta: 20.06.03 Formulada por: XXX Materia: Auditoría. Submateria: Nombramiento auditores CONSULTA PLANTEADA: Sociedad Limitada constituida por dos socios con el 50% de capital social cada uno. No existe obligación de auditoría. A la fecha ambos socios tienen diferencias irreconciliables, para la Junta General a celebrar el día 30.06.03 se prevee que las cuentas anuales del ejercicio 2.002 no sean aprobadas por mayoría del capital social; es decir: existirá empate al 50%. ¿Se puede realizar el depósito de cuentas? Uno de los socios, a la sazón administrador, ¿puede nombrar auditor para realizar auditoría de cuentas de carácter voluntario del ejercicio 2.002 aunque esta auditoría, y su nombramiento, sean posteriores al 30.06.02. En el caso anterior, el otro socio ¿podría, aun habiendo designado el administrador una auditoría voluntaria, solicitar auditoría de cuentas por vía judicial?, ¿o tendría que aceptar la auditoría a realizar por el auditor designado por el administrador? ¿Se puede inscribir la auditoría como parte integrante de las cuentas anuales? Les ruego que además me indiquen el articulado de las leyes donde se da respuesta a estas cuestiones. NORMATIVA EXAMINADA: 1º. Artículos93, 171, 204.1, XX del TRLSA. RESPUESTA: El artículo 93 del TRLSA establece con respecto a la junta general que los accionistas, constituidos en junta general debidamente convocada, decidirán por mayoría en los asuntos propios de la competencia de la junta. El artículo 171 del TRLSA establece que los administradores de la sociedad estarán obligados a formular, en el plazo máximo de tres meses contados a partir del cierre del ejercicio social, las cuentas anuales, el informe de gestión y la propuesta de aplicación del resultado, así como, en su caso, las cuentas y el informe de gestión consolidados. El artículo 204 del TRLSA establece que las personas que deben ejercer la auditoría de cuentas serán nombradas por la Junta General antes de que finalice el ejercicio a auditar por un periodo de tiempo determinado inicial, que no podrá ser inferior a tres años ni superior a nueve a contar desde la fecha en que se inicie el primer ejercicio a auditar, pudiendo ser reelegidas por la Junta General anualmente una vez haya finalizado el periodo inicial. CONCLUSIÓN: Las cuentas anuales solo pueden ser aprobadas si se cuenta con el la mayoría de los derechos de voto por lo que un empate técnico no implica aprobación ni rechazo de las cuentas anuales por lo que se produce una situación de indefinición. No obstante para proceder al depósito de las cuentas anuales lo que se requiere es que los administradores hayan formulado las mismas en tiempo y forma para lo cual el secretario del consejo con el visto bueno del presidente emite un certificado de formulación. Dado que la sociedad no está obligada a someter sus cuentas anuales a auditoría el socio que a su vez es administrador puede nombrar auditor con posterioridad a la fecha de cierre del ejercicio a auditar. El otro socio podría solicitar por vía judicial la designación de auditor de cuentas, pudiendo la sociedad recurrir dicho acto alegando que ya ha designado auditor. Entendemos que solo puede existir un informe de auditoría de unas cuentas anuales por lo que no pueden concurrir la existencia de dos auditores, salvo que tengan firma conjunta. Estimamos que sí se puede inscribir la auditoría voluntaria como parte integrante de las cuentas anuales aunque dependerá encada caso del Registrador Mercantil. Por la presente y salvo opinión mejor fundado, damos respuesta a su consulta planteada. Esta respuesta tiene carácter orientativo, no supone un convenio de consultoría formal y no es vinculante por lo que no se asume responsabilidad directa ni subsidiaria por parte del Re.G.A. REGISTRO GENERAL DE AUDITORES DEL CONSEJO SUPERIOR DE TITULADOS MERCANTILES Y EMPRESARIALES DE ESPAÑA. Servicio de consultas Número consulta: 530 Fecha consulta: 18.06.03 Formulada por: XXX Submateria: Contingencias fiscales. Fecha respuesta: 20.06.03 Materia: Auditoría. CONSULTA PLANTEADA: Por favor, necesitaría saber el número de BOICAC que menciona que las contingencias fiscales deben ser cuantificadas en el informe del auditor. NORMATIVA EXAMINADA: RESPUESTA: Las contingencias derivadas del Impuesto sobre Sociedades se recogen en la norma novena (página 32.195 del BOE del 6 de noviembre de 1.997) recogida en la Resolución de 9 de octubre de 1.997 del Instituto de Contabilidad y Auditoría de Cuentas, sobre algunos aspectos de la norma de valoración decimosexta del Plan General de Contabilidad. CONCLUSIÓN: Por la presente y salvo opinión mejor fundado, damos respuesta a su consulta planteada. Esta respuesta tiene carácter orientativo, no supone un convenio de consultoría formal y no es vinculante por lo que no se asume responsabilidad directa ni subsidiaria por parte del Re.G.A. REGISTRO GENERAL DE AUDITORES DEL CONSEJO SUPERIOR DE TITULADOS MERCANTILES Y EMPRESARIALES DE ESPAÑA. Servicio de consultas Número consulta: 531 Fecha consulta: 09.04.03 Fecha respuesta: 20.06.03 Formulada por: XXX Materia: Auditoría. Submateria: Retribución expertos independientes CONSULTA PLANTEADA: Me precisa conocer la existencia de las disposiciones legales en las que se contemplen el devengo del cobro de las minutas por peritaciones judiciales. ¿Desde qué momento sería exigible el cobro de la minuta una vez agotada la fase de instrucción pericial y evacuado el informe? ¿Tiene autoridad suficiente el juez de primera instancia para extender providencia decretando que no ha lugar al cobro, cuando en realidad el informe está terminado y entregado y se está en una fase de ratificación y aclaración? NORMATIVA EXAMINADA: 1º. Artículos 240.1, 394.1. y 394.2. de la LEC. RESPUESTA: En relación a la primera pregunta formulada, las disposiciones que regulan el cobro de minutas judiciales son las de la Ley de Enjuiciamiento Civil, artículo 241 aparatado 1, que establece que “salvo lo dispuesto en la Ley de Asistencia Jurídica Gratuita, cada parte pagará los gastos y costas del proceso causados a su instancia a medida que se vayan produciendo.” Este artículo incluye dentro de las costas los honorarios de peritos. También regulan esta materia los artículo 394 a 398 de la LEC. Concretamente, el artículo 394 en su apartado 1 establece que “en los procesos declarativos, las costas de la primera instancia se impondrán a la parte que haya visto rechazadas todas sus pretensiones, salvo que el tribunal aprecie, y así lo razone, que el caso presentaba serias dudas de hecho o de derecho ... para apreciar, a efectos de condena en costas, que el caso era jurídicamente dudoso se tendrá en cuenta la jurisprudencia recaída en casos similares”. Y en su apartado 2: “Si fuere parcial la estimación o desestimación de las pretensiones, cada parte abonará las costas causadas a su instancia y las comunes por mitad, a no ser que hubiere méritos para imponerlas a una de ellas por haber litigado con temeridad”. y apartado 2. Ello nos lleva a contestar la segunda cuestión de modo que cada parte debe abonar los gastos y costas que se van causando en el procedimiento hasta que recaiga sentencia que condene al pago de los mismos. En relación a la tercera pregunta, el Juez no puede condenar al pago de las costas hasta que recaiga sentencia. CONCLUSIÓN: Por la presente y salvo opinión mejor fundado, damos respuesta a su consulta planteada. Esta respuesta tiene carácter orientativo, no supone un convenio de consultoría formal y no es vinculante por lo que no se asume responsabilidad directa ni subsidiaria por parte del Re.G.A. REGISTRO GENERAL DE AUDITORES DEL CONSEJO SUPERIOR DE TITULADOS MERCANTILES Y EMPRESARIALES DE ESPAÑA. Servicio de consultas Número consulta: 532 Fecha consulta: 19.06.03 Fecha respuesta: 06.07.03 Formulada por: XXX Materia: Auditoría. Submateria: Importancia relativa y