Documento descargado de http://www.elsevier.es el 20/11/2016. Copia para uso personal, se prohíbe la transmisión de este documento por cualquier medio o formato. Rev Esp Med Nucl. 2011;30(5):307–310 Nota clínica Utilidad de la PET-TAC 18 F-FDG en la valoración prequirúrgica del mesotelioma pleural maligno tras quimioterapia neoadyuvante J. Orcajo Rincón a,∗ , J.C. Alonso Farto a , A. Rotger Regi a , R. Hernández Pérez a , A.M. Hualde a y V. Pérez Aradas b a b Servicio de Medicina Nuclear, Hospital General Universitario Gregorio Marañón, Madrid, España Servicio de Inmunología, Hospital 12 de Octubre, Madrid, España información del artículo r e s u m e n Historia del artículo: Recibido el 27 de mayo de 2010 Aceptado el 27 de agosto de 2010 El mesotelioma pleural maligno es un tumor relativamente raro pero altamente agresivo, con una expectativa media de vida entre 9 y 17 meses, relacionado con la exposición al asbesto. El dolor torácico y la disnea son sus manifestaciones clínicas más frecuentes. La terapia más empleada es la cirugía acompañada de tratamiento quimioterápico. La valoración prequirúrgica, tras el tratamiento quimioterápico, ha sido realizada a través de la resonancia magnética y la tomografía axial computarizada (TAC). Sin embargo, estas técnicas no permiten predecir de forma precoz la respuesta a la terapia, dada la lenta modificación estructural del tumor. La presentación de esta nota clínica invita a revisar y conocer la creciente utilidad de la imagen PET-TAC, con 18 F-FDG, en la estadificación prequirúrgica del mesotelioma pleural maligno y su influencia en la selección del tipo de cirugía más apropiada. © 2010 Elsevier España, S.L. y SEMNIM. Todos los derechos reservados. Palabras clave: Mesotelioma Asbesto PET-TAC Estadificación Usefulness of 18 F-FDG PET-CT in the presurgical assessment of malignant pleural mesothelioma treated with neoadjuvant chemotherapy a b s t r a c t Keywords: Mesothelioma Asbestos PET-CT Staging Malignant pleural mesothelioma is a relatively rare, but highly aggressive, tumor, associated to exposure to asbestos, with a life expectancy between 9 and 17 months. Chest pain and dyspnea are the most frequent symptoms. The most commonly used therapy is surgery accompanied by chemotherapy. Preoperative assessment, after chemotherapy, has been done using magnetic resonance imaging and computed tomography (CT). However, these techniques cannot predict early response to therapy, because of the slow structural change of the tumor. The aim of this case report is to review and learn about the growing use of PET-CT imaging with 18 F-FDG in the preoperative staging of malignant pleural mesothelioma and its influence in selecting the most appropriate type of surgery. © 2010 Elsevier España, S.L. and SEMNIM. All rights reserved. Introducción El mesotelioma pleural maligno es un tumor relativamente raro, que afecta en nuestro país, en la actualidad, aproximadamente a 9,5 pacientes por 100.000 habitantes/año1 (alrededor de 3.500 nuevos casos al año en Estados Unidos2 ), pero es altamente agresivo, con una expectativa media de vida entre 9 y 17 meses3,4 . Está relacionado con la exposición laboral a amianto/asbesto2 . Sin embargo, aunque el 80% de los pacientes tiene historia de exposición a amianto, sólo el 10% de los expuestos desarrolla mesotelioma5 . Aun cuando su prevalencia no es muy elevada, su incidencia va en ascenso, llegando a ser catalogada una epidemia en países como Turquía3,5 . Es diagnosticado, con mayor frecuencia, en edades comprendidas entre 40 y 70 años. El dolor torácico y la disnea son sus manifestaciones clínicas más frecuentes, seguidos de pérdida de peso, anorexia, tos y febrícula6 . ∗ Autor para correspondencia. Correo electrónico: [email protected] (J. Orcajo Rincón). El diagnóstico de mesotelioma maligno debe ser considerado en todos los pacientes con derrame pleural de etiología no conocida. Tal diagnóstico incluye la aplicación de técnicas de imagen y la confirmación a través de la citología del líquido pleural y la biopsia pleural. La estadificación y valoración de la extensión determinan tanto el tipo de tratamiento como el pronóstico de la enfermedad2 . No existe un claro consenso