Estatutos Facultad de Teología - UC Transparente

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ESTATUTOS DE LA FACULTAD DE TEOLOGIA
TÍTULO I
NATURALEZA Y FINES DE LA FACULTAD
Art. 1º : La Facultad de Teología, inaugurada el 1º de Abril de 1935, y erigida
canónicamente como tal y por lo tanto como persona jurídica de
derecho eclesiástico por la Santa Sede el 16 de Julio de 1939, es un
organismo de la Iglesia Católica, que forma parte integrante de la
Pontificia Universidad Católica de Chile y participa en el conjunto de
su vida con arreglo a los Estatutos, Reglamentos, usos y costumbres
de dicho Establecimiento, y a los suyos propios.
Art. 2º : La Facultad de Teología (en adelante “La Facultad” se rige por:
a)
La legislación canónica vigente en la Iglesia Universal y las
normas particulares de la Santa Sede para las Facultades de
estudios eclesiásticos;
b)
Los Estatutos y reglamentos de la Pontificia Universidad
Católica de Chile (en adelante “La Universidad”;
c)
Los presentes Estatutos;
d)
Los Reglamentos internos de la misma Facultad, debidamente
aprobados en la forma señalada en estos Estatutos.
Art. 3º : Las disposiciones normativas aludidas en las letras a) y c) del
artículo precedente, así como cualesquiera otras emanadas de la
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Santa Sede, o de la Conferencia Episcopal de Chile, en uso de las
facultades establecidas en el Decreto “Christus Dominus” del
Concilio Vaticano II, Nº 38, 4, prevalecen sobre la legislación general
de la Universidad en materias tocantes a la Facultad. Sin embargo,
se buscará obrar de acuerdo con los organismos universitarios
competentes en la aplicación de esas normas prevalentes. Las
dudas de interpretación que pudieran suscitarse serán resueltas por
el Gran Canciller, quedando siempre a salvo el derecho de recurrir a
la Santa Sede.
Art. 4º : La Facultad tiene como tarea inmediata investigar, enseñar y
comunicar la Revelación de Dios en Jesucristo, percibida por la fe en
el interior de la Iglesia y en el contexto histórico, y estudiada con la
metodología científica adecuada. Ello exige un estudio directo y
profundo de la Sagrada Escritura y de la Tradición, así como de los
actos y decisiones del Magisterio, y un contacto abierto y crítico de
los demás campos de la reflexión humana. Se prestará especial
atención a los desafíos más importantes para la teología en el
momento actual, chileno y latinoamericano.
Art. 5º : En el desempeño de sus tareas universitarias de investigación,
docencia y comunicación teológica, y con el fin de contribuir a darle
realidad académica al carácter católico de la Universidad a tenor de
la “Declaración de Principios” de la misma, de fecha 4 de Octubre de
1979, referida en el artículo 3, de los Estatutos Generales de la
Pontificia Universidad Católica de Chile, la facultad pretende ofrecer
al interior de ésta la presencia informante, orientadora, y dialogante
de la Fe Católica para la elaboración cultural en la reflexión
interdisciplinaria; además, se propone servir a la comunidad nacional
o a la misma Iglesia, contribuir al diálogo franco y constructivo con
los cristianos no católicos, y promover estudios y actividades
encaminados al encuentro con los no-cristianos y los no-creyentes.
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Art. 6º : La investigación teológica goza de libertad científica dentro de los
límites del método que le es propio, reconociéndose a quienes la
ejercen en el ámbito de la Facultad, el derecho a manifestar
debidamente el resultado de sus estudios, es decir, dejando
claramente diferenciado lo que es doctrina segura, de los que son
solamente hipótesis, tomando en cuenta los intereses del bien
común de la Iglesia y manteniendo la debida coherencia con el
Magisterio.
Las labores de investigación teológica, se rigen por un Reglamento
especial aprobado conforme al artículo 141.
Art. 7º : Por medio de su docencia pretende la Facultad dar a los estudiantes
que acuden a ella por diferentes razones la congrua formación en las
diferentes
disciplinas
teológicas,
proporcionándoles
los
conocimientos básicos e introduciéndolos al manejo de las fuentes,
con el fin de capacitarlos, sea para la investigación, sea para la
enseñanza, sea para las múltiples tareas del apostolado o de la
pastoral.
Art. 8º : La libertad académica que se reconoce en la investigación y en la
docencia ha de ejercerse en plena comunión con el Magisterio
jerárquico, como expresión de servicio al Pueblo de Dios.
Art. 9º : Compete también a la Facultad desarrollar las actividades de
comunicación universitaria en su propio campo, procurando
colaborar con las iniciativas interdisciplinarias en que se solicite su
aporte.
Art. 10º : Entre los servicios que la Facultad se propone prestar a la Iglesia,
tiene especial relevancia el de contribuir con una sólida capacitación
teológica a la formación de los aspirantes a los ministerios
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eclesiásticos que estén en situación de recibir una educación
universitaria; sin que por ello la Facultad pretenda o pueda dar todos
los elementos que las autoridades eclesiásticas correspondientes
consideren necesarios para la formación integral de los ministros de
la Iglesia.
Dentro de este mismo objetivo la Facultad puede organizar también
actividades académicas para la formación permanente del clero.
Art. 11º : La consecución de los objetivos de la Facultad está entregada a la
responsabilidad de todos sus integrantes quienes, en el ejercicio de
sus respectivos derechos y deberes, han de observar la comunición
eclesial, la búsqueda del bien común de la Universidad y el debido
respeto a las personas y al ámbito propio de los organismos y de las
funciones contemplados en estos Estatutos.
TÍTULO II
LA COMUNIDAD ACADEMICA Y SU GOBIERNO
Art. 12º : Todos los docentes e investigadores de la Facultad, así como sus
alumnos propios, configuran la comunidad de la Facultad, y en ella
participan ejerciendo activamente sus respectivos derechos y
deberes. Integra también la Facultad su personal administrativo y
auxiliar.
Sección A) : Autoridades personales
Capítulo I : El Gran Canciller
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Art. 13º : Por su naturaleza misma, y sin perjuicio de su dependencia de las
autoridades universitarias en las materias de su competencia, la
Facultad está bajo la tuición directa de la Jerarquía eclesiástica (cf.
“Sapientia Cristiana”, Proemio n. IV; art. 3, párrafo 1; art.4;
“Ordinationes”, art. 5) tuición que es ejercida inmediata y
ordinariamente por el Gran Canciller de la Universidad, el cual
representa a la Santa Sede ante toda la Universidad y ante la
Facultad, y a éstas ante la Santa Sede.
El oficio de Gran Canciller corresponde “ipso iure” al Arzobispo de
Santiago o al Administrador Apostólico
“sede plena” de la
Arquidiócesis; en caso de vacancia de la sede arzobispal ejerce este
oficio el Vicario Capitular o el Administrador Apostólico “sede
vacante” del Arzobispado, con el título de Pro-Gran Canciller.
Art. 14º : El Gran Canciller, o el Pro-Gran Canciller en su caso, pueden
designar como Vice-Gran Canciller a un sacerdote de su libre
elección, cuyas atribuciones serán señaladas en el decreto de
nombramiento.
Art. 15º : El Vice-Gran Canciller cesa en sus funciones por renuncia aceptada
por el Gran Canciller, por revocación de su nombramiento, por
finalizar el período para el cual fue designado o al cesar
canónicamente en el ejercicio de su cargo el Gran Canciller que lo ha
nombrado.