riesgo de auditoría. CONSULTA PLANTEADA: Hemos realizado una planificación con datos reales de acuerdo a la Guía Re.G.A. número 19 obteniendo los siguientes datos ... Se desea saber si es correcta la consideración de V/J como tamaño de la muestra de cada área, y en consecuencia suficiente la selección de cliente de una muestra de 15 clientes y 2 en proveedores. Se desea realizar una selección numérica de facturas emitidas, de acuerdo al apartado 10 b de la Guía Re.G.A. número 20 de muestreo en la auditoría. Agradeceríamos nos indicaran el procedimiento a seguir suponiendo que hay 2.500 facturas emitidas y nos enviaran un ejemplo práctico. NORMATIVA EXAMINADA: RESPUESTA: Es correcta la consideración de V/J como tamaño de la muestra, suponiendo que el cálculo de J haya sido correcto, por lo que es suficiente la selección de una muestra de 15 clientes y 2 proveedores. La propia Guía Re.G.A. número 20 contiene ejemplos prácticos de selección de la muestra empleando el método de la máquina de calcular o MUM. La forma más ágil de selección de una muestra de 2.500 elementos pasa por capturar informaticamente el balance de sumas y saldos de la cuenta 430, por ejemplo, para convertirla en una hoja de cálculo excel en la que introduciríamos las fórmulas del sistema MUM. De no ser posible esta alternativa habría que proceder a efectuar la selección manualmente con una máquina de calcular arrancando de un número aleatorio que cumpla la condición 0<NA<J para luego pasar a emplear el intervalo de selección o J. Se recomienda no sumar todos los saldos sino agregar saldos por importe equivalente a J. Es difícil de explicar por escrito por lo que estamos a su disposición para explicárselo telefónicamente. , el Juez no puede condenar al pago de las costas hasta que recaiga sentencia. CONCLUSIÓN: Por la presente y salvo opinión mejor fundado, damos respuesta a su consulta planteada. Esta respuesta tiene carácter orientativo, no supone un convenio de consultoría formal y no es vinculante por lo que no se asume responsabilidad directa ni subsidiaria por parte del Re.G.A. REGISTRO GENERAL DE AUDITORES DEL CONSEJO SUPERIOR DE TITULADOS MERCANTILES Y EMPRESARIALES DE ESPAÑA. Servicio de consultas Número consulta: 533 Fecha consulta: 05.06.03 Fecha respuesta: 06.07.03 Formulada por: XXX Materia: Auditoría. Submateria: Examen de Acceso. CONSULTA PLANTEADA: Les agradecería que me informasen si en los próximos meses se tiene se tiene previsto llevar a cabo la convocatoria del examen práctico de acceso al ROAC. NORMATIVA EXAMINADA: RESPUESTA: De momento no está prevista la convocatoria de acceso al ROAC aunque las convocatorias vienen teniendo una periodicidad bianual por lo que es de preveer que a finales de 2.003 y principios de 2.004 se sepa algo al respecto, si bien, dado que la Ley Financiera ha introducido cambios en el la regulación del acceso al ROAC se espere a la aparición del nuevo reglamento que desarrolle la Ley. CONCLUSIÓN: Por la presente y salvo opinión mejor fundada, damos respuesta a su consulta planteada. Esta respuesta tiene carácter orientativo, no supone un convenio de consultoría formal y no es vinculante por lo que no se asume responsabilidad directa ni subsidiaria por parte del Re.G.A. REGISTRO GENERAL DE AUDITORES DEL CONSEJO SUPERIOR DE TITULADOS MERCANTILES Y EMPRESARIALES DE ESPAÑA. Servicio de consultas Número consulta: 534 Fecha consulta: 09.07.03 Fecha respuesta: 11.07.03 Formulada por: XXX Materia: Auditoría. Submateria: Examen de acceso CONSULTA PLANTEADA: Les agradecería que me informasen si en los próximos meses se tiene se tiene previsto llevar a cabo la convocatoria del examen práctico de acceso al ROAC. NORMATIVA EXAMINADA: RESPUESTA: De momento no está prevista la convocatoria de acceso al ROAC aunque las convocatorias vienen teniendo una periodicidad bianual por lo que es de preveer que a finales de 2.003 y principios de 2.004 se sepa algo al respecto, si bien, dado que la Ley Financiera ha introducido cambios en el la regulación del acceso al ROAC se espere a la aparición del nuevo reglamento que desarrolle la Ley. CONCLUSIÓN: Por la presente y salvo opinión mejor fundada, damos respuesta a su consulta planteada. Esta respuesta tiene carácter orientativo, no supone un convenio de consultoría formal y no es vinculante por lo que no se asume responsabilidad directa ni subsidiaria por parte del Re.G.A. REGISTRO GENERAL DE AUDITORES DEL CONSEJO SUPERIOR DE TITULADOS MERCANTILES Y EMPRESARIALES DE ESPAÑA. Servicio de consultas Número consulta: 535 Fecha consulta: 09.07.03 Fecha respuesta: 11.07.03 Formulada por: XXX Materia: Auditoría. Submateria: Auditoría voluntaria. CONSULTA PLANTEADA: ¿Qué entiende el ICAC por una auditoría financiera de forma voluntaria? NORMATIVA EXAMINADA: 1º. Artículos 181 y 203 del TRLSA. RESPUESTA: El artículo 181 del TRLSA establece en su última redacción dada por el RD 572/1997 de 17 de abril, que “podrán formular balance abreviado las sociedades que durante dos ejercicios consecutivos reúnan a la fecha de cierre de cada uno de ellos, al menos dos de las circunstancias siguientes: a. Que el total de las partidas del activo no supere los 395 millones de pts. b. Que el importe neto de su cifra anual de negocios no supere los setecientos noventa millones de pts. c. Que el número medio de trabajadores empleados durante el ejercicio no sea superior a cincuenta.” El artículo 203 del TRLSA se refiere a los auditores de cuentas y establece: “1. Las cuentas anuales y el informe de gestión deberán ser revisados por auditores de cuentas. 2. Se exceptúa de esta obligación a las sociedades que puedan presentar balance abreviado”. CONCLUSIÓN: La legislación mercantil que regula la auditoría estatutaria (obligatoria) es el TRLSA y por excepción define lo que son las auditorías de cuentas de carácter voluntario (no obligatorias) que son aquellas a las que se somete una sociedad que no está incursa en los artículos 181 y 203 del TRLSA. Por la presente y salvo opinión mejor fundada, damos respuesta a su consulta planteada. Esta respuesta tiene carácter orientativo, no supone un convenio de consultoría formal y no es vinculante por lo que no se asume responsabilidad directa ni subsidiaria por parte del Re.G.A. REGISTRO GENERAL DE AUDITORES DEL CONSEJO SUPERIOR DE TITULADOS MERCANTILES Y EMPRESARIALES DE ESPAÑA. Servicio de consultas Número consulta: 536 Fecha consulta: 16.07.03 Fecha respuesta: 17.07.03 Formulada por: XXX Materia: Auditoría. Submateria: IPC auditores. CONSULTA PLANTEADA: Quería saber el aumento en el IPC en este ejercicio para los auditores. NORMATIVA EXAMINADA: RESPUESTA: El IPC sector servicios del año 2.002 fue del 4,4% y es de aplicación para el incremento de los honorarios de auditoría. CONCLUSIÓN: Por la presente y salvo opinión mejor fundada, damos respuesta a su consulta planteada. Esta respuesta tiene carácter orientativo, no supone un convenio de consultoría formal y no es vinculante por lo que no se asume responsabilidad directa ni subsidiaria por parte del Re.G.A. REGISTRO GENERAL DE AUDITORES DEL CONSEJO SUPERIOR DE TITULADOS MERCANTILES Y EMPRESARIALES DE ESPAÑA. Servicio de consultas Número consulta: 537 Fecha consulta: 09.07.03 Fecha respuesta: 17.07.03 Formulada por: XXX Materia: Auditoría. Submateria: Contrato arrendamiento con opción de compra CONSULTA PLANTEADA: Necesitaría información sobre la forma de contabilizar la siguiente operación: Una sociedad ha firmado con una Consejería, un contrato administrativo de suministro con opción de compra, para la instalación de diverso equipamiento informático. Este contrato devengará 35 cuotas mensuales de 88.482,34 euros más otra cuota que representa la opción de compra por el mismo importe. Posteriormente, dicha sociedad firma un contrato de cesión de crédito, por el que transmite los derechos de cobro de las rentas arrendaticias derivadas del contrato de suministro descrito en el párrafo anterior, por el que recibe 2.888.717,22 euros. Si las rentas del contrato de suministro con la consejería se devengan mensualmente, ¿cómo deberíamos contabilizar la posterior operación de cesión de créditos? ¿Podría considerarse el importe recibido por la cesión del crédito como un ingreso a distribuir en varios ejercicio, cancelándose mensualmente a medida que se van devengando las cuotas de arrendamiento con la consejería? NORMATIVA EXAMINADA: RD 1643/1990 de 20/12, por el se aprueba el PGC, 2ª, 3ª y 5ª Partes. RESPUESTA: Antes de entrar en la respuesta debemos hacer algunas consideraciones: 1º Que la cesión de los derechos de cobro se realiza, no en concepto de contraprestación o de pago de alguna deuda preexistente, puesto que se recibe a cambio y por un importe inferior actual del total de las cuotas (2.888.717,22 euros contra 3.185.364,24, diferencia 296.647,02). Al parecer dicho importe corresponde al descuento financiero y otros posibles gastos o comisiones de la operación y, por tanto, se trata de una operación de financiación. 