Actuando con honestidad

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ACTUANDO CON HONESTIDAD
Una madre pobre llamada Teresa que sobrevivía lavando ropa
ajena o cocinando para otros junto a su pequeña Daniela, un día
decidió dejar esa vida y buscar un trabajo más estable en una casa
de familia como empleada doméstica. Visitó muchas casas
pero le pedían recomendaciones y más aún no la
aceptaban con niña. Un buen día tuvo la suerte de
conseguir trabajo en casa de Sebastián Peña y Luciana
Rojas, una familia que no podía tener hijos pero que
decidieron apoyar a su sobrino llamado Pedro para que
estudiara y fuera mejor pero este chico no sabía valorar la
generosidad de sus tíos.
La condición para el trabajo fue el documento de identidad, cama adentro y
sola. Así que Teresa tuvo que encargar a su pequeña Daniela con su vecina
que era ya una persona mayor pero que le conocía de siempre.
Teresa se esmeraba en su trabajo, pero no
tenía una buena impresión del joven Pedro
que siempre le exigía con rapidez las cosas
que solicitaba. Sus patrones le tenían mucha
confianza, sobre todo el señor. Pero un día
esa confianza fue puesta en juego. De la
mesa de noche de Luciana desapareció una
fuerte cantidad de dinero, la única puesta en
evidencia fue Teresa. Ella era muy honrada
a pesar de su pobreza y además sabía recompensar la confianza de sus
patrones pero esta vez, Luciana se ensañó con ella y no quiso escuchar
razones. Mientras tanto, Pedro se reía del dolor de Teresa que fue a parar a la
cárcel.
Desde ese lugar, teresa se comunicaba con la amiga que cuidaba a su niña y
le pidió que nunca le diga a la pequeña donde estaba, que le dijera que había
viajado con sus patrones a otro lugar.
El dolor consumía a Teresa cada vez
que se comunicaba para saber de su
niña, pues la amiga era ya mayor y
hacía lo que podía para que a la niña
no le hiciera falta lo básico. Un día
Daniela escuchó por teléfono que su
madre estaba en la cárcel, y desde
esa fecha sufría junto la anciana.
Por otro lado, en la casa de los Peña, las cosas no
andaban bien, el joven empezó a demostrar su
verdadera personalidad, se desaparecían las cosas
hasta que decidió dejar a los tíos pero hurtando una
gran cantidad de dinero de la caja fuerte de
Luciana.
Este hecho hizo reflexionar a los esposos, que si bien no lo denunciaron
porque no sabían su paradero, quisieron reparar el daño que habían causado a
una mujer inocente. Por ello, retiraron la denuncia contra Teresa, le pidieron
perdón y le rogaron vuelva con ellos, ya no como la doméstica sino como al
ama de llaves. Además le ofrecieron ayuda para su niña y la anciana que la
cuidaba.
Daniela al inicio no aceptaba, pero con
el cariño de su madre y el buen trato
de los señores cambió de actitud.
Desde esa fecha hasta hoy, son muy
unidos, no por los lazos de sangre sino
por los de amor, lealtad y cariño.
Enseñanza:
La justicia tarda pero no olvida, recompensa el ciento por uno y hace del
hombre un ser agradecido, leal y perseverante en la tarea a pesar de las
pruebas en el camino.
No nos dejemos llevar por las apariencias y la condición, seamos cautos en
nuestra labor y demos a cada quien lo que le es debido.
INTEGRANTES
5TO “B”
PACHAS ALDANA, Estefani
PEÑA RIVERA, Maria
SÁNCHEZ CAPUÑAY, Liliana
URIARTE VALLEJOS, Shirley
VARAS MENDOZA, Alicia
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