Art. 16º : Son atribuciones del oficio de Gran Canciller dentro de la facultad, y
sin perjuicio de otras que señalen estos Estatutos y otros
Reglamentos:
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a) Velar por la integridad de la Fe Católica, dentro de la justa
libertad
investigación y enseñanza que compete a los
académicos, como
también por las buenas costumbres y la
disciplina eclesiástica.
b) Velar porque el otorgamiento de los grados académicos, incluso
los “honoris causa”, se realice de acuerdo con las normas de la
Santa Sede.
c) Resolver las dudas a que se refiere el artículo 3º.
d) Pronunciarse sobre la interpretación de los Estatutos y
Reglamentos de la Facultad, propuesta por el Consejo en los
casos de mayor importancia, a tenor del artículo 40, letra r).
e) Aprobar los currículos de docencia de que se habla en los
artículos 119, 121 y 122.
f) Aprobar los reglamentos internos que hubieren sido aprobados
por la Asamblea de la Facultad, a tenor del artículo 35, letra b).
g) Prestar su acuerdo a las proposiciones de reforma de los
Estatutos, antes de que sean presentadas a la Santa Sede,
conforme al artículo 140.
h) Nombrar al Decano sobre la base de una terna establecida en
conformidad a los artículos 29 y 31, y presentada por el Rector de
la Universidad.
i) Proveer en forma que se asegure la continuidad de dirección de
la Facultad en los casos en que se hubiere hecho imposible la
aplicación de las normas acerca de nombramiento y subrogación
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del Decano, previstas en los artículos 24, letras c) y d); 27, letra
e); 29 y 31.
j) Nombrar al Vicedecano, a propuesta del Decano.
k) Nombrar a todos los profesores de cualquier categoría, una vez
cumplidos los trámites señalados tanto por estos Estatutos como
por el Reglamento del Académico de la Facultad, y por las
disposiciones generales de la Universidad sobre designación de
docentes, confiriéndoles al mismo tiempo la misión canónica, o el
permiso para enseñar según los casos.
l) Otorgar misión canónica a los docentes de teología a quienes no
corresponda recibir el nombramiento a que se refiere la letra
precedente.
m) Otorgar su visto bueno a los candidatos a docentes de planta o a
contrata, antes que su candidatura sea propuesta al Consejo en
conformidad al artículo 78.
n) Aprobar la designación de los Directores de Docencia de que se
habla en el artículo 106, previamente a su entrada en funciones.
ñ) Incoar ante la Comisión de Calificación Académica previa
consulta al Rector, el proceso para la remoción del Decano o del
Vicedecano, y pronunciar su destitución si hubiere lugar, a tenor
del artículo 22, letra b).
o) Aceptar la renuncia presentada por el Decano, a tenor del
artículo 22, letra d), previa consulta a la Asamblea de la Facultad
acerca de las posibles repercusiones académicas y
administrativas de la decisión, y dando de esta aceptación
inmediato aviso al Rector.
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p) Declarar la vacancia del cargo de Decano por inhabilidad
permanente del profesor que lo desempeña, de acuerdo con el
artículo 22, letra c).
q) Aceptar la renuncia presentada por el Vicedecano, dando de esta
aceptación inmediato aviso al Decano.
r) Remover y privar de la misión canónica a los docentes que
hubieren incurrido en una falta merecedora de tal sanción, según
lo establecido en los artículos 89, 90 y 92.
s) Enviar periódicamente a la S. Congregación para la Educación
Católica una detallada relación de la marcha de la Facultad, en
la forma establecida por ese mismo Dicasterio.
Capítulo II: El Decano
Art. 17º : El Decano es la autoridad unipersonal sobre quien recae la
responsabilidad inmediata del gobierno de la Facultad y su
representación ante todos los organismos universitarios y extrauniversitarios. Forma parte por derecho propio del Consejo Superior
de la Universidad.
Art. 18º : El Decano es nombrado para un período de tres años por el Gran
Canciller, quién lo designará en conformidad a lo establecido en los
artículos 16, letra h); 29 y 31. Es reelegible por una sola vez
consecutiva.
Art. 19º : Nadie puede ser incluído en la terna si no tiene en la Facultad la
categoría de Profesor Títular o Adjunto, y si no cuenta con el voto
favorable de la mayoría establecida en el Reglamento del Claustro.
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Art. 20º : Al Decano le corresponde:
a) Convocar y presidir tanto la Asamblea de la Facultad como el
Consejo, y resolver mediante voto público los empates de
votación que en dichos organismos pudieran producirse.
b) Ejecutar los acuerdos de la Asamblea y del Consejo y poner en
estudio las recomendaciones de la Asamblea.
c) Coordinar y promover el trabajo interdisciplinario.
d) Dirigir la administración general de la Facultad.
e) Elaborar con el Consejo el presupuesto de la Facultad, y
presentarlo a Rectoría una vez aprobado por el mismo Consejo.
f) Integrar y presidir la Comisión de Calificación Académica.
g) Integrar y presidir el Comité Ejecutivo, constituido, además por el
Vicedecano y el Secretario.
h) Proponer al Gran Canciller el nombramiento como Vicedecano de
un profesor de la Facultad, previa consulta al Consejo.
i) Proponer al Rector el nombramiento como Secretario de un
profesor de la Facultad, previa consulta al Consejo.
j) Proponer al Gran Canciller los nombramientos y promociones de
docentes, de acuerdo con las disposiciones de los presentes
Estatutos y del Reglamento del Académico de la Facultad.
k) Nombrar con acuerdo del Consejo a los Directores de docencia
de que se habla en el artículo 106, sujetos a la aprobación del
Gran Canciller en tenor del artículo 16, letra n), y a los
coordinadores de otros Programas o actividades.
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l) Nombrar, con acuerdo del Consejo, y por un período de dos años
renovables, a los Directores de las publicaciones de la Facultad.
m) Nombrar, previa consulta al Consejo, al Director de la Biblioteca.
n) Nombrar, previa consulta al Consejo, la Comisión encargada de
la selección y admisión de alumnos.
ñ) Designar las Comisiones para evaluar las tesis y memorias y
tomar los exámenes de grado.
o) Tomar todas las medidas conducentes a la buena marcha de la
Facultad que no estén reservadas a los organismos colegiados
de gobierno.
p) Arbitrar los medios para una evaluación objetiva del trabajo de la
Facultad.
q) Dar por lo menos una cuenta anual a la Asamblea sobre la
marcha y situación de la Facultad en lo académico, administrativo
y financiero.
r) Mantener informados a la S. Congregación para la Educación
Católica los datos estadísticos de la Facultad.
Art. 21º : El Decano puede delegar en forma ocasional o permanente algunas
de sus atribuciones en el Vicedecano, especialmente las señaladas
en las letras e), f), n) y p) del artículo precedente.
Art. 22º : El Decano cesa en su cargo por:
a) Expiración del período para el cual fue nombrado;
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b) Destitución pronunciada por el Gran Canciller por grave causa y
al término del proceso incoado ante la Comisión de Calificación
Académica;
c) Inhabilidad permanente, declarada tal por el Gran Canciller,
previo acuerdo del Consejo, y
d) Renuncia a su cargo presentada al Gran Canciller y aceptada por
éste, en conformidad a lo establecido en el artículo 16, letra o).
Capítulo III: El Vice-Decano
Art. 23º : El Vicedecano es nombrado por el Gran Canciller a propuesta del
Decano, previa consulta hecha por éste al Consejo.
Art. 24º : Al Vicedecano le corresponde:
a) Reemplazar al Decano cuando éste no puede presidir el Consejo
o la Asamblea.
b) Representarlo en todos los casos en que aquél lo determine.
c) Subrogarlo en casos de ausencia prolongada, enfermedad, etc.
d) Asegurar el interinato en caso de vacancia del cargo de Decano.
e) Colaborar inmediatamente con él en el gobierno de la Facultad.
f) Integrar el Comité Ejecutivo, junto con el Decano y el Secretario.
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Art. 25º : El Vicedecano, salvo caso de renuncia o destitución, dura en sus
funciones hasta un mes después del momento en que un nuevo
titular toma posesión del Decanato.
Capítulo IV: El Secretario
Art. 26º : El Secretario de la Facultad es nombrado por el rector a propuesta
del Decano, previa consulta hecha por éste al Consejo.
Art. 27º : Al Secretario le corresponde:
a) Actuar como Ministro de Fe en la Facultad, vigilar la confección
de las Actas del Claustro de la Facultad, de la Asamblea y del
Consejo, y expedir todo tipo de certificados sobre las actividades
académicas y administrativas de la Facultad y de las personas
que la componen.
b) Llevar el archivo de la Facultad.
c) Asistir al Decano en las tareas administrativas.
d) Integrar el Comité Ejecutivo, junto con el Decano y el Vicedecano.
e) Asumir las responsabilidades señaladas en el artículo 24, letras
a), b), c) y d), cuando el Vicedecano esté impedido.
Art. 28º : El Secretario dura en sus funciones tanto cuanto el Decano que lo
propone, pero sigue desempeñándose como interino hasta el
momento en que entrega su cargo al nuevo Secretario.