2º La segunda cuestión radica en las condiciones de la cesión. Es decir, ¿se trata de un simple descuento de efectos o realmente el cesionario asume el riesgo de la operación (“factoring”)? Riesgo mínimo, en principio, debido a que el librado de los efectos es un organismo público. En cualquier caso, ¿la cesión representa el cambio de titularidad del acreedor o es simplemente una operación de financiación no de descuento? 3º Relacionado con lo anterior, ¿el contrato con la consejería supone irrevocabilidad? Es decir, ¿las cuotas deberán ser satisfechas hasta el final, a excepción de la opción de compra, claro está, o puede rescindirse en cualquier momento el contrato por parte de la consejería? Del planteamiento de la consulta , interpretamos lo siguiente: 1º Se trata de un arrendamiento con opción de compra y, por tanto, las cuotas se devengan periódicamente, tal como se indica en la propia consulta, pudiéndose rescindir por el arrendatario en cualquier momento, aunque sea bajo determinadas condiciones. 2º La cesión de crédito es : a) una operación de descuento. b) Una cesión de crédito con asunción del riesgo por parte del cesionario. CONCLUSIÓN: Bajo esas premisas, los asientos a realizar serían: En el supuesto, poco probable según entendemos de a), se trata de un descuento peculiar, debido a que los efectos descontados aún no corresponden a importes devengados y su cobro se producirá con cuotas a más de un año: XXX Bancos (572) XXX Gastos por intereses diferidos 8272) Deudas a l.p. por efectos descontados (170.9) XXX Por el importe de los vencimientos del año siguiente: XXX Deudas a l.p. por efectos descontados (170.9) Deudas a c. p. Por efectos descontados (520.8) XXX Por la imputación de intereses a cada ejercicio, en proporción a las cuotas que venzan en el mismo: XXX Intereses descuento de efectos (664.3) Gastos por intereses diferidos (2729 XXX A medida que venzan las cuotas y éstas se facturen y hagan efectivas por la consejería: XXX Deudas a c. p. por efectos descontados (520.8) Clientes (430) XXX En el supuesto b), que creemos más probable, los asientos serían similares debido a que se ceden los créditos antes de su devengo y, por tanto no se pueden abonar directamente a la cuenta de clientes, pero introduciendo el aspecto de que no se trata de un descuento sino de un “factoring” podríamos habilitar las siguientes cuentas: 2.888.717,22 Bancos (572) 296.647,02 Gastos por intereses diferidos (272) Créditos a ceder a l. p. en “factoring” (170.8) 3.185.364,24 Por el importe de los vencimientos del año siguiente: XXX Créditos a ceder a l. p. en “factoring” (170.8) Créditos a ceder a c. p. en “factoring” (520.9) XXX Por la imputación de intereses a cada ejercicio, en proporción a las cuotas que venzan en el mismo: XXX Intereses descuento de efectos (664.3) Gastos por intereses diferidos (272) XXX A medida que venzan las cuotas mensuales y éstas se facturen a la consejería: XXX Créditos a ceder a c.p. en “factoring” (520.9) Clientes (430) XXX Por la presente y salvo opinión mejor fundada, damos respuesta a su consulta planteada. Esta respuesta tiene carácter orientativo, no supone un convenio de consultoría formal y no es vinculante por lo que no se asume responsabilidad directa ni subsidiaria por parte del Re.G.A. REGISTRO GENERAL DE AUDITORES DEL CONSEJO SUPERIOR DE TITULADOS MERCANTILES Y EMPRESARIALES DE ESPAÑA. Servicio de consultas Número consulta: 538 Fecha consulta: 03.07.03 Fecha respuesta: 17.07.03 Formulada por: XXX Materia: Auditoría. Submateria: Informe pericial. CONSULTA PLANTEADA: He sido nombrada por la Comunidad Autónoma de XXX para actuar como perito tercero en una valoración de acciones en una herencia, dichas acciones no cotizan en bolsa y el perito de los herederos ha dado un valor a dichas acciones y la administración otro y por supuesto el contribuyente no está de acuerdo, es por eso que me han nombrado a mí. Solicitándome prestar la confirmación a una de las dos valoraciones (la del perito de la administración o la del perito del contribuyente) o efectuar una nueva tasación motivada que será la definitiva. ¿Debo auditar las cuantas anuales que corresponden al año 1.990. Me podrías indicar cómo debo proceder en este trabajo? NORMATIVA EXAMINADA: RESPUESTA: CONCLUSIÓN: En todo trabajo pericial resulta fundamental ceñirse escrupulosamente al objeto de la pericia, de cuya redacción en la práctica totalidad de los casos se obtienen las respuestas a las dudas que a todos nos surgen a la hora de abordar este tipo de trabajo. A priori parece más cómodo desde el punto de vista del perito evaluar las peritaciones efectuadas por los peritos de ambas partes para determinar la validez de las mismas, para en caso de discrepancia con ambas determinar el motivo de la misma, cuantificarlo y en su caso adoptar la decisión de efectuar una nueva valoración. Parece que ha transcurrido demasiado tiempo para efectuar una auditoría de unas cuentas anuales del ejercicio 1.990 puesto que el lapso temporal haría perder eficacia a dicho trabajo al no poder aplicar numerosos procedimientos de auditoría como pueden ser la inspección física, la confirmación de saldos por terceros, además de haber prescrito todas sus declaraciones impositivas y la obligación de conservar los soportes documentales. Al desconocer la actividad que realizaba en el ejercicio 1.990 la empresa de la que hay que valorar las acciones no podemos aconsejar el método de valoración más adecuado, puesto que hay unos 50 métodos y cada uno de ellos es aplicable a un determinado tipo de empresa y en unas determinadas circunstancias. Por la presente y salvo opinión mejor fundada, damos respuesta a su consulta planteada. Esta respuesta tiene carácter orientativo, no supone un convenio de consultoría formal y no es vinculante por lo que no se asume responsabilidad directa ni subsidiaria por parte del Re.G.A. REGISTRO GENERAL DE AUDITORES DEL CONSEJO SUPERIOR DE TITULADOS MERCANTILES Y EMPRESARIALES DE ESPAÑA. Servicio de consultas Número consulta: 539 Fecha consulta: 30.06.03 Fecha respuesta: 17.07.03 Formulada por: XXX Materia: Auditoría. Submateria: Importancia relativa y riesgo en auditoría. CONSULTA PLANTEADA: Como continuación a la consulta número 522 formulada por anteriormente por mí ... pero el problema continúa pues a pesar de todo, todavía queda un intervalo de selección de la muestra J muy alto, por importe de 566.6999,10 euros, cantidad que no permite un análisis o muestreo de ninguna partida o subcuenta pues no existen intervalos de muestreo para esa cantidad, en ninguna cuenta o partida muestreable en mis balances por auditar. Por otro lado, con estas cuantías se hace inviable la selección de la muestra por un procedimiento muy práctico como es el