40 Días de Oración sobre Nuestra Ciudad

Eduardo Torres -­‐ The Church at Brook Hills -­‐ Congregación Hispana Series: “40 Días de Oración Sobre Nuestra Ciudad” -­‐ Septiembre 20, 2015 40 Días de Oración sobre Nuestra Ciudad
Mi Devoción con un Padre Especial
Mateo 6:9-10
Hoy estamos de nuevo reunidos para continuar en este período de los 40 Días de
Oración Sobre Nuestra Ciudad, Birmingham. Es evidente que debe producir un efecto
en nuestra visión y por ende incluiremos a lo largo de estas semanas la oración por
Alabama, Estados Unidos, América Latina, Asía y África, y ¿por que no Europa? Se le
llama a ese continente Post-evangélico; “El continente donde nació la reforma, se aleja
cada vez más de Dios.”
- Pero hoy quiero compartir con ustedes querida Iglesia, el
tema de la “adoración en la oración” y he titulado este mensaje “Mi devoción por un
Padre especial”. Lo he centrado en dos versículo de Mateo 6, el 9 y el 10, donde Jesús
nos enseña que tal devoción está directamente vinculada a la adoración. ---- El primer
elemento de la oración debería ser la adoración o alabanza. Los Salmos, son muestras
de oraciones piadosas que se inclinan fuertemente en el lado de la adoración.
La adoración es la expresión más alta de nuestro amor a Dios, es vivir para agradar
a Dios Es una adoración centrada en Dios que honra a Aquel que en su gracia y
misericordia nos redime. Adoración es el primer privilegio y responsabilidad del pueblo
de Dios. Es la reunión de la comunidad del pacto delante de Dios en proclamación y
celebración de lo que es El, lo que ha hecho y lo que promete hacer, por lo tanto la
adoración conlleva una actitud del que adora…
La adoración como expresión también se demuestra con acciones que van
orientadas a Él únicamente. Por medio de palabras, manifestaciones físicas,
emociones, cantos o alabanzas. Expresiones que en ese momento las hacemos y son
la demostración de lo que estoy sintiendo, indiferentemente que las exteriorice, y otros
me vean.
La adoración un acto de conducta y de disciplina, es confiar en Dios, es creerle a
Dios; es expresarle mi amor, y eso solo se lo puedo demostrar no amando al mundo.
Las cosas que son del mundo no proviene de Dios, los deseos de la carne, los deseos
de los ojos, la vanagloria de la vida, son cosas del mundo; si yo amo al mundo, no amo
a Dios, si yo aborrezco a mi hermano, no amo a Dios, si yo aborrezco a mi prójimo, no
amo a Dios. “…Si alguno ama al mundo, el amor del padre no está en él” (1Juan
2:15b). Esa es la actitud que un creyente debe tener cuando ora, tal actitud es de
adoración. En Juan 4:24 dice Jesús que debemos adorar al Padre en espíritu y en
verdad; Dice T.W.Hunt: “este concepto es difícil de entender, lo opuesto de adorar en
espíritu y en verdad es cualquier cosa que limita a Dios al tiempo y al espacio según
nuestros sentidos físicos lo entienden.” 1 En oración, tomen tiempo para adorarle y
agradarle.
Cuando se está en oración, se debe estar adorando, con expresiones típicas de un
adorador, internas (del espíritu) y/o externas (del cuerpo) pero con el sentido correcto
que demanda la Palabra... en base a esto quiero compartir con ustedes tres asuntos
que debemos mostrar cuando adoramos a Dios por medio de la oración:
1
Hunt, T.H, “La Doctrina de la Oración. Trad. Miguel A. Mesías. Junta de Escuelas Dominicales de la
Convención Bautista del Sur. 127 Ninth Avenue, North. Nashville, Tennessee 37234. p.49
Cuando me dispongo a hacer Mi Devoción con un Padre tan Especial como
Yahveh, en primer lugar debo…
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Mostrar la Gloria del Padre Celestial 9b.
o Cuando adoramos a Dios en oración y mostramos Su gloria, lo hacemos por
medio de sus atributos, reconociendo Su naturaleza, reconociendo Su identidad:
“Padre Nuestro que estás en los cielos” la oración modelo de Mateo 6:9-13 es
sugestiva, y no exhaustiva, es decir que es sugerente (sugerencia) una
propuesta de Jesús, algo que debe inspirarte para tomarla como un patrón y no
como algo absoluto o rígido.
o La Biblia está llena de adoración, Grandes hombres de Dios al encontrarse con
Él lo primero que apreciaron fue Su Santidad:
§ Moisés: «No te acerques. Quítate el calzado de tus pies, porque el lugar
donde ahora estás es tierra santa.» (Exo. 3:5).
§ Isaías --- un serafín decía al otro serafín: «¡Santo, santo, santo, es el Señor
de los ejércitos! ¡Toda la tierra está llena de su gloria!» (Isa. 6:3).
o Mujeres que al encontrarse con Él y reconocer Su santidad fueron inspiradas
para introducir en adoración preciosas oraciones;
§ Ana: “Nadie es santo como tú, Señor. Fuera de ti, no hay nadie más. No hay
mejor refugio que tú, Dios nuestro.” (1Sam. 2:2).
§ María “Grandes cosas ha hecho en mí el Poderoso; ¡Santo es su nombre!”
(Luc 1:49).
o En la Biblia hay muchas citas donde se manifiestan la grandeza de Dios por
medio de sus atributos, el libro de los Salmos está lleno de ellas, por ejemplo:
§ Majestad y Grandeza (104:1); Esplendor y fuerza (96:6); Su gloria (19:1); el
gozo de Su presencia (84).