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Sección B: Organismos colegiados
Capítulo V: El Claustro de la Facultad
Art. 29º : El Claustro de la Facultad es convocado únicamente para el efecto
de establecer la terna que ha de ser presentada al Gran Canciller
para el nombramiento de Decano. Su funcionamiento se rige por un
Reglamento especial aprobado conforme a lo establecido en el
artículo 141.
Art. 30º : El Claustro está compuesto por la totalidad de los académicos que
pertenezcan a la planta con tres meses de anterioridad a la fecha de
la convocatoria.
Art. 31º : Una vez llenados los tres lugares de la terna, el Secretario de la
Facultad comunicará de inmediato los resultados del Claustro al
Rector de la Universidad, con el objeto de que los presente al Gran
Canciller, para que éste proceda a nombrar al Decano.
Capítulo VI: La Asamblea de la Facultad
Art. 32º : La Asamblea de la Facultad está formada por:
a)
El Decano, que la preside, el Vicedecano y el Secretario:
b)
La totalidad de los Académicos de planta, y
c)
El Presidente del Centro de alumnos y dos estudiantes
designados en conformidad al Reglamento del Centro de
alumnos, todos ellos sólo con derecho a voz.
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Art. 33º : La Asamblea es convocada por el Decano, por lo menos, una vez al
año para oír su cuenta sobre la marcha de la Facultad.
Art. 34º : La Asamblea puede autoconvocarse por acuerdo firmado de un
tercio al menos de sus miembros con derecho a voto, para tratar
asuntos relacionados con lo dispuesto en las letras b) y c) del
artículo siguiente:
Art. 35º : A la Asamblea le corresponde:
a) Oír y debatir la cuenta anual del Decano;
b) Prestar su acuerdo para la aprobación y modificación de los
Estatutos y Reglamentos de la Facultad, quedando a salvo el
derecho de las autoridades superiores, a tenor de los artículos
16, letra f); 140 y 141.
c) Formular recomendaciones de política académica.
d) Deliberar sobre otras materias de particular importancia para la
Facultad, salvada la competencia de otras instancias, que el
Decano de acuerdo con el Consejo de la Facultad someta a su
conocimiento.
Art. 36º : Para sesionar, la Asamblea requiere ordinariamente la presencia de
la mayoría absoluta de sus miembros con derecho a voto en
ejercicio. Pero cuando están en tabla la modificación de los
Estatutos o la aprobación, o modificación de los Reglamentos de que
habla el artículo 141, se requiere, en primera citación, un quórum de
los dos tercios de los miembros en ejercicio con derecho a voto; sin
embargo, en segunda citación, que se entenderá automáticamente
anunciada para una hora después de la primera, se podrá sesionar
con el quórum ordinario.
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Art. 37º : Los acuerdos de la Asamblea se toman por mayoría absoluta de sus
miembros presentes con derecho a voto; se exceptúa la modificación
de los Estatutos, que requiere de dos tercios de los miembros
presentes y, además, la mayoría absoluta de los miembros en
ejercicio con derecho a voto.
Capítulo VII: El Consejo de la Facultad
Art. 38º : El Consejo es el organismo colegiado sobre el cual recae la
responsabilidad directa de la dirección de la Facultad.
Art. 39º : El Consejo está constituído por:
a) El Decano, que lo preside, el Vice-Decano y el Secretario.
b) Cuatro profesores elegidos por dos años por todos los
académicos de planta, en tal forma que haya entre ellos, por lo
menos, un Titular y un Adjunto, y que quede asegurada en el
Consejo la presencia de profesores pertenecientes por lo menos
a tres diferentes áreas o ámbitos disciplinarios del quehacer
teológico.
c) El Presidente del centro de alumnos y otro representante de los
estudiantes designado en conformidad al Reglamento del mismo
Centro, ambos sólo con derecho a voz.
Art. 40º : Al Consejo le corresponde:
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a) Establecer la política general de las actividades académicas y
administrativas de la Facultad y tomar acuerdos para su
implementación efectiva.
b) Velar, consciente de su corresponsabilidad con las obligaciones
del Gran Canciller, por la fidelidad a la doctrina y disciplina de la
Iglesia dentro del ámbito de la Facultad.
c) Pronunciarse con voto consultivo sobre los nombres propuestos
por el Decano para los cargos de Vicedecano, Secretario y
Director de la Biblioteca.
d) Acoger e implementar las recomendaciones de la Asamblea.
e) Determinar el número de áreas de actividad en que estará
dividida la Facultad y fijar la nómina de quienes estarán adscritos
a cada una de ellas.
f) Dar sanción oficial a los grupos de trabajo que la soliciten.
g) Aprobar y modificar los currículos de los Programas de docencia,
dentro de las normas establecidas por la legislación universal de
la Iglesia, y de acuerdo con lo establecido en los artículos
119,121 y 122.
Dichos currículos deberán, además, ser
aprobados por el Gran Canciller.
h) Actuar como asesor inmediato del Decano en la coordinación de
las diversas actividades académicas, especialmente de las
interdisciplinarias.
i) Colaborar con el Decano en la elaboración del presupuesto de la
Facultad que ha de ser presentado a Rectoría y al Consejo
Superior, velando por la equitativa asignación de los ítems a los
diversos organismos de la Facultad.
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j) Velar por el leal y estricto cumplimiento del presupuesto
aprobado y de los decretos o resoluciones que sobre esta
materia emanen de Rectoría.
k) Aprobar las designaciones propuestas por el Decano, de los
Directores de docencia a que se refiere el artículo 106, de los
Coordinadores a que se refiere el art. 20, letra k), como también
de los Directores de las publicaciones periódicas de la Facultad.
l) Elaborar la planta de profesores, y pronunciarse sobre los
nombres que el Decano quiera proponer a la Comisión de
Calificación Académica cuando sea necesario contratar
temporalmente a algunos docentes que no pasen a formar parte
de la planta.
m) Actuar como instancia de apelación en las reclamaciones
interpuestas por los interesados o afectados contra las
resoluciones de la Comisión de Calificación Académica.
n) Aprobar las solicitudes fundadas de dispensa sobre normas
generales de los Reglamentos dictados por las instancias
internas de la Facultad, presentadas por docentes o alumnos.
ñ) Aprobar las solicitudes fundadas de convalidación de estudios
hechos fuera de la Facultad, previo informe del Director de
Docencia que corresponda, dentro de las normas generales
vigentes en la Universidad.
o) Aprobar los convenios de reconocimiento de estudios, de
patrocinio académico y otros que la Facultad pueda pactar, sin
perjuicio de las atribuciones que respecto de los mismos
correspondan a otras instancias superiores.
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p) Designar comisiones integradas por sus propios miembros o por
otros especialistas, para que presenten informes sobre puntos
que requieran especial estudio o para que ejecuten determinadas
tareas.
q) Velar por el cumplimiento de los Estatutos y demás normas
vigentes en la Facultad, como también por el de sus propios
acuerdos.
r) Interpretar en los casos dudosos el sentido de los Estatutos y
Reglamentos de la Facultad, sometiendo dicha interpretación al
Gran Canciller cuando se trate de asuntos de mayor importancia,
y sin perjuicio de los dispuesto en el artículo 3º.
s) Establecer las normas y mecanismos para el otorgamiento de
becas destinadas al perfeccionamiento de los docentes de la
Facultad, de acuerdo a las disposiciones generales de la
Universidad al respecto.
Art. 41º : El Consejo puede delegar en el Comité Ejecutivo constituído por el
Decano, el Vicedecano y el Secretario, la facultad de resolver
materias indicadas en el artículo anterior expresamente señaladas
en cada caso, y en forma permanente en las referidas en las letras
n) y ñ) del mismo artículo.
Art. 42º : El Consejo sesiona periódicamente en forma ordinaria.
periodicidad no puede ser menor que de una vez al mes.
Esta
Art. 43º : En forma extraordinaria el Consejo puede ser convocado por
iniciativa del Decano o de un tercio de sus miembros. En estas
sesiones extraordinarias sólo pueden tratarse los asuntos indicados
en la citación.
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Art. 44º : El Consejo requiere para sesionar la presencia de la mayoría
absoluta de sus miembros con derecho a voto.
Art. 45º : Los acuerdos del Consejo se toman por la mayoría absoluta de los
consejeros presentes con derecho a voto.
TITULO III
LOS DOCENTES Y LOS OTROS INTEGRANTES DE LA FACULTAD
Sección A): Los Académicos
Capítulo I : Generalidades
Art. 46º : Son académicos los docentes e investigadores de las diversas
categorías, que tienen nombramiento vigente conforme a los
presentes Estatutos.
