Los desafíos del estudio de la historia

Los desafíos del estudio de la historia
Pensemos juntos
El trabajo de los historiadores
Así como hay personas que se dedican a diversas profesiones y actividades, y eligen ser ingenieros, arquitectos, músicos, pintores, profesores,
granjeros u otras, hay quienes optan
por ser historiadores.
Historiador José Pedro Barrán. Foto de Presidencia de la República.
¿Qué estudian los historiadores?
¿Ser profesor de historia será lo mismo que ser historiador?
¿Cómo piensan ustedes que transcurre la jornada de trabajo de un historiador?
¿Qué habilidades creen que debe tener? ¿Qué debe saber hacer?
¿Piensan que la tarea de los historiadores es sencilla? ¿Piensan que es aburrida? Den razones.
¿Existen las historiadoras? ¿Conocen alguna?
¿Existen los historiadores jóvenes?
Puedes estudiar el tema en las páginas 9 a 13.
Para volver a pensar juntos sobre este tema, página 18.
©Santillana S.A. Prohibida su fotocopia. Ley 15.913
sección i
1
9
1 La historia como vida y como ciencia
Tu historia es lo que has vivido desde que naciste hasta hoy; mañana incluirá el hoy y así sucesivamente. La historia de la humanidad es como la tuya, pero comprende a todos los hombres y mujeres que han habitado el planeta. La ciencia que estudia la historia también se llama historia.
Mucho por conocer
La historia de las sociedades humanas abarca a miles de millones de personas y lo que
ellas han creado, desde la más humilde de las herramientas hasta una nave espacial. Sus creencias, sus obras de arte, las formas de relación entre padres e hijos, los modos de trabajo… y así
seguiríamos sin fin. Al pensar en esta enormidad de temas, es lógico preguntarse cómo es posible
saber todo lo que pasó; en realidad, no hay mente humana capaz de abarcar tanta información.
Pero no todo ha dejado rastros y como no se puede volver al pasado, solo podemos conocer
aquello que ha sobrevivido a través de testimonios escritos, objetos o relatos transmitidos
de una generación a otra.
Por otra parte, los historiadores seleccionan lo que les parece más importante en función
de sus intereses, de las consecuencias que ha tenido o de cuánto aporta al conocimiento del
modo de vida de una sociedad o una época. Esto reduce notablemente lo que se estudia.
La historia estudia la historia
©Santillana S.A. Prohibida su fotocopia. Ley 15.913
Parece un trabalenguas pero no lo es. Es que la palabra historia designa dos temas. Por una
parte, es la propia vida de las sociedades humanas a través del tiempo; por otra, se refiere a
la ciencia que estudia esa realidad.
La historia es una ciencia social, porque le interesa la vida de los individuos organizados en
grupos. Aun si se ocupa de una sola persona, lo hace cuando esta tiene importancia para la sociedad. Lo que diferencia a la historia de otras ciencias sociales, como la sociología, por ejemplo,
es que en ella lo fundamental es el tiempo. A la historia le interesa el momento y las circunstancias en que las cosas ocurren; lo que cambia y lo que permanece, y las razones de esos cambios y permanencias.
A
Los testimonios escritos
son muy importantes
para el trabajo de los historiadores, como fuentes
de información. Las
sociedades utilizaron
diversos materiales sobre
los que escribir, hasta la
utilización del papel.
1. Según el texto, podemos usar la palabra historia para referirnos a dos temas diferentes.
¿Cuáles son?
2. ¿Por qué la historia es una ciencia social? ¿Qué
la distingue del resto de las ciencias sociales?
3. Selecciona cinco acontecimientos de tu pasado
que incluirías si escribieras la historia de tu
vida. Explica por qué los elegiste. Ahora piensa
en cinco acontecimientos que no seleccionaste
y que quedaron fuera de tu relato. ¿Por qué los
desechaste?
Documentos
Sobre la historia. «Esta es la exposición de las investigaciones de
Heródoto de Halicarnaso, para que no se desvanezcan con el tiempo
los hechos de los hombres […] y sobre todo la causa por la que se
hicieron guerra [entre griegos y bárbaros].»
Heródoto, Los nueve libros de la historia, siglo V a. C.