señalado en 10.b numérico, en la página 20 de la nueva Guía Re.G.A. número 20. ¿Qué procedimiento debería emplear para obtener un intervalo de selección de la muestra j, en un nivel adecuado para conseguir utilizarlo tanto para las oportunas selecciones de las distintas muestras como para poder confeccionar el Plan Global de Auditoría de mis empresas a auditar, cosa que ahora es imposible? En mi agobio para ponerme en marcha en estos temas he tratado de hacer un procedimiento para el muestreo de determinados conceptos (clientes, deudores, proveedores, acreedores, etc), que me permita obtener una evidencia adecuada y suficiente que sea admitida. Este es el proceso que figura en el anexo; ruego vuestra opinión al respecto. NORMATIVA EXAMINADA: Guías Re.G.A. 16, 19 y 20. RESPUESTA: El importe base seleccionado es el total de ingresos del ejercicio que asciende a 31.357.350 euros (5.217.424.037 pts); el año de auditoría es el 3º y siguientes por lo que RA=4% y NCA=96% (1-RA); RI=0,6; RCI=0,6 y RRA=0,60; tipo empresa: en desarrollo. CONCLUSIÓN: Estamos hablando de una empresa que tiene unos ingresos de 5.217.424.037 pts y un intervalo de selección de la muestra de 94.249.280 pts, que representa el 2% del importe base, por lo que si se analiza con detenimiento, no resulta un intervalo de la muestra que no guarde proporción con el importe base, ni con el nivel de precisión que es de 156.522.721 pts. Así, en balance resultarían seleccionadas aproximadamente 21,14 J´s (1.992.197.813/94.249.280) para activo y otras tantas para pasivo, mientras que en P y G resultarían seleccionadas aproximadamente 55,36 J´s (5.217.424.037/94.249.280) para debe y otras tantas para haber. En toda la auditoría resultarían seleccionadas 153 J´s. No obstante, si como auditor no te quedas satisfecho y desearías aumentar el volumen de la evidencia a obtener a través de un intervalo de selección de la muestra podrías optar por una de las dos soluciones que se aportan a continuación, o por una tercera que sería una combinación de ambas: a. Calificar a la empresa como pyme por lo que el tramo mínimo sería del 1% y el tramo máximo del 3%, de lo que resultaría un NP=52.174.240,37 euros; J=31.416.426,78 euros y un total de J´s aproximadas de 459. b. Asignar un valor máximo de 0,9 a RI, RCI y RAS de lo que resultaría NP=156.522.721 euros y J=52.248.568 euros. c. a y b al mismo tiempo. J=10.472.142 euros. La práctica te hará conjugar los valores a asignar a RI, RCI, RAS y el tipo de empresa para obtener una J que te permita obtener un nivel de evidencia con el que te encuentres satisfecho, ya que, no podemos olvidar un concepto tan importe para la auditoría de cuentas como es el juicio profesional. Con respecto a tu método de selección de la muestra permite que no entremos a valorar el mismo y que te recomendemos que te decantes por un método de selección de muestra generalmente aceptado, testado y de garantías, como puede ser el de la máquina de calcular que es el que recomienda nuestra Corporación o cualquier otro con validez científica. Por la presente y salvo opinión mejor fundado, damos respuesta a su consulta planteada. Esta respuesta tiene carácter orientativo, no supone un convenio de consultoría formal y no es vinculante por lo que no se asume responsabilidad directa ni subsidiaria por parte del Re.G.A. REGISTRO GENERAL DE AUDITORES DEL CONSEJO SUPERIOR DE TITULADOS MERCANTILES Y EMPRESARIALES DE ESPAÑA. Servicio de consultas Número consulta: 540 Fecha consulta: 15.07.03 Fecha respuesta: 27.07.03 Formulada por: XXX Materia: Auditoría. Submateria: Honorarios auditores CONSULTA PLANTEADA: Necesidad de dejar constancia en el informe de auditoría de la independencia del auditor y de incorporar el importe de la minuta en la memoria de la Sociedad. NORMATIVA EXAMINADA: 1º. NTA sobre elaboración de informes. 2º. Ley financiera. RESPUESTA: La redacción de los informes de auditoría debe ceñirse en cuanto a su contenido y formato a los modelos de informe contenidos en las Normas Técnicas de Auditoría sobre elaboración de informes, los cuales no hacen referencia alguna a la independencia del auditor. No obstante, La Ley Financiera ha modificado en algunos aspectos el articulado de la Ley de Auditoría y concretamente ha modificado los artículos que se referían a la independencia del auditor, lo que obliga al auditor a dejar constancia en sus papeles de trabajo a través de un memorando que es independiente con respecto a la empresa auditada y que no incurre en causa alguna de incompatibilidad de las señaladas en los apartados 1, 2, 3, 4 y 5 del artículo 8 de la Ley 19/1988, de 12 de julio, de Auditoría de Cuentas. La disposición adicional decimocuarta de la mencionada Ley Financiera se refiere a la transparencia en la remuneración de auditores y establece que “los auditores de cuentas deben comunicar al Instituto de Contabilidad y Auditoría de Cuentas anualmente las horas y honorarios facturados a cada cliente, distinguiendo las que corresponden a auditoría de cuentas y otros servicios prestados, así como cualquier otra información que precise el Instituto de Contabilidad y Auditoría de Cuentas para el ejercicio de sus funciones. El importe de estos honorarios anteriormente mencionados será público, y se informará específicamente en la memoria de las cuentas anuales, desglosando las abonadas a cualquier sociedad del mismo grupo de sociedades a que perteneciese el auditor de cuentas, o a cualquier sociedad del mismo grupo de sociedades a que perteneciese el auditor de cuentas, o a cualquier otra sociedad con la que el auditor esté vinculado por propiedad común, gestión o control”. CONCLUSIÓN: 1º. No es preciso hacer referencia alguna a la independencia del auditor en el informe de auditoría, sí es preciso dejar constancia en los papeles de trabajo de la no existencia de factores que afecten a su independencia o de circunstancias que le hagan incurrir en causa de incompatibilidad. 2º. En la memoria se deben incluir los honorarios que se devengarán por la auditoría de las cuentas anuales. La no inclusión en la memoria de esta información supone un incumplimiento legal por parte de la empresa auditada que deberá ser tratada por el auditor, siguiendo su juicio profesional, en su caso como una salvedad. Por la presente y salvo opinión mejor fundado, damos respuesta a su consulta planteada. Esta respuesta tiene carácter orientativo, no supone un convenio de consultoría formal y no es vinculante por lo que no se asume responsabilidad directa ni subsidiaria por parte del Re.G.A. REGISTRO GENERAL DE AUDITORES DEL CONSEJO SUPERIOR DE TITULADOS MERCANTILES Y EMPRESARIALES DE ESPAÑA. Servicio de consultas Número consulta: 541 Fecha consulta: 21.07.03 Fecha respuesta: 05.09.03 Formulada por: XXX Materia: Auditoría. Submateria: Trabajos de revisión y verificación de otros estados o documentos contables. CONSULTA PLANTEADA: Agradecería obtener un cuestionario de control interno así como parámetros orientativos a efectos de elaborar un informe de revisión limitada de una agencia de viajes para su presentación al IATA. NORMATIVA EXAMINADA: 1º. NTA sobre importancia relativa. 