Art. 47º : Los académicos asumen la parte principal en la consecución de los
objetivos de la Facultad señalados en el Título I.
Art. 48º : Todos los académicos de cualquier grado deben distinguirse siempre
por su honestidad de vida, su integridad doctrinal y su diligencia en el
cumplimiento de sus deberes, de modo que puedan contribuir
eficazmente a conseguir los fines de la Facultad.
Los que enseñan materias concernientes a la fe y costumbres,
deben ser conscientes de la obligación que tienen que cumplir esta
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misión en plena comunión con el Magisterio de la Iglesia, en primer
lugar con el del Romano Pontífice.
Art. 49º : Quienes enseñan materias acerca de la fe y costumbres, deben
recibir la misión canónica del Gran Canciller o de su delegado,
después de haber emitido la Profesión de Fe, ya que no enseñan
con autoridad propia, sino en virtud de la misión recibida de la
Iglesia. Los demás docentes deben recibir el permiso para enseñar
del Gran Canciller o de su delegado.
En el ejercicio de su docencia los docentes deberán atenerse a los
siguientes principios:
a) La enseñanza de las ciencias de la fe tiene que buscar ante todo
profundizar en la verdad de la Revelación. Sin esquivar los
problemas de mayor importancia, se guardará fidelidad a la
enseñanza cierta de la fe y de la doctrina católica, y se observará
una proporción justa entre los cuestionamientos críticos y la
exposición de las correlativas vías de solución.
b) La comprensión e interpretación de la Revelación no es posible
sin la referencia permanente a la Tradición y al Magisterio, como
lugares de la lectura eclesial de la Palabra de Dios.
c) La docencia de la teología debe basarse en una investigación
teológica atenta a renovarse sin perder contacto con su tiempo,
de tal modo que los alumnos puedan lograr un contacto abierto y
crítico con los demás campos de la reflexión humana.
d) Forma parte esencial del saber teológico el discernir claramente
entre lo cierto y lo opinable y reconocer el valor obligatorio y
fundamental del patrimonio de la fe católica, en conformidad a lo
establecido en el artículo 6.
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Art. 50º : En los cursos básicos, pertenecientes al currículum mínimo
obligatorio del primer ciclo, procurarán los docentes, dentro de la
metodología propia de cada disciplina, enfatizar sobre todo lo
medular de la doctrina católica de la Fe, sin relegarlo a un segundo
plano en beneficio de temas disputados o marginales.
En cambio, en los cursos optativos o en los de nivel avanzado,
podrán abordarse más ampliamente cuestiones monográficas
discutidas o de actualidad, si bien siempre con la preocupación de
evaluar las diferentes opiniones desde el punto de vista de la
conformidad de éstas con la doctrina de la Fe.
Art. 51º : La Facultad puede solicitar el concurso académico de no-católicos
dentro de las normas de la Iglesia acerca de la actividad ecuménica
para la investigación o incluso para la docencia de materias
determinadas que no pertenezcan a cursos doctrinales del ciclo
básico de estudios teológicos.
Para que este concurso pueda solicitarse, es preciso que la persona
de que se trata posea una reconocida calificación científica y un
verdadero espíritu ecuménico, y acepte observar, en su actividad
dentro de la Facultad, una actitud coherente con la índole y
legislación canónica de una Facultad de Teología católica.
Una vez acordada la colaboración, corresponde al Gran Canciller
otorgar el permiso de enseñar.
Art. 52º :
Los académicos de la Facultad gozan de todos los derechos y están
sujetos a todos los deberes que le son propios según las
disposiciones vigentes en la Facultad, a tenor de los artículos 2 y 3.
Estarán libres de actividades incompatibles con las obligaciones
correspondientes a su categoría y dedicación.
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No pueden ocupar simultáneamente una categoría estable en dos
Facultades eclesiásticas.
Art. 53º : Los clérigos o religiosos deben presentar, previamente a su
nombramiento para cualquier categoría académica, una autorización
escrita de su propio Ordinario diocesano o superior religioso
competente, respectivamente. Dicha autorización debe contener
mención explícita del plazo que ella cubre, y de no ser así se
entenderá otorgada por tiempo indefinido.
Art. 54º : De acuerdo con sus antecedentes, los académicos son ubicados en
categorías, a las que corresponden responsabilidades de diferente
índole.
Estas categorías son independientes del régimen de
dedicación a las tareas universitarias.
Art. 55º : En la Facultad hay categorías ordinarias y especiales.
Las
categorías ordinarias constituyen la planta de la Facultad, y sus
miembros pertenecen a la carrera académica y gozan de la plenitud
de los derechos que la Universidad reconoce a sus académicos de
las respectivas categorías. Categorías especiales son las que
acogen a académicos que por una u otra razón no forman parte de la
planta y por lo tanto no pertenecen a la carrera académica.
Art. 56º : Los académicos de cualquier categoría de la Facultad, son
instituídos en su respectiva categoría en virtud de un decreto de
nombramiento expedito por el Gran Canciller, de acuerdo con estos
Estatutos y los Reglamentos pertinentes.
Capítulo II : Las Categorías Ordinarias
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Art. 57º : Las categorías ordinarias en la Facultad son las siguientes en orden
jerárquico:
a)
b)
c)
d)
Profesor Titular u Ordinario.
Profesor Adjunto o Extraordinario.
Profesor Auxiliar.
Instructor.
Art. 58º : La planta de la Facultad, constará de cátedras para no menos de
doce académicos de las dos más altas categorías, de los cuales por
lo menos cinco deben ser profesores Titulares.
Art. 59º : En virtud de su nombramiento, el Profesor Titular queda incorporado
en forma definitiva y estable a la planta de la Facultad, sin perjuicio
de lo establecido en el artículo 93, y le corresponde prestar sus
servicios allí donde se requieren los más altos niveles universitarios.
En especial le corresponde, dentro de la programación general de la
Facultad, dirigir y ejercer las actividades académicas de mayor
responsabilidad, inspirar y guiar trabajos de investigación y
actividades de post-grado, asumir la docencia en cursos
caracterizados por su importancia para la visión teológica de
conjunto, e integrar las comisiones evaluadoras de los candidatos al
Doctorado.
Art. 60º : Para ser designado Profesor Titular se requiere:
a) Haber desempañado el cargo de profesor adjunto o su
equivalente en una Facultad de estudios eclesiásticos
canónicamente erigida, durante diez semestres, de los cuales al
menos dos hayan transcurrido en esta Facultad.
Secretaría General
- 24 -
b) Estar en posesión del doctorado canónico congruente, o de un
título equivalente.
c) Haberse distinguido en la docencia y en la investigación.
d) Haber hecho publicaciones de verdadera calidad científica
después de su promoción a la categoría de Adjunto.
Art. 61º : En virtud de su nombramiento, el Profesor Adjunto, sin perjuicio de lo
establecido en el Art. 93, queda incorporado en forma definitiva a la
planta de la Facultad aunque sin adquirir un derecho tan pleno como
el del Profesor Titular, y le corresponde también asumir en forma
independiente, dentro de la programación general de la Facultad,
amplias responsabilidades en la docencia o la investigación, sin
excluir, cuando sea necesario, las que de suyo competen al Profesor
Titular.
En especial le corresponde asegurar la docencia en los cursos
básicos dirigir seminarios avanzados, orientar las Memorias de
Licencia e integrar las comisiones para los exámenes de este mismo
grado.
Art. 62º : Para ser designado Profesor Adjunto se requiere:
a) Haber desempeñado el cargo de Profesor Auxiliar o su
equivalente en una Facultad de estudios eclesiásticos
canónicamente erigida, durante seis semestres académicos, de
los cuales al menos dos hayan transcurrido en esta Facultad.
b) Estar en posesión de un doctorado canónico congruente, o su
equivalente.
Secretaría General
- 25 -
c) Haber publicado durante el período de Profesor Auxiliar
investigaciones, o haber realizado trabajos de real valor.
Art. 63º : Por razón de la estabilidad que suponen, la promoción a las
categorías de Titular o Adjunto requiere previamente el “Nihil obstat”
de la Santa Sede.
Art. 64º : Sin perjuicio de lo establecido en el artículo 54, es propio de los
académicos Titulares y Adjuntos asumir una dedicación mayor en las
labores peculiares de la Facultad.
