CARMEN DE BURGOS SEGUI Escritora, periodista y pedagoga. Nació en Rodalquilar (Almería) en 1867. Su primer contacto con el mundo del periodismo se produce tras su prematuro matrimonio con el periodista Arturo Álvarez, con él comenzará a adquirir el aprendizaje del oficio. Problemas matrimoniales y la muerte de su hijo, le llevan a abandonar el domicilio conyugal, trasladándose a Madrid con su hija. Los primeros libros de los que tenemos constancia son de esta etapa almeriense Ensayos literarios y Notas del alma que se publica ya en Madrid. En 1901, tras obtener el divorcio de su marido, decide estudiar magisterio como alumna libre, al tiempo que comienza a publicar algunos artículos. En 1903 se incorpora como redactora al Diario Universal, siendo la primera mujer que alcanza tal puesto en nuestro país. En 1907 ocupa la Cátedra de Economía Domestica en la Escuela de Artes e Industrias de Madrid. Pero ese mismo año es trasladada a la Escuela Normal Superior de Maestras de Toledo (sus biógrafos coinciden que fue como castigo por unos artículos publicados en el Heraldo de Madrid que no gustó a las autoridades académicas). Allí permanece hasta 1909, año en que se traslada a Madrid como auxiliar de la Sección de Letras en la Escuela Normal Central de Maestras, al tiempo que desempeña la Cátedra de Economía Domestica en la Escuela Superior de Artes Industriales e Industrias. Colaboró en multitud de revistas: La España Artística, La Educación, Album Ibero-Americano, El ABC, El Liberal, Tribuna Pedagógica, La Esfera. Fue redactora de El Nuevo Mundo de Madrid y de El Heraldo, para el que actúa como corresponsal de guerra en el conflicto marroquí de 1909. Firmaba siempre sus artículos con el pseudónimo “Colombine” que le había dado el periodista Augusto Figueroa. También probó fortuna en otros géneros tales como la poesía (Notas del Alma), el teatro (Teatro irrepresentable), el diálogo (La Voz de los Muertos) y el ensayo en forma de manuales de educación femenina (Moderno tratado de labores, Las artes de la mujer) o de sociedad (Últimos modelos de cartas, tratados gastronómicos). Así mismo reflexiona sobre aspectos sociales o legales (La Higiene de los niños, El divorcio en España). Cultivó la novela corta (El Tesoro del Castillo) y la novela larga (Los inadaptados, El último contrabandista, que pinta la vida y las costumbres de Almería). Formo parte como miembro activo de numerosas asociaciones: La Asociación de Prensa, La Sociedad de Escritores y Artistas, El Ateneo, La Asociación para la Protección de la infancia, y otras sociedades científico literarias. Y dio conferencias en París, Chile y México. Por lo que se refiere a su conciencia feminista, esta fue evolucionando paulatinamente. En un principio sus reivindicaciones se basaron en la defensa del derecho a la educación y al papel fundamental de la mujer como madre para acabar defendiendo el papel de la mujer en la vida pública. Su ideas cercanas al socialismo hicieron de ella una de las mayores defensoras del Sufragio Universal. Falleció en Madrid en 1932, mientras participaba en una reunión política del Círculo Radical Socialista.