2º. Guías Re.G.A. RESPUESTA: Las Guías Re.G.A. publicadas por el Registro General de Auditores del Consejo Superior de Titulados Mercantiles y Empresariales de España contienen además de unos objetivos y procedimientos a aplicar para cada área de trabajo un cuestionario para evaluar el grado de confianza que el auditor puede depositar en cada una de las áreas objeto de examen. Con respecto a los parámetros orientativos a efectos de elaborar un informe de revisión limitada de una agencia de viajes para su presentación al IATA la Norma Técnica de Auditoría sobre el concepto de Importancia Relativa establece unos parámetros orientativos para la cuantificación de la importancia relativa en la fase de emisión de informes en los que fija un importe base unos tramos mínimos y máximos dependiendo de si la situación en la que se encuentre la empresa a auditar, distinguiendo entre empresas con beneficios normales; empresas con pérdidas o en punto muerto o con bajo nivel de actividad; empresas en desarrollo que no hayan alcanzado el volumen normal de operaciones; entidades lucrativas y pequeñas y medianas empresas. De reciente aparición son las Guías Re.G.A. revisadas números 16 sobre Importancia Relativa y 19 sobre Nivel de Precisión y Riesgo de Auditoría que desarrollan la mencionada Norma Técnica de Auditoría. CONCLUSIÓN: 1º. Se recomienda emplear los cuestionarios de evaluación del control interno que para cada área establecen las guías Re.G.A. 2º. Los parámetros orientativos para elaborar un informe de revisión limitada de una agencia de viajes para su presentación al IATA, si se refieren a la cuantificación de la importancia relativa son los mismos que rigen para cualquier tipo de empresa a auditar. Si la cuestión se refiere al alcance y naturaleza de los procedimientos de auditoría a aplicar para realizar un trabajo de revisión y verificación limitada de una agencia de viajes, y al modelo de informe a emplear, tendrá que ser la propia IATA la que facilite los mismos. Por la presente y salvo opinión mejor fundado, damos respuesta a su consulta planteada. Esta respuesta tiene carácter orientativo, no supone un convenio de consultoría formal y no es vinculante por lo que no se asume responsabilidad directa ni subsidiaria por parte del Re.G.A. REGISTRO GENERAL DE AUDITORES DEL CONSEJO SUPERIOR DE TITULADOS MERCANTILES Y EMPRESARIALES DE ESPAÑA. Servicio de consultas Número consulta: 542 Fecha consulta: 22.07.03 Fecha respuesta: 05.09.03 Formulada por: XXX Materia: Auditoría. Submateria: Trabajos de revisión y verificación de otros estados o documentos contables. CONSULTA PLANTEADA: Modelos de informe de auditoría para estados financieros que no constituyan cuentas anuales completas. NORMATIVA EXAMINADA: 1º. Ley de Auditoría de Cuentas. 2º. Reglamento de Auditoría de Cuentas. RESPUESTA: El apartado 1 del artículo 1 de la Ley de Auditoría de Cuentas establece que “se entenderá por auditoría de cuentas la actividad consistente en la revisión y verificación de documentos contables, siempre que aquélla tenga por objeto la emisión de un informe que pueda tener efectos sobre terceros” y en su apartado 3 que “tanto la auditoría de las cuentas anuales y del informe de gestión como cualquier otro trabajo de revisión y verificación contable que, de acuerdo con lo establecido en el apartado 1 de este artículo, deba calificarse legalmente como auditoría de cuentas, tendrá necesariamente que ser realizado por un auditor de cuentas, mediante la emisión del correspondiente informe y con sujeción a los requisitos y formalidades establecidos en la presente y a las Normas Técnicas de Auditoría”. La letra c del artículo 2 de la Ley de Auditoría de Cuentas establece, con respecto al contenido del informe de auditoría de cuentas anuales, que contendrá una “identificación de los documentos objeto de examen que se incorporan al informe”. El artículo 2 del Reglamento de Auditoría de Cuentas se refiere a las clases de auditoría de cuentas en razón a los documentos contables objeto de examen, encontrándonos con dos modalidades: “a. Auditoría de cuentas anuales. B. Trabajos de revisión y verificación de otros documentos contables sujetos a la Ley 19/1988, al presente Reglamento y a las normas técnicas de auditoría.” La NTA 3.2.1. sobre título o identificación del informe establece que “el informe deberá identificarse como <informe de auditoría independiente de las cuentas anuales>, con objeto de distinguirlo de los informes sobre otros trabajos de revisión y verificación de estados o documentos regulados en la Ley 19/1988, de Auditoría de Cuentas. La NTA 3.2.4. sobre el contenido del párrafo de alcance de la auditoría establece en su apartado a: “identificación de los documentos que comprenden las cuentas anuales objeto de auditoría que se adjuntan al informe, es decir, el balance de situación, la cuenta de pérdidas y ganancias y la memoria”. CONCLUSIÓN: 1º. Cuando no se estén auditando cuantas anuales completas por no incluir todos sus elementos (balance de situación, cuenta de pérdidas y ganancias y memoria) o por no estar referidas a un ejercicio completo estaríamos ante un trabajo de revisión y verificación de documentos contables. 2º. El modelo de informe sería uno de los contemplados por la NTA sobre elaboración de informes pero teniendo en cuenta que en el párrafo de alcance se ha de especificar los documentos que integran esos estados financieros, así como en el párrafo de opinión en el que opinaríamos sobre los estados financieros objeto de examen (que no forman cuantas anuales completas) y en el párrafo de comparación de la información, el cual habrá de ser adaptado a las circunstancias que rodeen a la auditoría de esos estados financieros (si se presentan a efectos comparativos junto a los datos del ejercicio en los del ejercicio n-1, si la formulación de esos estados financieros es responsabilidad de los administradores de la sociedad o no, etc.). Por la presente y salvo opinión mejor fundado, damos respuesta a su consulta planteada. Esta respuesta tiene carácter orientativo, no supone un convenio de consultoría formal y no es vinculante por lo que no se asume responsabilidad directa ni subsidiaria por parte del Re.G.A. REGISTRO GENERAL DE AUDITORES DEL CONSEJO SUPERIOR DE TITULADOS MERCANTILES Y EMPRESARIALES DE ESPAÑA. Servicio de consultas Número consulta: 543 Fecha consulta: 22.07.03 Fecha respuesta: 05.09.03 Formulada por: XXX Materia:Legal/Contabilidad Submateria: OPFH. CONSULTA PLANTEADA: Organización de frutas (OPFH), solicita ayuda financiera comunitaria (Reglamento CE número 609/2001 y Orden de 11/9 de 2.001 que la desarrolla) en referencia a programas y fondos operativos. Los productores agrarios (socios de la OPFH) deben realizar contribuciones financieras idénticas (el 50%) a las futuras ayudas financieras a recibir de la CE (subvenciones), que conjuntamente financiarán el 100% del programa operativos (los programas operativos pueden ser muy diversos como por ejemplo: mejoras técnicas, inversiones en instalaciones y maquinaria, etc.) La cuestión, teniendo en cuenta el destino exclusivo de las contribuciones financieras de los socios productores, es si las mismas han de considerarse como aportaciones a los fondos propios de la entidad (aportaciones de capital o creación de una reserva especial) debido a que son obligatorios y deben financiar el 50% del programa y en consecuencia no son reintegrables como tampoco lo son las ayudas de la CE, o bien, tratarse como financiación a corto plazo o largo plazo, y por tanto son posteriormente retornables a los socios. NORMATIVA EXAMINADA: RESPUESTA: El consultante propone como respuesta que al tratarse de “contribuciones financieras obligatorias por la CE para conseguir las ayudas de la CE deben tratarse como éstas últimas, o sea, como pasivo no exigible (capital o reserva especial) ya que las ayudas de la CE serán subvenciones y éstas nunca serán reintegarables a los socios”. CONCLUSIÓN: 1º. Se trata de una cuestión muy específica relacionada con las ayudas financieras de la CE destinadas a entidades que presentan tantas particularidades diferenciadoras como son las OPFH. 2º. Teniendo en cuenta que el consultante seguramente habrá estudiado con mucho más detenimiento la solución a la consulta planteada que el dedicado por este servicio de consultas a dar respuesta a la misma, sí nos parece razonable la solución propuesta, si bien se plantean algunas dudas acerca de la no reintegrabilidad de las aportaciones a los socios, puesto que no encontramos impedimento alguno a que se reintegrasen a los socios