en la literatura acerca del manejo de los pacientes con mesotelioma pleural maligno; no obstante, la terapia más empleada es la cirugía acompañada de tratamiento quimioterápico. Tres procedimientos quirúrgicos han sido utilizados en el tratamiento del mesotelioma: toracoscopia con pleurodesis, pleurectomía/decorticación y la neumonectomía extrapleural6 . La valoración prequirúrgica, tras el tratamiento quimioterápico, ha sido realizada a través de la resonancia magnética (RM) y la tomografía axial computarizada (TAC) empleando los criterios Response Evaluation Criteria In Solid Tumors (RECIST)7 . Sin embargo, estas técnicas de imagen pueden infraestimar una respuesta adecuada a la terapia dada la progresiva y lenta modificación anatómica del tumor, no permitiendo conocer la actividad tumoral de la lesión de forma precoz8 . 0212-6982/$ – see front matter © 2010 Elsevier España, S.L. y SEMNIM. Todos los derechos reservados. doi:10.1016/j.remn.2010.08.008 Documento descargado de http://www.elsevier.es el 20/11/2016. Copia para uso personal, se prohíbe la transmisión de este documento por cualquier medio o formato. 308 J. Orcajo Rincón et al / Rev Esp Med Nucl. 2011;30(5):307–310 Figura 1. Imágenes TAC, PET e imagen de fusión PET-TAC, en proyecciones axial, coronal y sagital que muestran engrosamiento nodular de toda la superficie pleural del hemitórax derecho con un importante aumento del índice glucídico fundamentalmente a nivel de los dos tercios inferiores pleurales y sobre nodulación situada a nivel del ápex pulmonar. Nuestro objetivo es el de dar a conocer, mediante la descripción de un caso clínico, la utilidad de la tomografía por emisión de positrones (PET) con 18 F-FDG en la estadificación prequirúrgica del mesotelioma pleural maligno y su influencia en la determinación del tipo de cirugía más apropiada para el paciente. Caso clínico Se trata de un paciente varón de 51 años, con cuadro de dolor torácico, de carácter pleurítico, en hemitórax derecho, de 7 días de evolución y posterior disnea de moderados esfuerzos. La radiografía de tórax mostró derrame pleural derecho no masivo. En la TAC torácica se evidenció condensación a nivel del lóbulo inferior derecho y el lóbulo medio con broncograma aéreo y derrame pleural atípico asociado de probable etiología inflamatoria, acompañado de engrosamiento pleural. Se realizó una citología pleural que fue negativa para malignidad, de predominio linfocítico, mientras que el resultado de la biopsia pleural fue de mesotelioma epitelioide. Se decidió tratamiento quimioterápico con cisplatino y premetexed. Se administraron seis ciclos de quimioterapia y se planteó la posibilidad de decorticación pleural, previa reestadificación prequirúrgica de la enfermedad, fundamentada, principalmente, en la realización de PET-TAC para descartar enfermedad a distancia que pudiera contraindicar la cirugía. La TAC realizada fue de tipo diagnóstico y valorada e informada por un médico radiólogo. La PET-TAC con 18 F-FDG (figs. 1–3) confirmó la existencia de engrosamiento nodular que afectaba a toda la superficie pleural del hemitórax derecho, incluyendo la pleura mediastínica, diafragmática y ambas cisuras mayor y menor, compatible con el diagnóstico de mesotelioma. Desde el punto vista metabólico, todas las lesiones pleurales descritas presentaban un importante aumento del índice glucídico localizándose fundamentalmente en los dos tercios inferiores pleurales y sobre nodulación situada a nivel del ápex pulmonar con SUVmáx de 13,72. Se detectaron, además, adenopatías en el ángulo cardiofrénico derecho de hasta 8 mm, sugerentes de malignidad dado su tamaño y su actividad metabólica (SUVmáx: 4,31), siendo los hallazgos de la imagen morfológica y funcional complementarios, lo que permitió dar un carácter patológico a hallazgos estructurales de dudosa valoración (por ejemplo, las adenopatías infracentimétricas descritas). Al encontrarse en el estudio PET-TAC la enfermedad limitada al hemitórax derecho y no detectarse afectación a distancia, se consideró viable la realización de decorticación pleural. Discusión La mayoría de los pacientes con diagnóstico de mesotelioma pleural maligno no es candidato a cirugías