Art. 65º : En virtud de su nombramiento, el Profesor Auxiliar queda
incorporado por tres años a la planta de la Facultad, sin perjuicio de
lo establecido en el artículo 93, y le corresponde colaborar con
Profesores Titulares o Adjuntos en funciones de docencia e
investigación, asumir bajo su propia responsabilidad la docencia de
materias determinadas y circunscritas y hacerse cargo de cursos de
extensión. A falta de suficientes Profesores Titulares y Adjuntos,
determinados Profesores Auxiliares podrán recibir del Consejo
autorización para hacerse cargo de la docencia en cursos que de
suyo les corresponderían a Profesores Adjuntos.
Art. 66º : Para ser designado Profesor Auxiliar, se requiere:
a) Estar en posesión de un doctorado canónico o de su equivalente.
b) Haber servido al menos durante cuatro semestres el cargo de
Instructor, o haber publicado trabajos que permitan aquilatar su
calidad.
Secretaría General
- 26 -
Art. 67º : En virtud de su nombramiento, el Instructor queda incorporado por
un año a la planta de la Facultad, sin perjuicio de lo establecido en el
artículo 93, y le corresponde, bajo la responsabilidad y supervisión
de un Profesor Adjunto o Titular, exponer determinados temas o
partes de un curso, o incluso desarrollar íntegramente un curso cuyo
programa detallado haya sido establecido o aprobado por un
Profesor de las categorías mencionadas, el cual, además, controlará
asiduamente los contenidos y la metodología de su enseñanza. En
el campo de la investigación pueden asignársele tareas de
cooperación en proyectos dirigidos por algún profesor.
Art. 68º : Para ser designado Instructor se requiere estar en posesión de la
Licenciatura canónica que corresponda (y especializada, si se trata
de disciplinas teológicas o filosóficas).
Art. 69º : Quien haya desempeñado el cargo de profesor en categorías
ordinarias en otra Facultad canónicamente erigida, deberá servir
durante dos semestres como profesor visitante antes de poder ser
agregado a la planta de la Facultad en la categoría que tenía en el
lugar de origen.
Art. 70º : El número máximo de profesores laicos de planta no podrá exceder
del 25%, del total de los profesores de ella, porcentaje que no podrá
ser superado sin autorización del Gran Canciller.
Capítulo III : Las Categorías Especiales
Art. 71º : Las categorías especiales en la Facultad son las siguientes:
a) Docente a contrata.
Secretaría General
- 27 -
b) Profesor Visitante.
Art. 72º : En virtud de su nombramiento, el Docente a contrata recibe por el
plazo de un semestre, renovable, un número ilimitado de veces, el
encargo de ejercer funciones específicas, sea de carácter temporal,
sea de carácter permanente, pero ocasionalmente imposibles de
cubrir por académicos de planta. En especial, cabe recurrir a sus
servicios cuando se trata de alguna asignatura no perteneciente al
currículo mínimo obligatorio de los Programas internos de la
Facultad, o de algún curso de extensión teológica para alumnos de
otras Unidades Académicas.
Art. 73º : Para ser designado Docente a contrata es suficiente que, a juicio de
la Comisión de Calificación Académica, el candidato posea la
competencia requerida para las funciones que habrán de serle
encomendadas.
Art. 74º : En virtud de su nombramiento, el Profesor Visitante adquiere por un
período determinado, no superior a los tres semestres, el derecho de
realizar, invitado por la Universidad, tareas de docencia o
investigación en la Facultad en su calidad de miembro de otro Centro
de Estudios Superiores chileno o extranjero.
Mientras se
desempeña como tal, se le reconoce al Profesor Visitante la
categoría que tiene en su institución de origen.
Art. 75º : Sin perjuicio de lo establecido en el artículo 69, para ser nombrado
Profesor Visitante, se requiere:
a) Tener nombramiento vigente en otro Centro de Estudios
Superiores.
Secretaría General
- 28 -
b) Poseer méritos académicos relevantes.
c) Haberse propuesto la invitación por acuerdo fundado del Consejo
de la Facultad y de la Comisión de Calificación Docente.
d) Haberse cursado la invitación definitiva por las autoridades
correspondientes de la Universidad.
e) Haber sido aceptado por el interesado la invitación y los términos
en que ella h asido cursada.
Art. 76º : Los académicos incorporados a las categorías especiales pueden
ser admitidos con derecho a voz en las reuniones plenarias o
parciales del cuerpo de académicos, pero carecen del derecho a
sufragio y no pueden ser elegidos ni designados para ningún cargo
en la Facultad.
Art. 77º : El tiempo servido en categorías especiales puede computarse para
los efectos de los requisitos establecidos en los artículos 60, letra a);
62, letra a) y 66, letra a).
Capítulo IV: Disposiciones Comunes a las Diversas Categorías
Art. 78º : Para ingresar como docente de la Facultad en cualquiera de sus
categorías, se requiere haber sido propuesto al Consejo por el
Decano, previo el visto bueno del Gran Canciller.
Efectuada la proposición a que se refiere el inciso precedente, y
luego del acuerdo del Consejo, los antecedentes del candidato
deberán ser sometidos a la Comisión de Calificación Académica y, si
el parecer de ésta es favorable, serán presentados al Gran Canciller.
Secretaría General
- 29 -
Art. 79º : La renovación por el Gran Canciller del nombramiento temporal de
un docente de la planta, requiere previamente el acuerdo del
Consejo y el informe positivo de la Comisión de Calificación
Académica.
Art. 80º : La promoción de una a otra categoría ordinaria puede hacerse a
petición del interesado o por iniciativa de la Comisión de Calificación
Académica, pero requiere siempre, antes del nombramiento por el
Gran Canciller, el parecer favorable de dicha Comisión.
Art. 81º : Excepcionalmente, y por fundadas razones académicas el Consejo
de la Facultad, previo acuerdo de la Comisión de Calificación
Docente, podrá solicitar a la Santa Sede, por medio del Gran
Canciller, la dispensa necesaria para abreviar en favor de un
determinado académico los plazos de docencia ejercida en una
categoría inferior, establecidos como requisitos para la promoción a
una categoría superior.
Art. 82º : Los académicos que han recibido un nombramiento temporal no
adquieren un derecho a permanecer en cargo más allá del término
del período señalado en el decreto de nombramiento, sin perjuicio de
tomarse en cuenta tal desempeño como un antecedente en caso de
continuar la carrera académica.
Art. 83º : Sólo tienen derecho a voto, en las elecciones que se celebren en la
Facultad, los académicos que pertenecen a las categorías
académicas ordinarias y tengan en ellas una antigüedad no inferior a
tres meses. En las elecciones internas de la Facultad tendrán igual
ponderación todos los votos de los académicos ya mencionados, sin
diferencias originadas en sus categorías.
Secretaría General
- 30 -
Art. 84º : Entre los docentes de la Facultad el Título de “Profesor” sólo
compete a los académicos que se encuentran en las categorías
mencionadas en los artículos 57, letras a), b) y c), y 71 letra b).
Art. 85º : Otras normas referentes a los académicos, no contempladas en los
presentes Estatutos, serán objeto de un Reglamento interno especial
del académico de la Facultad.
Capítulo V : Las Sanciones
Art. 86º : Nadie puede ser sancionado sino por causales expresamente
establecidas en las normas vigentes en la Facultad, a tenor de los
artículos 2 y 3.
Art. 87º : Las sanciones académicas son originadas por alguna de las
siguientes causales:
a) Defección de la fe católica o enseñanza opuesta al Magisterio de
la Iglesia.
b) Falta grave contra la moral.
c) Desobediencia grave a la disciplina eclesiástica.
d) Notable deficiencia o abandono de las funciones académicas
para las que ha recibido nombramiento.
Dichas causales han de ser legítimamente probadas.
Art. 88º : La competencia de la Comisión de Calificación Académica en
materia de aplicación de sanciones alcanza a todas y cada una de
Secretaría General
- 31 -
las causales enumeradas en el artículo anterior, y sin perjuicio de las
atribuciones subsidiarias de otras autoridades académicas de la
Universidad en cuanto a la causal establecida en letra d) del mismo
artículo.
Las eventuales decisiones tomadas por las autoridades académicas
de la Universidad con respecto a materias referentes al artículo 87,
letra d), requieren de la previa aprobación del Gran Canciller, al cual
dichas autoridades tienen siempre libre acceso para hacer notar
cualquiera deficiencia por parte del personal académico de la
Facultad.