las cantidades aportadas por lo mismos una vez que hubiera finalizado la vida útil de las inversiones subvencionadas, por lo que quizás cabría plantearse otras ubicaciones alternativas como la de deudas a largo plazo, etc. Por la presente y salvo opinión mejor fundado, damos respuesta a su consulta planteada. Esta respuesta tiene carácter orientativo, no supone un convenio de consultoría formal y no es vinculante por lo que no se asume responsabilidad directa ni subsidiaria por parte del Re.G.A. REGISTRO GENERAL DE AUDITORES DEL CONSEJO SUPERIOR DE TITULADOS MERCANTILES Y EMPRESARIALES DE ESPAÑA. Servicio de consultas Número consulta: 544 Fecha consulta: 25.07.03 Fecha respuesta: 05.09.03 Formulada por: XXX Materia: Auditoría Submateria: Obligación de auditar. CONSULTA PLANTEADA: Obligación de auditar cuentas RD 180/2003 artículo tercero de empresa que realiza servicios públicos por importe superior a 600.000 euros. Supongamos que el importe de servicios públicos es de 1.300.000 euros total negocios 1.500.000 euros. ¿Cuál es el importe que debe ser superior al 50% del importe neto de la cifra de negocios 1.300.000 o 600.000? NORMATIVA EXAMINADA: 1º. Real Decreto 180/2003 de Auditoría de Cuentas. RESPUESTA: El artículo 3º del Real Decreto 180/2003 es consecuencia de una adición a una disposición adicional, la decimotercera, al Real Decreto 1636/1990, de 20 de diciembre por el que se aprueba el Reglamento que desarrolla la Ley 19/1988, de 12 de julio, de Auditoría de Cuentas. Su redacción es la siguiente: “1. En desarrollo de lo dispuesto en la disposición adicional primera, apartado 1, párrafo e, de la Ley 19/1988, de 12 de julio, de Auditoría de Cuentas, y sin perjuicio de lo establecido en otras disposiciones legales, las empresas y entidades, cualquiera que sea su naturaleza jurídica y siempre que deban formular cuentas anuales conforme al Código de Comercio y demás legislación que resulte de aplicación, que durante un ejercicio económico hubiesen realizado obras, gestión de servicios públicos, suministros, consultoría y asistencia y servicios a las Administraciones públicas, por un importe total acumulado superior al 600.000 euros, y éste represente más del 50% del importe neto de su cifra anual e negocios,, estarán obligadas a someter a auditoría las cuentas anuales correspondientes a dicho ejercicio social y las del siguiente a éste, en los términos establecidos en el artículo 1, apartado 2, de la citada Ley 19/1988, de 12 de julio, de Auditoría de Cuentas. 2. Se considerarán realizadas las actuaciones referidas en el apartado anterior, a los efectos de este Real Decreto, en el momento en que deba ser registrado el derecho de cobro correspondiente en los libros de contabilidad de la entidad, de acuerdo con lo dispuesto a este respecto en la normativa contable que resulte de aplicación.” CONCLUSIÓN: Conforme establece la redacción del artículo 3º del Real Decreto 180/2003 una empresa (que está obligada a formular cuentas anuales conforme al Código de Comercio y demás legislación que resulte de aplicación) que durante un ejercicio ha prestado servicios a entidades públicas por importe de 1.300.000 euros (1.300.000>600.000), siendo el importe neto de su cifra de negocios de 1.500.000 euros (1.300.000/1.500.000=0,87>0,5) debe someter a auditoría las cuentas anuales de dicho ejercicio social y las del siguiente a éste, en los términos establecidos en el artículo 1, apartado 2, de la citada Ley 19/1988, de 12 de julio, de Auditoría de Cuentas. Por la presente y salvo opinión mejor fundado, damos respuesta a su consulta planteada. Esta respuesta tiene carácter orientativo, no supone un convenio de consultoría formal y no es vinculante por lo que no se asume responsabilidad directa ni subsidiaria por parte del Re.G.A. REGISTRO GENERAL DE AUDITORES DEL CONSEJO SUPERIOR DE TITULADOS MERCANTILES Y EMPRESARIALES DE ESPAÑA. Servicio de consultas Número consulta: 545 Fecha consulta: 05.08.03 Fecha respuesta: 05.09.03 Formulada por: XXX Materia: Auditoría. Submateria: Examen de acceso. CONSULTA PLANTEADA: Me gustaría saber cuando va a realizarse el próximo examen de acceso al ROAC, o si todavía no se sabe, si me pueden decir más o menos cuando será. NORMATIVA EXAMINADA: RESPUESTA: De momento no está prevista la convocatoria de acceso al ROAC aunque las convocatorias vienen teniendo una periodicidad bianual por lo que es de preveer que a finales de 2.003 y principios de 2.004 se sepa algo al respecto, si bien, dado que la Ley Financiera ha introducido cambios en el la regulación del acceso al ROAC se espere a la aparición del nuevo reglamento que desarrolle la Ley. CONCLUSIÓN: Por la presente y salvo opinión mejor fundada, damos respuesta a su consulta planteada. Esta respuesta tiene carácter orientativo, no supone un convenio de consultoría formal y no es vinculante por lo que no se asume responsabilidad directa ni subsidiaria por parte del Re.G.A. REGISTRO GENERAL DE AUDITORES DEL CONSEJO SUPERIOR DE TITULADOS MERCANTILES Y EMPRESARIALES DE ESPAÑA. Servicio de consultas Número consulta: 546 Fecha consulta: 14.08.03 Fecha respuesta: 05.09.03 Formulada por: XXX Materia: Auditoría Submateria: Nombramiento de auditores. CONSULTA PLANTEADA: Actualmente estoy inscrito en el ROAC como auditor no ejerciente. En la actualidad trabajo por cuenta ajena en un despacho profesional (una SL), uno de los motivos que pesó a la hora de mi contratación fue que perteneciera al ROAC. En la actualidad trabajo por cuanta ajena en un despacho profesional (una SL), uno de los motivos que peso a la hora de mi contratación fue que pertenencia al ROAC, y por lo tanto que podría auditar, me han insinuado en varias ocasiones que es muy probable que un futuro muy cercano en el despacho se realicen auditorías, para eso se valdrían de mi condición de auditor. Vamos a suponer que entre una auditoría en el despacho, y me comentan que la voy a realizar yo, y una vez firmado el contrato con el cliente, cambian de opinión, y dicen que la va a realizar el responsable del despacho, siendo mi único papel el de firmar la misma, ¿no cabría la posibilidad de anular el contrato con dicho cliente, ya que si no se incurriría en una falta grave, según el artículo 16.3. de la LAC?. Si se realizase conjuntamente, ya que ellos aportarían los medios, ¿qué importe les debería facturar? NORMATIVA EXAMINADA: RESPUESTA: En la práctica profesional de la auditoría de cuentas es muy frecuente que el auditor firmante de la auditoría no sea el ejecutor material del trabajo, sino que encargue a personas de su confianza (empleados, socios, compañeros, empresas especializadas) la evaluación de los sistemas de control interno, la obtención de la evidencia, preparación de los papeles de trabajo y demás acciones a realizar en una auditoría de cuentas. Sin embargo, en estos casos, el auditor firmante ha de supervisar o revisar cada una de las fases del trabajo antes de emitir su opinión con objeto de verificar que se hayan alcanzado todos los objetivos por áreas y que se haya obtenido la evidencia adecuada y suficiente para soportar la opinión y estar en disposición de emitir el informe correspondiente. Con respecto a los honorarios hay que tener en cuenta que un porcentaje de los honorarios de un auditor están cubriendo de alguna manera el riesgo de auditoría que asume el auditor cuando firma un informe, por lo que la determinación de ese porcentaje va a depender del riesgo de auditoría que se vaya a asumir al subcontratar los trabajos de auditoría en la forma en que se ha detallado en el párrafo anterior, riesgo que está relacionado con la diligencia, rigor y experiencia profesional del equipo al que se confíe la ejecución del trabajo. CONCLUSIÓN: Por la presente y salvo opinión mejor fundado, damos respuesta a su consulta planteada. Esta respuesta tiene carácter orientativo, no supone un convenio de consultoría formal y no es vinculante por lo que no se asume responsabilidad directa ni subsidiaria por parte del Re.G.A. REGISTRO GENERAL DE AUDITORES DEL CONSEJO SUPERIOR DE TITULADOS MERCANTILES Y EMPRESARIALES DE ESPAÑA. Servicio de consultas Número consulta: 547 Fecha consulta: 25.06.03 Fecha respuesta: 05.09.03 Formulada por: XXX Materia: Auditoría. Submateria: Evidencia en auditoría. CONSULTA PLANTEADA: ¿Cómo hemos de actuar ante la falta de contestación de la carta enviada a un banco? Revisando los extractos a corte con 15 días arriba y 15 días debajo de cobertura no vea movimientos extraños. No entiendo que la compañía tenga que cargar con una salvedad por la no contestación de un banco, sugiero alguna alternativa. NORMATIVA EXAMINADA: 1º. NTA sobre ejecución del trabajo. 