VIERNES, 9 de mayo VISITA AL PALACIO REAL Y JARDINES DE ARANJUEZ: En 1808 se produce el Motín de Aranjuez fruto de las intrigas de Fernando VII contra el Ministro de Carlos IV, Manuel Godoy. Godoy propone a Carlos IV que embarque desde Sevilla a América y se ponga a salvo de las tropas francesas que ocupan España y del propio clima revuelto de esta época de descontento. Fernando VII y sus seguidores se oponen a este plan. En la noche del 17 de Marzo de 1808, la multitud, dirigida por partidarios de Fernando, asaltan la Casa de Godoy, que no es encontrado. En la mañana del 19 de Marzo, Godoy es descubierto y trasladado hasta el Cuartel de Guardias de Corps en medio de una lluvia de golpes. Fernando interviene, impide el linchamiento y consigue que su padre abdique en él a medio día de esa misma jornada. Poco después, el propio Fernando tuvo que dejar la corona en manos de José Bonaparte, hermano de Napoleón, conocido por el mal nombre de Pepe Botella. En Septiembre de 1808 se reúne en Aranjuez la Junta Central, organismo que se encargó de encabezar y coordinar las acciones contra Napoleón. LOS JARDINES. Constituyen un inmenso espacio en el que arte y naturaleza se fusionan en un armonioso paisaje. Al sur de Madrid, este paraje, plagado de fuentes, esculturas y árboles centenarios nos transmite el esplendor de la monarquía española. Situada en la fértil vega del río Tajo, y a menos de una hora de Madrid, se encuentra Aranjuez, lugar de descanso y recreo de la monarquía y la Corte española durante los siglos XVII y XVIII, cuyo paisaje cultural ha sido declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. Pasear por esta Real Villa permite contemplar joyas monumentales como el Palacio Real y los jardines circundantes: el jardín del Príncipe, el de la Isla y el del Parterre, que conforman un entramado de ensueño cuya belleza ha sido fuente de inspiración de artistas universales, como el maestro Joaquín Rodrigo, quizás la figura que mejor ha sabido interpretar las emociones que evoca el lugar en su famoso Concierto de Aranjuez. Junto al Palacio, se extiende el Jardín de la Isla, considerado como el más importante y característico de la época de los Austrias (siglo XVI). Ninfas de mármol blanco adornan la escalinata por la que la reina Isabel II acostumbraba a pasear. Un paseo por este jardín invita a perderse por los íntimos rincones ornamentados con esculturas mitológicas que embellecen todavía más esta sugerente isla.