Art. 89º : El acuerdo de adoptar sanciones que afecten a algún académico de
la Facultad por parte de la Comisión de Calificación Académica,
debe ser precedido por un proceso cuya índole y desarrollo se
determinará en un Reglamento especial aprobado en conformidad a
lo establecido en el artículo 141.
Si hubiere lugar al ejercicio de atribuciones subsidiarias de otras
autoridades universitarias, a tenor de lo establecido en el artículo
anterior, ellas se ejercitarán conforme a los procedimientos jurídicos
comunes vigentes en la Universidad, pero en los casos de petición
de renuncia o destitución se observará lo dispuesto en el inciso
primero del artículo 92.
Art. 90º : Los procesos y procedimientos mencionados en el artículo
precedente han de proveer a la adecuada tutela de los derechos
tanto del académico respectivo como de la Facultad, en primer lugar
de sus alumnos, como también de la misma comunidad eclesial.
En el desarrollo del proceso o procedimiento respectivo han de
respetarse plenamente los derechos del acusado a conocer
Secretaría General
- 32 -
previamente los cargos en su contra y a defenderse, así como a
ejercitar los recursos ante las instancias correspondientes a las
diversas fases de dicho proceso o procedimiento.
Art. 91º : Las sanciones han de ser adecuadas a la gravedad de la causa y al
daño que ella ocasiones, especialmente a la comunidad académica.
Ellas son, por orden de menor a mayor gravedad: amonestación
verbal, amonestación por escrito, solicitud de la debida retractación,
suspensión temporal, petición de la renuncia y destitución.
Art. 92º :
Las sanciones acordadas por la Comisión de Calificación
Académica deben ser aplicadas por el Decano, excepto la de
petición de renuncia y destitución. La aplicación de estas dos
últimas corresponde al Gran Canciller, si éste está de acuerdo con
ellas.
En los casos más graves o urgentes, con el fin de proveer al bien de
los alumnos y de los fieles, el Gran Canciller suspenderá “ad tempus”
al Profesor, hasta que se concluya el procedimiento ordinario.
Capítulo VI : Término de la calidad de Académico
Art. 93º : Los académicos cesan en sus funciones por alguna de las siguientes
causales:
a) Por expiración del período de su nombramiento.
b) Por renuncia aceptada por el Gran Canciller. Se equipara a ella
la revocación, concordada con el Gran Canciller, del permiso del
respectivo superior eclesiástico, a tenor del artículo 53.
Secretaría General
- 33 -
c) Por impedimento físico o mental que lo incapacite para
desempeñar sus funciones, declarado tal por acuerdo del
Consejo de la Facultad, previo informe competente y ratificado
por el Gran Canciller.
d) Por alejamiento efectivo por un período mayor al admitido por el
Reglamento del Académico de la Facultad.
e) Por cumplir 65 años de edad, salvo que la Comisión de
Calificación Académica estime que se pueden prorrogar sus
funciones por un plazo que no puede ser superior a 5 años. Esta
causal ejerce su eficacia al expirar el semestre durante el cual el
académico cumplió esa edad.
f) Por destitución decretada por el Gran Canciller, según los
dispuesto en los artículos 89 y 92. Contra ella sólo se da recurso
a la Santa Sede en efecto devolutivo.
g) Por disponerlo así el Gran Canciller a proposición del Consejo de
la Facultad en virtud de restricciones económicas acordadas por
la Universidad y las consiguientes medidas dispuestas por el
Rector para resolverlas.
Capítulo VII : La Comisión de Calificación Académica
Art. 94º : La Comisión de Calificación Académica está constituída por:
a) El decano, o en su defecto el Vice-Decano.
b) Dos profesores Titulares y un profesor Adjunto, elegidos, para un
período de tres años, por todos los académicos de la planta.
Art. 95º : Corresponde a la Comisión de Calificación Académica:
Secretaría General
- 34 -
a) Evaluar periódicamente la labor realizada por cada uno de los
académicos, de acuerdo a los nombramientos respectivos.
b) Reunir y estudiar los antecedentes requeridos de los candidatos
a cualquiera de las categorías académicas, tanto ordinarias como
especiales y elevar la presentación con el respectivo informe, de
acuerdo a los artículos 78, 79 y 80.
c) Instruir el proceso a que se refiere el artículo 89.
d) Acordar la adopción de medidas disciplinarias con respecto al
personal académico de la Facultad, conforme a los artículos 86 y
91.
Art. 96º : Los procedimientos y demás normas para el funcionamiento de esta
Comisión estarán determinados en el Reglamento del Académico de
la Facultad.
Art. 97º : De cualquier resolución desfavorable acordada por la Comisión que
afecte a un académico se podrá apelar ante el estamento académico
del Consejo, excluídos de dicha instancia de apelación los miembros
que integraron la Comisión, con excepción del Decano. En esta
situación el Consejo se integrará con consejeros suplentes que son
aquellos que obtuvieron las preferencias siguientes a los Consejeros
titulares elegidos en conformidad al artículo 39, letra b) de los
Estatutos de la Facultad. Este recurso tiene efecto suspensivo.
Art. 98º : El estamento académico del Consejo cuando actúa como instancia
de apelación puede allegar nuevos antecedentes y debe oír al
afectado antes de emitir su fallo.
Secretaría General
- 35 -
Sección B) : Los Alumnos
Art. 99º : El ingreso a la Facultad en calidad de alumno propio de ella se rige
ante todo por las normas generales de admisión vigentes en la
Universidad. Pero el Consejo de la Facultad puede establecer
además condiciones especiales para admisión y permanencia de los
alumnos propios de la Facultad, sin perjuicio de cumplirse con los
requisitos generales y procurarse la coordinación con los organismos
universitarios competentes. Puede, además, permitir la asistencia a
sus cursos de personas que no sean alumnos de la Universidad
Católica, cuando así lo aconsejen razones de orden eclesial y
siempre que su admisión no signifique un perjuicio para los alumnos.
Las normas referentes a estas materias, para su validez deberán ser
aprobadas por el Gran Canciller.
Art. 100º Los Alumnos se rigen por las normas del “Reglamento del Alumno”
vigente en la Universidad, y asumen un compromiso de lealtad,
colaboración y seriedad en el cumplimiento de sus deberes
específicos, y de observar una conducta compatible con el carácter
de una Facultad eclesiástica.
El incumplimiento grave por parte del alumno de esta última
obligación podrá ser causa de medidas que vayan hasta la
expulsión, según la gravedad de la falta. La resolución que
establece esta sanción será tomada por el Consejo de la Facultad y
se podrá apelar de ella en el plazo de cinco días a contar de su
notificación al afectado, con efecto suspensivo, ante el Gran
Canciller.
Art. 101º Los alumnos de la Facultad tienen como organismo representativo
propio al Comité Ejecutivo del Centro de Alumnos de Teología, el
cual se rige por sus propios Reglamentos, aprobados conforme a las
normas vigentes para las organizaciones estudiantiles de la
Secretaría General
- 36 -
Universidad, y tiene participación en el quehacer de la Facultad con
arreglo a las normas en vigor, contenidas especialmente en estos
Estatutos.
Art. 102º Sin perjuicio de la disposición anterior, cada alumno es libre para
dirigirse a las autoridades de la Facultad, reclamar sus derecho ante
ellas y hacer presente lo que estime conducente a su buena marcha.
Sección C) : El Personal Administrativo y Auxiliar
Art. 103º El personal administrativo y auxiliar colabora en las actividades de
los organismos de la Facultad, tales como Secretaría, Biblioteca y
otros.
Art. 104º Este personal se rige por las disposiciones generales pertinentes que
tengan vigencia en la Universidad. Sin embargo, la Dirección de la
Facultad podrá establecer requisitos especiales para el desempeño
de ciertas funciones particularmente delicadas.
TITULO IV
ORGANIZACIÓN DE LA DOCENCIA
Capítulo I : Normas Generales
Art. 105º A la Facultad le compete, en general, la responsabilidad de impartir
la docencia de las asignaturas teológicas, tanto en la misma
Facultad, como en el resto de la Universidad, y de organizar los
Programas adecuados a los diversos que con su docencia busca
alcanzar.
