48 l CULTURA&OCIO Martes 15 de diciembre de 2015 l Heraldo de Aragón José Luis Melero «Los libros nos hacen más cultos y libres, no siempre mejores personas» ENTREVISTA El escritor y bibliófilo presenta esta tarde, en Los Portadores de Sueños, ‘El tenedor de libros’ (Xordica), en compañía de Martinez de Pisón y de Fernando Sanmartín ¿Qué tipo de tenedor de libros se considera? En el prólogo no parece satisfecho del todo... Bueno, es que con el paso de los años nuestras bibliotecas se han hecho ingobernables, y eso es muy doloroso para alguien como yo que solo presumía de una cosa: de tener la biblioteca ordenada. Después de toda una vida, he acabado convirtiéndome en un mal tenedor de libros, que ya no sabe ni dónde guarda los que, por propia decisión, convicción y dedicación, se comprometió a conservar. ¿Es un libro de microensayos, de anécdotas, de retratos...? Hay ese anecdotario que tanto nos gusta a quienes disfrutamos de las pequeñas historias que nunca aparecen en los manuales; hay microensayos sobre algunos cuantos escritores raros y curiosos, a los que trato de rescatar del olvido; y hay también retratos hechos siempre con cariño de algunos de mis amigos –escritores y no escritores– más queridos. Y lo que hay siempre es una pasión no disimulada por Aragón, del que nada, ni lo más mínimo, me es ajeno. Por otra parte, solo hablo de lo que he leído y que, para bien o para mal, en mis libros está recogida toda mi vida de lector. Afirma: «Me inclino por la máxima de apoyar a los indefensos antes que a los poderosos». ¿Quiénes son aquí los indefensos? Los indefensos son los pobres escritores que perdieron las páginas de los manuales de literatura y de los que ya nadie se acuerda. Es fácil hablar de los Machado, de Valle o de Baroja, pero no tanto hacerlo de Rafael José de Crespo, de Diego San José o de Luis Ruiz Contreras. Y cada uno de éstos tiene una historia que contar. Pero yo también hablo mucho en el libro de los que tuvieron más suerte que aquéllos y hoy son estudiados en los colegios y las universidades: Azorín, Javier Tomeo (al que le dedico dos textos), César Vallejo… A mí me entretiene hacer compatible el gusto de circular un día por las carreteras secundarias y al siguiente por las principales autopistas de la literatura. ¿Por qué puede ser peligroso pensar en las musarañas? Porque, como recuerdo en el primer texto del libro, puedes morir atropellado como les ocurrió a Gaudí, a Pierre Curie, al editor Víctor Seix (por increíble que parezca se llamaba Adolf Hitler el conductor del tranvía que lo atropelló), a Kurt Wolff (el primer editor de Kafka, y el editor de Robert Walser o de Joseph Roth), a Ricardo del Arco en Huesca o a Pilar Bayona en Zaragoza. Le dedica un retrato, y lo cita en otro texto, a Andrés Ruiz Castillo. ¿Qué significó para el periodismo y para HERALDO? Andrés Ruiz Castillo dedicó toda su vida a ‘HERALDO DE ARAGÓN’. Era la viva historia de este periódico y trabajó en él hasta cumplidos los 80 años. Era entonces su subdirector y llevaba sesenta años en la casa. No habrá un caso igual en el periodismo español. Fuimos vecinos en los últimos años de su vida y tuve la suerte de hablar mucho con él en la biblioteca de casa y de que me contara un montón de cosas. En el texto ‘Los libros de Hitler’ escribe: «Los libros no nos hacen necesariamente mejores». ¿No habíamos dicho siempre todo lo contrario? Los libros nos hacen más cultos CRÍTICA DE CINE Carmen Puyó En el abismo de la pobreza Jerez de la Frontera. Año 2012. La España de la crisis, la que rompió vidas, armonía y estabilidad. En ese escenario transcurre el día a día de una joven, madre soltera y sola de un chaval de ocho años al que, como a casi todos, le gusta jugar al fútbol. Ella no tiene más familia ni apoyo que su hijo. Busca trabajo con desespero y nunca lo encuentra, no tiene ni formación ni estudios. No paga el alquiler, le amenazan con un embargo. Al proporcionar estos Pepe Melero es un estudioso de la historia menuda literaria. OLIVER DUCH y más libres, pero no necesariamente mejores personas. Connolly decía que con los hombres que hablan de ética todo el tiempo no puedes dejar a tu mujer ni media hora. Y entre la clase política, en la que abundan –o han abundado– los personajes leídos, ya decía Richelieu que «la traición es cuestión