4. En la cita anterior, busca palabras que te den pistas sobre el trabajo de los historiadores.
10
Preguntas y respuestas
hipótesis
la hipótesis es una
suposición que pretende
responder a una
pregunta. Debe articular
argumentos lógicos y
consistentes, y mostrar
pruebas
5. Enumera los
pasos que debe
cumplir el
historiador una
vez que se
plantea una
pregunta sobre
la que desea
investigar.
El trabajo del historiador
Una pregunta sin respuesta puede ser provocada por un hallazgo —como una tablilla escrita en un idioma desconocido—, pero también puede surgir de una nueva manera de analizar
un tema ya estudiado.
Pensemos estas preguntas: ¿los niños participaron en la Revolución oriental?, ¿cuál fue su
papel? Se ha escrito mucho sobre la Revolución oriental, pero quizás poco o nada se investigó
sobre este punto. Este es un buen comienzo para el historiador.
La primera tarea es buscar todo lo que se ha escrito sobre el tema; tal vez no descubra un
documento específico, pero en alguno referido a otros asuntos puede encontrar una pista.
Cuando el investigador ha reunido elementos suficientes, formula una hipótesis, que es un
intento de responder a la pregunta inicial. Como en historia no se pueden hacer experimentos,
debe presentar pruebas que confirmen sus dichos. Las pruebas pueden ser objetos, documentos
escritos o testimonios orales.
Una vez que han culminado estas etapas, el historiador debe expresar por escrito las conclusiones a las que ha llegado. Para ello, redacta un texto en el que narra su versión de lo que
ocurrió, donde describe y explica por qué pasaron las cosas. Muchas veces también cuenta los
pasos que ha seguido en su investigación. La producción escrita de los historiadores se llama historiografía.
Queda la última parte del trabajo: el investigador debe defender su obra ante sus colegas.
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A
El pasado se conoce a través de los vestigios que ha dejado. Por ejemplo: en un documento escrito como el de las Instrucciones del Año xIII, el historiador se plantea preguntas sobre lo
que le interesa saber: ¿cómo fueron recibidas esas ideas en Buenos Aires?, ¿quiénes estaban en
contra?, ¿por qué? Luego busca otros documentos y libros sobre el tema para encontrar las respuestas.
Hasta aquí reconocemos a un estudioso, pero no a un historiador. La investigación histórica
comienza con una o más preguntas que aún no tienen respuestas. Y la ciencia avanza con estas
preguntas, porque impulsan a saber más.
A
Pintura mural etrusca, Italia, siglo VI a. C.
6. Imagina que eres un historiador que investiga sobre el antiguo pueblo etrusco.
¿Qué preguntas te sugiere la imagen?
7. Considera que a partir de esa imagen y otros documentos, formulas la hipótesis
de que la música tenía gran importancia para los etruscos. ¿Qué otras pruebas
deberás encontrar y presentar para confirmarla?
Alegoría de la Historia, detalle de un óleo de Charles
Natoire, del siglo xviii. La Historia aparece como una
mujer, escribiendo bajo la mirada de una diosa romana.
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Las fuentes
En historia se llama fuente a todo aquello que puede brindarnos información sobre lo que
se está investigado. Las fuentes no existen por sí mismas, se convierten en fuentes a partir del
momento en que el historiador las utiliza para responder a sus preguntas.
Las fuentes primarias son testimonios directos y contemporáneos a los hechos. Las secundarias son fruto del trabajo de los historiadores o escritores sobre esos testimonios.
Las fuentes no necesariamente son escritas. También pueden ser relatos orales u objetos
materiales. El historiador debe probar que corresponden al tiempo y a la circunstancia a que se
refieren y que han sido creadas por quien dice ser su autor.
Supongamos que se está trabajando con un papiro egipcio calculado en 5.000 años de antigüedad. Allí se habla de una batalla ganada por la caballería del faraón. El historiador se da cuenta de que el documento es falso, pues en esa época no se usaba el caballo para la guerra en
Egipto. Por otra parte, si en lugar un papiro se tratara de un pergamino, el documento también
sería falso, no por lo que dice sino porque el pergamino comenzó a usarse como soporte de la
escritura miles de años después. De modo que el historiador debe analizar con mucho cuidado
la autenticidad de las fuentes, tanto en su contenido como en su forma.