§ En el Nuevo Testamento hay preciosas doxologías, que son oraciones que
engrandecen el carácter de Dios. Por ejemplo en Romanos11:33 y 36 “¡Qué
profundas son las riquezas de la sabiduría y del conocimiento de Dios! ¡Cuán
incomprensibles son sus juicios, e inescrutables sus caminos! - Ciertamente,
todas las cosas son de él, y por él, y para él. ¡A él sea la gloria por siempre!
Amén.”
o Y hay mucho más que decir de este primer punto, es extenso todo lo que nos
introduce en la adoración y la alabanza al Señor por medio de la oración. Esto
es adoración y se trata de mostrar la Gloria del Padre Celestial…
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Mostrar la Santidad del Padre 9c.
o La frase “santificado sea tu nombre” (hagiastheto to onoma sou) en Mateo 6:9
significa: «Haz que tu nombre sea santo». Es una rogativa para que Dios haga
algo con relación a su nombre. Es un ruego para que Dios haga que su nombre
sea santificado en nuestros corazones y en los corazones de todas las personas
o ¿Y qué significa santificado? ¿Qué significa cuando se refiere al infinitamente
santo nombre de Dios? Significa que estamos orando para que su nombre sea
grabado en los corazones y mentes y vidas de las personas como la realidad
infinitamente grande y bella y valiosa que es.
o También “santificado sea tu nombre” es una expresión de reverencia que evita
el irrespeto al Señor, lo cual lo ridiculiza o menosprecia.
o Los evangelios, como documentos cualificados, se redactaron en griego; pero
algunas palabras de Jesús permanecieron en arameo: “Amén, así sea (Mt 5,
18)”, “Abba, padre mío querido (Mc 14, 36), “Talitha kum, niña levántate (Mc 5,
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41), “Elí, Elí, lemá sabataní; ¿Dios mío, Dios mío, porqué me has abandonado?
(Mt 27, 46)”, etc.
La palabra aramea “abba” fue, originalmente (II aC.), un término del lenguaje
infantil: significaba “papá” o “papito” “papaíto”. La mejor traducción es “padre mío
querido”. La voz “abba” denota que la relación padre-hijo reposa en la confianza,
el respeto, el cuidado, la responsabilidad, el cariño y el conocimiento: el hijo está
sostenido en las buenas manos del padre, sabe que el padre nunca le
abandonará sino que le cuidará con amor.
Jesús proclama que Dios es nuestro Padre (Mt 5, 45): el “abba” que
especialmente cuida de nosotros. Jesús al enseñarnos el “Padrenuestro” (Mt 6,
9-13), nos invita a dejarnos abrazar por Dios, Y a vivir con alegría el evangelio
para sembrarlo en el corazón del mundo, tan necesitado de gracia y de ternura.
Esto es adoración y se trata de mostrar la santidad del Padre…
Mostrar la Majestad del Padre 10
o Venga tu reino (v. 10a) expresa el deseo del que ora de que la majestad y el
reinado de Dios se concrete.
o El término griego basileía se usa con tres significados:
§ el territorio sobre el cual el rey reina;
§ la dignidad real, su majestad y gloria; y
§ el ejercicio de su poder soberano, o su reinado efectivo. En este contexto, es
mejor entenderlo con el sentido de la tercera acepción. Su reinado llegará a
su culminación gloriosa en la parousía, la Segunda Venida de Cristo, cuando
todas las personas y todas las cosas se someterán, o serán sometidas, a él
“Por lo cual Dios también lo exaltó hasta lo sumo, y le dio un nombre que es
sobre todo nombre, 10 para que en el nombre de Jesús se doble toda rodilla
de los que están en los cielos, y en la tierra, y debajo de la tierra; 11 y toda
lengua confiese que Jesucristo es el Señor, para gloria de Dios el Padre. (Fil.
2:9–11). Pero su reinado llegó en la persona de Cristo y está llegando día a
día, a medida que más y más personas se someten al reinado de Cristo en
sus vidas.
o Sea hecha tu voluntad, como en el cielo, así también en la tierra (v. 10b) expresa
el deseo de la concreción del reinado de Dios en forma absoluta en la tierra,
pues así lo es en el cielo. El verbo significa literalmente “que llegue a ser”.
“Voluntad” significa el resultado del deseo y propósito de Dios, o sea, lo que él
ha deseado. Dios ha revelado su eterno propósito —su voluntad— en la Biblia y
supremamente en la persona de su Hijo Jesucristo.
o El súbdito del reino debe presentarse a su Rey cada día, someterse a su
soberanía y prometerle obediencia en llevar a cabo su santa voluntad. En esta
forma se concreta el reino de Dios entre los hombres.
Conclusión: Esto es adoración, que mostremos la grandeza de la majestad de Dios
cuando oramos y que Dios ejerza su celo por su nombre. Para que sea exaltado.
Que los que están ciegos espiritual y moralmente vean. Que Dios domine la apatía
de Su pueblo y destierre los obstáculos que impiden que le conozcamos, le amemos
y confiemos plenamente en Él.
Estos aspectos grandiosos de Dios son los detalles que nos ayudan durante nuestra
oración, en nuestra devoción, a elevar nuestras vidas a Su presencia al mismo
tiempo que nuestros pies están firmes en la creencia de un Dios vivo e inmanente
que es no es producto de una fantasía, El es Dios.
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