ITALIA EN MANOS DE DOS COMICOS, UNO DE MILAN Y OTRO DE GENOVA Ramón Lavín Periodista. Corresponsal en Bruselas Europa se tambalea. El resultado de las elecciones italianas ha dejado al país en una situación no complicada sino imposible, para la formación de un gobierno estable, lo que hace temer una revuelta de los mercados financieros, que amenaza con llevarse todo por delante. Italia no gana, Europa pierde. Algunos pueden pensar que estos resultados son solo una representación de la Commedia dell’Arte, pero que pueden tener importantes y graves repercusiones en toda la Unión Europea. El temor de que la incertidumbre se contagie a los países enfermos, añade una nota nueva de incertidumbre, algo que hace rechinar a los mercados. Ante esta situación los líderes europeos se dividen. Por un lado los defensores de la ortodoxia económica y favorables al saneamiento financiero a toda costa. Entre ellos el nuevo presidente del Eurogrupo, el ministro holandés de Finanzas, Jeroen Dijsselbloem. Conocidos los resultados reconocía que la situación "no es agradable", después añadía, “para sacar a Europa del callejón es necesaria una política estable, también para Italia”. Ahora bien, el resultado de escrutinio deja al país en una situación imposible y el temor de que esta inestabilidad se extienda a los países débiles no hace más que agravar la situación. El presidente del Consejo Europeo, Herman Van Rompuy, rogaba a los dirigentes italianos “a asumir sus responsabilidades para formar un gobierno, que siga la estela de las reformas de su predecesor”. La canciller alemana, Ángela Merkel, sin embargo se mostraba confiada en que “Italia encontrará su camino” y criticaba a los que consideraban este resultado como una reacción al programa de austeridad que se ha impuesto a los ciudadanos italianos. En una posición intermedia, frente al grupo de los reformistas, la Comisión Europea se hizo eco “del mensaje que los ciudadanos italianos han emitido con su voto”, a la vez que recordaba los compromisos asumidos por las autoridades de ese país para reducir sus déficits, su deuda y la puesta en marcha de reformas estructurales. Por otro lado, los países que critican el rigor excesivo ven en estos resultados una prueba de la necesidad de reformar esta política extrema. Así el ministro de Finanzas francés, Pierre Moscovici, declaraba “cuando se pide la los ciudadanos una 1 larga exigencia de rigor y de sacrificios, al final puede haber una revuelta popular”. En la misma línea, el presidente del Parlamento Europeo, el socialista alemán, Marc Schultz, aseguraba que “este resultado debe incitarnos a estudiar con seriedad estas reacciones”. En medios comunitarios se teme una reacción fuerte contra Alemania, país líder en la exigencia de rigor. Una gran franja de la población de los países sometidos a estas políticas rechaza la austeridad insostenible bajo su punto de vista. Los años pasan y el anuncio de un tiempo mejor no llega, de ahí parte de la explicación del resultado extraordinario del cómico Beppe Grillo, que con una campaña de rechazo ha logrado el 25 % de apoyo de la población italiana. Una prueba suplementaria de este malestar en Italia contra Alemania ha sido la anulación de la comida que el presidente de la República italiana, Giorgio Napolitano iba a tener con el candidato social-demócrata a la cancillería alemana, Peer Steinbrück, por haber calificado de “clowns” a Berlusconi y Grillo. Con toda seguridad el saneamiento de las finanzas públicas de los países del Sur era indispensable, se comenta en Bruselas, pero ¿a que precio se esta realizando esta operación? Cada vez hay mas voces que se levantan contra los países “ejemplares” del norte de Europa, para que se reduzca la presión contra los países endeudados, de manera a reducir su deuda, que asuman una parte de la quita y que inicien políticas de estimulo económico, de lo que serían capaces teniendo en cuenta su situación fiscal, y así romper el circulo vicioso de austeridad-crisis. FUTURO El futuro de la zona euro y de la UE está en juego y como decía un periodista británico en manos, “de un multimillonario mujeriego y con problemas judiciales (Berlusconi), de un cómico que no sabe nada de política (Grillo), de un político que no sabe nada de economía, (Bersani) y de un economista que no sabe nada de política, (Monti)”. La formación de un gobierno estable en Italia será una operación harto delicada, lo que puede hacer caer a la Eurozona en una nueva crisis. Los mercados vuelven a sufrir de ansiedad, después de un periodo de cierta calma y manifiestan una elevada desconfianza hacia Europa y sobre todo hacia los países del Sur. Todo reposa ahora sobre la alquimia de la política italiana. El líder de la izquierda, Pier Luigi Bersani, tiene la mano para iniciar conversaciones y orientar la formación de su gobierno. ¿Hacia una colaboración con el ex primer ministro, Silvio Berlusconi, que ha hecho ya alguna apertura en ese sentido? ¿Con el partido Cinco Estrellas de Beppe Grillo, que ha hecho campaña contra “el sistema?. “Todos fuera” ha sido el grito de guerra del cómico genovés, respecto a los políticos italianos, durante la campaña electoral, ahora dentro del poder, pero que rechaza asumir. “Ahora es él, quien tiene que decirnos que es lo que quiere hacer” decía Bersani sobre Grillo. Berlusconi no descarta esta alianza, “en nombre de lo que puede ser útil para Italia”, al mismo tiempo que rechaza la posibilidad de unas nuevas elecciones. Esta gran alianza sería sin embargo temporal, no para una legislatura completa por la incongruencia de las ideas políticas y estarías destinada sobre todo a reformar la ley electoral que dé 2 más estabilidad al vencedor en el Senado, cámara que ahora queda en manos de complicadas alianzas de pasillo. El exprimera saliente, Mario Monti, con una campaña electoral desastrosa, queda excluido de toda posibilidad de recuperar el poder, pues solo recibió el 10,5% de los votos. Ante esta situación tras los resultados electorales, la amenaza de un rescate financiero para los países más débiles, si la situación economía financiera se degrada aparece en el horizonte, dando más incertidumbre y nerviosismo a los mercados. Europa se encuentra de nuevo en una grave situación por la irresponsabilidad de sus políticos. 3