PERVERSA Y FALSA ACUSACIÓN A Manuel Rosales Guerrero, le señalan injustamente de presentar fondos administrados no justificados por Bs. 147 mil 389 durante los años 2002-2003 y 2004, según informe plagado de fallas técnicas y evidente violación a leyes y normas vigentes. Esos recursos corresponden a dividendos y pagos obtenidos de Inversiones Agropecuarias La Milagrosa, C.A. donde Manuel Rosales era accionista. El establecimiento y desarrollo de la empresa agropecuaria se remonta al año 1975, cuando adquiere el primer lote de tierra que será la base de su producción. La defensa de Manuel Rosales Guerrero ha presentado las pruebas y evidencias documentales que tienen la fuerza probatoria suficiente y demuestran la falsa acusación y su inocencia: 1- Libro de inventario y de diario de Inversiones Agropecuarias La Milagrosa, C.A. que según disposición del Código de Comercio tiene valor probatorio. Demuestra los pagos y dividendos, y préstamos recibidos por los accionistas. 2- Recibos oficiales de pago emitidos entre los accionistas y la empresa, durante los ejercicios fiscales 2002, 2003, 2004. Aparecen todos los folios útiles contentivos de la relación de préstamos y pagos de la empresa y sus accionistas. Justifican los ingresos de Manuel Rosales durante 2002, 2003 y 2004. 3- Declaraciones de Impuesto Sobre la Renta y sus anexos, contentivos de los estados de los resultados de los respectivos ejercicios fiscales de los años 2002, 2003 y 2004, los cuales justifican legalmente los ingresos del accionista Manuel Rosales Guerrero. 4- Declaración de Impuesto Sobre la Renta al Servicio Nacional Integrado de Administración Aduanera y Tributaria (Seniat) de Inversiones Agropecuaria La Milagrosa, C.A., que reflejan claramente la cancelación de dividendos a favor del accionista Manuel Rosales Guerrero. 5- Declaración de Impuesto Sobre la Renta al Seniat por parte de Manuel Rosales Guerrero como soporte de sus ingresos. La acusación contra Manuel Rosales Guerrero nada tiene que ver con corrupción, malversación o peculado durante su gestión como alcalde y gobernador. Tampoco se le señala de obras mal construidas ni dinero desaparecido, como en caso de muchos funcionarios públicos. Su gigantesca obra social y de infraestructura es reconocida por el pueblo del Zulia y de Venezuela.