Documentos
TIPOS DE FUENTES HISTÓRICAS
Otros documentos. «Indudablemente la historia se hace con documentos escritos.
Pero también puede hacerse, debe hacerse, sin documentos escritos si estos no existen.
[…] En una palabra, con todo lo que siendo del hombre depende del hombre, sirve al
hombre, expresa al hombre, significa la presencia, la actividad, los gustos y la forma de
ser del hombre».
L. Febvre, Combates por la historia, 1953.
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8. El historiador Joseph Ki-Zerbo dijo que «cuando en África se muere un viejo, se pierde una biblioteca». ¿Crees que se refería a los documentos escritos, a la tradición oral
o a los restos de cultura material?
Selección de fuentes
históricas.
A
9. Clasifica las
fuentes
siguiendo el
esquema.
PRIMARIAS
NO ESCRITAS
ESCRITAS
SECUNDARIAS
• Monumentos
• Restos humanos
o materiales
• Utensilios
• Edificios
• Testimonios
orales
• Obras literarias
• Tratados
• Censos
• Documentos
• Periódicos
• Inscripciones
• Monedas
• Libros de Historia
• Biografías
• Tratados de arte
• Estudios
arqueológicos
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2 Posibilidades y problemas de la historia
Al estudiar historia pensamos que es posible conocer exactamente lo que pasó, pero esto es
solo una ilusión. El historiador no es un espejo del pasado, sino que lo reconstruye a través de
las preguntas que hace desde el presente.
Hechos e interpretaciones
regularidades
fenómenos que se reiteran
con cierta similitud en
espacios y tiempos distintos
Lo que pasó no puede ser conocido directamente, sino a través de las huellas que ha dejado. Pero incluso las fuentes primarias reflejan solo una parte de lo sucedido. El relato de la
independencia oriental, por ejemplo, resulta muy distinto si fue escrito por un partidario de la
revolución o si lo hizo un defensor del rey de España.
Por eso, si bien la historia aspira a la verdad y debe trabajar para alcanzarla, nunca se
podrá afirmar que la tiene totalmente. Para que así fuera tendría que transmitir todos los pareceres en torno a un hecho, lo que resulta imposible. Y si lo hiciera, la verdad, ¿sería la suma de
opiniones diferentes y aun contradictorias?
Los historiadores pueden discrepar entre sí porque han usado fuentes diversas o porque dan
distintas explicaciones de lo sucedido. Por eso, en historia pueden existir a la vez distintas
interpretaciones de un mismo hecho.
¿Qué ocurre cuando los historiadores no están de acuerdo? Si el investigador trabajó con
fuentes auténticas y no falseó los datos, si chequeó muchas veces las pruebas y si su hipótesis
tiene argumentos lógicos, su trabajo es aceptado. ¿Por qué? Porque más allá de coincidir o no
con sus conclusiones, se reconoce que cumplió con las reglas del oficio del historiador.
La historia tiene reglas de trabajo, como todas las ciencias, pero difiere de las que pueden
formular leyes universales, hacer experimentos y predecir resultados.
Sin embargo, incluso las leyes de una ciencia tan exacta como la física dejan de ser válidas en
ciertas circunstancias. Es el caso, por ejemplo, de la ley de gravedad cuando no se cumple en el
vacío. Pese a ello, no cabe duda de que las ciencias fisicomatemáticas y las naturales son capaces
de producir conocimientos con un alto grado de exactitud. Pero cuando se trata de personas,
no es posible elaborar reglas válidas para todo tiempo y lugar, ya que aun en las mismas
condiciones dos sujetos pueden reaccionar de manera distinta.
De todas las ciencias sociales, la historia es la que más
atiende las particularidades de los individuos y las situaciones. Pensemos el caso de Colón. No era el único que afirmaba
que navegando hacia Occidente se llegaría a las Indias. ¿Por
qué fue él y no otro quien concretó la idea?
En ciertos casos, la historia puede establecer regularidades. Por ejemplo, la hambruna prolongada en una población
producirá estallidos sociales. No se trata de una ley que deba
cumplirse, pero tiene una probabilidad muy alta de hacerlo.