de calendario». Así pues, los libros no nos hacen necesariamente mejores. Y ahí tenemos el ejemplo de Adolf Hitler, que era un buen lector y tenía una buena biblioteca. Uno de los personajes femeni- nos más fascinantes fue María Lucientes, ‘Tita’, que llegó a conversar con Agustina de Aragón... Era la criada de los padres del escritor Eduardo Marquina y sobrina lejana de Francisco de Goya. Había nacido en Zaragoza poco después de los Sitios y efectivamente había llegado a conocer a Agustina de Aragón y a conversar con ella. Lo que me llamaba la atención es que alguien como Marquina, que vivió hasta mitad del siglo XX, hubiera tenido en casa de sirvienta a quien había conversado con una heroína de datos no pretendo desvelar el argumento de ‘Techo y comida’, entre otras razones, porque todo ello forma parte de la vida real de muchos españoles a los que la crisis golpeó en vivo y en directo, los hizo más pobres de lo que ya eran y los dejó absolutamente sin nada. Primer largometraje como director y guionista de Juan Miguel del Castillo, ‘Techo y comida’ es un drama social tan real como la vida. Por ello, no importa que esté mejor o peor dirigido –y está muy bien hecho–, sea más o menos creíble –lo es al cien por cien– y que sus actores resulten creíbles o no –lo son con total intensidad–. Lo que interesa es que aborda la realidad que ha golpeado a tantos cientos de miles durante estos terribles años de escasez, y que lo hace con un derroche apabullante de realismo. Sorprende, y mucho, que quien se ha metido en esta aventura de realismo social puro los Sitios. Estas historias menudas, que tanto nos atraen, son las que no salen en los manuales y las que me gusta recuperar. Recuerda en tres textos a Félix Romeo… Es que Félix Romeo Pescador fue muy importante en la vida de todos sus amigos. Pocos como él han sido nunca tan generosos, tan comprometidos y tan leales en la amistad como él. Yo lo conocí cuando solo tenía 16 años y ya era un muchacho prodigioso. Cualquier cosa que hagamos por él para defender su memoria, siempre será poco en comparación con lo que él hizo por nosotros. Ya que fue aficionado a los tebeos y estamos en vísperas del Salón del cómic de Zaragoza, ¿quién fue José Cabrero? José Cabrero Arnal nació en el Alto Aragón, en Castilsabás, en 1909. Su padre fue fusilado en Huesca en 1939 y Cabrero se exilió en Francia tras la guerra. Apresado por los alemanes, estuvo preso en Mauthausen, donde se dedicó a hacer dibujos pornográficos para los oficiales alemanes. Aquello al parecer le salvó la vida. Liberado en 1945, llegó a París y él, que siempre había sido un libertario, comenzó a dibujar para la prensa comunista y se convirtió en uno de los dibujantes más populares de Francia, tanto que Michel Houellebecq lo recuerda en uno de sus grandes libros, ‘Las partículas elementales’. Murió en 1982 sin haber regresado a España, olvidado por casi todos. Yo he tratado de contribuir a recuperar su memoria. ¿Qué se ha perdido con internet y con las nuevas tecnologías en la búsqueda de libros? Se ha perdido la emoción de salir de cacería. Ahora enciendes el ordenador y puedes comprar libros en cualquier lugar del mundo. Ahora las liebres y las codornices te las traen a casa sin tener que salir al monte. Un aburrimiento. Pero el visitar las librerías de viejo, los rastros y los mercadillos seguirá siendo siempre un placer incomparable. Porque nunca sabes qué te puede aparecer y con qué libro te puedes encontrar. ANTÓN CASTRO sea un debutante, un director nuevo que con soltura, muy buen ritmo narrativo y, sobre todo, una gran confianza en sus personajes y sus intérpretes aborda la grave situación por la que han pasado y siguen pasando quienes han visto de cerca el abismo de la pobreza y la nada. Buen y acertado retrato social, interesante de principio a fin, ‘Techo y comida’ cuenta, además con unos actores muy buenos, entre los que hay que mencionar especialmente a una estupenda Natalia de Molina y al natural y creíble chaval protagonista. Muy interesante. ‘TECHO Y COMIDA’ ★★★ Director y guionista: Juan Miguel del Castillo. Fotografía: Manuel Montero y Rodrigo Rezende. Música: Miguel Carabante y Daniel Quiñones. Intérpretes: Natalia de Molina, Mariana Cordero, Jaime López, Mercedes Hoyos, Gaspar Campuzano. España. 2015. 90 minutos.