Madre soltera en busca de una ayuda

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EL PAÍS, sábado 15 de diciembre de 2007
PAÍS VASCO
Madre soltera en
busca de una ayuda
Vizcaya retira la renta básica a una
mujer que rechazó un trabajo para
poder cuidar de su recién nacido
EDUARDO AZUMENDI
Vitoria
¿Se han convertido las ayudas
sociales en un coladero para defraudar? Las instituciones cada
vez tienen más miedo de que
sea así y por ello los controles y
la interpetación de la normativa
resulta más estricta. Tan férrea
que ha topado con el Ararteko.
El Defensor del Pueblo vasco ha
recomendado a la Diputación de
Vizcaya que restituya la renta
básica que retiró hace un año a
una madre soltera, quien rechazó un trabajo para poder cuidar
de su recién nacido. De momento, la respuesta de la Diputación
ha sido negativa.
El Ararteko censura
a la Diputación y
le recomienda que
restituya el subsidio
Aunque el Ararteko ha tenido que lidiar varias veces con
quejas relacionadas con la renta
básica, es la primera vez que se
enfrenta a una institución que
se niega a pagar la prestación
por rechazar un trabajo.
El relato de los hechos es el
siguiente: Isabel (nombre supuesto) trabaja tres horas al día
(de 18.30 a 21.30) como limpiadora y recibía desde 2001 un subsidio de 240 euros mensuales de
la Diputación de Vizcaya para
completar un salario equivalente a la renta básica (algo superior a los 500 euros). Está soltera. Cuando nació su hija, en marzo de 2006, la ayuda social subió
hasta 706 euros al mes. Decidió
acogerse a su derecho a una excedencia para poder cuidar de
su bebé, ya que se trata de una
familia monoparental, y vivir de
los 706 euros de la renta básica.
En noviembre de 2006, la Diputación le retiró la ayuda por
la “baja voluntaria en el trabajo”, uno de los supuestos que incluye la normativa para dejar de
abonar la prestación. Desde entonces, Isabel no cobra nada en
concepto de renta básica. La mujer argumentó que su horario de
trabajo le obligaba a contratar a
una persona para el cuidado del
bebé, de tal manera que el sueldo que hubiera de percibir por
su trabajo lo abonaría a la persona que cuidara del bebé.
Según el Ararteko, la tesis de
la Diputación de que esta mujer
tiene unos ingresos (su trabajo)
y renuncia voluntariamente a
ellos es cierta, pero su precariedad se da con independencia de
esos ingresos. “No rechaza un
empleo. Ya lo tiene, y lo que hace es ejercitar su derecho a la
excedencia. Cumplía cuando trabajaba los requisitos para ser titular de la prestación y los cumple en excedencia. Sufre una
gran precariedad, que no la ha
creado ella con su renuncia a
trabajar”, concluye el Ararteko.
El alcalde de Labastida
ve un “pelotazo” en el
plan del campo de golf
TXEMA G. CRESPO
Bilbao
El alcalde de Labastida, Higinio
Arinas, de EB, denunció ayer
que el proyecto de un campo de
golf previsto en esa localidad “esconde, en realidad, un pelotazo
urbanístico, además de que no
cuenta con los necesarios recursos hídricos”. Arinas compareció ante la prensa para mostrar
su satisfacción por el informe
previo de la Comisión de Ordenación y Planeamiento Urbanístico, que señala que el proyecto
“tal y como está presentado, es
inviable”. En dicha comisión participan el Gobierno, las diputaciones y Eudel.
Arinas acudirá el próximo lunes, con voz, pero sin voto, a la
reunión definitiva de la comisión para ampliar los argumentos contrarios al proyecto, que
prevé construir 750 chalés en
las faldas del Toloño, a las afueras de la localidad, de apenas
1.500 habitantes. “En realidad,
el campo de golf es una excusa
para recalificar un millón de metros cuadrados rústicos en urbanizables”, dijo el primer edil.
El alcalde llegó al cargo tras
los comicios de mayo con el respaldo de los concejales de EB
(dos), PNV (dos) y una candidatura independiente (uno) frente
a los cuatro del PP.
Su elección como primer alcalde de EB en Euskadi estuvo
marcada por la obligación que
la ejecutiva alavesa del PNV impuso a sus concejales en la localidad de que le respaldasen. Uno
de ellos, Agustín Eguiluz, ha dimitido asegurando que sufre
amenazas. Arinas le mostró
ayer su solidaridad. “El asunto
es un problema interno del
PNV, pues quienes han criticado
en el pleno la postura favorable
al campo de los concejales nacionalistas han sido sus propios votantes”, añadió. El alcalde desmintió que el proyecto esté
vinculado a iniciativas empresariales que beneficien al pueblo.
El ararteko, Iñigo Lamarca, poco antes de una comparecencia en el Parlamento. / pradip j. phanse
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