A
1. Explica el significado de alguna de las siguientes afirmaciones: «Lo que pasó no puede ser conocido directamente». «Si bien la historia aspira a la verdad, nunca se
podrá afirmar que la tiene totalmente». «En historia
pueden existir a la vez distintas interpretaciones de un
mismo hecho». «La historia es la ciencia social que más
atiende las particularidades de los individuos». «La historia puede establecer regularidades».
©Santillana S.A. Prohibida su fotocopia. Ley 15.913
La historia como ciencia
Los historiadores destacan lo
que cada situación histórica
tiene de única e irrepetible y
a la vez establecen
regularidades. Todos los
imperios antiguos
construyeron murallas para
facilitar las defensas, pero
cada pueblo encontró
soluciones únicas.
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Los dilemas de la historia
La historia no siempre fue considerada una ciencia. A fines del siglo xix se pensaba que las
disciplinas que no podían formular leyes y experimentar o predecir acontecimientos, no merecían
ser consideradas como ciencias. Poco a poco, la historia fue proponiendo otros criterios para
definir una ciencia. Entre ellos, el de tener su propio campo de estudio y sus reglas para validar
el conocimiento generado.
Hay tensiones que hacen difícil el trabajo del historiador. Por ejemplo, encontrar, en los
hechos históricos, la relación adecuada entre el protagonismo de un individuo destacado y el
de la sociedad. Está claro que sin algunos individuos excepcionales no podrían haberse dado
ciertos acontecimientos, pero tampoco habrían sucedido si estos hombres no hubieran sido
acompañados e impulsados por la gente. ¿Qué hubiera sido de Artigas sin los orientales? ¿De
Cristo o Mahoma sin sus seguidores?
Por otro lado, la historia implica una permanente relación entre el pasado y el presente. A
veces se corre el riesgo de ver el pasado con los ojos de hoy y es difícil ponerse en el lugar de las
personas que vivieron en otro tiempo.
Otra tensión es la que existe entre objetividad y subjetividad. Ser objetivo no quiere decir ser
neutral. Esto es casi imposible, pues al seleccionar los hechos el historiador está marcando sus
intereses y no es lo mismo hablar de un río que de una guerra o una religión. Pero el historiador
no debe contaminar su estudio con sus opiniones personales y debe dejar en claro sus fuentes y
sus argumentos.
©Santillana S.A. Prohibida su fotocopia. Ley 15.913
Pa­ra­leer­un­poco­más
A veces nos cuesta mucho «ponernos en el lugar del otro» cuyas
costumbres y formas de vida son distintas a las nuestras.
Hoy la esclavitud es inaceptable, pero en el pasado fue una práctica
común a muchas culturas.
A
La subjetividad del historiador. Cuando un historiador
investiga y luego escribe sobre lo que investigó, siempre lo
hace desde lo que es y piensa como sujeto, en un tiempo y
un espacio determinado. No es lo mismo ser historiador mujer
que ser hombre, joven que adulto; haber tenido una vida con
privaciones económicas o no, haber nacido en París que en
Montevideo; ser creyente que ateo, principiante que famoso… y así hasta el infinito. La serie de operaciones que
realiza el historiador cuando investiga, pueden parecer «neutras», pero jamás lo son. Buscar, seleccionar, jerarquizar,
relacionar, profundizar, explicar y otras tareas, todo lo hará
desde lo que es como sujeto. Por otra parte, cuando escribe
los resultados de sus investigaciones, no recibimos «lo que
pasó» sino su versión de lo que pasó. Cuanto más serias sean
las pruebas documentales que lo respalden, y cuanto mejor
estructurados estén en su relato los hechos y las explicaciones, más valioso será su trabajo.
2. Imagina que escuchas a alguien afirmar que los libros
de historia cuentan «lo que pasó». ¿Qué le dirías?
3. ¿Cuáles son las tres tensiones que hacen complejo el trabajo del historiador, según destaca
el texto?
4. Lee el poema de Bertolt Brecht en la página 18. ¿A cuál de las tres tensiones mencionadas
hace referencia el autor?
disciplina
conjunto de conocimientos
sujeto a las reglas definidas
por los profesionales que la
practican. Por ejemplo, la historia es una disciplina y los historiadores son los profesionales
que definen sus reglas
tensión
situación provocada por la
acción simultánea de fuerzas
contrarias
objetividad
condición de una persona que
puede analizar un objeto
independientemente de sus
sentimientos, intereses o inclinaciones