2º. Guía Re.G.A. número 6 de Tesorería. RESPUESTA: La NTA 2.5.1. establece que el auditor debe obtener evidencia suficiente y adecuada, mediante la realización y evaluación de las pruebas de auditoría que se consideren necesarias, al objeto de obtener una base de juicio razonable sobre los datos contenidos en las cuentas anuales que se examinan y poder expresar una opinión respecto de las mismas. La NTA 2.5.2 establece que la evidencia del auditor es la convicción razonable de que todos aquellos datos expresados en las cuentas anuales han sido y están debidamente soportados en tiempo y contenido por los hechos económicos y circunstanciales que realmente han ocurrido. La NTA 2.5.4 establece que la evidencia se obtiene por el auditor a través del resultado de las pruebas de auditoría aplicadas según las circunstancias que concurran en cada caso, y de acuerdo con el juicio profesional del auditor. La NTA 2.5.12 se refiere al concepto de adecuación de la evidencia como característica cualitativa, en tanto que el concepto suficiencia tiene carácter cuantitativo. ... La evidencia es adecuada cuando es pertinente para que el auditor emita su juicio profesional. La Guía Re.G.A. número 6 sobre Tesorería relaciona los siguientes procedimiento de auditoría que le son de aplicación a las cuentas bancarias: 1. Confirmación: obtener de las instituciones de crédito con las que haya operado la empresa durante el ejercicio, los saldos, restricciones y otras características de las cuentas bancarias. Es común que estas confirmaciones se obtengan a la fecha de cierre del ejercicio por todas las cuentas bancarias, incluyendo aquéllas supuestamente inactivas o canceladas durante el ejercicio examinado. CONCLUSIÓN: Tal y como establece la mencionada Guía Re.G.A. número 7 sobre tesorería no existe procedimiento alternativo a la carta de confirmación de entidades financieras, puesto que la evidencia que se obtiene a través de este procedimiento de auditoría es múltiple y abarca desde la confirmación del saldo de todas las cuentas corrientes que tenga abierta la sociedad auditada a la fecha de solicitud de confirmación (de las cuentas que figuren en contabilidad y de otras cuentas que pueda tener abiertas la sociedad auditada y no estar adecuadamente reflejadas en contabilidad), hasta las firmas autorizadas, pasando por la situación de pólizas de préstamo (capital pendiente, intereses devengados y pagados durante el periodo y principal amortizado), pólizas de crédito (límite de crédito y disposición efectuada del mismo), líneas de descuento de efectos (límite y efectos descontados pendientes de vencimiento), líneas de avales (límite y disposición efectuada de la misma), restricciones a la disponibilidad de fondos, cargas hipotecarias, etc. Por tanto, muchas de las evidencias relacionadas no se pueden obtener mediante procedimientos alternativos, constituyéndose este procedimiento de auditoría en un procedimiento que siempre debe ser observado por el auditor de cuentas para todas las entidades financieras con las que opere la sociedad auditada. Su no observancia supondría que el auditor no ha obtenido la evidencia adecuada y suficiente para soportar la opinión referida a las cuentas bancarias, avales, cargas hipotecarias, etc. En la práctica, muchas entidades auditadas ponen serios impedimentos para que el auditor emplee este tipo de procedimiento por el coste que repercuten las entidades financieras por facilitar esta documentación. No, obstante, al tratarse de un servicio que presta la entidad financiera a su cliente a solicitud de este, y por el cobra un precio, es muy poco frecuente que las entidades financieras no contesten a esas cartas de confirmación siempre y cuando se insista en su contestación. Para evitar la limitación al alcance basta con que la dirección de la entidad auditada se involucre en la obtención de las contestaciones a las cartas de confirmación bancaria, que es la clave para obtener un 100% de efectividad en este procedimiento de auditoría. Por la presente y salvo opinión mejor fundado, damos respuesta a su consulta planteada. Esta respuesta tiene carácter orientativo, no supone un convenio de consultoría formal y no es vinculante por lo que no se asume responsabilidad directa ni subsidiaria por parte del Re.G.A. REGISTRO GENERAL DE AUDITORES DEL CONSEJO SUPERIOR DE TITULADOS MERCANTILES Y EMPRESARIALES DE ESPAÑA. Servicio de consultas Número consulta: 548 Fecha consulta: 28.08.03 Fecha respuesta: 05.09.03 Formulada por: XXX Materia: Auditoría. Submateria: Incertidumbre. CONSULTA PLANTEADA: En la Junta General de accionistas celebrada el 26 de junio de 2.002, se aprobó por mayoría (los beneficiarios del cobro) el reconocimiento por parte de la sociedad de la reclamación efectuada por un socio, de una deuda por importe de 316.591,10 euros, correspondiendo a un principal de 96.161,94 euros y 220.429,16 euros de intereses, al subrogarse en la posición del deudor, originados por la ejecución el día 24 de febrero de 1.986 de la garantía aportada por dos socios a favor de la sociedad y presentada ante la entidad crediticia XXX, para garantizar una póliza de crédito suscrita por la entidad, en la entidad mencionada el día 4 de febrero de 1.985. Tal como se indica en la memoria, la entidad no ha reflejado dicha deuda en las cuentas anuales, por estar pendientes de resolución judicial su existencia, legitimidad y cuantía. Dicho importe, 96.161,94 euros, aparece abonado el mismo día, 24 de febrero de 1.986, como devolución a cuenta de principal de un crédito que esta entidad tenía concedido a una sociedad de los socios que ahora reclaman. Vistos los extractos bancarios, de ese día, solo aparece una cantidad, no dos. Por tanto, si la sociedad ya imputó en su día los 96.161,94 euros como devolución, no se puede admitir esa deuda. El acuerdo social está recurrido por la vía civil y penal. ¿Sería correcto el tratamiento en el informe de auditoría como una incertidumbre, que está en vía judicial? ¿Denegaría la opinión por ser el importe reclamado el 4% de los fondos propios? A mi parecer, el intento de cobro es tener mucha cara por parte de los socios mayoritarios, que se lo guisan y se lo comen, en una junta general que poseen el 66,66% de las acciones. El Administrador de la sociedad, no se atreve a incluirlo en la cuenta de la sociedad, y mucho menos a pagarlo, porque él mismo ya declaró en un juicio, que solo existe en la contabilidad un abono de 91.161,94 euros, y no dos. Por lo tanto, independientemente del acuerdo social aprobado en junta, hacer mención de ello como salvedad, sería dar como bueno dicho importe, y además, la opinión sería desfavorable. El informe que yo tengo previsto presenta, salvo mejor opinión es el siguiente: “6. En mi opinión, excepto por los efectos de aquellos ajustes que podrían haberse considerado necesarios si hubiera podido verificar el arqueo de caja y el corte de operaciones al término del ejercicio anterior, señalados en el apartado 3 del presente informe y por los efectos de cualquier ajuste que pudiera ser necesario