Secretaría General
- 37 -
No obstante lo anterior, el Gran Canciller podrá establecer las
excepciones que considere necesarias con respecto a las
actividades de docencia teológica que tengan lugar fuera de la
Facultad de Teología.
Art. 106º La responsabilidad inmediata del funcionamiento de cada uno de los
Programas de formación teológica que existan en la Facultad
corresponderá a sendos Directores de Docencia, designados por el
Decano con acuerdo del Consejo y aprobados por el Gran Canciller.
Art. 107º En la Facultad se aplican las mismas normas vigentes en la
Universidad sobre sistema de admisión, curricular y de créditos,
consultorías académicas, actividades universitarias y control y
promoción académicos, sin perjuicio de los establecido en el artículo
99 y quedando siempre a salvo al respecto las exigencias propias de
la legislación académica de la Iglesia, según lo establecido en el
artículo 2.
Art. 108º En cada uno de los Programas se empleará la metodología
adecuada a sus respectivos objetivos, procurando siempre, dentro
de la fidelidad a la Revelación interpretada por el Magisterio y de la
justa libertad reconocida a los docentes, que con la debida prudencia
se satisfaga tanto a las exigencias del rigor científico como a las
necesidades pastorales del pueblo de Dios.
Art. 109º La convalidación de estudios realizados en otras Universidades se
hará de acuerdo con las normas vigentes en la Universidad, y la de
estudios realizados en centros no universitarios (v.gr., seminarios
diocesanos o religiosos), de acuerdo a pautas dadas por el Consejo.
Secretaría General
- 38 -
Art.110º
La Facultad puede otorgar certificados que acrediten conocimientos
adquiridos o labores académicas realizadas bajo su directa
dependencia.
Capítulo II : El Programa de Sagrada Teología
Art. 111º La máxima preocupación académica de la Facultad recae sobre el
Programa ordenado a la obtención de los grados canónicos en
Sagrada Teología que comprende tres ciclos de acuerdo con las
normas eclesiásticas vigentes.
Art. 112º En este Programa se consideran como materias teológicas
principales: Sagrada Escritura, Teología Fundamental y Dogmática,
Teología Moral, Liturgia y Pastoral, Historia de la Iglesia, Patrología y
Derecho canónico. Habrá también disciplinas auxiliares, y tanto en
éstas como en las principales cabe distinguir cursos mínimos
obligatorios y cursos o seminarios optativos.
Las disciplinas
filosóficas principales de este Programa son: Lógica y Teoría del
conocimiento, Antropología filosófica, Metafísica, Etica, Ciencias de
la Religión e Historia de la Filosofía.
Además, los alumnos deberán obtener cierto número de créditos
facultativos en disciplinas ajenas a su Programa, de acuerdo con la
proporción que establezca el Reglamento de Currículos y Grados de
la Facultad.
Art. 113º En todos los cursos o seminarios del Programa debe el Profesor
realizar una evaluación que incluya, dentro de una ponderación
proporcionada a su respectiva importancia, los resultados de todos
los controles, trabajos o pruebas realizados durante el período
académico.
Secretaría General
- 39 -
Al comienzo de cada período académico la Dirección de la Facultad
señalará al menos uno de los cursos mínimos obligatorios de entre
los que se ofrecen en las disciplinas principales, para que sea
evaluado mediante un examen oral rendido ante una comisión
designada por el Decano.
Art. 114º El primer ciclo, que es de carácter general y básico, se completa con
la obtención de 450 créditos, equivalentes a cinco años de estudio.
Art. 115º Los estudios de primer ciclo, deben asegurar el dominio de los
elementos fundamentales de las siguientes asignaturas:
Sagrada Escritura, teología Fundamental y Dogmática, teología
Moral, Historia de la Iglesia y patrología, Derecho Canónico, Liturgia
y Pastoral, Filosofía y Lenguas Clásicas.
El número de créditos de cada disciplina y el ordenamiento curricular
serán determinados por el Reglamento de Currículos y Grados de la
Facultad.
Art. 116º El segundo ciclo, destinado a introducir al alumno en alguna línea de
especialización, se completa con la obtención de 135 créditos y la
aprobación de una Memoria equivalente a otros 45 créditos.
Art. 117º De los 135 créditos del segundo ciclo, un tercio aproximadamente
debe obtenerse necesariamente en cursos o seminarios
especialmente señalados por la Dirección de la Facultad y que
abarquen los siguientes ámbitos:
Teología Fundamental o Filosófica, Teología Dogmática, Teología
Práctica (Moral, Pastoral. Etc.), Sagrada Escritura, e Historia
Eclesiástica (incluyendo Patrología).
Secretaría General
- 40 -
Art. 118º El tercer ciclo, destinado a la obtención del pleno dominio del método
científico por el estudio profundizado y original de algún tema, se
completa con la participación, durante dos semestres por lo menos,
en seminarios o coloquios especialmente programados por la
Dirección de la Facultad, y con la aprobación de una Tesis que
signifique un verdadero avance en la ciencia teológica.
Art. 119º Tanto el ordenamiento curricular de las diversas asignaturas de los
dos primeros ciclos como el programa de cada uno de los cursos
mínimos obligatorios deben ser objeto de una constante
preocupación por parte de la Dirección de la Facultad, y las
reglamentaciones pertinentes deben ser aprobadas por el Consejo y
por el Gran Canciller.
Capítulo III: Los otros Programas de la Facultad
Art. 120º El Programa de Ciencias Religiosas se ordena, como el de Sagrada
Teología, a proporcionar una comprensión complexita y unitaria de la
Fe Católica, pero está destinado directamente a la capacitación
teológica del personal consagrado a la misión pastoral de la Iglesia, y
así difiere de aquél por sus objetivos, exigencias, métodos y
currículo.
Art. 121º El número total de créditos requeridos para la aprobación de este
Programa, como también el elenco de sus asignaturas con sus
contenidos, ordenamiento curricular y metodología, y los requisitos
de aprobación, egreso y graduación, deben ser objeto de un
Reglamento especial, aprobado por el Consejo y por el Gran
Canciller.
Secretaría General
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Art. 122º El Programa de estudios Teológicos que han de aprobar los alumnos
de la Escuela de Educación que aspiran al título de Profesor de
religión, y en el que deben establecerse el número total de créditos,
las asignaturas requeridas y los contenidos de éstas, es fijado por el
Consejo de la Facultad con acuerdo de las autoridades pertinentes
de dicha Escuela y requiere la aprobación del Gran Canciller.
Art. 123º Para satisfacer las necesidades o deseos de los alumnos de las
demás Unidades Académicas de la Universidad que requieran
obtener créditos en Teología con carácter de mínimos obligatorios
para su propia carrera o que quieran obtenerlos con carácter de
optativos o facultativos, la Facultad programará para cada período
académico los cursos que sean necesarios o convenientes,
procurando ofrecer siempre un abanico suficientemente amplio de
temas que haga posible, para quienes tengan interés en ello, lograr a
la larga una formación teológica relativamente completa y sólida.
Art. 124º La Facultad puede, además, organizar Programas de estudios
teológicos destinados, sea a la formación permanente del personal
consagrado, sea a la formación teológica de profesionales o
estudiantes de otras Universidades.
En cada caso la Facultad determina la duración, asignaturas,
contenidos, métodos y sistemas de evaluación de estos Programas.
TITULO V
LOS GRADOS ACADEMICOS
Capítulo I : Los Grados en Sagrada Teología
Secretaría General
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Art. 125º Los grados canónicos de Bachillerato, Licencia y Doctorado en
Sagrada Teología, que siempre se confieren en nombre del Sumo
Pontífice, sólo pueden recibirlos quienes hayan aprobado,
respectivamente, los tres ciclos del Programa descrito en los
artículos 111 y 118.
Art. 126º La Facultad no puede conferir ningún grado académico a quien no
haya completado al menos dos semestres matriculado en ella como
alumno propio y regular.
Art. 127º Antes del otorgamiento del grado de Bachiller en Sagrada Teología,
el candidato que ya hubiere obtenido todos los créditos del Programa
rendirá un exámen oral complexito que versará sobre un temario que
incluya lo más medular de los cursos mínimos obligatorios de
Teología Fundamental y Dogmática.
El contenido de este temario, las modalidades del exámen mismo y
la ponderación de su nota serán determinados por el Reglamento de
Currículos y Grados, el cual debe ser aprobado por el Gran Canciller.