extensas con intención curativa dada la extensión regional (no es rara la invasión de la pared costal, el pericardio o las estructuras vasculares) o a distancia (en un 40% de los casos existen metástasis ganglionares5 ) en Documento descargado de http://www.elsevier.es el 20/11/2016. Copia para uso personal, se prohíbe la transmisión de este documento por cualquier medio o formato. J. Orcajo Rincón et al / Rev Esp Med Nucl. 2011;30(5):307–310 309 Figura 2. Imagen de fusión PET-TAC en proyección axial y en ventana pulmonar que muestra la afectación pleural derecha. el momento del diagnóstico. Estos pacientes son tratados inicialmente con radioterapia y quimioterapia7 . Los cambios producidos por estas terapias afectan inicialmente al metabolismo tumoral y posteriormente a su estructura, induciendo a una falsa apreciación del estado real del tumor cuando éste es valorado, de forma precoz, únicamente a través de técnicas de imagen estructural como lo son la RM y la TAC que, como hemos descrito previamente, son los métodos diagnósticos que han sido empleados para la estadificación prequimioterápica y posquimioterápica de los pacientes con mesotelioma pleural maligno9 . Con la introducción de la imagen metabólica ofrecida por la PET con 18 F-FDG y, al mismo tiempo, su acoplamiento a la imagen anatómica aportada por la TAC, el manejo de la patología tumoral se ha visto beneficiado de forma importante10 , permitiendo diferenciar, precozmente, a los pacientes respondedores de los no respondedores a la terapia9 y, de esta forma, facilitando la elección terapéutica más adecuada para cada paciente7 , ya que para la correcta indicación terapéutica, resecabilidad curativa o no, ninguna de las técnicas estructurales y tampoco la PET sin el apoyo de la imagen morfológica es útil. De ahí el creciente interés en la imagen morfofuncional de la PET/TAC. La estadificación de la enfermedad para asumir una actitud terapéutica definitiva requiere exploraciones quirúrgicas torácicas y abdominales, que la evaluación con la imagen PET/TAC puede obviar, bien descartando afectación de focos tumorales sospechosos morfológicamente o evidenciando su diseminación. La utilidad de la imagen PET-TAC, en nuestro caso, radicó en la determinación de la extensión de la enfermedad y la confirmación de la indicación de una conducta quirúrgica radical con intención curativa, lo que demuestra la importancia clínica de esta técnica en el manejo de los pacientes con mesotelioma pleural maligno tanto para la elección precoz de la línea de quimioterapia ideal como para la selección de una posible conducta quirúrgica oportuna. Bibliografía Figura 3. Imagen volumétrica PET que evidencia la afectación única de hemitórax derecho. 1. Peto J, Decarli A, La Vecchia C, Levi F, Negri E. The European mesothelioma epidemic. Br J Cancer. 1999;79:666–72. 2. Pehlivan B, Topkan E, Onal C, Nursal GN, Yuksel O, Dolek Y, et al. Comparison of CT and integrated PET-CT based radiation therapy planning in patients with malignant pleural mesothelioma. Radiat Oncol. 2009;4:35. 3. Tarres J, Abos-Herrandiz R, Alberti C, Martinez-Artes X, Rosell-Murphy M, Garcia-Allas I, et al. Enfermedad por amianto en una población próxima a una fábrica de fibrocemento. Arch Bronconeumol. 2009;45:429–34. 4. Sorensen JB, Ravn J, Loft A, Brenoe J, Berthelsen AK. Preoperative staging of mesothelioma by 18 F-fluoro-2-deoxy-D-glucose positron emission tomography/computed tomography fused imaging and mediastinoscopy compared to pathological findings after extrapleural pneumonectomy. Eur J Cardiothorac Surg. 2008;34:1090–6. Documento descargado de http://www.elsevier.es el 20/11/2016. Copia para uso personal, se prohíbe la transmisión de este documento por cualquier medio o formato. 310 J. Orcajo Rincón et al / Rev Esp Med Nucl. 2011;30(5):307–310 5. Fernandez Infante B, Michel FJ. Mesotelioma pleural maligno. An Sist Sanit Navar. 2005;28 Suppl 1:29–35. 6. Martino D, Pass HI. Integration of multimodality approaches in the management of malignant pleural mesothelioma. Clin Lung Cancer. 2004;5:290–8. 7. Heelan R. Staging and response to therapy of malignant pleural mesothelioma. 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