si se conociera el desenlace final de la incertidumbre descrita en el párrafo anterior, las cuentas anuales del ejercicio 2.002 adjuntas expresan, en todos los aspectos significativos, la imagen fiel del patrimonio y de la situación financiera de la entidad, al 31 de diciembre de 2.002 y de los resultados de sus operaciones durante el ejercicio anual terminado en dicha fecha y contienen la información necesaria y suficiente para su interpretación y comprensión adecuada, de conformidad con principios y normas contables generalmente aceptados que guardan uniformidad con los aplicados en el ejercicio anterior. NORMATIVA EXAMINADA: 1º. NTA sobre elaboración de informes. RESPUESTA: La incertidumbre para el auditor de cuentas viene determinada por hechos o circunstancias que afecten o puedan afectar de forma significativa al patrimonio cuya incidencia no sea posible determinar. Una incertidumbre es un asunto o situación de cuyo desenlace final no se tiene certeza a la fecha del balance, puesto que depende de la ocurrencia de algún otro hecho futuro. La entidad no puede estimar razonablemente el efecto ni, por lo tanto, puede determinar si las cuentas anuales han de ser ajustadas ni por qué importes. Las NTA establecen algunas prevenciones al abordar el concepto. Entre ellas, la más importante es la siguiente: no ha de calificarse como incertidumbre la falta de estimaciones normales. CONCLUSIÓN: La junta general de accionistas es el órgano soberano de la Sociedad y como tal acordó en fecha 26 de junio de 2.002 que se reconociera la reclamación de un socio de 316.591,10 euros, de los que 91.171,94 euros corresponden a principal y 220.429,16 euros corresponden a intereses, por subrogación en la posición de un deudor. Este acuerdo de la junta no ha sido reflejado en las cuentas anuales por estar pendientes de una resolución judicial que determine su existencia, legitimidad y cuantía. Nos encontramos por tanto con que el administrador de la Sociedad no ha ejecutado un acuerdo de junta de accionistas, circunstancia que ha de ser tratada a nuestro juicio por el auditor de cuentas en el informe de auditoría como una salvedad por incumplimiento del mencionado acuerdo y que supondría introducir un asiento en la contabilidad reflejando un pasivo en el balance por importe de 316.591,10 euros y reduciendo los beneficios de la Sociedad en la misma cuantía. El efecto sobre la opinión habría de ser determinado de conformidad con lo establecido por las NTA sobre importancia relativa y las nuevas Guías Re.G.A. 16 y 19. Una vez considerada esta cuestión el auditor debería estudiar la oportunidad del reconocimiento de la mencionada reclamación con objeto de determinar si dicho acto constituye una liberalidad (puesto que todavía no hay sentencia judicial firme) en cuyo caso la Sociedad debería haber introducido el oportuno ajuste fiscal a la base imponible del Impuesto sobre Sociedades (tributaría el 35%) y a cuantificar en el informe la deuda tributaria a que habría dado lugar. Además, la Sociedad está incursa en un procedimiento judicial por el que se le reclama la cuantía anteriormente citada sin que ésta haya procedido a dotar la oportuna provisión por responsabilidades ni a la fecha de emisión del informe se conozca cual va a ser el sentido del fallo judicial y por tanto el desenlace final de la incertidumbre. Pero insistimos, a nuestro juicio, el principal problema con el que se encuentra este auditor es el incumplimiento de un acuerdo de junta de accionistas, y ello teniendo en cuenta que desconocemos cual es la redacción del párrafo intermedio que hace referencia a la incertidumbre y que el caso es lo suficientemente complejo y los antecedentes lo suficientemente amplios para que el consultante tome con extrema cautela la contestación que se le da a su consulta. Por la presente y salvo opinión mejor fundado, damos respuesta a su consulta planteada. Esta respuesta tiene carácter orientativo, no supone un convenio de consultoría formal y no es vinculante por lo que no se asume responsabilidad directa ni subsidiaria por parte del Re.G.A. REGISTRO GENERAL DE AUDITORES DEL CONSEJO SUPERIOR DE TITULADOS MERCANTILES Y EMPRESARIALES DE ESPAÑA. Servicio de consultas Número consulta: 549 Fecha consulta: 01.09.03 Fecha respuesta: 05.09.03 Formulada por: XXX Materia: Auditoría. Submateria: Trabajos de revisión y verificación de otros documentos contables. CONSULTA PLANTEADA: Necesito modelo de informe especial sobre desembolso de dividendos pasivos con cargo a reservas. NORMATIVA EXAMINADA: 1º. NTA sobre elaboración de informes. 2º. LSA. 3º. BOICAC. RESPUESTA: Los informes especiales publicados por Resolución del Instituto de Contabilidad y Auditoría de Cuentas son los que se relacionan a continuación: 1º. Informe especial sobre aumento de capital por compensación de créditos, supuesto previsto en el artículo 156 de la LSA. 2º. Informe especial sobre aumento de capital con cargo a reservas en el supuesto establecido en el artículo 157 de la LSA. 3º. Informe especial sobre valoración de acciones de los artículos 64, 147, 149 y 225 de la LSA. 4º. Informe especial sobre exclusión del derecho de suscripción preferente en el supuesto establecido en el artículo 159 de la LSA. 5º. Informe especial sobre emisión de obligaciones convertibles, supuesto establecido en el artículo 292 de la LSA. CONCLUSIÓN: No existe modelo oficial alguno de informe especial sobre desembolso de dividendos pasivos con cargo a reservas, por lo que en caso de tener que efectuar un informe de auditoría especial sobre este tipo de operación mercantil se tendría que adaptar alguno de los informes de auditoría, si bien no tenemos conocimiento de que para llevar a cabo Por la presente y salvo opinión mejor fundado, damos respuesta a su consulta planteada. Esta respuesta tiene carácter orientativo, no supone un convenio de consultoría formal y no es vinculante por lo que no se asume responsabilidad directa ni subsidiaria por parte del Re.G.A. REGISTRO GENERAL DE AUDITORES DEL CONSEJO SUPERIOR DE TITULADOS MERCANTILES Y EMPRESARIALES DE ESPAÑA. Servicio de consultas Número consulta: 550 Fecha consulta: 03.09.03 Fecha respuesta: 05.09.03 Formulada por: XXX Materia: Auditoría. Submateria: Formulación Cuentas Anuales. CONSULTA PLANTEADA: ¿Están obligados los auditores de una sociedad a firmar las cuentas anuales (balance de situación, cuenta de pérdidas y ganancias y memoria) y el informe de gestión de la sociedad? NORMATIVA EXAMINADA: 1º. Código de Comercio (artículos 34.1. y 37). 2º. LSA (artículo 172). 3º. PGC (NECA 2ª 1). RESPUESTA: Las cuentas anuales deben ser formuladas por el empresario, en las empresas cuyo titular sea una persona física, o por los administradores, en caso de que la titularidad corresponda a una persona jurídica). La firma de las cuentas debe hacerse necesariamente: a. Por el propio empresario, si la titularidad de la empresa corresponde a un empresario individual. b. Por todos los administradores, en las sociedades anónimas y de responsabilidad limitada. CONCLUSIÓN: No se requiere la firma del auditor en las cuentas anuales objeto de examen puesto que la responsabilidad de su formulación recae en los administradores de la sociedad, y la forma de reconocer su responsabilidad es firmando las mismas. Algunos auditores ponen su sello y firman todas y cada una de las hojas de las cuentas anuales con objeto de dejar constancia de que ésas y no otras son las cuentas anuales que ha sometido a examen, si bien es una práctica completamente en desuso y no estimamos que sea ni necesaria ni recomendable. Por la presente y salvo opinión mejor fundado, damos respuesta a su consulta planteada. Esta respuesta tiene carácter orientativo, no supone un convenio de consultoría formal y no es vinculante por lo que no se asume responsabilidad directa ni subsidiaria por parte del Re.G.A.