Art. 128º Antes del otorgamiento del grado de Licenciado especializado en
Sagrada Teología, el candidato que ya hubiere obtenido los créditos
del segundo ciclo y la aprobación de su Memoria, rendirá un exámen
oral que versará sobre temas relacionados con la línea de
especialización que hubiere elegido y por consiguiente con la
Memoria. Las líneas de especialización que puedan tomarse, los
temarios correspondientes y la ponderación de la nota serán
determinadas por el Reglamento.
Secretaría General
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Art. 129º Sólo podrá aspirar al grado de Doctor quien ya hubiere obtenido la
Licencia especializada en Sagrada Teología.
Antes del otorgamiento del grado de Doctor, el candidato que ya
hubiere cumplido las exigencias del tercer ciclo, deberá exponer y
defender públicamente su tesis y editarla, bajo la responsabilidad de
la Facultad, al menos en sus partes más importantes. Los requisitos
para la elaboración y calificación, y las modalidades para su
exposición y defensa, y la ponderación de las diferentes
calificaciones, serán, determinadas por el Reglamento.
Art. 130º En razón de peculiares méritos científicos o culturales adquiridos en
la promoción de las ciencias eclesiásticas, puede conferirse el grado
de Doctor “honoris causa” en Teología, con el consentimiento del
Gran Canciller, luego que éste hubiere obtenido el “Nihil obstat” de
la Santa Sede y oído el parecer de los Consejos de la Facultad y de
la Universidad.
Capítulo II : Los Grados en Ciencias Religiosas
Art. 131º La Facultad confiere los grados académicos de Bachiller y
Licenciado en, Ciencias Religiosas, a sus alumnos que hubieren
aprobado el Programa de Ciencias Religiosas. La obtención de
estos grados se rige por el Reglamento de Currículos y Grados.
TITULO VI
BIBLIOTECA
Secretaría General
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Art. 132º La Facultad tendrá una Biblioteca propia, la que será dirigida por un
perito en la materia, quién pata todos los efectos, es considerado
como perteneciente al estamento académico de la Facultad.
Art. 133º El Director de la Biblioteca es nombrado por el decano, previa
consulta al Consejo, por un período de dos años, renovable cuantas
veces parezca oportuno.
Art. 134º
El Director será asesorado por un Consejo integrado por
académicos que representen las diversas áreas de actividad de la
Facultad.
Art. 135º Un Reglamento especial de la Facultad determinará en forma
precisa las atribuciones y responsabilidades del Director de la
Biblioteca y del personal que trabaja bajo su dirección, en orden a la
conversación, mejoramiento y uso de la Biblioteca de la Facultad.
TITULO VII
ASPECTOS ECONOMICOS
Art. 136º La Universidad retribuirá con una remuneración justa el trabajo de
autoridades, profesores y administrativos de la Facultad de acuerdo
a las normas y criterios que se apliquen al resto de las Unidades
Académicas de la Universidad.
Art. 137º Se arbitrarán los medios para establecer ayudas económicas de
modo que el pago de las matrículas ni impida el acceso a los grados
Secretaría General
- 45 -
académicos de aquellos alumnos seminaristas o religiosos, que por
las cualidades intelectuales de que están dotados, dan esperanzas
de ser muy útiles a la Iglesia en el futuro.
TITULO VIII
RELACIONES CON OTRAS FACULTADES E INSTITUTOS
Art. 138º La Facultad procurará fomentar la colaboración, además de con las
Facultades de la Pontificia Universidad Católica de Chile, con las
demás Facultades e Institutos teológicos especialmente los de Chile
y América Latina, para el desarrollo de las Ciencias teológicas y un
mejor servicio a la Iglesia.
Art. 139º Respecto a las condiciones y modos de afiliación, agregación e
incorporación de otros institutos a la Facultad, ésta se atendrá a las
normas para la Congregación para la Educación Católica.
TITULO IX
REFORMA DE ESTATUTOS Y APROBACION DE REGLAMENTOS
Art. 140º La iniciativa para reformar los presentes Estatutos corresponde,
dentro de la Universidad, al Gran Canciller, a la Asamblea, al
Consejo y al Decano.
La proposición de reforma será en primer lugar sometida al acuerdo
de la Asamblea, a tenor del artículo 35, letra b). El texto aprobado
por ésta debe ser sometido enseguida al Consejo Superior.
Secretaría General
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Si el Consejo Superior introdujere modificaciones en el texto
aprobado por la Asamblea, el Rector presentará al Gran Canciller el
texto aprobado por el Consejo Superior, pero pondrá esas
modificaciones en conocimiento de la Facultad, la cual podrá
presentar al Gran Canciller sus observaciones fundadas. En todo
caso, es el Gran Canciller quien dará su forma definitiva a la
proposición que ha de someterse a la Santa Sede.
De la decisión del Gran Canciller cabe recurso a la Santa Sede por
parte de las instancias afectadas.
Art. 141º La aprobación y reforma de los diversos Reglamentos de la Facultad
será sometida a la Asamblea a tenor del artículo 35, letra b) y
entrarán en vigencia después de su aprobación por el Gran
Canciller. Sin embargo, la aprobación y reforma de los Reglamentos
referentes a la organización de la docencia y a los grados
académicos sólo depende de la aprobación del Consejo y de su
aprobación por el Gran Canciller a tenor del artículo 40, letra g).
DISPOSICION FINAL
Con la aprobación de estos Estatutos por la Santa Sede , quedan
totalmente derogados los anteriores estatutos de la Facultad de
teología, salvo el artículo 9 de los Estatutos de 1938, el cual
continuará vigente mientras no se establezca una nueva legislación
canónica al respecto.
Artículo transitorio
Secretaría General
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Mientras se dicta el Reglamento del Académico de la Facultad
Teología, el proceso a que se refiere el artículo 89 se regirá por las
normas provisionales que dicte para el efecto el Gran Canciller.
INTRODUCCION
La Facultad de Teología, inaugurada el 1º de Abril de 1935, fue
erigida canónicamente como tal por la Santa Sede el 16 de Julio de
1939. Desde sus comienzos ha formado parte integrante de la
Pontificia Universidad Católica de Chile.
El 21 de Septiembre de 1060, la Sagrada Congregación de
Seminarios y Universidades aprobó la creación del Instituto Superior
de Teología para Religiosas anexo a la Facultad. Este Instituto
concedía el Bachillerato en Ciencias Religiosas y habilitada para
Secretaría General
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obtener el Título de Profesor de religión, reconocido por el Estado,
en convenio con la Facultad de Filosofía y Ciencias de la Educación.
Desde Mayo de 1961 a Septiembre de 1972, atendiendo una
solicitud del CELAM, la Facultad patrocinó al Instituto CatequísticoLatinoamericano en calidad de Instituto anexo.
En el año 1968, la Facultad se insertó en la nueva estructura
administrativa de la Universidad y ese mismo año, atendiendo al
espíritu del Concilio y a las necesidades pastorales, absorbió las
tareas del Instituto Superior de Teología para religiosas, abrió
matrícula de sus cursos a los estudiantes laicos y creó nuevos
Programas: el de Licencia en Ciencias Religiosas en reemplazo del
curso seminarístico que daba la formación teológica a los futuros
sacerdotes sin otorgar grado académico alguno, y el Programa
teológico para optar al Título de Profesor de Religión de la
Educación Media. El curso doctoral que otorgaba los Grados de
Bachiller, Licenciado y Doctor en Sagrada Teología se mantuvo con
las modificaciones impuestas por la renovación teológica.
Las actividades de extensión se iniciaron desde la inauguración de la
Facultad. En 1940 comenzaron a publicarse los “Anales” para dar a
conocer los trabajos de investigación y en 1960 apareció la Revista
“Teología y Vida” para contribuir a la búsqueda de una respuesta a
los problemas que plantea el vivir la fe en el mundo. Además, la
Facultad ha ofrecido en forma permanente cursos vespertinos de
Teología para los laicos. Estos cursos, desde 1965 hasta el
presente, pretenden dar una visión global y sistemática de la
Teología, en un ciclo de seis semestres. Los cursos de teología para
alumnos regulares de la Universidad fueron atendidos por
Departamentos independientes de la Facultad hasta 1974. Desde
entonces han pasado a ser de responsabilidad de ella, en la sede de
Santiago, sin perjuicio de las atribuciones y responsabilidades del
Gran Canciller.